Está en la página 1de 1

ESJAITA MARIEL – HISTORIA AMERICANA – UNTREF

LA CONQUISTA DE AMÉRICA: el problema del otro - Tzvetan Todorov


Capítulo 2: Conquistar (páginas 56 a 135)

LAS RAZONES DE LA VICTORIA: Un misterio sigue ligado a la conquista; se trata del resultado mismo del combate: ¿por
qué esta victoria fulgurante, cuando la superioridad numérica de los habitantes de América frente a sus adversarios es
tan grande, y cuando están luchando en su propio terreno?
Primera razón: comportamiento ambiguo y vacilante del propio Moctezuma.
En ciertas crónicas se presenta a Moctezuma como un hombre melancólico y resignado, también se afirma que lo
corroe la mala conciencia.
Segunda razón: la explotación que hace Cortés de las distensiones internas entre las diferentes poblaciones que
ocupan la tierra mexicana (divisiones internas entre mexicanos).
El México de aquel entonces es un conglomerado de poblaciones, sometidas por los aztecas, quienes ocupan la cumbre
de la pirámide. Hay muchas semejanzas entre antiguos y nuevos conquistadores.
Tercera razón: superioridad de los españoles en materia de armas y la viruela (traída por ellos mismos) como
elemento devastador del ejército enemigo.
Sin embargo, se le agregan otros posibles factores que parecen haberse percibido menos.
La respuesta de los relatos indios, consistiría en decir que todo ocurrió porque los mayas y los aztecas perdieron el
dominio de la comunicación. Ya no había oradores ni líderes espirituales.

MOCTEZUMA Y LOS SIGNOS: Los indios dedican gran parte de su tiempo y de sus fuerzas a la interpretación de los
mensajes con formas notablemente elaboradas, relacionadas con las diferentes especies de adivinación.
Se le añade un segundo tipo, puntual, que toma la forma de presagio. “creían en mil agüeros y señales”. Y cuando los
signos se han de esperar, van con el adivino profesional. El mundo se plantea como algo sobredeterminado.
Los aztecas perciben la conquista a inscribiéndola en una historia basada en presagios inventados después de los
hechos. Si bien las prácticas verbales son altamente estimadas, tienen una forma particular de practicar la
comunicación, descuidando la dimensión interhumana. Pertenecen a un mundo ritual, en donde la invasión española
crea una situación inédita de improvisación.
Es entonces como la producción simbólica, la expresión de los aztecas y la interpretación de los hechos crea una abismal
diferencia. Los españoles ganan la guerra. Son indiscutiblemente superiores a los indios en la comunicación
interhumana. Pero su victoria es problemática, pues no hay una sola forma de comunicación, una dimensión de la
actividad simbólica. Toda acción tiene su parte de rito y de improvisación, de código y contexto.
El encuentro entre Moctezuma y Cortés de los indios con los españoles, es ante todo un encuentro humano, y no debe
asombrar que ganen los especialistas en comunicación humana.

CORTÉS Y LOS SIGNOS: Lo primero que quiere Cortés no es tomar, sino comprender; lo que más le interesa son los
signos, no sus referentes. Su expedición comienza con una búsqueda de información, no de oro. Con lo cual consigue un
intérprete (quien será el primer personaje esencial). En segundo lugar, aparece en escena la mujer; quien en principio es
vista como un regalo en los primeros encuentros. A posteriori, no se conforma sólo con traducir sino que adopta los
valores de los españoles y contribuye a la realización de sus objetivos (se convierte en el ícono de traición a los valores
autóctonos). Más tarde muchos españoles aprenden el náhuatl, y eso siempre redunda en provecho de Cortés. Y gracias
a este sistema de información perfectamente instalado Cortés llega a enterarse rápidamente y con detalles de la
existencia de desacuerdos entre los indios.
La religión ocupa un lugar importante incluso desde Colón, en donde se impone una religión universal e intolerante.
En cuanto al resto de los mensajes de Hernán cortés, presentan una estrategia perfectamente coherente en
contraposición a Moctezuma. Eso se demuestra en las cartas de relación enviadas al rey en donde su objetivo es
legitimar la conquista (su lenguaje sirve tanto para la integración en el seno de la comunidad, como para manipulación
del otro). Así pues, el conocimiento de la lengua, teórico en este caso, es muestra de una actitud nueva ya no de
veneración sino de análisis y de toma de conciencia de su utilidad práctica. Ayudando así a la toma de un imperio.

También podría gustarte