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Pontificia Universidad Javeriana

Introducción a Ciencia Política


Humberto Librado Castillo
Protocolo de exposición
Juan Sebastián Arias Barrero
Jaime Carrera Uribe

Polis, Política y oikonomia

Cuando se menciona el nombre de Aristóteles, este no solo nos remite a Grecia y su


periodo de gloria sino, inequívocamente, a todas sus ideas sobre el hombre y su importancia
en diferentes áreas del conocimiento. Sin lugar a dudas, Aristóteles todavía es leído hoy en
el mundo y se puede afirmar que sus ideas son el inicio de tradiciones del pensamiento pero
también de varias ciencias que conocemos. Es impensable tocar un tema sobre la condición
humana, la ética, la política o la filosofía sin antes haber leído a uno de los autores que ha
tenido mayor influencia en la construcción de occidente.
Antes de continuar es fundamental definir algunos conceptos que trabaja Aristóteles en
el libro primero de Politeia. El primer concepto y el más importante es Polis; esta se
entiende, en palabras del estagirita, como una “comunidad política” (p.132), un cuerpo
cívico, y una ciudad o territorio común que es libre, autónomo y obediente a las leyes que
tiene como fin llegar a un sistema autárquico. Es importante resaltar que la polis no podía
ser muy extensa en población pues de ello dependía el sistema de magistrados. Se
componía en aldeas que a su vez estaban compuestas por familias cuyas formas de
organización son importantes para entender la polis.
En segundo lugar, es relevante darle significado a la palabra oikonomia (griego) o
economía. Aunque en el texto aparece no como oikonomia o economía sino administración
doméstica, para los griegos, esta se entendía como el arte del gobierno doméstico. Este
gobierno comprendía las relaciones entre cónyuges, padres e hijos, amos-esclavos y lo
referente al los bienes materiales o de subsistencia (p.137, nota 14).
Otra palabra que es importante definir es la crematística que se entiende como “el arte
de producir riqueza y dinero” (p. 151). Para Aristóteles hay dos tipos de crematística, una
honorable y una deshonrosa. La primera hace referencia a los negocios que generan
pequeñas ganancias y para la administración doméstica. La crematística deshonrosa u
odiada, es aquella que se orienta a una acumulación afanosa y sin fin de dinero, en la cual
no importa la licitud de las acciones para tal fin, y la cual se hace a partir de la usura o el
dinero que produce más dinero.
Ahora bien, el problema principal que aborda Aristóteles en el primer libro de Politeia
es la diferencia entre el manejo del hogar y el manejo de la polis, pues hay algunos que
erróneamente piensan que el gobierno de ambos es equivalente. Para esto, el autor
descompone el gobierno de la polis y de casa en elementos más simples con el fin explicar
diferencias y similitudes.
Consideramos, ahora, que la tesis de Aristóteles sobre dicho problema es que tanto la
polis como la casa tienen un gobierno similar en algunos aspectos pero también tienen
diferencias. Aunque Aristóteles no explicita una tesis en su texto, pues precisamente todo el
libro politeia consiste en la explicación de cómo debería funcionar la polis, se puede
afirmar que en este Libro I el objetivo es explicar en qué difieren ambos gobiernos
haciendo una comparación desde las cuatro relaciones que fundamentan el gobierno
doméstico.
A continuación explicamos los cuatro pilares de la administración del hogar, su relación
de semejanza o diferencia con el gobierno de la polis, una intertextualidad con el autor Eric
Fromm y su escrito “El miedo a la libertad” y cerramos con unas conclusiones.
Aristóteles inicia su argumentación con la premisa de que la naturaleza no hace nada sin
razón o sin que sea bueno. Por esto al dotar al hombre de lenguaje, él puede discernir lo
bueno y lo malo, lo justo de lo injusto, lo conveniente de lo inconveniente y otros valores.
Ya que el ser humano es un animal político (o que se asocia políticamente de forma natural)
y puede discernir los valores de que se compone la casa y la polis, se puede decir que esta
última es natural y necesaria.
Ahora bien, no hay una polis excelente solo con gobernantes o autoridades excelentes
sino que es necesario que haya siervos excelentes. La naturaleza dotó de diferentes
características a los hombres pues hay unos que son vigorosos y fuertes para labores
serviles mientras que hay algunos que no tienen fuerza sino tienen inteligencia y virtud para
la política.
Aristóteles argumenta que hay hombres que nacieron para ser esclavos, hombres que se
destacan por su fuerza y su capacidad de hacer trabajos físicos, mientras que otros están
destinados a gobernar ya que han sido dotados de inteligencia y virtud para guiar a otros
hombres. Para este filósofo la relación esclavo y amo era necesaria, puesto que la forma en
que él comprendía la sociedad humana era en términos jerárquicos donde unos gobiernan y
otros obedecen. Siguiendo este orden de ideas, la relación entre amo y esclavo era útil, por
tanto armoniosa y de amistad, al ser el amo quien suple las necesidades básicas del esclavo
y el esclavo trabajando para su amo. El autor señala que si esta relación no es armoniosa es
debido a que las personas no están en sus roles destinados.
Así introduce la idea de que en la medida en que en la naturaleza hay seres que
dominan y seres que obedecen, también en las relaciones humanas el hombre y el amo
deben regir sobre la mujer y el esclavo. Ahora, aunque en ambas relaciones se da la
dualidad dominio-sumisión, no significa que la relación entre el hombre y la mujer sea
igual a la del esclavo. Por un lado, la relación hombre-mujer es política ya que ambos seres
son iguales y libres, aunque ella no pueda ejercer su completa voluntad. Por otro lado, la
relación heril es de naturaleza monárquica; el esclavo, a diferencia de la mujer, no es libre
ni es un igual ni tampoco es dueño de sí mismo. Por eso, aunque en ambas relaciones existe
un soberano y un súbdito, ambas soberanías son diferentes.
El gobierno del núcleo básico de la polis, que es la familia, es distinto a gobernar la
polis. El primer motivo se debe a que la interacción amo-esclavo que se da en la familia
griega no concuerda con la relación que tiene el gobernador con el resto del pueblo ya que
se trata de una relación entre hombres libres. El segundo motivo es la prioridad que se le da
a la polis. Es decir, para el estagirita la polis tiene predominancia sobre la familia o el
mismo individuo pues su bienestar es más importante.
Con respecto a la relación entre padres e hijos Aristóteles no profundiza mucho. Añade
que esta relación también es de estirpe monárquica (como la de los esclavos) pero se da
“tanto por la paternidad y el afecto como por el respeto por la edad” (Aristóteles, p.158). El
monarca, si bien es de la misma estirpe que su descendencia, es distinto de sus súbditos.
Toda polis está compuesta de familias. Por eso es importante la administración
doméstica y dentro de ella la crematística. Estos términos están estrechamente ligados a la
forma en que se manejan los recursos y cómo es posible enriquecerse, lo cual Aristóteles
presenta como un conocimiento fundamental para el político ya que las polis necesitan a
menudo recursos financieros para prosperar y es necesario que su líder conozca formas de
adquirirlos. Para demostrar la factibilidad de este arte Aristóteles menciona lo que hizo
Tales de Mileto.
Así, el autor demuestra la gran importancia de la crematística que toca diversos ámbitos
vitales para las finanzas de cualquier estado como lo es el conocimiento agrícola y el
conocimiento de la hacienda. También agrupa diversos elementos como el intercambio en
el que hacen parte el comercio y la usura. Y por último menciona un segundo elemento que
está en la mitad de los otros dos ya descritos que es la minería.
Comenzando ahora la sección de intertextualidad, consideramos importante retomar los
planteamientos de Erich Fromm en su texto “El miedo a la libertad”. En este, el autor
busca dar una explicación al fenómeno de estados autoritarios en Europa durante el siglo
XX. Una de las premisas del autor es que el hombre tiene una aversión a la soledad pues
desde que nace necesita de otros seres humanos para su supervivencia no solo biológica
sino psicológica y social. Es una necesidad relacionarnos con otros y pertenecer a un grupo
humano o comunidad. Bien nos advertía esto Aristóteles hace más de dos milenios cuando
afirma que el hombre es un animal politikon y quien no quiere pertenecer a la polis, está, en
otras palabras, loco.
Ahora bien, es importante resaltar que Fromm no se queda en postular solamente el
miedo a la soledad. Él afirma que los seres humanos, en la medida en que crecemos, vamos
ejercitando nuestra libertad y por ello logramos consolidar una identidad, diferenciándonos
de otras personas y adquiriendo ideas y valores propios que no siempre van a estar de
acuerdo con las de los demás. Esta divergencia conlleva a que nos sintamos solos y
separados de otros en la medida en que nos apropiemos de nuestra libertad. Como
consecuencia, renunciamos a esta para sentirnos parte de un grupo, pertenecer. Esto tiene
amplia relación con la polis que plantea Aristóteles pues para pertenecer a ella se debe
renunciar a ciertas libertades, cumplir ciertas leyes y asumir responsabilidades civiles,
económicas y políticas.
Fromm no defiende la esclavitud, sin embargo, desde una lectura que se relacione con
Aristóteles, es importante resaltar que hay algunas personas que renuncian a su libertad por
miedo a ella y ponen en otros el poder de decidir por ellos. Esto es muy común en el caso
de los políticos porque precisamente se tiene la noción de que hay personas que sirven para
obedecer y otras para mandar, o en palabras de Aristóteles, unos con virtud para gobernar y
otros con virtud para servir. Sin embargo, por esa concepción, también se dan abusos y hoy
en día se siguen eligiendo a los mismos políticos por más rústicas, anticuadas e
impertinentes sean sus propuestas e incluso ellos.
Cabe resaltar, por último, algo que se mencionó anteriormente, y es que aún teniendo
los mejores gobernantes, es indispensable tener unos buenos servidores o gobernados. Una
polis es excelente porque tanto quienes lideran como los que siguen son ambos excelentes
pues hay virtud en mandar y en servir. Y esto, más que una excusa, debería ser un impulso
para cumplir las leyes y no solo culpar a otros, por haber renunciado, o en las democracias
actuales, entregado a otros, el poder de decidir por mí.
El texto de Aristóteles, es sin duda, polémico y como cualquier otro pensador
importante, un reflejo de su época. Hay conceptos anticuados e incluso ilegales como la
esclavitud, que el hombre sea quien mande en el hogar, relaciones de monarquía entre
padres e hijos, o sencillamente las dinámicas que se gestaban en la polis y son muy
complejas de llevar a cabo hoy en día. Se puede decir que una entre millones de ciudades
en el mundo es, como quería Aristóteles, autárquica. Pero no solo eso las democracias
actuales, lo que entendemos por política y las relaciones de poder han cambiado
trascendentalmente desde que se escribió este libro.
Pero como se mencionó anteriormente, no por eso se debe desechar las ideas de este
griego que todavía tiene repercusiones en nuestro pensamiento. Es valioso resaltar la
distinción que Aristóteles hace de la crematística en referencia a que la más odiada y la no
honorable es no sólo la que se aprovecha de los demás, sino aquella búsqueda insaciable de
recursos y particularmente dinero. Es importante volver a la importancia que tienen los
políticos en la vida pública y cómo ellos deberían estar en función de nuestras polis y no de
ellos mismos. Para finalizar, no se puede olvidar que para el gobierno de la polis es
importante, pero no equivalente, saber del gobierno del hogar, pues, no solo en los tiempos
de Aristóteles, sino en la actualidad, ambos gobiernos tienen semejanzas pero también
abismales diferencias.

Bibliografía

-Aristóteles de Estagira, & Briceño Jáuregui, M. (1989). Politeia (pp. 131-162). Bogotá:
Publicaciones del Instituto Caro y Cuervo.
-Fromm, E. (1941). El Miedo a La Libertad.

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