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FACULTAD DE PSICOLOGÍA
TESIS
QUE PARA OBTENER EL GRADO DE
MAESTRA EN PSICOLOGÍA APLICADA
PRESENTA:
Verónica Miriam Guzmán Sandoval
ASESORES:
M. C. Norma Angélica Moy López
M. C. Jorge Torres Hernández
Ricardo Ramos
Dedico está tesis a mis padres porque sus enseñanzas se ven reflejadas en lo
que ahora soy; a Jorge por su paciencia y amor que me acompañan día a día en las
travesías de la vida.
También dedico este trabajo a los niños que me permitieron conocer sus
sentimientos: Alma, Erik, Lilia, Sandra y Pablo con cariño donde quiera que se
encuentren. En especial a ti Alma que me enseñaste el valor de la fortaleza para
enfrentar la adversidad.
Agradezco a mis asesores Jorge Torres Hernández y Norma Moy López por su
valiosa guía y comprensión, también a la doctora Rosa Martha Meda Lara porque sin
su apoyo no hubiera podido realizarse gran parte de este proyecto. Además
reconozco las facilidades que me otorgó el Hospital Civil “Fray Antonio Alcalde” para
que se llevara acabo la investigación.
INDICE
6. Conclusiones.......................................................................................... 93
7. Propuestas.............................................................................................. 100
Bibliografía.................................................................................................. 101
Figuras
Tablas
1
ABSTRACT
2
CAPÍTULO I
INTRODUCCIÓN
3
1.1 PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA
Una de las cuestiones importantes entonces es saber qué pasa con los niños
que enferman y son hospitalizados, y fue precisamente esta pregunta la que marcó el
camino de la presente investigación. Anteriormente se pensaba que la enfermedad
sólo repercutía en el componente biológico de la persona; con el surgimiento de la
Psiconeuroinmunología –disciplina que estudia la relación entre el sistema
inmunológico sistema nervioso y endocrino- se conoce ahora que la enfermedad
altera el componente biopsicosocial y genera una serie de problemáticas (Moss y
Salomón, citados en Oblitas, 2004). A partir de estos hallazgos diversos
investigadores comenzaron a estudiar el impacto de la enfermedad en los niños.
En este tenor Eth y Pynoos (citados en O’Connor y Schaefer, 1997) refieren que
un niño hospitalizado puede presentar un trauma psíquico en consecuencia del
internamiento, que provoca un trastorno adaptativo. En el que la capacidad de
afrontamiento en los niños se encuentra minimizada o ausente, volviéndolo
4
vulnerable a los estímulos ansiogenos (malestar físico, curaciones dolorosas,
contacto con personas extrañas, por ejemplo).
5
En lo que respecta a nuestro Estado y específicamente en la ciudad de Colima,
se han llevado a cabo programas de corte psicológico para la atención emocional de
niños internado en el área de Pediatría del Hospital Universitario de la Secretaría de
Salud, los cuales arrojaron resultados positivos al mejorar el estado emocional de los
menores. El primer programa que se realizó fue de “cuentos terapéuticos y
actividades lúdicas” para mejorar el estado anímico de los niños hospitalizados, la
muestra estuvo compuesta en aquél entonces por 18 niños en edad escolar, y de
acuerdo a los resultados se logró reducir los efectos traumáticos de la hospitalización
(Guzmán, 2002). Posteriormente se realizó una investigación cuasiexperimental para
comprobar los alcances terapéuticos del cuento en la hospitalización; el grupo control
estuvo compuesto por 15 niños a los que se les impartió un programa de información
sobre habilidades sociales y emocionales; y el grupo experimental estuvo constituido
por 11 niños que participaron en un programa de cuentos terapéuticos, con el cual se
pudo minimizar los efectos negativos de la experiencia hospitalaria y mejorar el
estado anímico de los menores en comparación con el grupo control (Guzmán,
2003). Por último se aplicó un programa de entrenamiento en habilidad psicosociales
para niños hospitalizados y sus padres; fueron 28 personas las que participaron, y se
pudo comprobar que el estado emocional de los participantes mejoró, además de
que los padres refirieron haber aprendido habilidades para afrontar la hospitalización
de sus hijos (Guzmán, 2004). En relación a programas de esta índole no se
encontraron datos de otros estados del país en los que se hubieran implementado
programas de apoyo emocional para niños hospitalizados a pesar de una amplia
búsqueda
6
reestructuración y resignificación de la experiencia hospitalaria para disminuir los
niveles de ansiedad en los niños internados en el Hospital Civil Fray Antonio Alcalde
de Guadalajara. Se eligió esta unidad médica por su accesibilidad geográfica, por
contar con espacios de internamiento especializados para niños, y porque el
promedio de días estancia que tiene dicha área hospitalaria es mayor que la del
Hospital Regional Universitario de Colima, factor decisivo para llevar a cabo el plan
de intervención de manera adecuada.
7
1.2 JUSTIFICACIÓN
8
CAPÍTULO II
MARCO TEÓRICO
9
2.1 INTRODUCCIÓN
En los siguientes apartados se plantea una revisión teórica de las variables que
sustentan la presente investigación. En primera instancia se analizan los
lineamientos que propone la Organización Mundial de la Salud (OMS) a los centros
hospitalarios públicos para reorientarlos hacia un enfoque integral de atención a los
usuarios y se presentan algunas investigaciones que se han llevado a cabo en
diversos países para cumplir con dichos lineamientos Después se hablará del
impacto de la hospitalización en los niños, los estilos de afrontamiento, el estrés y la
psiconeuroinmunología, para ulteriormente profundizar en el tema de la ansiedad.
Así también se hará una aproximación analítica de los principios de la teoría
constructivista para finalizar con un análisis sobre la narrativa.
10
A ese respecto la OMS en 19971, planteó diversas dimensiones que el término
debiera implicar: salud física, salud psicológica, nivel de independencia, relaciones
sociales, entorno, espiritualidad y creencias personales, que se traducen en la
percepción que tienen los seres humanos de que sus necesidades están siendo
satisfechas, o bien que se les está negando oportunidades de alcanzar la felicidad y
la autorrealización.
Para que los servicios sanitarios cumplan con las funciones referidas
anteriormente debe trabajarse con un modelo biopsicosocial –mismo que fue
establecido en 1978 por la American Psychological Association (Suls y Rothman,
2004)-, en el que se contempla a la persona como un ente integrado: biológico,
psicológico y social. Este modelo influyó en los estudios sobre las repercusiones que
tiene la hospitalización en los niños, suscitando una serie de investigaciones.
1
Información recuperada en la red mundial en febrero de 2004 de http://www.who. Int
2
Información recuperada en la red mundial en febrero de 2004 de http://www.who.int/hpr/NPH/docs/hp-glossary-
sp.pdf
11
2.2 INVESTIGACIONES EN HOSPITALES
Con base en estas ideas se llevó a cabo en los hospitales de Castilla y León,
en España, una investigación sobre la calidad de vida de los niños internados. La
muestra estuvo compuesta por 105 niños hospitalizados, con edades comprendidas
entre 6 y 15 años, distribuidos en ocho hospitales de esa comarca, a los que se les
aplicaron entrevistas personales que integraron tres instrumentos utilizados en el
mismo: uno referido a cuestiones generales sobre la hospitalización y el hospital, de
elaboración propia, el cuestionario de percepción subjetiva de la hospitalización
(CPSH); otro de calidad de vida (adaptación y modificación del KINDL); y uno de
salud (traducción y adaptación del SF-36). Los hallazgos encontrados fueron los
siguientes: los niños hospitalizados presentaron una baja calidad de vida; las plantas
(áreas) de Pediatría de los hospitales generales no estaban preparadas para
responder a las necesidades que presentaban los niños hospitalizados; pudieron
percatarse que el estado emocional condiciona su calidad de vida además de que
presentan necesidades de apoyo psicológico, educativo y social.3
3
Tesis Doctoral sobre calidad de vida. Información obtenida en la Red Mundial el 30 de Octubre de 2003:
(http://www.3.usual.es/~inico¢newsletter/nisv6/investigacion15c.htm).
4
Universidad Complutense de Madrid. “La importancia de los juguetes en el hospital. Información obtenida en la
Red Mundial el 31 de Octubre de 2003: (http://www.ucm.es/info/otri/complutecno/fichas/tec_gimupai1.htm).
12
negativos de la hospitalización mediante el juego, ayudando a los niños a aceptar de
forma más positiva esta situación (Costa, s.f.5).
5
s.f. son siglas establecidas por la APA para hacer alusión a que el libro citado no tiene fecha, ver Manual de
estilo de publicaciones de la APA.
13
observó la importancia de trabajar con las emociones de las personas que cuidan del
niño hospitalizado y de la necesidad de un espacio para la expresión de sus
sentimientos (Guzmán, 2004). El trabajo integral que se pueda hacer con los niños
internados impacta en el estado emocional ya que al hablar de sus experiencias
encuentran alternativas para solucionar las problemáticas que presentan, además de
que se fortalecen los vínculos afectivos entre los niños y sus familiares. De allí que
se enfatice la trascendencia de realizar estudios acerca del impacto de la
hospitalización y programas que reviertan sus efectos negativos.
14
MODELO DE RETROALIMENTACIÓN NEGATIVA ENTRE LA
HOSPITALIZACIÓN Y EL AFRONTAMIENTO
Agentes
estresores y Repercutiendo Hospitalización
en la
ansiogenos
A los
Disminuye las
Volviéndole capacidades de
vulnerable afrontamiento
Para poder entender más a fondo el impacto que tienen los eventos que
producen ansiedad en los niños Pynoos (citados en O´Connor, 1997) estudió la
etiología del trauma psíquico, señaló que surge cuando un individuo se expone a un
acontecimiento abrumador y queda desvalido temporalmente, así como incapaz de
utilizar el afrontamiento ordinario y las operaciones defensivas del yo para hacer
frente a un peligro, ansiedad o excitación instintiva que resulten intolerables. Los
orígenes del trauma psíquico en los niños pueden incluir los desastres naturales, las
enfermedades, lesiones, entre otros.
15
Roth y Foa (citados en O´Connor y Schaefer, 1997) confirmaron que los
individuos que experimentan acontecimientos externos que resultan atemorizantes,
desastres naturales, accidentes, etc., son propensos al desarrollo de un síndrome
que comprende pesadillas, distanciamiento emocional, evitación de los pensamientos
o situaciones que recuerden el trauma, excitación elevada, dificultades para dormir,
hipervigilia e irritabilidad. Wolf (1970) por su parte, refiere que algunos niños
hospitalizados que lograron conquistar la independencia para comer o bañarse se
convierten en pacientes difíciles e intratables. En muchas ocasiones, regresan a
etapas de desarrollo ya resueltas y en casos más graves, el niño permanece
desequilibrado días o meses después de la salida del hospital. Costa (s.f.) puntualizó
los efectos que trae consigo la hospitalización y los dividió en cuatro áreas:
16
En la vida cotidiana los niños toleran las demandas ambientales, sin embargo,
cuando son hospitalizados reaccionan a incomodidades adicionales, aún pequeñas,
con estallidos de furia y de mal humor hacia los padres o el personal paramédico. Se
ha observado que no obstante la calidad en la atención médica y asistencial del niño,
así como a la sensibilidad desplegada con él desde un punto de visita emocional, el
niño permanece desequilibrado mientras está en el hospital y puede presentar
además trastornos de comportamiento, de sueño y emocionales después de la salida
del mismo. Entre los síntomas más notorios están las pesadillas recurrentes acerca
del hospital, fobias a las inyecciones y temor por regresar a la escuela.
17
VARIABLES MODULADORAS DE LOS EFECTOS DE LA
HOSPITALIZACIÓN
Enfermedad y
hospitalización
Bienestar
emocional
del niño
Características Relaciones
del niño interpersonales
Figura 2. El modelo muestra las variables que modulan los efectos de la hospitalización en el
bienestar emocional del niño. Las tres variables pueden englobar otros factores. Modelo realizado a
partir de la conjunción de factores que propusieron diferentes autores.
18
salud física y mental. Debido a que existe diversidad en los modelos que definen el
afrontamiento, la clasificación es vasta. La división de los estilos que se propone en
el presente trabajo fue tomada de varios autores entre los que destacan Lazarus
(citado en Nieto, Abad, Esteban y Tejerina, 2004, p. 190) y Costa (s.f., p. 46 y 47).
19
efectividad se comprueba, sin embargo, las situaciones que salen de lo cotidiano,
como la hospitalización traen consigo experiencias adversas que se sitúan fuera del
repertorio de resolución de problemas, dando un índice alto de probabilidad de que
no funcione el afrontamiento, porque la efectividad de éste depende del contexto y
sus demandas; por ello es recomendable que el niño hospitalizado tenga habilidades
para resolver los eventos estresantes, de no ser así, es labor del psicólogo ayudar al
niño a encontrar estrategias que le permitan adaptarse, controlar sus emociones y
enfrentar el estrés hospitalario.
20
En muchas ocasiones el estrés y la ansiedad son términos que se confunden,
por lo que es importante para la presente investigación aclarar ambos términos.
Selye (citado en Nieto, Abad, Esteban y Tejerina, 2004) señala que existe un
conjunto coordinado de respuestas fisiológicas ante un estímulo aversivo, al cual
llamó Síndrome General de Adaptación (SGA), y que existen diferentes etapas por
las que atraviesa una persona en condiciones de estrés, dependiendo del tiempo de
exposición al estresor. (Ver figura 3 página siguiente).
21
SÍNDROME GENERAL DE ADAPTACIÓN DE SELYE
Estresor
A B
Etapa I: Reacción de alarma Etapa II: Adaptación y Resistencia Etapa III: Agotamiento
Estrés Agudo: Estrés Crónico: Estrés Crónico:
A. Fase de lucha o huida. Adaptación del organismo al estresor. Si el estrés continua se produce el
agotamiento de las reservas
B. Fase de contrachoque. Incremento de la resistencia al estímulo nocivo.
adaptativas.
Intento de reajuste homeostático Utilización de los recursos homeostáticos.
Figura 3. Etapas por las cuales atraviesa el organismo dependiendo del tiempo en que se
encuentra presente el estresor, según el Síndrome General de Adaptación de Selye.
Bajo este enfoque que propone Selye, una persona pasa por una etapa de
alarma en la que en un estadio A lucha contra el estresor o huye de él, sin embargo,
en un estadio B, baja la guardia y trata de mantener la homeostasis; si el estímulo
aversivo persiste, la persona puede adaptarse (habituarse) temporalmente a él hasta
que los recursos de afrontamiento disminuyen o ya no son eficaces. De continuar el
estresor, la persona pasa a un agotamiento que debilita al organismo, es allí en la
que la línea delgada que separa al estrés de la depresión puede romperse y originar
un cuatro mixto de ansiedad y depresión, que en párrafos posteriores se mencionará.
Los niños con enfermedades crónicas o con diagnósticos graves que permanecen un
tiempo prolongado en el hospital pueden presentar un estrés crónico que los lleva a
manifestar síntomas de depresión por el consecuente agotamiento fisiológico que
tiene su organismo.
22
Lazarus (citado en Nieto, Abad, Esteban y Tejerina, 2004, p. 180) con su teoría
transaccional o mediación cognitiva contempla al estrés como una respuesta general
del organismo ante demandas internas o externas que en un principio resultan
amenazantes, y que consiste en una movilización de recursos fisiológicos y
psicológicos para poder afrontarlas.
Al principio, el estrés es una respuesta adaptativa que puede ser benéfica para
el organismo porque la persona busca soluciones que le permitan tener bienestar; no
obstante, Lazarus coincide con Selye al aceptar que el exceso cuantitativo o
cualitativo de estrés, consecuencia de la exposición a múltiples o impactantes
situaciones, falta de recursos de afrontamiento apropiados o del agotamiento del
organismo que se encuentra sobrefuncionando para hacer frente a las demandas,
aumentan la vulnerabilidad de la personas para contraer enfermedades, porque el
sistema autónomo se dispara al interrelacionar con el sistema nerviosos y endocrino.
(Ver figura 4 en la próxima página).
23
MODELO PROCESUAL DEL ESTRÉS DE LAZARUS
ESTRESORES
PRIMARIA → SECUNDARIA
ESTRATEGIAS DE Características Recursos de afrontamiento VARIABLES
de la demanda DISPOSICIONALES
AFRONTAMINETO
ORGANIZACIÓN DE LA RESPUESTA
PERCEPCIÓN DE AMENAZA:
RESPUESTA DE ESTRÉS
HIPOTÁLAMO
HIPÓFISIS
Inervación directa de
los órganos diana
SISTEMA CIRCULATORIO
EFECTOS INMEDIATOS
SOBRE ÓRGANOS DIANA
EFECTOS INTERMEDIOS EFENTOS PROLONGADOS
SOBRE ÓRGANOS DIANA SOBRE ÓRGANOS DIANA
Figura 4. Modelo procesual de Lazarus del estrés (tomado de Nieto, Abad, Esteban y Tejerina,
2004). En él se muestran las rutas que se activan al presentarse los estresores y los tipos de
respuesta que desencadena.
24
Como se puede ver en el modelo procesual de Lazarus, en el momento en que
se representa el estresor, la persona hace una evaluación cognitiva del evento, al
percibirlo como amenazante se desencadena una respuesta emocional (ansiedad)
produciendo un estado emocional de miedo o preocupación, al no sentirse capaz de
combatir el estímulo aversivo o adaptarse a él y por ende una respuesta fisiológica
que terminará con la secreción de cortisol, el cual inhibe el funcionamiento del
sistema inmunitario. En conclusión el estrés es una respuesta general del organismo
ante demandas del ambiente y la ansiedad una emoción producto de la evaluación
cognitiva del estresor.
25
Spielberger (2001) dividió a la ansiedad en dos tipos: ansiedad rasgo y
ansiedad estado. La ansiedad rasgo se define como la disposición o característica de
respuesta que posee el niño ante el estímulo ansioso, que depende en gran medida
de las diferencias individuales relativamente estables, y entre los niños es la
correspondencia de los niveles de esta ansiedad con elevaciones en la ansiedad
estado. La ansiedad estado se define como la intensidad o momento emocional
transitorio del organismo infantil como respuesta ante el estímulo ansiógeno que se
caracteriza por presentar sentimientos de tensión, debido a un aumento en la
actividad del sistema nervioso autónomo.
26
con ansiedad experimenta un estado emocional desagradable
cualitativamente semejante a la experiencia de miedo.
• Somático. Son los cambios en el organismo provocados por el sistema
autónomo: sudoración, hiperventilación, hipervigilia, dilatación pupilar,
temblor, palidez facial, incremento en la tensón muscular, etc. También hay
cambios internos como: la aceleración cardíaca, aceleración respiratoria,
sudoración, descenso en la salivación, etc. Todos ellos pueden ser
percibidos por la persona como molestias aumentando el estado subjetivo
de ansiedad.
• Motor-conductual. Son los cambios observables de conducta que
implican variables como expresión facial, movimientos o posturas
corporales, expresiones de agresión o irritabilidad.
27
condicionan por las experiencias previas o la influencia social, pero no
necesariamente para señalar que los niños hospitalizados presentan fobias; aunque
no se puede descartar esta probabilidad cuando la exposición al estresor es
prolongada. (Ver figura 5).
Evaluación de Expectativa
Información Creencias existenciales
sobre la Información socio-verbal acerca de la
contingencia acerca de la contingencia contingencia
Procesos de reevaluación
del EI
Evaluación del EI como
aversivo y doloroso
Experiencia con el EI solo.
Información transmitida
socio/verbalmente acerca
del EI.
Auto observación de
reacciones al EC y el EI. Respuesta
condicionada
28
Cuando el niño se encuentra expuesto un periodo largo al estresor su respuesta
se condiciona, la manera de responder es estereotipada porque percibe una
amenaza, como se aprecia en la figura 5. En el momento que la persona sobre pasa
la etapa II del Síndrome General de Adaptación de Selye (citado en Nieto, Abad,
Esteban y Tejerina, 2004), el organismo se agota junto con las capacidades de
afrontamiento y pueden, aparecer síntomas de depresión que se entremezclan con
los de la ansiedad. La comorbilidad de los trastornos de ansiedad y depresión es
frecuente, sobre todo en la infancia y la adolescencia; específicamente el trastorno
de ansiedad de separación. Los síntomas de ansiedad y depresión se imbrican tanto
que dan origen a un trastorno mixto, compuesto por sintomatología de ambos, sin
embargo, ninguno de ellos predomina claramente como para diagnosticarse por
separado.
Las teorías cognitivas se basan en el principio de que los seres humanos crean
y construyen activamente la realidad personal (Neimeyer, 1996; p. 13), de allí que
29
también les llamen teorías constructivistas. Estas teorías han desarrollado
metodologías innovadoras para adaptarse al estudio de las personas como agentes
activos e interpretadores. Se basan en los siguientes supuestos:
30
respuesta porque aparea una situación nueva con el acervo de conocimientos
adquirido de las experiencias previas; luego entonces, el esquema se amplía para
incorporar el nuevo aprendizaje y emplearse en otra ocasión.
Cada persona puede crear infinidad de esquemas, tantos como sean necesarios
para darle significado a sus experiencias y poderlas integrar en su historia de vida.
Los esquemas presentativos son los que guardan las características estables y
permanentes de los objetos. Engloban los esquemas re-presentativos o conceptos,
así como los sensorio-motores. Los esquemas re-presentativos según Inhelder y
Cellérier (1996, p. 47) “son opero-semióticos porque aplican operaciones a símbolos
o significantes más que a objetos, tienen una función práctica (anticipar, planificar,
reconstruir) y otra teórica (deducir, explicar)”. En sí este tipo de esquemas permite a
la persona definir simbólicamente el mundo y en consecuencia comprenderlo.
31
Algunos de los esquemas serán más relevantes para la persona que otros. Por
ello, determinados esquemas son de carácter familiar. Los esquemas familiares o
conocidos para el niño permiten percibir el mundo que lo rodea. Según Cellérier
(citado en Inhelder y Cellérier, 1996, p. 48) “todo sistema cognitivo tiende a reducir,
asimilar, redescribir lo desconocido y lo ininteligible en términos de esquemas muy
familiares”. Por ejemplo, una palabra desconocida tiene que ser traducida a términos
que la persona conozca y comprenda para poder entender su significado. Así
entonces, los esquemas familiares permiten a la persona solucionar problemas;
aunque algunas veces dificultan su resolución porque no se adecuan a las demandas
del contexto.
Un esquema tiene que ser flexible de tal manera que permita la incorporación
de nuevos aprendizajes. De no haber una reconstrucción (cambio) puede
presentarse una psicopatología, definida como un sistema de construcción que era
impermeable al cambio (Kelly, citado en Fadiman y Fragor, 1998). Un proceso activo
y cotidiano de reconstruir lo vivido que usamos sin darnos cuenta es la narración de
los sucesos, en la que discriminamos y comparamos experiencias para dar
significado y crear maneras de ver el mundo en que vivimos (discriminar lo que es
real).
32
2.5.2 EL LENGUAJE Y LA FORMACIÓN DE SIGNIFICADO
Efran (citado en Neimeyer, 1996; p. 14) advirtió que el significado de todo lo que
vive la persona, incluyendo los sentimientos, para ser transmitido y entendidos por
otros, tiene que acceder a la significación, y la narración es una forma eficaz de
conseguirlo (Ramos, 2001, p. 22).
2.6 NARRATIVA
33
Los seres humanos entonces piensan, perciben, imaginan y actúan según
estructuras narrativas porque narrar es una manera de recapitular la experiencia
pasada o de reconstruir una experiencia presente o futura e implica en la mayoría de
los casos una secuencia temporal, que en líneas sucesivas se enunciará a detalle.
Para Bruner (citado en Ramos, 2001, p. 22) la narrativa es una forma de pensar, bajo
está premisa existen dos modalidades de pensamiento:
34
El pensamiento narrativo, alude a un proceso cognitivo que ocurre todo el
tiempo. La persona necesita incorporar los sucesos nuevos a los esquemas ya
existentes, es decir, a las estructuras genéricas que permiten conceptuar el mundo y
emitir una respuesta. Como se mencionó en líneas anteriores a este proceso Piaget
(citado en Cueli y Reidl, 1972, p. 413) le llamó asimilación. En la incorporación de las
experiencias nuevas a los esquemas que rigen la conducta de la persona se da la
acomodación, proceso en el que se alteran los esquemas para permitir la asimilación
de eventos que no tienen consonancia con los esquemas predeterminados, pero que
no pueden ser ignorados o distorsionados. El proceso de asimilación y acomodación
da origen a un equilibrio, es decir, a la adaptación de la persona a un problema
nuevo como resultante de un cambio de ideas acerca del mundo y de un esquema
más adaptativo.
El niño hospitalizado tiene que adaptarse a las demandas del medio ambiente
que conllevan eventos novedosos para él. El niño en primera instancia emplea sus
estrategias e ideas cotidianas para resolver la problemática que vive, mide el impacto
de ésta en función de su capacidad para resolver la demanda. En el momento que
percibe que no funciona, necesita asimilar lo vivido y cambiar su comprensión del
evento, de tal manera que el suceso nuevo esté en armonía con las creencias
anteriores. Parece una labor fácil, sin embargo, no sólo es un evento novedoso al
que se tiene que enfrentar el niño durante su hospitalización, sino a una infinidad de
demandas -entre mayor sea la duración del internamiento- que le crean ansiedad.
Cuando los esquemas no cambian porque no se puede asimilar lo vivido, puede ser
que interfieran en la adaptación de la persona al medio ambiente.
35
Cabe aclarar que la narración ayuda a encontrar nuevos senderos en la
solución de problemas en el momento de hablar de las experiencias porque es una
práctica de discurso acerca del yo. “El yo no se expresa narrando se construye
narrando, es un yo en el momento que la persona entra en el proceso dialógico con
un tú (alguien que escucha)” (Ramos 2001, p. 40). El autor agrega que los seres
humanos somos lo que decimos de nosotros mismos, lo que no podemos negar de
nosotros y lo que otros digan de uno. No obstante, la estructura del yo no es
vulnerable a la trama conversacional que se presente en cada momento, porque “el
yo tiene una estructura propia y funciona como un sistema autoorganizado que
mantiene su propia coherencia interna” (Balbi, 2004, p. 337).
36
emotivas distinguidas de la experiencia vivida; por ejemplo, miedo y tristeza en
momentos de dificultades (White y Epston, 1993).
Al respecto White y Epston (1993) refiere que la narración tiene una secuencia
lineal porque se entrelazan los sucesos vividos de acuerdo a un tiempo. En el
pensamiento narrativo la temporalidad es una dimensión crítica que permite dar
sentido a la historia de la persona y otorgar credibilidad a lo narrado porque las
experiencias están supeditadas a esta dimensión, luego entonces, la narrativa es
significativa en la medida que describe los rasgos temporales de la experiencia
humana. La persona para detectar un cambio en su entorno necesita tener pruebas
de que su vida progresa; a través de la narrativa encuentra una estrategia para
organizar los eventos por medio de secuencias coherentes, como lo es el pasado,
presente y el futuro.
37
Orden lógico. Una narración debe ser verosímil y tener algún tipo de
convicción. Todo relato tiene lógica de sentido común, incluyendo las narraciones
fantásticas. En la medida que nos adentremos en las narraciones de la persona,
podemos entender el esquema cognitivo que rige su conducta y que refleja los
valores, creencias, etc. que posee. Si una persona inventa situaciones no vividas o
da un giro diferente de lo que realmente ocurrió, no significa que el relato ya no tenga
lógica, al contrario, dentro de lo ilógico del relato existe una lógica, producto de la
matriz narrativa que ordena los hechos vividos.
38
haga algo diferente a través de un proceso (Ramos, 2001, p.74)”. Es precisamente,
en la trama, donde se aplicó la intervención psicológica, para incidir en el
encadenamiento de hechos (reestructuración) y se formará entonces una pendiente
narrativa que sirviera como eje direccional de dicha intervención.
39
MODELO PROCESUAL DE LA NARRATIVA
Hospitalización
Ψ Intervención terapéutica
Trama
(presente)
Resignificación
de la experiencia
(futuro)
Experiencia
traumática
(pasado)
Equilibramiento
Aceptación de lo vivido
• Asimilación
• Acomodación
Figura 6. Explica el curso que sigue la trama del niño hospitalizado, que inicia con las
experiencias traumáticas en el momento de enfermar y que corresponden al pasado para
yuxtaponerse a nuevos estresores a partir de la hospitalización y que configuran la trama en la cual se
da la intervención terapéutica por medio de la narrativa hasta que por sí mismo el encadenamiento de
sucesos conforma una pendiente que lleva una velocidad particular en los diferentes casos y que da
paso a la resignificación de los eventos traumáticos. De esta manera el niño encuentra equilibrio
emocional entre los esquemas antiguos y los nuevos aprendizajes.
40
acceder a nuevos significados de lo vivido y un final abierto más satisfactorio
(Ramos, 2001).
White y Epston (1993, p. 27) sustenta lo anterior al estipular que “para entender
nuestras vidas y expresarnos a nosotros mismos, la experiencia debe narrarse, y es
precisamente el hecho de relatar lo que determina el significado que se atribuirá a la
experiencia”. Luego, entonces, el significado que la persona atribuya a los hechos
determina su comportamiento a futuro.
La narración permite separar al niño del relato saturado que ha estado dando
forma a su vida y a sus relaciones en el hospital. Al hacerlo, recupera la capacidad
de identificar aspectos ignorados pero cruciales en su experiencia, porque puede
mirar las problemáticas desde diferentes ángulos y ver todas las soluciones posibles,
más que cuando se encuentra inmerso en ellas y piensa que el problema es parte de
sí mimo. White y Epston (1993, p. 54) observaron que la persona al emplear la
narración como una forma de externalizar logra:
41
• Tener un diálogo y no monólogo, sobre el problema.
42
sus habilidades, virtudes y todo aquello que lo describa positivamente.
Esta actividad fomenta el rapport con el niño antes de abordar la
experiencia hospitalaria y ayuda a la construcción de la contratrama.
3. Por medio de preguntas reflexivas se invita al pequeño a contar su
experiencia desde cómo fue el proceso de enfermar. La entrevista
empleada tiene como finalidad primordial elicitar el proceso narrativo para
que el niño reestructure y resignifique su experiencia, pero no se emplea
como una técnica de recolección de información.
4. La narrativa tiene entonces, una estructura cronológica: con un inicio, una
trama y un fin. Las preguntas que inducen al niño hospitalizado a la
reflexión, siguen esa misma estructura, pero pueden aparecer
espontáneamente temporalizaciones como la analepsis (salto hacia el
pasado) y la prolepsis (salto hacia el futuro).
5. En el desarrollo de la narrativa el terapeuta funge como un facilitador del
relato. Su función es escuchar detenidamente la narración y hacer
preguntas reflexivas para que el niño vaya reestructurando su experiencia.
El proceso de la terapia narrativa puede ir de lo reflexivo, dejando que el
niño hable libremente de lo vivido, hasta lo directivo, haciendo preguntas
concretas cuando se salga completamente del objetivo de la entrevista.
6. El diálogo que emplea el niño al narrar sus experiencias puede utilizarse
para elaborar metáforas que tengan relación con sus vivencias y ayudar a
construir una historia alternativa.
7. Para que el niño resignifique sus experiencias traumáticas debe crearse
una historia alternativa. Este proceso comienza cuando el niño narra sus
vivencias, se escucha a sí mismo y reflexiona. La historia traumática que
vive el niño hospitalizado se llama trama, y la intención es que el niño
forme una contratrama (historia alternativa) para acceder a la
resignificación.
8. La contratrama debe ser una historia alternativa que contradiga a la trama,
cuyos personajes, circunstancias e intenciones se desarrollen bien y con
convicción como los personajes de la trama (problema).
43
CAPÍTULO III
MÉTODO
44
3.1 INTRODUCCIÓN
45
3.2 OBJETIVO GENERAL
3.3 HIPÓTESIS
46
3.4 DISEÑO DE LA INVESTIGACIÓN
3.5 VARIABLES
47
• Cualitativamente la ansiedad es un estado emocional referido por los niños
mediante el discurso, compuesto por rasgos como: inquietud, nerviosismo,
miedo, preocupación, confusión, angustia y tristeza.
48
3.7 POBLACIÓN
Para el análisis cualitativo de los datos se tomó una muestra focal porque de
acuerdo con Neimeyer (1993, p.173) “permite evaluar un grupo pequeño de carácter
terapéutico, que tiene como objetivo centrar la atención en los procesos de formación
de significado” La muestra focal del estudio estuvo compuesta por cinco de los
quince niños que participaron en la evaluación cuantitativa. Los criterios de inclusión
fueron:
49
3.8 INSTRUMENTOS Y TÉCNICAS CUANTITATIVAS
50
2 y “mucho”, de 3. Los valores de los reactivos negativos son inversamente
proporcionales. La segunda escala mide ansiedad-rasgo y está compuesta de 20
reactivos positivos, los que poseen el mismo valor numérico que los positivos de la
escala de ansiedad estado. El puntaje mínimo alcanzado en cada escala es de 20,
que representa poca ansiedad; y el máximo es de 60, que representa mucha
ansiedad. Entre mayor puntaje se obtenga, mayor ansiedad estado o rasgo existirá.
(Ver anexo 2).
51
1. Vida previa a la hospitalización. Conformada por los datos de identificación, la
relación entre el niño y la familia, el niño en la escuela, las actividades lúdicas
acostumbradas a realizar cotidianamente y el autoconcepto e imagen que
tenía el niño antes de la hospitalización; todo los aspectos positivos que
contribuyeran a la construcción de una contratrama, es decir, una historia
paralela a la trama que tiene un final más satisfactorio.
La segunda guía tuvo el objetivo de enlazar la sesión previa con la que estaba en
curso y explorar a profundidad algunos indicadores de ansiedad:
52
2001). Con base a ello durante el desarrollo de las entrevistas se utilizó un registro
observacional para evaluar el lenguaje no verbal del niño, su estado emocional,
interés, participación y las variables que interfirieron en la intervención, además las
narraciones de los niños fueron grabadas en audio para tener un registro preciso del
discurso y posteriormente realizar el análisis de contenido. (Ver anexo 5).
53
3.9.3.1 MÉTODO INDUCTIVO PARA LA CATEGORIZACIÓN
Dado el carácter histórico del proceso investigado, el análisis operó por ciclos
de acuerdo a los materiales que se fueron recolectando en las entrevistas. Siguiendo
la metodología de Bertaux (citado en Martínez, 1999), se efectuó un primer análisis
del material protocolar de cada integrante del grupo focal, con la siguiente secuencia:
54
1. Determinación de categorías. Las categorías obtenidas en la trama y en la
pendiente narrativa de cada niño, se agruparon en categorías más generales
(primarias, secundarias y terciarias) según la necesidad de discernir
similitudes conceptuales y descubrir patrones.
2. Elaboración de una matriz narrativa de categorías grupales. Se construyó a
través de la codificación y análisis simultáneo de las categorías bajo un
proceso endógeno (Martínez, 1999), que consiste en buscar relaciones en los
procesos en acción conglomerados y sus variables, como se forman en la
realidad.
3. Diagramas de flujo. Sirvieron para mostrar la interrelación dinámica de los
elementos expuestos en la matriz narrativa; y permitió evaluar causalidades y
elevar el grado de abstracción de la información. Se explicaron con ellos, la
construcción del proceso de la trama en la hospitalización; el impacto que tuvo
la intervención terapéutica en la pendiente narrativa; y cómo el proceso de
reestructuración de eventos significantes condujo a la aceptación de la
experiencia traumática.
4. Triangulación y validación cruzada de la información. Consistió en la
confrontación de la matriz de datos y los diagramas de flujo con la perspectiva
teórica propuesta, así como con el material protocolar del grupo focal.
3.10 PROCEDIMIENTO
El tiempo dispuesto para esta fase fue de dos meses. El piloteo del STAIC de
Spielberger, se llevó a cabo en el Hospital Regional Universitario de Colima, en el
que se aplicó un programa de narrativa en el área de Pediatría a niños con estancias
hospitalarias cortas. En razón de ser necesario trabajar con niños que tuvieran mayor
tiempo de internamiento para llevar a cabo adecuadamente el programa de
intervención, se gestionó en el hospital civil “Fray Antonio Alcalde” de Guadalajara,
55
Jalisco, el permiso necesario para su aplicación, ya que por ser una unidad médica
de concentración, tienen los pacientes infantiles una media de internamiento de 6
días.
a) Inicio de la sesión.
1 Identificación de los niños que cumplían con los criterios de inclusión.
2 Presentación del programa a los participantes y obtención de su
consentimiento.
3 Establecimiento del rapport y fomento de un vínculo de familiaridad6
entre la facilitadora, el niño y su acompañante en turno.
4 Entrevista al familiar acerca del proceso mórbido, diagnóstico,
repercusiones físicas y emocionales vividas.
5 Aplicación del STAIC a cada niño.
b) Desarrollo de la sesión.
1. Invitación al niño a hablar de su experiencia desde la forma que él
pudiera hacerlo.
2. Conversación exteriorizadora de habilidades, virtudes y todo aquello
que describiera positivamente al niño.
3. Preguntas reflexivas para elicitar la narrativa (inicio, trama y desenlace).
4. Conducción de la plática para que el niño narrara sus vivencias, se
escuchara a sí mismo y reflexionara.
5. Construcción de metáforas que tuvieran relación con las vivencias del
niño y que ayudaran a construir una historia alternativa.
6
Entiéndase por familiaridad la sensación de confianza y percepción subjetiva de conocer a la persona.
56
6. Conformación de la contratrama para acceder a la resignificación de la
experiencia traumática.
c) Cierre de la sesión
1. Retroalimentación de la intervención.
2. Aplicación de la escala de ansiedad estado del STAIC.
7
Consultar código ético del psicólogo de la Sociedad Mexicana de Psicología.
57
2. Se obtuvo el consentimiento informado de los padres y de los niños sobre
su participación voluntaria, así como de los procedimientos de abordaje y
registro de la información.
3. Para fines de identificar a los participantes de la muestra focal se utilizó su
primer nombre con la autorización de cada uno de ellos.
4. Los menores y sus padres tuvieron derecho de negarse a participar en
alguna o en todas las sesiones de trabajo.
5. La negativa de participación o el abandono de la investigación, no
repercutió en la probidad de la atención a los niños. Todos fueron
atendidos con la misma calidad sin importar si cumplían con los criterios de
inclusión para el estudio.
58
CAPÍTULO IV
RESULTADOS
59
4.1 INTRODUCCIÓN
60
4.2 RESULTADOS CUANTITATIVOS
61
TABLA 1
VALORES OBTENIDOS EN EL STAIC
A partir de los resultados del STAIC de cada niño que se muestran en la tabla 1,
se obtuvo un promedio grupal de la escala de ansiedad rasgo; los niños presentaron
ocasionalmente factores personales que predispusieron a la ansiedad, porque
obtuvieron un valor promedio de 35.5, que de acuerdo a los parámetros de
Spielberger (2001) corresponde a una ansiedad moderada.
62
pudieron percibir algunos cambios en el análisis detallado que se realizó a cada
reactivo de la escala y que se muestran en las tablas 2, 3 y 4 colocadas en párrafos
posteriores.
63
TABLA 2
ESCALA DE ANSIEDAD RASGO
Escala
No. Ítem Casi
A veces Frec.
nunca
% %
%
1 Me preocupa cometer errores 20 (3) 66.7 10) 13.3(2)
2 Siento ganas de llorar 40(6) 50.3 (8) 6.7 (1)
3 Me siento desafortunado 80 (12) 20 (3)
4 Me cuesta tomar una decisión 20 (3) 60 (9) 20 (3)
5 Me cuesta enfrentarme a mis problemas 20 (3) 60 (9) 20 (3)
6 Me preocupo demasiado 40 (6) 46.7 (7) 13.3 (2)
7 Me encuentro molesto 60 (9) 40 (6)
Pensamientos sin importancia me vienen a la
8 cabeza y me molestan
40 (6) 40 (6) 20 (3)
9 Me preocupan las cosas de la escuela 13.3 (2) 66.7 (10) 20 (3)
10 Me cuesta decidirme en lo que tengo que hacer 20 (3) 73.3 (11) 6.7 (1)
11 Noto que mi corazón late más rápido 53.3 (8) 46.7 (7)
12 Aunque no lo digo, tengo miedo 20 (3) 53.3 (8) 26.7 (4)
13 Me preocupo por cosas que puedan ocurrir 6.7 (1) 66.7 (10) 26.7 (4)
14 Me cuesta quedarme dormido por las noches 26.7 (4) 46.7 (7) 26.7 (4)
15 Tengo sensaciones extrañas en el estómago 60 (9) 33.3 (5) 6.7 (1)
16 Me preocupa lo que otros piensen de mi 53.3 (8) 26.7 (4) 20 (3)
Me influyen tanto los problemas que no puedo
17 olvidarlos durante un tiempo
33.3 (5) 46 (6) 26.7 (4)
18 Tomo las cosas demasiado en serio 40 (6) 46.7 (7) 13.3 (2)
19 Encuentro muchas dificultades en mi vida 33.3 (5) 53.3 (8) 13.3 (2)
20 Me siento menos feliz que otros niños 60 (9) 33.3 (5) 6.7 (1)
64
TABLA 3
ESCALA DE ANSIEDAD ESTADO
REACTIVOS NEGATIVOS
65
y mucho” antes de la intervención. Con la narración despareció el miedo en el 80%
de los casos; en el 66.7% el temor y en el 60% la angustia. (Ver tabla 3). La narrativa
llevó a los niños a un estado emocional positivo, cuyos componentes se analizan en
los reactivos positivos de la escala de ansiedad estado; en dicho análisis se
encontraron las siguientes frecuencias.
TABLA 4
ESCALA DE ANSIEDAD ESTADO
REACTIVOS POSITIVOS
Nota: Los datos en “negritas” indican los reactivos en los que se encontraron diferencias
significativas
66
En la tabla anterior se puede apreciar un cambio cognitivo en la percepción
de bienestar porque el 53.3% de los niños refirieron que se “sentían bien en
alguna medida” después del programa, comparado con un 73.3% que dijo
“sentirse nada bien” antes del programa de narrativa. Además el 40% de los
niños se sintió calmado después de narrar su experiencia hospitalaria,
llevándolos a un estado de relajación profundo en el 46. 7% de los casos, en
comparación al nerviosismo que tenían antes del programa de narrativa. (Ver
tabla 4).
67
TABLA 5
CATEGORÍAS DE LA MATRÍZ NARRATIVA
Evaluación
Equilibramiento y
C3 Estado físico Estresores Estado emocional Afrontamiento cognitiva y Resignificación
acomodación
emocional
Nota: la matriz narrativa del grupo focal conglomera en un listado las categorías primarias,
secundarias y terciarias (C3) obtenidas a través del método inductivo para la categorización. Después
de segmentar, codificar, agrupar las propiedades descriptivas de los fragmentos discursivos de los
niños para formar conglomerados de unidades analíticas, es como se llegó a las categorías terciarias.
68
En la tabla 5 se muestra el conglomerado de categorías primarias,
secundarias y terciarias que conforman la matriz narrativa de las categorías grupales
del grupo focal completo. En el listado horizontal están las categorías terciarias (C3)
que representan el mayor grado de abstracción de la narrativa, y en un listado
vertical, las categorías primarias y secundarias que le dan origen. La tabla muestra
también, de manera particular, los cambios que sufrieron los procesos categoriales
en la pendiente narrativa y que conforman el espacio semántico, es decir el tipo de
lenguaje con el que el niño dio significado a su experiencia.
69
su ansiedad de separación y dirigir la reestructuración de los eventos hacia una
aceptación de lo vivido, mediante la resignificación de la experiencia traumática y
poder aprender formas heurísticas de resolver sus problemáticas. La focalización de
aspectos positivos de lo acontecido contribuyó a la consolidación de un estado
anímico positivo.
HOSPITALIZACIÓN
(INICIO)
Estado
físico
depau-
perado
Afronta-
Procedi- Limitación Informa- Conforma- miento
mientos en la ción ción. centrado
clínicos movilidad deficiente inapropiada en la
dolorosos del hospital emoción
Alteración
mixta de
ansiedad-
depresión
Trastorno
adaptativo
(CIE 10)
Figura 7. El Diagrama de flujo del proceso de la trama presenta las repercusiones que tienen los
estresores en el estado físico y emocional de los niños. Este modelo fue realizado a partir de los
resultados obtenidos de la investigación.
70
La figura 7 muestra cómo se construyó el proceso de la trama en la
hospitalización, a partir de un estado físico depauperado que presentaban los niños
en el primer contacto. Además muestra el dolor, la pérdida del apetito y el sueño, así
como las condiciones traumáticas en las que se encontraban, debido a maniobras
clínicas invasivas que mermaron su salud, al provocar sufrimiento y malestar físico.
La hospitalización, como factor central trajo consigo nuevos retos que afrontar,
como se puede ver en el diagrama de flujo que se explica. Los procedimientos
clínicos dolorosos, fueron referidos por los niños como el estresor más impactante,
porque las cirugías, las inyecciones, las curaciones y maniobras múltiples, en este
orden, les produjeron ansiedad y miedo. Las limitaciones en la movilidad motivadas
por el confinamiento en las camas, la pérdida de independencia, el aislamiento y la
falta de espacios recreativos en el área de hospitalización, constituyeron la segunda
causa de estrés. En este tenor, el siguiente estresor tiene relación con la
conformación inapropiada del hospital, ya que el mobiliario para entretenimiento es
insuficiente, los niños sentían miedo a la oscuridad por las noches y a que “algo
extraño” saliera de las paredes; los alimentos que suministraba el hospital fueron
percibidos como inapetecibles, la decoración como monótona y el trato por parte de
algunos médicos como despersonalizado. La relación médico-paciente, en algunos
casos se vio afectada por este último factor y por la comunicación deficiente, en
razón del lenguaje técnico que solían emplear algunos médicos, que resultaba
ininteligible para los niños hospitalizados y que les provocó angustia e incertidumbre
al no saber qué les iba a pasar.
71
de incapacidad para resolver problemas alteró su cognición. El empleo del
afrontamiento centrado en la emoción con estrategias de evitación-escape y
distanciamiento emocional no resultó ser el más efectivo en el contexto hospitalario;
el niño al percibirlo confirmó las potencialidades del estresor y su incapacidad para
afrontarlo, por consiguiente el trastorno adaptativo se mantenía.
72
DIAGRAMA DE FLUJO DE LA INTERVENCIÓN EN
LA PENDIENTE NARRATIVA
Estado Resigni-
C3 emocional
Afrontamiento Evaluación cognitiva y emocional
ficación
INTERVENCIÓN
TERAPÉUTICA
(INICIO)
IDENTIFICACIÓN DE
ANSIEDAD DE
Centrado SEPARACIÓN
en la
familia
REESTRUCTURA-
CIÓN DE EVENTOS
Cognitivo
(Adquirido) IDENTIFICACIÓN
DE ASIMILACIÓN DE
SENTIMIENTOS EXPERIENCIAS
Y TRAUMÁTICAS
Mejora PENSAMIENTOS
emocional VIVIDOS
(Durante)
Estabilidad
emocional FOCALIZACIÓN DE
ASPECTOS
Estado POSITIVOS DE LA
final HOSPITALIZACIÓN
73
Con el objetivo particular de analizar el impacto que tuvo la intervención
terapéutica en la pendiente narrativa, la figura 8 muestra cómo dicha intervención
permitió en los procesos de evaluación cognitiva y emocional la identificación de la
ansiedad de separación ya que el niño fue capaz de hacer conciente sus
sentimientos de soledad, reconoció sus deseos de llorar y manifestó abiertamente su
añoranza por volver a casa y su rechazo a la hospitalización. El afrontamiento
centrado en la familia, como un elemento preconcebido del niño y manifestado por
palabras de aliento y el acompañamiento constante, se unieron a la intervención
terapéutica permitiendo la reestructuración de eventos.
74
DIAGRAMA DE FLUJO DE LA RESIGNIFICACIÓN DE
LA EXPERIENCIA HOSPITALARIA
Evaluación Equilibra-
Estado Afronta-
C3 Estado físico
emocional miento
cognitiva y Resignificación miento y
emocional acomodación
Reestructuración
Reestructura-
de eventos
ción de
(Inicio)
eventos
Identificación
de
sentimientos y Significación
pensamientos de lo vivido
vividos
Asimilación • Cambio de
de estados
experiencias emocionales
traumáticas negativos por
positivos.
Acomodación • Conocimiento
del plan de vida de estrategias
para afrontar el
estrés.
• Autocontrol
Focalización
de
de aspectos pensamientos y
positivos de la emociones.
hospitalización
• Modificación
de hábitos.
Afronta- • Adherencia
Nuevos terapéutica.
miento aprendizajes
cognitivo • Fortalecimien
(adquirido) to de vínculos
familiares.
• Solaz y
Estabilidad
esparcimiento.
emocional
final
Mejoría
del
estado
físico
75
reestructuración de los eventos que hace el niño, lo conduce a la identificación de
sus sentimientos y pensamientos vividos. Se construye entonces un proceso
dialéctico, es decir lógico, entre la resignificación de la experiencia y la valoración
cognitiva y emocional.
Una vez que el niño logró acomodar su plan de vida, pudo entonces focalizar los
aspectos positivos de su hospitalización; derivado del proceso anterior el niño
consiguió nuevos aprendizajes y puso en práctica un afrontamiento cognitivo
(adquirido). Estos elementos actuaron de manera bidireccional, es decir mutuamente
influenciados, lo que permitió el equilibramiento, la acomodación de la experiencia, y
una consecuente estabilidad emocional final que redundó en una mejora del estado
físico.
76
5. ANÁLISIS DE RESULTADOS
Para analizar los resultados se hizo una división de los datos obtenidos
cuantitativamente en el STAIC y de los obtenidos a nivel cualitativo del análisis de
contenido.
77
Debido a que no se encontraron datos significativos en los valores grupales de
las escalas se realizó un análisis de cada reactivo, en el que sí pudieron encontrarse
resultados relevantes para la evaluación cuantitativa de la prueba. A continuación se
desarrollan los datos encontrados.
78
sentían bien después del programa de intervención. Los niños dijo sentirse calmado
al narrar sus experiencias hospitalarias, lo que los llevó a una relajación profundo
(Ver tabla 4). Al ir desapareciendo los elementos de la percepción de malestar, los
niños fueron capaces de modificar algunos aspectos de su estado emocional para
encontrar mayor tranquilidad y relajación a través de lo narrado. Se considera por
último que las pruebas de esta índole arrojan sólo datos numéricos y no permiten
profundizar en un análisis fino de los procesos fenomenológicos que se presentan.
79
Mostraron por ello un pensamiento de carácter más simbólico, característico del
subperiodo A, lo que provocó que en un principio los niños se comportaran
egocéntricos en la compresión de sus experiencias hospitalarias, porque poseen una
incapacidad para la explicación causal de lo vivido y para una justificación lógica de
los hechos (Piaget, citado en Delval, 2001). Al respecto el participante 5 8mencionó
(ver anexo 6):
“Cuando me trajeron al hospital yo pensé que estaba soñando. Abrí los ojos y supuse
que era un sueño y los volví a cerrar. Pero después de unas horas que me desperté, me di
cuenta que sí era real”.
Sin embargo, la aplicación del pensamiento narrativo en los niños ayudó a situar
las experiencias bajo un orden temporal y recobrar la lógica de los eventos. Porque
el pensamiento de carácter narrativo busca verdades contingentes y conexiones
particulares de los hechos basándose en una lógica comprensiva (Bruner, citado en
Ramos, 2001) que le permite a la mente del niño hacer asequible lo que siente.
8
Para poner las citas textuales de los niños se empleó únicamente el nombre propio, con autorización de ellos,
los apellidos fueron omitidos como un principio de confidencialidad.
80
dentro del hospital un sin número de factores que afectan la tranquilidad del individuo
hospitalizado. Para los niños que participaron en la investigación, los tratamientos
dolorosos se convirtieron en una de las principales fuentes de estrés hospitalario,
porque después de un cierto tiempo de exposición sus respuestas se condicionaron
negativamente, hasta convertirse en eventos fóbicos en algunos casos; un ejemplo
de ello se encuentra en un fragmento de diálogo que se tuvo con una niña:
El siguiente estresor de mayor impacto para los niños fueron las limitaciones
en la movilidad. La postración, el aislamiento y la falta de espacios recreativos dentro
del hospital, repercuten directamente en la percepción de bienestar al sentir los niños
una pérdida de independencia, enfado, ansiedad y miedo. De manera indirecta estos
factores agravan el malestar físico, que de por sí se encuentra agudizado por la
enfermedad. En una entrevista con una de las niñas participantes refirió lo siguiente:
81
el ambiente hospitalario como monótono, rutinario e intimidante al tener pasillos
grandes y camas incómodas, además de que las áreas no cuentan con la decoración
adecuada. Así mismo, se sintieron saturados de imágenes monocromáticas (¡el
inacabable blanco!), de olores desagradables, que tienen relación con la comida,
materiales de curación o las medicinas. En resumidas cuentas, el hospital tiene una
connotación de “enfermedad”. Al preguntar a un niño acerca de su experiencia en el
sanatorio respondió lo siguiente:
82
Invariablemente los estresores, producto de la hospitalización, se encuentran
presenten durante todo el internamiento de los niños. Los estresores merman sus
capacidades de afrontamiento, volviéndolos vulnerables y provocando un círculo
vicioso entre el estado físico y las emociones. Todos los niños evaluados
presentaron una sintomatología mixta de ansiedad y depresión, tipología
contemplada en la CIE 10 como Trastorno Adaptativo (F43.2). Este trastorno se
acompaña de alteraciones emocionales subjetivas, aunque en el caso de los niños
hospitalizados también existieron las objetivas, producto de tratamientos dolorosos y
malestar físico, mismas que interfirieron en el proceso de adaptación a un nuevo
acontecimiento estresante. Todo ello altera la trama social del niño y de su familia
porque la vulnerabilidad dificulta alcanzar un estado de bienestar.
83
durante todo el internamiento. Los niños utilizaron el sueño como un recurso para
escapar de la realidad, y por ende de los eventos estresantes. En otras ocasiones
trataron de “no pensar” en el problema. Este tipo de estrategias no funcionó para
hacer frente a los eventos traumáticos. Su frustración por no poder evadir los
estresores, maximizó la ansiedad de separación que padecían desde su
internamiento, provocándoles sentimientos de soledad, deseos de llorar, añoranza de
su casa y rechazo al hospital. Una de las niñas evaluadas mencionaba:
84
La percepción de la enfermedad influye en los estilos de afrontamiento que la
persona pone en marcha. Al respecto, los niños que tuvieron una experiencia previa
en la hospitalización se adaptaron mejor a las contingencias, porque pensaban que
el hospital era el único lugar donde podían aliviarse. La siguiente frase que
puntualizó uno de los niños entrevistados sustenta lo mencionado: “no es lo mismo
cuando uno es principiante a cuando ya estuviste aquí”. El niño al que se alude tenía
una hospitalización previa cuando llegó al hospital, lo cual le proporcionó creencias
positivas acerca de la importancia del trabajo de los médicos y enfermeras en su
recuperación; también un afrontamiento cognitivo porque empleó aprendizajes
previos y los puso en práctica para enfrentar las experiencias hospitalarias, así como
hacer el rescate de la parte positiva de las experiencias difíciles en el hospital: -“Todo
un mal trae un bien”, –dijo Erik en algún momento-.
85
En algunos casos muy graves como el de la participante 1 (ver anexo 6),
después de verse muy incapacitada, en la cuarta sesión empleó el afrontamiento
cognitivo permitiéndole controlar su dolor, disminuyéndolo paulatinamente hasta que
desapareció; no obstante, al presentarse otro estresor que le generaba tristeza
(comida nauseabunda) y le impedía ingerir alimentos, volvió a emplear las
estrategias ya conocidas de afrontamiento centrado en la emoción (evitación y
escape) funcionándole temporalmente. Lo que propone Inhelder y Cellérier (1996) es
que la persona vuelve a formas antiguas de conducirse ante una demanda, porque
encuentra en los esquemas familiares una forma de comprender en términos
conocidos un nuevo evento, aunque no en todos los casos funcionan estos tipos de
esquemas mentales. Sin embargo, la misma participante pudo resignificar su
experiencia porque le restó carga emocional negativa a la narración del accidente
que le destrozó la pierna y los genitales; recordó detalles de lo ocurrido y se
mostraba tranquila al momento de hablar, además de que logró identificar los
motivos de por qué no quería hablar con las personas en el hospital.
86
no verbales de lástima o repulsión, aspectos que impactan fuertemente en la
percepción de sí mismo, como se aprecia en la participante 1.
La evaluación cognitiva que se hizo en la primera sesión por parte del grupo
fue sólo en el 50 % de los casos, por lo que la reestructuración de la experiencia fue
mínima. Se observó que algunos niños bajo el cuadro sintomático del trastorno
adaptativo, se les dificultó empatizar con la facilitadora y confiar en ella para la
narración de su experiencia. Además evadían hablar de los eventos traumáticos,
producto de la estrategia de distanciamiento emocional que emplearon para afrontar
el estrés.
Hacía la tercera sesión los niños presentaron una mejoría en el estado físico.
Al disminuir el dolor, apareció el apetito y pudieron dormir mejor, como se puede
apreciar en la evolución que tuvieron las categorías primarias y secundarias
correspondientes al estado físico en la matriz narrativa (tabla 5). La evolución de la
enfermedad debido al tratamiento médico influyó directamente en el estado
emocional de los niños, por lo que se restablecieron afectivamente. Además de que
el proceso de intervención contribuyó a la reestructuración paulatina de lo vivido y a
un fortalecimiento de los vínculos afectivos entre los familiares y los niños. Todo en
87
conjunto ayudó a recuperar la tranquilidad, la alegría y a sentirse relajados. El
impacto de la intervención en este sentido, se evaluó en función del cambio de un
estado emocional negativo a uno positivo. Alma dice al respecto:
88
se dio a pesar de que los estresores estuvieron presentes en todo momento de la
hospitalización. En el fragmento siguiente puede apreciarse lo anterior.
Como señala Ramos (2001) el niño puede hacer un salto hacia atrás
(analepsis) para explicarse a sí mismo lo que está viviendo; y una prolepsis, en el
momento que resignifica la experiencia vivida y planea a futuro. Por ello, el impacto
positivo de la narrativa se debió, entre otras cosas, a que los niños aprendieron
nuevas formas de afrontamiento cognitivo, la modificación de hábitos de higiene y
sueño. Los vínculos afectivos con los padres fueron fortalecidos porque los
participantes reconocieron la importancia de sus consejos, aspecto que contribuyó a
la recuperación, por la cercanía familiar, la ayuda y la motivación. Los niños en el
momento que resignificaron sus experiencias vividas acomodaron y asimilaron todos
los sucesos estresantes en sus estructuras mentales produciendo aprendizajes; que
fueron desde los autocuidados, solidaridad con las personas enfermas,
89
autoconocimiento y aceptación de sí mismos (ver figura 9). Muestra de esto es el
siguiente diálogo con Erik.
90
Al final, los efectos terapéuticos de la narrativa se presentaron paulatinamente
porque permitieron al niño tener un final más satisfactorio y aprender de lo vivido. La
narrativa tuvo un fuerte impacto en el estado emocional de los niños pero los
estresores de la hospitalización actuaron con una fuerza inversamente proporcional a
los efectos de ésta. Cabe aclarar que los estresores forman parte de la trama del
niño, que junto con el estado emocional ejercen una presión negativa, intensa y
constante en las emociones del niño hospitalizado. La narrativa en cambio, ejerce
una fuerza inversa pero positiva, proporcional a la de los estresores porque actúa en
la trama, conformando una pendiente narrativa que pronostica el final de la historia.
De allí la importancia de realizar programas de atención emocional permanente en
los hospitales. La figura 10 muestra la interrelación de dichos elementos que se
obtuvieron a partir de la matriz narrativa de los niños.
Efectos de la Efectos de la
Hospitalización Terapia narrativa
- +
Impacta Impacta
Modulados por
• Personalidad.
• Estilos de afrontamiento.
• Relaciones interpersonales.
Figura 10. Muestra los factores que interactúan en el niño durante su hospitalización, y los
elementos moduladores. Este modelo fue realizado a partir de los resultados de la investigación.
91
La hipótesis de la investigación se cumplió, los alcances terapéuticos de la
terapia narrativa se comprobaron en la medida que los niños fueron capaces de
reestructurar sus experiencias, darles un nuevo significado, aceptarse a sí mismo y
reorganizar su vida. Entonces, el cambio de los niños hospitalizados se dio a nivel
cognitivo y emocional, cumpliéndose lo estipulado en la teoría, que señala que al
momento de narrar la experiencia hospitalaria hay orden, lógica y se encuentran
soluciones creativas a las problemáticas que tiene la persona (White y Epston, 1993).
Bajo esta premisa acceder a un relato alternativo con un final más satisfactorio en la
que los eventos estresores y traumáticos como curaciones dolorosas, aplicación de
inyecciones, expectación por no saber lo que va a pasar, monotonía y encierro
prolongado pueden ser resignificados y adquirir un valor positivo para el niño, lo cual
provoca que los niveles de ansiedad disminuyan.
92
6. CONCLUSIONES
93
La primera sesión con cada uno de los participantes en la investigación se
vivió así: un estado emocional negativo en los niños, producto del sufrimiento físico;
poca o nula narración de lo vivido y una pobre evaluación cognitiva de las
experiencias hospitalarias, por lo que el proceso de resignificación, de la experiencia
traumática que comprende la identificación de afrontamientos, la resignificación de la
experiencia y el impacto de la intervención se vieron postergados y a expensas de
las contingencias del internamiento.
Sin embargo, una vez que se pudo comenzar a trabajar con ellos, los niños
hospitalizados emplearon un tipo de afrontamiento emocional con estrategias de
evitación-escape y distanciamiento producto de un esquema de procedimientos
preconcebido, que en su momento no funcionó suficientemente para dar solución a
las problemáticas planteadas por la hospitalización, aunque bajo la perspectiva de
Inhelder y Cellérier (1996) los caminos heurísticos del error suelen llevar a los niños
a una búsqueda de mejores estrategias de afrontamiento, como de hecho ocurrió en
estos niños.
Así también el tener un deseo fuerte de contactar con la familia y estar en casa
fue un factor que les permitió a los niños afrontar los eventos estresantes en el
hospital, ya que representó una proyección a futuro de algo deseable. Sin embargo,
los avatares emocionales que se presentan durante la hospitalización son poderosos,
tanto que el niño hospitalizado tiene oscilaciones frecuentes entre el optimismo y la
desesperanza.
94
La población de niños con la que se trabajó, empleó de inicio estrategias de
afrontamiento emocional ineficientes, con ello no quiere decir que el afrontamiento
centrado en la emoción no sirva. Como señala Lazarus (citado en Nieto, Abad,
Esteban y Tejerina, 2004) el éxito del afrontamiento depende del contexto, y en el
hospital tratar de huir o evitar las curaciones para no sentir dolor, no funciona. El
empleo de un afrontamiento centrado en la emoción se relaciona con la cantidad e
impacto negativo de los estresores en el hospital, al propiciar manifestaciones de
ansiedad, que al final influye en el deseo de escape o huida de la situación
abrumadora para que se acabe el sufrimiento: -“esa comida ¡no me gusta! ¡Me siento
sola y quiero ir a casa!
Sin duda que la edad del niño también influyó en el estilo de afrontamiento,
porque los niños de mayor edad comprenden más las situaciones. Éste puede ser un
tema de indagación a desarrollarse y podría investigarse la correlación entre el estilo
de afrontamiento centrado en el problema, la escolaridad, la edad y el impacto de los
estresores en el niño.
Como puede verse existen muchos factores que impactan al niño hospitalizado
y que son derivados de su enfermedad, así que las enfermedades en las que se
compromete la apariencia física del niño impactan poderosamente en su autoestima,
produciendo sentimientos depresivos o de tristeza. La autoimagen que tiene el niño
hospitalizado está influenciada por la percepción que el niño tiene de sí mismo y la
que tiene los demás de él. Los padres muchas veces sin darse cuenta emiten
95
mensajes negativos al niño. En ese caso es recomendable llevar a cabo programas
con los padres para capacitarlos acerca de la atención que deben dar al niño dentro
del hospital, así como sensibilizar al personal médico y paramédico sobre la
importancia de controlar las emociones en el momento que se trabaje con niños en
los que su apariencia física se vea comprometida por la enfermedad o cirugías. Así
es que la espontaneidad y tranquilidad con la que se trate al niño influye
considerablemente en el rapport que se logre con él. El profesional de la psicología,
a pesar de las condiciones graves en las que se pueda encontrar el niño, debe actuar
verbal y no verbalmente sereno y sin hacer ningún gesto de desaprobación.
La entrevista con niños hospitalizados suele tener una línea muy delgada que
separa el éxito del fracaso en los intentos de abordaje terapéutico. Dicho éxito en el
proceso de entrevista depende de la calidad del rapport que se pueda establecer con
el niño, y de las preguntas acertadas y oportunas para desencadenar la narrativa de
experiencias vividas en el hospital. En la presente investigación, temas delicados o
aversivos, como las secuelas de accidentes que comprometían la autoimagen o la
autoestima, eran evadidos por los niños, pero si se hacían preguntas adecuadas, con
un rapport consolidado, los niños podían hablar del tema sin ningún problema.
96
reconstrucción de lo vivido, se puede saltar de un tema a otro pero con una pregunta
de enlace entre el pasado y el presente, para permitirle al niño construir la trama con
un proceso natural de analépsis y prolépsis; es decir, que el niño pueda acceder a
sus recuerdos para proyectarlos a ese futuro deseable al final de su internamiento.
En consecuencia el entrevistador tiene que ser psicólogo y tener habilidades para la
entrevista clínica y terapéuticas; ser habilidoso también en fomentar rapport con los
niños, saber escucharlos; ser sensible ante las vivencias del niño (empatía) y
controlar sus emociones para no perder la secuencia de la entrevista y el rol que
tiene; ser imaginativo para identificar y comprender las metáforas que emplean los
niños al hablar de su experiencia y emplearlas como temas centrales a desarrollar en
el proceso de narración; aguzar los sentidos para comprender las expresiones
verbales y no verbales que emplea el niño al momento de narrar; conocer técnicas
lúdicas para incentivar al niño hablar de su experiencia, cuando sea necesario; e
improvisar para poder salir avante ante variables que pueden interferir en la
entrevista. Cabe aclarar que la adquisición de todas estas habilidades requiere de
experiencia y una base conceptual técnico-metodológica sólida, pero sobre todo,
requiere de un fidedigno amor a los niños.
97
Se realizó el modelo interaccional de la narrativa para explicar las relaciones
entre las variables que conforman la historia de los niños hospitalizados. Este modelo
se obtuvo de los datos de la investigación y se modificó a partir del análisis profundo
de la matriz narrativa de los niños. (Ver figura 11).
Ψ Intervención
Hospitalización terapéutica
Impacto de la
Trama Evaluación cognitiva y
emocional.
intervención
(presente) Afrontamiento
Estado físico.
Estresores.
Estado emocional
Resignificación
de la experiencia
(futuro)
Experiencia
traumática
(pasado)
Equilibramiento
Aceptación de lo vivido • Asimilación
• Acomodación
Figura 11. Explica el proceso narrativo que vivió el niño para resignificar, acomodar y equilibrar
las experiencias traumáticas. Este modelo fue realizado a partir de los resultados obtenidos de la
investigación.
A fin de cuentas el niño necesita de una atención emocional que le permita salir
de una trama carga de experiencias traumáticas, sentimientos de muerte,
desesperanza y una lucha constante por salvarse, para acceder a una contratrama
donde el final sea más satisfactorio en que las situaciones difíciles se acomoden y
98
equilibren en los esquemas mentales para aprender de lo vivido y redefinir sus
planes de vida. No basta, con decorar la sala de pediatría o darles juguetes a los
niños, eso ayuda, pero la intervención tiene que ser en un nivel más profundo. Como
en la narrativa, porque permitió un cambio en los procesos afectivos a partir de la
reestructuración de la relación dialéctica entre experiencia emocional y
autorreferencia narrativa de los niños (Balbi, 2004, p.337).
99
7. PROPUESTAS
100
BIBLIOGRAFÍA
101
Delval, J. (2001). Descubrir el pensamiento de los niños. Introducción a la práctica
del método clínico. España: Paidós. pp. 52-57, 224-234.
Freeman, J., Epston, D. y Lobovits, D. (2001). Terapia narrativa para niños. España:
Paidós.
102
Nieto, J., Abad, M., Esteban, M. y Tejerina M. (2004). Psicología para las ciencias de
la salud. España: McGraw Hill Interamericana.
103
Rosenzweig, M. y Leiman, A. (1992). Psicología Fisiológica. México: McGraw Hill.
Wolf, S. (1970). Trastornos psíquicos del niño: causas y tratamientos. México: Siglo
Veintiuno editores.
104
ANEXOS
105
ANEXO 1
ENTREVISTA CON LOS PADRES
Nombre del niño________________________________________________________
N° de expediente__________ Edad_____ Escolaridad___________ Fecha_________
N° de Hospitalizaciones en el año pasado____________________________________
Motivos_______________________________________________________________
Fecha de hospitalización actual____________________ Días de estancia__________
Diagnóstico_________________________Fecha posible de alta__________________
Tratamiento___________________________________________________________
Nombre del padre, madre o tutor___________________________________________
Dirección________________________________________Teléfono_______________
Antes de la hospitalización
Durante la hospitalización
106
ANEXO 2
ESCALA DE ANSIEDAD ESTADO – RASGO (STAIC)
De Spielberger
NOMBRE ________________________________________________________
EDAD_________ SEXO__________ SESIÓN______ FECHA_____________
DIAGNÓSTICO____________
DESCRIPTIVOS DE ANSIEDAD
ESTADO STAIC Pre Post
1) Me siento Calmado
2) Me encuentro Inquieto
3) Me siento nervioso
4) Me encuentro descansado
5) Tengo Miedo
6) Estoy Relajado
7) Estoy Preocupado
8) Me encuentro Satisfecho
9) Me siento Feliz
10) Me siento Seguro
11) Me encuentro Bien
12) Me siento Molesto
13) Me siento Agradablemente
14) Me encuentro Atemorizado
15) Me encuentro Confundido
16) Me siento Animado
17) Me siento Angustiado
18) Me encuentro Alegre
19) Me encuentro contrariado
20) Me siento Triste
107
ESCALA DE ANSIEDAD RASGO
Casi
DESCRIPTIVOS DE ANSIEDAD RASGO STAIC A veces Frecuentemente
Nunca
1) Me preocupa cometer Errores
2) Siento ganas de Llorar
3) Me siento Desafortunado
4) Me cuesta tomar una Decisión
5) Me cuesta enfrentarme a mis Problemas
6) Me Preocupo demasiado
7) Me encuentro Molesto
8) Pensamientos sin importancia me viene a la
cabeza y me molestan
9) Me preocupan las cosas de la escuela
10) Me cuesta decidirme en lo que tengo que hacer
11) Noto que mi corazón late más rápido
12) Aunque no lo digo, tengo miedo
13) Me preocupo por Cosas que puedan ocurrir
14) Me cuesta quedarme dormido por las noche
15) Tengo sensaciones extrañas en el estómago
16) Me preocupa lo que otros Piensen de mí
17) Me influyen tanto los problemas que no puedo
Olvidarlos durante un tiempo
18) Tomo las cosas demasiado en serio
19) Encuentro muchas dificultades en mi vida
20) Me siento menos feliz que los demás niños
108
ANEXO 3
GUÍA DE ENTREVISTA 1
PARA LA NARRACIÓN DE LA EXPERIENCIA HOSPITALARIA
a) Circunstancias de salud
• Describe lo que te sucedió cuando enfermaste
• ¿Cómo empezó el problema?
• ¿Qué sentiste en el cuerpo cuando enfermaste?
• ¿Sentiste algún malestar físico?
• ¿Qué pensaste en ese momento?
• ¿Lloraste cuando te sientes mal?
• ¿Quiénes estaban a tu lado cuando sucedió?
• ¿Qué hubieses querido que pasara cuando enfermaste?
2. Experiencia hospitalaria
b) Búsqueda de estrategias
d) Resignificación de la experiencia
109
ANEXO 4
GUÍA DE ENTREVISTA 2
PARA EL SEGUIMIENTO DE LA INTERVENCIÓN CON NIÑOS
HOSPITALIZADOS.
110
ANEXO 5
PLANTILLA DE REGISTRO OBSERVACIONAL
INDICADORES VALORACIONES
1. Participantes 1. Alegre
a) Estado
2. Triste
emocional
3. Indiferente
4. Enojado
5.
Preocupado
6.Tranquilo
7. Otro
a)
2. Participación 1. Nula = 0%
2. Reducido = 10%
al 40%
3. Moderado = 45%
al 60%
4. Suficiente= 65%
al 100%
4. Variables Variables Inicio de la sesión Desarrollo de la sesión Cierre de la sesión
extrañas que
interfieren en la 1. Llanto de
sesión los niños
2. Entrada y
salida del
personal
paramédico
3. Entrada de
familiares
4. Aplicación
de
medicamento
s
5. Otros
(especifique)
111
ANEXO 6
CONGLOMERADO DE CATEGORÍAS POR SESIÓN
PARTICIPANTE 1: ALMA
PRIMERA ENTREVISTA
Personalidad previa:
• Proactiva
• Juguetona.
• Platicadora.
• Acomedida.
Estado emocional.
Abatimiento.
• Cabizbaja.
• Mirada hacia el piso.
• Ojos tristes.
• No habló.
• Casi no hablaba con nadie.
Estado físico.
• Sufrimiento físico.
• Desnutrida.
• Pierna infectada en condiciones deplorables.
• Fijador de metal en la pierna con piorrea.
• Cuerpo famélico y decadente.
SEGUNDA ENTREVISTA
Estado emocional.
Abatimiento.
• Ojos se notan tristes nuevamente.
• Mira fijamente a la nada.
• Casi no quiere hablar con migo.
Estresores.
Procedimientos quirúrgicos dolorosos.
• Cirugías invasivas.
• Múltiples cirugías.
112
Referencias negativas de otras personas.
• Miradas de lástima y repulsa.
• Manifestaciones verbales de desagrado.
Impacto de la intervención.
Alcances positivos e inmediatos de las actividades.
• Sonrió durante la realización de actividades.
• Dialogó un poco durante las actividades.
TERCERA ENTREVISTA
Estado emocional.
Abatimiento.
• Mirada baja.
• Tarda en responder.
• Ojos tristes.
• Casi no quiere hablar.
Sentimiento de frustración.
• Se desesperaba.
• Sentirse mal de salud.
Apoyo familiar.
• Emoción y gusto cuando la visitaban.
CUARTA ENTREVISTA
Estado emocional.
Mejoría en el estado emocional.
• Sonrisa en el rostro.
• Sus ojos se iluminaron.
• Mejor semblante.
• Conversa más.
Afrontamiento.
Deseos positivos.
• Fuerte deseo de ponerse bien.
• Deseos de poder ir a casa.
113
• Deseo fervoroso de regresar con la familia.
Impacto de la intervención.
Alcances positivos e inmediatos de las actividades.
• Entusiasmo al realizar actividades de pintura.
• Disfrutó de recordar y dibujar su casa.
QUINTA ENTREVISTA
Estado emocional.
Alegría.
• Sonrisa en los labios y brillo en sus ojos.
• Sentada en la cama.
• Por fin la veo peinada.
Estado físico.
Mejora del estado físico.
• Pudo dormir bien.
• Apetito.
Estresores.
• Encierro prolongado.
• Maniobras invasivas.
Impacto de la hospitalización.
Impacto a mediano plazo de la intervención.
• Al verme se sonrió más.
• Dejó entrever entusiasmo en su recibimiento.
• Con energía y ganas de trabajar conmigo.
114
SEXTA ENTREVISTA (4 días de no contactar con ella)
Estado emocional.
Apatía.
• cabeza agachada.
• Mirando pérdida.
Malestar.
• Dolor de cabeza.
Agotamiento físico.
• Bosteza.
• Cara agachada.
• Enfado.
• Cansancio.
Afrontamiento.
Afrontamiento conductual.
• Actividades de esparcimiento.
• Contacto con otro niño.
Resignificación de la experiencia.
Retomar vida cotidiana.
• Jugar.
• Cuidarse.
SÉPTIMA ENTREVISTA
Estado emocional.
Mejoría en el estado emocional.
• Come todo.
• No siente dolor.
115
Estado físico.
Restablecimiento físico.
• Dormir bien.
• Mejoría en su pierna.
Estresores.
Percepción negativa de los demás acerca de su físico.
• Referencias negativas de las personas que la rodean.
• Mofa de las condiciones de su pierna.
• Pensamientos negativos sobre su recuperación.
Incertidumbre.
• No saber como regresar a su pueblo.
Afrontamiento.
Apoyo de los padres.
• Cercanía.
• Aplicación de medicamentos para el dolor.
• Interés en su estado físico.
• Motivación.
• Preocupación.
• Apoyo para atenuar el enfado hospitalario.
Resignificación de la experiencia.
Plan de rehabilitación de su pierna.
• Caminar.
116
• Seguimiento de hábitos de higiene.
Impacto de la intervención.
Fortalecimiento del trato calido en los niños.
• Apoyo positivos del personal paramédico.
• Aplicación de medicamentos que redujeron el dolor.
OCTAVA ENTREVISTA
Estado emocional.
Estabilidad emocional.
• Deseos de ir a casa.
• Recuperación anímica.
Estado físico.
Estado físico favorable.
117
• Duerme bien.
• Come bien.
Resignificación.
Acepta la dificultad de estar hospitalizada
• Identifica la experiencia como difícil.
• Incomodidad por estar acostada.
• La mejor vivencia es la noticia de la salida del hospital.
118
PARTICIPANTE 2: SANDRA
PRIMERA ENTREVISTA
Estado emocional.
Enojo.
• Facie tensa.
• Irritada.
• Áspera.
• Indiferente a mi presencia.
Estado físico.
Condiciones físicas traumáticas.
• Varillas sujetadoras encajadas en la rodilla.
• Pierna colgada sostenida por sujetadores.
Malestar físico.
• Dolor fuerte y punzante en la pierna.
Afrontamiento.
Afrontamiento fallido.
• Tratar de dormir.
• Búsqueda de apoyo en el personal paramédico para mitigar su dolor.
Impacto de la intervención.
• Habla un poco sobre su experiencia traumática.
SEGUNDA ENTREVISTA
Estado emocional.
Expresión no verbal de dolor.
• Rostro más duró.
• Ceño fruncido.
119
• Gesto de sufrimiento.
Estado físico.
Habitus exterior negativo.
• Desaliño.
Sufrimiento físico.
• Sentimientos de malestar.
• Dolor fuerte en la rodilla.
• Comezón en la pierna.
Afrontamiento.
Distracción.
• Estrategias recreativas.
Impacto de la intervención.
Elicitar la narración de sucesos traumáticos.
• Hablar de experiencias difíciles.
TERCERA ENTREVISTA
Estado emocional.
Alegría.
• Sonriente.
Estado físico.
Habitus exterior positivo.
• Limpia.
• Aliñada.
Sufrimiento físico.
• Dolor en la rodilla.
• Llanto.
120
Evaluación cognitiva y emocional de la experiencia.
Aversión al hospital.
• Inconformidad por estar en el hospital.
• Desagrado del hospital.
Afrontamiento.
Fracaso del afrontamiento emocional (evitación-escape).
• No funcionó.
• Abstraerse de la problemática.
• Realizar actividades de distracción.
Impacto de la intervención.
Consolidación de un estado emocional positivo.
• Agrado por imaginar a su familia.
• Alegría por planear actividades para la salida del hospital.
• Relajación a través de la imaginería.
CUARTA ENTREVISTA
Estado emocional.
Tristeza.
• Sentimientos de abatimiento.
• Llanto.
Estado físico.
Evolución positiva de la pierna.
• Disminución del dolor.
121
Afrontamiento.
Regresión a las estrategias de evitación-escape y distanciamiento emocional.
• Quedarse dormida.
• No funcionó.
Impacto de la intervención.
Éxito del afrontamiento cognitivo en la disminución de dolor.
• Funcionó.
• Disminuyó el dolor.
QUINTA ENTREVISTA
Estado emocional.
Crisis de ansiedad de separación.
• Sentimientos de tristeza.
• Sentimientos de soledad.
• Ausencia de la madre.
Estado físico.
Disminución en las somatizaciones.
• Ausencia de nauseas.
Afrontamiento.
Proactividad ante la búsqueda de estrategias de afrontamiento.
• Buscar un propio ritmo para comer.
• Búsqueda de aditamentos para disminuir las nauseas.
Impacto de la intervención.
Impacto positivo a mediano plazo de la intervención.
• Controla el dolor y malestar emocional.
• Ayuda a la distracción.
SEXTA ENTREVISTA
Estado emocional.
Alegría.
• Alegría por ver a su mamá.
Estado físico.
Evolución física.
• Disminución de las nauseas.
• Dormir bien.
122
Rechazo a la comida.
• Desagrado del olor de la comida.
• Percepción de la comida como inapetente.
• Desea otro tipo de comida.
• Disminución del apetito.
SÉPTIMA ENTREVISTA
Estado físico.
Mejoramiento del estado físico.
• Come mejor.
• Aumento del hambre.
• Disminución en las nauseas.
Ganancias secundarias.
• Atención de la familia.
• Comprar juguetes.
Resignificación de la experiencia.
Conciencia del estado emocional en el hospital.
• Identifica labilidad emocional.
• Reconoce ánimo fluctuante.
• Acepta que fue difícil pero que su mamá la apoyó.
123
PARTICIPANTE 3: ERIK
PRIMERA ENTREVISTA
Estado emocional.
Expresión no verbal de malestar.
• No tenía buen semblante.
• Se quejaba.
• Rostro de dolor.
• Rostro cansancio.
Incertidumbre.
• Miedo de estar en el hospital.
• Desconocimiento de lo que le pasa.
• Falta de información sobre lo que se le va hacer.
Estado físico.
Malestar físico.
• Dolor fortísimo en el estómago.
• Fiebre.
• Calor.
SEGUNDA ENTREVISTA
Personalidad previa.
Despreocupado.
• Juguetón.
• Flojo.
• Malos hábitos alimenticios y de sueño.
Estado emocional.
Facie relajada.
• Rostro relajado.
• Descansado.
Ansiedad.
• Irritación.
• Malestar.
• Miedo.
• Expectación.
Estado físico.
124
Malestar físico.
• Dolor de estómago.
Estresores.
Falta de información.
• No estar seguro completamente de lo que va a pasar.
• Incertidumbre.
Afrontamiento.
Apoyo familiar.
• Infundir ánimo.
• Palabras de aliento.
Afrontamiento cognitivo.
• Control del miedo.
• Control de los nervios.
• Pensar en cosas positivas.
TERCERA ENTREVISTA
Estado emocional.
Restablecimiento del estado emocional.
• Tranquilidad.
• Platicador.
• Cooperador.
• Confianza.
• Sentimientos de seguridad.
• Sentirse mejor.
Estado físico.
Mejoría en el estado físico.
• Deseos de comer.
• Desaparición del dolor.
125
• Mejoría en la motilidad física.
Estresores.
Inmovilidad corporal.
• Insomnio.
• Dolor.
Afrontamiento.
Afrontamiento cognitivo de los procedimientos médicos.
• Pensar en otra cosa.
• Darse ánimo.
• Repetir frases positivas.
Resignificación de la experiencia.
Aprendizajes de la experiencia.
• Ser solidario.
• Darse cuenta de las personas que lo apoyaron.
• Escuchar a los papás.
• Autocuidados.
• No comer en la calle.
• Mejorar hábitos alimenticios.
CUARTA ENTREVISTA
Estado emocional.
Desesperación por salir del hospital.
• Enfado.
• Inquietud.
• Deseos de salir.
Estado físico.
126
Mantenimiento del estado físico saludable.
• Desaparición del dolor.
• Apetito.
• Sueño satisfactorio.
Impacto de la intervención.
Reconocimiento del apoyo brindado en el hospital.
• Identifica apoyo por parte la psicóloga.
• Utilidad de la intervención en la mejoría de su estado anímico.
• Acepta haberse sentido acompañado por la psicóloga.
QUINTA ENTREVISTA
Estado emocional.
Tranquilidad.
• Relajado porque saldrá del hospital.
• Animado.
Estado físico.
Mantenimiento del estado físico saludable.
• Desaparición del dolor.
• Apetito.
• Sueño satisfactorio.
Reinterpretación de la cotidianidad.
• Deseos de seguir cuidándose para no enfermar.
• Percepción positiva de la escuela.
127
• Deseos de ir a la escuela.
SEXTA ENTREVISTA
Estado emocional.
Tranquilidad.
• Relajado porque saldrá del hospital.
• Animado.
Estado físico
Mantenimiento del estado físico saludable
• Desaparición del dolor.
• Apetito.
• Sueño satisfactorio.
Resignificación de la experiencia.
Planeación de las actividades para incorporarse a la vida cotidiana.
• Ir a la escuela.
• Cuidarse para no enfermar nuevamente.
• Comer bien.
• Levantarse temprano.
• Terminar la secundaria.
Impacto de la hospitalización.
Impacto de la intervención a mediano plazo.
• Fortalecimiento de los vínculos afectivos.
• Proporcionar estrategias para enfrentar al estrés.
• Modificación de hábitos alimenticios.
• Adherencia terapéutica.
128
PARTICIPANTE 4: LILIA
PRIMERA ENTREVISTA
Estado emocional.
Resignada.
• Aceptación.
• Tranquilidad.
Estado físico.
Condiciones físicas dolorosas.
• Postura física incómoda.
• Aparato ortopédico en su pierna y tobillo.
Estresores.
Procedimientos clínicos
• Curaciones.
• Los aparatos ortopédicos.
• Inyecciones.
Impacto de la intervención.
Elicitar la narrativa de eventos traumáticos.
• Hablar de lo difícil que es estar enfermo.
• Aceptar que se sintió mal cuando ocurrió los dos accidentes.
• Identificación de sentimientos de culpa.
SEGUNTA ENTREVISTA
Estado emocional.
Fatiga.
• Enfado.
• Cansancio.
• Desesperación.
Estado físico.
129
Sufrimiento físico.
• Dolor moderado intermitente en la pierna.
Estresores.
Confinamiento.
• Incomodidad de estar acostada sin moverse.
• Dolor en la espalda.
• Dolor en la pierna por los aparatos ortopédicos.
Afrontamiento.
Desconocimiento sobre estrategias de afrontamiento.
• No se qué hacer.
• Resignación.
Impacto de la intervención.
Elicitar la narrativa de los eventos traumáticos.
• Narró lo vivido.
• Se relajó al narrar.
TERCERA ENTREVISTA
Estado emocional.
Relajada.
• Tranquila.
Estado físico.
Mejoría del estado físico.
• Disminución del dolor.
130
Reacción emocional negativa a los estresores.
• Llorar.
• Sentir miedo.
• Baja tolerancia al evento estresante.
Estresores.
Inyecciones y cirugía.
• Inyectar.
• Estar sola en el quirófano.
• Dolor.
Afrontamiento.
Evasión del estímulo estresante.
• Ignorar el estímulo estresante.
• Cambio del estímulo aversivo por otro de menor intensidad.
• Distraerse con un medio recreativo.
Apoyo familiar.
• Palabras de aliento.
• Disminución de la tensión.
CUARTA ENTREVISTA
Estado emocional.
Angustia.
• Desesperación.
• Incomodidad.
Estado físico.
Sufrimiento físico.
• Incomodidad.
• Insomnio.
• Férula en la rodilla.
• Pierna sujeta a un armes con peso.
• Tratamiento invasivo.
• Constreñimiento de la pierna.
Estresores.
Constitución del hospital.
131
• Grandes.
• Cuartos grandes.
• Pasillos enormes.
• Altos.
• Cerrar las puertas de la habitación.
• Oscuridad.
• Solitarios en la noche.
Afrontamiento.
Apoyo de la red familiar.
• Infundir ánimo.
• Disminuir la preocupación.
• Distracción.
• Dar estrategias de afrontamiento.
Impacto de la intervención.
Proporcionar nuevos afrontamientos.
• Enseñar estrategias de afrontamiento cognitivo conductual.
• Modelamiento de cómo usar las estrategias.
• Aceptación de los nuevos aprendizajes.
QUINTA ENTREVISTA
Estado emocional.
Optimista.
• Alegre.
• Tranquila.
• Piensa en su recuperación.
Estado físico.
Mejoría del estado físico.
• Menor dolor.
Estresor.
Maniobras quirúrgicas.
• Cirugía.
• Exámenes preoperatorios.
132
• Dieta.
Afrontamiento.
Autoproceso de desensibilización.
• Enfrentar el miedo.
• Graduar la exposición al evento estresante.
Impacto de la intervención.
Aplicación de estrategias de afrontamiento.
• Usa las estrategias aprendidas la sesión anterior.
• Siente mayor control y confianza en su respuesta ante el estrés.
SEXTA ENTREVISTA
Estado anímico.
Optimismo.
• A gusto.
• Despreocupación.
• Tranquilidad porque la operaron.
Estado físico.
Mejoría física.
• Desaparición del dolor.
• Desaparición de los aparatos ortopédicos.
Resignificación de la experiencia.
Nuevo significado de la percepción negativa del trabajo de los médicos.
• Lo hicieron para un bien mío.
• Aceptación de los procedimientos como rehabilitación de los pies.
Aprendizaje de la experiencia.
• Infundir ánimo en las personas que pasan la misma experiencia.
• Dar estrategias de afrontamiento a las personas.
• Tener cuidado.
• Seguir los procedimientos del médico.
Impacto de la intervención.
Nuevos aprendizajes.
• Adquisición de nuevas estrategias de afrontamiento al estrés.
• Control de sus emociones.
133
• Identifica aspectos positivos del trabajo de los médicos.
• Identifica la importancia de la presencia de la psicóloga en su estado anímico.
134
PARTICIPANTE 5: PABLO
PRIMERA ENTREVISTA
Personalidad previa.
Rasgos de ansiedad.
• Sensible.
• Se irrita con facilidad.
• Temeroso.
• Llora con facilidad.
• Demandante.
Creatividad.
• Busca estrategia para su esparcimiento.
• Crea nuevos juegos.
Estado emocional.
Principio de la sesión.
• Serio.
• Indiferente.
• Enfadado.
Desarrollo.
Alegre.
• Sonriente.
• Participativo.
• Creativo.
• Emocionado.
Estado físico.
Confinamiento.
• Aparato de yeso en las dos piernas.
• Aparato de yeso en un brazo.
• Prurito.
• Inmovilidad.
Alteraciones en el sueño.
• Pesadillas.
Estresores.
135
Procedimientos médicos dolorosos.
• Inyecciones.
• Cambio de suero.
• Inmovilidad.
Infraestructura en malas condiciones.
• Paredes en mal estado.
• Camas incómodas.
Afrontamiento.
Apoyo lúdico del personal del hospital.
• Fomento de actividades de dibujo.
• Fomento de la lectura.
• Apoyo pedagógico en el hospital.
Habilidades creativas.
• Jugar.
• Leer.
• Inventar juegos.
Impacto de la intervención.
• Gustó de hacer actividades lúdicas.
• Narró su experiencia traumática.
• Se relajó al hacer dibujos.
SEGUNDA ENTREVISTA
Estado emocional.
Abatimiento.
• Sentimientos de tristeza.
Estado físico.
Malestar físico.
• Dolor en algunas partes del cuerpo.
• Entumecimiento de las manos.
Afrontamiento.
Búsqueda de estrategias de afrontamiento.
• Controlar su ansiedad.
• Calmar la desesperación.
136
• Emplear técnicas de respiración.
Impacto de la intervención
Elicitar la narrativa.
• Habla de sus experiencias traumáticas.
• Acepta sentimientos.
TERCERA ENTREVISTA
Estado emocional.
Tristeza.
• Expresión no verbal de dolor.
• Abatimiento emocional.
• Desesperación.
Estado físico.
Sufrimiento físico.
• Dolor fuerte en el tobillo.
Aprendizaje de la experiencia.
• Autocuidados.
• Hacer actividades lúdicas.
• Hacer amigos.
Afrontamiento.
Cambio del afrontamiento anterior por un afrontamiento cognitivo-conductual.
• Control de la respiración.
• Imaginería.
Impacto de la intervención.
• Mejora de su estado anímico.
• Fomentar la expresión del niño.
• Percepción del niño de bienestar y diversión acerca de las actividades realizadas.
• Aprendizajes.
137
CUARTA ENTREVISTA
Estado emocional.
Mejoría en el estado emocional.
• Come todo.
• No siente dolor.
Estado físico.
Restablecimiento físico.
• Dormir bien.
• Mejoría en su pierna.
Resignificación de la experiencia.
Plan de rehabilitación de su pierna.
• Caminar.
Impacto de la intervención.
Fortalecimiento del trato calido en los niños.
• Apoyo positivos del personal paramédico.
• Aplicación de medicamentos que redujeron el dolor.
QUINTA ENTREVISTA
Estado emocional.
Mejoría en el estado emocional.
• Come todo.
• No siente dolor.
Estado físico.
Restablecimiento físico.
• Dormir bien.
• Mejoría en su pierna.
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• Mayor recuerdo de los detalles del accidente.
Impacto de la intervención.
Fortalecimiento del trato calido en los niños.
• Apoyo positivos del personal paramédico.
• Aplicación de medicamentos que redujeron el dolor.
SEXTA ENTREVISTA
Estado emocional.
Mejoría en el estado emocional.
• Come todo.
• No siente dolor.
Estado físico.
Restablecimiento físico.
• Dormir bien.
• Mejoría en su pierna.
Resignificación.
Acepta la dificultad de estar hospitalizado.
• Identifica la experiencia como difícil.
• Incomodidad por estar acostado.
Planea a futuro.
• Focaliza estrategias de recreación para estar bien en casa.
• Crea formas para mantener el contacto con su escuela.
• Poner en práctica los aprendizajes en el hospital.
Impacto de la intervención.
Aprendizajes.
• Autocuidados.
• Estrategias de relajación para afrontar el dolor.
• Frases automotivadoras para combatir el dolor.
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