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GOHISION ECONOMICA PARA AMERICA LATINA EL DESARROLLO BOONONTCO DE LA SADXICA LATINA SUS PRINCIPALES PROBLEMAS PAOLOGO El Consejo Econémico y Social, el crear 1a Comisién Sconémica para ‘mSrica Latins, establecié como una de las principales funciones de esta Altima, el "realizar o promover investigaciones y estudios sobre les problemas econémicos y técnicos y sobre el desarrollo econtuico y téenico dentro del territorio de América Latina ... " Considerando 1a inportancia que tiene! la prosociéa de este género de estudios, se auspicié la realizacién del trabajo que Leva por titulo "Zl Desarrollo Zconémico de 1a américa Letina y sus Principales Probimas", preparado especialmente para 1a Comisién por el Profesor Ratil Prebisch, distinguido economista argentino, quien rene, a wmrecia cultura econénica, una vasta experiencia adquirida por el contacto directo con Jas actividades econtmicas. Bl tyabajo del Profesor Prebisch, fruto de largceafios de estudio ¥ meditacién, es sin duta una aportacién en el campo de las investigaciones econémicas y se presenta en esta ocasién bajo su responsabilided personal, 7/58 de ecperarse que La publicdcitn de esve documento Be de eoperer estimle el interés hacia 1a investigacién econdmica en los " pafses latinoaniertcaios, y-que provogue en el futuro, 1a aparieign de otras obras que como eta, intente explicar una serie de problemas fundamertales en 1a economta de los pafses latino americanos, cuyo planteamlento.en sus términos corrects, es tuna necestded de cerdeter inaplacable, Gustavo Martinez Cabafias Secretario Ejecutive UNRESTRICTD: 2/0N.12/89 ‘14 de Mayo de 1949 ORIGINAL: SPANISH EL DES/RROLLO RCONGHICO DE LA_ANERICA LATINA Y SUS FRINCTFALES PROBIZMAS Parte Primera 1, Introduced én. 1, La realidad esté destruyendo en la Anérica Latina aguel pretérito esquema de 1a divisién internacional del trabajo que, después de haber adquirido gran vigor en el siglo XIX, segufa prevaleciendo doctrinariamente hasta muy avanzado el presente, Bn ese esquana a la América Latina venfa a corresponderle, como parte de la periferia del sistema econémico mundial, el papel espectfico de producir alimentos y materias primas para los grandes centros indus triales, No tenfa allf cabida la industrializacién de los pafses nuevos. Los hechos 1a estén imponiendo, sin embargo. Dos guerras en el curso de una generacién y una profunda crisis econémica entre elas, han denostrado sus posibilidades a los paises de Ja Anérica Latina, ensefiénioles positivemente el camino de la actividad industrial, La discusién doctrinaria, no obstante, dista mucho de haber terminado. In materia econémica, las ideologfas suelen seguir con retraso a los acontecimtentos 0 bien sobrevivirles demasiado. Es cierto que el razonamiento acerca de las ventajas econénicas de Ja divisién interactional del trabajo es de una valides teérica nobjetable, Pero suele olvidarse que se basa sobre una premisa terminantenente contraddif por los hechos, Segtn /esta premisa, fon. 12/89 Pag, 2. ue esta premisa, el fruto del progreso téonico tiende a repartirse parejamente entre teda 1a colectividad, ya sea por la baja de Jos precios o por el alza equivalente de los ingresos, Mediante el intercambio internacional, los pafses de produccién primaria obtienen su parte en aquel fruto, No necesitan pues industrializarse, Antes bien, su menor eficiencia les harfa perder irremisiblenente las ventajas clésicas del intercanbio, La falla de esta premisa consiste en atribuir cardeter general a lo que de suyo es my circuscripto, Si por colectividad 8610 se entiende el conjunto de los grandes pafses industriales, es bien cierto que el fruto del progreso técnico se distribuye gradualmente entre todos los grupos y clases sociales, Pero si el concepto de colectividad también se extiente a la periferia de la economfa mundial, aquella generalizacién lleva en sf un grave error, Las ingentes ventajas del desarrollo de la productividad no han Llegado a 1a periferia, en medida comparable a la que ha logrado disfrutar la poblacién de esos grandes paises, De ahf las diferencias, tan acentuadas, en los niveles de vida de las masas de éstos y de aquélla, y las notorias discrepancias entre sus respectivas fueraas de cepitalizacién, puesto que el margen de ahorro depende primordislmente del -ausentio en 1a productividad, Existe pues manifiesto desequilibric, y cualquiera que fuere su explicacién o el modo de justificarlo, se trata de un hecho cierto, que destruye la premisa b&sica en el esquema de la divisién internacional del trabajo, De abf ol significado fundamental de 1a intuetrializacién de los patses nuevos, No es olla un fin en sf misma, sino el finico medio de que dispoien éstos para ir ceptando una parte /del fruto xyen.12/e9, Page x del fruto del progreso téenico y elevando progresivanente el nivel de vida de las masas, 2, Se encuentran pues los paises de América Latina frente a un problema general muy vasto, en el cual convergen una serie de problemas parciales, a plantear previammte, para ir trazando Juego el largo camino de investigecién y accién préctica, que habré de recorrerse, si se tiene el firme designio de. resolverlos, Serfa premataro, en este priser informe, formilar conelusiones cuyo valor serfa el dudoso de toda inprovisacién. Bs fuerza reconocer que en 1oe'paises Latincasericanos queta mucho por hacer, en esta materia, tanto en el conocimiento de los hechos mismos, como en su correcta interpretacién teérica, A pesar de tener estos pafses tantes problemas de indole seuejante, ni ten siguiera se ha conseguido abordar en comin su exanen y diluckdacién, No es de extrafiar entonces que prevalezca Trecuentmente en los estuiice que suelen publicarse acerca de la economfa de los pafses de América Letina, el eriteric 0 la experiencia especial de Jos grandes centros de Ja econonfa mundial, Mal cabrfa esperar de ellos soluclones que ros conciermen directamente, fs pertinente pues presentar con claridad el caso de los paises latinoasericanos, a fin de que us intereses, asyiraciones y fosibilidades, selvadas desde Iuego las diferensias y modalidades espect‘icas, ae integren atecuadanente, en fSrmtles generales de cooperacién econéaica internacional, Es por Jo tanto muy enplia la tarea que se tieie por delante y @rende a responsabilidad contraida, Paza afvontar le una y realizar metédicazente la otra, habrfa que comenrar por aquel planteanlento previo de los principales probients, con perapectiva de conjunto, expontendo a 1a vex clertas reflexiones generales, Jeugeridas nor worn? sugeridas por 1a experiencia directa de 1a vida econémica letinoamericanak Tal es el propésito de esta Introduccién, 3. Ia industrialicacién de América Latina no es incompatible con el desarrollo eficaz de la produccién primris, Por el contrario, una de las condiciones esenciales para que el desarrollo de 1a industria pueda ir cumpliendo el fin social de elevar el nivel de vida, es disponer de los mejores equipos de maquinaria ¢ instrumentos, y aprovechar prontamente el progreso de la técnica, en su regular renovacién, 1a mecanizacién de la agricultura implica ls misma exigencia, Wecesitamos una iuportacién considerable de bienes de capital, y también nevesitenss exporter productes primaries para conseguirla, Cuante m&s activo sea el camercio exterior de América Latina, tanto sayores serén las posibilidades de aunentar 1a productividad de ou trebajo, mediante 1a Antensa fomacién de copitales, La solucién no estd en crecer a expensas del conercko exterior, sino en saber extraer, de un conercio exterior cada vez nds grande, los elenentos propulsores del desarrollo econdateo, Si no fuera suficiente el razonsziento para persuadimos de 1a estrecha conexién entre el dessrrollo econéuico y el Antercambio, ciertos hechos que estén ocurriendo bastarfan para ponerJa de manifiesto, La mayor parte de los pafses latinoamericanos han aumentado intensamente su actividad econémica, y se encuentran en un nivel de ocupacién relativamente alto si se le compara con el anterior a 1a guerra, Este alte nivel de ocupacitn exige tanbién elevedes inportactones, tanto de artSeuloe de consuzo eet innediate com duradero, cuanto de materias primas y artfculos de capital, Y en muchos cascs, las exportaciones resultan insuficientes para satisfacer armélise seu” ‘sto es evidente cuando se trata de importaciones y otras partidas pasivas a pagar en délares. Hay ya casos notorios, en clertos pafses, de escasez de esta moneda, no obstante que los délares suministrados por Estados Unidos al resto del mindo, al realisar sus propias inportaciones, alcanzaron elevada cuantfa, 3s que el coeficiente de tales importaciones, con respecto al ingreso nacional de Estados Unidos, ha Llegado a ser exiguo (no pasa del 3 por ciento), al cabo de una baja persistente, Mo es de extraiiar entrnces que, @ pesar del alto nivel de ingreso nacional de ese pafs, 10s recursos en délares que asf provee a los pafses de Auérica Latina, parezcen ser insuficientes para cubrir las importacienes requeridas por su intenso desenvolvimiento, Es cierto que, conforne se restablezca la econcnfa de Europa, se podré aumentar pravechosamente el intercahtbio con ella. Pero de allf no saldrén més délares para Anérica Latina, a menos que Estados Unidos eumente su coeficiente de importaciones de artfculos europeos. Aqui se encuentra pues el factor principal del problema, De no aumentar dicho coeficiente, es obvio que smirica Latina se verta forzeda a desviar sus adquisiciones en Estados Unidos hacha aquéllos pafses que sumiristren las divisas pera pegerlas, Selucién muy precaria, por cierto, pues sigifica con frecuencia tener que optar en favor de importaciones mfs cares o inadecuadas para sus necesidaces, Serfa lamentable volver a caer en practices de este linaje, cuando acaso pudiera Jograrse una solucién fundamental, Suele Pensarse a veces dato el enorme potencial productive de Estados Unidos, es ilusorio suponer que este pais pueda aumentar ou coeficiente de imortaciones, peré dar al mundo esa solucién fundamental, No se justifica una conclusién sesejante, sin. el /previo andlisis 0% STéT pa — lo ‘opunm Tep oysex Tap ozvtd 07409 v so4zsU soATIOR nee ene ee { | SIO Sp CSTE Tp SEATOSST SOT US SOP SOpETET SOT ap UST T EG % oorzpap oquoyo Jog ot of 0g 09 on oot Z/oN,22/89 Pee ee previo anflisis de las causas que han llevado a Estados Unidos a reducir persistentemente su coeficiente de importaciones, Tales causas actéan en canpo propicio, cuando hay desocupacién, Pero no habiéndola, cabrfala posibilidad de stperarlas. Por donde se comprende 1a trasvendencia que tiene para Auérica Latina, asf como para todo el mundo, que el goblerno de Estados Unidos pueda cunplir su designto de mantener elf un alto nivel de ocupactén, kh. No se discute que el desarrollo econémico de ciertos pafses de Anérica Latina y su répida asinilacién de 1a téenica moderna, en todo cuanto fuere eprovecksble por ellos, depenten en alte grado de las inversiones extranjeras, El probleme no es nada simple, por todas les implicaciones que contéene, Entre sus factores negatives se recuerda, on primer lugar, el incumplimiento de servicios financievos, durante la gran depresién de los afios treinte, Zs opinién general qe ello no debiera repetirse, Encontramos aquf el mismo fondo que en el problema anterior, ‘Los servicios financieros de estas inversiones, si no se realizan otras nuevas pars compensarlos, deberaff pagarse con exportaciones en la misma moneda; y si ellas no crecen correlativamente, se presentaré, con el andar del tiempo, el mismo género de dificultades, Tanto n&s, si las expartaciones caen violentamente, como en aquellos tiempos. Por ello, y. mientras no se legue a Ja solucién fundamental referida, cabrfa preguntarse si no serfa Prudente orientar las inversiones hacia aquellas aplicaciones Productivas que, al raducir directa o indirectamente las importaciones en délares, permitan atender regularmente los servicios financieros. 5. in todo esto hay que precaverse de greralizacicnes dogméticas, Suponer que el cumplimiento de 10s pagos exteriores y el buen funcionamiento monetario dependen meramente de la decisién de seguir ciertas reglas del juego, entrafia un error de serias consecumcias, An en épocaa et que funcicnaba regularmente el patrén oro en los grandes centros, los pafse: de la periferia latinoamericana encontraron enormes dificultades pera mantenerlo y sus vicisitudes monetarias provocaron con frecuencia el anatema exterior, Experiencias posteriores, en paises importantes, han ensefiado a percibir mejor ciertos aspectos de 1a reolidad, Gran Eretafia, entre las dos guerra ha tenido contratieupos de clerto parecido con los que acurrfan, ¥ siguen ocurriendo en nuestros pafses, histéricamente refractarios a 1a rigides del patrén oro, Lo cual contribuye, sin dude, a la mejor comprensién de los fendneos de 1a periferia, 6, 1 patrén oro ha dejado de funcionar como sntes, y el manejo de la moneda se ha vuelto w4s complejo atin en 1s periferia, 2Es que todas esas complejidades podrfan dominarse con la firma aplicacién de 1a buna doctrina? Pero 1a buena doctrina, para estos pases, se encuentra todavia en una fase prinaria de su fomacién, He aqui otro de los problemas de trascendencia: aprovechar 1a experiencia particular y general, pare ir elaborando férmilas mediante las cuales 1a accién monetaria pueda integrarse, sin antagonismod ni contradiccianes, dentro de una polftica de desarrollo econémico intenso y regular. No vaya a interpretarse que las enseflanzas tradicionales carecen de valor, Si no bsindsn nomas positives, indican, al menos, lo que no puede hacerse sin comprometer la estabilidad de Ia moneda, Los extrenos a que se ha Llegsdo en 1a inflacién demuestren que la politica monetaria no se ha inspirado en esas. enseflanzas: como que, en general, clertos paises importantes do América Letina han aunentado su circulante més intensamente /que los paises mee que os patses obligados a ctbrir ingentes gastos de guerra, Este es otro de los aspectos del problena de la escasez de délares, Es cierto, cono se tiene dicho, gue el alto nivel de ocupacién acrecionta las importaciones. Pero no lo es menos que el crecimiento excesivo del circulante, en muchos casos, ha acentyado indebidamente la presién del balance de pagos, llevande a emplear las divisas en formas que no responden siempre a las genuinas exigencias del desarrollo econémico, Estos hechos tendrén que considerarse en el examen objetivo de las consecuencias del incremento inflacionario sobre el proceso de capitalizacién,. No se puede desconocer, sin enbergo, que en la mayor parte de los pafses latinoanericanos el ahorro esponténeo es insuficiente para cubrir sus necesidades mis urgantes de capital, Pero, desde Iuego, la expansién monetaria no tiene la virtud de aumentar las divisas necesarias para importar Dienes de capital, Su efecta es de mera redistribueién de ingresos, Hay ahora que averiguar si ello ha conducide a una mds activa formacién de capital. 7, Este punto es de importancia decisiva, La elevacién del nivel de vida de las masas depende, on dltima instancia, de una fuerte cantidad de capital por hombre empleado en 1s industria y en la produccién primaria, y de 1a aptitud para manejarlo bien, En consecuencia, se necesita realizar una enorme acumilacién de capital, Untrs los patses de América tatina, hay ya algunos que han demostrado su capacidsd de ahorro, al punto de haber podido efectuar, mediante su propio esfuerzo, gran parte de sus: inversiones industriales, Pere am en ese caso, que no es gene.al, la.formacién del capital tine que Lucher contra una tendencia my marcada hacia clertas modalidades de coneuno que /rachas veces ye muchas veces resultan incoupetibles con un alto grado de capitalizactén, Sin embargo, para formar e] capital necesario a la Andustrializacién y ol progreeo técnica de le agricultura, no parecerfa indispensable comprimir el consuto de 1a gran masa, que por lo general os demasiado bajo, Adonis del ahorro presente, Anversiones extranjoras bien encaminadas pedrfan contribuir al aumento innediato de la productividad por honbre, De mancra que, lograda esta mojorainicial, una parte importante del ineremento de producto sirvicra entonces pera fornar capitales, antes que destinaree a un consuma prematuro. Pero ,c6mo lograr aunentos da produetividad en magnitud sufictente? La experiencia de estos filtimos afies os aleccionadora, El crecimiento de la ocupacién exigido por el desarrollo industriel ha podido rcalizarse, aunque no en todos 10s casos, con el ompleo de gente que el progreso de 1a téenica iba desalojando de 1a produccién primaria y de otras ocupaciores, especialmente de clertos tipos de trabajos y sorvicios personales, de remneracién relativamente baja, y con la utilizacién del trabajo fenenine, La ocupacién industrial de gente desocupada o mal ocupada ha significado pues una mejor en 1a productividad, que se ha traducido en un aumento neto del ingreso nacionel, cuando factores de otra {ndole no han provocado un descenso general de la eficacia productiva, Gon Las grandes posibilidades de progreso técnico en 1a produccién primaria, afin en pafses en que es ya grande, y con ¢1 perfecchonamiento de las indistrias existentes, ol incremento neto del ingreso nacional podsfa ir ofreciendo un mergen de ahorro cada ves mayor, [Pero todo ello, 2/1/89 Pig. "10, Pero todo ello, y on la medida a que quiera reducirse la nycesidad del eporte exterior, supone un ésfuerzo inicial de capitalizacién, que no se concilia generalmente con el tipo de consumo de ciertos eectores de 1a colectivided, ni con la elevada proporcién del ingreso nacional, absorbida, en varios pafses, por ciertos tipos de gastos fiscales que no aunonten directa ni indirectemnte 1a produstividad nocionel, ‘Trétase, en fin de cuentas, de una manifestacién del conflicto Jatonte entro el propésite de estmilar con premura modos de existencia ‘que los pafses de témmica ms avanzada hen ogrado progresivamente, mirced al aumento de su productivided, y las exigencias de una capitalizacién, sin le cual no nos ser& posible conseguir aumento somejante, 9. Por lo miswo que ol capital es escaso y su nocesidad my grande, habria que ecfiir su aplicacién a unciterio de estricta oficacia, que no ha sido f4cil seguir, dedas las circunstancias on las cuales se han desarrollado muchas industrias psra afrontar situaciones de energencla, Pero ol proceso no ha avanzado tén.o, que resuilte denasiado tartfe 1a correccién de ciertas desviaciones, ni sobretodo imposible evitarlas en lo futuro, A tal propésito, es necesario definir con precisién ol objeto que se persigue mediante Ja intustrielizacién, Si se 2a considera como el medio de 2egar 9 un Adee} de autarcuta, en €1 cual 1as consideraciones sconémicas pasan a segundo plenc, sera admisible cualquier industria que substituya ¢ Amporteciones*. Pero si el prosésite consiste en atnentar lo que se ha Larade cat justeea el bicnestar mensuratle de 13 masas, hay que tener pregentes los lisiites mis all4 de los : au. 4017 Pride cuales una mayor industrializacién poiria sigaificar merma de productivided, En otros tiempos, entes de la gran depresién, Jos patses de América Latina erecieron impulsados desde afuera por el crecimiento persistente de las exportaciones, Nado autoriza a suponer, al menas por ahora, que este fenémeno haya de Tepetirse, con andloga intensidad, salvo en casos my perticulares, Ya no se presenta la alternativa entre seguir creciento vigorosamente de ese modo, o bien crecer hacia adentro, mediante la industrializacién, Bota Stina ha pasedo a ser el. modo principal de crecer, Pero ello no significa que 1a exportacién primaria haya domerificarse para favorecer el desarrollo industrial; no sélo Porgue ella nos sutinistra las divisas con las cuales adquirir Jas Amportaciones necesaries al desenvolvimiento econéuico, sino también porque , en el valor dé lo exportado, suele entrar en una proporcién elevads la renta del sucle, que no implica costo colectivo alguno, Si con el progreso téenico se logra aumentar Ja eficacia productora,.por un lado, y #i la industrializactén ¥ una adecuada legislacién soctal, van elevando el nivel del salario real, por otro, se pairé ir corrigiendo gradualmente el desequilibris de ingresos entre los centros y la periferia, sin desmedro de esa activided edonéaica esencial, 10. Encuéntrase aqui uno de los Unites de 1s industrializacién, que conviene considerar atentanente, al esbozar los planes de desarrollo, Otros de los 1fmites esté dado por consideraciones relativas a 1a dimensién éptima do las caprosas industriales. Tm los pafses de América latina se esté tratendo, por lo general, de desarrollar 4 un lado de 1a frontora las misuas industrias que al otro, Ello tiende disminuir la eficacta productora y /conspira areas . Pag. 12, persigue, conspire contra 1a consecucién del fin social que Zs una falla muy seria, que el siglo XIX supo atenuar en mucho, cuando la Gren Bretafie dexostrd, con heches, las ventajas de la industria, siguiéronla osros pafses, Pero el desarrollo industrial, aguijado por ura activa conewrencia, se realis6 en favor de clertas formas caractertsticas de especializaciéa, que elentaron un provechoso intercambio entre les distintos pefces, La . especializzeién favorecta el progreso técnico y éste permitia @istribuir crecientes ingrsos. Contrariamente a lo que ocurre cuando so trata de patses intustriales frente a petses de produceién primria, se cumplian las vontajes cldsices de 1s divisién del trabajo: de 1s divisign del trabajo entre iguales © casi giles. Ia posibilidad de que se Megue a malograr una parte importante del fruto del progreso técnico # causa de un excesivo fraccionamlento de los morcados, es pues otro de los limites del desarrollo industrial de nuestros paises, Pero lejos de ser infranqueable, es de aquéllos que una polftica clarividente de interdependencia econémica podria removar con gran bonaficio recfproco, , 1, Siem fines sociales, se trata de clever al m&ximo ol ingr-so real, las consideraciones anticfclicas no pueden faltar, en vn programa de dasenvolvimiento econémico, La propagacién a Ja periferia latinoamericana de las fluctuacicnes cfclicas de los grandes centros, implica cmsiderables netmas de ingreso. Si estas mermas pudieren evitarse, ol problema de 1a formecién de capital se Hiarfa menos diffcil, Ha habido ensayos de politica anticfelicas pero hay que reconocer que atin astames en los comimzos de 1a dilucidacién-de esto asunto, Més ofa, ol debilitamiento que est4 ocurrierido en les reservas motdlicas de 3/GN.12/89 Pag. 13, varios pafses significe que 1a eventualidad de wea contraceién de origen exterior, no sélo ve 8 sorprenderles sin plan de defensa, sino tasbién sin los recursos propios, netesarics pera fecilitar Jas medidas que las circunstancias aconsejan, Expuestos, en esta primera seccitn los Lineamientos de los principales problemas, las siguientes secciones explayarén algunos de sus aspectos més s2ientes, que ne sebria enitirse, tanto por su dntrinseca importencia, evanto por la necesidad de dar comienzo a su investigaetéa sistenttica, Son bien conocidas las dificultades que s¢ oponen en Iatinoamérica a una tarea te neturaleza, Acaso le principal de cllas sea el nfitoro exiguo de economistas capaces de penetrar con criterio original en les fenémenos concretos latinoamericanos, Por una serie de razones, no se logra suplir su carencda con la formacién metédics de un aimero adecuado de houbros jévenes de alta calificacién intelectual, £1 enviarlos a las grandes universidades de Suropa y Estates Unidos representa ya un progreso considerable, pero no suficiente, Pues una de las falas nfs conspicuas de que edolece 1a teorfa econémica general, contemplada desde la periferia, es su fals> sentido de universalidad, ah pote pratenderse, en verdad, que los economistas de os grandes paises, enbargedos on my serios problemas propics, vayan a dedicar preferentenente su atencién al estudio de los nuestros. Concierne primortalnente a los propios econonistas ‘Jatinoamericenos el conccimtento de la r alidad econémica de Anérica latina, Solo si se llega a explicarla racionalmente y von objetividad cientffica, serd dado alcanzar férmilas eficace: de aceién préctica, Wa se interprete, sin enbsrgo, que este propésite esté aninado de un particularismo excluyente, Por lo contraric, solo se sabré cumplirlo mediante un sélido conccimiento de 1as teortas elaboradas 3/CN;12/89 Page Use en los grandes pafses, con su gran caudal de verdedes comnes, No hay que cenfundir el ccnocimiento reflexivo de lo ajeno con una sujecién mental a les ideas ejenas, de la que my lentamente estamos aprendiento a librarnos. /EL:_Ias_ventajas ayunese/ 8 Pag, 15, The las ventajas del, 0 técnico y los pafses de 1a periferta 1, Se ha afirmato en 1a parte precedente, que las ventajas det progreso téenico se han cmcentrade principalmente en los centros industriales, sin traspasarse a los pofées que forsan 1a periferia del sistema econémico mndial, Por cierto, que el aumento de productivided en los pafses industriales ha estimulado Ja demnda de productos primarios y ha enstitufde asf un elenento dinémico inporténtisimo, en el crecimiento ce América latina, Pero esto constituye asunto distinto del que se va a considerar en seguida, Th general, parece que el progreso técnico ha sido mis acentuato en le industria, que en Ja produccién primaria de los patses de 1a periferia, segin se hace notar en un reciente informe sobre las relaciones de precios,4/ mn cansecuencia, #4 10s procios hubieran descendido en armonfa con la mayor productividad 1a baja habrfa tenddo que ser mmor en los productos primarios, que en los industriales; de tal suerte, que 1s relacién de precios entre anbos hubiera ido neJorando persistentemente, en favor de los pats: de la periferia, conforme se desarrollaba la disparidad de productividades, De haber ccurride, este fenémeno habria tenido un profundo significado, Ios pafses periféricos habrfangprovechato, con la misma intensidad que los pafses céntricos, la baje en los precios de los productos finales de la industria, Por tanto, Jos frutos del progroso téenico se hubiesen repartido L/ Post War Price Relations in trade between under-developed arid industrialized countries, United Nations, Economic and Social _ Council, E/CN. 1/Sub- 5/i.5, 23 February 15,9. ““” /parejanents ieee parejanante en todo el mundo, segtn el supuasto’Saplfeite on el esquema de la divisién internacional del trabajo, y América Latina no tendrfa ventaja econémica alguna en su -industrializacién, Antes bien, habrfa una pérdida efectiva, en tanto no.se alcansara igual eficacia productiva que en los pafses industriales, 108 hechos no justifican aquel supuesto, Como se advierte, por 1os fndices del Cuadro I, desde los ation sctenta del. siglo pasado, hasta antes de la segunda guerra mundial, la relacién de precios so ha movido conetantesiente en contra de la produccién primaria, Es de lanentar que los {indices de proci.os no reflejen las variaciones de calided ocurridas en: Jas productos finales, Por ello no he sido posible tenerias en cuenta en estes constdcracicnes, ‘in los aflos treinta, :s610 podfa comprarse el 63 por clento de los prodictis' finales: dé 1a industria que so compraban en los afios sosenta del siglo pasado, con la misma cantidad do productos prinarios;o ¢ea que.se necesitaba en término medio el 58,6 por ciento mis 6 productos: primarios, para comprar la misma cantidad de artfcules fitales de le industria2/ ta relacién de precios se ha movide, prio, én form. adversa a 1a periforias contrariamente a lo que hubiera sucedido, ei los precios hubiesen declinado conforme al descenso de costo provocado por el aumento do productivided, 0 Ss Durante el auge dé ‘1a ‘Witim guerra,. copo:en.todo auge ofclico, ‘a relavién se ha wovido'en'fivor de los’produetos privarios, Pero, sin haber sobrevenide ima cantrdeetén, se est operando ya el tfpico reajuste, merced’ sl cual ‘ios precios primrios van perdiendo la ventaja anterlormente conseguida, EL sealer agiietla~ai sparidad de precios no implica abrir Y/ Sogtn el infome citado. Las cifras de los treinta Megan solenenta hasta 1938 inclusive, Los datos presentados sm Jos indices medios de precios del Beard of Trade pera las Amportaciones y exportaciones britdnicas, representativas de los precios mndisles de articulos primarios y manufacturados, B/ou 32/89 Pass it Guadro 2 Relacién entre 10s precios de productos primarics y artfeulos finales de 1a industria (precios medios de importacién Lexportacién respectivanente, de acuerdo gen los dgtos del Boer of Trade. {bese = 1676-00 290) Cantidad de artigales finales ce Perfoces sucaelg Go geri, chtaer Productos primarios, 1876 = 80 100 eal - 65 02,4, 1886 = 90 96,3 1s9h - 95 90,2 1896 ~ 1900 87,1 AgaL - 05 84,6 1906 = 10 85,8 qn - 13 85,8 dal - 3 67,3 1926 ~ 30 23,3 193 ~ 35 62,0 1936 ~ 38 64,2, 1946 ~ AT 63,7 Fuente: Post War Price Re2aticns in trate between underdeveloped and ivdustrislired countries, United Neticas, Economic and S2ciei, y Decunent E/QN.1/52b.3, 23 February 15h5. afon/32/49"” mE? juicio acerca de su significado, desde otros puntos de vista, Podria argilirse, en efecto, en lo torante a equided, que los paises que se esforzaron en conseguir un alto grado de eficacia técnica no tenfan por qu compartir sus frutos con al resto del mundo. De haberlo hecho, no se hubiera concentrado en¢los la enorme capacidad de ahorro que tienen; cabe preguntarse si el. progreso técnico Inbiese tenido, ein ella, el rituo tan intenso que ka caracterizads el desarrollo capitalista, De tedos modos, ahi est esa técnica proluctiva, a Cisposicién de quienes tengsn Ja aptitud y perseverancia pars asimilarla y ausater le productividad del propio trabajo, Pera todo ello es ajeno a est. Introduceidn, Zl propésito que se persigue es subrayar un hecho, al cual, no obstente sus considerables proyecciones, no suele d4rsele el lugar que le corr. sponde, cuanto se disvute el significado de 1a industrializacién en los pafses periféricos. 2, Un razonamiento sizple, acerca del fenéueno que corsntamos, nos permite formular lac siguientes considcracionoy: Primero: Los precios no han bajado confomie al progreso ‘écnico, pase mientras, por un Lada, el costo tendfa a bajar, @ causa dal aumento de 1a productividad, subfan, por otra perte, los ingzes¢s ce los enpresarios y de los factor-s productives, Cuando €1 asconso de los ingresos fué mfs intenso que el de 1a productividad, os precios subleren, en ves de beers Segundo: Si el crecimiento de los ingresos, en los centros industriales y en la periferia, hubiese sido proporcional al aumento de las respectivas productividedes, 1s relacién de precios entre los productos primarios y los productos finales de la industrie no hubiese sido diferente de la que hubjera exdstido, si os precios hubiesen bajado estrictamente de acuerdo con 1s productividad, Y dada la mayor productividaide la S/ctie 2/9 Pag. 19 industria, la relacién de precios se habria movido en favor de 1os productos primarios, Tercero: Cong, en realidad, la relacién segin se ha visto, 0 ha movido en contra de los productos primarios, entre 1os afios setenta del siglo pasado y los afios treinta del presente, os | abvio que los ingresos de los emresarios y factores productivos han crecido, en los centros, més que el aunento de productividad, y em la periferia, menos que ol respective aumento de 2a nisma, ih ottos términos, mientras los centros han retenido {ntegramente el fruto del progreso técnico de su indwtria, los patses de la periferia les han trespasado una part: del frute de #3 propio progreso téenico/ Véase 1o que se dice al respecto en el informe citedo, pags. Ls y Lis: Un empeoramiento, a largo plazo, en 1a relacién del intercambio, como el que ha afectado’s los productores prinsrios, durante prolongado perfodo, puede ser efecto de las diferencias en ol ritmo de aumento de le productivided en 1a produccién de artfculos primarios y manufacturados, respectivamente, Si pudiéramos suponer que el empeoramiento, para los patses de produccién prinaris, refleja ms rapido aumento de 1a productividad # los artfculos primarios, que en los nanufacturados, el efecto del eapeoramiento en la rélacién del Antercanbio serfa menos serio, desde luego, Significarfa solanente que, en la medida en qie los articulos primarios se exportan, los efectos de la mayor productividad se traspasan a los compradores de artfculos prinarios, en los patses més indutrializados, Ain cuando faltan casi completamente datos estadisticos acerca de los diferentes ritncs de atmmto de la productividad en ia produecidn primaria y en la industria manufacturera, esta explicacién de las variackones a largo plazo, en las relaciones de intercambio ..., puede descertar'se, No cabe duda que la productividad aumenté més répidanente en los pafses industriales, que en los de produccién primaria, Esto so comprueba por el mayor aumento en ol nivel de vida, durante el Jargo perfodo transourrido desde 1670, Por tanto, las variaciones observadas en la relacién del intercasblo no significan que la mayor productividad'de 1a produccién primaria se haya traspssado a Jos paises industriales; por el contrario, significa que los paises menos desarrollados, a través de 16s precios que * pagaron por ios artictloe manifacturados, en relacién con los ‘que lograron por sus prépios productos, sostuvieron crecientes niveles de vide en los paises indwstrializados, pero ain recibir, en cambio, em el precio de sus propios productos una contribucién equivalmte e su propio nivel de vida,# Pag. 20,” 3. Antes de expliicar la razén de ser de este fenémco, que tanta importencia tiene para América Latina, conviene examinar cémo se trasniten los efectos del incremento de productivided, Gon tal propésito, se presente un ejemplo ilustrativo en el Cuadro 2, en el cual se supsne que los fndices de productivided por honbre han sido mayores en la industria, qua en la produccifn primaria, . Pars sisplificar ot ejemplo, se ha considerado que ésta y aguélla intervienen por part.s iguales en el producto fine), Se supene, en un priner caso, que al aunentar la productividad, no suben Los ingresos de los empresarics y factores produ tives, sino que bajan los costos, Si:los precios descienden de acuerdo con los costos, 1a rebaja en los precios prinartos resulta menor que on los industriales, segdin sefialan los Indices correspondientes, Y en consecuencia, Ja relacién entre andes se ha movide en favor de los productos primarics, 0 sea de 100 a 16,7, sta es precisamente la relacién que hubiera permitids a los productores primarics participar, con igual intensidad que Jos industriales, en el incremento de Ja produceién final, mh efecto, si la productividad primarta aumenta de 100 a 120, y si con 100 as productos primaries se puede comprar ahora, como acaba de verse, 116,7 de productos finales de 1a industria, ello quiere decir que los productores primarics pucden adquirir ahora 140 de tales productos, en vez de los 100 de antes, o sea que obtienen un aumento de 1a misma intensidad que el ocurrido en 1a produccién final, aumento evidentemente, que también obtuvieron les productorse industriales, Estos resultados se alteran sensitlewente, cuando se varfen Jos ingresos, en el segundo caso, Supéngase que, en la industria, el incremento. de los ingresos es mayor que el increnento de la = ~ E/OH.12/89 Pag, 2 Cuadro 2, Ejemplo de la forma en que se distribuye entre el gentgo y la periferia el fruto del progreso técnico. Produccién Produccign Freduect “islacionss hae ig eS ae Beam Races aos nt 00 100 100 - 5 120 | 160 up - - Primer cago: Los costos disminuyen de acuerdo con la productividad y los pre- clos de acuerde con los costs, ain aumentar los ingresos. 190 wo | 100 200 100 83,3 62,5 Pah 16,7 87,5 se caso: Los costes disminuyen como en el aso anterior, pero los ingresos aumentan en la siguiente forma: 200 100 100 10 100 220 180 | 150 | 6 120 Precios resultantes después del aumento de ingresos 00 200(a) 100 100 200 9959 12,5 | 07,1 353 105 (a) Parte del precio correspondiente al valor agregado en la produccién industrial, /productividad yovagyes Produgtivided; y que en 1a produccién prizaria, asbos inerementos son iguales, En conszcuencia, la relaciéa de precios se mueve en contra de Ja produccién primaria, pasando de 100 a 93,3; de tal sanera, que los producteres prinarios, no obstante su aumento de produgtividad de 100 a 120, sélo pueden adquirir 112,0 de productos finales, cot ra 100 anteriomente, En cambio, un cdleulo senejante permitirfa demostrar que los productores industriales pueden adquirir shora 168 de productos finales, contrs 100 que adquirfan antes, Obsérvese que, mientras los productores primarios pueden sunentar sus adquisicioies de productos finahes menos intensamente de Lo que ha ainenteds su productividad, los produgtores finales se benefician mds de lo que corresponderfa al aumento de la suya, Si envez de suponer que los ingresos de la produccién pringzia han subido paralelanente a su preductividad, se hubiese supuesto un ascenso inferior, la relacién de precios, cemo ¢s Légico, se hublera deenejarade ms ata, en perjuicio de aquélla, Tl empeoramiento de 36,5 por ciento en la relacién de precios entre los aflos sesenta del siglo pasado y los aflos treinta del presente, sugiore 1a posibilidad de que haya ocurrido un fenémeno de este tipo, he 3a sintesis, si a pesar de vn mayor progreso +Senieo en la industria que en la produceién primarda, la rolacién de precios ha empeorado. para ésta, enwez de mejorar, parecerfa que el ingreso medio por hombre ha erecido en los centrog industriales, m4s intensamente que en los pafses productores de la periferia, No podrfa comprenderse la rasén de ser de este fendmeno, ain peldeicnarlo con el movimiento cfclico de 1a economta y la forma en que se manifieste en los centros y la periferia, Pues PHB 23, el ciele os 1a forma caracteristica de crecer de la economia capitalista y el aumento de productividad uno de les factores primarios de crecimiento, Hay, en el proceso cfslico, una disparidad contima entre ia domanda y Ja oferta globales de articulos de consumo terminados, en los centros cfeliccs, En la creciente la demanda sobrepasa a 1a oferta y en la menguante ocurre lo contrario, La cuantfa y las variaciones del beneficio estén intimament Ligadas a eso disperidad, El beneficio aumenta en la creciente; tiene asf a corregir el exceso de denanda, por el alza de ins precios; y disminuye en 1a monguante y tiende asf a corregir el exceso de oferta, por 1a baja de aquélirs. El beneficio se traslada desde 1os empresarios del centro a los productores primarics en la periferia. Cuanto mayores son la competencia y el tiempo que se requiere para acrecentar la produceién primaria, en relacién al tiempo de las otras etapa del proceso productive, y cuanto menores son las existenclas acumladas, tanto m4s grande es la proporcién del beneficio qe se va trasladando a la periferia, De ahi un hecho tipico en el curso de 1a creciente cfclica: los precios primrics tienden a subir ms intensamente que los precios finales, en virtud de 1a fuerte proporcién de los beneficios que se trasladan a la periferia, Si ello es asi, jo6mo se explicarfa que con el andar del tiempo y a través de los ciclos, los ingresos en el centro hayan crecido mds que en la periferia? No hay contradiccién alguna entre ambos fenémenos. Los precios pramarios suben con mas rapidez que les finales en la creciente, pers tambiéa descienden mas que éstos en 1a menguante, en forma tal, que los precios finales van apartémiose ; fprogresivamente E/CN.12/89 Pag. 24 progresivamente de los precios prinarios. Véanse ahcra las razones que explican esta desigualdad, en el movimtente cfclico de los precios. Se ha visto que el beneficio se dilata en le creciente y se comprime en 1a menguante, terdiendo a corregir la disparidad entre 1a oferta y la denanda, 34 el heneficio pudiera conprimirse en la misms forma en que se ha dilstado, no habria raz6n alguna para que ocurriera ese movimiento desigual. Ocurre precisamente, perque 1a comprenién no se realiza en esa forma, . La razén es muy sencilla, Durante 1a ereciente, una parte de los beneficios se ha ido transformando en aumento de salarios, por 1a competencia de unos empresarios con otros y la presién sobre todos ellos de las organizaciones obreras. Cuando, en 1a nenguante, el beneficio tiene que comprimirse, aquella parte que se ha transformado en dichos aunentos ha perdido en el centro su fluidez, en virtud de la conocida resistencia a la baja de los salarios. La prosién se desplaza entonces hacia la periferia, con mayor fuerza que la naturalmente ejercible, de no ser rigidos los salarios © los beneficios en el centro, en cirtud de las limitaciones en la competencia, Cuanto menos puedan comprimi.rse asf los ingresos en el centro, tanto mds tendrén que hacerlo en 1a periferia. La desorganizacién caracterfstica de las masas obreras en la preduccién primaria, especialmente en 1a agricultura de los paises de 1a periferia, les impide conseguir aunentos de salarios comparables a los vigentes en los paises industriales o mantenerlos con anplitud senejante. La comprensién de los ingresos - sean deneficios o salarios - es pues menos dificil en 1a periferia. De todos modos, atin cuando se conciba en la periferia una rigides pareoida a la del centro, ello tendrfa por efecto aunentar Ja datensidad de 1s presidn de éste sobre aquélla, Pues al no oe 5/oN.12/89 Pag. 25 comprimirse el beneficio periférico, en la medida necesaria para corregir la disparidad entre 1a oferta y la denanda en les centros eiclicts, seguirén acumléndose existencias de mercaderfas en 4stos y contrayéndose 1a produccitn industrial, y por consiguiente la denanda de productos prinarios. Y esta dismimucién de deanda Legeré a ser tan fuerte cone fuere preciso para Iograr la necesaria compreai6n de los ingresos en el sector primaric, EL resjuste forzado de Iss costes de la produceién primria, durante 1a crisis mundial, nos tustra acerca de la intensidad que puede adquirir este fenéneno, La mayor capacidad de las masas, en los centros cfclicos, para conseguir aumentos de salarioa en la crectente y defender su nivel en 1a menguante, y 1a aptitud de esos centros, por el Papel que desenpefan en el proceso productivo, para desplazar la presién cfelica hacia la periferia, obligande a comprimir sus Angresos mls intensamente que en los centros, explican por qué ‘los ingresos en éstos tienden persistentenente a subir con més fuerza que en los paises de la periferia, segin se patentiza en Ja experiencia de Anérica Latina. En ello esté 1a clave del fendnenc, segin el cual, les grantes centres industriales, no edlo retienen para sf el fruto de la aplicacién de las innevaciones téenicas a su propia econonta, sino que estén asimismo en posicién favorable y para captar una parte del que surge en el progreso téenico de 1a periferta. /UII, Anérica Latina. E/0N.12/89 Peg, 26 TIT, Anérica Latina y 1a elevada protuctividad de Estados Unidos 1, Betades Unidos es ahora el centro cfclico principal del mundo, como lo fué en ctros tiempos Gran Bretafia, Sa influeneda econémica sobre los otres pafses es manifiesta, Y en esa influencia, el ingente desarrollo de 1a productividad de aquel pais ha desampefiado papel inportantisimo, Ha afectado intensamente el conercio exterior y, a través de sus variaciones, el ritmo de crecimiento evontuice del resto del mundo, y la distribuci én internacional del oro, Los paises. de 1a Anérica Latim, con un: fuerte coeficiente de comercio exterior, son extrenadamente sensibles a esas repercusiones econémicas, Se justifica pues exaninar las Proyeccicnes de aquel fenémeno y los problemas que traen consigo, 2, Que los precios no han bajado conforme al aumento de la productividad en Estados Unidos, es un hecho conocido, al que recientes investigaciones de S, Fabricant han dado una expresién precisa. En el perfodo que abercan tales investigaciones, esto es, os cuatro decenios anteriores a la segunda guerra mundial, los costes de la produccién manufacturera han descendido, con ritmo regular y persistente, El moviniente de los precios no tiene nada de comin con ese ritmo, La creciente productividad no ha influsdo en ellos, sino en los ingresos, Los salarias han subido, a medida que bajaba el costo real. Pero no teda 1a mejora de la productividad se ha manifestado en ellos, pues una parte apreciable se ha reflejado en la disninucién de 1a jornada de trabajo, EL aumento de ingresos, provocado por 1a mayor productividad, se extiende, en mis o menos tiempo, a toda la actividad econémica, por el conocido proceso que no es del caso recordar. Actividades et las cuales el progrese técnico ha sido insignificante o no ha Jexistido #/0¥.12/89 Pég. 27 existido, como clertos tipos de sereicios, han aunentado tanbiéa, En algunos grupos sociales, el incrmento ha courrido con gran lentitud; mientras sus ingresos, en virtud de este proce: tanto, el resto de 1a colectividad disfrutaba de ventajas que, conforne e¢ fus produciendo el necesario ajuste, tuvo que ir eediendo a aquéllos. Pero los muevos aunentos de productividad fueron compensando, generalmente con ereces, lo que se iba transfiriendo a los grupos rezagados, No cabria detenerse a sefalar este hecho, si no diera un ejemplo bien Ulustrativo del tipo de aJuste que 1a industrializact: progresiva de Andrica Latina ird provocando necesarianerte. La Andustrializacién, al aunentar 1a productividad, hard subir los salarios y encarecerd relativanente el precio de los productos primarios, De este modo, al subir sus ingresos, 1a produccién prinaria inf captando en forma gradual aquella parte del fruto del progreso téenico que 1e hubiera correspondido por la baja de bezagados es olare que este ejiiste significaré pérdida de ingreso real en lor los precios. Como en ol caso de agucllos grupos social sectores injustridles, pérdida tanto mexor, cuanto ms pequefio fuere su cceficiente de importacionos; pero, en fin de cuentas, esa pérdida podrfa ser generosaner.te conpensada con el fruto de sucesivas innovaciones téenicas. 3, Se ha dicho en otro lugar que, pues los precios no siguen a Ia productividad, la industrialisacién eB el tnico medio de que disponen los paises de América Latina pare aprovechar ampliamente las ventajas del progreso téenico. Sin embargo, la teorfa cldsica habia encontrado otra solucién, Si las‘ ventajas de ls técnica no se propsgaban a través de Los predios, se extenderfan de igual modo, por medio de 1a elevacién de los ingresos. Acaba de verse que esto es precisamente lo que Joourris E/0N.12/89 Pag. 28 ocurrié en Estados Unidos, asf come en los otros grandes centros industriales, Pero no sucedié 1o mismo en el resto del mundo, Pard ello, hubjera sido esencial que en el. sundo ‘entero existiess la misma movilidad de factores de 1a produccién, que se produjo en el amplio campo de la economfa interna de aquel pais. sa novilidad es uno de los supuestos eseiciales de aquella teorfa, Pero, en 1a realidad, presentése una serie d2 obstéculos al fécil despiazamiento de los factores productives. Sin duda los salarios do Estados Unidos tan altos con respecto al resto del mundo hubjeran atraido grandes masas humanas hacis aquelle mcién, las cuales hubiesen influido muy desfavorablemente sobre esos salarios, tendiendo a reducir su diferencia con los del resto del mundo, Tal hubiera sido el efecto de 1a aplicacién do ura de las reglas esenciales del Juego cldsico: rebajar sensiblazente ol nivel de, vida de 1a poblacién de Estados Unidos. Basta enunciar este hecho para comprender qua 1a proteccién de exe nivel de vida, logrado trds mucho esfuerzo, tenta me prevalecer sobre las presuntas virtudes de un concepto académice. Pero las reglas clésicas del juego Forman un todo indivisible, ¥ nd se concibe 1égicamente como, eliminaa una de ellas, las otras puedan servir para extraer, de estas dltimes norms vibsolutas que regilen les relaciones entre los centros y los paises periféricos. 4, Es tanto mfs digno de reflexién este punto, cuanto que el miso progreso técnico de Estados Unidos, ten superior al del resto “del tiunto, hs tenido por conseousncia otra desviacién my importante de aquellas reglas, Segtn ys ve dijo, Estados Unidos ha ‘Liegado a un ba jisimo coeficiente ‘de’ importaciones, no msyor del 3 por ciento. En el “ affo 1929 era del 5 por ciento, Bi descenso no es un fenémeno nuevo, sito de larga data, En los tiltimos cion afios, el ingreso nacional Jexment.s B/cu.12/aq Pag. 29 aunenté alrededor de dos veces y media mis que las importacicnes, EL progres téenico es uno de los factores que mds contribuyen a explicar te fenémeno, Aunque parezra paradojal, la mayor preductividad ha contributdo a que aquel pate prosigs y acentile su politica proteccionista, después de haber aleanzado 1a etapa de nadures econémica. La oxplicacién es sennilla. El progreso ‘éenico, en una época determinads, no obra por igual en todas las industrias, Pero al extenter a las industrias de menor progreso los mayores salarios provocados por la gran productividad ee Les industriasavanaadas, las prineras pierden su posicién favorable Para competiy con industrias extranjeras, que pagan mencres salarios, Si se retuerda quo hoy Los sdlarics en Estados Unidos scn dos 0 dos veces y media mayores que en Gran Bretaiia, se tencré una idea del significado de este factorl Han necesitado ast FroterciGn actividades mis eficaces que las extericres, pero de menor productividad que e) nivel medio del propio pais. Por edenplo, no obstante el gran pertecctonaniente de Le técnica agricola, se ha necesitado proteger 1a agricultura, para defender algunas de sus rands, importantes en raaén de sus ingresos relativanente altos, comperedos con los de competidores extranjeros. Inglaterra siguié una politica dismetralmente opnesta, cuando 1o tocé obrar anteriormente come centro propulsor, Pero ne podrse afirmarse que volverfa a hacerlo y a desarticular su econonfa, si recorfiera nuevamente el misao camino nistérico. Los Estados Unidos constituyen una unidad econémica poderosa y bien integrada, ¥» en gran parte, 10 deben a su politica deliberada cuya tr cendencia se est4, pues, my lejos de desconccer. Pero ‘tampoee ba de ignorarse que ello ha traido, para el resto del mundo condiciones incompatibies con el funcionaniento de 1a econanfs, internacional, tal cémo éste existia antes de le primera Jquorra E/eN.12/89 Pag. 30 guerra mundial, cuando el centro britdnico practicaba las reglas del Juego en la moneda y el comercio exterter, 5. Es en estas nuevas condiciones de hecho de la economia Anternacioral donde ha conenzade a desenvolverse el proceso de industrielisacién de Anérica Latina, EL problena fundamertal estd en adsptarse a eses condiciones - en la medida en que no puedan transformarse ~ procurando encontrar nuevas reglas, concerdantes con le mueva realidad, Mientras ello no ccurra, seguiré prevaleciendo, con ligeras intermitencias, si se quiere, una tendencia tenaz hacia el desequilibrio, Su razén de ser radica en este hecho, Mientras en Estados Unidos, segin se ha visto, ha venido disminuyendo el cceficiente de impertaciones, en los paises de América Latina tiende a subir el coeficiente de importaciones en délares, obligdndoles tal subida a tomar medidas de defensa, para atenuar sus defectos. Son varice los notivos, Primero: Por lo mismo que el progreos técrico es mayor en Estados Unidos que en cualquier otra parte, 1a derianda de bienes de capital, que la industrializacién trae consigo, trata de satisfacerse preferentenente en eso pais, Segundo: El desarrollo téenico se manifiesta continuamente en nuevos artfoulos que, al modificar las forms de existencia de la poblacién, adquieren el cardcter de nuevas necesidades, de muevas forms de gastas el ingreso de Anérica Latina, que generalmente substituyen a formas de gasto interno. Tercero: Aparte de esos articulos, que representan innegahles ventajas técnicas, hay otros hacia los cuales se desvia 1a demands, en virtud de la considerable fuerza de penetracién de la publicidad consreial. Créanse nuevos guetos, que exigen inportactones, en doanodiy de gustos que podrian satisfacerse internamente, Que no es posible hacer bajar sistensticamente #1 coeficiente de importaciones, por un ladoy y dejarlo erecer 2ibrenente, por otro, bajo la influencia de los factores que scaban de verse, es una propesicién bien comprobada, en los graves acontecimientos de os afios treinta, Tenemos ahora suficiente perspectiva para comprender la significaciéa de tales sucesce y derivar de elice le ensefianta que entrafian, Pero antes se debe mencionar un hecho ads, Ya se ha expresado que la indzstrializacién de 1a América Latina, si se realiga con clarividencia, ofrecer4 1a posibiLidad Se eumentar gensiblenente el ingres nacional, al dar empleo mis productive a las masas de poblacién ahora enpleads en ocupaciones de escasa productividad. El aumento de ingreso conseguido hasta ahora, ya se esté viendo, significa acentuar 1a accién de aquellos factores sobre ‘1a demanda de importaciones en délares. Guanto nds aumenta el ingreso de estos pases, en consecuencia, mayor ge hace su necesidad de importaciones. Con 1o cual vuelve a plantearse la cuestién de la escasez de délares, cuya inportencia acotseja especial consideracién, /MW. 21 problena B/CN.12/89 Pag. 32 Iv, El problema de la escasez da délares Y_sus_repreevsiones on América Letina. 1, Tan pronto como ven aparceionde eiertes sintomas de un problema de escasez de déleres, es natursl dirigir la mirada al pasado, no muy lejand, en que los Estados Unidos concentraban en sus arcas una cantidad cada vez mayor del oro del mundo, com se comprueba en los grificos 1 y 2, Antes de la primera guerra, tenfan el 26,5 por ciento de las reservas mundiales ; y al comenzar 1a segunda, ya hab{an Logado al 50,9 por ciento; y si tien la terminaron con el 36,5 por ciento, estén ahora acrecentando _ otra vez su participacién, hasta llegar nuevanente alrededor de la mitad de dichas reservas, en 1948, La escases de délaros signifies que aquel pats no compra nercaderfas y servicios, ni presta dinero, en 1a medida en que otros pafses necesitan aquella moneda para cubrir sus necesidades, sean ono justificadas, Hay que acudir entonces a las reservas nonetarias y Ligridar délares o enviar oro a Estados Unidos, Por mfa que ests disminucién de reservas no tarde en provocar perturbaciones monetarias, la atraccién de oro hacia el centro efelico principal, si es persistente, no constituye un mero problena monetario: es 1a expresién manifiesta de un fenémeno dindmico mcho mds profunio, relacionado con el ritmo y el modo de crecimiento econémico de los distintos patses. Sogiin sea el tipo de eu propio crecimiento, 1a acoién del centro principal puede manifestarse, a través de las oscilaciones efclicas, en una tendencia continua a expulsar el oro que a 61 aftuye y estimular el desarrollo econémico dol resto dal mundo por el contrario, a atraerlo tenazmente con efectos adversos para las fuersas dindnicas mindisles. /®1 cantro cfclico + 5/0 412/89 Grético 1 Reservas de oro de Estados Unidos y del reste de}. mundo Bitlones de aélares. Estados Unidos. 43 19h Hotae De las tendencias de oro de Estados Unidos se ha eliminado la cifra de los activos netos a corto plazo en délares pertenecientes a los pefses del resto del mundo, puesto que ellos representatan haberes noretarics de estos y no de aquél. Dada'la gran cantidad de estos ectivos notos en clertos perfodos, los resultados del reajuste son importantes. For ejemplo en 1947 los Estados Unidos tendrfan el 60 del oro del mindo, en tanto que eliminando los cepésitos en délares, ou participacién se reduce al 48.6%. Para hacer este reajuste se ha procedido en 1a siguiente forma: a) desde ‘1931 en adelante y hasta el afio 1936 inclusive se han tomede los datos publicedcs por el Banking and Monetary Statistics, (Washington 1943) paginas 574 a 589 y, a partir de 1937, los del International Financ Statistics del International Monetary Fands(léekingeon, Jastery UH), Pee 150) ) Fara tos atos anteriores a 1991 se han calculado las cifras utilizando los saldos netos del novi de capitales a corto plazo segin los dates de los balances de pagos de Unidos publicados en fhe United States in The World Foonsmr, Bemonic Series No» 23, United States, Department of Comerce, Bureau of oreign and Lonestic Commerce - Appendix B, - Las partes de las curvas anterior a 1923 no ha pocide ser reajustada por falta de datos» El total mundial ha sido tomo del Federal Reserve Bulletin - hasta 1940, y de las Memorias Anuales del Banco Internacio: iz Ajusted de Basilea desde 19h0 en adelante. . Los datos para 1948 son freliminares, Todas las cifras han sido ca“culades a rasén de 35 délareg ba onza. 33 B/N Le] BY P4g, 33 El centro efelico briténice actué histéricamente en la primera forma, Tanbién lo hizo asf en los aflos veinte el nueve centro cfclico principal. Pero no en los treinta, en que prevalecié la segunda de estas formas y 1cs pafses del resto del mundo se vieron precisados a reajustar sus relaciones con aquel centro cfelico a fin de seguir creciendo, a pesar de la influencia depresiva de éste y su fuerte absorcién de metdlico. Los pafses de América Latina conpartieron duranente con Isa otros la experiencia de los afins treinta. Compréndese, entonces, que frente a los stntonas presentes de un mevo problena de escasez de délares, interroguen al pasado, con mejor perspectiva que antes, para cercicrarse de si Ins mismos factores que sbraron en aquella época tornan hoy a cotrar aliento. 2, ‘Tales factores consiernen, por un lado, a la manera en que ee reflejaron sobre el resto del mundo los fenémenee de contraceién y auge del centro ciclico principal, y por otro, al descenso sensible de su coeficiente de importaciones y otras partidas pasivas. Cuando el centre prineipal contrae sus ingresos, on 1a nenguante efclica, tiende a propagar la contraccién al resto del mundo, Si les ingresos de éste no bajan similténeanente, orn la misma intensidad, sino con cierto retraso, surge un desequilibrio en ol balance de pagas: el contro, per dieninuir mfs pronto sus Angresos, restringe tanbién sus importeciones y dends partidas pasivas con mis fuerza que el resto del mmie, con lo cual éste se ve forzado a enviarle cro. Si fuera consebible el equilibrio = que no lo es en la realidad efolica - el balance llegaria a nivelarse, cuando el descenso de los respectivos ingresos hubseso Legato « ser do 1a misma intensidad. fnés bien, B/CN.12/89 Pag. 3h Pugs bien, la contraccién efclica ocurrida en Estados Unidos, después de 1929, hubiera bastado para atraer gran parte del oro expuilsado on el auge anterior, segin acontecta t{picamerte en los ciclts del viejo centro principal. Pern enete caso, vino a obrar un factor, quo jam4s habfa operado en la experiencia britdnica: el descenso del coeficiente de importaciones. Este descenso cbedecié a dos hechos: 1a elevacisr: de las tarifas aduaneras en 1929, por una parte, y por otra, la baja mis intensa en loe precios de los productos primarios importados, con respecte a los productos finales de la industria (que son les que influyen preponderantemente ‘en el ingreso nacional). En el gréfico 3 puede apreciarse 1a intensidad de este fenémeno. El descenso del creficiente de importaciones, en el centro siclico principal, acentia 1a tentencia a la acumulacién ds ore, resultante de la contraccién de los ingresos, En efecto, las i Amportaciones descienden allf con mds intensidad atin que en el resto del mundo, y el desequilitric del balance se vuelve més adverso aun para este, No sélo se necesitarfa , como en el caso anterior, que los ingresos del resto del mundo se contrajesen con la misma intensidad que los del centro ciclico principal, para que el balance se nivelara, sino eon una intensidad mucho mayor, Los Angresos del resto del mundo tenérfan que caer por debajo de les dei centro cfclico principal, con tanta mayor fuerza, cuanto ms haya descendido ‘el coeficiente de importaciones y otras partidas pasivas. Ha de recordarse que estas otras partidas adenés de las importaciones, se redujeron también sensiblenente, en virtud de 1a cesacién dé los enpréstitos extericres de Estados Unidos, Después de haberse alcansado el punto minimo de 1a menguante, en 1933, sobrevino una nueva creciente. De acuerdo con la Ternmmtancta efeliaa. Grfico 3 2/2/89 Coeficiente de importacién de 1k ados Unidos (Relacién de las importaciones con respecto de los ingresos) Por ciento uae ee | meee | ee a 1920 25 30 35 40 15 Fuentes. Los datos de ingresos han sido tomados de National Income and its Composition, by S. Kusnegt, New York, 1941, para el Sonfate Tine one Statistical Abstract of the United States, 1948 para el perfodo 192-47 y de Economic Indicators, F February 1949 (UsS+ Government Printing Office, Washington, D, D.C.) para el afio 1948. Los datos de arpor eoee han sido tonados de Statistical Abstract of the United States y de Economic Indicator som eee” eoperiencia ciclica britdnica, ol tetro ofaliso-principal debis exptlsar oro, como habfa ocurrido, en efecto, en la espansién de los afios veinte, Sin enbargo, suoedié todo lo contrario, y las retervas monstarias de Estados Unidos erecieron con extraordinaris amplitud, aun elininando de las cifras, como se ha hecho en todos los grétices, la gran cantidad de fondos exteriores, qie, por otros notivos, fusron a depositerse en aslares en aquel pais. En ello desempefié su papel el descenso dei coeficiente referido, Para que el centro principal dejamde atraer cro, Aespusa do 1a contraceién, y conenzase a expulsarlo, hubtese sido necesario que sus ingresos crecieran mucho ms intensanente que los del resto del munto: con tanta amplitud, cuanta fuese necesaria pars compensar primero y sobrepasar después los efectos del descenso del cveficiente, Por eJeuplo, si el coefictente reduce a 1a mitad, los ingresos del catro principal tan de orecer al doble de los del. resto del munto, sélo para contrarrestar los efectos de tal reducctén, Lejos de haber ocurrido este crociulento relativanente myer, ‘los ingresos de Estados Unidos tarderon ms tieupo que los del. reato del mundo en slcanzar el nivel que habian tenido en 1929, si se jugs por lo acontecide en un grupo importante de pafses, segin es dable observar en el gréfico i. No os de extrafiar, entonc: acumléndos portinamente en el centro cfelico principal. Fué Angente, en efecto, 1a concetrackén de metélico en los Estados Unidos. Prdcticamente toda J produceién de rr> monetario del mundo, my abundante por eiento después de 1933, fué a parar a aquel pais, Las reservas del resto del mundo mds bien dechinaron Mgeranente, cotto se observa en sl cuatro T-2. 2/ Y/ So ban exaninado en el texto los factores concernientes & Estados Unidos que hicieron a este pels atrasr oro durante Los afigs treinta, Pero tanbién actusron factares consernientes al resto del mundo que tendieron & expulsar al om, tHenen gran impertantia los que se en las dos guezras mundiales. Loe Adades de E/cu.12/89 Page 36 S4 ol resto del mundo, en los treinta, se hubiera atenido en sa desarrollo econéitico, al solo estimlo proveniente de las Anportactones y denfs partidas pasivas de Bstatos Unides, al ascenso de los ingresos en aquél habria sido mucho menos intenso que en éste. La causa, como ya se sabo, reside en 3a accién deprediva de 1a baja del coeficiente, segin se dijo tantas ve Pero no sucedié asi, como acaba de verse en el grafico 3, puss, Los pafses allf representados aunentaron ous ingresos me amplimente que Estados Unido: Si estos pati 8, como los’ dends del resto dol mundo hubseren acrecentedo asf sus ingresos, sin modificar a su vex su coeficiente de inpertaciones, ¢s obvio euponer que, al poco tiempo, les habria sido tmpoasble continuar haciéndolo, sin grave menoscaba de sus reserves monatarias, Si ello no ocurrié, fué justanente porque, para atenuar la contracesén propagada desde el centro, ya habfan redueido antes su coefietente de importaciones y otras partidas pasives, y especialmente el de importeciones procedentes do Betados Unidos, io baf6 més que el de otras procedenciae.)/ Ello pemitié al resto del mundo no solamente sido exzuleado por una expansién inflacctonarta de los ingresos aqunl pats, considerablenouite nds fuerte que 1s ocurrida en realided, Baste menciorar este posibilidad pars descartarli Poro no f26 ese el unico fenéueno de rel'stribucién del ore, a rafs de anbag guerras. Una parte de) oro que los Estados Unidos iban recibiendo, fueron trespaséndclo a paises noutrales o que no participaban ectivarnate en el conflicto, pera ovurir gus saldos positivos do pasos. Se trata de un fonéner9 normal en el auge de un cantro vfelico, en el que portieiré la Snéeica Latina, con va fuerte exszimorto de sus reservas mo>{lices. Pero también es ratursl qzs gran parte del oro vuelva al centro cfclico, asf octzrié en la Prinera poste:erva, cuando sobrevino 1a contrscvién en Estator Unidos: Las crectontes y monguattes ¢{ztioas en al centro britdnics también se hablen carectorinade por este movimiento de taivén del oro, Hay ein emargcy una partict:rtdac on el retorno presente de. oro 21 1a Anérica Latina e S-tetea Unidos: qv ase retor: ha coicneado antes do tira centraceién on suuel pais. ‘lo 59 debe, com ne tiene dichey al crecimiento do las importeciones, provocadn por el alto grado de ocupacién y acentuado por fenéwencs inflactonariosy Y/ Véanse 10s gréficos para distintos paises, publicados on ‘he United States in the World Eeonony", plginas 67, 68 y Fe - urerico 4 Ingroso Nacional de Estados Unidos y de once pafses del resto dol_aunde (Alemania, Australia, Canadé, Dinamarea, Francia, Holanda, Japin, Noruoga, Nueva Zelendia, Reino Unidos y Suecia) Némeros {ndices: Base ~ 1929 = 100 Euentes. Datos tomados de National Income and its Composition, by S. Kusnezt, New York, 1941, para ol ingreso nacional de los Estados Unidos en el parfodo 1924-1928 inclusive (pags. 310-11); Statistical Kpstract of the United States, 1948, para ol perfodo 1929-38; World, Economic Deve: it, Effects on advanced industrial countries, by Eugone Steley, Montreal, 1945 para el ingreso correspondiente a B/N A2/ 89 Pag. 37 crecer en la form que se dije, aino tenbién, en varios casos, enplear parte de sus exportaciones en délares, para reducir sus deudas en los Estados Unidos, ePor qué el cooficiente de importeciones procedentes de ‘os Estados Unidos se redujo con mayor severidad, en el resto del mundo, que el coeficiente de todas sus importaciones? Con toda evidencia, porque el déficit en el balance de pages era mds agudo en el concerniente al délar. De haberse reducido las Amportaciones en otras monedas, con 1a misma intensidad que en ésta, los perjuicios que sufrié el comercio internacional en los afios treinta hubieran sido més graves avin, con la consiguiente pérdida elicional de ous veritajas clasicas. jCudles fueron las reacciones de América Latina ente los fenémenos acaecidos durante esos afics en el centro ciclico principal? No es el caso de repetir la crénica, por dem4s conocida, de la forma en que tales fenémenos se reflejaron en esta parte del continente, sino procurar extraer de ellos aquellas experiencias que pudieran esclarecer y definir lo qe nds convintere al. interés latincamericano. La reaccién latincamericana fué senejante a la de otros paises del resto del mundo: reducir el coeficiente de importaciones por medio de la depreciacién monetaria, 1a élevacién de los aranceles, las cuotas de importacién y el control de cambios. Jands se-habian aplicado seuejentes medidas, con el carfcter general de aquellos-tiempos. Como que ‘munca habfa surgido anteriormente un problema de escasez de Libr ) bajo Is hegemonia monetaria de:Lonires, La imperiosa necesidad de =2ducdr prontamente las importaciones y de contener el. 4xodo de capitales, ‘explican 1a répida difusién del control de cambios. Pero este no sélo fué un /iastrumento E/ON.12/89 Pag. 36 instrumento para restringir las inportaciones, sino también para desviar hacia otros pafses, principalmente los de Zurcpa, inportaciones que antes proventan de Estados Unidos por su menor costo y su mayor adecuacién a las necesidades de América Latina, Val podria negarse, por tazones formales, esta verdad evidento: ol control de cambios ha constitufdo, en muchos casos, un instranento "diecriminatoric" en el comercio internactenal, contrario a las ganas précticas que tanto habfan costado arraigar, mediante la aplicacién gensral de la cldusula de la mcién més favorecida, Pero es foraosn reconocer que al verse un pais privad> de los délares necesarios para pagar sus importaciones esenciales la nica salida a tan critica situacién parecis radicar en inpirtactones pagables en las monedas recibidas en pago de exportaciones, Si esae otras monedas hubiesen podido transformarse en délares, ol asunto bubiera sido my distinto, Pero 1a escasez de délares afectaba a todo el resto del mundcy y la campensacién multilateral terminaha por atollarse, cuando el salAo firel a pagar en esa moneda superaba a las disponitilidades. EL control de cambios no fué el resultaro de una tecria, sino una imposicién de Jas circunstancias. Nadie que haya conocido de cerca las compliceciones de toda suerte que eb sistena traje consigo, podrfa haber optado por él, de haberse presentado otras alternativas o haber estado en manos de Ins pafsos de América Latina la eliminacién de las causas profundas del mal. he Desgraciadamente estas se prolongaron demasiado, Traspuesto el mento nfs diffct de las crisis mundial, y en plenc restablecimiento econéaico, pudo pensarse en el abandono del control de canbios. Pero 1a form de fireionar del centro /efclico principal E/CN.12/89 Grfico 5 Reservas de oro de As Millares de délares ~ +++ Comprende siete pafses ——- conprende doce patses 1915 20 25 35 Nota. Como para los primeros afios de este perfodo, a partir de 1913, ‘slo se dispone de cifras para siete pafses (Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Perf, Uruguay y Venezuela) se he presentado la curva correspondiente hasta 2939, y a esta curva se le ha superpuesto otra con cinco pafses #45 a partir de 1929 (Colombia, Ecuador, Bl Salvador, Guatemala y México). Estas cifras corresponden solamente a las reservas de oro, Todos los datos estén expresados a razén de 35 délares por onza. Fuentes. Monetary and Banking Statistics, Washington, 1943 para el perfodo 1913-1936; International Financial Statistics, Washington 1949, para el perfodo 1937-39- B/GNaAz/ 89 Pag. 39 efelice principal fué alejendo esta posibilided. Baste cbservar el gréfico 5, relative a les reservas nonetarias de Anérica Latina para comprendar 1a indole de las dificultades, En general, se fuercn gastando en importaciones y otras partidas pasivas todos los délares que se incorporaban a las reservas, y atin enpleando parte de éstas en dichas Amportaciones. El control de cambios, como se dijo, cumplié La funeién de desviar hacia ctras partes las importacines que no lograban cubrir; n esa forma. Ya pesar de ello, no pudo evitar que el conjunto de reservas monetarias se mantuviese durante Ina afios treinta on un nivel sensiblenente méo bajo que en el decenio anterior. Tal fué el sentido del control de cambios, en aquellos ‘tiempos, Bien o mal manejado, constituys el instrumento de que phdo disponerse para atenuar las graves repercusiones de acontecimientes extericres sobre la actividad interna de los pafses Jatinoamericenos, Pero depués su funcién fué my dietinta, El control de canbine se ha enpleado y sigue empledndose en contener los efectos de 1a expansién Anflacionaria interna sobre las importaciones y otras partidas pasivas del balance de pagos. Es clarn que, en tal caso, eh control de cambios no corrige los efectos de la inflacién, sino que desvia 1a prosién inflactonaria hacia 1a actividad interna, acentuando el alza de los precios, Bn consecuencia, no cabrian las misnas consideraciones en un caso que en el otro, Les factores externos, que impusieren en 10s affos treinta el control de cambios, escapaban totalmente a la’ aceién de América Latina. En tanto que los hoy predominantes dependen de nuestra propia voluntad, como 1o han veconocido, una y otra vez, los gobiernos 1atinoanericanos fpreceupados como estén B/aN.12/89 Pag. 10 Preocupates como estén per la seriedad de este problema, 5. Pero resulta dificil, si no imposible, determinar hasta qué punte la escasez de délares que mevanerte afronta, en éstos fitinos tiempre varios pafses de la Anérica Latina, es norsecuencia del baje coeficiente de importaciones por parte de ins Estados Unidos, 0 de los fenémencs inflacionarics a que ya ee hizo referencia, Se ha explicado ya cémo el alto grado de ocupacién logrado en Anérica Latina requiere un volumen considerable se Amportackones on délares, Los Esta¢oa Unidos, per otro lado, al llegar en su ingreso nacional a una cifra elevadisina, han acrecentaio también sus importaciones de la Anérica Latina y de los dends paises del resto del mundo, En 1948, Llegaron las importaciones totales norteamericanas a 6900 millones ce délares, con un nceficiente de 0,03 por cionto, Al coeficiente de 0,05 por clentovregistrado en 1929, las importaciones habiien Llegedo a 12500 millones. Estas cifras reflejen le magnitud de os efectos que la baja del coeficiente ha producido. En pronto etn para decir si la participacién qve en tales Amportactones sorrespemte a América Latina baste o no para cubrir aquellas necesidades de importacién, Juntamente con las dends partidas pasivas que hay que pagar a Estados Unidos. No podria atin formarse juicio definitive. La informscién es todavia my deficiente y no permite oxaminar la compesicién de las importaciones, en el grado preciso para determinar qué cuant4a de au incremento ha sido provocada por 1a redietriducién do ingresos tfpica de ia inflacifa, Se evnocen, desde luegr, casos que vevelan haberse empleado cantidades aprecisbles de délares en irportacioms totalmente ajenas al prepésite de tatustrializaci4n o mecanizseién de 1a agricultura, pero no / sabria decivse B/cit.12/e9 Pag. Ud sabria decirse hasta qué pmto estos casos representan wn fenémeno general, 6, De todos modos, 10 que estd sucediendo en estos mouentos debiera ser objeto de muy especial atencién, Pere tomer un solo caso ilustrativo, mo deja de ser sintosftica la indole de las reconendaciones que la Comisién Técnica idxta Brasil-Estados Unides acaba de formar, en su interesante inforne sobre el Brasil, Hay una gran enalogla entre las medidas cve la misién contempla, en nateria de importaciones, y las que varios paises de la Anérica Latina se vieron forzados a tomar en 1os affos treinte, segin se recordé mfs arriba. No obstante el gran crecimiento de las exportaciones brasilefias en délares, la misién ha comprovado cue no son suficientes para atender las importeciones en le misne moneda, Aprueba pues la restriceién de las importaciones no esencieles, Por medio de aplicacién nfs eficas del sistema de control de cambios, y reconoce la necesidad de "obtener escs inportaciones esenciales, en cuanto sea posible, de paises de monedas débiles, con los cuales (el Brasil) ha tenido un balance favorable, afios recientes"; y agrega: "una medida que podrfa ayudar a reducir el total de inporteciones en moneda fuerte, pudiera consistir en wiz revisién, por las autoridades de control, de todas las compras en la zona del délar, que se proponen realizar los departamentos del gobierno del Brasil y las reperticiones axténomss, No deje de Monar 1a atencién cue, ea un informe de esta naturaleza, se preconice, no s6lo la restriccién de inportaciones 1/ Informe de 1a Comisién Técnica lixta Brasil-Estedos Unidos, Capitulo II. E/cN.12/69 Page 42 mediante el control de canbios, sino la aplicacién de medidas de tipo "discrininatorio" Si ello fuese solenente el reconociniento de una trensitoria necesided de elivier la presién del balance de pajoz, el caso no tendria mayor trascedencia, Pero si fuera la expresién de un hecho mis fundanental y persistente, habria motivo de seria preocupacién para los paises latinoanericanos. 7. Ya existe una experiencia suficiente para persuadinse de gue el conercio uultilateral es lo que mis conviene al descrrollo rica Latine. Poder vender y comprar en los mejores mercados respectivos, aunque sean diferentes, sin dividir e2 intercanbio en comparti:tientos estencos, constituye sin dude 1a férmula ideal, 51 cue les ventas a Surope heyan de eee componsarse estrictamente mediante coupras a ropa, y mAs atin a cada uno de los paises europeos, sin poder enplesr los seldos yera conprer en Zstedos Unidos lo que mejor satisficiere las necesidedes de nuestro desarvollo econénico, no es une solucién que Lleve en sf les innegables ventejas del multilaterelisno, is si lo compensecién miltilaterel he de ser practicable, necesitase cue Juropa tenga un sobronte de délares pore pager eu dente de compres en la Mnérica Letina, después de haber satisfeciio ous propias necesidades de importeciones norteamericanas, Us ésta, sin duda alguna, le dificultad gue he encontrado 1s Comisin Técnica iiixta Brasilwistados Unidos, 1 frente a ese déficultad, s6lo le quedaban abie:tos dos caminos: 0 el cue ha sugerido al Brasil; 0 el de recomendarle eplicer las wrestriceiones por igual a toes los paises, en desmedro, no s6lo de les exrortacicnes de cquellos paises con los cusles el Brasil tiene saidos fevorables, sino de la intensidad de su /ereckiento econdmico. Z/cH.12/89 Pag. 43 crecimiento econénico, 8, Parecerfa que los acontecimientos ocurridos en los afios treinta han dejado la conviccién de que no es posible esperar una solucién de cerdcter fundamental, en el conercio con Estados Unides, 2h efecto, si se mantiene el bajisino cocficiente actual de inportaciones, atin en la hipstesis favorables de cue perdure la ocupacién micima en aquel pefs, sus importaciones podrfan resultar insuficientes para resolver el problema latente de escase2 de délares, Si con mixima ocupacién, los’ ingresos erecen en lo futuro, a un ritmo que diffeiimente podria pesar en mucho de un 3 por ciento anual, un crecimiento peralelo en las Amportaciones procedentes del resto del mundo no podria significar alivio my sensible: Pero ies que no ha de adnitirse, en form algua, la posibilidad de que aumente el coeficiente de inportaciones en aquel pais, permitiendo que éstas crezcan con ritmo uhs répido que el ingreso nacional? Zsa posibilidad existe. La draccién persistente del oro hacia un centro cfelico principal s6lo se concibe teéricamente cuendo hay un m&rgen apreciable de fectores productivos desocupedos, Penénenos semejantes @ los aceecidos en los afios treinta no podrian repetirse, si los Istados Unidos consiguieran mantener su ccupacién méxima, y si el resto del mundo, estinuledo de este nodo por el centro principal, lograra tanbién aplicar una politica andloga de plena ocupecién de sus fectores productives en creciniento, Por lo que se dijo al explicar la experiencia adversa de aguellos afios, sino hublese existido plena ocupacién en Estados Unidos, el résto del mundo no hubiera podido mantener continauemtne, con respecto a aquel pets, un coeficiente de inportaciones, que no se ajustara el coeficiente ce Tstedos Unidos, con respecto al resto del mundo, puesto cue ningin pefs puede soportar un déficit permat ente en el balance de pagos. Pero habiendo ocupecién méxina, los hechos podrfen ocurrir de my distinta manera, Se justifica un breve razonaniento nara denostrarlo, Supéngage que, merced al coeficiente relativenente alto del resto del mundo, o si se cuiere, de 1c ampliacién de este coeficiente, en virtud de la industrializacién de América Latina, aunenta intensanente 1a demanda de exportactones de “Istados Unidos, Supéngase tanbién que, en virtud del crecimiento de los fectoves produciives, el increnento anual de ingresos es = fle 6,000, pare tomar cualcuier cifra, de los cuales 14,000 Corresponden @ los factores enpleadcs en las industrias de exportacién, pare satisfacer aquella gren denende, y los 2.000 restantes en las industrias destinadas a las necesidedes inte-nes, con un volenen equivalente de produccién. Ze obvio cue este volunen seré insuficiente pera atender la demande interna, provocada por el gesto de los 6,000 de ingresos, Habré pues un exceso de la deranda sobre la oferte, cue, no pudiendo satisfacerse inte:nanente, por estar tecos los factores plenanente ocupados, tendrd que cubrirse con iuvorteciones, haciéndolas crecer en la cuantia indispensable rare sctisfacer el déficit de produccién para las necesidades interes. Si los factores productivos no estuviesen rlenanente ocupados, el exceso de la denanda sobre la oferta tenderfe a estimllar prefeccntenente la produccién interna; y les ‘importaciones, iojos de crecer en 1a medida del exceso, como acaba de verse, tan sélo aunentarten en una exfgua cantidad [aw a nants 5/CH 12/89 Pag. U5 en la parte de ese exceso que apenas se manifiesta en denanda exterior, en virtud del bajisimo coeficiente de importaciones. Wo cabria extenderse en un razonamiento mis complejo, dado el carécter de esta resefis. Sélo debe sefialar cue, Para que actile un mecanismo semejente, seria indispensable que el resto del mundo pudiera suministrar a Estados Unidos el Aneremento de importacicnes requerido por su mayor demnda; de 1o contrerio, el proceso seria inflecionario, Por otro lado, se necesitaria edemis que los paises que aumentan su coeficicnte © acrecientan sus ingresos reales, pudieran contar con los recursos necesarios para afrontar desecuilibrios transitorios en sus valances de pagos, miontras reacciona el centro cfclico principal. 9. mm sintesis, al hallarse el centro eiclico en plena ocupacién, todo aumento de sus exportaciones hacia el resto del mundo, provocado por 1a accién de éste, iré acompafiado de un eumento correspondiente de las inportaciones (0 de otres partides pasivas); y el oro no tenderd a concentrarse en el centro, en desmedro de los dem4s paises. Bs claro que, pare ello, serfa indispensable que el centro no bajara su coeficiente de importaciones, Pero icué objeto tendria este medida, si ya estdn ocupados todos sus factores productivos? . Se comprende que, cuando existen factores desocupados, haya interés en aunentar la ocupacién, substituyendo Amportaciones por produccién interna, Se comprende igualmente que, atm habiendo plena ocupacién, un pais evite cue ciertes industrias de consumo intemo se vean sacriticadas por la competencia exterior, en favor de leg iniustries de exportacién, como sucedis en el centro ciclico britdénico cuvante el siglo XIX, Pero carecerfa de sentido econémico, en wn cacy do pena ocupacién, foajar en general ‘/ct! 12/69 23. 46 baJer en general el coeficiente de inportaciones 7 estimlar el desarrollo de ciertas industrias de consumo interno, 2 expensas de las wortaciones 7 exportaciones. TA censecuencia, sino Legere a entorpecerse e juego esponténeu de las fuerzas econdaicas, en un estado de plena y creciente ocupacién del centro efclico principal, se ebrirfa el camino para 1a solucién de aquel problem fundamentel cue tanto Preocupa a los paises de la ‘mérica Latina y @ los denés paises del mundo, Bien es cierto que con ello aumenterfa el coeficiente de inportaciones de Dstados Unidos, aunque no se tocaran los presentes eranceles, y se fortalecerfs su intexicpendencia con el resto del mundo, Por donde Megerfa tendién 2 denostrarse cue, al conseguir aquel pefs su objetivo de plena ocupeciéa, logra sinulténeanente otros dos objetivos prinordiales de su politica egonémica: promover ectivemente el comercio intemeeicnal y estinuler la industrialicacién de la Jmérice Latina, 10, Permttase, al finel de oste parte, otre conciderecién teérica, miy atinente 2 los asuntos que se acaben de tratar, Hesta ehora, no se habfa logredo resultado positive alguno, en el eupetio de interpretar, con ayuda de le teorde cldsica, las variaciones de los balances de pages y de los movimientos internacionales del oro, en los afios treinta, ‘iil pudo haberse logrado ta enpetio, pues 1a teorfa clésice, cono se sebe, se basa en el supuesto de la plena ocupacién. .Si éste supuesto llega a realizarse en los hechos, se podria conprover le valides esenctal del razonamiento cl4sico, acerca de los movimlentos del oro, sin perjuicio, desde luego, de las correcciones parciales cue recuiere 1z teorfa, Como dijo Lord Neynes, on su "General Theory", habiendo.plena ocupaeién, nos volverfamos a encontrar con toda Seguridad en el mundo ricerdiano, Ho es de extrafiar, por tanto, Jo) sentido byt 1ep89 8g. AT el sentido de las palabras que acerca de esto escribiera en su erticule péstum del ‘Economic Journal": "Tio es la prinera vez gue me siento Levade a recordar a los econonistas contenporéneos, que las ensefianzes cl4sicas encerraben algunas verdedes pernenentes, de gren significacién; si nos inclinanos hoy a olvidarlas, es porque las vinculamos con otras doctrinas, que no sabrfanos acepter sin mchas recervas, way on estes naterias, corrientes que trabajan profmndanente, fuerzas naturales, cono podrfanos llamarzas, y hasta "la mano invisible", cue procuran Levarnos al equilibrio ...". Desds luego, si 1a medicina clésica ha de operer, es esencial ¢is los arcnceles y los subsidios a la exportacién no neutralicen progresivamente le influencia de aquéllo, In este sentido, 1a presente disposicién de énimo del gobierno de Estados Unidos, y tanbiéa, secin creo, 1a de su pueblo, nos da cierta trencuil-ide provisional, a juasar por las propuestas sometidas a la consideracijn de la Corferencia sobre Comercio y Ocupacién. Se trata de rropuestas sinceras y completes, presentadas on nombre de Istaos Unitos, y expresamente divigidas a pernttir 1a accién de le medicine chisica, / ‘1/ The Balance of Payments of the United States, Lord Keynes, ‘The Econonic Journal, June 1946, Angrice, Latina ¥. 9h_proceso Anfiacions, 1, Zn titima instencia, el margen de ehorro devende del aumento de la productiviad del trabajo, Si en algunos paises de Anérica Latina ha podido alcanzerse un grado de productivided tan Satisfactorio que nediente una politica Juiciosa, pernitirfa reducir Preporciones moderedes la necesidad de capital oxtranjero, para suplir la deficiencia de ehorro necionel, en ls mayor parte de ellos so recozoce que el concurso de ese cepit al es indispensable. Th efecto, la productivided es en estos es my baje, pordue falta capital; y falta cupital por ser sy estrecho el rargen de ahorro, 2 causa de esa baja pioductividad, Para romper este efrculo vicioso, sin depvinir exageradaente el consumo presente de las =teas, por lo general my bajo, se recuiere el concurso trensitoric cel capital exiranjero, Si su aplicactén es eficaz, el incremento de productivided, con ol andar del tiempo, pe-mitiré desarzollar el propio ahorro y substituir con 41 al capital oxtrenjero, en les nuevas inversiones exigides por as innovaciones técnicas y el crecimiento de le poblacién. 2, Pero la escasez tipica de ahorro, en gran parte do Latina, no sélo proviene de equel eatrecho margen, sino también de su inpropia utilizacién, en casos my frecuentes, D1 akorro significa dejar de consunir, y por tanto, os inconpatiole con ciertas formes peoulleres de consui0 en grupos con ingresos relativanente altos. les “andes disparidades en la distribucién de los ingresos pueden ser 7 han sido histéricemente un factor fevoreble a la acumilacién del capital 7 al progreso téenico, Sin desconocer 1o que ello ha significado tanbién en estos paises, hay notorios ‘y frockertes 3/012 /89 Pag. 49 y¥ frecuentes ‘ejemplos de cémo esas disparidades distributivas eotimilen formas de consumo propias de paises de alta productividad, jalégrense asf, con frecuencia, importantes posibilidades de ahorro y de eficaz empleo de las reservas nonetarias en Anportaciones protuctivas, 3s el aumento de 12 productividad 10 que he permitido a ‘Bstados Unidos y en menor grado 3 otros paises industriales disminuir la Jornada de trabajo, aunentar los ingresos reales de las masas y su nivel de vide, y ecrecentar, en credo considerable, los gastos piblicos. Todo esto, sin perjuicio de una ingente acumlacién de capitel, Es un hecho conocido céuo los gastos piblicos, que en las grandes naciones industrieles constitufan una proporeién relativanente pequefis del ingreso nacional, a mediados del siglo paeado, forman hoy ura fuerte proporeién del mismo, Sélo el aumento de la productivided ha permitide este increnento. No se han substrafdo los paises de inrice Latina a esta tendencia gereral, Y si, en donde la productivided es alta y Ja acumlacién do capital considerable, el crecimiento de 1a cuota de gastos fisceles es objeto de preocupacién, mayor ht de serlo en paises en los cuales se recuiere destinar al atorro una parte apreciable del ingreso nacional, Pues el ahorro es necesario para conseguir el increnento de productividad, sin el cual, serg Alusorio el propSsite de elevar el nivel de vida de In el fondo, estamos en presencia de wn problem: de valoracién de necesidades, Los recursos para satisfecer las enormes necesidades privadas y colectivas de América letina son relativamente estrechos; y el aporte posible del capital extranjero es también limitade. Hay pues que valorar esas necesidades, en funcién de la finalidad que se persigue, a fin Ate distribuir 2/cit.12/89 Pag. 50 de distribuir esos recursos limitedos, en la forma nfs’ conveniente, Y si tal finalidad consiste en acrecentar el bicnestar mensurable de 1a colectividad, el 2 mento del capital por honbre tiene cue ocupar lugar de prelacién m.- principal. flay, en este sentido, tipos de inversiones ptiblicas o privadas de indiscutible utilidad, Pero que no hacen mis productivo el trabajo; no podré salir de ellas, por lo tanto, el incremento:de ahorro para nuevas inversiones, In cambio, inversiones equivalentes realizades en bienes de ccpital eficaces, acrecientan innediatemente la productivided de2 trabajo y descrollen un margen de aliorro que, transformado en nuevas inversiones, dard mevos increnentos de productividad, Por estas consideraciones 7 otvas cue extenderien sobrenanera estas péginas, el problema de la formacién del capital es de trascendental significacién, 3. ‘La presién considerable de aquellas necesidades privadas y colectivas, sobre una cantided relativamenie escasa de recursos, suele traer consigo fenémenos inflacionarios, como los cue, con tanta ragdn preocupen’en estos momentos a los gobiernos, Sinulténeamente, se ha ido desarrollando un modo de pensar, que no sélo se manifiesta en los sectores favorecidos, sino en quienes, atentos solamente al interés general, consideran que la inflacién es un medio ineludible de cepitalizacién reeda, allt "en donde el ahorro espontdneo es notorianente insuficiente, Ee una tesis digna de ctildadoso exanen, Dada la generalidad del procego, hay un cautlel de hechos que ofrecen campo fértil de investigacién, después de’ la cual séré posible apreciar au valor y alcance, IMentres tanto, algunas reflexiones podrian contribuir el planteamiente de esta cuestién, /Dispénese, E/CH,: Pg. nw? Dispénese, ante todo, de ua comprobacién indiscutible: el estimilo consiguiente a la expensibn del nedio cirovlinte ta Levado a un alto grado de ocupaéién, y por tanto, a un increnento real del ingreso. Pero parece que gran parte de este efecto se ha conseguido en una fase de crecimiento moderado, antericr al Proceso agudo de inflacién, De tal suerte que, conforne se fué desarrollando ese proceso, el aumento de la ocupacién y del ingreso real han sido cada vez menores y mayor el de los precios, con los consiguientes trasternos en 1a distribucidn del ingreso total, Bsta experiencia implica une ensefianza positiva y otra negativa, ¥/ ta positiva conciere, deste luego, al esunto referido, por cuanto el eunento de ocupacién vino a acrecentar el nargen potencial de ehorro, Tanbién le concierne Ja enseflanza negativa, El haberse exagerado el estfml que se necesitaba para llegar a le ocupacién méxima, condujo internanente a una presién inflacionaria excesiva que, el dilatarce de nuevo, con la reanudacién posterior del intercanbio, el ccatictente de Amportaciones, comprinido antes por la guerra, agot3 gran parte del oro y Les délares previamente acumilados, ‘2/ Se ha demstrado, en efecto, 1a posibilidad de una politica racional de eupleo de factores desocupados o mal ocupados. Las-exportaciones habfan constitufdo, en otro tempo, el factor dindnico preponderante. Pero después de la crisis mundial, probaron ser insuficientes para cumplir bien su papel estimlante del crecidento, Durante los afios treinta, en algunos paises de América Latina se haba logrado ya, mediante una politica de estfmlo interno, suplir la debilidad del factor dindmico exterior. Para hacerlo, fué necesario reducir el cosficiente de importacionas, segin’ se explicé en otro lugar. Los hechos que sobrevitlercn con 1a, segunda guerra mundial denostraron cuanto wx trecn> poate endarse ino, Pues la guerra iipvno le violenta compresisn del. coeficiente, a la ve2 que aumentaba la fuerza del factor estimlante exterior, /las Anformaciones 2/cH,12/69 763. 52 4, Las informaciones fragnentarias disponibles susieren mis de una duda, acerce de si esas reservas han sabido emplearse, teniendo estrictamente en cuenta lo que requiere ol desarrollo econémico de América Latina, .i fin de poder ssclarecer las dudas referidas, seria interesante averizuar en «1.6 medida las mencionadas resezvas se han deetinado preferentemente a la importacién de les bienes de capital m4s necesarios, en cud] otra medida se han gastado en articulos no esenciales o cue sélo responden a las formas de existencia de los cruzos de alto ingreso, y hasta cué punto han servido pare cubrir la salida de capitales, provocada por el desarrollo ce la inflacién. a Estas distintes formas de empleo de lis divises estén estrechemente lizadas a las consecuencias internas de la inflacién, 1 alze de precios, al senerer beneficios extraordinarios, pone en menos de un grupo reletivanents pequefio grandes posibilidades de aliorro, como siempre ocurre cuando se altora as{ la distribucisa de los ingresos. Serfa tenbién de gran interés indagar haste qué punto esas posibilidades se han traducido en ahorro efectivo y si la aplicacién de ese chorro se ha hecho en la forma més productiva para le colectivided. Si en realidad una parte considerable de los beneficios resultantes de la inflecién se hubiere ehorrado e invertido eficazmente, quienes exponen la tesis mencioneda tendrian un punto de apoyo my velioso, Pero no se dispone, por dessracia, de elementos fehacientes para poder pronunciarse. Les c: ras aisladas no justifican generalizecién algune, Sin enbargo, los hechos cue presenta la Couisién Técnica Mxte Bresilcstados Unidos, con respecto al Erasil, son ilustrativos. tas grandes L/ Bs sugestivo comprobar que los depésitos de particulares de ainérica Latina en Istados Unidos alcanzaban 2 729 millones de délares, 21 30 de Junio de 1947, 4g. 53. compafiias han reinvertido de un 30 a un 40 por clento de sus beneficios, on 1946, 7 distribufde el resto a los accionistas, Io distribuido por todas las compaiiias hebria ascendido a 12,000 millones de cruzeiros, de los cuales, le cuarta parte, © sea apenas 3,000, se ha ahorrado en distintas forms. y Del total de beneficios, por tanto, resultarfa haberse invertido solanente alrededor del 50 por cliente en form directa @ indirecta, si se combinan esas cifras, Tn este caso, la proporeién consunida habriz sido importante, Y como los grupos de altos ingresos tienen taxbién un clevado coeficiente de importaciones, no es de extrafier cue un parte apreciable de las divisas acumiladas se hayan gastcdo en artfoulos no esenciales para el desarrollo econénico, segin se desprende de otras informciones de la nisna fuente. Hay otro aspecto afm por esclarecer, =n el supuesto que, en determinadas circunstancias, se considerare cierta expansién inflacioneria como el mejor expediente préctico, dada la escasez de ahorro, existirfan medios de encaminarse al nejor cunpliniento de ese propésito, etenuando al propio tienpo, las series consecuencias de la inflacién, Xl istado tiene en su poder resortes que le permiten estimilar la inversién de gran parte de los beneficios e ingresos inflacionarios, mediante el sravanen progresivo de lo que se gasta y consume, en tanto cue se desgrava © exime lo que se invierte, y desviando edenis, por el control de cambios, lo cue tiende e emplearse en importaciones incompatibles con un fuerte ritno de creciniento econémico, Fero es claro que tales resortes pueden tanbién servir para enplear en mayores gastos fiscales lo qxe pudo ser chorro, en L/ Informe de la Comisién Técnica itixta Brasil-Dstados Unidos, Parte III, (/desnedro E/cN,12/89 Pag. 5h desnedro del increnento de la productividad naclonal, 5. Légicanente, si hay cruros que se han beneficiado considerablenente con la inflacién, hay otros cue tienen cue haberse perjudicado, Ho se han efectundo todavfs estudios concluyentes, Pero no pareceria que el fenémeno 2ctuel tenga diferencias esenciales con las inflaciones anteriores, La clese media y los grupos de ingresos fijos han sido, por lo seneral, los cue han pagado una parte muy grande de la traisferencia de ingresos reeles a los empresarios y dem4s favorecidos. Los gremlos mejor orgenizados de la clese obrera han logrado, casi siempre con retraso, alcanzar, con el aumento de selarios, el alza de precios y a veces supererla; pero no se tienen cifras valederes para cerciorarse hasta cug punto hz, podido mejorar el conjunto y ne solamente ciertos sectores, Sin enbargo, no debe olvidarse que el avinento de ocupacién, en la primera fase del fenémeno expansivo, ha significado, por lo comin, un aumento reel de ingreso de 1a familia obrere, atin cuando los salarios no se hubiesen ajustado al alza de los precios, Toda esta redistribucién del ingreso, provocada por la Anflacién, genera en los srupos favorecidos la ilusién de que aunenta la ricueza de la colectividad, en su conjunto, atin cuando el. ingreso real haya dejedo de crecer apreciablenente, una vez trespuesto el perfodo inicial de expansién moderada, Es la ilusién propia de la fase de euforia y prodigalidad; no se reauevan on ella los bienes de capital, por ejemplo: en los trensportes y otras inversiones piblicas y privedes, y se geste, en breve tieupo, gran parte del incremento anterior de las reservas monetarias, Todo esto significa conswidr capital acumilado, y no podria tomarse, en conseciencia, cono eunento real del ingreso, La ilusién comienza a disiparse, en le segunda Jen B/cu.12/e9 Rg. 55 fase: 1a de tensiones crecientes, y cede por fin en la tercera: La de penosos reajustes. a primera fase parece haber terminado en imérica Latina, Y mlentres la segunda se va desarrollando, manifiéstanse agudos entagonismos sociales, que conspiran contre la eficacia del sistema econémico en que vivinos, Férmase una atmisfera desfevorable para su desenvolvimiento regular, y aparecen ciertos tipas de intervencién qubernanental o medidas fiscales, que suelen perjudicar la iniclativa privada y el sentido de la responsabilidad individual, Por donde la inflacién, después de haber aumbntado exageradamente 1a remuneracién del empreserio, termine por comprometer la effcacia del mismo, de tan primordial, importencia pare el crecimiento de los paises de América Latina, 6, El Estado no tarde en compartir, mediante el impuesto, una parte apreciable de las ganancias inflacionarias del eupresario. Gono cuiera cue fuere, 1a dilatacién de los gastos fiscales, consecuencia de aguella participacién, plantearé un problem no menos serio que los otros, cuands desaparezcan los beneficios inflacionarios y se imponga la necesidad de correlacionar adecuadamente los sueldos y salarios cue page el Sstado con el costo de la vida, con riesgo evidente de cue se eleve de nuevo 1a proporeién del conjunto de gastos fiscales en el ingreso total, en perjuicio de le formacién de cepital, 7, S6lo el examen imparcial de los hechos que hemos nencionado y de otros que de 61 surgieran, permitird llegar a conclusiones valederas, acerca de la inflacién como instrumento de ehorro colectivo, Cualesquiera cwe fueren las cifras 2 que se llegue, no podré negarse, sin enbargo, que 1a inflacién ha tendido a desalentar formas t{picas de ahorro espontdneo, que en algunos de los paises latinoanericanos habfan legado a adguirir /immortancia 7 2Yot.a2/09 Amportencia creciente, Allf est el zermen dei ehorro futuro para la industrializacién, ovando pueda volverse a 1a estabilidad noneteria, de acverdo con les nuevas reglas del juego, impuestes por la nueva realidad, on fin de cuentas, si ell ehorzo forzado, que pueda acwmlarse con 1a inflaciéa, sale de cepes numeroses de Le colectividad, sin que les fuera dade recoger sus frutos por Fasar ellos definitivanente a los grupos fevorecidos, habria que preguntarse serianente si no habré pooibilidad de eneontrer otras formas da ahorro (esponténeas o de deteminacién colectiva), que, sin los craves inconvenientes sociales del shorro forsedo, permitan una més conveniente aplicacién de los recursos a fines productivos. 8, Iientres tento, 1a epelecién al ehorro extrenjero parece inevitable, segin ya se dijo, Desgractadencnte, el problem que ha dejado 1a experiencia desastrose de los treinte on esta materia, dista micho de haberse despejado, Subsiste en los paises acresdores el. vivo recuerdo del incunpliniento del ceudors en cambio, tienden a olvidarse las circunstencias en cue el Smoumpliniento se produjo y a difundirse a croencia equivocada de que, nediante clertas reglas de conducta, podré evitarse la repeticién de pesados acontecintentos, ln el fondo de todo esto, encontranés €l misno problena fundanental, cue sencionanos al ocupemnos.de las tendencias del conercio extericr, iL Denartenento de Conercio de Sstados Unidos suzo destacarlo, en un estudio publicado hace elgunos altos, >/ i 1929, ete pais suministré al resto del mundo 7.400 millones de délares, en pego de inportacicnes, inversiones 7 otres concoptos; el resto del mundo pudo asf pager holgedanente los 900 millenas de sorricias finencieres fijos del c2pital nory - Econsmics Seri Anverti Anvertide por Estados Unidos, aparte de las renesas de utilidades, Pero en 1932, el suinistro de délares se redujo a 2,100 millones, mientras cue los servicios, si se hubiesen cumplido, hubieran exigido 1a misma cantidad de 900 millones. Habrfan pues quedado apenas 1,500 millones de délares, para que el resto del mundo oubriese sus inportaciones y otres partidas pasives a Sstedos Unidos, contra 6,500 en 1929, Frente a estas cifras, no es de extraflar Gue el incumslimiento haya sido casi general en América Latina, Los pocos paises que siguieron haciendo honer a sus tompramisos lo hicieron con grandes sacrificios, y a costa de una severfsima contraccién de 4 econonfa interna y con gran mengua de sus reservas monetarias. Ss pues natural que, habiendo pasedo por ese experiencia, no quieren verse nuevamente ante ol dilem de dejar de cumplir sus compromisos o sacrificar su economfa, Iitentras no se resvelva el probleme fundamental del conercdo exterior, ser4 preciso cuidar que las inversiones de capitales en délares, sino es posible aplicarlas al desarrollo de las exportaciones en igual moneda, se apliquen a reducir, directa o indirectarente, las importaciones en diche moneda, e fin de faciliter el pago futuro de los servicios correspondientes. 9. Desde este y otros puntos de vista, no pareceria prudente reanudar la activa corriente ds invarsiones de los afios veinte sin ajustarse a un programa que afronte resueltamente 1a serie de cuestiones concretas cue se presentan en este caso, La existencia de entidades de préstams internacionales podria ser factor my eficaz en el esbozo de un programs senejante, eti el cual, con 1a colaboracién de los distintos paises, se examinen os tipos de inversién mds convenientes al desarrollo econémico de la Anérica Latina, mediante su contribucién a la productividad feel trabajo 3/0N.12/89 4g. 58 del trabajo y la desarrollo de la necesaria aptitud de reembolso, Ho parecen existir razones de cue este progrens no abarque también el campo de las inversiones privadas, Para pronoverlas, se hable insistenteuente de la necesidad de esteblecer un sistent do garantias o de llegar a normas que las reglanenten, Todo esto es digno del mayor exanen, Pero las nueves formas han de inspirarse en le pasada experiencia, Tuera de aquellas dificultades de fondo de los aflos treinta han ecistido michas otras, y también clertas situaciones abusivas, en uno y otro lado, que dedieran reconccerse sin reticencias, pera prevenir la repeticién del mal, Con ello, y con una eficaz ayuda técnica, serfa dable desarrollar una politica de inversiones, que cuente en todes las pertes inveresadas con un anbiente ptblico favorable, en virtud de sus reciproces ventajas, : AX. Los Unites Page 59 VI, “Los Lites de la industrialicactén, 1, Zs obvio que el crecimiento econémico de 1a imérica Latina depende del incremento del ingreso medio por hebitante, cue es muy bajo en 1a mayor perte de estos paises, y del aumento de ls. poblacién, EL increnento del ingreso medio por hebitante sélo podr4 conseguirse de dos modos, Primero, por el aumento de la productividad, y segundo, dada una determinada productividad, por el aumento del ingreso del hombre, en la produccién primaria, con respecto a los ingresos de los paises industriales que inportan parte de esa produccién, iste reajuste, segiin se ha explicado tiende a corrogir la disparidad de ingresos, Provocade por la forma en cue se distribuye el fruto del progreso técnice entre los centros y le periferia, 2, Consideraremos ahora el aumento de la productividad, en Ja poblacién ya existente, El caso se presenta bajo un doble aspecto, Por un lado, la asimilacién de la técnica moderna permitird acrecentar la produccién por hombre, dejando gente disponible para aumentar le produccién, en les mismas ocupaciones en que ya estaba empleada, o desplazarla hacia otras, Por otro lado, el desplazaniento de personas mal ocupades en actividedes ouya extgua productividad no puede mejorarse gensiblenente, a otras en que el progreso técnico haga posible ega mejora, elevaré también el indice de productividad, ‘la agricultura presenta un caso tipico de la influencia del progreso técnico, hn rams importantes de ella, el desarrollo téenico he permitido seguir acrecentando la produccién, con un crecimiento proporcionalmente inferior de gente ocupada, En otros téminos,. 1a agricultura absorbe una proporeién menguante del incremento de poblacién en edad productiva, con lo cual Ja shtit,12/69 Pég. 60 industria y otras actividedes han podido aumentar con mayor amplitud su ocuracién, “lo ce treta entonces de un desplezamiento do gente ze ocupada, sino de una forma distinta de explear la cue llega a a edad de ocurnree, Sin embargo, en algunos casos, con el intenso desa 0 industrial de los tltinos afios, se han rotado desplazanientos reales, con consecuencias desfevorables para la Por otro lado, el crecimiento de la cenanc extorior de productos egrerios, después de la gran crisis mundicl, ha sido relativanente lento, por lo gener, si ae le compara con el ritno caracterfstico de tiempos antertores. Sumado este hecho a las consecucficias del que acaba de mencionerse, no sabria deciree qué otra activided, fuere de 1s industria, huiese podido absorber ol crecimiento de le poblacién en los paises de Anérice, Latina, que oxportan dichos productos. bien posible que ol vrogreso t4cnico en otres actividades ‘traiga consecuencies senejentes 2 1as que acaten de sefielarse, ¥ en todo ello, hebré una fuente importante de mano de obra, para el crecimiento industrial, Pero no es la tnica, Dentro de la misma industrie hey un potencial hunano que se desperdicia por la baja productividad, Si se consigue ausentar 6ste mediante 1a asinilacién de la técnica moderne, ese potencial podré enplearse, con gren Provecho colectivo, en el desarrllo de las industrias existentes o en el de otras nuevas, Finalmente, hay otra posibilided, cue no es desdetiable, segtin lo conprueba 1a experioncia reciente de ciertos paises. El bajo ingreso prevaleciente en las clases ms nuneroses ha permitido a las de ingresos ms cltos disfrutar de productos nanvales 0 de distintos 5 de servicios personales, a precios may relativamente bajos, Ello se debe @ lo que hemos Mamdo publacién mal ocupada, Conforme va creciento 1a productividad de 1a industria y mejorando el ingreso real por howbre, esa poblacién tiende a trasladarse naturalmente hacia actividades industriales, Por mucho que este hecho perturbe en ciertos sectores, es 1a forma tdpica en que, dentro de un pafs, se propagan las ventajas del. progreso témico a todas las clases sociales, como ya se ha visto al recordar la experiencia de los grandes paises industriales, No todo, sin eabargo, consiste en auentar la productividad, Dl destinar una parte exagerada de su increnerto @ aumentar el ot © @ disminuir prenaturamente el esfuerzo productive podrfa conspirar seriamente contra el propésito social de la industrializacién, 3. Hemos insistide en que, para lograr este aunento de productivided, os necesario aunentar sensiblemente e} capital yor honbre y adquirir 1a técnica de su empleo eficaz. Bsta necesidad es progresive, En efecto, al aumentar en general los salarios, por 1a mayor productividad de la industria, se extiende gradualnente el alza a otras actividades, obligéndolas a emplear mayor capital por hombre, » fin de conseguir el increments de productividad, sin el cual no podrfan pegar salarios nfs altos, Se ir4 imponiendo asi, en América Latina, Ja mecanizacién de muchas actividades, en que hoy resulta més provechoso el trabajo directo, por ser mis bareto, como se ird imponiendo la mecanizacién de 1a econonfa donéstice, Wo es posible formarse una idea aproximada acerca de la nagnitud de estas necesidades potenciales de capital, y por ‘ante, de los recursos para satisfacerlos, pues ni tan sicuiera es dable conocer satdsfactorlamente la cantidad presente de capital por hombre ocupado, en los principales peises de la /onérice Latins. w/t, ae/oY Fes, 62 fnérica Latina, Pero si se juzca por las necesidades cue ya se hea menifestado, en esta fese iniefal del proceso de industrializacién, los recursos provenientes de les exporteciones, a nenos Les expor ciones en délares, no perecen ser suficientes para atendertas, deszués de haber satisfecho otras imortactones y Fartidas pesivas, Hay pues que admitir, segin ya se he explicedo, la posibilided de cue tenga que reducirse el coeficiente de inporteciones, ya sez en conjunto o en dSlares, redveiendo o supriniende artfcu no esencicles, pare dar lugar a 4s amplias inportaciones de nes de capital, in todo 0, 14 necesidad de est ingort.ciones perecerfe in¢ispensable para conposicién de las prosecuir la industriclizacién, Hey que comprender claranente lo.cue osto significa. Ts una mera adaptaciiin de las tmporteciones 2 ln cazacidad de pago dada por las exportaciones, Si éstes crecieren suficientencnte, no sorfa recesario panser en restricciones, selvo cue mediante exes vestriccicnes, se cuiere intensificar el proceso industriolizedor, Pero les exportaciones de indrica Letina dependen de las varisciones del ingreso de Dstacos Unidos y Turopa, prineipaionte, y de sus respectivos cceficientes de importesién de productos latincanericenos, 2h consecuencia, escaran a le determinasién directa de ‘nérica Latina: se trata de una conticifu de hecho, Gue s6lo pocric modificarse por la decisién ds 12 otre parte, 4, Se my distinto el cass, si se culeiere lever le industria: inacisu 2 extvenos Cue obliguen a desriozar factores de 1a produceifi: wrineria e in industric, pare axnentar la produccién de ésv © sea, gue pudiendo hasta un deterninsdo nivel, lo rebajdrency deliversdemente, sacrificando parte de la rtaciéa, para acrecontar la mye ees OF Pag. 63 produceién industrial en substitueién de las inportaciones, _ dHabria, en este caso, aumento de productividad? Llegados a este punto, el problema se plantearfa em térninos clésicos. Se tratarfa, entonces, de averiguar si el increnento de produceién industrial que se obtiene con los factores desplazados de la produteién prinaria es o no superior a la masa de artfculos que antes se obtenfan a cambio de les exportaciones, Solanente si fuera superior podrfa decirse que hay un aunento de productividad, desde el punto de vista colectivo; de no serla, hebrfa una pérdida de ingreso recl, Aout est, pues, uno de los Mnites mis importantes de la industrializacién, Linite de cardcter dindmico, que podré irse trascondiendo, a melida que se desarrolle le economfa; pero, en todo momente, debiera preocuparnos si es cue se persigus el objetivo primordial de aumentar el bienestar real de las meas. Mo hay sintoma alguno de que América Latina se encuentre cerca de ese limite, Se est4 en 1a fase inicial del proceso de industri2lisacién, y es muy grande ain, en 1a myor parte de Jos casos, el potencial hunano @isponible, mediante el incremento de la productividad, pave el crecimiento industrial, IMs ain, no parecerfa que los paises ms avanzados en ese proceso se vean precisados a optar entre el crecimiento efectivo de las exportaciones o el creciiento industrial, 5. Sin eubargo, no es necesario, ni mucho menos, que se hayen agotado las posibilidades de intensificar la productividad y utdlizado todo el potencial humno, para que Llegue a perjudicarse la exportacién en favor de un incremento ilusorio del ingreso real, El aumento de productividad requiere un incremento considerable ee capitel B/cH 12/89 . Pag. 6h de capital, y antes que se heya logrado conseguirlo, pasaré mucho tiempo y sobrevendrén otras innovaciones técnicas, que posiblerente exijan sus propios auhentos de capitel, : conjuntamente con el que se recuiere pare aconpafiar el crecimlento de la poblacién, Por otro Indo, el ahorro es escaso. “is pues necesario utilizerlo en tal forma, cue rinda el incronento m&tino de produceiéa, Una politica equivocada podrta provocar, sin enbargo, el enpleo deficiente de este atorro, como es ffeil denostrarlo en seguide, Se ha dicho cue el progreso téenico de Ja agricutture «la demanda exterior relativanente lente de sus productos han pernitido 2 1a industria, en muchos casos, absorber una rarte del incresento de 1a poblacién en edad productive myor cue Ja acricultura, Supéngase que siga recuiriéndose, ce ailo en afio, ese increnento de brazos er la acrioultura, pero atender al sto de la cevande exterior, aparte del aumento de Poro que, en virtud de ciertas nedides, se exazere en tal forma el desarrollo industrial, que la actividad agricola se vea privada de los brezos que necesita para soguir auentando lag exportaciones. Ye se han explicado los rezones c causa de les cusles esta substitucisn de exportaciones por preduccidn industrial. podrta significer una pérdida directa de ingreso real, Pevo ia’ adeais otra pérdida. La tlerra es un Sector de producciéa que vele mucho, sin que haya costado rade. El capitel cus requicre egregérscle es relativanente pequetio, si se lo compar2 con el que ls industria «bsorbe, in consecuencia, al Levar a la industria los hombres que hebrien pocido producir eSicarmnt> en la tierra, hay que dotarles de wr capital myor. Pero este nayor capital podria haversé aplicado més productivunente, st Fags 65 en vex de diluirlo en todo el increnento smal de 1s poblacién, se lo aplicase ten sélo a una parte de ese incremento: el m4s alto capital por hombre darfa una mejor productividad, De manera que, por esta dilucién del capital, antes que intensificarlo, s habrfa dejaéo de obtener el increnento de protuctividad, lograble de otro mod. Con lo que a quella pérdida directa, se agregarta ctra que, no Por ser nenos tangible, serfa menos real, Més adn: al no crecer asf 1a productividad, setfa menos fuerte el incentivo que ofrece la industria a la gente mal ocupads, con lo cual, en vez de utilisarla en 1s medida positle, estarfamos extrayendo perjuidicialmente el potencial humano de ocupaciones altamente productivas, No se trata de una evertualidad rencta, sino de un riesgo a que estamos expuestos de contfmuo y en el que acaso se haya cafdo algunas veces, a falta de programas de desarrollo econémico, con objetivos preciswy medios definides para conseguirlos, El capital es escaso y serfa bien lamentable dejar de invertirlo en donde puede suneutar 1a productividad total, para hacerlo en donde va a disminuirle, Wo debe pues clitdarse que, cuanto myores sean las exportaciones de la Anérica Latina, tanto més intenso potré ser el ritmo de su desarrollo econémico, Pero tampoco se debe descartar 1a eventualidad de que un posible recrudecimiento de Ja politics proteccionista en los patses compradores, tienda a desplazar las exportaciones latincamericanas, substituyéndoles Por su propia produceién, Serta en extremo lamentable este hecho, pero si los paises latinoamericancs no lograran eviterlo, no tendrfan otra solucién que dismimuir el crecimiento de sus importaciones © an reducirlas en téminos absolutes, 4 fin de ajustarlas a las exportaciones, En tal contingecia, el crecimiento nee” crecimiento del ingreso real por hombre serfa menesde lo cue pudo haber sido y hasta se coneibe un descenso si se acentuara aguel fenémeno, 6, En todo esto, hay que tener en cuenta un hecho elemental, Europa ha perdido gran parte de sus inversiones en el resto del mundo, y desde el punto de vista de la disponibilidad de délares, no es dable esperar que, cuando haya logrado su reconstruccién, se encuentre en condicioncs de suministrarlos @ la Anérica Latina. Al contrario, deber4 cuidar atentamente de la nivelacién de su intercambio, Bn consecuencia, si wn nats aislado podrfa, por algtn tiempo, reducir sus inportaciones, sin sufrir perceptiblemente en sus exportaciones & Europa, el conjunto de Anérica Latina no podrfa hacerlo por razones obvias, 7, A discurrir acerca del aumento det capital por hombre, se ha supuesto implicitamente que los establecinientos industriales podrfen alcanzar una dimensién satisfactoria, para lo cual se reguiere un mfnimo de produceién, fasta dénde tiende a alcanzarse esta dimensién en los pafses de América Latina? Le diversidad de condiciones en cue se encuentran impide generaiizar, en este como en otros casos. For’ lo denés, no se ha realizado afin 29 estes pafses un estudio sistentico de la productividad y su relacién con 1a dimensidn éptima de la empresa y de la industria, Pero suelen citarse ejenplos poco halagadores, ya sez to La subdivisién de una industria en un niimero excesivo de 43 escasa eficiencia dentro de uz mismo pais, o de la ex muitiplicaci6n de empresas de dimensién relativamente pequefia, en paises que, uniendo sus mercados para una serie de erticulos, Podrian conseguir una myor productivided. Este parcelamiento de los mercados, con la ineficacia que entrafia, constituye otro de los 2inites del crecimiento de la industria, Itaite que, en /este caso, podrta F/cN. 12, Pag. yf” este caso, podria ir cediendo ante el esfusrzo combinado de patses que, por su situacién geogréfica y sus modalidades, estarfan on comliciones de realizarlo con recfprocas ventajas. 8 Se dijo al comenzar que habfa dos medics de mejorar el ingreso real, Uno, el aumento de 1a productividad, y el otro el reajuste de los ingresos de 1a producci6n primaria, para ir atenuando su disparidad con los ingresos de los grandes patses industriales, Lo segundo sélo podrd conseguirse, # medida que se vaya ‘ogrands Le primero. Conforme aunenta 1a productividad y el ingreso real medio en la industria en los pafses latinoamericancs, tendrén que ir sub{endo en éstos los salarios de 1a agricultura y de la produccién primaria en general, como ha ocurrido en otras partes. BL resultado seré gradual, y si no hay cierta relacién entre el crecimiento respectivo de cada uno de los ingresos medics, en los principales pafses exportadores de productos primarios, podrén surgir algunas dificultades, clertemente inevitables, en reajustes de esta naturaleza, sean internos o internacionales. La posibilidad de ir ganando terreno, en este materia, depenie también de 1a aptitud para defender los precios de 1a producci.én primaria en les menguantes cfclicas, que es donde con frecuencia se ha perdido, en todo o en parte, la participacién en el fritto del progreso técnico, que América Latina habfa alcanzado en le creciente, Hay en ello un campo muy propicio de colaboracién econémica internacional. {Parte Segunda BYE L2/89 Pag. 69 Parte Segunda Bases pera 1a discusién de una polftica anticiclica en ig Anérica Latina 1, El cielo es 1a form de crecer de 1s economfa en el réginen en que vivimos; y si bien se trata de un fenémeno general que ha de explicarse con una sola teorfa de conjunto, manifiéstase de una manera diferente en los centros cfelicos y en la periferia, Mucho se ha escrito acerca de él en los centres, pero my Poco con respecto a la periferia, no obstante esas distintas manifestaciones, Los breves comentarios que haremos en seguida no pretenden suplir esta deficiencia, sino esbozar algunas ideas de polftica anticfclica, que, de sceptarse on principio, podrtan constituir un punto de partida conventente para 1a discusién do este problana, Ey claro que para que esta discusién no se realice en un plano abstracto, serfa necesario examinar el caso particular de cada pafs a fin de everiguar si su estructura econémica y las condiciones en que se encuentra pemiten seguir aquellas ideas, o aconsejan, més bien, explorar otras formas de obrar sobre eh ciclo. 2, Es notorio el designio del Goblemo de Estados Unidos de seguir resueltanente una polftica anticiclica, Pero no parecerfe Fecomendable descansar exclusivamente sobre lo que haga el centro efelico principal, pués 1a accién constante de los patses de la periferia podria ser my oportuna, en el caso de una contraccién en aquel pais, Deberfamos, pués, prepararnos a desempefiar nuestra parte en el comin empetio, En los centres, la polftica inspirada en este objetivo trata de actuar sobre el volumen de las inversiones, a las cuales se atribuye el papel dindmico en el movimiento ondulatoric. No /sucede as Poa sucede asf en la periferia, Aqui ese papel corresponde a las exportaciones, Lo cual no es de extrafiar, pues las alternativas de las exportaciones reflejan las del ingreso de los centros que, como se sabe, varia en estrecha interdependencia con aquellas inversiones, No est4, ciertanente, al alcance de 1a periferia influir * sobre sus exportaciones de la misma manerd en que los centros se proponen regular ous inversiones,2/ Hay, pues, que buscar otro tipo de medidas para conjurar las corsecuencias més agudas del ciclo en la actividad interna de nuestros pafses, Conviene, ante todo, descartar 1a idea de que el deserrollo industrial en sf mismo les haré menos vulnerables a estos fenémencs, Se necesiterfa qua las exportaciones hub{eson egado a una proporeién muy pequefia dol ingreso nacional para que esto sucediere, Pero en tal caso un pets habria dejado ya de ser periférico para convertirse en centro cfclico: y si bien hubiera dismimido asf su vulnerebilidad exterior, habrfa adquirido, en cambio, aquellos elementos tipicos, inherentes al sistema, oue provocan el movimiento ondulatoriv de los centros. Nos incLinamos més bien a creer que e1 desarrollo 4v del hard 24s perceptibles las conseonencias del ciclo al aceniuar el moviniento oscilatorio de la ocupacién en las zonas urbenas. En vn pais esencialnente agrario las depresicnes se manif‘esica en @1 drosenso de los ingresos rurales antes que en doson.paci Su; es mds, en muchos de nuestros paises pudo observarse svrante 1a ‘Y/ Nos referimos a la inposibilidad de modificar por nuestra propia accidn 1a forma en que varfan las expertaciones; pero no @ los efectos que poértan lograrse mediante 1a regulacién de sobrantes ce productos a que nos referinos al firal. /eran depresién E/GH,12/89 Pag. 7 gran depresign mundial, céms'las cempafiss volvtana absorber gente que habla ido antes a encontrar trabajo en 14s ciudades. La descoupacién se diluye, por decirlo asf, Wo cabrta esperar o mio cuando 1a industria ha concentrado masas relativanente grondes en las ciudades: el problema cfclico de 1a desocupactén adquirirfa, en tal caso, serias proyecciones sociales, gVamos a concluir de esto que la industrializacién tiene esta desveritaja desde el punto de vista cfclico? La tendrfa si la actividad econémica se dejara librada a sus propias fuerzas. De no ser asf, el desarrollo de 1s industria podrfa convertirse en uno de los elenentos més eficaces de 1a politica anticlelica. 3. Examinaremos brevementé las distintas posibilidades que se presentan: en una de ellas, acaso la més difundida, se trata de atenuar © contrarrestar los efectos de las variaciones de la exportacién sobre le actividad interna, mediante um polftica de carécter compensatorio, que hace varier las inversicnes, princdpalmente en obras piblicas, en sentido contrario al de dichas variaciones. Esta polftica traeria consigo, ciertas exigencias. En la creciente cfclica aumentan las recaudaciones de impuestos y el mercado es propicic para 1s colocacién de titulos piblicos, A pesar de elo, el Bstado no e610 dediera abstencres de euplear estos mayores recursos en apliar sus inversicnes piblicss, sino que tendrfa que restringirlas a medida que aumenta 1a ocupscién privada, La creciente serfa, pues, época de previsora acumulacién de recursos para tiempos adversos, o ds empleo de estos recursos en cancelar los erédites bancarios de que se hubiese hecho uso en 1a contraccién anterior, Basta mencionar estas exigencias para darse cuenta de le dificultad de cumplirlas, Por lo mismo que estos patses estén en pleno desarrollo, hay sieipre proyectos de inversiones muy supericres a los realizables con os limitades medics de que se dispone, Pretender que cuando * B/0N,12/89 Page 72 estos medics aunenten y se presenta la posibilidad de ejecutar tales proyectos, los hombres de gobierno, en vez de hacerlo, aocumulen recursos para el futuro, de que talvez disfruten sus sucesores, significarfa hacer deponder el éxito de 1a accién antictelica de actitudes que no siempre se concibfan con respetables intereses politicos, Hay otros incomvenientes todavta, Entre éllos, el Telativo a la flexibilidad de les planes; se necesitarfa ensanckar y comprimir, alternativasente, las inversiones de acuerdo con el ciclo, lo ewl no es fécil conseguir, Y habria que contar, adends, con el pronto desplazaniento de gente de las actividades m4s afectadas por la depresién hacia las inversiones piblicas, Todo ello, si no lleva a desechar esta posibilidad de accién antictclica, aconseja explorar al menos otros caminos que * consulten mejor nuestras modalidades. 4e ‘Interesa que la actividad interna se desarrolle con un alto grado de coupacién, no obstente el movimiento cfclico de las exportaciones, Zs bien conocida 1e forma en que este movimiento hace crecer y decrecer la actividad interna, Cuando aumentan las exportaciones crece 1a demanda interna y ascienden 1a ocupacién x los ingreso: y el aumento de los ingresos, a su vez, hace subir las importaciones, las cuales tienden de este modo, aunque con retards, a ajustarse e las eporteciones, Ast se desarvolla 1a fase ascendente del ciclo en mestros pafses, En le descendente, ocurren fendzenos opuestos: 1a cafda de les exportaciones hace bajar los ingresos y 1a ccupacién, con el consiguiente descenso de las importaciones. Sup6ngase, ahora, que en ei curso de estos fenémenos se ha Legado al punto mfnimo de la actividad intema, Ja ocupacién ha declinado. y los ingresos han disninufdo correlativanente de un Fadxino de 27 tg 2/89 Pag. B mfximo de 10,000, diganos, a un minimo de 7.500; de estos 7.500, ¢1 20 por ciento, 0 sea, 1,500, se gasta en imortactones vequeridas para satisfacer, junto con 1a produccién local, Jas necesidades corrientes de 1a poblacién; y estas importaciones apenas pueden pagarse ccn la cantidad minima a que se redujeron las exportaciones, Si para llevar nuevamente 1a ocupacién y los ingresos al néximo se siguiera una polftica evpansiva similar ala preconizada en los grandes centros, sumentarfan inmedistanente las importaciones, si es que no se hublese modificado aquel coeficiente, De tal manera que al llegar el ingreso # 10,000, las Amportaciones serfan por 10 menos de 2,000, y si las exportaciones se mantuviesen en un nivel cercano a aquellos 1,500) habria un desequilibrio que, on tiespo relativenente breve, reducirfa las reservas monetarias a exfguas proporciones, Dicho sea de paso: on los centros es diffetl soncebir contratiempos semejantes en 1a fase descendente, pues.es precisanente cuando afluye a ellos el oro que sale de los pafses periféricos, En consecuancia, no parecerfa posible en estos pafses, a falta de recursos extraordinarios, desarrollar una politica expansiva tendiente 4 sumentar 1a ocupacién, sin reducir sl mismo tiempo el coeficiente de importactones, Ia posibilidad de hacerlo, se encuentra limitada por obstéculos cuya importancia varia en cada pafs.. Conslderenos, para facilitar el razonamiento, que se ha conseguido superarlos y Teducir gradielmente el coeficiente de 20 a 15 por ciento mediante modificaciones arancelarias, Merced a ello la ocupacién ¥ los Angresos han podido crecer sin sumentar las importaciones nfs allé de ese mfntmo de 1,500, en torno al cual se mantienen (las exportaci ones; B/cN,12/89 Page Th Jas exportaciones; de manera que ha podido alcanzarse el néidmo de curacién sin perturbar el equilitrio del balance de pagos. Por tanto, en virtud del catbio de coeficiente, se necesitan ahora, 500 menos de irportaciones para satisfacer las necesidades corrientes dela poblacién a ese nivel minimo de ocupacién, EL Problena ha consistado pues en producir internamente esa cantidad, ya se trete de artfculos terminados de consumo o de materias primas indispensables para elaborarlos, Pero no todo e1 consumo corresponds al tipo do necesidades corrientes que se satisfacen en su mayor parte con artfculos de consumo inmediato o de duracién relativamente breve, El progres de la técnica en los grandes paises intwtriales, como se sefialé en otro ingar, ha ido creando nuevas necesidades de artfculcs de consumo duradero que requleren importarse. Estos artfcules Llegan asf a ser imprescindibles confome se eleva e2 nivel de vida, Pero elle no significa que su importacién no pueda reducirse soveramnte, cuando el descenso de las exportaciones apenas permite pagar aquellas importaciones esenciales, Por lo mismo que se trata de articulos duraseros, parecerfa positle comprimir su importacién en la medida requerida por 1a intensidad de la menguante, si es que en la creciente anterior han podido Amportarse sin Limitacién alguna, : Lo misma cabe decir de tos bienes ds capital, Si en la érecionte ha podido cubrirse sus reqerimiontos, ser posible ahora restringir temporalmente su importacién, Téngese en cuenta, a este respecto, que al reducirse el coeficiente de artfculos y materias destincdss directa o indirevtanente a les necesidades corrienves, habré un margen mayor que antes para les importaciones de estos artfculos duraderos decepital, asf como para los {@uraderos de consumo. E/CN.12/89 Pag. 5 duraderos de consume, Hay, finalmente, articulos de consumo no esenciales para las necesidades corrientes pero cuya importacién es relativanente fuerte en tiempos de prosperidad; es obvio que su reduccién, en los de eseasez de divisas, no podrfa traer consigo mayores Anconvenientes. En sintesis, las importaciones se dividen en dos categorias, a los fines de esta politica. Por un lado las de eardcter Ampostergable, formadas por articulos y materias indispensables para alcanzar el mdximo de ccupacién con el minimo de exportaciones, y asegurar, a la vez, la satisfaccién de las necesidades corrientes. Y por otro, las importaciones de articulos duraderos de consumo o de capital que, por su indole, resultan postergables, asf como las importaciones de articulos no esenciales para el consuno corriente, Prosigauos ahora con nuestro ejemplo, Se habfa legado ya al maximo de ocupacién gracias a la politica seguida. Pero, mientras tanto, las exportaciones habrian vuelto a crecer impulsadas por una nueva creciente. Con ello, la demanda de los productores primarios, que habfa caido también a su minino efelico, se acrecienta mevanente a medida que suben sus ingresos con el ineremento de valor de las exportaciones, Si se estd con ocupacién mixima, es de toda evidencia que ese aimento de la demanda tendré que provocar necesariamente el correlative censo de las importaciones, También sumentardn en cierto grado los precios, en tanto 1o permita el margen de proteccién atancelaria, con el consiguiente aumento en el beneficic de los eupresarios, Ello haré subir tanbién la demanda de éstos ¥ acrecentaré del mismo modo las importacicnes. En consecuencia, el incremento ordinario de ingres /provocado por (ON,12/89 Page 7° provocado por el aumento de las exportaciones por encima de su nfnimo efclico, no tardaré en transformarse en una forma u otra en incremento de importaciones, sin afectar el nivel de 1a ccupacién interna, 5. Téngase presente que d reajuste del coeficiente de Amportaciones no significa dismimfirlas, Las’inportaciones tendrén 1d misma magnitud, se siga o no esta polftica anticfelicaj puesto que dependen, en filtima instancia, de las exportaciones y las'inversiones extranjeras, S6lo habré que cambiar su composicién para alcanzar la meta que se persigue, En resumidas cuentas, este cambio consiste en lo siguiente, Un pats de periferia, en el minimo cfclico de exportaciones; sélo puede pagar una cantidad relativamente baja de importaciones, Esta cantidad no permite importar todo lo que serequiere para mantener mm grado méximo de ocupacién. Hay, pues, que modificar la composicién de las importaciones y, correlativamente la estructura y volumen de la yrodiceién interna, para atender las necesidades corrientes de 1a poblacién, sustentando un m&ximo de ocupaciéns Mientras las exportaciones permanezcan en su nivel. minim, sélo podrén realizerse las importaciones esenciales para mantener ‘ld ocupacién y el consumo corriente, Pero cuando aquellas ‘elvan a crecer cfclicamente habré llegado el momento de realizar Las importaciones adicionales que exija el crecimiento de la demande, Asf, ielentres las dmportaciones esenciales para las necesidades corrientes de la poblacién seguirdn.el ritmo relativamente ‘lento del crecimiento orgdnico del pats, las de artioulcs postergables quedardn ‘sujetas « la fluctuacién de las exportaciones ‘/6. AL explicar aren.2/89 Pag. 7 6 A explicar, hace un momento, cémo el descenso del coeficiente de las importaciones selativas al consumo corriente era indispensable para seguir una politica mticfclica, se hiza referencia a los obsteulos que habria que vencer para conseguirles, Esos obstéculos son de diferente naturaleza. Ante todo, 1a substitueitn de importactones por produceién interna requiere generalnente la elevacién de los aranceles de aduana, por el mayor costo que suele tener aquella, Desde este punto de vista, habrfa una pérdida efectiva de ingreso real, Pero, por otro lado, 1a pérdida de ingréso provocada por las fluctusciones cfelicas de 1a ocupacién sucle ser ingerte. Ee my probable que, en 1a mayor parte de los casos, lo que se gana colectivamente al dar estabilidad a la ocupacién, sea mucho mayor de lo que se pierée por el costo mds elevado de produccién interna, Se concibe, sin embargo, que 1a precariedad de recursos naturales y la ineficiencia de la mano ds obra o de la direcctén técnica sean tales, que 1a pérdida por increnento de costo absorba una parte excesiva del incremento de ingreso reel resultante dele mayor ocupacién, No puede negarse la serledad de este obst culo, Por otra parte, esa substitucién de importaciones por produceién interna, requiere la importaciéa da bienes de capital con 1a consiguiente necesided de ahorro, mientras se opera 1a reduceién del coeficiente, An en el caso favorable de que ésto pheds obtenerse internmente, para importar esos bienes de capital, seré indispensable comprinir mds el coeficiente de importaciones relatives al consume corriente, con un mayor encarecimiento de este consumo, He aquf el segundo cbstéoulo que podrfa aliviarse, sin dudae, con la cooperaci én de entidades internacionales de préstancs, las cuales tendrfan asf la /oportunidad de B/cu 12/89 Page 78 oportunidad de demestrar qie sus operaciones anticfclicas, a la'vex que favorecen a los pafses periféricos, contribuyen a mantener en los céntricos la demanda de bienes de capital. Finalzente, una polftica anbiciclica de esta naturaleza podria necesitar desplazemientos de factores productivos que no sienpre son féciles de realizar, Pero el incremento de poblacién en edad productive y el empleo de 1a mal ocupada, como se ha explicado en otro capitulo, podrfan atenuar, en gran medida, estos inconvenientes, 7. En mestros patses el puto mfnimo en la curva fluctuante de 1as exportaciones e inversiones extranjeras, ha ido subiend en sucesives ciclos, Pero ello no quiere decir que aquellas no puedan caer a un nivel inferior al minino del ciclo precedente; el caso no es frecuente, pero ha ocurride, por ejemplo, en la gran crisis mundial, Si se repitiese tal hecho, sélo podria mantenerse un alto nivel de ocupacién en la medida en que hubiera reserves monetarias suficientes para cubrir el exceso de Ampertaciones esenciales sobre las exportaciones minimas, © en tanto cuanto las entidades internacionales de préstano pudierén cumplir eu misién anticfelica./ 8 Ya se ha sefialado 1a necesidad de reducir 1és importacicnes de artfoulos duraderos en 1a menguante del ciclo. auye B/on:n2/89 Pag. @L salida, a igualdad de esos otros factores, Que esta salida de divisas no sea perceptible enias — erecientes cfclicas de estos paises no debiera extraiemos, Puss mientras dura la creciente, Las moves divisas que se incorporan vompensan con exseso, en Las cuentas internacionales del pafs, las divisas que salen y hay un saldo neto de oro a favor del pats, Pero cuando gobreviene la menguante y las exportaciones y demfs © partidas activas decrecen, en vez de crecer, las divisas que salen sobrepasan las que siguen entrando y las reservas monetarias van perdiendo asf parte del oro que habfan ganado, Ay final de cada ciclo queda asf un increnento neto de oro que representa 1a participacién del pats en el reparto mundial de Ja nueva produccién del metal monetario, Es pues una cifrs relativamente pequefia que depende, ala larga, del ritmo de crecimiento econtmice de diche pats, y de au coeficiente de Amportacién y atras pertidas pasivas, en relaci6n al resto del mundo, Si no varfan los coeficientes, el pafs que tiene un ritmo de crecimiento més intenso que el general, tenderé a expulsar una parte del aumento neto de oro que de otro mado podria corresponderle; y esta parte que piorde serd tanto mayor cuanto nds mareada fuere la discrepancia en los ritmos de crecimiento a través de las fluctuaciones cfclicas. ‘Bien pudiera ocurrir que eh inerenento da ore que asi se va agregande con el andar del tiempo a las reservas monctarias de un pets, no resulte bastante para afrontar las consecuercias de um reducci én de las exportactones en una depresién extrsordinarismente intensa, Bs claro que una corpresién cel coeficiexte global de importaciones pod=fa contribeir a retener una myor cantidad de oro en tiempos favorables, a fin de sobrellevar mejor una eventuzlidad B/CN,12/89 Pag. 82 como aquella. También cabria constituir reservas moneterias adicionale: mediante operaciones de ahorro; en la medida que se ahorra y deja de invertirse, una parte de los ingresos que circulan no se trensforma en inportaciones y no da lugar, en consecuencia, a una salida de oro, Se retiene una cantidad de oro igual al ahorro, , Asi podria hacerse, por ejemplo, si el banco central enitiera titulos en la crecierte y cancelara el dinoro correspondiente para volver a emitirlo en 1a menguante; contra el dinero asf cancelado habria uma reserve adicional que, junto con la pre-existente y la participacién en el reparto mundial. del ozo, podrfan aliviar la presién monetaria si las exportaciones mfnimas no aleanzaran a cubrir las importaciones esenciales. No se nos oculta que construir con ahorro una reserva adicional, en paises que necesitan importar grandes cantidades de Dienes de capital no es una solucitn halagaiora, Es evidente, sin enbargo, que si un pafs tuviera expecito el cauino pare obtener créditos internacionales en una bajente demasiado intensa, podria emplear més oro en la creciente para importar tienes de capital en vez de retenerlo ccno se ha visto. Se concibe, en efecto, que ello pudiera Llegar a ye ast, si se pudtera elsborar alguna vez un programa general de accién anticfelica en la periferia, dentro del cual el pats que hubiese seguida una politica sana, pudlera contar con el grado necesario de colaboracitn de las entddades internacionales en el descenso cfclico. Se comprende muy bien que mientras se estaba desenvolviendo un proceso inflacionario en el centro principal, no se hara Juzgado conveniente acentuarlo con operaciones de crédito internacional, adends de les exigidas por las urgentes necesidades de Europa. Pero si Iegara a producirse una contracoitn, el caso /seria distinto Poe /e9 seria distinto y habrfa llegado el momento oportuno de ‘entrar en una politics anticiclica gmeral sin las contradiceiones que traerfa consigo 1a accién unilateral de cada uno de nuestros pafses, 10. La accién internacional na ba de limiterse a 1s esfera del crédito, Pues hay otros medics también eficaces para luchar contra 1a depresién en les patses de la periferia, Se ha discutide mucho acerca de la compra de sobrantes de productos primarios, Es un hecho sabido que en la fase descendente, 1a produccin agraria desclende micho menos que 1a industrial. Existe un interés camfn entre los centros y la periferia m que no desclenda sensiblenente, pues ello dencrarfa la recuperacién de aquellos, De ahf el efecto benéfico que podria ejercer una jutetosa polftica de compra de sobrantes: én tanto pueda atemuarse, on esta form, la cafda cfclica de les exportaciones de los paises preductores, menor seré también el descenso de sus importaciones y, por consiguiente, menos intensa la reduecién do 1a demanda en log pafses industriales. Esta medida regulatoria tendrfa otra virtud, Al contenerse con dichas compras 1a cafda exagerada de los precios de Loa productos primarios, se habria contribufdo a que la relacién entre éstos y los articulos terminados no tienda a volverse persistentemente en contra de los pafses de 1a periferia, segin ya se explicé en otro lugar, Li, ta caractertstica que acsbamos de uencionar, segin La cual 1a produccién agraria desciende mucho menos que 1a industrial o casi no desciende, ha sido tonada en cuenta al esbozar anteriormente estas bases para la discusién de una polftica antdiefelica, Supusimos allf que 1a reduccién de exportaciones trafa consigo 1 descenso de ingresos em el sector de la E/CN,12/89 Pag. a Produccién primaria; pero sin referimmos a la posible desocupacién rural, La bajante se manitiesta més bien en la cafda de precios que en 1a contraceién de 1a producedén. Pero al disminuir con ello les beneficios rureles tanbién dismimyen las inversiones en ‘1a campatia, provocando cierta desocupacién, En consecuencia, que no se juzgue practicable una polftica compensatoria general, por las razones expuestas al comtenzo de este cesftulo, no significa que no haya necesidad de actividedes conpensatorias parcisles, Es inevitable 1a fluctuacién en ciertos tipos de inversiones atin cuando se aplique eficazmente una polftica enticfclica, En efecto, heuos visto que al aunentar los beneficios de los empresarios industriales se acrecientan sus importaciones de bienes de capital. Pero los muevos ectipos recuiersn la construccién de edificios y otras mejoras que absorben mano de obra en la crecierte y la dejan Aisponible en la menguante, lo mismo que en las inversiones rureles. Esto no representa un escollo infranqueable, Una de las vertajas positives de no tener que seguir una polftica compensatoria de obras piblicas © inversiones en general, es poder planear ou desarrollo estable segin las necesidades creciertes del vats y le magnitud del shorro que pueda destinarse aellas. El monto total as construeciones podré asf ir agrandAndose de afio en atic, sin las fuertes oscilaciones ue exigirfa une polftica compensateria, Pero dentro de ese progresivo desarrollo cabrtan my bien reajustes parciales. Por ejenplo, los créditos hipotecarios para 1a construcciés priveda podrian disminuir en le creciente a fin de literar mano de obra para la construecidn industrial, Y en la baJante podria darse oréditos adicioniles para onstrucciones e inversiones rurales Jo mamenat Roneeee en general. 12, Lo que acaba de expresarse en este capitulo dista mucho de constituir un programa de polftica anticfelica, Sélo se ha querido plantear el problena en sus principles términos y Provocar su discusién, destacando, al misno tiempo, edertas diferereies entre las manifestaciones cfclicas ds les centros y Ja periferia, que nos obligan a elaborar nuestro propio programa. Ademés, no habrfa sido completa 1a mericién que nos hab {ass Proptesto, al hacer en este planteamiento de los principales problemas atinentes a nuestro desarrollo econfmico sin dedicar atencién ala polftica mticfclica, Esta polftica es un complémento indispensable de la polftica de desarrollo econénico a Largo plazo, Pues la industria, como ya se dijo, hard resaltar 1s vulnerabilidad de 1a periferia a las fluctuaciones y contingenias del centro, No baste aumentar la productividad absorbiendo con els factores desocupados y mal ocupados. Hay que evitar también que, una vez lograda 1a ocupacién productiva de sus factores, se velva a descouparlos por obra de las fluctuaciones cfclicas. Pero anbas polfticas no sélo son compatibles en 1a meta que se trata de alcamar, sino también en los medios de hacerlo, Pues una y otra requieren el reajuste del coeficiente de Amportaciones, La polftica entiefolica lo axtJe para que un pais pueda satisfacer establemente sus necesidades corrientes y mantener 1 méxino de ocuyacién, a pesar de Jas exportaciones fluctuantes, Precisanente, les industries y actividades que satisfacen estas necesidades son las que nuestros pases pueden implantar con mos dificultades, merced a un mercado que se ensancha cada vex mfs conforme el incremento de productividad va aumentando el consumo, Si un pats logra esta objetivo, estaria en condicioms en eee? de soportar tiempos adversos, sin detrimento de su consumo corriente y de si: coupacién. No necesita para ello forzar la creacién de industrias de capital, Si el grado ds desarrollo industrial, destreza técnica y acumilacién de ahorio lo Leva espontdneanente aello, serfa clertamete my halagedora esta comprotacién de madurez, Pero hebiendo mucho campo disponible para amentar la Productividad de las actividates destinadas al consumo corriente, no se advierte qué razén econdmica habria para seguir auiel camino, Desde ol punto de vista del desarrollo econtmico, ol méxino Ameranento del nivel de vida depende de la productividad, y ésta depende en gran parte de las mfqtinas més eficientes, Por otro Jado, son también los artéculos duraderos de consumo aquellos en que el progreso técico va afreciondo permenentemente mevos artfculos 0 muevas medalidades que sanenten su eficacia, Porecerfa conveniente pues importer esos artfculos on 1a medida en que se pueda hacerlo con exportacbnes, 0, en su caso, con inversiones extranjeras en lo que respect a los bienes de capital, dentro de un programa gereval de desarrollo ecsnémico. Desde el puto de viste anticfolico, adends, las snportaciones do estes artfovlos nes ofrecen el medio de hacer incidir exclisivamete sobre ellos 1as consecuercizs de la fluctuacién de Jas exportaciénes. Todas estas son consideraciones generales que no podrfan, por su mismo cerdcter, responder a casos partioulares. Que tal © cual pats se empefie en inplantar estes industrias de biees duraderos en 1a fase inicial de su desarrollo industrial, podria cbedecer a razones especiales que tbria que analizar cuidadosamente, En esto, como on muchos otros casos, nos encontrans con un /eonceiniente arecario Reve” conccimiento precario de 1a estructura econémica de nuestros paises, su forma cfelica de crecer y sus posibilidades, Si se Logra realizar su investigacién con imparcialidad cientifica 7 estamilar 1a fomacién de economistas capaces de ir captando las mevas manifestaciones de 1a realidad, previendo sus problemas y colaborando en la busca de soluciones, se habré hecho un servicio de incalculable importancia para el desarrollo econémico de la América Latina. Rafil Prebisch

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