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LA BESTIA HUMANA

Esta película de Daniel Tinayre se había rodado en 1953 o 1954, depende de las fuentes.
¨Sin embargo y por motivos no muy claros se estrenó recién en 1957. Se trata de la
contribución del realizador a CINEMATOGRÁFIA CINCO, aquella productora
integrada por Lucas Demare, Hugo del Cärril, Mario ¨Soffici, Luis César Amadori y el
director de quien se habla. Se trata de una extraña mezcla que se proponía filmar lo que
se le ocurriera, sin intervención política o económica de ninaguna especie. Ël golpe de
Ëstado de 1955 la deshizo.

Tinayre, siempre atento al cine francés, eligió una versión de la novela de Ëmile Zolá
guionada por Borrás y ya filmada por Jean Renoir en Francia. Curiosamente y por la
misma época Firtz Lang intentaba otra remake en Hollywood llamada HUMAN
DESIRE. Conocíamos de memoria las sex-weepies de este hombre, aquellas que, como
ocurre en CAMINO DEL INFIERNO –él se ocupó del segmento violento y Luis
Saslvsky del otro-, DANZA DEL FUEGO, A SANGRE FRÍA y lo considerábamos un
director singular, ya que hasta en PASAPORTE A RÌO enviaba mujeres al otro mundo
con elegancia y sin remordimiento. Su exigencia para los encuadres y los travellings –
cfr. el comienzo de DANZA DEL FUEGO- era proverbial. Pero sería injusto no
reconocer que LA VENDEDORA DE FANTASÍAS no es una excelente comedia algo
copiada de LA MUJER DEL CUADRO pero esto es secundario. Carlos Schlieper no
era.

Al llegar los años 50, la antigua trenza Tinayre-Alberto de Zavalía, Luis Saslavsky,
Ërnesto Ärancibia desintegrado. Los que eudaron boyando se pusieron a las órdenes del
peronismo y aceptaron de buena o mala gana trabajar con técnicos y actores partidarios
del que iba a ser el régimen depuesto. Si la novela de Zolá fue elegida por Tinayre-
Borrás, el director tuvo que soportar imposiciones en el reparto y, para peor, que la
primera actriz se trajera a un galán italiano. Sin embargo volvió a ser el Tinayre de
siempre: mató a una mujer, otra se suicidó y una tercera soportó feroz paliza, ¨Buenos,
antes de matarlas, las damas del caso soportaban bofetadas de variada tesitura. Al
menos, el elemento masculino, antes de integrar la pila de cadáveres, merecía un
entierro bajo la lluvia y ojos llorosos. No está demás decir que en esta nueva sex- weepy
ell realizador se permitió leves desnudos y hasta donde la censura lo permitía. Soffici no
tenía tanto miedo ya que en BARRIO GRIS Elida ´Gay Palmer en nocturna secuencia
enloquece de `placer el protagonista. Y hablamos de BARRIO GRIS porque también
fue un producto de CINEMATOGRÁFICA CINCO.

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