El tema de la participación es central en la reflexión antigua, en particular tiene
relevancia importantísima en Platón que se puede resumir de la siguiente manera “la relación entre las cosas sensibles y las ideas, y también la relación de las ideas entre sí, se efectúa mediante participación”1, en tal sentido se dice que una cosa es en la medida que tiene una participación de su idea o forma, o dicho de otra menera de su modelo o paradigma. De acuardo a la linealidad de lo sensible y lo soprasensible, tenemos que las cosas sensibles participan por tanto son inferiores a las ideas que son sus modelos, y por tanto poseen el ser en la medida que participan, en ese sentido no son el ser verdadero, son igual a las “sombras que son menos reales que los cuerpos que las producen”. Efectivamente Platón ilustra en el libro VII de la República sobre la realidad que estoy tratando, tal es el caso de aquellos hombres cautivos en la caverna que piensan que las imágnes que se impregna en la pared son efectivamente reales, tienen realidad en cuanto son sombras, más no en cuanto realmente son en sí:
1 Cfr. J. FERRATER. M, Participación en Diccionario de Filosofía, Tomo III, Ed. ARIEL, S.A. Barcelona, 2001, p. 2707.