¿PARA QUÉ NOS VESTIMOS?

Por: Profesora Lucía Jiménez

Para responder al interrogante del título, puede que nos hagamos otras preguntas como por
ejemplo ¿lo hacemos para nosotros o para los demás?, ¿nos vestimos según el estado de ánimo o
según el clima de nuestro entorno? Bueno, existen por lo menos tres razones o motivos por los
cuales usamos ropa.

El primer motivo es de carácter biológico, ya que la piel desnuda no puede soportar el clima, sea el
que sea el lugar donde vivamos. El vestido es quizás la primera expresión de diferenciación entre
los de nuestra especie; tan pronto como nos habituamos a la indumentaria, ésta tiende a
especializarse, tendencia que no ha cesado todavía desde que aparecimos como pobladores de este
planeta. Esa necesidad de protegernos ha permitido que usemos unos trajes que nos permitan estar
por tiempos pequeños, sobre la atmosfera del planeta, o incluso ir a Marte.

Existe una segunda razón; nos vestimos porque nos gusta hacerlo así y no de otra forma. ¿Qué es lo
que te gusta ponerte? No se trata de lo que le gusta a tu pareja o a tu familia. Si, nos vestimos
para abrigarnos y protegernos. Pero los complementos, el maquillaje y alguna
pieza de ropa no están ligados a necesidades de abrigo. Hay pueblos que no se
visten pero no hay pueblos que no se adornen. De modo que también nos vestimos
para adornarnos y embellecernos.

Desde la religión , el pudor nos lleva a vestimos para cubrir zonas vinculadas al
placer y la reproducción. Pero también, desde una posición que parece enfrentada a la teoría
del pudor aunque está emparentada con ella, nos vestimos para atraer y para seducir. El
ser humano es un ser social, nos vestimos para agradar, para sentirnos
aceptados y formar parte de una sociedad. Esto sin olvidar que la ropa es un
medio de contar cosas sobre nosotros y aunque ahora la gente se sorprenda de esta
afirmación, nuestros antepasados siempre la habían utilizado como tal. Nos vestimos para mostrarle
al mundo quiénes y cómo somos.

Adiós a tratar de agradar a los hombres con la vestimenta. Si las mujeres se visten para sí mismas
primero, buscan los elogios de sus amigas y compañeras de trabajo ya que los consideran más
sinceros, desinteresados y fundamentados que los de los hombres. Esto lleva a que inviertan cada
vez más en ropa que les sirva para su entorno laboral. Es algo que posiblemente sus parejas no
comprendan. No te vistes para conseguir pareja, te vistes porque te gusta verte así.

Lo anterior nos lleva a la tercera razón de la ropa; la comodidad. Todas tenemos nuestra propia
interpretación de lo que es un look ‘laboral’ o de ‘fiesta’, que resulta de una mezcla de lo que dicta
la sociedad, la moda y lo que a nosotras nos gusta”. Existe gran uniformidad dentro de la gran
variedad de tendencias y estilos. La influencia social que ejercen los medios como la televisión, los
noticieros y sus notas sobre la moda, las bloggers, los youtubers de todo el mundo, redes sociales,
publicaciones con dictados que son casi mandamientos acerca de nuestras elecciones diarias.
Y está bien conocer las tendencias, pero lo principal de vestirte es que la ropa te de comodidad, y
seguridad de quien eres. Recuérdalo, no te vistes para llamar la atención, sino para verte cómo
eres, para sentirte cómo eres.