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Javier Garrido

Qué es
Personalización
Para educar y evangelizar hoy

Frontera
Hegian 2
c Instituto Teológico de Vida Religiosa
Facultad de Teología
Vitoria-Gasteiz

Editorial ESET
Vitoria/Gasteiz

D.L.:SS-1013/92

Impresión:
Gertu Imprimategia
Oñati. Gipuzkoa
Javier Garrido

QUÉ ES PERSONALIZACIÓN
Para educar y evangelizar hoy

Instituto Teológico de Vida Religiosa


Erlijioso Bizitzaren Teologi Institutoa
Gasteiz/Vitoria
Indice

Presentación.......................................................................................................3

Tema 1: Asimilación y personalización ............................................................5


I. Exposición...........................................................................................5
II. Taller de reflexión ............................................................................11

Tema 2: Claves de la personalización .............................................................13


I. Exposición.........................................................................................13
II. Taller de reflexión ............................................................................20

Tema 3: Marco conceptual ..............................................................................21


I. Exposición.........................................................................................21
II. Taller de reflexión ............................................................................30

Tema 4: Dinámica de transformación .............................................................31


I. Exposición.........................................................................................31
II. Taller de reflexión ............................................................................36

Tema 5: Pedagogía simultánea ........................................................................37


I. Exposición.........................................................................................37
II. Taller de reflexión ............................................................................42

Tema 6: El joven actual ..................................................................................43


I. Exposición.........................................................................................43
II. Taller de reflexión ............................................................................48
Presentación
1. Con este cuaderno el Instituto Espero que este cuaderno aclare
de Vida Religiosa de Euskal Herria posibles malentendidos. Sigo dando
quiere seguir ofreciendo materiales de prioridad a la persona, pero no en
reflexión en torno a la problemática cuanto instancia de personalización,
actual de la vida religiosa. Sin duda, el es decir, en cuanto autoconciencia, si-
tema de la formación inicial es cru- no en cuanto interioridad, precisamen-
cial. A tal modelo de educación, tal te. Las páginas que siguen lo expli-
modelo de vida, y viceversa. Siempre carán.
se ha sabido que el futuro de cualquier
institución está en la calidad de la for- 3. La educación es un tema ina-
mación dada a sus candidatos. barcable. Toca el misterio insondable
de la persona humana y exige constan-
Pero ¿qué formación? te renovación. Por eso, lo importante
es que busquemos entre todos.
El año 1989, en Ed. CLARETIA-
NAS, el autor de este cuaderno pu- No merece la pena discutir en tor-
blicó el libro EDUCACIÓN Y PER- no a los matices. Lo que está en juego
SONALIZACIÓN. Reflexiones sobre es la creación de un nuevo modelo
la formación inicial en la vida religio- educativo, y para ello, lo esencial (a
sa. No pretendía un estudio exhaustivo mi juicio, irrenunciable) es la lucidez
sobre el tema, sino establecer algunos de los centros inspiracionales, que yo
criterios básicos y bosquejar las líneas cifraría aquí:
fundamentales.
a. Replantear sobre nuevas bases
2. Desde entonces he debido con- el modelo tradicional, esclerotizado
frontar mis opiniones en distintos ám- preconciliarmente (y que todavía si-
bitos. Se me ha achacado, especial- gue vigente, con retoques).
mente, cierto individualismo. No era,
ciertamente, mi intención infravalorar b. Integrar madurez humana y es-
lo intersujetivo o la praxis histórica; piritual.
pero reconozco que, proporcionalmen-
te, a nivel pedagógico, los materiales c. Incorporar las ciencias humanas
ofrecidos abundaban más en temas de a la sabiduría del discernimiento de
interioridad. los grandes Maestros de la tradición.
—4—

d. Desencadenar procesos que Nota: El propósito de estos cua-


ayuden a los jóvenes a ser autónomos dernos es combinar la Exposición de
en este mundo secular y a seguir las los temas con el Taller de Reflexión a
huellas de Jesús hasta el olvido de sí fin de que puedan servir de materiales
mismos, tanto en la vida comunitaria para uso personal y para encuentros
como en su misión. comunitarios.

e. Liberarse de los sistemas nor-


mativos de perfección para vivir de las
virtudes teologales, fundamentados en
la gracia salvadora de Dios. Pamplona, marzo 1993.
Tema 1
Asimilación y personalización

1. Exposición ven quiere hacer suyos, pues volun-


triamente ha decidido ser religioso/sa.
Para comprender qué es la perso-
nalización, comenzamos por distin- - Tales valores constituyen el ideal
guirla de la asimilación. El modelo de su vida y despiertan su interés vital,
preconciliar de formación en la vida el “deseo”. Aquí reside la fuerza afec-
religiosa puede caracterizarse por la tiva de la motivación vocacional.
palabra “asimilación”. De hecho, to-
davía sigue vigente en la mayoría de - Sobre este presupuesto opera la
nuestras instituciones. Esta afirmación institución. Partiendo de esa identifi-
podrá parecer exagerada, pues somos cación global con nuestro proyecto, se
conscientes de la revolución que he- trata de que la comunidad educativa le
mos vivido postconciliarmente. Creo, ofrezca razones, ámbito, experiencias
sin embargo, como veremos ensegui- y conducta que, progresivamente, ha-
da, que el cambio no ha alcanzado a gan del joven un religioso/a, más con-
los fundamentos de la asimilación. cretamente, un franciscano/a, una hija
Hemos liberalizado y flexibilizado las de la caridad, un carmelita.
formas, hemos añadido nuevos conte-
Deseo y rol (o imagen social) se
nidos; pero seguimos formando en
correlacionan, de tal manera que lo
función de los valores y normas de
que se espera, cabalmente, del joven
nuestro proyecto de vida, que el can-
es que responda con la mayor genero-
didato a la vida religiosa quiere asimi-
sidad posible y motivado espiritual-
lar lo más responsablemente posible.
mente a nuestro ideal de vida.
1. El modelo educativo de asimila-
- La garantía de que la asimilación
ción
es real es la coherencia de vida, es decir,
Rasgos que lo caracterizan: si su conducta concuerda con sus deseos:
si es casto, fiel a la oración, responsable,
- Se parte de unos contenidos doc- si es capaz de vivir comunitariamente sin
trinales y prácticos, justificados teoló- conflictos, obediente y pobre, sicológica-
gicamente y por la tradición, que el jo- mente sano, entregado al prójimo, etc.
—6—

- La pastoral vocacional se con- institución con sus valores y proyecto


centra en detectar “los gérmenes voca- de vida? No. Ha de ser resituada, co-
cionales” en la infancia, o bien en la mo veremos.
adolescencia, cuando se ha pasado la
confusión de la primera adolescencia, 2. Valoración del modelo de asimila-
a los 17-18 años, y el chico/a decide ción
su ideal de vida.
Como todo modelo, tiene sus aspec-
- Para ello, los instrumentos ade- tos positivos y sus aspectos problemáti-
cuados son las instituciones que, des- cos. Los formularé escuetamente:
de la familia a los colegios o a las pa-
rroquias, garantizan una educación 1) Por una parte, responde a la ne-
continuada, sin rupturas, que permitan cesidad del adolescente de despertar al
al joven mantenerse y crecer en unos sentido de la vida desde un ideal ele-
valores determinados. vado. Lo cual, a mi juicio, es un valor
irrenunciable, también en el modelo
Estos rasgos, a su vez, pueden te- de personalización.
ner acentos variados. Las instituciones
más conservadoras acentúan la asimi- Por otra parte, sin embargo, estructu-
lación mediante el aprendizaje de hábi- ra la educación de un modo “protector”,
tos de conducta y actitudes, con poco evitando al chico/a la confrontación con
margen para la iniciativa personal. Las otros ideales. Lo cual resulta altamente
instituciones consideradas “abiertas” problemático en el mundo secular e ide-
crean un clima más dialogante y flexi- ológicamente plural en que vivimos.
ble respecto a las formas, por ejemplo,
respecto al contacto con el mundo. La identidad de la persona no está
en la asimilación, sino en una síntesis
La personalización supone un vira- propia, que exige un proceso crítico.
je: El centro de la educación no se sitúa
en la asimilación de lo dado por la ins- 2) Por una parte, es un instrumento
titución, sino en un proceso, en que el eficaz para obtener vocaciones, pues
candidato se hace sujeto de su propia aprovecha el buen momento del ado-
historia, de modo que aprende a tomar lescente, cuando todavía ni la edad ni
su vida en sus manos, a hacerse perso- las circunstancias le obligan a experi-
na y a descubrir, desde su propia auto- mentar qué resistencia opone la reali-
nomía, la voluntad de Dios en su vida. dad (las instituciones religiosas, el
mundo, su propio yo personal) a sus
¿Desaparece, en consecuencia, la expectativas juveniles.
—7—

Por otra parte, sin embargo, eso nalización, ¿no obliga a cambiar,
mismo da a entender la inconsistencia igualmente, la pastoral vocacional?
de las motivaciones vocacionales aun-
que el chico/a sea básicamente sano y 3) Por una parte, nuestras institu-
haya tenido un desarrollo normal tanto ciones sólo pueden mantenerse con un
en el campo humano como en el espi- alto grado de cohesión ideológica y de
ritual. estabilidad de normas de vida. Así es;
lo cual exige procesos intensos de asi-
Y es que la fundamentación voca- milación.
cional no se da cuando se asimilan in-
ternamente los valores de los votos y Por otra parte, sin embargo, si
el carisma específico de un instituto, queremos devolver a la vida religiosa
sino cuando se ha experimentado las su carácter profético, ¿cabe hacerlo
contradicciones de la condición huma- poniendo el acento en el orden objeti-
na y la fuerza salvadora de la Gracia. vo, en el “sistema de perfección”?

¿Conviene, en consecuencia, La personalización implica una


aprovechar el momento idealista del educación que integra el principio an-
joven para luego educarlo en la perso- tropológico de la autonomía y el prin-
nalización? Mi opinión exige otra pre- cipio paulino de la libertad de los hi-
gunta previa: Cuando la formación jos de Dios. ¿Cómo lo hace, sin caer
inicial en la vida religiosa es de perso- en la ilusión del narcisismo?
—8—

3. Esquema comparativo

Partamos de algunos ejemplos.


M.C. tiene 20 años y es postulante
desde hace 8 meses con otras 4 com-
pañeras. A los pocos días de convi-
vencia comenzó a darse cuenta de que
“conectaba” especialmente bien con
C.M. Ha ido intimando, y ahora se en-
cuentra, sin saber cómo, atrapada en
una dependencia afectiva. La maestra
se ha dado cuenta, ha hablado con ella
y ambas quieren abordar el problema.

ASIMILACIÓN PERSONALIZACIÓN

- Se trata de una “amistad particu- - ¿Qué da a entender de la afecti-


lar”, que amenaza la convivencia co- vidad de M.C. la relación con C.M.?
munitaria y se opone a la afectividad ¿Cómo ha sido su historia anterior?
espiritual de la persona consagrada. ¿Conviene que aprenda autonomía
afectiva, o más bien, tiene que apren-
der a vincularse?

- Hay que motivarla a la renuncia - Hay que aprovechar esta expe-


generosa para que su afectividad se riencia para que se encuentre con su
centre en Dios. yo real y se confronte con sus ideales.

- La comunidad educativa pide - La comunidad educativa discier-


una conducta que resuelva el conflicto ne qué es lo que conviene aquí y ahora
de la convivencia. para la interesada, y para ello, propug-
na una dinámica de grupo con todas
las postulantes, después de haber ha-
blado con M.C. y C.M.
—9—

F.G. tiene votos temporales y está


en cuarto de teología. Lleva un grupo
de jóvenes de postconfirmación. Al
principio, hace un año, se sintió a gus-
to, pues había un ambiente “majo” de
comunicación. Ahora, las relaciones
se han complicado, porque, de los 13
que son, cuatro han cuajado en 2 pare-
jas, y hay uno que bloquea una y otra
vez la reunión con su agresividad. Lo
peor de todo es que este conflicto le
está repercutiendo en la oración. “No
puedo concentrarme”, dice.

ASIMILACIÓN PERSONALIZACIÓN

- Las dificultades pastorales son - ¿Qué capacidad tiene F.G. para


normales. En la oración se encuentra elaborar conflictos? ¿Qué significa la
la luz y la fuerza para abordarlas. insistencia en la oración precisamente
ahora?

- Cuando no se puede hacer ora- - ¿Por qué no hacer oración con el


ción de silencio, es bueno cambiar de conflicto y percibir que Dios está ahí,
método, y recurrir a un libro para no en la dificultad, construyendo su Rei-
distraerse. no, en el que conviven trigo y cizaña?

- Aprovechar la situación para ma- - Aprovechar la situación para


durar en la fidelidad a la misión y a la aprender a incorporar la realidad a la
oración. experiencia de la fe.
— 10 —

Podríamos multiplicar los ejem-


plos, y caer en una contraposición. La
verdad es que la personalización pre-
supone un cierto grado de asimilación.
La diferencia está en las perspectivas
de principio, que supone una articula-
ción distinta de las instancias educati-
vas, precisamente porque la personali-
zación pretende ir más lejos, trazar un
camino de transformación que alcance
al núcleo de la persona.

ASIMILACIÓN PERSONALIZACIÓN

- Presupone la libertad, pero sólo - Libertad activa, que parte de la


como respuesta a lo objetivo preesta- fidelidad a sí mismo y al proceso de
blecido. ser.

- Se centra en los contenidos (nor- - Se centra en el proceso de trans-


mas, ideales, valores). formación.

- Se apoya en el deseo que se - Se apoya en la autenticidad co-


identifica con un proyecto. mo actitud existencial básica.

- El fruto de la educación es valo- - El fruto de la educación está en


rado por el grado de asimilación del la autonomía de la persona, funda-
rol. mentada en la obediencia de fe.
— 11 —

II. Taller de reflexión tingue las ideas y las reacciones emo-


tivas primarias.
Para la Reunión comunitaria:
- Es importante que la reunión co-
- Comenzar por cambiar impresio- munitaria no se enzarce en actitudes
nes de lo leído, centrando el diálogo “conservadoras”, que defienden la asi-
en la casuística del apartado 3. Esque- milación, ni en las actitudes progresis-
ma comparativo. tas, que defienden la personalización.
Habría que intentar aclarar “qué hay
- Continuar con el siguiente Cues- detrás” de estos modelos, algo que, en
tionario: principio, será aclarado en ulteriores
temas. Por eso, no se trata de llegar a
1) Recuerda los años de tu forma- ninguna adhesión, ni a favor ni en
ción inicial y enumera los aspectos contra, de la personalización, sino de
positivos y negativos. aprovechar las reuniones para apren-
der a profundizar en la problemática
2) ¿Sientes con cierta frecuencia de la vida religiosa que estas cuestio-
la dificultad de diálogo con los jóve- nes representan.
nes? ¿Dónde se bloquea el diálogo, en
los valores o en el modo de llevarlos a
cabo?

3) ¿Qué sientes espontáneamente


cuando oyes la palabra “perso -
nalización”, de moda en algunos am- Material de profundización: Educa-
bientes, aplicada a la formación? Dis- ción y personalización, pp. 11-21.
Tema 2
Claves de la personalización

I. Exposición 1. Autenticidad

Las claves de la personalización Para la personalización es decisivo


expresan los puntos neurálgicos que distinguir entre autenticidad moral y
configuran este modelo de educación. autenticidad existencial. Aquélla se
Cada modelo tiende a expresarse en define por una conducta coherente, de
palabras-claves o ideas matrices. Estas acuerdo con referencias objetivas
sirven para articular orgánicamente la (mandamientos, consejos evangélicos,
praxis formativa. reglas o constituciones de la congre-
gación). La persona responde a unos
No hay que confundirlas con las valores conscientemente asumidos y
“instancias”, de las que hablaremos en puestos en práctica, con un grado ma-
el tema 3. yor o menor de perfección.

Tampoco se indican todas. Esco- La autenticidad existencial radica-


gemos algunas especialmente signifi- liza la libertad situándola más allá del
cativas de las intencionalidades que bien y del mal. Entiéndase bien, no en
animan este proyecto formativo. Por sentido amoral, sino radicalmente mo-
lo mismo, es imprescindible captarlas ral, como experiencia trascendental de
en su conjunto, unitariamente. Sólo hacerse responsable de ser persona
así logran perfilar la coherencia de la que busca vivir en verdad.
personalización, evitando posibles mi-
tificaciones. En efecto, la observación de todos
los días nos dice cuántas conductas
Digo esto porque, con frecuencia, irreprochables desde el orden religio-
la personalización, al ser un término de so-moral ocultan una profunda inau-
uso polivalente, ha sido superficialmen- tenticidad. La personalización quiere
te entendida. Por ejemplo, no se puede alcanzar las actitudes básicas, las que
reducir la personalización a la mera atañen al “corazón” en sentido bíblico.
atención individualizada o a la interna- Pero, para ello, prefiere la lucidez y el
lización de valores mediante amplios lenguaje antropológico en vez del es-
tiempos de reflexión. En estos casos se piritual, pues éste se ha prestado y
trata de formas de asimilación, sin más. presta a enmascarar sistemas de auto-
— 14 —

justificación o motivaciones incons- davía hoy, cuando el chico/a entra en la


cientes en la conducta. vida religiosa, la educación se centra
en conformar su vida “desde arriba” y
¿Que el lenguaje antropológico “desde fuera”, es decir, en función de
enmascara, igualmente, el narcisismo seguir a Jesús en pobreza, obediencia y
de la libertad? Sin duda. En conse- castidad, como discípulo de Jesús. Para
cuencia, habrá que situarlo en las co- ello, va creando convicciones y hábitos
ordenadas de la antropología cristiana. de conducta dentro de un grupo que se
Pero, en una cultura antropocéntrica caracteriza por ser signo o testimonio
como la nuestra, creemos que la pri- de la vida de Jesús. Es verdad que los
mera piedra de toque está ahí, en la documentos actuales sobre la forma-
ética de la libertad. Auténtico es el ción inicial insisten en que ésta ha de
que toma la vida en sus manos como ser gradual. Pero gradual, en definitiva,
algo suyo, irreductible, y no subordina en función de una introducción progre-
su libertad intransferible a sistemas de siva en un determinado estilo de vida.
seguridad, por más garantía de objeti-
vidad que tengan. Fidelidad a sí mis- Vivir en proceso, por el contrario,
mo, por encima del “rol”, por encima significa dejar al joven que sea él mis-
incluso de las normas morales interna- mo, que vaya descubriendo por sí mis-
lizadas en función de la necesidad de mo si sus opciones vocacionales son
autoimagen. reales o “montajes” añadidos, si, al in-
tegrarse en la institución, ésta le do-
La pregunta decisiva no es si me mestica o le posibilita crecer en liber-
porto bien o mal, sino si lo que hago tad. Que cierto grado de adaptación a
es en verdad mío. la institución es necesario, sin duda.

2. Proceso La personalización cuidará de no


caer en un individualismo; pero es
Para que los valores de la vida irrenunciable que la institución esté
consagrada sean míos, la personaliza- subordinada al proceso del candida-
ción implica una concepción dinámica to/a. Por ejemplo, si el joven, aunque
de la educación. tenga votos temporales, necesita vivir
cosas no vividas, porque su proceso
Los ideales y las normas son in- de maduración humana y espiritual lo
temporales. Por eso, la educación tradi- exige, la comunidad educativa buscará
cional concebía al niño en el seminario la fórmula que integre sus necesidades
menor como un cura en pequeño, que institucionales con las del joven; pero,
vive anticipadamente como tal. To- en caso de conflicto irreductible, tiene
— 15 —

siempre prioridad el joven. Concrete- mentar todo el peso de la limitación


mos más: ¿Está dispuesta la forma- humana a los 45 años que experimen-
ción a que el chico/a viva experiencias tar la crisis de autoimagen a los 20-22
de enamoramiento, que amenazan la años. Pero es necesario superar ese ta-
vocación, si lo necesita? lante de adolescencia que opera en
nuestras instituciones eclesiales a base
Hacer míos los valores de la vida de superestructuras altamente ideolo-
consagrada implica un proceso de gizadas o de voluntarismos idealistas.
confrontación entre deseo ideal y rea-
lidad. La espiritualidad clásica, marca- Todo tiene su riesgo, pues insistir
da por la metafísica platónica, hizo del en el proceso puede traer como conse-
deseo la clave de la espiritualidad: por cuencia un realismo chato y calcula-
el deseo la finitud trasciende lo sensi- dor. Sin tensión de Absoluto no hay fe
ble y lo temporal para unirse al Bien ni experiencia del Reino. Que quede
Absoluto. La espiritualidad bíblica no claro que la personalización no niega
niega la aspiración del hombre a Dios, el ideal, sino lo resitúa en un proceso.
pero subraya sobre todo el descenso
de Dios al hombre, y por ello conside- Para profundizar en este aparta-
ra como espiritual la presencia de do: cf Educación y personalización,
Dios en el corazón mismo de la histo- pp. 105-118.
ria. En este sentido, hablar de proceso
significa percibir lo trascendente “des- 3. Experiencia de la condición hu-
de dentro” y “desde abajo” de la reali- mana
dad. Lo cual coincide, culturalmente,
con el viraje antropocéntrico de la mo- La palabra “personalización” está
dernidad. tan ligada a connotaciones narcisistas
de corte “postmoderno” que, demasia-
Sin duda, el adolescente precisa do frecuentemente, provoca reaccio-
descubrir el sentido de la existencia nes de rechazo o prevención. Nunca
ensanchando el horizonte mediante insistiremos suficientemente en la ne-
valores universales y perspectivas de cesidad de entenderla en un sentido
Absoluto. El problema comienza radical. Si ser fiel a sí mismo va a
cuando hay que dejar de ser adoles- quedarse en capricho... Si ser auténti-
cente y comenzar a ser adulto. El mo- co consiste sólo en hacer lo que me
delo de personalización propugna cla- parece, ignorando a los demás... Si
ramente la confrontación entre ideal y respetar el proceso es una trampa para
realidad como clave de la adultez. no arriesgar nada y evitar toda crisis y
Ciertamente, no es lo mismo experi- ruptura...
— 16 —

La personalización sólo se entien- el pecado como experiencia global,


de cuando conlleva la transformación como poder de muerte, que pone al
de la persona. Conversión, en sentido descubierto la mentira existencial, el
bíblico, y conversión, cabalmente, que egocentrismo, la autojustificación...
supone experimentar la densidad de lo
real a niveles cada vez más hondos. Como es obvio, la personalización
propugna experiencias vividas, a la
Lo contrario de una espiritualidad medida del joven adulto y respetando
centrada en lo “objetivo imaginario”, su momento. Quedarse en palabras bo-
es decir, en un mundo aparte, superior, nitas o en consideraciones piadosas só-
desligado del mundo y de la condición lo servirá para internalizar conceptos o
humana en él. La educación en la per- motivar sentimientos superficiales.
sonalización obliga a hacer la aventura
humana hasta el final y sentir el escán- Dicho de otra manera: La forma-
dalo de Dios que quiso hacerse hom- ción en clave de personalización da
bre y compartir todo con nosotros. máxima importancia a las crisis, ten-
gan un carácter irruptivo o gradual;
Algunos temas se hacen especial- pero donde la persona humana apren-
mente significativos: de a no huir de lo real y liberarse de la
necesidad de controlar y objetivar la
- La ruptura de la imagen infantil existencia. Tal es el ámbito propicio
de Dios ligada a nuestros deseos ima- para lo que es el núcleo del proceso
ginarios, sin conflictos. de personalización: la experiencia
fundante.
- La experiencia de que el camino
del Reino no responde a nuestras ex- En este sentido, sus raíces inspira-
pectativas y deseos. Aplíquese a las cionales no pueden ser más tradicio-
metas de perfección individual, a las nales. Sin esta verdad de la existencia
ambigüedades de la Iglesia, a la me- todo edificio espiritual se construye
diocridad de nuestras instituciones, a sobre arena. La diferencia entre asimi-
la ineficacia de los valores cristianos lación y personalización está en que
en la sociedad... aquella es paternalista y protectora, y
ésta obliga a la maduración humana y
- El encuentro con la densidad del espiritual, simultáneamente.
mal y del sufrimiento en todas sus formas.
¿Es que hemos de educar para una
- Las contradicciones insalvables vida religiosa entre muros o a la in-
de la condición humana, y entre ellas, temperie?
— 17 —

4. Visión integral tes, la trayectoria, las rupturas, para


articular una unidad de sentido, en
Todos los documentos postconci- cuanto es posible.
liares sobre la formación intentan su-
perar la formación preconciliar, consi- Para ello, simultáneamente, hace un
derada moralista y espiritualista, y discernimiento sincrónico. En vez de
afirman las tres dimensiones: humana, analizar por separado cada área del pro-
cristiana, específicamente religiosa. yecto de vida, interrelaciona todas las
Es un paso importante. El problema áreas a través de una lectura de la expe-
estriba en cómo hay que articular esas riencia vivida en sus diversos niveles:
tres dimensiones. Sicológico, social, existencial, espiritual.

Pongamos un ejemplo: T.O. en el Por ejemplo, el problema de T.O.


noviciado se dedicó con ahínco a la no es que no lleva equilibradamente
oración. Ahora, en el juniorado, ha co- su proyecto de vida, sino que el des-
menzado a estudiar de asistente social plazamiento de su interés vital de lo
y va dejando la oración. Pero hay más: espiritual a lo social da a entender el
ha perdido interés por lo comunitario paso de un intimismo afectivo a la ne-
y está pendiente, excesivamente pen- cesidad de confrontar la fe con la au-
diente, dice su maestro, de sus tareas tonomía del mundo.
fuera de casa.
- Psicológicamente puede ser leído
La formación de asimilación va a como paso de la primera adolescencia
pedirle un proyecto personal en que a la segunda, más madura, configura-
equilibre los diversos aspectos: la res- do por lo social.
ponsabilidad por el estudio, el interés
por la vida comunitaria, la relación - Socialmente, que vive en un con-
con Dios y la acción. La personaliza- texto (el juniorado) que le obliga a
ción, sin embargo, comenzará por ha- asumir nuevos roles.
cer discernimiento y preguntarse qué
significado tiene, en el proceso de - Existencialmente, que es poco
T.O., el contraste de intereses vitales autónomo, que está curioseando la vida.
entre el noviciado y el juniorado.
- Espiritualmente, que su fe está
La visión integral comienza por marcada por cierto dualismo y no sabe
este discernimiento diacrónico. Sitúa integrar su intimidad afectiva con
toda experiencia significativa en una Dios y la presencia de Dios en el mun-
historia, intentando captar las constan- do.
— 18 —

Un buen discernimiento de perso- Dicho así, a grandes rasgos y teó-


nalización deberá ahora establecer una ricamente, estoy de acuerdo. En reali-
estrategia unitaria que le permita inte- dad, si mantengo la palabra personali-
grar el proceso de maduración huma- zación es por un doble motivo:
na y espiritual que se está poniendo en
juego en T.O. - Primero, porque hay demasiada
prisa, teórica y práctica, por reducir el
Todo ello exige, por parte del edu- principio de la modernidad, la auto-
cador y del candidato, una visión inte- nomía del hombre, a categorías te-
gral antropológica es decir, que com- océntricas, sin haber hecho un esfuer-
prenda la complejidad y unidad de la zo serio de articulación real de auto-
persona humana, a la vez que las gran- nomía y gracia.
des leyes del desarrollo sicológico y
espiritual del joven, especialmente, - Segundo, porque se supone que
del adolescente y del joven adulto. De no hay nada que revisar en los con-
esta visión antropológica hablaremos ceptos tradicionales sobre el tema.
en el tema 3, cuando precisemos las
instancias que estructuran la persona Para profundizar en los presu-
humana y la dinámica de la interiori- puestos antropológicos y teológicos,
dad, que presupone la concepción remito a los apuntes de Educación y
cristiana de la persona humana. personalización, pp. 43 ss.

5. Autonomía y gracia Este cuaderno sólo quiere ayudar a


comprender qué es la personalización.
La palabra personalización, como Un ejemplo valdrá por mil reflexiones
autorrealización, proceso o proyecto, teóricas. F.G. nació en una familia muy
pertenece a un lenguaje antropológico. religiosa y de educación moral estricta.
De ahí que choque a oídos acostum- A los 18 anos decidió entrar en la vida
brados a lenguajes morales y religio- religiosa. Su vocación había aparecido,
sos. ¿Por qué no hablar más bien de según ella, a los 1.4, simultáneamente
conversión y salvación en Dios? Al con unos ejercicios espirituales organi-
fin y al cabo, la formación para la vida zados por el colegio. A raíz de éstos
religiosa presupone que la autonomía comenzó a tener director espiritual.
del hombre es relativa, que, en defini- Ahora, a sus 22 años, ha comenzado a
tiva, ha de ser teónoma, y que, en con- notar una dificultad extraña, descono-
secuencia, todo proceso de personali- cida antes, para obedecer a la superio-
zación, auténticamente cristiano, se ra. Hace oración asiduamente, es gene-
llama obediencia de amor. rosa en el servicio a las hermanas; pe-
— 19 —

ro, en cuanto la superiora le manda al- - La segunda intenta discernir las


go de más, de “supererogación”, se razones de dicha dificultad. Y, claro,
crispa. Obedece materialmente, pero allí se encuentra con la imagen de la
su mente se rebela con una carga de infancia de su madre autoritaria, y con
agresividad excesiva. que F.G. ha comenzado a tener tareas
propias desde que dejó el noviciado, y
Caben dos pedagogías: con que es más participativa comuni-
tariamente...
- La primera insiste en alcanzar la
virtud de la obediencia perfecta, apoyán- Dejo al lector que juzgue por sí
dose en su generosidad. Cuando necesita mismo y encuentre un camino sabio
razones teológicas, F.G. las acepta bien para orientar a F.G. ¿Se trata de espe-
mentalmente: la forma suprema de liber- rarlo todo de la Gracia? ¿Se trata de
tad es la obediencia de amor, en que uno comprender la Gracia en el proceso de
se desapropia de sí mismo. Si todavía no autonomía de la persona? ¿Se trata de
consigue ese grado de libertad, no debe guiar mediante esquemas de perfec-
preocuparse, pues a los 22 años no se ción? ¿Se trata de discernir lo adecua-
puede ser perfecto. Ya irá haciendo el do aquí y ahora?
Señor su obra por dentro.
— 20 —

II. Taller de reflexión Entre autonomía y Gracia, entre tu


esfuerzo y la confianza en la Salva-
Cuestionario ción, entre tus iniciativas y la obedien-
cia al Señor.
1) ¿Echas en falta en tu vida algu-
na de estas claves, o constatas que las 3) Aplicar al momento actual de
has tenido que trabajar por tu cuenta, a las personas y de la comunidad estas
pesar de la formación inicial e incluso cuestiones.
del ambiente institucional en que te
mueves? 4) Discernir si, en la relación de
ayuda a otras personas, tenemos en
2) ¿Cómo has vivido en tu historia cuenta las claves de la personaliza-
la dialéctica? ción. Analizar dificultades y, también,
aspectos que iluminan positivamente
- Entre radicalidad y necesidades nuestra ayuda al prójimo.
(la vocación al Seguimiento implica
ciertas renuncias, capacidad para “per- Este cuestionario puede ser traba-
der la vida y, así, ganarla”, según el jado a nivel personal y comunitario.
Reino; pero somos humanos y tene- En este caso, exige crear un ambiente
mos necesidades de bienes económi- propicio para la comunicación; de lo
cos, de gratificaciones sensibles, de contrario, se presta a divagaciones
afectividad, de valoración social, de abstractas.
eficacia en la tarea. . .).
Tema 3
Marco conceptual

I. Exposición rioridad, el único que atañe al proceso


de transformación de la persona (obje-
Este tema resulta el más difícil, por tivo propio de la personalización).
su carácter abstracto; pero el más impor-
tante para entender en qué consiste la Dado que el tema se presta a un
personalización y evitar malentendidos. desarrollo prolijo, me parece que un
cuaderno de estas características debe
Comparado con el libro Educación hacer un esfuerzo de concentración. De
y Personalización, el Autor reconoce ahí su estilo escueto, que será compen-
haber dado un paso en cuanto al esque- sado, espero, por la reflexión del lector.
ma aclaratorio. Al distinguir instancias
e interioridad y al distinguir, a su vez, 1. El esquema
la interioridad y la autoconciencia, y al
explicitar mejor una visión integral de La persona humana es tan rica y
las instancias, aclara por qué la lectura polivalente, que puede decirse de ella
del libro daba la impresión de no hacer casi todo. Está constituida por evolu-
suficiente justicia a las dimensiones in- ción biológica y por influencia cultu-
tersujetivas o de praxis histórica. Estoy ral; se inserta en la red de relaciones
acostumbrado a manejar mejor el mun- intramundanas y se abre al sentido de
do de las conciencias que el de los gru- la existencia desde la trascendencia;
pos huma-nos. Y mi tarea se desarrolla capaz de autoconciencia solitaria, no
usando principalmente las mediaciones puede realizarse sino en la intersujeti-
de la reflexión y la oración. Son limita- vidad; necesita teorizar y contemplar a
ciones, ciertamente. distancia la realidad, pero también
transformarla; es la razón que inter-
Pero espero que el esquema sirva, preta el mundo, pero Dios le ha habla-
igualmente, para aclarar que el proble- do en Jesucristo; responsable de sí
ma de la personalización no está en la mismo e incapaz de alcanzar su auto-
dialéctica individuo-comunidad, o plenitud...
conciencia-praxis, u oración-acción,
sino en la dialéctica vivida entre las Sin embargo, para aclarar la per-
diversas instancias y el nivel de inte- sonalización, necesitamos recurrir a
— 22 —

unas categorías básicas que nos den cia y trascendencia, autoconciencia e


una visión de conjunto de la persona intersujetividad, razón y praxis, nece-
humana. sidad y libertad, etc.).

2. Instancias 1) La autoconciencia hace referen-


cia a la persona en cuanto individuo.
Las instancias son los componen-
tes que integran dinámicamente a la Implica la reflexión, la soledad, el
persona. He puesto cinco, buscando autoconocimiento, etc.
una visión integral de la persona hu-
mana. ¿Falta alguna importante? Sin 2) La intersujetividad hace refe-
duda, cabe sistematizar las dimensio- rencia al ser persona-con. El yo es
nes humanas de forma distinta, por esencialmente relación, y primordial-
ejemplo, por bipolaridades (inmanen- mente, relación inter-humana.
— 23 —

Hay diversos ámbitos de intersuje- interactivamente, o sea, que se influ-


tividad: padres; hermanos; educadores; yen las unas en las otras. Por ejemplo,
amigos; pareja; grupo de pertenencia; la cosmovisión depende del ámbito
relación laboral, social, política, etc. socio-cultural; la autoconciencia, qué
imagen tengo de mí, depende de la
3) La persona es, también esen- imagen que los demás me dan.
cialmente, relación activa con el mun-
do, es decir, trabajo. 3. Interioridad

Implica la profesión, las activida- La personalización da máxima im-


des plurales, la capacidad de tener portancia a la interioridad, precisa-
“mundo propio”, la colaboración con mente porque las instancias son obje-
otros, etc. tivables y tienden a ser trabajadas co-
mo sistema controlable, mediante el
4) El contexto socio-cultural hace cual se realiza el equilibrio integral de
referencia a la situación histórica, a la persona. El razonamiento implícito
las circunstancias internas en que uno suele ser: “Si la persona se constituye
se mueve. con las instancias, favorecer cada una
y su conjunto garantizan la madurez”.
Eso que llamamos pluralismo so- La interioridad, sin embargo, es la di-
cial, cultura moderna o postmoderna, mensión inobjetivable de la persona, y
uso de bienes económicos, corrientes por lo mismo, el factor determinante
ideológicas, “mass-media”, etc. por excelencia de la personalización.

5) Cosmovisiones son los símbo- No debe ser confundida con la in-


los y significados que la persona ha timidad en cuanto autoconciencia, re-
internalizado y con los que interpreta flexión o autoconocimiento. No es una
y da un sentido a la vida. instancia, sino la personalización de
las instancias.
La cosmovisión cristiana se inspi-
ra en la palabra de Dios. Lo cual exi- Interioridad significa que la perso-
ge la integración de razón y Revela- na humana, constituida por una red de
ción, y más profundamente, la inte- relaciones y significados (instancias),
gración de la autorrealización y de la es, nuclearmente, sujetividad espiritual.
Salvación en cuanto acción libre de la A esto han llamado siempre las distin-
Gracia. tas cosmovisiones no materialistas,
cristianas o no, alma. No hablo en sen-
Las instancias hay que entenderlas tido metafísico, como sustancia contra-
— 24 —

puesta a cuerpo, como interioridad lee lo dado y los objetos (idealismo


contrapuesta a exterioridad, sino como: transcendental, neopositivismo, etc.).
El dato obvio es que la persona perci-
- Capacidad de incorporar la reali- be una misma realidad a distintos ni-
dad o de hacer suya la realidad. La per- veles de ser. Pongamos ejemplos:
sona es sujeto, no objeto, en el mundo.
La instancia “autoconciencia”
Personalizar consiste en hacer mía puede significar;
la realidad, cualquier realidad, interior o
exterior, intramundana o trascendente. - percepción empírica de conteni-
dos interiores;
No se confunda, pues, con la “in-
ternalización”, que sólo es el requisito - afirmación metaempírica del yo;
sicológico de la interioridad.
- reflexión, en cuanto sujetividad
- Capacidad de situarme en la rea- que se distancia del conjunto de las
lidad como centro que actúa desde sí. experiencias vividas para retomarlas y
reelaborarlas;
No se confunda con la autonomía,
que es un modo de vivir la libertad - autonomía frente a heteronomía; etc.
con cierto grado de interioridad.
La instancia “intercomunicación”
Se opone a la sujetividad alienada, (una de las formas de la intersujetivi-
que se pierde en el “fuera de si”. dad) puede significar:

Implica autenticidad existencial, - un hablar puramente funcional,


capacidad de vivir “de dentro afuera”, como cuando dos desconocidos ha-
de ser fiel a sí mismo, etc. blan del tiempo;

- Capacidad, sobre todo, de perci- - un hablar que implica la afectivi-


bir lo real en distintos niveles de den- dad de las personas;
sidad ontológica.
- la experiencia interactiva de cre-
Dejo a los filósofos aclarar si la ar juntos un proyecto de vida; etc.
densidad ontológica de lo real es abs-
tracción-reflexión del ser y de los en- Estos niveles diferenciados de sig-
tes (platonismo-aristotelismo) u hori- nificado se hacen más evidentes cuando
zonte de sentido con que la sujetividad se refieren a las experiencias centrales
— 25 —

de la personalización. Por ejemplo, si El esquema gráfico lo indica al


decimos que la experiencia fundante mostrar la interioridad como círculo
consiste en “ser en sí más allá de sí”, la que contacta con todas las instancias y
entenderé diversamente, según la densi- las penetra por dentro. Se podría com-
dad ontológica con que resuena en mí: parar (toda comparación es parcial)
con una columna de cemento armado:
- A nivel sicológico, significará la interioridad, al armazón de hierro; y
capacidad de distanciarme de mis las instancias, al cemento.
emociones para salir de mí.
4. Personalización y despersonaliza-
- A nivel social, que he entrado ac- ción
tivamente en el juego de las relaciones
intersujetivas. Para una visión realista de la per-
sonalización, hemos de integrar, tam-
- A nivel existencial, que el tú de bién, todos aquellos elementos que la
tal manera da sentido a mi vida que amenazan o destruyen.
me descentra de mí (amor).
a) Elementos ambivalentes.
- A nivel espiritual, la experiencia Aquellos que personalizan o desper-
teologal de ser fundamentado en la sonalizan según la interioridad los
Gracia (obediencia de fe). elabore positivamente o no. Por
ejemplo:
La personalización no se realiza en la
interioridad, como si fuese una instancia - La enfermedad.
entre otras (asimilable a la auto-concien-
cia), sino que se realiza en las instancias. - Las limitaciones sicológicas que
no desestructuran.
- Es la interacción con éstas la que
desencadena los niveles de percepción - El sufrimiento como parte inte-
de la interioridad. grante de la condición humana.

- Y viceversa, si la interioridad no - La finitud y la muerte misma.


fuese el espíritu de todas las instan-
cias, éstas no serían activas. No somos b) Elementos de despersonaliza-
robots con múltiples funciones (las ción, que permanecen en nosotros co-
instancias), sino sujetos encarnados o mo fuerzas oscuras permanentes (los
cuerpos conscientes, es decir, perso- cristianos las asociamos al “pecado
nas humanas. original”).
— 26 —

Por ejemplo: - La imagen inconsciente de Dios,


en que el niño/a ha internalizado una
- El principio indiferenciado del idea pervertida de Dios.
placer, que busca la gratificación in-
mediata y de modo insaciable o se re- - La mezcla de miedo e insolidaridad
fugia en las fantasías del deseo, ne- que cada grupo social tiene con el otro.
gando la realidad.
La personalización es un proceso
- La angustia que se aferra a la se- dramático.
guridad controlable, consciente o in-
conscientemente, provocando meca- 5. Dios
nismos de defensa que impiden actitu-
des de confianza y de riesgo, bloque- El gráfico muestra la realidad de Dios
ando la libertad interior. como envolvente e interactiva, a la vez;
pero no a nivel de instancia, sino, a través
- La mentira existencial frente a la de las instancias, a nivel de interioridad.
autenticidad.
Vamos a llamar GRACIA a esta
- El individualismo egocéntrico. presencia actuante y salvadora de
Dios, que, en cuanto creyentes, sabe-
- El pecado, en todas sus formas y mos que realiza la Salvación. ¿Cómo?
grados. Las tesis que siguen quieren dar la res-
puesta en sus rasgos más esenciales:
c) Hay una zona media, que no es
fácil de clarificar, pues se da una serie 1) Dios no es una instancia entre
de elementos atribuibles tanto a la fi- otras.
nitud del hombre como a sus opciones
fundamentales, por ejemplo: No debe ser alineado ni en la auto-
conciencia ni en la relación ni en la
- Ciertos “problemas pendientes” cosmovisión ni en la praxis.
del pasado, que han quedado fijados a
actitudes existenciales, por ej., esa La Gracia está en todo y más allá
mezcla entre miedo y negación de las de todo.
pulsiones sexuales y agresivas.
Es lo más real; pero lo no objetivable.
- Los llamados “vicios capitales”,
tan ligados a los procesos de madurez 2) Dios da signos de su presencia a
e inmadurez. través de todas las instancias. El distin-
— 27 —

guir entre la instancia y Dios depende que, además, ha traído la Salvación in-
de la interioridad, es decir, de la capaci- corporando al hombre mismo a su Pro-
dad de “percibir espiritualmente” la re- yecto (¡el Reino!, cuya referencia defi-
alidad de Dios. También esto es gracia. nitiva es, nada menos, que la vida del
Padre en el Hijo por el Espíritu Santo).
De ahí la paradoja:
Esto quiere decir que la fe cristiana
- Dios se hace presente en el cos- se encuentra inmediatamente con Dios
mos, en la intimidad de la conciencia, en toda realidad; pero que, además, se le
en los acontecimientos históricos, en ha dado encontrarse con Dios allí donde
el prójimo... Tanto que puede ser re- El, libremente, ha querido comunicarse
ducido a “un objeto de necesidad”, co- de una manera especial: en Jesucristo y
mo cualquier instancia, es decir, a ído- su Iglesia por el Espíritu Santo.
lo. Eso quiere decir que la interioridad
se ha quedado a medio camino. De ahí la paradoja:

- Pero Dios es absolutamente tras- a) La relación con Dios es inme-


cendente a toda instancia objetivable. diata pero inobjetivable; atañe a la
profundidad de lo real, pero no a la es-
Esta paradoja sólo la mantiene la tructuración de la persona y de sus re-
vida teologal, la fe, esperanza, amor, es laciones de finitud.
decir, cuando la interioridad está ilumi-
nada “por dentro” y puede “trascender”. El hombre debe autorrealizarse sin
Dios. Espiritualidad que integra positi-
No olvidemos que éste es el cami- vamente la autonomía y la secularidad.
no normal de todo proceso de perso-
nalización: de la necesidad a la fe, de Dios no soluciona los problemas
la ley a la libertad, de la propiedad de de la finitud; sino les da sentido.
la tierra a la vida de Dios en Dios.
b) Pero Dios ha querido ser un Tú
3) En cuanto cristianos, cuya cos- encarnado para nosotros. Y por eso, en
movisión viene dada por la Revela- la fe, me encuentro con El en la Euca-
ción, Dios se revela de dos modos: ristía, en la Palabra, en la historia, en el
prójimo, dentro de mí mismo...
- Como Misterio del ser.
Dios, en cuanto Tú, tampoco es
- Como Alguien, que se ha autoco- objetivable; pero pasa de modo direc-
municado histórica y personalmente, to por las instancias humanas. Por
— 28 —

ejemplo: la Palabra pasa por la histo- - El hombre no puede alcanzar su


ria de Israel; la Eucaristía implica la autoplenitud sin Dios. Más: si añadi-
solidaridad humana, etc. mos la realidad del pecado y el realis-
mo de nuestra condición, el hombre ex-
Las consecuencias de este modo de perimenta la existencia como algo con-
percibir la realidad de Dios en relación tradictorio. Sólo Dios puede salvarlo.
con la personalización son múltiples:
La personalización debe estar muy
Primera: Que no cabe separar la atenta a esta paradoja, para evitar usar a
percepción de Dios del conjunto de las Dios como tapadera de los problemas
instancias humanas y del proceso de la humanos (no respetando la autonomía
interioridad. del hombre), y su contrario, reducir a
Dios a un referente último de sentido o a
Por ejemplo: La imagen de Dios la guinda del pastel de la autosuficiencia.
depende de la imagen parental.
La personalización exige superar
Segunda: Que la relación con Dios todo dualismo entre lo humano y lo
exige un doble movimiento: relación divino, trazando caminos de integra-
directa con El como un Tú viviente; ción, a su vez, de las fases del proceso
relación directa a través de toda otra global de la personalización.
realidad.
Por eso, hablaremos de pedagogía si-
Eso quieren expresar, en el gráfi- multánea entre lo humano y lo espiritual.
co, las diagonales discontinuas.
6. Principios pedagógicos
Tercera: Que sólo Dios es totali-
zante y fundante, como fundamento 1) Principio de correlación de las
último de toda realidad y como Amor instancias.
Absoluto, Dios fiel en Jesucristo.
La persona es unitaria y la diversi-
Eso quiere expresar el círculo en- dad de las instancias forman su unidad
volvente del gráfico. estructurante y dinámica.

4) Paradoja última de la antropo- Si acentuamos desproporcionada-


logía cristiana: mente una instancia, el proceso de
personalización sufrirá un desequili-
- Dios no es necesario para la au- brio que repercutirá negativamente en
torrealización del hombre. la personalización misma. Por ejem-
— 29 —

plo, si se insiste en el autoconocimien- presentes en cada etapa del proceso de


to mediante el autoanálisis exclusiva- personalización; pero de manera dife-
mente, el fruto será una imagen distor- renciada.
sionada de sí, por no haberla confron-
tado con otras. Si se insiste en las cos- La diferencia depende de la inte-
movisiones para desarrollar en el jo- rioridad, del proceso de incorporación
ven valores ideales sin confrontarlos de la realidad y de transformación de
con el contexto socio-cultural, la edu- la persona. Hay momentos en que hay
cación impedirá la autonomía y propi- que subrayar el autoconocimiento, y
ciará una mentalidad rígida. Si se in- momentos, en que la maduración per-
siste unilateralmente en la intersujeti- sonal depende del descubrimiento y
vidad, centrando la educación en la vivencia nuevas del tú, y momentos
comunidad, ésta terminará por ser un en que, imprevistamente, un aconteci-
ámbito protector de espaldas a la pra- miento lo está revolucionando todo.
xis cristiana.
3) Lo determinante está en la inte-
2) La correlación no tiene por qué rioridad.
ser isomorfa, es decir, en proporciones Queda explicado.
iguales. Por el contrario, hay que com-
paginarla con el principio de graduali- 4) Principio de pedagogía simultánea.
dad. Todas las instancias deben estar cf. tema 5.
— 30 —

II. Taller de reflexión - También este Cuestionario ayu-


dará al diálogo:
Dada la dificultad del tema, con-
vendrá, quizá, darle tiempo amplio de 1) ¿Qué instancia, de las cinco, ha
reflexión personal. sido más importante en tu proceso de
maduración humana y espiritual?
- Habría que comenzar por clarifi-
car lenguajes y contenidos, pues para 2) Aplica a la oración los niveles
algunos la dificultad residirá en unas de interioridad. Por ejemplo, cuando
páginas, y para otros en otras. la oración se alimenta de “objetos
imaginarios”, o cuando alcanza a ser
- Facilita mucho la comprensión experiencia teologal de la realidad.
del tema poner ejemplos concretos. En
este sentido, habría que añadir otros 3) Lo que se dice en el apartado 4,
ejemplos que faciliten la comprensión sobre Dios, ¿te ayuda a discernir tu
de los niveles de interioridad. propia experiencia de Dios?
Tema 4
Dinámica de transformación

I. Exposición - Integridad y equilibrio de las di-


versas dimensiones de la personalidad.
Este tema complementa al ante-
rior, por cuanto el marco conceptual - Liberación interior, de modo que
de la personalización exige, como he- la persona vive progresivamente de
mos repetido, una visión dinámica de dentro afuera. Autonomía y autotras-
la persona humana. cendencia en uno.

1. Esquema gráfico - La transformación es experimen-


tada como ruptura de nivel de con-
ciencia.

- Los momentos decisivos de rup-


tura vienen dados por las crisis exis-
tenciales, que liberan de sistemas an-
teriores y abren nuevos horizontes de
sentido y de libertad.

A primera vista, puede dar la im-


presión de que estamos estableciendo
los procesos de personalización en
niveles de “perfección”, demasiado
elevados. Sin embargo, cualquiera
que conozca la tradición espiritual se
dará cuenta de que la experiencia
El gráfico ilustra el proceso de fundante corresponde sólo al “princi-
personalización y sus fases más signi- pio y fundamento” de los Ejercicios
ficativas en orden a la experiencia ignacianos, o a la experiencia de con-
fundante. Dicho de otra manera, la versión, en sentido bíblico, es decir,
personalización es un proceso de cuando la persona es fundamentada
transformación. La persona experi- en la fe, liberándose de la ley (len-
menta, simultáneamente: guaje paulino)
.
— 32 —

La incoherencia del modelo de La crisis de autoimagen (cuña a)


asimilación está en establecer metas romperá el sistema para iniciar el ver-
de perfección ideal centrando la estra- dadero proceso de personalización, al
tegia en la conducta, sin tratar explíci- obligar a la persona a confrontar sus
tamente de suscitar el proceso de deseos y la realidad, sus proyectos
transformación. ideales y sus posibilidades reales.

En este sentido, el modelo de per- Para provocar la crisis e iniciar el


sonalización se inspira directamente proceso se usan todas las instancias (el
en los grandes Maestros espirituales. principio de interacción); pero la rup-
Las instituciones han tendido a educar tura de nivel de conciencia se produce
en función de saberes y normas objeti- en la interioridad, pues es ésta la que
vables. Sólo los “maestros” han edu- percibe lo real de modo distinto:
cado en procesos de transformación.
¿Por qué? - Lo que importa no es ser bueno
en función de un determinado “or-
2. Explicación den”, sino ser auténtico.

Expliquemos los círculos concén- - No se destruye el ideal; pero de-


tricos. be ser resituado en función de la ima-
gen real de sí.
El círculo a) hace referencia al nivel
antropológico del comportamiento y del - La realidad circundante es perci-
rol. Demasiadas personas no pasan en bida con una densidad nueva. Las
su vida de este nivel de interioridad. grandes cosmovisiones necesitan pa-
sar por la experiencia. El prójimo no
Están dentro de un cierto orden; es símbolo de una causa, sino alguien
pero dependen de ese mismo orden concreto. La comunidad no es una
(necesidades de aprobación, morali- proyección de ilusiones, sino ámbito
dad meramente normativa, libertad re- de confrontación y crecimiento. Etc.
ducida a responsabilidad pasiva...).
El círculo b) abarca una fase com-
Cuando el rol es de perfección, la pleja, en que
persona se identifica con un ideal, al
cual tiende mediante el deseo. La ley - la persona toma su vida en sus
está internalizada como superego y el manos y pone el espíritu de verdad
ideal del yo mantiene la autoimagen por encima de los sistemas de seguri-
de espaldas a la imagen real del yo. dad;
— 33 —

- aprende a integrar maduración - la de autoimagen (a);


humana y espiritual; - la de la condición humana (b).

- la realidad, más que los deseos, 3. La experiencia fundante


adquiere densidad de experiencia. Etc.
Este cuaderno quiere explicar qué
Pero todavía la persona no está es personalización. Detenernos a ex-
fundamentada, pues la autonomía se plicar la experiencia fundante sería
debate entre el yo, con sus posibilida- alargarlo demasiado. Tendría que re-
des, y la realidad con sus limitaciones, petir lo dicho en Educación y persona-
entre la autorrealización y la fe, que lización, pp. 119-132. Ahí me remito,
apela a la entrega confiada a la volun- si alguien desea mayores aclaraciones.
tad del Señor, entre el amor de sí y el
amor que sale de sí. De todos modos, se puede hacer
un resumen. La experiencia fundante
Será necesario que la persona ex- no se explica; nos explica. Es a partir
perimente la condición humana en sus de ella cuando puedes leer tu historia,
contradicciones sin salida (el pecado, dando unidad al pasado y al presente.
el sufrimiento, la imposible autosufi-
ciencia, la libertad encadenada, el po- Configura a la persona entera,
der infranqueable del mal en el mun- afectividad y razón, necesidad y senti-
do, etc.) para que, vividas y elabora- do, transforma el centro desde donde
das desde la fe en Dios, emerja la vida vive la persona. Por eso, no es parcial,
teologal como experiencia fundante. sino totalizante. Unifica lo que hasta
entonces se vivía en piezas.
La educación-personalización se
preocupa primordialmente de posibili- La fe sólo tiene sentido cuando
tar ese núcleo, de disponer a la perso- llega a ser experiencia fundante. No se
na para la acción fundante del Espíritu tiene fe. Se es desde la fe.
Santo.
Con todo, el modelo de personali-
Cada paso del proceso es un paso zación consiste en plantear la fe en re-
de nivel de interioridad, de densidad lación con los condicionamientos hu-
de existencia humana. manos en que se inserta.

Las “cuñas” del gráfico expresan Su núcleo de experiencia y com-


la fuerza transformadora que cumple prensión es la Gracia: el ser en sí más
cada una de las crisis: allá de sí.
— 34 —

Que quede claro, sin embargo, que Dios a través del cambio de la autoi-
referir la personalización a la expe- magen, de las experiencias afectivas,
riencia fundante de la Gracia no es de la escucha de la Palabra, etc.
predeterminar su momento. Este es
preparado, pero acontece bajo la ini- Con todo, hay que reconocer que
ciativa libre y amorosa de Dios. la educación de personalización con-
lleva una cierta radicalización del dis-
Si nos referimos específicamente a cernimiento, siendo heredera, en par-
la vida consagrada, mi opinión perso- te, de la cultura de la sospecha. Preci-
nal es la siguiente: Salvo excepciones, semos.
la experiencia fundante es condición
para la profesión perpetua. Precise- El inconsciente no ha sido inven-
mos, la experiencia fundante inicial. tado por Freud ni la psicología profun-
da. Cuando Ignacio de Loyola estable-
¿Demasiado exigente, o lo contra- ce las reglas de la 2- Semana de sus
rio? ejercicios en torno a las mociones, su
discernimiento se mueve en la dialéc-
4. ¿Cultura de la sospecha? tica de la afectividad consciente y la-
tente. Cuando Juan de la Cruz, en el
El esquema de los círculos libro primero de la Noche habla de los
concéntricos da al discernimiento una “vicios capitales” de los principiantes,
relevancia central en el proceso de su análisis atañe al deseo religioso in-
personalización. ¿Quiere esto decir consciente. Igualmente, cuando Fran-
que el análisis lleva las riendas de la cisco de Asís habla de apropiación y
formación? De ningún modo. Sería desapropiación en sus Admoniciones.
confundir el discernimiento con la ins-
tancia de la autoconciencia. El pensamiento de la sospecha ha
aportado dos campos al discernimien-
El discernimiento se refiere pri- to espiritual de la tradición:
mordialmente a la interioridad, es de-
cir, al proceso de transformación-con- - Ha inventado unos instrumentos
versión, y para ello, tiene en cuenta antropológicos nuevos (los de las
todas las instancias. Lo suyo es, preci- ciencias humanas; pensemos, por
samente, captar la dinámica inobjeti- ejemplo, en los “mecanismos de de-
vable que se desarrolla a través de lo fensa”), ampliando los esquemas clá-
objetivable. Por ejemplo, captar el si-cos, centrados unilateralmente en el
cambio de la imagen inconsciente de orden religioso-moral.
— 35 —

- Ha descubierto la ambivalencia Lo cual, sin duda, presupone un


del deseo religioso, que en la tradición juicio de valor sobre el fenómeno so-
es tratado con una confianza excesiva- ciocultural de la secularidad. Para
mente ingenua (la tradición apenas ha quien ésta es algo radicalmente negati-
tematizado la carga narcisista del de- vo, la sospecha, integrada al discerni-
seo religioso). miento, amenaza el sentido mismo de
su fe. Para quien la secularidad conver-
La cultura de la sospecha nos ayu- ge, en última instancia, con la imagen
da a discernir lo espiritual en orden a bíblica de Dios y su Reino, la sospecha
vivir nuestra fe en una cultura secular. posibilita la experiencia teologal.
— 36 —

II. Taller de reflexión 4) Si quisieras aplicar esto a tu


pastoral, ¿qué sensaciones tienes? ¿De
Cuestionario inseguridad, de complicación indebi-
da, de verdad respecto a las concien-
1) Si miras tu historia, ¿notas un cias de las personas, de Reino de
proceso de liberación-transformación, Dios?
o sólo una conducta de altibajos, den-
tro del mismo esquema de vida? Sería interesante, en la conversa-
ción comunitaria, manejar dos dimen-
Concreta las etapas y los elemen- siones:
tos de cambio.
- La de la comunicación personal.
2) ¿Qué piensas del discernimien-
to espiritual? ¿Has tenido alguna vez Habría que concretar más el cues-
comunicación con alguna persona que tionario.
te ha leído en profundidad y te ha ayu-
dado a crecer desde tí mismo? - La de pastoral, centrando el tema
en el acompañamiento (lo que antes se
3) Cambia impresiones sobre la llamaba “dirección espiritual”). ¿Qué
experiencia fundante, a la luz, espe- pasa con esta pastoral tan relegada a
cialmente, de sus signos en Educación segundo plano?
y Personalización, pag. 129-130.
Tema 5
Pedagogía simultánea

I. Exposición en un monismo superficial, que se ex-


presaría así: “Allí donde se da madu-
El principio de pedagogía simultá- ración humana, allí está el Espíritu
nea es del todo necesario para com- Santo”. Demasiado simplista, pues de
prender la personalización. ningún modo coinciden la maduración
humana y la vida teologal.
Puede dar la impresión de que la
personalización viene a ser un sistema 1. Antropocentrismo y teocentrismo
de control de la persona y sus proce-
sos. En efecto, todo modelo pedagógi- La pedagogía de personalización
co precisa un cierto grado de objetiva- unifica la maduración humana y la es-
ción. Es exigencia de las ciencias hu- piritual radicalizando. Se podría for-
manas, cuyo objetivo es el conoci- mular así: El hombre se realiza en sí
miento del sustrato natural de la per- mismo, no “fuera de sí mismo”. Pero
sona, su funcionamiento dinámico. ese “sí mismo” no es finitud cerrada,
libertad autoposesiva, sino criatura da-
El principio de pedagogía simultá- da, amor agradecido. Y simultánea-
nea salvaguarda la imposible sistema- mente decir que el hombre se realiza
tización de la pedagogía de personali- en Dios es haber conocido la humani-
zación. dad de Dios realizada en Jesucristo.
Hablar del hombre sin hablar de Dios
Lo cual va relacionado con el tema es hablar de un modo recortado. Ha-
más amplio de la relación entre Salva- blar de Dios sin hablar de su revela-
ción que viene de Dios y realización ción en la carne humana es hablar de
del hombre. En cierta medida, la perso- un “objeto imaginario”.
nalización es un intento de traducir la
Gracia en términos de humanismo. Hay Hay un núcleo del mensaje bíblico
acción de Dios si se produce ma-dura- que se constituye en referencia esen-
ción humana. La personalización busca cial de la convergencia radical entre
superar el dualismo espiritualista. antropocentrismo y teocentrismo: la
Nueva Alianza, el don del Espíritu
El principio de pedagogía simultá- Santo, el corazón del hombre transfor-
nea sirve, en la práctica, para no caer mado y habitado por el Dios vivo.
— 38 —

Dios no es ley externa, gracia “desde 2. Correlación entre madurez hu-


fuera”, sino corazón nuevo, libertad li- mana y espiritual
berada, fuente interior. El trascendente
ha hecho lo más íntimo. La Gracia La relación con Dios sólo es real
guía “desde dentro”, como obra que sobre un soporte humano. La expe-
yo hago. riencia de Dios se da en o a través de
los procesos humanos (afectividad, li-
- Quien tenga sed, venga a mí y bertad, trascendencia). No es que la
beba, y el agua que yo le daré, se le madurez humana constituya, sin más,
hará surtidor (Jn 7,37-39). la espiritual, sino que ésta no cabe sin
cierto grado de aquélla.
La fuente es Dios; pero cuando
esa fuente se hace interior, ya no es un En mi opinión, es falso apelar a 1
ideal, una superestructura, una norma, Cor 2 (“Dios ha escogido lo pobre de
una ideología, un sistema de conducta este mundo, lo que no es”) para contra-
y pensamiento. poner madurez humana a espiritual. El
ejemplo de María nos ayuda a aclarar la
¿No hemos repetido que, en últi- correlación entre madurez humana y es-
ma instancia, la personalización tiene piritual. En efecto, el sí de María a su
por objetivo la experiencia fundante? vocación de maternidad divina nace,
Esta se muestra superando toda duali- evidentemente, de la acción del Espíritu
dad: ser en sí más allá de sí, auto- Santo; pero no es posible sin un alto
nomía en obediencia de amor, autorre- grado de autonomía afectiva. No se pue-
alización como Gracia. de entrar en la libertad de Dios sin una
capacidad humana de autonomía propia.
Lenguaje paradójico, síntesis de
contrarios, imposible sistematización Otro ejemplo, recurrido con fre-
del humanismo cristiano. Por eso, ha- cuencia por los espiritualistas: el cami-
blar de pedagogía simultánea significa nito de Teresa de Lisieux de la infancia
discernir el proceso de personaliza- espiritual, cómo la santidad cristiana se
ción a la luz de la síntesis de contra- compagina con la inmadu-rez sicológi-
rios. Veamos. ca. Pues bien, a mi juicio, la conver-
sión de la famosa noche de Navidad, la
“noche del zapatito”, a sus 14 años, de-
muestra cómo la acción de la Gracia se
le dio, simultáneamente, con el proce-
so de la maduración humana. En efec-
to, esa noche, cuando su “papaíto” no
— 39 —

le puso el regalo esperado, Teresita ela- Pero también hay que hablar de
boró de un modo nuevo, inesperado aquellas fases del proceso de personali-
para ella, la angustia de separación que zación en que, a partir de la experiencia
hasta ese momento bloqueaba su ma- fundante, lo transicológico va adquirien-
duración humana y espiritual. do predominio evidente en la dinámica
de la transformación de la persona.
Evidentemente, en una cultura
configurada por la cosmovisión cris- Lo que pasa es que hablamos para
tiana, el lenguaje interpretativo será jóvenes adolescentes y postadolescen-
religioso. No se hablará de autonomía tes y en la formación inicial todavía la
afectiva, en el caso de María, sino de mezcla entre lo sicológico y lo teologal,
obediencia de fe; pero la realidad hu- la correlación entre madurez humana y
mana está ahí como presupuesto real. espiritual, debe ser el criterio normal.

Por favor, entiéndase bien: La ac- 3. Aplicación de la pedagogía si-


ción de la Gracia es lo determinante; - multánea
pero “en” la realidad humana, no fue-
ra de ella. ¿Qué queremos decir, a nivel de
aplicación, cuando hablamos de peda-
Ejemplo aplicado a la formación gogía simultánea?
inicial en la vida religiosa: Para hacer
una pedagogía personalizada de la ora- a) Que, al manejar las diversas ins-
ción, no basta hablar de su eficacia, tancias de la personalización, se usen,
confiando en la acción del Espíritu simultáneamente, las mediaciones hu-
Santo; es necesario discernir qué ima- manas y las mediaciones espirituales.
gen inconsciente tiene de Dios el can-
didato/a que comienza a hacer oración. Por ejemplo: Personalizar la ora-
ción significará no sólo discernir la re-
No obstante todo lo anterior, el hu- lación afectiva con Dios, sino confron-
manismo cristiano establece, también, tar la experiencia de Dios con la Pala-
el criterio de trascendencia de lo teolo- bra. Descubrir la autonomía per-sonal
gal sobre lo sicológico. Hay que hablar significará no sólo afirmar positivamen-
de correlación entre lo humano y lo es- te lo humano, sino descubrir que Dios
piritual; más, que nunca existe lo espi- es el Dios de la liberación.
ritual sin su soporte humano; más, que
las mediaciones humanas están presen- Evidentemente, esta simultaneidad
tes incluso en los grados más elevados ha de ser diferenciada, no isomorfa,
de la experiencia cristiana. según los procesos de cada persona.
— 40 —

b) Lo delicado de la pedagogía si- Puede dar la impresión de que se


multánea es ir resituando lo espiritual reduce la carga teológica de la Palabra
al ritmo del proceso de personaliza- o sus dimensiones teologales; pero no
ción. olvidemos que la pedagogía de la Re-
velación ha sido de condescendencia.
Me opongo, por principio, al es- La trascendencia escatológica de la fe
quema que a veces se propugna: “Pri- y del Reino se ha dado después de un
mero hacerse personas, y luego, cris- proceso previo, en que liberación hu-
tianos o religiosos”. No, lo espiritual mana y fe en el Dios inobjetivable han
no es un piso superior. Dios ha de es- ido a la par. La paradoja última es que
tar presente siempre, en cada fase y lo escatológico ha permitido el máxi-
dimensión del proceso de personaliza- mo de humanización: El pan que vie-
ción. El problema es discernir cómo. ne de Dios y da la vida eterna es el
cuerpo de Cristo (Jn 6, paradigma in-
Dado que, en la formación inicial, sobrepasable de esta dialéctica).
todavía lo teologal tiene poca consis-
tencia, sirva como principio orientati- c) Con todo, la antropologización
vo: que lo espiritual se dé en función de lo espiritual no debe ser hecha de
de lo antropológico, o mejor, que se tal manera que, al final, la personali-
aprenda a vivir antropológicamente lo zación sea vivida como algo lineal,
espiritual. controlado, sistemático. Tanto es así,
que los momentos decisivos de la per-
Por ejemplo, me parece una me- sonalización suelen ser los de ruptura,
diación extraordinaria, en orden a la es decir, cuando la vida te obliga a si-
personalización, la lectura antropoló- tuaciones críticas, cuando lo espiritual
gica del Antiguo Testamento. En vez es encuentro con el Dios personal, li-
de leerlo desde la teología bíblica o en bre e inobjetivable, cuando la expe-
función de ideales de espiritualidad, riencia de la condición humana (el pe-
releerlo desde claves de personaliza- cado, el sufrimiento) hace brotar lo
ción. ¡Es tan distinto leer Ex 16, las profundo del hombre.
murmuraciones de Israel contra Dios
y el don del maná, como historia de la En estos momentos no se tiene
Providencia divina o percibir en ese sensación de proceso, sino de Gracia y
texto la dialéctica entre deseo, frustra- Misterio.
ción y fe, haciendo ver, simultánea-
mente, las dimensiones sicológicas y Por eso, la pedagogía simultánea
espirituales de la experiencia del de- suele preferir un ritmo variado. A ve-
sierto! ces, cuida de que lo espiritual no se dé
— 41 —

como una superestructura añadida sin lado y el de lo espiritual incontrola-


correlación con la experiencia humana. do. Poco a poco convergen, se inte-
Otras, sin embargo, prefiere no atar los gran, y hasta producen la ilusión de
cabos y dejar un margen amplio de fundirse. Nunca lo hacen del todo,
descontrol para que surja el imprevisto. porque, a la vez que la persona ma-
dura integralmente, Dios se revela
En este sentido, afirmando la nece- siempre más.
sidad de los dos raíles, el de maduración
humana y el de relación con Dios, si- 4. Experiencia paradójica de la per-
multáneamente, siempre me ha pareci- sonalización
do sabio que cada raíl tenga consisten-
cia propia, sin pretender una correlación ¿Dónde está la sabiduría última de
unívoca. A la persona humana le viene la personalización: en constatar cómo
siempre bien la no sistematización. se va madurando, o en darse cuenta de
que lo que más nos personaliza es lo
Mi experiencia del discernimiento que nos descontrola?
me dice que lo sabio es el equilibrio
entre el tratar lo espiritual en relación Dicho así, en antítesis, la pregunta
con la integración humana y el tratar está mal planteada. No hay oposición
lo espiritual en su dinámica propia. A entre proceso y novedad.
esto responde la estructura del libro
Una espiritualidad para hoy, que com- Pero es verdad, al final lo que más
bina oración-Palabra y discernimiento. nos personaliza es lo que nos sobrepa-
sa: el riesgo de la libertad, la experien-
Al principio, la sensación es de cia de las contradicciones insalvables
dos niveles, el de un proceso contro- de la existencia, Dios.
— 42 —

II. Taller de reflexión pedagogía simultánea, distinguiendo


matices: casos en que lo espiritual
Cuestionario: funciona mal por falta de presupuestos
humanos, o viceversa, en que la ma-
1) Analiza en tu historia personal durez humana se cierra sobre sí mis-
la correlación o no correlación entre lo ma, etc.
humano y lo espiritual. Para ello, usar
dos referencias: 3) Señalar algún texto bíblico, por
ejemplo, Ex 16 y Jn 6, y comentarlos
- La autonomía. ¿Has tenido que teniendo en cuenta la lectura antro-
conquistarla separándote de Dios o pológica de los textos espirituales.
con El? Más concretamente:

- La oración. ¿Está asociada a la - ¿Qué presupone sicológicamente


madurez afectiva humana, o no tiene que una persona espere de Dios la so-
nada que ver? lución de sus problemas humanos y,
aunque no se los solucione, siga con-
Distinguir ciclos vitales: infancia, fiando en El?
adolescencia, juventud, madurez...
- ¿Qué proceso humano y espiri-
2) Poner en común experiencias tual presupone la experiencia de la fe
pastorales en que se hace necesaria la a la luz de Jn 6?
Tema 6
El joven actual

I. Exposición finición tipológica, la del joven idea-


lista, básicamente sano, con fondo si-
¿De qué sirven todas las conside- coafectivo religioso, para hacer ver
raciones anteriores si no resuenan en mejor cómo el modelo de asimilación
el joven de hoy? se queda a medio camino. Quizá fue
suficiente para épocas en que lo cris-
Creo que a veces vivimos en la pas- tiano era parte esencial de la sociedad,
toral juvenil o en la formación inicial la y la vida religiosa representaba un
sensación de pegar palos de ciego. “status” concreto, fácilmente identifi-
cable y, además, con prestigio. Hoy, en
Hasta cabe hacerse la ilusión de una sociedad secular y postindustrial,
que la personalización es la respuesta la formación exige unos procesos de
mágica. No existe. identidad más radicales.

Personalmente, creo que la perso- Pero si la personalización ha sido


nalización concuerda con la sensibili- comprendida en su conjunto, no sólo
dad antropocéntrica de la cultura ac- no presupone dicha tipología, sino que
tual, moderna y postmoderna; pero to- permite integrar el pluralismo tipológi-
dos los días topamos con la dificultad co de los jóvenes actuales. La palabra
siguiente: La personalización presu- misma “personalización” incluye la
pone un joven con un ideal, y cuando atención a la diferencia y al discerni-
no lo tiene, ¿qué se hace? Más, la per- miento de cada caso.
sonalización presupone una cierta ti-
pología humana; pero ¿no es carac- 2. Ideales de ayer y de hoy
terística esencial de la sociedad actual
el pluralismo y variedad de talantes, Comencemos por discernir a nivel
experiencias y configuraciones sicoló- de ideales. Es frecuente oír esta queja:
gicas? “Los jóvenes de hoy no tienen idea-
les”. ¿Es exacto? ¿No será, más bien,
1. Tipología plural que tienen ideales distintos y que los
procesos de identificación con los ide-
Al hablar de la personalización, he ales en la adolescencia se dan en pro-
partido, ciertamente, de una cierta de- cesos distintos a los nuestros?
— 44 —

Un ideal de vida es la suma de va- Para ello, los que pertenecemos


lores e intereses vitales. Hay valores hace tiempo a la institución tenemos
objetivos, sin duda, dados por la razón hacer el esfuerzo de no proyectar
y la Revelación; pero percibirlos y so- nuestros ideales en los del joven, o
bre todo, vivirlos depende del contex- nuestros procesos.
to sociocultural. ¿Por qué hace 40
años el ideal de vida se concentraba 3. Experiencias de incondicionali-
en salvar el alma, ser santo, unirse a dad
Dios? ¿Por qué, más tarde, el ideal de
vida fue la utopía social, el compromi- En mi opinión, el punto crucial de
so histórico por “un mundo mejor? discernimiento en orden a la persona-
¿Por qué hoy el ideal de vida es la au- lización de la fe se llama experiencia
torrealización, la opción por los mar- de incondicionalidad. ¿Qué se quiere
ginados, la ecología? decir? Que la vida humana sólo puede
hacerse proyecto (y si no se hace pro-
Cada época lee el Evangelio con yecto se aborta) a partir de una orien-
unas claves y selecciona unos valores. tación unitaria, de unos valores, de un
No todos despiertan el mismo interés interés que comprometa lo mejor de la
vital. Valores objetivamente justifica- persona.
bles, como la participación en la natu-
raleza divina (la espiritualidad patrísti- Desde una psicología dinámica a
ca apela a ella constantemente), hoy esto se llama unificar el deseo. La
no resuenan. Pero decir que Dios libe- condición es que los valores ideales
ra, que Dios plenifica, despierta el in- no sean meramente ideológicos o su-
terés antropocéntrico que caracteriza perestructuras internalizadas, sino que
nuestra cultura. se hayan hecho experiencia afectiva y,
por lo tanto, dinamicen a la persona en
Esto no quiere decir que haya que su totalidad. Valores incondicionales,
adoptar una actitud acrítica ante la experimentados, constituyen la expe-
sensibilidad del mundo actual, sino riencia de incondicionalidad.
que el primer requisito pedagógico
(tanto a nivel pastoral como de forma- Se está haciendo tópico que los
ción inicial) es captar y discernir los jóvenes de ahora “no tienen garra”, la
ideales del joven actual. En épocas de postmodernidad conlleva una con-
transición como la actual, el discerni- cepción pragmática de la existencia,
miento exige percibir entre la maraña no cabe incondicionalidad en el ta-
lo que emerge no desde la moda, sino lante narcisista y hedonista de esta
como hilo conductor o constante. cultura.
— 45 —

Habría que confrontar esas afirma- niente de fomentar las megalomanías


ciones con estos criterios: del deseo, el voluntarismo moralista,
etc. Una identidad que se consigue a
- ¿No será que los ideales hoy pa- través de procesos complejos de perso-
san por un pragmatismo más realista, nalización tiene la ventaja de unificar
que no se fía tan fácilmente de los ab- deseos ideales y experiencia real, sin
solutos abstractos y, por ello, es más “montajes”. Pero tiene el inconveniente
sensible a los procesos y experiencias de una generosidad cal-culada, timorata.
concretos?
4. Equipamiento
- ¿No será que el proyecto, para
definirse, necesita unos procesos más Por todo lo anterior, quizá sea me-
complejos de identidad, lo que tiene jor dejar de comparar los ideales del
que ver con el fenómeno constatado pasado y el pragmatismo del presente
de que la adolescencia se prolonga? para atenernos a criterios más objeti-
vos. La pregunta fundamental sigue
- ¿No será que está cambiando el siendo la que nos hacíamos antes y
talante de incondicionalidad? En otras ahora, aunque con criterios distintos:
épocas, la incondicionalidad significa- Qué equipamiento básico tiene el jo-
ba fidelidad a unos compromisos da- ven que quiere entrar en la vida reli-
dos de una vez para siempre. Hoy la giosa o está en los años de formación.
incondicionalidad, como la fidelidad,
se centra más en mantener la identidad a) Hay un equipamiento que con-
a través del cambio mismo. siste en estructurar el deseo. Condicio-
nes, a partir de las cuales puede desa-
- ¿No será que una sociedad que rrollarse un proyecto de vida. ¿Qué
posibilita múltiples opciones de todo soy? ¿Quién soy?
tipo necesariamente fomenta una in-
condicionalidad polivalente? Criterios:

Pienso que todo tiene sus ventajas y - Autoestima


sus inconvenientes. Una incondicionali-
dad definida para los 17 años, que con- - Aceptación de la agresividad y
figura todas las energías vitales, motiva- sexualidad
da espiritualmente, imprime a la vida
una dinámica de absoluto, que concuer- - Integración de dependencia e in-
da nuclearmente con la expe-riencia de dependencia en las relaciones inter-
Jesús y el Reino. Pero tiene el inconve- personales.
— 46 —

- Capacidad de elaborar la frustración - Experiencia del “tú” como unifi-


cación del deseo.
- Capacidad de objetivar las emo-
ciones - La pregunta o la búsqueda voca-
cional como unificación del deseo.
- Autonomía del yo en la inseguridad
c) El modelo de personalización,
- Capacidad de elaborar conflictos aplicado a la pastoral o a la formación
en la relación grupal inicial en la vida religiosa, da un paso
más: fundamenta el deseo. El proyecto
- Autenticidad existencial cristiano, en efecto, no se fundamenta
en mis posibilidades, ni en mis deseos,
- Búsqueda del sentido de la exis- sino en la llamada de Dios percibida
tencia en obediencia de fe.

b) Hay un equipamiento que con- Lo hemos explicado más arriba.


siste en unificar el deseo. Un cierto Paradoja de la vocación cristiana:
proceso y experiencias que orientan lo Hay que equiparse, pero para ser en sí
que soy y deseo hacia un valor que da más allá de sí; hay que desear el Rei-
un horizonte de sentido a la vida en su no, pero éste consiste sólo en hacer la
conjunto. ¿Qué quiero ser? ¿Qué me voluntad de Dios; hay que vivir pro-
hace ser desde el centro personal, el cesos de liberación humana, pero para
corazón? poder morir libremente en el olvido
de sí.
- ¿Hay una evolución en el proce-
so de identidad o repetición de identi- 5. Personalización y ciclos vitales
ficaciones?
La consecuencia inmediata es
- El ideal del yo permite elaborar que el discernimiento en orden a la
la imagen real del mismo yo. personalización tiene que contar con
una doble perspectiva complementa-
- Alguna o algunas experiencias ria:
de incondicionalidad, las que sean: in-
timidad con Dios, lucha por la justicia, - El contexto socio-cultural en que
espíritu de verdad, vivencia del amor se desarrolla la identidad del joven.
como incondicionalidad, confianza en
la oscuridad, búsqueda de la autoper- - Su evolución desde niño hasta el
fección, etc. momento de formación.
— 47 —

Tal como hablé en Educación y A veces me pregunto si hasta los


personalización y ahora, en este cua- 22-24 no se está pasando todavía, con
derno, el ciclo vital que, primordial- harta frecuencia, una fase de adoles-
mente, tengo “in mente” es el ciclo vi- cencia, en cuyo caso la tarea principal
tal de los 18a los 25 años, es decir, la sería de equipamiento, tanto a nivel de
postadolescencia, la fase, en nuestra estructura como de unificación del de-
cultura, en que el proyecto de vida ha seo. Quizá. Pero de ningún modo in-
de pasar de ideal abstracto a concreto, valida la personalización, sino la con-
de deseo a elección, de proyecto pro- firma, pues tal retraso del proceso de
pio a obediencia de fe. maduración obliga a la institución a
aquilatar mucho más la personaliza-
Remito a las pp. 71 ss. de Educa- ción.
ción y personalización.
— 48 —

II. Taller de reflexión cambios vividos en nuestras formas de


vida religiosa.
El tema dará mucho de sí si la co-
municación comunitaria se centra en 3) ¿Por qué hay personas que, pa-
la pastoral. Convendría que se centra- ra mantener su identidad tienen que
se, específicamente, en la pastoral ju- defenderse de los cambios, y otras
venil vocacional. cambian de mentalidad y valores
según los cambios, y otras refuerzan
1) Confrontar los criterios de equi- su identidad mediante los cambios?
pamiento de esta exposición con pro-
blemas concretos de la pastoral. 4) Dar nombre a puntos concretos
en que parece que los cambios han favo-
2) Las observaciones, en torno a recido la fidelidad al Evangelio, y otros,
los ideales de ayer y de hoy, quizá sir- en que parece lo contrario. ¿Por qué?
van para cierta autocrítica de nuestros
juicios. 5) ¿Cómo ves los cambios vividos
en tu congregación religiosa referentes
El tema ayudará, también comuni- a la formación inicial (seminario, pos-
tariamente, a reflexionar sobre los tulantado, noviciado, postnoviciado)?
Frontera Entre el pasado y el futuro de la vida religiosa discurre siempre

Hegian un tenso Exodo por los caminos de la historia.


En ese peregrinaje, muchos hombres y mujeres, impulsados
por el Espíritu a instancias de los signos de los tiempos, recrean a tientas las nue-
vas formas de seguir a Jesús en voluntad de fidelidad al Evangelio y al propio ca-
risma.

Frontera quiere se una ayuda práctica para la reflexión y el discernimien-

Hegian to comunitarios, con el fin de que las mismas comunidades se


constituyan en el taller privilegiado de su Formación Permanen-
te Integral.
¿Qué es Personalización?

La palabra Personalización viene expresando el deseo indiferenciado de


un modelo nuevo de educación y evangelización. Javier Garrido lleva
años intentando construir ese modelo teórico y práctico. Con la hondura,
la originalidad y la garra que le caracterizan, nos ofrece en estas páginas,
en forma de materiales, un resumen actualizado de su pensamiento.

Como él mismo nos dice en el prólogo, lo importante no es estar de


acuerdo o no con este modelo concreto de personalización, sino asumir
los desafíos que tiene hoy la vida religiosa y la evangelización, por ejem-
plo, la necesidad de integrar la fe, autonomía personal y ciencias huma-
nas. El camino está abierto, no concluso.

Entre las numerosas obras de Javier Garrido, destacamos las siguientes


como las más afines a esta temática: Adulto y cristiano (1989); Una espiri-
tualidad para hoy (1990, 3ª ed. ); Educación y personalización (1991).

Instituto Teológico de Vida Religiosa Euskal Herriko Erlijioso Bizitzaren


en Euskal Herria Teologi Institutoa
Facultad de Teología - Vitoria Teologi Fakultatea - Gasteiz

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