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1identificación y Clasificación de Alumnado Con Trastorno Específico Del Lenguaje. Acosta, Ramírez, Hernández PDF
1identificación y Clasificación de Alumnado Con Trastorno Específico Del Lenguaje. Acosta, Ramírez, Hernández PDF
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Revista de
ORIGINAL
a
Área de Didáctica y Organización Escolar, Facultad de Psicología, Universidad de La Laguna, Tenerife, España
b
Área de Metodología de las Ciencias del Comportamiento, Facultad de Psicología, Universidad de La Laguna, Tenerife, España
c
Área de Psicobiología, Facultad de Psicología, Universidad de La Laguna, Tenerife, España
d
Grupo de Investigación en Dificultades del Lenguaje Acentejo
e
Grupo de Investigación en Neuropsicología del Desarrollo (GINDe)
PALABRAS CLAVE Resumen En la presente investigación nos hemos propuesto un doble objetivo. En primer lugar,
Clasificación; reconocer aquellos instrumentos que ayuden a identificar y diferenciar con mayor precisión
Evaluación; niños con desarrollo típico y niños con Trastorno Específico del Lenguaje (TEL) y, en segundo
Subtipos; lugar, establecer cuáles son las características subyacentes más relevantes que nos permiten
Trastorno Específico agrupar a los niños con TEL en diferentes subtipos. La muestra estuvo compuesta por 33 alumnos
del Lenguaje diagnosticados con TEL y 20 niños sin problemas de lenguaje. Los niños cursaban desde el último
año de Educación Infantil (5 años) hasta 5.◦ de Primaria (11 años). Los resultados indicaron, por
un lado, que el CELF-3 es la prueba que nos permite un mejor diagnóstico del TEL, y, por otro
lado, se establecieron 2 grandes subtipos de TEL: el fonológico-sintáctico y el léxico-sintáctico.
© 2013 AELFA. Publicado por Elsevier España, S.L. Todos los derechos reservados.
0214-4603/$ – see front matter © 2013 AELFA. Publicado por Elsevier España, S.L. Todos los derechos reservados.
http://dx.doi.org/10.1016/j.rlfa.2013.07.006
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158 V. Acosta et al
Language Fundamentals-Third Edition (CELF-3), and that there are two major subtypes of SLI,
the phonological-syntactic subtype and the lexical-syntactic subtype.
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como es el caso de que en la historia escolar de estos niños visual obliga a establecer relaciones verbales, con especial
no apareciesen problemas importantes, especialmente en su atención a los personajes y a la secuencia de los aconteci-
audición y en su motricidad orofacial (Aguado, 1999). Poste- mientos.
riormente se utilizaron 3 pruebas para diagnosticar el TEL. Para comenzar la tarea, la logopeda coge el cuento y lo
En primer lugar se recurrió al test más usado internacional- narra, ayudada por un guión que servía como relato mien-
mente para el estudio de este trastorno, el CELF-3 (Semel tras se presentaban las imágenes y, además, garantizaba la
et al., 2003). Se trata de un test de evaluación del len- misma historia a todos los niños. Luego se lo da al niño y le
guaje con baremos para hablantes del español de los Estados pide que lo cuente.
Unidos de América. Evalúa los procesos de comprensión y Finalmente, y una vez registrada en audio la producción
expresión lingüísticas con carácter general, mediante tareas narrativa de los niños, se procedió a su transcripción literal
de estructuración y formulación de las oraciones, conceptos y a su estudio. El examen posterior consistió en una seg-
y direcciones, estructura y clases de palabras, y recordar mentación de la historia en oraciones y en un análisis de sus
oraciones. Los resultados en esta prueba fueron cruciales, oraciones, de los problemas en la fluidez (mazes) y de los
obteniéndose puntuaciones medias por debajo de ---1,25 en errores gramaticales (Acosta, Moreno y Axpe, 2013, en este
su capacidad lingüística, tal y como exigen autores tan rele- número).
vantes como Leonard (1998). Con todo, y dado que algunos
investigadores señalan la necesidad de utilizar 2 o más medi-
das de lenguaje, se dispuso, por un lado, del Peabody (Dunn,
Padilla, Lugo y Dunn, 1986). En esta prueba se mide el voca- Resultados
bulario y el niño deberá señalar entre 4 imágenes la que
corresponda a la palabra emitida por el evaluador. El voca- Para responder al primer objetivo planteado en este estudio
bulario empleado consta de nombre de objetos, situaciones, se realizó un análisis discriminante, en el que se introduje-
profesiones y animales, de acciones y de atributos. Y, por ron todas las variables a la vez. Para abordar el segundo
otro lado, de 2 subpruebas del ITPA (Kirk, McCarthy y Kirk, objetivo se empleó un análisis de escalamiento multidi-
2005), las de asociación auditiva y asociación visual, para mensional con el procedimiento ALSCAL para cada grupo
evaluar procesos psicolingüísticos semánticos, mediante la de sujetos. Se utilizó la distancia euclídea como medida de
asociación de términos a una palabra dada y de imáge- la disparidad. Estos resultados fueron corroborados con un
nes que guardan una relación taxonómica o temática. En análisis de conglomerados jerárquico.
ambas subpruebas los niños obtuvieron, del mismo modo,
resultados muy deficitarios, reflejados en las puntuaciones
negativas en lo que se refiere al Peabody, y a una edad psi-
colingüística en el ITPA muy inferior a la edad cronológica. Tabla 2 Resultados de las pruebas para la evaluación diag-
Finalmente, se comprobó que los niños con TEL tuvieran un nóstica del grupo TEL
cociente de inteligencia no verbal por encima de la puntua-
ción 85, a través del Test de inteligencia K-BIT (Kaufman y Pruebas Grupo TEL
Kaufman, 2000). Todos estos datos quedan recogidos en la
Media DT
tabla 2.
CELF-3. Lenguaje Expresivo −1,37 0,84
CELF-3. Lenguaje Receptivo −1,27 0,64
Procedimiento para la evaluación narrativa
Peabody −1,51 1,22
ITPA. A. Auditiva. Edad 3,79 2,36
Una vez diagnosticados los niños con TEL, se procedió a
psicolingüística
la evaluación de sus habilidades narrativas. El material
ITPA. A. Visual. Edad 5,24 2,39
utilizado ha sido el cuento Rana, ¿dónde estás? (Mayer,
psicolingüística
1969), usado con mucha frecuencia en este tipo de estu-
RFI. Número de palabras 15,14 14,30
dios (Strömqvist y Verhoeven, 2004). Este libro de ficción
erróneas
consta de una serie de láminas ilustradas y sin palabras, cuya
RFI. Número de fonemas 15,74 16,41
trama involucra a un niño y a un perro en la búsqueda de su
erróneos
rana perdida y los personajes y las aventuras con las que
K-BIT. Cociente de inteligencia 102,54 9,56
se encuentran durante este proceso. Las 24 láminas presen-
no verbal
tan una secuencia de eventos, con un cierto predominio de
acciones simultáneas e imágenes difusas. Esta complejidad DT: desviación típica.
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160 V. Acosta et al
3
Análisis discriminante
Distancias
Este análisis permite descubrir qué instrumento o instrumen- 2
tos discriminan entre los 2 grupos. Al ser 2 grupos resulta
una única función (lambda = 0,12; 2 = 100,74; p = 0,001).
El resultado de la prueba de Box indicó que las matri- 1
ces de covarianza poblacionales de los grupos eran iguales
(p = 0,06). La matriz de estructura, que muestra las variables
ordenadas por el tamaño de la correlación con la función 0
obtenida, aparece en la tabla 3. 0 1 2 3 4
Los instrumentos que tienen mayor peso en la clasifica- Disparidades
ción de los participantes son las dos subpruebas del CELF-3,
Figura 1 Ajuste lineal de las disparidades y las distancias en
que miden los procesos de expresión y comprensión lingüís-
el grupo de sujetos normales.
ticas, resultando la aportación de todos significativa, tal y
como puede verse en la tabla 4, a excepción de los resul-
tados obtenidos mediante la tarea narrativa referidos al
Número total de oraciones y Número total de mazes. Estos Escalamiento multidimensional y análisis de
signos negativos podrían explicarse porque en la contabi-
conglomerados
lización de las oraciones se incluyen las simples, mientras
que los problemas de fluidez constituyen rasgos que están
Cumplimos con el objetivo de descubrir la estructura repre-
presentes solo en algunos subtipos de TEL.
sentacional que corresponde a cada grupo en relación con los
La función canónica discriminante obtenida permite cla-
resultados obtenidos en los diferentes instrumentos de eva-
sificar correctamente al 100% de los casos, tal y como se
luación. En el análisis se eligió la solución de 2 dimensiones,
ilustra en la tabla 5.
1,5
CELFLRPC
1,0
CELFLRPC
0,5
Dimensión 2
NARRAOC
ITPAAAPD
0,0 NERRORGRANNT NMAZESNT ITPAAVPD
RFINPE NARRANTO
–0,5 RFINFE
–1,0
PPVTPD
–1,5
–2 –1 0 1 2 3
Dimensión 1
puesto que se parte de la idea de que hay 2 rasgos prin- grupos de instrumentos el otro polo de la primera dimen-
cipales en la identificación de los TEL, siguiendo parte de sión.
la propuesta de Rapin y Allen (1987), que son los subtipos A través de la aplicación de un análisis de conglomera-
de trastorno fonológico-sintáctico y trastorno léxico- dos a nuestros datos, obtenemos los conglomerados de la
sintáctico. El valor del Stress, que indica la bondad de ajuste figura 3, que corroboran lo obtenido en el análisis de esca-
del modelo, fue igual a 0,0383. La proporción de varianza de lamiento multidimensional.
las disparidades, que es explicada por sus correspondientes A partir de estos conglomerados, se pueden separar a
distancias (denominada habitualmente RSQ), resultó igual los participantes en perfiles diferenciados, con TEL y nor-
a 0,9960, lo que indica un ajuste aceptable. La figura 1 males (fig. 4), resultando la clasificación sin falsos positivos
muestra el ajuste a una función lineal, al considerar las ni negativos, tal como se observaba en el análisis discrimi-
distancias y las disparidades en el grupo de sujetos norma- nante.
les. Como puede observarse, los datos presentan un gran Si se atiende al cruce cromático de dendrogramas (el
ajuste a la función lineal, especialmente en valores medios y color más oscuro representa las características del TEL), se
altos. obtiene la representación que aparece en las figuras 5 y 6.
La configuración de estímulos derivada de este aná- Como puede observarse, hay una importante diferencia
lisis aparece en la figura 2. Se aprecian 4 grupos de cromática entre los niños del grupo TEL y los del control. En
instrumentos diferenciados, unidos en 2 dimensiones: por este último grupo (fig. 5), los casos 43, 45 y 53 son los que
un lado los CELF y el Peabody (dimensión 1); por otro, un tienen un perfil con algún patrón lingüístico alterado.
segundo grupo conformado por los 2 RFI; un tercero, por los En cuanto al grupo con TEL (fig. 6), lo primero que hay que
mazes, los errores gramaticales y las oraciones compues- destacar es su enorme heterogeneidad. En las definiciones
tas, y un cuarto grupo de instrumentos conformado por los clásicas de este trastorno ya se sugiere dicha caracterís-
ITPA y el total de oraciones, configurando estos 3 últimos tica (p. ej., en la que propone la American Speech Language
0 5 10 15 20 25
RFINPE 6
RFINFE 7
NARRAOC 8
NMAZESNT 10
NERRORGRANNT 11
ITPAAVPD 4
ITPAAAPD 5
NARRANTO 9
CELFLEPC 2
CELFLRPC 3
PPVTPD 1
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0 5 10 15 20 25
48
49
52
41
39
51
54
55
42
50
46
38
47
44
36
40
37
56
43
45
53
12
22
23
17
9
25
4
3
13
35
33
27
29
28
31
19
20
1
15
2
7
6
10
30
16
11
5
18
34
8
21
24
26
Figura 4 Dendrograma que representa los conglomerados de participantes. Los TEL aparecen con los números 1 al 35, mientras
que los normales son del 36 al 56.
Hearing Association) que, en definitiva, lo que nos viene a de Haynes y Naidoo (1991), en la que agruparon a 156 niños
sugerir es que el trastorno puede afectar de manera desi- en 9 subgrupos distintos; la de Fletcher (1991, 1992), en la
gual a los componentes del lenguaje, a todas o a algunas de que se identifican 4 subclases de TEL a partir de un pequeño
sus dimensiones, o a todas o a algunas formas comunicativas grupo de 15 niños. Recientemente, el grupo de investigación
(Mendoza, 2001). dirigido por Gina Conti-Ramsden (Conti-Ramsden y Botting,
Con nuestros resultados podemos establecer diferentes 1999; Conti-Ramsden, Crutchley y Botting, 1997) ha inten-
subtipos de TEL. Así, lo que parece predominar es un primer tado registrar subgrupos específicos de TEL con una amplia
subtipo léxico-sintáctico, en los 2 extremos de la figura 6, muestra de participantes, a los que se les ha sometido a
caracterizado por algunos problemas articulatorios y en la una completa evaluación del lenguaje. Finalmente han pro-
fluidez, pero también viéndose afectadas las vertientes de puesto 6 subtipos: a) niños con buena articulación pero con
identificación y conceptualización léxicas y de la morfosinta- problemas en la comprensión morfosintáctica; b) niños
xis. Los otros 3 agrupamientos podrían encuadrarse dentro con dificultades en el lenguaje expresivo, incluida la fonolo-
del subtipo del trastorno fonológico-sintáctico con la pro- gía y una pobre capacidad para la lectura de textos; c) niños
ducción del habla alterada y una sintaxis deficiente. con dificultades fonológicas y expresivas; d) niños con difi-
cultades expresivas severas; e) niños con problemas en todos
los componentes del lenguaje, y f) niños con dificultades
Discusión semántico-pragmáticas.
Dentro de este panorama confuso situamos el presente
El estudio de los TEL ha venido señalando la presencia de estudio, que ha pretendido ofrecer alguna respuesta a
una diversidad de problemas que pueden agruparse en torno 2 grandes interrogantes ya planteados anteriormente. En
a esta etiqueta sin que, finalmente, exista una propuesta primer lugar, qué instrumentos nos ayudan a identificar y
ordenada y clara teniendo en cuenta diferentes subtipos. diferenciar con mayor precisión niños con desarrollo típico
Las contribuciones de Rapin y Allen (1983) y de Rapin y niños con TEL, y en segundo lugar, cuáles son las caracterís-
(1996) se basan en observaciones clínicas y en la revisión ticas subyacentes más relevantes que nos permiten agrupar
de la literatura, respectivamente. Con el paso de los años, a los niños con TEL en diferentes subgrupos.
otros muchos estudios han intentado proporcionar nuevas Como respuesta a la primera pregunta se podría decir que
propuestas de subtipos de TEL; de esta manera, nos encon- el instrumento que reconoce más claramente al TEL es el
tramos, entre otras aportaciones, con la de Wilson y Risucci CELF-3. El resto de herramientas utilizadas en este estudio
(1986), en la que ordenan a 93 niños con TEL en 7 subtipos; la nos ayudaron a describir mejor la tipología del TEL.
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52 52 23 23
17 17
41 41
9 9
39 39
25 25
51 51
4 4
54 54 3 3
55 55 13 13
42 42 35 35
50 50 33 33
38 38 27 27
47 47 29 29
44 44 28 28
31 31
36 36
19 19
40 40
20 20
37 37
1 1
56 56
15 15
2 2
43 43
7 7
45 45
6 6
53 53
10 10
A B C D E 30 30
Suj Suj
Conglomerado 16 16
11 11
Figura 5 Cruce cromático de dendrogramas para el grupo 5 5
control. El negro indica características propias del perfil TEL. 18 18
34 34
8 8
21 21
La respuesta a la segunda pregunta sugiere una distinción
entre 2 grandes subtipos de TEL. Un primer subtipo léxico- 24 24
sintáctico, en el que se producen limitaciones en 2 clases 26 26
de habilidades. Por un lado, todas las referidas a la com- A B C D E
prensión del significado transmitido por medio de oraciones Suj Suj
Conglomerado
compuestas en las que la disposición de las palabras, sus
inflexiones y su uso funcional resulta esencial; por otro lado,
Figura 6 Cruce cromático de dendrogramas para el grupo
los problemas gramaticales que pueden ser consecuencia de
TEL. El negro indica características propias del perfil TEL.
dificultades en el procesamiento. En resumen, las dificul-
tades se concentran en la comprensión de oraciones, en el
procesamiento y en la formulación sintáctica, en el conoci- Conclusiones
miento de las palabras y en las habilidades necesarias para
encontrarlas (problemas de acceso al léxico). Aunque somos conscientes de algunas limitaciones en
En un segundo subtipo se encontraría el trastorno nuestro trabajo, podemos señalar que se ha encontrado
fonológico-sintáctico con una afectación de toda la dimen- evidencia empírica en un doble sentido. En primer lugar,
sión formal del lenguaje, tanto en el plano expresivo como sabemos qué instrumentos son los que nos permiten un
en el comprensivo. Más concretamente se señalan los pro- mejor diagnóstico del TEL, con las consecuencias que ello
blemas en la fluidez verbal y en una articulación deficiente, tiene para una reducción importante de las herramientas
y las restricciones en la comprensión en función del aumento necesarias sin que se pierda la eficiencia en la identifica-
de variables como la longitud y la complejidad estructural. ción y en el diagnóstico de estos niños. En este sentido se
Por último, la morfosintaxis se caracteriza por la emisión sugiere el uso del CELF-3, y de manera complementaria el
de frases simples y la omisión de nexos y de marcadores RFI, las subpruebas de asociación visual y asociación audi-
morfológicos. tiva del ITPA, el Peabody, y el análisis de la sintaxis compleja
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164 V. Acosta et al
mediante el recontado narrativo. No obstante, sería desea- Fletcher, P. (1991). Evidence from syntax for language impairment.
ble validar estos hallazgos, por ejemplo, mediante juicios In J. Miller (Ed.), Research on child language disorders. Austin,
clínicos emitidos por los logopedas con experiencia en este Texas: Pro-Ed.
campo. Fletcher, P. (1992). Subgroups in school-age language impaired
children. In P. Fletcher, & D. Hall (Eds.), Specific speech and lan-
En segundo lugar, se confirma la existencia de al menos
guage disorders in children: Correlates characteristics outcomes
2 subtipos de TEL. Más concretamente, los subtipos léxico-
(pp. 152---165). Londres: Whurr.
sintáctico y fonológico-sintáctico. Con todo, aunque puede Gardner, M. (1979). Expressive one-word picture vocabulary test.
considerarse como una fortaleza el tener un rango de edad Novato, CA: Academic Therapy Publications.
amplio, desde los 4,6 a los 11,2 años, hay que recordar que Hammill, D. y Newcomer, P. (1982). The test of language
la tipología de los TEL puede no ser estable en el tiempo, es development-primary. Austin, Texas: Pro-Ed.
decir, el desarrollo de muchos de estos niños puede variar a Haynes, C. y Naidoo, S. (1991). Children with specific speech and
lo largo de su vida escolar y social. Por esta razón, resulta language impairment. Oxford: Mac Keith Press.
imprescindible la realización de estudios posteriores utili- Kaufman, A. y Kaufman, N. (2000). Test breve de inteligencia de
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