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LA NARRATIVA

ESPAÑOLA POSTERIOR
A 1936
NARRATIVA DESDE LA GUERRA

• La novela de los años 40 (posguerra):


• Dentro de España (novela existencial)
40 • Fuera de España (novelistas en el exilio.

• La novela social de los años 50.


50

• La novela renovadora desde los años 60


60

La novela en democracia a partir de 1975.


70---
CONTEXTO HISTÓRICO

A) PERIODIZACIÓN
⚫ En el plano histórico, se distinguen 2 principales etapas:
- DICTADURA (1939-1975)
- DEMOCRACIA (desde 1975)

⚫ Literariamente, se distinguen 4 periodos:


- La posguerra (años 40)
- La literatura social (años 50)
- Intentos renovadores (años 60-70)
- Literatura en Democracia (desde 1975)
CONTEXTO HISTÓRICO

Se puede hablar de 5 generaciones de


escritores:
⚫ Generación del 36. Autores que se dan a
conocer durante la Guerra Civil o en los
años inmediatamente posteriores.
⚫ Generación del 50.
⚫ Generación del 68.
⚫ Promoción del 80 y del 90. Últimas
incorporaciones a la novela española.
CONTEXTO HISTÓRICO

B) RUPTURA
La Guerra Civil y la dictadura posterior suponen un corte en la
evolución literaria española debido a una serie de razones (se
acaba con la llamada Edad de Plata)
La muerte de algunos (Unamuno, Valle-Inclán).
El exilio obligado de otros autores por su apoyo
a la República (rehumanización y el compromiso social):
• Ramón J. Sender
• Francisco Ayala
• Max Aub
• Rosa Chacel
Las nuevas circunstancias políticas y la censura impiden la novela de
corte social.
Las circunstancias históricas (miseria, desigualdades, falta de libertades,
etc.) hacen que pierda sentido la novela deshumanizada y vanguardista.
La novela española de los años 40 debe comenzar de nuevo.
CONTEXTO HISTÓRICO
C) LITERATURA CONDICIONADA

❑ Durante la Dictadura la producción literaria estuvo


condicionada por factores como:
CENSURA Contenidos no afectos a la ideología oficial no se
permiten
DIRIGISMO CULTURAL Apoyo del Régimen a la literatura de su signo
ideológico
AISLAMIENTO Se desconocen las novedades europeas y mundiales.
Evolución propia
DESCONOCIMIENTO DEL Aquellos escritores e intelectuales de ideología
PASADO distinta al Régimen se excluyen de manuales, de la
enseñanza…
DESPRESTIGIO DE LA Rechazo de toda manifestación artística por parte del
CULTURA Franquismo que creó toda una forma de sentir en la
sociedad. Millán Astray: «Muera la inteligencia»
CONTEXTO HISTÓRICO
LA IDEOLOGÍA DE LOS VENCEDORES EN LA GUERRA CIVIL
El levantamiento militar de julio de 1936 tiene como primer efecto la eliminación de
las organizaciones e ideologías democráticas y obreristas (revolucionarias). En
palabras de Franco al embajador francés Herbette, España necesitaba una
«operación quirúrgica», que limpiase al país de la izquierda revolucionaria. […] En
definitiva, se trataba de poner en marcha una lógica de represión, ya visible en el
discurso de los sectores cedistas radicales (las Juventudes de Acción Popular), en
Falange, en el tradicionalismo que, por supuesto, culmina en los militares alzados en
el verano del 36. Como explicaba una circular a las Comisiones depuradoras del
magisterio a fines de año: «Los individuos que integran esas hordas revolucionarias,
cuyos desmanes tanto espanto causan, son sencillamente los hijos espirituales de
catedráticos y profesores que a través de instituciones como la llamada Libre de
Enseñanza forjaron generaciones incrédulas y anárquicas. Si se quiere hacer
fructífera la sangre de nuestros mártires, es preciso combatir resueltamente el
sistema seguido desde hace más de un siglo de honrar y enaltecer a los inspiradores
del mal, mientras se reservaban los castigos para las masas víctimas de sus
engaños.» Ahora el alcance de la contra-ideología era general, bajo esa consigna de
eliminación del oponente, fueran «hordas marxistas» o demócratas: en definitiva, el
Mal, la Antiespaña.
(A. Elorza y C.López Alonso: Arcaísmo y modernidad)
NOVELA DE LOS AÑOS CUARENTA

⚫ Pobreza literaria muy notable.


⚫ Estéticamente la ruptura es total con las tendencias
previas:
❑ Novela rehumanizadora (novela política de los años de
guerra)
❑ Novela vanguardista.
⚫ Dentro de España va a haber dos posibilidades narrativas:
❑ LA NOVELA DE EVASIÓN
❑ INTENTOS RENOVADORES
⚫ Fuera de España encontramos:
❑ NOVELA DEL EXILIO
DENTRO DE ESPAÑA: LA NOVELA DE EVASIÓN
⚫ Emplea técnicas realistas y ofrece tres tipos de obras
Novelas de los Novelas realistas- Humorismo, fantasía
triunfadores costumbristas poesía
(desmitificadora)
Ideología conservadora Puro estilo Escape de la realidad
decimonónico
Ensalza los valores del Recrean ambientes y Situaciones absurdas,
Régimen paisajes típicos cómicas, diálogos
disparatados
Basada en el glorioso Gonzalo Torrente Ballester: W. Fernández Flórez: Las
pasado imperial Los gozos y las sombras siete columnas.
Rafael García Serrano: La José Mª. Gironella: Los Wenceslao Fernández
fiel infantería cipreses no creen en Dios Flórez: El bosque animado.
Los gozos y las sombra
A Carlos se le había ocurrido que aquella noche Rosario tenía que venir. No
sabía por qué, ni si era un presentimiento. Había preparado una bandeja
con café y galletas y había encendido la chimenea de su dormitorio. Cuando
supuso que Paquito ya no subiría, salió de la torre y fue a ver si los leños se
habían encendido, si la habitación se calentaba. Llevaba en la mano el
quinqué encendido. Tuvo que hacer fuego otra vez, y atizarlo, porque la
leña estaba húmeda. Pasó algún tiempo antes de que la llama fuese
satisfactoria y segura. Le dolían las rodillas y la espalda.
Se incorporó y echó un vistazo. Realmente, la habitación estaba
destartalada, había desconchados por todas partes y agujeros en el piso,
por los que entraba el aire. Añadió una manta a la cama. Al hallar frías las
sábanas, pensó que debiera haber traído unas botellas de agua para
calentarlas, porque Rosario llegaría mojada y tiritando.
Era inexplicable lo de Rosario. Él era pobre, no había más que ver la casa en
que vivía. Rosario se engancharía a su pobreza para siempre. Algún día
tendría que regalarle algo, un traje, un mantón, unos zapatos, y eso costaba
dinero, más de lo que él tenía. En cosas de oro no había ni que pensar.
(Rosario, delicadamente, se había despojado de todos los regalos de
Cayetano.) Las mujeres no son fácilmente comprensibles.
DENTRO DE ESPAÑA: INTENTOS RENOVADORES

⚫ A esa realidad desoladora responde la presencia de personajes


angustiados, marginados y desarraigados: Pascual en “La familia
de Pascual Duarte”, Andrea en “Nada”.
⚫ Ausencia de crítica social. Las novelas de ese periodo reflejan el
malestar social del momento; se convierten, así, en testimonios de
ambientes reales y de situaciones conflictivas, aunque la censura
hizo imposible cualquier tipo de denuncia. Algunos autores
encontraron ciertos procedimientos narrativos, como la parodia, la
ironía (“El golpe de estado de Guadalupe limón”), el humor y la
fantasía (“El bosque animado”) para crear un mundo ajeno a la
deprimente realidad española de la época.
⚫ Esta orientación realista supuso la ruptura con el mundo
convencional y triunfalista de la novela dominante, al servicio de la
exaltación patriótica, y sirvió para denunciar la miseria material y
moral de la inmediata posguerra española.
DENTRO DE ESPAÑA: INTENTOS RENOVADORES

⚫ La mayor fortuna de estos autores fue conseguir trasponer el


inconformismo social que se respiraba en el ambiente al plano
existencial. Su máximo afán se centró en la expresión de los
problemas que afectaban al ser humano, con la intención de
universalizar sus inquietudes.

⚫ A ello responden las digresiones, reflexiones y meditaciones de


los personajes: “Yo tenía (en la vida) un pequeño y ruin papel de
espectadora. Imposible salirme de él. Imposible librarme”, dice la
protagonista de “Nada”.

⚫ Ese enfoque existencial se refleja, además, en la presentación


amarga de la realidad del momento. De ahí que los temas más
frecuentes sean la soledad, la frustración, la muerte…, en un
mundo sórdido, mísero y degradado.
A partir de 1942, algunos autores muestran en sus obras el deseo de
superar la novela de evasión. Hay dos formas de superarla:
TREMENDISMO NOVELA EXISTENCIAL
Acentuación de ambientes sórdidos Tono sombrío y existencial
Inclusión de acciones violentas Expresión del desengaño y la angustia
del ser humano
Expresión dura, desgarrada y abrupta Temas: incertidumbre sobre el destino
humano, falta de comunicación
Argumentos truculentos Ambientadas en la época y personajes
desorientados
C.J. Cela: La familia de Pascual Duarte Miguel Delibes: La sombra del ciprés es
(1942), Pabellón de reposo (1944), alargada (1948)
Nuevas andanzas y desventuras de Carmen Laforet: Nada (1949)
Lazarillo de Tormes (1944)
Nada
Infiltrándome entre aquella gente, empujando a algunos,
logré escurrirme hasta el apartado rincón del cuarto de
baño. Me refugié allí, y cerré la puerta. Maquinalmente, sin
saber cómo, me encontré metida en la sucia bañera, desnuda
como todos los días, dispuesta a recibir el agua de la ducha.
En el espejo me encontré reflejada, miserablemente flaca y
con los dientes chocándome como si me muriera de frío. La
verdad es que era todo tan espantoso que rebasaba mi
capacidad de tragedia. Solté la ducha y creo que me entró
una risa nerviosa al encontrarme así, como si aquél fuese un
día como todos. Un día en que no hubiese sucedido nada.
«Ya lo creo que estoy histérica», pensaba mientras el agua
caía sobre mí azotándome y refrescándome. Las gotas
resbalaban sobre los hombros y el pecho, formaban canales
en el vientre, barrían mis piernas. Arriba estaba Román
tendido, sangriento […]
La sombra del ciprés es alargada
Se iniciaba ya el otoño. Los árboles de la cuidad comenzaban
a acusar la ofensiva de la estación. Por las calles había hojas
amarillas que el viento, a ratos, levantaba del suelo
haciéndolas girar en confusos remolinos. Hicimos el camino
en la última carretela descubierta que quedaba en la ciudad.
Tengo impresos en mi cerebro los menores detalles de
aquella mi primera experiencia viajera. Los cascos caballos
martilleaban las piedras de la calzada rítmicamente, en tanto
las ruedas, rígidas y sin ballestas, hacían saltar y crujir el
coche con gran desesperación de mi tío y extraordinario
regocijo por mi parte. Ignoro las calles que recorrimos hasta
llegar a la placita silente donde habitaba don Mateo. Era una
plaza rectangular con una meseta en el centro, a la que se
llegaba merced al auxilio de tres escalones de piedra. En la
meseta crecían unos árboles gigantescos que Cobijaban bajo
sí una fuente de agua cristalina, llena de rumores y ecos
extraños. Del otro lado de la plaza, cerraba sus confines una
mansión añosa e imponente, donde un extraño relieve,
protegido en una hornacina, hablaba de hombres y tiempos
remotos; hombres y tiempos idos, pero cuya historia
perduraba amarrada a aquellas piedras milenarias.
FUERA DE ESPAÑA: EXILIO

⚫ Después de la Guerra Civil bastantes escritores


continuaron su tarea en el exilio:
✓ Arturo Barea

✓ Rosa Chacel

✓ Max Aub

✓ Francisco Ayala

✓ Ramón J. Sender…

⚫ Otros se dan a conocer por primera vez:


✓ Manuel Andujar

✓ José Ramón Arana…

⚫ En general, son novelas de temas sociales empleando


técnicas realistas junto con innovaciones formales.
FUERA DE ESPAÑA: EXILIO

a) Conocimiento de sus obras lento y tardío, y su incidencia


literaria, prácticamente nula.
b) Singular evolución de cada uno (nuevo país, circunstancias
personales, tendencias literarias)
c) Recreación constante del pasado y la asunción dolorosa del
presente, que se manifiesta en estos temas:
➢ El pasado de España: La trágica experiencia de la guerra,
sus antecedentes y consecuencias.
➢ La añoranza de España.
➢ Recuerdos de infancia y adolescencia.
➢ La vida del exiliado.
➢ La condición humana.
➢ El descubrimiento del mundo americano.
d) De igual forma, se mezclan orientaciones estéticas muy
diversas (el lirismo, la parodia, el compromiso político, el
humor), así como formas tradicionales y vanguardistas.
Aquellos muertos que íbamos
encontrando, después de días bajo el sol
de África, que vuelve la carne en vivero
de gusanos en dos horas; aquellos
cuerpos mutilados, momias cuyos
vientres explotaron. Sin ojos o sin
lengua, sin testículos, violados con
estacas de alambrada, las manos atadas
con sus propios intestinos, sin cabeza,
sin brazos, sin piernas, serrados en dos.
¡Oh, aquellos muertos!

Arturo Barea: La forja de un rebelde (II)


NOVELA SOCIAL DE LOS CINCUENTA

En cuanto al contexto mundial y español, podemos ver


las siguientes características:
⚫ Guerra Fría: España empieza a salir del aislamiento y se
incorpora a algunos organismos internacionales, en la
órbita de EEUU.
⚫ Incipiente desarrollo del turismo y la industria:
recuperación económica y (migraciones de los
campesinos hacia las ciudades)
⚫ Los jóvenes que han vivido la guerra como niños
consideran la guerra y el país desde otra perspectiva y
aparecen críticas respecto al poder y a la división entre
vencedores y vencidos. (círculos obreros y
universitarios).
NOVELA SOCIAL DE LOS CINCUENTA
⚫ Aparecen novelas que se alejan de la evasión de los 40
⚫ En ellas, los novelistas se centran en la sociedad española del
momento con su falta de libertad, sus desigualdades y su
miseria.
⚫ Emplearán la técnica realista.
⚫ El Régimen no censuró estas novelas porque necesitaba el
apoyo internacional.
⚫ Dos obras marcan este cambio:
- La colmena (1950) de C. J. CELA
- La noria (1951) de Luis ROMERO
⚫ Habrá dos tendencias:
➢ Objetivismo.

➢ Realismo crítico.
NOVELA SOCIAL DE LOS CINCUENTA
Objetivismo
Inspirado en movimientos extranjeros (noveau
roman, novela conductista)
Novela como testimonio de la época y como
instrumento de denuncia política y social
Realismo crítico
Narrador objetivo
Evolución del objetivismo
Predominio del diálogo
Intención de crítica política y social
Condensación espacio-temporal mucho más explícita
Protagonistas individuales representativos, Autores comprometidos
también colectivos ideológicamente
Narración lineal Personajes: estereotipos que encarnan a
la clase obrera, al burgués, al campesino
Lenguaje sencillo, coloquial oprimido…
Temas: la sociedad de la época, la denuncia de La piqueta (1959): A. Ferres
injusticias y desigualdades, el mundo rural, la La mina (1960): A. López Salinas
vida urbana, las relaciones laborales, la frívola Central eléctrica (1958): J. López
burguesía… Pacheco
El Jarama (1955): R. Sánchez Ferlosio
Entre visillos (1957). C. Martín Gaite
Inclinó la cabeza contra las manos que había enlazado fuertemente. Lo que siguió lo entendí más
confuso porque se puso a morderse los nudillos de los dedos, nerviosamente. Me contó que había
estado a punto de ir a Suiza con su padre y que la noche anterior se desesperaba asomada al
balcón de su cuarto pensando que eso ya nunca se podría remediar, que las cosas que podrían
haber hecho en aquel viaje ya nunca las haría y la gente que podría haber conocido ya no la
conocería; y que pensando eso no se podía consolar. Que un viaje le puede cambiara uno la vida,
hacérsela ver de otra manera y a ella ese año se la habría cambiado. Le pregunté que por qué no
había ido, pero no me contestó directamente.
- Si usted no vive aquí- dijo-, no puede entender ciertas cosas. Hace poco que está aquí, ¿no?
- Tres días.
- Tres días- repitió-. No puede entender nada. Si le explico por qué no fui a Suiza se reirá, dirá que
qué disparate, que eso no puede ser. Creerá que lo ha entendido, pero no habrá entendido nada.
Solamente uno que vive aquí metido puede llegar a resignarse con las cosas que pasan aquí, y
hasta puede llegar a creer que vive y que respira. ¡Pero yo no! Yo me ahogo, yo no me resigno, yo
me desespero.
Hablaba con rabia, con voz excitada, como si yo la estuviera contradiciendo. Había pasado de un
tono a otro sin transición. Tuve miedo de que nos oyeran los de la habitación, porque se había ido
desplazando hacia el hueco de la puerta y estábamos seguramente a la vista de las personas de
dentro. Incluso parecía que ella se gozase en alzar la voz como si con sus últimas frases quisiera
desafiar a alguna de aquellas personas, o tal vez a todas ellas. Se me ocurrió decirle que
seguramente sacaba las cosas un poco de quicio bajo el peso de su desgracia, pero en seguida sentí
que me había equivocado tratando de consolarla por ese camino. Lo vi en sus ojos casi furiosos.
- Aquí tendría que estar usted hace diez días de la mañana a la noche, aquí en esta casa, a ver si se
ahogaba o no se ahogaba, como yo me ahogo. Oyendo cómo le dicen a uno de la mañana a la noche
pobrecilla, pobre, pobrecilla. Día y noche, sin tregua, día y noche. Y venga suspiros y de compasión
y más compasión, para que no se pueda uno escapar. Y compasión también para el muerto,
compasión a toneladas para todos, todos enterrados, el muerto y los vivos y todos. Usted ¿qué
cree?, ¿que un muerto necesita tanta compasión?, ¿que necesita de los vivos para algo? Por lo
menos a él, que lo dejen en paz, ¿no le parece?
Entre visillos, Carmen Martín Gaite
"- A mi padre y a mí nos pilló la guerra en el
pueblo y en el pueblo nos quedamos.
Cuando subí por primera vez, después, aún
quedaban muertos por estos sitios. Ahí, sin
ir más lejos –señaló a su espalda-, a la
puerta del chozo, había tres que enterré yo.
Parecía extraño que aquellos parajes solos
y mudos pudieran haber visto la guerra de
que el pastor hablaba, el paso y la muerte
de tantos hombres. Aquel silencio amarillo
y susurrante no podía haber sido roto por
una voz, un estruendo, un lamento; parecía
tierra inmutable, indiferente, donde todas
las cosas habrían de desaparecer
irremisiblemente como la piedra, en polvo
calcinado, sin dejar huella en su dormida
nada«
J. Fernández Santos: Los bravos
NOVELA SOCIAL DE LOS CINCUENTA

Novelistas más significativos


⚫ Camilo José Cela, que publica en Buenos Aires en 1951
“La colmena” y que para muchos, es un precedente de la
novela social. En ella con más o menos realismo aparece
reflejada la sociedad del momento (la de la inmediata
posguerra)
⚫ Miguel Delibes con “El camino” (1950) y “Mi idolatrado
hijo Sisí” (1953)
⚫ Gonzalo Torrente Ballester, con su trilogía “Los gozos y
las sombras” (1957 – 1962). Otro autor destacado será
⚫ Luis Romero con “La noria”, ejemplo – igual que “La
colmena” – de novela colectiva, aunque ambientada en
Barcelona.
GENERACIÓN DE MEDIO SIGLO

⚫ Mediados del decenio: serie de escritores con una


intención crítica, van a llevar a sus novelas como
temas fundamentales las injusticias y las
desigualdades sociales (literatura comprometida).
 Ignacio Aldecoa (“El fulgor y la sangre”)
 Jesús Fernández Santos (“Los bravos”)
 Rafael Sánchez Ferlosio (“El Jarama”)
 Carmen Martín Gaite (“Entre visillos”)
Compromiso ético y social del escritor, la idea de
que la literatura, siguiendo a Sartre, debe servir para
transformar el mundo: “El escritor tiene una situación
en su época, cada palabra suya repercute y cada
silencio también”.
GENERACIÓN DE MEDIO SIGLO
Características
La sociedad española se convierte en el tema central: la dura vida de los
campesinos y de los proletarios, la miseria y degradación en los suburbios
urbanos, la banal vida burguesa…; con ánimo de denuncia, haciendo hincapié en
las injusticias.
⚫ El testimonio adquiere prioridad sobre las técnicas formales y el estilo, de
ahí que predominen las obras sencillas y concisas.
➢ narración lineal (aunque con excepciones, como “La
colmena”),
➢ concentración de la acción en un tiempo y un espacio
reducidos
➢ abundancia de descripciones
➢ personaje representativo de un grupo o clase social
➢ rigurosa documentación de los hechos
➢ importancia de los diálogos y del habla popular
⚫ Objetivismo narrativo o behaviorismo con el que el autor pretende quedarse al
margen de los hechos narrados, el narrador desaparece (se limita a unas escuetas
informaciones referentes a lo que una cámara fotográfica podía registrar), no hay
introspección ni pensamiento de los personajes, y todo el relato se basa en el
diálogo de los mismos.
⚫ Las novelas de esta época suelen ser calificadas de pesadas, faltas de
imaginación, pobres estilísticamente y con una gran carga ideológica.
GENERACIÓN DE MEDIO SIGLO

Se distinguen tres tendencias principales:

a) La novela social (realismo social): se b) El neorrealismo: se centra en los


centra en los problemas de los grupos problemas del hombre como ser
sociales. individual (la soledad, la frustración...):
Jesús Fernández Santos (Los bravos, 1954) Ana Maria Matute (Los hijos)
Jesús López Pacheco (Central eléctrica) Ignacio Aldecoa, (El fulgor y la sangre)
Juan García Hortelano (Nuevas amistades, Rafael Sánchez Ferlosio (El Jarama,
Tormenta de verano); 1956)
Armando López Salinas (La mina)

c) Paralelamente a la tendencia de
realismo social, apareció también
una corriente de novela fantástica, d) También se cultivan otros
sin demasiada fortuna en un tendencias: libros de viajes y
ambiente narrativo dominado por los relatos cortos o cuentos (Ignacio
temas existenciales y sociales. Aldecoa).
Sobresale la obra de Álvaro
Cunqueiro.
NOVELA EXPERIMENTAL DE LOS SESENTA

La situación socioeconómica de la
España de los sesenta es:
❑ Notable desarrollo económico.
❑ Emerge lentamente de un
aislamiento internacional.
❑ Auge del turismo favorece el
intercambio con el extranjero y la
renovación paulatina de las
costumbres y de la mentalidad.
NOVELA EXPERIMENTAL DE LOS SESENTA

⚫ Cansancio de la novela social y comprometida que no se


pierde pero entra en decadencia (pobreza en calidad y poco
eficaz).
⚫ Se busca renovar: clara evolución hacia la experimentación.
⚫ Influencias de autores europeos e hispanoamericanos.
⚫ Esta novela dominará el panorama literario hasta el final de
la Dictadura.
⚫ En lo temático, se deja la crítica social y política, para pasar
a temas como el autoconocimiento, la memoria, la
experiencia personal, los estados de conciencia.
⚫ Cambios en lo formal: Las novedades no afectan sólo al
argumento o la estructura, también a la ortografía,
(suprimen los signos de puntuación, o los párrafos, y es
frecuente que se mezclen los géneros). Se persigue la
belleza formal.
PRINCIPALES INNOVACIONES FORMALES

Desaparición de Se difuminan, la acción es mínima, mezcla de fantasía y verosimilitud


argumentos
Personajes poco Sufren cambios, apenas hay secundarios. El protagonista es el centro de la
definidos novela, es algo borroso, no se describe, se conocen sus pensamientos.

Espacio reducido o Marco impreciso y borroso.


inexistente
Notables cambios No hay relato lineal, hay desorden cronológico.
temporales
Novela como El lector debe aprender a transitar por ella. Novelas in media res, in extrema
laberinto textual res o de final abrupto.

Narrador Cambia de la omnisciencia, al objetivismo, de persona. Incluso en 2ª persona.


fluctuante Aparece el autor haciendo a veces digresiones crítico-reflexivas.

Renovación Lenguaje complicado, se hace barroco, cultista. Distintos procedimientos:


lingüística y frases breves, lenguaje coloquial, vulgar, expresiones exuberantes.
estética
Multiplicidad de - De lo tradicional a lo más vanguardista: monólogos, descripciones, flujo de
recursos técnicos conciencia…
- Desaparecen las convenciones gráficas y ortográficas.
- Cambios de tipo de letra.
- Escritura caleidoscópica, contrapunto, perspectivismo e intertextualidad.
NOVELA EXPERIMENTAL DE LOS SESENTA

Autores y obras relevantes:


❖ Luis Martín Santos: Tiempo de silencio
❖ J. Goytisolo: Señas de identidad
❖ M. Delibes: Cinco horas con Mario, Los santos
inocentes
❖ J. Benet: Volverás a región
❖ G. Torrente Ballester: La saga/fuga de JB
Nacer, crecer, bailar una vez en la fiesta del pueblo delante de la procesión del Corpus con el moño alto,
porque era buena bailarina y se decidió, que sí, que a pesar de todo, a pesar de estar determinada al
dolor y a la miseria por su origen, ella debía bailar ante el palio en la procesión del Corpus, en la que el
orgullo de la Custodia a todos los campesinos de la plana toledana salva, hundirse después, hundirse
hacia la tierra, rodear el airoso talle (que la hizo elegir para la fiesta) de tierra asimilada, comida,
enterrarse en grasa pobre, ser redonda, caminar a lo ancho del mundo envuelta en esa redondez que el
destino otorga a las mujeres que como ella han sido entregadas a la miseria que no mata, huir delante
de un ejército llegado de no se sabe dónde, llegar a una ciudad caída de quién sabe qué estrella, rodear
la ciudad, formar parte de la tierra movediza que rodea la ciudad, la protege, la hace, la amamanta, la
destruye, esperar y ahora gemir.
No saber nada. No saber que la tierra es redonda. No saber que el sol está inmóvil, aunque parece que
sube y baja. No saber que son tres Personas distintas. No saber lo que es la luz eléctrica. No saber por
qué caen las piedras hacia la tierra. No saber leer la hora. No saber que el espermatozoide y el óvulo son
dos células individuales que fusionan sus núcleos. No saber nada. No saber alternar con las personas,
no saber decir: "Cuánto bueno por aquí, no saber decir: "Buenos días tenga usted; señor doctor". Y sin
embargo, haberle dicho: "Usted hizo todo lo que pudo".
Y repetir obstinadamente: “Él no fue". No por amor a la verdad, ni por amor a la decencia, ni porque
pensara que al hablar así cumplía con su deber, ni porque creyera que al decirlo se elevaba ligeramente
sobre la costra terráquea en la que seguía estando hundida sin ser capaz nunca de llegar a hablar
propiamente, sino sólo a emitir gemidos y algunas palabras aproximadamente interpretables. “Él no
fue" y ante la insistencia de un hombre, tal como ella nunca había conocido que existieran - dotados de
esa alta prepotencia - aunque bien que lo adivinaba a veces mirando la ciudad de lejos con su nube de
humo encima surgida de ciertos agujeros que hasta tanto más tarde no había de conocer, repetir:
"Cuando él fue, ya estaba muerta
“Él no fue" y seguir gimiendo por la pobre muchacha surgida de su vientre y a través de cuyo joven
vientre abierto ella había visto, con sus propios ojos, írsele la vida preciosista que, como único bien, le
había transmitido. L. Martín Santos: Tiempo de silencio
La saga/fuga de J.B.: Torrente Ballester
Porque hay que ver la gracia que los nativos
tienen para los motes: "Picha-de-oro" al padre de
siete hijas preciosas; "El glorioso movimiento" a
una cachonda grandota que es una gloria mirar
cómo camina, que aquello parece una armonía
sideral; "La Chinquilina", como su nombre indica,
a una tía muy guarra, y "Chongo-güevo-
caldereta", que no se sabe lo que quiere decir,
pero que no carece de intríngulis verbal, a un
mendigo muy famoso que no puede ser más que
eso, "Chongo-güevo-caldereta
Decidí que, en lo sucesivo, escribiría mis versos
en un alfabeto con clave, pero lo pensé mejor y,
como tenía mucho tiempo libre, inventé un
idioma." "¿Y no le da pena que su poesía no la
pueda leer nadie?" "Eso es precisamente lo que
busco." "¿Entonces?" Bastida hizo un esfuerzo
como si fuera a confesar un crimen. "Lo que digo
en mis versos es de mi exclusiva incumbencia.
No le importa a nadie y encuentro ofensivo para
los demás proponerles su lectura
NOVELA ESPAÑOLA DESDE 1962 HASTA 1975
El agotamiento de la fórmula realista unido además a otros factores:
❑ El descubrimiento de la novela hispanoamericana, con tres hitos
fundamentales:
➢ La ciudad y los perros, de Mario Vargas Llosa (1962)
➢ Rayuela, de Julio Cortázar (1963)
➢ Cien años de soledad, de Gabriel García Márquez (1967)(“boom” de la
narrativa hispanoamericana).
❑ La influencia de los grandes innovadores de la novela actual:

➢ Marcel Proust (En busca del tiempo perdido),

➢ Kafka (El proceso, La Metamorfosis),

➢ William Faulkner (Luz de agosto)

➢ James Joyce (Ulises,1922)

❑ La aparición de dos obras influidas directamente por el Ulises de Joyce:

➢ Tiempo de silencio (1962), de Luis Martín Santos

➢ Señas de identidad (1966), de Luis Goytisolo.

Tras ellos, a comienzos de los años setenta, el experimentalismo se pondría


de moda en la narrativa.
NOVELA ESPAÑOLA DESDE 1962 HASTA 1975

Experimentación de nuevas fórmulas narrativas

⚫ Ruptura de la linealidad argumental del relato. Se incorporan


digresiones, secuencias en verso, textos periodísticos, informes…
⚫ Discurso descompuesto. El párrafo deja de ser la unidad textual;
aparecen secuencias de una sola frase y espacios en blanco; se usan
libremente los signos de puntuación; se rompe la sintaxis lógica…
⚫ Tiempo y espacio fragmentados mediante retrospecciones (flash-
back), anticipaciones, simultaneidad o no progresión de elementos
argumentales.
⚫ Polifonía narrativa. Monólogo interior, flujo de conciencia, “tú”
narrativo, mezcla de estilos directo e indirecto, perspectivismo.
⚫ La nueva escritura se dirige a unos lectores cómplices,
participativos.
NOVELA ESPAÑOLA DESDE 1962 HASTA 1975

autores

Nos limitaremos a citar sólo algunos autores y obras:


⚫ Juan Marsé (Últimas tardes con Teresa)

⚫ Juan Benet (Volverás a Región)

⚫ Luis Goytisolo (con su ciclo narrativo de


Antagonía)…
⚫ Cela (Oficio de tinieblas 5, San Camilo 1936 y Cristo
Versus Arizona)
⚫ Delibes (Parábola de un náufrago)

⚫ Torrente Ballester (Off-side)


NOVELA ESPAÑOLA DESDE 1975

Desde la caída de la Dictadura, España vive la siguiente


situación:
❑ El ambiente de libertad en el que comenzó a
desarrollarse la cultura española tras la muerte del
general Franco (20 de noviembre de 1975).
❑ Desaparición de la censura (lo que supuso la publicación
de novelas españolas prohibidas en nuestro país y editadas
en el extranjero, expurgadas o inéditas), la recuperación de
la obra de los escritores exiliados y un mayor conocimiento
de la narrativa de otros países.
❑ Difícil establecer objetivos comunes debido a la
proliferación de obras, la convivencia de diversas
generaciones y tendencias y la falta de perspectiva
histórica.
NOVELA ESPAÑOLA DESDE 1975
⚫ Recuperación de la narratividad,
encabezada por Eduardo Mendoza en La
verdad sobre el caso Savolta (1975).
⚫ La experimentación en la novela entra en
crisis, hay cierto cansancio
⚫ Sin embargo, muchas innovaciones se
asimilan y se seguirán aplicando
⚫ La novela está muy marcada por estos
factores:
1) Conjugar éxito comercial y calidad
literaria: la publicidad y el marketing se
convierten en factores decisivo
2) «Literatura fungible», objeto de
consumo. La cultura como negocio.
3) Diversidad de corrientes, tendencias y
autores.
NOVELA ESPAÑOLA DESDE 1975
Tendencias generales

Metanovela.
Simbiosis entre la Novela histórica. Novelas Lirismo. La novela lírica o
ambientadas en el pasado, desde el poemática centra su interés en un
narración de la
más lejano (El maestro de esgrima, mundo más sugerente que
historia (creación) y de Pérez Reverte) al más próximo: concreto, con personaje-símbolo y
el proceso seguido la Guerra Civil (Octubre, octubre, una mayor tendencia al lenguaje
para la construcción de José Luis Sampedro), los años poético. Es la modalidad preferida
de la misma (la de la dictadura franquista, la por Francisco Umbral (Mortal y
literatura dentro de la transición política… rosa).
literatura).
Enfoque realista.
La novela de intriga. Mezcla Recupera el arte de narrar Novela culturalista. Se
esquemas policíacos con aspectos desde una perspectiva más ocupa de analizar y
políticos e históricos. La serie de amplia y abierta, que explicar diferentes
novelas sobre el detective Carvalho abarca también el mundo aspectos de la cultura
o Galíndez (1990) convierten a onírico, irracional o occidental desde unas
Manuel Vázquez Montalbán en el absurdo… Luis Landero posturas bastante
escritor más representativo; Otros: (Juegos de la edad eruditas. Juan Manuel de
Antonio Muñoz Molina (El tardía). Prada con Las máscaras
invierno en Lisboa y Beltenebros). del héroe.

Otra tendencia en la novela de los autores más jóvenes es la de hacer una novela que trata los
problemas de la juventud urbana con una estética cercana a la contracultura (Historias del
Kronen, de José Ángel Mañas, Ray Loriga con Héroes o Lucía Etxebarría en Sexo, prozac y dudas).
CARACTERÍSTICAS DE LA NOVELA A PARTIR DE 1975
1. Recuperación de la trama argumental
2. Alejamiento progresivo de las innovaciones y experimentos del pasado: narrador
omnisciente, orden cronológico, personajes convencionales, técnicas clásicas…
3. Estética realista: ambientación realista, búsqueda de verosimilitud en la ficción:
NOVELA POSMODERNA.
4. Neorromanticismo: seres solitarios, desolados, viven cuestiones propias del ser
humano (amor, muerte, misterio, inadaptación a la realidad…). No se explica el
mundo, sino que se vive.
5. Aprovechamiento de las innovaciones de los años 60 y 70
6. Variedad temática:
- NOVELA HISTÓRICA (distintos periodos, distintas finalidades: interpretar
personalmente el pasado, aprender de él lecciones para el presente,
recrear ambientes, ejercicios de estilo)
- NOVELA POLICÍACA o de INTRIGA (novelas-juego, ambiente urbano, detectives…)
- NOVELA DE AVENTURAS (espacios abiertos y exóticos, distintas épocas,
peripecias…)
- NOVELA INTIMISTA (problemas personales, existenciales, intimidad desasosegada,
búsqueda de la identidad…)
NOVELA ESPAÑOLA DESDE 1975

Algunas obras y autores destacados


Eduardo Mendoza: La verdad sobre el caso Savolta
Antonio Muñoz Molina: El invierno en Lisboa
Antonio Muñoz Molina: El jinete polaco
Arturo Pérez Reverte: El maestro de esgrima
Luis Landero: Juegos de la edad tardía
Francisco Umbral: Mortal y rosa
Lucía Etxevarría: Beatriz y los cuerpos celestes
Almudena Grandes: Atlas de geografía humana
Manuel Vázquez Montalbán: Pepe Carvalho
Ana María Matute: Olvidado rey Gudú
Javier Cercas: Soldados de Salamina
Javier Marías: Corazón tan blanco
Carlos Ruiz Zafón: La sombra del viento
«A 36.000 kilómetros de la Tierra –leyó ella – se halla una órbita geoestacionaria, fija a la atmósfera porque se
mueve a la misma velocidad que la Tierra: la órbita Cementerio, como se denomina a aquella a la que se
envían los satélites cuando pierden su vida útil. […]» O sea, para entendernos, que los pobres satélites son
como elefantes que van a morir a su necrópolis común. No deja de tener su lado poético, si lo piensas.
Imagínate, Bea: unos cachivaches enormes cuya labor principal era la comunicación, mudos, aislados para
siempre, rodeados de un ejército de cachivaches similares que tampoco podrán comunicarse nunca más.
Alucinante, ¿no?
Piensa en eso ahora, Bea, tantos años después. Hace cuatro años que no ves a Mónica. Piensa en la soledad de
los satélites, la soledad orbital. Abandonados por aquellos a los que una vez sirvieron. Olvidados y fríos.
Rodeados del vacío más yermo y absoluto, en el silencio helado del universo helado, cubiertos de una capa de
escarcha que no brilla, que no tiene siquiera ya luz que reflejar. Inmóviles y dignos en su glacial retiro, satélites
difuntos, cadáveres exánimes de gélida chatarra, antiguallas que fueron monstruos de acero y hierro, que una
vez transmitieron fechas, datos y cifras a los que concedían importancia crucial. Fechas, datos y cifras que
ahora nadie recuerda. Ni la fuerza del hierro escapa al desamparo. Ahora, incomunicados, herrumbrosos
titanes que han perdido su fuerza, condenados a un mutismo eterno y oxidado, jalonan de morralla un sector
desolado. Los cables y las tuercas se acabarán desintegrando, aunque quizá falten siglos para que ocurra eso.
En cualquier caso, piensa, qué poco importa el tiempo en un paisaje ciego, donde cada minuto es exacto al
siguiente, donde a cada segundo sucede otro segundo. Idéntico, inmutable, un segundo apagado para un
tiempo marchito. Órbita cementerio. Soledad orbital.
A veces pienso, Mónica, donde quiera que estés, que a mí me ha pasado lo mismo. Que fui enviada al mundo
con una misión: comunicarme con otros seres, intercambiar datos, transmitir. Y sin embargo, me he quedado
sola, rodeada de otros seres que navegan desorientados a mi alrededor en esta atmósfera enrarecida por la
indiferencia, la insensibilidad o la mera ineptitud, donde nunca espera que la escuchen, y menos aún que la
comprendan. A nuestro alrededor giran universos enteros, estrellas, soles, lunas, galaxias, aerolitos, grandes
constelaciones, nubes de gas y polvo, sistemas planetarios, materia interestelar. Hasta basura espacial. Pero
sobre todo, un silencio insondable que todo lo absorbe. Un vacío enorme y negro, una quietud indescifrable. Y
aunque sé que no debería ser así, el caso es que me siento a millones de años luz de cualquier señal de vida, si
la hay, que se desarrolle a mi alrededor. Siento que navego en la órbita cementerio.
Lucía Etxevarría: Beatriz y los cuerpos celestes
En un piso de la calle 52 Este de Nueva York,
ante los ojos conmovidos de una mujer y un
hombre que oyen tras las ventanas cerradas el
viento del invierno y el rumor como de catarata
de la ciudad a la que asoman muy pocas veces y
encuentran en el baúl de Ramiro Retratista lo
que nunca han buscado, lo que les perteneció
siempre, sin que lo supieran o lo desearan, las
razones más antiguas de su desarraigo y de su
complicidad.
(...)
Ellos me hicieron, me engendraron, me lo
legaron todo, lo que poseían y lo que nunca
tuvieron, las palabras, el miedo, la ternura, los
nombres, el dolor, la forma de mi cara, el color
de mis ojos, la sensación de no haberme ido
nunca de Mágina y de verla perderse muy lejos,
al fondo de la extensión de la noche.
A. Muñoz Molina: El jinete polaco
Mucho más tarde, cuando Jaime Astarloa quiso
reunir los fragmentos dispersos de la tragedia e
intentó recordar cómo había empezado todo, la
primera imagen que le vino a la memoria fue la del
marqués. Y aquella galería abierta sobre los
jardines del Retiro, con los primeros calores del
verano entrando a raudales por las ventanas,
empujados por una luz tan cruda que obligaba a
entornar los ojos cuando hería la guarda bruñida de
los floretes. El marqués no estaba en forma; sus
resoplidos recordaban los de un fuelle roto, y bajo
el peto se veía la camisa empapada en sudor. Sin
duda expiaba así algún exceso nocturno de la
víspera, pero Jaime Astarloa se abstuvo, según su
costumbre, de hacer comentarios inoportunos. La
vida privada de sus clientes no era asunto suyo. Se
limitó a parar en tercia una pésima estocada que
habría hecho ruborizar a un aprendiz, y se tiró
luego a fondo. El flexible acero italiano se curvó al
aplicar un recio botonazo sobre el pecho de su
adversario.
A. Pérez Reverte: El maestro de esgrima
Todos los días salía de casa subiéndose sus imaginarias solapas de
espía, un cigarrillo colgado del labio y la mirada esquinada de
astucia. Deteniéndose en los escaparates y simulando curiosidades
imprevistas, angulando reojos, hurtando el perfil, burlando
persecuciones y salvando emboscadas, vencía sin novedad la
primera etapa del trayecto. A partir de allí, le esperaba otra suerte
de peligros. Si aguardaba la luz verde para cruzar una calle y se
ponía a su altura una mujer con alguna prenda negra, perdía una
baza de semáforo. Si azul, ganaba el derecho a acelerar el paso
durante un minuto. Si alcanzaba a un transeúnte ciego o cojo, no
podía adelantarlo mientras no lo liberase algún hombre con un peso
a la espalda. Quedaba cautivo de una plaza si la estaban regando o
había un niño con un gorro, y no podía franquearla hasta que
cruzase un perro o levantase el vuelo una paloma. Pero si el perro se
paraba a hacer una necesidad, también él debía pararse y contener
la respiración, pues en caso contrario las reglas del juego lo
obligaban a retroceder hasta encontrar una monja o cualquier otra
persona de uniforme. Por momentos la vida le parecía apasionante.

Luis Landero: Juegos de la edad tardía


Los héroes sólo son héroes cuando se mueren o cuando los matan.
Y los héroes de verdad nacen y mueren en la guerra. No hay héroes
vivos, joven. Todos están muertos. Muertos, muertos. (...)
El soldado le está mirando; Sánchez Mazas también, pero sus ojos
deteriorados no entienden lo que ven: bajo el pelo empapado y la
ancha frente y las cejas pobladas de gotas la mirada del soldado no
expresa compasión ni odio, ni siquiera desdén, sino una especie de
secreta o insondable alegría, algo que linda con la crueldad y se
resiste a la razón pero tampoco es instinto, algo que vive en ella con
la misma ciega obstinación con que la sangre persiste en sus
conductos y la tierra en su órbita inamovible y todos los seres en su
terca condición de seres, algo que elude a las palabras como el agua
del arroyo elude a la piedra, porque las palabras sólo están hechas
para decirse a si mismas, para decir lo decible, es decir todo
excepto lo que nos gobierna o hace vivir o concierne o somos o es
este soldado anónimo y derrotado que ahora mira a ese hombre
cuyo cuerpo casi se confunde con la tierra y el agua marrón de la
hoya, y que grita con fuerza al aire sin dejar de mirarlo. «
Javier Cercas: Soldados de Salamina

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