Está en la página 1de 33

Moreno Cabrera, J. C. (2014).

Tratado didáctico y crítico de Lingüística


general. Vol. 1. Madrid: Euphonía.

2.8 Tipología de las lenguas naturales

2.8.1 Introducción

Por poca experiencia que tengamos con lenguas


extranjeras, podemos fácilmente comprobar lo diferentes que
pueden llegar a ser los idiomas de la humanidad. Sin embargo,
esas diferencias aparentemente imposibles de sistematizar
se pueden caracterizar mediante un número pequeño de
parámetros de variación. La tipología lingüística estudia
precisamente el alcance de esa variación limitada y delimitada
por unos pocos parámetros. La idea fundamental de la que
partimos es que bajo esa complejísima y - para algunas personas
anárquica - diversidad existe una serie de patrones recurrentes
que hacen que las diferentes lenguas del mundo sean variaciones
sobre unos mismos temas. Se puede proponer que todas las
lenguas naturales humanas son más o menos consistentes con
unos cuantos tipos característicos, que se pueden establecer de
acuerdo con criterios estructurales. Vamos a ver a continuación
unos criterios de ese tipo, que dan lugar a una clasificación de las
lenguas en unos pocos tipos.

En pocas palabras, vamos a exponer en esta secc1on


algunos de los parámetros de variación tipológica o parámetros
tipológicos de las lenguas habladas y de las lenguas señadas. Se
trata de propiedades generales de las lenguas que se realizan de
determinadas formas concretas dependiendo de la lengua.

2.8.2 Tipos de lenguas habladas

Una de las primeras formas de clasificar las lenguas


que desarrolló la tipología lingüística se fundamenta en
la configuración de las unidades naturales de la primera
articulación del lenguaje. Esto significa que se recurno a
la estructura morfológica de la palabra para establecer un

888
parámetro de vanacron lingüística. Este criterio dio unos
resultados sorprendentes. A pesar de la aparente gran diversidad
de lenguas, se encontraron solamente tres tipos principales de
idiomas según la configuración morfológica de las unidades de
la primera articulación del lenguaje:

Lenguas aislantes: chino, vietnamita


Lenguas aglutinantes: turco, húngaro, euskera
Lenguas flexivas: latín, griego, ruso, árabe

En las lenguas aislantes los elementos de la primera


articulación, las palabras naturales, no se analizan en unidades
significativas menores ni cambian en su configuración
morfológica según la función que desempeñen en la oración. He
aquí un ejemplo (M. Clark 1977: 22):

Nó dua l(li nha rói ba Ch\lC carn


él llevar aquí casa yo 3 10 naranja
' Ha traído treinta naranjas a mi casa'

Cada una de las palabras de que consta esta oración del


vietnamita es una unidad mínima léxica o gramatical que no
experimenta variación morfológica alguna. Sin embargo, este
razonamiento ha de aplicarse a la forma escrita del vietnamita
(inspirada en algunos aspectos formales de la escritura china),
que es realmente aislante, pero no a la forma hablada de esta
lengua, en la que, como en las demás lenguas, no se habla sílaba
a sílaba sino agrupando las sílabas en unidades mayores que sí
presentan una estructura morfológica y sintáctica compleja. Por
ejemplo, <nha tói> se glosa como 'casa yo' pero esta secuencia
forma un constituyente similar al castellano [mikása], que, a pesar
de que se escribe <mi casa >, configura una unidad morfológica
en la que <mi> es un elemento clítico que puede analizarse
como un morfema posesivo del sustantivo <casa >. Por tanto, no

889
parece acertado decir que el vietnamita es una lengua aislante
porque, al menos, presenta un sufijo flexivo posesivo, pues no
otra es la función de <tói> en la frase, dado que la persona que
denota no es un protagonista principal del suceso denotado.
Un razonamiento análogo puede hacerse de muchas otras
expresiones del vietnamita.

Las lenguas aglutinantes presentan unidades de la


primera articulación formadas mediante la adjunción de dos
o más morfemas a un lexema que quedan aglutinados a él
manteniendo su integridad morfonológica. Como ejemplo,
veamos la declinación del sustantivo turco adam 'hombre':

SG PL
Nominativo adam adam-lar
Acusativo adam-1 adam-lar-1
Genitivo adam-m adam-lar-m
Dativo adam-a adam-lar-a
Locativo adam-da adam-lar-da
Ablativo adam-dan adam-1ar-dan

Podemos observar que el morfema de plural -lar queda


perfectamente intacto y a él se añaden las terminaciones
de caso que aparecen en singular. De esta manera, al dativo
singular adama le corresponde un dativo plural perfectamente
predecible: adamlara.

En una lengua flexiva los morfemas se fusionan y no es


posible muchas veces distinguir dónde acaba uno y empieza el
otro. Veamos la declinación del sustantivo ruso [stol) 'mesa':

890
SG PL
Nominativo [stol) <CTOJJ> [stal-y) <CTom,1>
Acusativo [stol] <cTon> [stal-y] <cTom.r>
Genitivo [stal-á) <cTona> [stal-óv] <CTOJIOB>
Dativo [stal-ú) <cTony> [stal-árn] <CTOJJaM>
Instrumental [stal-óm] <cTo.110M> [stal-árni] <cTonai,rn>
Prepositivo [stal-ié] <cTone> [stal-áx) <cTonax>

En este ejemplo podemos comprobar que, a diferencia del


turco, no es posible identificar un único morfema de plural o de
cada uno de los casos en ruso. El sufijo--u es de dativo singular y
el correspondiente plural se forma añadiendo el sufijo --am; en
ellos, no se puede identificar fácilmente el morfema de caso y el
morfema de número: ambos aparecen realizados en una forma
en la que no es inmediato el reconocimiento de las unidades
morfemáticas.

En la actualidad, se suelen proponer dos parámetros


fundamentales de variación de las unidades de la primera
articulación del lenguaje: el grado de fusión y el orden de los
elementos. En realidad, la tricotomía aislamiento/ aglutinación/
fusión no es discreta sino más bien gradual y además cada
lengua presenta en mayor o menor medida los tres tipos. En
castellano, por ejemplo, tenemos aglutinación: di-me-lo,
flexión diga e, incluso, aislamiento entendido como ausencia
de flexión hoy, más.

Una diferencia relevante en esta parametrización está en


la oposición existente entre los lexemas y los gramatemas, que
pueden definirse de la siguiente manera.

Lexema

Es un elemento de la primera articulación del lenguaje con


denotación extralingüística. Por ejemplo unidades como <casa>,

891
<libro> tanto en las lenguas habladas como en las lenguas
señadas.

Gramatema

Es un elemento de la primera articulación del lenguaje


con función gramatical. Por ejemplo, el morfema de tiempo o
aspecto tanto en las lenguas habladas como en las lenguas
señadas. En algunas lenguas habladas encontramos elementos
como artículos, preposiciones o conjunciones, que también son
gramatemas.

Podemos ahora definir con más precisión los dos criterios


fundamentales a que hemos hecho referencia:

Grado de fusión morfológica de los gramatemas con


los lexemas:

Se obtiene a partir de la mayor o menor imbricación o


integración morfológica entre los dos elementos. El gramatema
puede solaparse o integrarse en mayor o menor medida con el
lexema o puede no solaparse con él en absoluto. Por ejemplo, en
castellano, el gramatema de diminutivo -it- está más integrado
con el lexema que el gramatema de plural, dado que éste aparece
después de la vocal temática y aquél aparece antes: [ka-sít-a) /
<casita>. Además, diversos gramatemas pueden estar más o
menos fusuionados entre sí y con el lexema.

Alineación de los gramatemas respecto de los lexemas:

Los gramatemas que determinan o rigen gramaticalmente


a un lexema pueden anteponerse o posponerse a él. Por ejemplo,
en castellano el gramatema preposicional de se antepone al
sustantivo que rige: [dekása)/ <de casa>.

892
El lingüista y romanista alemán G. Bossong (2004) ha
propuesto las siguientes propiedades tipológicas con arreglo a
estos dos parámetros dentro del ámbito nominal; es decir, del
nombre y de los elementos que los determinan o modifican:

Uniformidad morfológica (UM)

Todos los gramatemas nominales presentan el mismo


grado de fusión con los lexemas; todos están en el mismo nivel
morfológico.

Biformidad morfológica (BM)

Los gramatemas nominales muestran al menos dos


grados de fusión con los lexemas. Hay al menos dos grados de
imbricación lexema/gramatema.

Uniformidad posicional (UP)

Todos los gramatemas nominales aparecen en la misma


posición dentro del sintagma nominal. O bien anteceden al
lexema nominal o bien le siguen.

Biformidad posicional (BP)

Los gramatemas nominales aparecen a ambos lados de los


lexemas nominales. Unos le preceden y otros le siguen.

Sobre la base de estos criterios se pueden según G. Bossong


establecer los siguientes cuatro tipos de lengua:

Tipo Morfología Posición


u uniforme uniforme
BP uniforme biforme
BM biforme uniforme
B biforme biforme

893
Según esta tabla, hay cuadro tipos lingüísticos básicos.
El tipo U (totalmente uniforme) es uniforme tanto respecto
del grado de fusión morfológica gramatema nominal/lexema
como respecto de la posición de uno de los elementos respecto
del otro. El tipo BP (biforme posicional) es uniforme respecto de
la fusión morfológica pero no lo es respecto de la posición. El
tipo BM (biforme morfológico) conoce al menos dos grados de
fusión entre los gramatemas nomina les y los lexemas y presenta
uniformidad posicional. Por último, el tipo B (totalmente
biforme) es biforme tanto en el aspecto morfológico como en
el aspecto posicional.

Hemos de tener en cuenta que estos cuatro tipos son ideales


o teóricos y que las lenguas los realizarán en mayor o menor
medida. Si decimos que una lengua es de tipo U, queremos decir
que predomina claramente este tipo en esa lengua, no que no
haya ninguna excepción a la uniformidad total.

Veamos ahora una ilustración de esta tipología, tal como la


propone G. Bossong (2204: 435-447).

El japonés como lengua U

En japonés los gramatemas nominales se afijan a los


sintagmas nominales, sin que llegue a haber una fusión
morfológica con ellos. Además los gramatemas se posponen
siempre a los lexemas a los que afectan. He aquí un ejemplo
(Makino-Tsutsui 1989: 347):

fl -ta: s *~~
- St!J~i L, -r \_,\ {>
Watashi--wa nihongo--o benkyoshite iru

Yo-wa japonés--o estudiando estoy

'Estoy estudiando japonés'

894
Podemos apreciar en esta oración cómo la partícula wa,
que indica el tópico de la oración y la partícula o, que indica el
objeto directo (se señalan ambas en la forma escrita japonesa
mediante un subrayado) se adjuntan a los respectivos lexemas
como sufijos sin que se fusionen morfológicamente con ellos.
Los gramatemas se posponen a los lexemas a los que afectan
siempre con el mismo grado de aglutinación en esta lengua.

El chino mandarín como lengua BP

En chino mandarín encontramos que algunos gramatemas


se colocan después del lexema a que afectan y otros se colocan
antes de él. Por otro lado, el grado de fusión de esos gramatemas
con los lexemas es más o menos constante. Se trata de una
lengua uniforme morfológicamente, pero, a diferencia del
japonés, biforme posicionalmente. Por ejemplo, en este idioma el
gramatema cóng 'desde' se antepone al sustantivo al que afecta,
pero el gramatema shang 'sobre' se pospone, tal como podemos
apreciar en los siguientes ejemplos:

Cóng daxué

Desde universidad
' Desde la universidad'

ttg ...t.
Dl shang

tierra sobre

'Sobre la tierra'

895
El hindi como lengua BM

El hindi presenta, según G. Bossong una biformidad


morfol ógica. Existe flexión casual y posposiciones con una clara
diferenciación entre ambos niveles.

En hindi los sustantivos conocen dos casos que se oponen


flexivamente entre singular y plural. Hay gramatemas que
se posponen de modo invariable a los sustantivos que están
flexionados para el caso oblicuo. Por tanto, existen dos gramatemas
con dos niveles diferentes de integraci ón: un marcador de caso
más integrado y un marcador pospositivo menos integrado en el
lexema. He aquí unos ejemplos (Thapar 1987: 39).

Hindi: sustantivo masculino

~ ~
'
~~ <1:Sef~i ~
laRka laRke laRke ko laRkon ko
chico chicos chico a chicos a
el chico los chicos al chico a los chicos

Hindi: sustantivo femenino

fü;5~ fü ,'5 f.f; ,ü fü~~ 'lZ


,.... f<f ,.
l lsl ~ - .;:¡ 1 'IT
khiRki khiRkiyan khiRki par khiRkiyon par
venta.na ventanas ventana sobre ventanas sobre
la ventana )as ventanas sobre la ventana sobre las ventanas

896
En las dos primeras columnas de los cuadros vemos un
sustantivo (laRka 'chico' y khiRki 'ventana' respectivamente)
en singular y en plural. En la tercera columna vemos que el
sustantivo se declina para un caso oblicuo cuando le sigue un
gramatema que indica localización. Los gramatemas ko 'a' y par
'sobre~ que aparecen subrayados, se corresponden con nuestras
preposiciones pero, como van después del sustantivo al que
rigen y no antes, se denominan posposiciones.

El georgiano como lengua BM

Esta lengua del Cáucaso es uniforme posicionalmente


pero biforme morfológicamente (Bossong 2004: 41-43). En esta
lengua hay unos gramatemas primarios que indican caso y que
se sufijan al sustantivo. Por ejemplo, en la expresión kal-is ('de
la mujer), tenemos el gramatema -is, que indica la función de
complemento nominal. Pero existe un segundo conjunto de
gramatemas casuales que se adjuntan a una forma nominal que
va provista ya de un afijo casual primario; se trata de los afijos
casuales secundarios. Por ejemplo, el sufijo benefactivo - tvis
'para' se afija a la forma casual ka/is para obtenerse kalistvis ('para
la mujer'). Por otro lado, la forma genitiva ka/is es exigida por la
posposición shesaxeb 'a cerca de' en la expresión: ka/is shesaxeb
'acerca de la mujer'.

GEORGIANO: CASOS PRIMARIOS

caso georgiano transcripción significado


nominativo ~-() khal-i la mujer
acusaiivo/ dativo rl,)~-b k"al-s a la mujer
genitivo j,)(1'>·0b k•at-is de la mujer
instnunenta l ~-"">- 00> k'al-ith con la mujer
adverbial :),)~· ,)<;\_) k.. al-ad como mujer
ergativo rl,)C1"·fü k'al-ma la m ujer

897
GEORGIANO: CASOS SECUNDARIOS

comparativo d~-0-3001 k' alivit• como mujer


locativo rl~~-1>-'/Jo => d~· k' al-shi en la mujer
'/Jo
benefectivo el~c:m-ol>-0>~01> k•a t·is· t•vis para la mu ier
ablativo d~~-~-3~6 => k>al+dan desde la mujer
,,~,...,·o«>~6
term.ínativo ~~-~ac;p::, khaJ-a-mde hasta la mujer
=>~~-~-llm'l

Como vemos los casos, secundarios están a medio


camino entre afijos morfológicos y posposiciones, dado que
exigen un determinado caso primario, pero son elementos
claramente afijados al sustantivo, sin ningún tipo de autonomía
morfológica. En georgiano también hay posposiciones puras,
que son gramatemas morfológicamente más independientes
del sustantivo. He aquí un par de ejemplos:

GEORGIANO: POSPOSICIONES PURAS

k0al-is gamo a causa de la mujer


k0al-issbesaxeb acerca de la mujer

Observamos que la posposición gamo 'a causa de' y la


posposición shesaxeb'acerca de' rigen caso genitivo.

En georgiano, igual que en otras lenguas como el vasco


o el hindi existen varios grados de fusión morfológica de los
gramatemas con el sustantivo en los que se pueden observar
casos intermedios entre afijo gramatical y posposición.

El polaco como lengua B

Las lenguas denominadas habitualmente flexivas tales


como el latín, el griego, las lenguas eslavas, romances y,

898
en menor medida, germanicas son ejemplos más o menos
característicos de este tipo. Por ejemplo, el ruso y el polaco son
lenguas totalmente biformes. La coexistencia de preposiciones
y de flexión casual muestra la biformidad posicional: dado
que los primeros elementos se colocan antes del sustantivo
y los segundos detrás y dado que la fusión morfológica entre
preposiciones y sustantivos es mucho menor que la que hay
entre sustantivos o adjetivos y afijos casuales. Veamos parte de
la declinación del sustantivo polaco dom 'casa'

caso singular significado


nominativo dom (la) casa
genitivo dom-u de (la) casa
acusativo dom (la) casa
instrumental dom-em con (la) casa
locativo dom-u en (la) casa

Ahora vamos a ver algunos usos de preposiciones con


estos casos (Presa 2008: 326,332 )

ldziemy do domu 'vamos a casa'


Mamy samochód przed 'tenemos el coche delante de
domem la casa'
Jan pracuje w domu 'Jan trabaja en casa'

Se han subrayado las preposiciones en las oraciones polacas:


la preposición do 'al hasta' rige caso genitivo, la preposición
przed 'delante de' rige caso instrumental y la preposición w 'en'
rige caso locativo.

2.8.3 Las lenguas polisintéticas

Además de los tres tipos tradicionales vistos hasta ahora (el


aislante, el aglutinante y el flexivo), ya en el siglo XIX y de la mano
de W. von Humboldt, se propuso el término lengua incorporante

899
para hacer referencia a aquellos idiomas que pueden incorporar
morfológicamente un elemento léxico en una forma verbal.
La lengua que llevó a este autor alemán a proponer el tipo
incorporante fue el nahua. He aquí un ejemplo de este fenómeno
en esa lengua (Moreno Cabrera 2000a: 519):

Nahua

a. Ne' kica'ki kallaktli

él cerró la puerta

b. Ne' kalca'ki

él puertacerró

'Cerró la puerta'

Observamos que la palabra kallaktli 'puerta' de la primera


oración aparece bajo la forma ka/, como prefijo del verbo kica'ki
'cerró: en la segunda oración.

Posteriormente, Sapir (1922: 123) popularizó el término


polisíntesis para hacer referencia a ciertos idiomas de América
que presentan incorporación morfológica y un gran número de
morfemas gramaticales o léxicos en las palabras. Las lenguas de la
familia esquimal suelen ponerse como ejemplos paradigmáticos
del tipo polisintético. Veamos un ejemplo de la lengua yupí
siberiana central (W. J. de Reuse 2009: 23):

neghyaghtughyugumayaghpetaa
negh-yaghtugh-yug -uma-yagh -pete -aa
comer -ir -quererer-pasado-frustrativo-inferencial-
indicativo3s.3s
'Resulta que quería ir a comérselo, pero ...'

900
Este autor considera que hay un mecanismo, presente
en todas las lenguas pero más evidente en unas que en
otras, que da cuenta de este fenómeno. Se trata de lo que
denomina concatenación productiva no flexiva (CPN). Este tipo
de concatenación, en el que se aglutinan diversas unidades
de la primera articulación del lenguaje, se produce de forma
generalizada en el habla coloquial espontánea de todas las
lenguas, aunque la forma escrita de algunas de ellas la haga
invisible. Según W. J. de Reuse (2009) la CPN tiene una serie de
propiedades que la alejan de la morfología flexiva y la acercan a
la pura concatenación sintáctica. Tres de las más características
son las siguientes:

Propiedades de la concatenación productiva


no flexiva (CPN)

Carácter necesariamente concatenativo


Productividad
Recurrencia

Las expresiones obtenidas mediante este mecanismo son


productivas. Eso significa que se pueden construir formas nuevas
más o menos libremente y se pueden interpretar de manera
composicional y automática. La forma del yupí que acabamos
de dar presenta esta propiedad, dado que la expresión solo
tiene dos elementos de aparición obligatoria: el elemento léxico
negh'comer'y el morfema de flexión verbal -aa, que es la forma
de tercera persona de singular (de sujeto y objeto) del modo
indicativo. Los demás elementos están seleccionados de forma
más o menos libre y son opcionales, por lo que, según se elija
uno u otro, se pueden obtener hasta treinta palabras diferentes
de distinto tamaño, además de la vista, en las que aparecen
distintas combinaciones de esos elementos.

Otra propiedad notable es el carácter recurrente de la CPN.


El siguiente ejemplo del yupí siberiano central aportado por W. J.
de Reuse (2009: 24) presenta esta propiedad:

901
iitghesqesaghtiisqaa
itegh -sqe -yaghtugh-sqe -aa
entrar-pedir-ir-pedir-indicativo 3s.3s
'Le pidió que fuera a pedirle (a otro) que entrara'

Podemos comprobar que el elemento sqe 'pedir' aparece


dos veces en la expresión con dos funciones diferentes.

Como se ha dicho, la CPN es típica de la lengua coloquial


espontánea y se da en todos los idiomas. En castellano coloquial
la tenemos también. Consideremos las dos expresiones
siguientes del castellano coloquial espontáneo, anotadas en una
transcripción fonética laxa, y seguidas de la forma ortográfica
estándar correspondiente:

1. [eskenoselankompráo] / <Es que no se la han comprado]


2. [alakeselandáo] / <Ala que se la han dado>

Si analizamos los morfemas y lexemas que contienen estas


dos expresiones, totalmente habituales y usuales en la lengua
castellana coloquial, obtenemos la concatenación de ocho
elementos en el primer caso (es-ke-no-se-l(a)-an-kompra-o)
y también en el segundo (a-la-ke-se-l(a)-an-da-o). En ambos
casos, hay más elementos de la primera articulación que en las
dos expresiones del yupí siberiano central vistas (que tienen
respectivamente 7 y 5 elementos). Estas formas, como las del
yupí, tienen un claro carácter productivo, ya que la mayoría
de los elementos son opcionales. En efecto, prescindiendo
de algunos elementos opcionales y combinándolos
podemos obtener libremente secuencias más cortas como
[ankompraó], [lankompráo], [selankompráo], [noselankompráo],
[kenoselankompráo], [keselankompráo], [kelankompráo],
[kankompráo], [kelankompráo] y otras, todas ellas perfectamente
normales y comprensibles. El segundo de los ejemplos muestra
también el fenómeno de la recurrencia, dado que el elemento

902
[la] aparece dos veces: una en función de objeto indirecto o
direccional [ala] y otra en función de objeto directo [la].

Estas observaciones nos llevan a suscribir las conclusiones


de W. J. de Reuse acerca del supuesto tipo lingüístico polisintético:

"Otra consecuencia de este punto de vista es que no existe


el tipo polisintético de lenguas. Las lenguas denominadas
polisintéticas son lenguas con una CPN abundante o notable.
La diferencia entre lenguas polisintéticas y no polisintéticas
es, por consiguiente, una diferencia cuantitativa y no
cualitativa:' (W. J. de Reuse 2009: 28)

Por consiguiente, más que de un tipo lingüístico


polisintético parece que es más revelador hablar de un parámetro
de la polisíntesis (Baker 1996) que se fija de modo variable según
sea obligatoria o no, en las distintas lenguas, la aparición de
un morfema o lexema incorporado dentro del verbo que haga
referencia a todos o a algunos de los participantes en el proceso
o acción denotado por él.

2.8.3 Tipos de lenguas señadas

Existen unas diferencias tipológicas más o menos marcadas


entre las lenguas habladas y señadas, que pasamos a revisar
brevemente a continuación.

Las unidades de la primera articulación de las


lenguas señadas son mayoritariamente monosilábicas y
polimorfemáticas. Tienen, pues, un alto grado de sinteticidad
y una seña puede integrar varios morfemas gramaticales.
Comparadas con las lenguas habladas, las lenguas señadas
tienen unas unidades formadas por una sola sílaba pero con un
alto grado de incorporación morfológica. Desde este punto de
vista constituyen un tipo perfectamente diferenciable de los de
las lenguas habladas.

Por ejemplo, hay una seña en la LSA que contiene seis

903
unidades de la primera articulación: 'dos (1) seres erguidos
jorobados (2) avanzan hacia adelante (3) cuidadosamente (5)
uno al lado del otro (6f He aquí la seña en cuestión:

Estamos ante algo inusitado en una lengua hablada, pues


en una lengua de este tipo esto supondría la existencia de seis
morfemas significativos en una sola sílaba.

Por consiguiente en las lenguas habladas se puede


transmitir una información reducida en muchas unidades
pequeñas de la primera articulación, mientras que en las
lenguas señadas, se transmite mucha información en unas pocas
unidades de la primera articulación. Esto, además, sirve para
compensar el hecho de que las lenguas señadas se realizan, en
la ejecución, de forma más lenta que las lenguas habladas. Con
ello, ambas lenguas presentan una razón similar respecto de la
transmisión de información gramatical y léxica.

El grado extremo de sinteticidad de las lenguas señadas


se deriva en gran medida de una propiedad que las distingue
de modo muy notable de las lenguas habladas: la existencia
de dos articuladores (las dos manos) principales activos y otros
secundarios como el torso, la mirada y la cara, que pueden
utilizarse para completar un significado o para realizar varios
morfemas simultáneamente: es lo que se denominasimultaneidad
(M. Vermeerbergen, L. Leeson y O. Crasborn 2007). Según estos

904
autores existen los siguientes tipos de simultaneidad en las
lenguas señadas:

Simultaneidad manual: cada mano provee información


diferente. Ejemplo: construcciones clasificadoras.

Simultaneidad manual-oral:

A veces se producen movimientos bucales que acompañan


la señación. Se ha observado que en la lengua señada británica
(LSB) algunos señantes mueven los labios tal como exige la
pronunciación de la palabra inglesa bed cuando hacen la seña
que significa 'retozar en cama' (pron. [bed]). En la lengua señada
flamenca (LSFL) se ha observado a señantes que al hacer la seña
para 'camión' mueven la boca para imitar el ruido de un camión
(Vermeerbergen, L. Leeson y O. Crasborn 2007: 2-3)

Simultaneidad de otros articuladores: La mirada y las


inclinaciones corporales son dos de las acciones más habituales
que sirven para complementar o añadir morfemas a una señación
determinada.

El siguiente ejemplo de la lengua señada hongkonesa


(LSHK) (tomado de Tang, Sze y Lam 2007: 294) significa 'una
persona se ha tirado de la barca'

FIGURA 2.8.1
UNA PERSONA SE HA TIRADO DE LA BARCA en LSHK

905
Observamos en la segunda imagen que la mano derecha
adopta la forma de un barco (un clasificador) y la mano izquierda
adopta la forma de una persona (otro clasificador). La primera
imagen es la seña de barca y la tercera indica la acción de tirarse.

Una vez establecida la singularidad tipológica de las


lenguas señadas respecto de las lenguas habladas, podemos
determinar los parámetros que dan cuenta de la variación en
las lenguas señadas mismas, dado que ni todas las lenguas
señadas son iguales, ni tampoco mutuamente inteligibles, tal
como ocurre con los idiomas hablados. Por otro lado, como en el
caso de las lenguas habladas, esa variación dentro de las lenguas
señadas se puede caracterizar mediante una serie de parámetros
tipológicos que la delimita de una forma específica.

Siguiendo a Hohenberger (2007) y a Zeshan (2005a,b,c)


ponemos, como ejemplo de variación tipológicamente
determinada, los parámetros que determinan la concordancia
verbal en las lenguas señadas. Algunas lenguas señadas, como
la LSA, indican la concordancia en el verbo mediante una
modificación del movimiento o de la orientación, pero otras
realizan esa concordancia mediante la señación de un gramatema
auxiliar similar al de algunas lenguas habladas. Encontramos
esos auxiliares en la lengua señada alemana (LSAL), en la lengua
señada japonesa (LSJA), en la lengua señada taiwanesa (LSTW) y
en la lengua señada neerlandesa (LSN). En la LSAL ese gramatema
auxiliar se deriva de la seña para PERSONA.

En cuanto al orden de los sintagmas en la oración


encontramos en las lenguas señadas una variación similar a la
que presentan las lenguas habladas.

Las lenguas señadasespañola (LSE), alemana LSALy austríaca


(LSAUS) presentan un orden no marcado Sujeto+objeto+verbo
(SOV) como ocurre en algunos idiomas orales (turco, húngaro,
japonés, vasco). Por otro lado, las lenguas señadas americana
(LSA), brasileña (LSBR) y croata (LSCR) tienen como orden básico

906
SVO como ocurre en otras lenguas habladas (inglés, francés,
castellano, ruso).

Un parámetro de variación en las lenguas señadas está en


el tipo de negación que presentan. Algunas lenguas señadas
tienen negaciones irregulares (Zeshan 2005b), que no se realizan
mediante la emisión de una seña negativa, sino que suponen
una forma diferente de la seña a la que afecta la negación.

Estas negaciones irregulares se encuentran en algunas


lenguas señadas. Según Moriyón Moji ca (2006: 1O) existe en
la LSE una seña con el significado HABER-NO de negación de
la existencia que no se puede relacionar directamente con
ESTAR-NO o HABER-NO. En la lengua señada rusa (LSRU) la seña
de QUERER y la de QUERER-NO son distintas y no se pueden
relacionar de modo evidente. Algo similar ocurre con PODER
y PODER-NO en la LSAL o QUERER y QUERER-NO en la lengua
señada ugandesa (LSUG). De 35 lenguas señadas de todo el
mundo analizadas (Zeshan 2005b: 560-561) se extraen los
siguientes resultados:

Negaciones irregulares

o 1
1 3
2/5 10
>5 21

Otro parámetro tipológico de las lenguas señadas que se


ha estudiado es el de las partículas interrogativas (Zeshan 2005c).
Por ejemplo, en la lengua señada española (LSE) tenemos una
partícula interrogativa final realizada mediante la seña SI-NO:

907
LSE

~ INDICE-2 A COLEGIO SORDO SI-NO ~


'¿Vas a un colegio para sordos?

En otras lenguas hay otras partículas interrogativas como


PALMA-ARRIBA de la lengua señada finlandesa (LSFI), TENER-NO-
TENER de la lengua de señas taiwanesa (LSTW) o BUENO-MALO
de la lengua señada hongkonesa (LSHK).

De un corpus de 38 lenguas se ha encontrado la siguiente


agrupación según el parámetro de la presencia o ausencia de
partículas interrogativas:

Número de partículas interrogativas lenguas


señadas

o 25
9
>1 4

Debido al gran desconocimiento que todavía hay sobre


las lenguas señadas no se han podido determinar todavía todos
los parámetros relevantes de variación que deberían tenerse en
cuenta a la hora del estudio tipológico de estas lenguas.

CONCEPTOS FUNDAMENTALES

(2.8.1] Introducción. Tipología lingüística. Parámetros


tipológico s.

(2.8.2] Tipos de lenguas habladas. Lenguas aislantes.

908
Lenguas aglutinantes. Lenguas flexivas. Declinación del
sustantivo. Grado de fusión morfológica. Orden de los
elementos. Lexema. Gramatema. Uniformidad morfológica.
Biformidad morfológica. Uniformidad posicional.
Biformidad posicional.

[2.8.3) Las lenguas polisintéticas. Incorporación.


Lengua incorporante. Polisíntesis. Lengua polisintética.
Concatenación productiva no flexiva (CPN). Parámetro de
la polisíntesis.

[2.8.4) Tipos de lenguas señadas. Concordancia verbal.


Orden de palabras. SOV. SVO. Negación irregular. Partículas
interrogativas.

COMENTARIOS CRÍTICOS

[2.8.2] Tipos de lenguas habladas.

La tricotomía entre las lenguas aislantes, aglutinantes y flexivas es


una de las propuestas tempranas de la lingüística del siglo XIX. Parte de F.
v. Schlegel (1772-1829). Este autor, en 1808 estableció una tipología de las
lenguas en dos tipos fundamentales:

"Los matices secundarios de la significación son expresados


por la mutación interna de la raíz mediante la flexión o
bien por la adición de una palabra apropiada que, ya de
por sí, significa pluralidad, pasado, obligación futura u
otros conceptos relativos de este tipo; y estos dos casos
simplicísimos caracterizan también los géneros principales
de toda lengua:' (F. v. Schlegel, Über die Sprache und Weisheit
der lndier. Ein Beitrag zur Begründung des Altertumskunde,
1808; tomado de Arens 1975: 222).

En este pasaje tenemos el establecimiento de los tipos


lingüísticos flexivo y aglutinante. Fue A. W. Schlegel, quien en
1818 (Morpurgo Davies 1998: 74) amplió la dicotomía propuesta
por su hermano a la tricotomía que conocemos hoy en día entre

909
lenguas monosilábicas, afijativas y flexivas. Esta terminología
cambió a partir de las propuestas de W. von Humboldt (1767-
1835) quien habló de lenguas aislantes, aglutinantes y flexivas
y quien influyó de modo decisivo en la clasificación tipológica
de las lenguas adoptada a partir de entonces. En los manuales
actuales se matiza a menudo que todas las lenguas participan
en mayor o menor medida de los tres tipos, aunque uno de
ellos sea dominante. Pues bien, esto es lo que afirmó el propio
Humboldt en una carta a P. É. Du Ponceau fechada el 21 de
septiembre de 1827:

•puede decir con seguridad que no es posible clasificar las


lenguas en aglutinantes y flexivas. Es una cuestión gradual
que define el carácter de las lenguas, todas las cuales son
similares, ya que el ser humano es el origen de todas ellas.•
(Humboldt 1827, Morpurgo Davies 1998: 112)

Pero Humboldt introdujo una noción de carácter cuasi-


filosófico que ha tenido una enorme influencia en el pensamiento
lingüístico posterior. Se trata del concepto de forma lingüística
interior. Humboldt tiene una noción finalística de forma
lingüística interior, ya que la lengua es fundamentalmente una
actividad creativa del espíritu, actividad informada o guiada
por una forma lingüística interna que vendría a ser algo así
como el conjunto de métodos a través de los cuales el espíritu
se esfuerza por encarnar en una forma fonética el pensamiento.
Esos métodos constituyen una función continua y uniforme que,
una vez descrita adecuadamente, nos descubrirá la forma de la
lengua. Esta es una propuesta muy vaga e indeterminada que se
puede interpretar de muy diversos modos. Humboldt mismo la
interpretó de una manera claramente etnocentrista al mantener
que las lenguas que expresan formalmente las relaciones
gramaticales son superiores a aquellas en las que no ocurre esto.
He aquí las palabras del propio Humboldt:

"Hay que liberar al espíritu de la necesidad de sustituir la


expresión ausente de esta relación mediante un acto de
pensamiento, y conseguir que esta relación tenga en la lengua

910
un verdadero signo que la represente, de igual manera que a
los propios objetos• (Humboldt 1972: 15)

Pero este autor va aún más lejos, ya que además exige que,
para ser perfecta, esa manera de expresar gramaticalmente las
relaciones debe ser la flexión:

•Ahora bien, si excluimos para la verdadera representación


de las relaciones gramaticales, estos dos procedimientos:
reunión de palabras a las que el espíritu concede la idea de
relación, y términos representativos deobjetos,el único medio
posible para expresar estas relaciones es la modificación de
las palabras que representan objetos, y este es efectivamente
el único y verdadero tipo de forma gramatical" (Humboldt
1972: 15)

Morpurgo Davies (1998: 114) señala que Manchester


(1985: 141) tiene razón cuando sostiene que Humboldt opinaba
que el método flexivo es superior porque es un método de
designación simbólica que se ajusta de forma más exacta a
aquello que se simboliza, es decir, al pensamiento, que otros
métodos lingüísticos. Por consiguiente, Humboldt creía que las
lenguas flexivas favorecen el proceso del pensamiento de una
forma en la que no pueden hacerlo las lenguas menos perfectas,
aun manteniendo que en todas las lenguas se puede expresar
cualquier pensamiento.

Esta idea de Humboldt, de marcado carácter etnocentrista,


pervivió a lo largo de todo el siglo XIX e influyó en autores en
principio no humboldtianos como A. Schleicher (1821 -1 868),
que justifica de la siguiente manera las excelencias lingüísticas
de la flexión:

•La esencia de la flexión ha sido ya establecida antes sobre el


hecho de que la fusión espiritual, es decir, la inseparabilidad
del significado y la relación es expresada a través de una fusión
y una inseparabilidad correspondientes del significado y la
relación de los elementos fónicos. Con otras palabras, la raíz
puede ser modificada a través de la flexión. Los elementos aún
invariables de las lenguas aglutinantes, se hacen flexibles y la

911
lengua posee la capacidad de seguir paso a paso la actividad
espiritual en el ámbito fónico. Se trata del nivel más alto que
puede alcanzar la estructura lingüística." (A. Schleicher 1983:
113; reimpresión del original de 1850).

Esta idea de la superioridad de las lenguas flexivas sobre las


lenguas aglutinantes y aislantes sigue existiendo aún hoy en día,
aunque de una forma algo más sutil y solapada. Pero lo cierto
es que no se puede ofrecer ningún dato científico que esté de
acuerdo con los descubrimientos de la lingüística contemporánea
y que justifique que una lengua morfológicamente aglutinante
como el turco, el finés, el vasco o el húngaro sea un tipo de lengua
menos desarrollado o perfecto que una lengua flexiva como el
ruso, el portugués o el griego moderno.

Pero hay una objeción más grave aún a esta tipología


morfológica de las lenguas. Esta objeción se basa en el hecho
de que la tricotomía entre lenguas aislantes, aglutinantes y
flexivas tiene una base clara en la lengua escrita y no en la
lengua hablada. Sobre todo, por lo que se refiere al tipo aislante.
El chino y el vietnamita son lenguas efectivamente aislantes en
la escritura. Estas lenguas se escriben separando por espacios en
blanco las sílabas, ya sean logogramas, como en el caso del chino
o sílabas formadas por letras, como en el caso del vietnamita.
Ahora bien, esto ocurre solo en la lengua escrita porque en la
lengua oral habitual, no existe tal aislamiento de las formas. El
discurso coloquial e informal chino y vietnamita está constituido
por largas ristras de expresiones fónicas complejas, igual que
cualquier otra lengua. Esto lo puede comprobar cualquier
persona que escuche una conversación entre hablantes nativos
de estas lenguas. En estas lenguas los elementos de la primera
articulación se unen en el discurso hablado formando cadenas de
palabras unidas o aglutinadas entre sí. Por tanto, si bien es cierto
que la lengua escrita china y vietnamita es aislante, la lengua
hablada normal es claramente aglutinante. Como todas las
lenguas en general. En castellano coloquial tenemos expresiones
como [nosénal, que en su forma escrita sería <no sé na(da)>. Esta
oración castellana se escribe de modo aislante: cada uno de los

912
componentes significativo es una palabra ortográfica rodeada
de espacios en blanco. Pero esto no significa que el castellano
sea una lengua aislante; tampoco significa que los castellanos
nativos unen o aglutinan las palabras ortográficas al hablar para
obtener expresiones complejas como [noséna], porque si esto
se mantiene, habría que dar cuenta de cómo pueden emitir,
entonces, esas expresiones los analfabetos y los niños que aún
no saben escribir, pues es razonable suponer que no conocen la
estructura aislante que tiene esta expresión en la lengua escrita.

De hecho, podríamos decir que todas las lenguas habladas


en su realización espontánea normal son aglutinantes, como
sugirió en su día el gran lógico Hans Reichenbach, que parte de
una clara crítica a la palabra ortográfica:

"La definición gramatical de palabra como un grupo de


letras separadas por otras mediante un intervalo no es
satisfactoria: lo que es una palabra en una lengua puede
ser expresado por varias palabras en otra, mientras que las
proposiciones se traducen siempre como proposiciones.
El alemán es famoso por sus largos nombres compuestos
tales como Eisenbahnknotenpunkt que significa 'railroad
junction' en inglés. La regla que establece que las palabras
'raíl' y 'road' se escriben como una palabra, mientras que
'junction' se escribe separada, es una pura convención. [... )
No deberíamos olvidar que en todas las lenguas la división
en palabras desaparece más o menos en cuanto hablamos, ya
que cuando hablamos no hacemos intervalos entre la mayor
parte de las palabras; en francés este hábito lleva a la liaison
de las palabras habladas, es decir, la fusión de palabras en
una sola al pronunciar las consonantes finales que de otro
modo son silenciadas." (Reichenbach 1975: 5)

Todo esto no quiere decir que no existan diferencias


morfológicas entre las lenguas. Ahora bien, esas diferencias
tienen que ver con e l grado de fusión morfonológica de los
diversos elementos gramaticales con las raíces léxicas de las
palabras. Precisamente, la tipología propuesta por Bossong
(2004), que se ha explicado en esta sección tiene en cuenta este
parámetro morfológico gradual, que diferencia la estructura

9 13
morfonológica de las palabras en las diversas lenguas de forma
mucho más independiente de la escritura.

[2.8.4] Tipos de lenguas señadas.

Después de lo visto en el primer capítulo del presente


tratado, debe quedar claro que las lenguas señadas y las lenguas
habladas son ambas manifestaciones o realizaciones concretas de
la facultad del lenguaje. Se mantiene, pues, que estos dos tipos
de lenguas son las dos modalidades lingüísticas principales. En
algunos aspectos, como hemos visto, son muy diferentes entre sí
y en otros aspectos son muy similares o idénticas. Para valorar y
comprender en su justa medida las lenguas señadas, la estrategia
de igualarlas forzada y artificiosamente con las lenguas habladas
no es adecuada, dado que este proceder nos impide comprender
las diferencias entre los dos tipos de lengua que se derivan de la
modalidad correspondiente: la oral y la seña da. Yprecisamente una
de las cuestiones fundamentales que hay que investigar es cómo
y en qué medida influye la modalidad en la estructura de los dos
tipos de lengua. Esto es importante, porque puede que tengamos
que relativizar algunas de las propiedades de las lenguas habladas
que teníamos hasta ahora como universales. Por ejemplo, el
famoso principio de la linealidad estricta del significante, no
parece proceder de la facultad de lenguaje humano, sino de
una de las modalidades en las que se realiza: la modalidad oral.
Desde este punto de vista, el estudio de las lenguas señadas en
contraste con las lenguas habladas, que claramente pertenecen
a dos tipos diferentes de lengua en virtud de las diferencias del
medio físico en el que se realizan, debería hacer replantearse a
los lingüistas todos y cada uno de los principios gramaticales que
han sido propuestos hasta la fecha exclusivamente sobre la base
de las lenguas habladas. Primero, hay que revisar los universales
lingüísticos por si alguno de ellos fuera un universal pero solo de
la modalidad oral y al revés, algún universal de las lenguas señadas
que no sea aplicable a las lenguas habladas. Ya hemos hecho
referencia al principio de la linealidad del significante y podemos
hacer referencia, respecto del segundo aspecto, al principio del

914
dominio de uno de los dos articuladores (una mano) sobre e l otro
(la otra mano) en las lenguas señadas. En el esquema siguiente se
recogen clasificados estos casos.

UNIVERSALES LINGOfSTICOS RELATIVOS Y ABSOLUTOS

PROPIEDAD LENGUAS HABLADAS LENGUAS SEtílADAS


Linealidad estricta UNIVERSAL NO APLICABLE
Simultaneidad NO APLICABLE UNIVERSAL
Dominio de un NO APLICABLE UNIVERSAL
articulador
!conicidad MARGINAL GENERALIZADA
Recursividad UNIVERSAL UNIVERSAL
Dependencia UNIVERSAL UNIVERSAL
estructural

Por tanto, hay que distinguir dos tipos de universales:


los absolutos, que se verifican e n todas las lenguas,
independientemente de su modalidad, tales corno la recursividad
o la dependencia estructural y los relativos: los que son solo
válidos para una de las dos modalidades lingüísticas.

En cuanto a la tipología lingüística, también hay que


investigar qué parámetros tipológicos son exclusivos de cada
una de las dos modalidades y cuáles son comunes a ambas
modalidades. El parámetro del orden de palabras parece que
es relevante en las dos modalidades, es decir, en las lenguas
habladas y en las lenguas señadas. Los parámetros fonológicos
del VOT (Voice Onset Time; véase Ladefoged 2001: 120) y ATR
(Advanced Tangue Root; véase Kenstowicz 1994: 14) no son
relevantes para las lenguas señadas; por su parte, el parámetro
de la realización lenta de un seña (RL) o el desplazamiento de
una seña (DSPL) para indicar alguna determinación gramatical,
no parecen tener un correlato en e l caso de las lenguas habladas.
En el siguiente esquema, señalarnos estas diferencias entre los
parámetros tipológicos.

915
PARAMETROS TIPOLÓGICOS RELATIVOS Y ABSOLUTOS

PROPIEDAD LENGUAS HABLADAS LENGUAS SEIQAOAS


VOT APLICABLE NO APLICABLE
ATR APLICABLE NO APLICABLE
RL NO APLICABLE APLICABLE
DSPL NO APLICABLE APLICABLE
ORDEN DE PALABRAS APLICABLE APLICABLE
REDUPLICACIÓN APLICABLE APLICABLE

Por consiguiente, una vez que tenernos en cuenta las


lenguas señadas, se descubre que algunos rasgos que se suponían
universales no lo son y que existen parámetros tipológicos
nuevos que no pueden percibirse con las lenguas habladas. Es
decir, la introducción de las lenguas señadas en el panorama
de la lingüística teórica restringe los universales y amplía los
parámetros tipológicos. Dentro de los parámetros tipológicos,
hay que determinar qué parámetros son independientes de la
modalidad y qué otros están condicionados por ella.

OBSERVACIONES Y PENSAMIENTOS PARA


REFLEXIONAR Y ARGUMENTAR

1. Estudiando el siguiente texto quechua (tornado de Calvo


Pérez 1995: 73-74) podernos caracterizar tipológicarnente
esta lengua.

Ñawpag-si ch'aki lleaqta mana unu-yuq ka-sga ka-rqa.n


Antes-REP seco tierra no agua-POS ser-REP ser-PT0-·3ª
"Antiguamente se decía que había habido una tierra seca,
sin agua'

Manchayta surnag pallay-sapa lliklla-wan,


exagerado bello tejido-AUM rnanta-lNST

916
t'ika wark'a-wan sumaq walqa-yku-sqa
flor honda-lNST bello llevar al cuello-AUM-PART

Makpi qucha-ta ri-spa, chay sigunda mandun


Makpi lago-ACUS ir-GER ese Segunda Mandón

Putu-cha-pis unu-ta urqu-mu-sqa qucha-manta


Put-DIM-ADIT agua-ACUS sacar-CISL-REP lago-ABL

'Actuando exageradamente, el Mandón Segunda, ataviado


de lliclla bellamente tejida y llevando cuidadosamente al cuello
una honda floreada, yendo a la laguna de Makpi, dicen que había
sacado de ella agua en cantidad con un cuenco de calabaza:

Hina-spa q'ipi-mu-q ka-sqa


Así-GER cargar a la espalda-CISL-HAB ser-REP

Waman Marka pata-man para-q chaya-na-n-paq


Waman Marka cumbre-ADL lluvia-GEN llegar-FUT-3ª-BEN

'De ese modo, solía llevar cargada a la espalda [el agua] a la


cumbre del Waman Marka para que la lluvia llegara'

Huk sigunda-taq unu paka-sqa-manta urqu-mu-n


Otro segunda-CONTR agua esconder-PART-ABL sacar-
CISL-3ª

putu-pi ka-q chay hina pallay lliklla-yuq, wark'a-yuq


Cuenco-LO( ser-AG ese así tejido lliclla-POS, honda-POS

917
sumaq chay Waman Marka pata-pi iskay-ni-n-ku
bello ese Waman Marka cumbre-GEN dos-EUF-3ª-PL

"Y otro Segunda sacaba del agua oculta en el cuenco,


estando ese igualmente vestido de lliclla tejida, bello con su
honda, ambos en la cumbre del Waman Marka:'

Abreviaturas:

3ª = tercera persona

ABL = ablativo ACUS = acusativo ADIT = aditivo

ADL = adlativo AG = agentivo AUM = aumentativo

CISL = cislocativo BEN= benefactivo CONTR = contrastivo

DIM= dimunitivo EUF = eufónico FUT = futuro

GEN = genitivo GER = gerundio HAB = habitual

INST = instrumental LOC = locativo PART = partitivo

POS = posesivo PTO = pretérito REP = reportativo

2. Mediante los tres ejemplos que siguen tomados de tres


lenguas señadas diferentes - lengua señada americana
(LSA), lengua señada alemana (LSAL) y lengua señada
italiana (LSIT), Perniss, Pfau y Steinbach 2007: 21) -, se
pueden establecer parámetros tipológicos relativos a la
expresión de las oraciones subordinadas adjetivas:

918
LSA:

rel

t, (RECIENTEMENTE PERRO QUE, PERSEGUIR GATO) VIENE CASA ~

'El perro que acaba de perseguir al gato vino a casa'


'El gato al que el perro acaba de perseguir vino a casa'

La raya superior indica que se produce simultáneamente un


levantamiento de cejas para indicar el carácter de subordinada
adjetiva de la oración (ren.

LSAL:

tel
i, N!UJER: [PR:ONREL,, HO!VIBRE IND01, ;.._,'\YUDAR;i,] SABER ,,AUX1 :.,

'La mujer que está ayudando al hombre me conoce'

El subíndice 3a indica un movimiento hacia la parte


ipsilateral del espacio señado y el subíndice 3b, un movimiento
hacia la parte contralateral del espacio señado. lnd= índice;
AUX= auxiliar verbal, que indica persona y número.

LSIT:

,e [AYER CASA; MJ\RIA VERPRONREL;J HOY ARDE R ~

'La casa que María vio ayer ha ardido hoy'

El subíndice señala un movimiento hacia el pecho del


señante.

919
3. La idea de que la simultaneidad es exclusiva de las
lenguas señadas se puede realmente poner en cuestión si
concebimos los fenómenos prosódicos suprasegmentales
como la entonación o el acento. Todavía más si incluimos
como pertenecientes a la actividad lingüística los gestos
que acompañan habitualmente al habla. He aquí un
ejemplo concreto tomado de un discurso del político
francés L. Jospin pronunciado en 1997 (tomado de Calbris
2008: 31-32).

Este debe ser el eje principal. Este ha de ser el camiuo. No estaba en mi mano decidirlo

920

También podría gustarte