Cuello de botella.

Consideramos que el cuello de botella en la producción de leche larga vida se encuentra en la

etapa correspondiente a los tratamientos térmicos, debido a que en las etapas previas y
posteriores no hay tareas que limiten la producción. Las etapas anteriores son las relacionadas
con la recepción de la leche cruda, su control y acopio en silos, tareas que no limitan la
producción y en las cuales el producto en proceso no pasa largos periodos siendo procesado.
Por otro lado, las etapas posteriores a los tratamientos térmicos se relacionan con el envasado
y preparaciones para su expedición, las cuales son realizadas por maquinas con alta capacidad
de producción y automatización.

En cambio, los procesos térmicos, tienen tiempos más largos de realización (alrededor de 4
horas por tanda de 7,5 millones de litros), son realizados por diversas maquinas que poseen
capacidad limitada de producción, las cuales son muy caras y consumen muchos recursos en su
utilización.

La Serenísima cuenta con maquinarias para tratamiento térmico capaces de procesar 1,875
millones de litros por hora en esta etapa. Esta capacidad instalada puede procesar 45 millones
de litros en un día, pero al trabajarse 2 turnos de 8 horas, la producción por día de la fábrica se
ve limitada a 30 millones de litros por día. Por lo tanto, consideramos que, al ser una etapa
clave en la producción y condicionar al resto de las etapas con su velocidad de producción, los
procesos térmicos forman un cuello de botella en la producción de leche larga vida.