una noche toda llena de perros a la luna,a la luna pálida perfumes, de murmullos y de y el chillido música de älas, de las ranas, Una noche sentí frío, era el frío que tenían en que ardían en la sombra en la alcoba nupcial y húmeda, las luciérnagas tus mejillas y tus sienes y tus fantásticas, manos adoradas, a mi lado, lentamente, contra mí ¡entre las blancuras níveas ceñida, toda, de las mortüorias sábanas! muda y pálida Era el frío del sepulcro, era el como si un presentimiento de frío de la muerte, amarguras infinitas, Era el frío de la nada... hasta el fondo más secreto de tus fibras te agitara, Y mi sombra por la senda que atraviesa la por los rayos de la luna llanura florecida proyectada, caminabas, iba sola,iba sola y la luna llena ¡iba sola por la estepa solitaria! por los cielos azulosos, infinitos y Y tu sombra esbelta y ágil profundos esparcía su luz blanca, fina y lánguida, y tu sombra como en esa noche tibia de la fina y lángida muerta primavera, y mi sombra como en esa noche llena de por los rayos de la luna perfumes, de murmullos y de proyectada músicas de alas, sobre las arenas tristes se acercó y marchó con ella, de la senda se juntaban. se acercó y marchó con ella, Y eran una se acercó y marchó con ella... ¡Oh y eran una las sombras enlazadas! ¡y eran una sola sombra larga! ¡Oh las sombras que se buscan y ¡y eran una sola sombra larga! se juntan en las noches de ¡y eran una sola sombra larga! negruras y de lágrimas!... Esta noche José Asunción Silva solo, el alma llena de las infinitas amarguras y agonías de tu muerte, separado de ti misma, por la sombra, por el tiempo y la distancia, por el infinito negro, donde nuestra voz no alcanza, solo y mudo