Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
SEMINARIO PERMANENTE
FEMINISMO E ITUSTRACION
1988-1992
Coordinadora:CELIA AMOROS
DIRECCIONGENERALDE LA MUJER
DE LA COMUNIDADAUTONOMADE MADRID
ESTADO DE NATURALEZA Y FAMILIA. HOBBES:
PER PERVERSAM RATIONEM
obbes es conocido por ser uno de los primeros y principales teóricos del Estado
moderno, y también como uno de los primeros pensadoresque intenta elaborar una
.-ienciapolítica en sentido estricto. Esto último se traduce en la necesidadque aparece
:ecurrentementeen su obra de construir per rectam rationem la ciencia política que
Jesembocaráen el Estado absoluto. La magnitud de este empeño le obüga a reflexionar
robre las condicionesepistemológicasde posibilidad de su propia taÍea,y a ello dedicagran
parte de su esfuerzoteórico. Esta reflexión es relevanteal punto de condicionar el curso
.¡lteriorde sü pensamientopolítico.
La problemática de la existencia o no de la institución familia¡ en el estado de
:taturalezay, de su mano, la problemáticadel lugar asignadoa las mujeresen su constructo
¡tütico-social, pone de manifiestohasta qué punto el propio Hobbes seciñe a su exigencia
spistemológicade procedefper rectamrationem en la construcciónde la cienciapolítica. En
-s páginasque siguenintentaremos aclatar esta cuestión.
22'1
FEMrNrsMoE ILUSTRAcTóN.19gg.lgg2
il
229
FEMrNrsMoE ILUSTRACTóN.
1988-1992
III
230
ANGnr-¡s JrMÉNEzP¡noNr
se puede generahzara todos los teóricos clásicos del estado de naturaleza, incluido
Rousseau.Todos proyectanalgunainstitución sociale histórica en su conceptode estadode
nainaleza. Precisamentetodos, exceptoHobbes,conciben(y asílo explicitan) a"lafamlha"
como una institución propia de algún momento del estadode nairaleza.
En efecto, Hobbes consideraque en el estado de nattraleza no hay ningún tipo de
dominio natural, ni siquierael propio de la institución famfiar; a sujuicio no hay raz1npara
ello, puesto que atributos y capacidadesindividuales se reparten indistintamenteentre l.es
individuos.
En el capítulo XX del l¿viathan, dedicadaal análisisdel dominio paternaly despótico,
se puedecomprobar lo cierto de la afirmación de Carol Pateman segúnla cual Hobbes es
el fundador del patriarcadomoderno (11). Frente al patriarcadotradicional que sosteníaque
la familia era una institución natural y que el poder del padre sobre la familia surgió
naturalmentede las capacidadesy cuidadospaternos, aun cuando su poder pudiera estar
basadotambién en el consentimiento,Hobbes, por su parte, sostieneque la familia es una
institución "artifrciú", construida y que el derechodel padre es puramenteconvencionalo
contractualy, en esamedida, es algo poHticoy no natural. Su patriarcalismoes conyugaly
no paternal. Efectivamente,nuestro autor sostieneque el dominio paternal "no sederiva de
la procreación,en el sentido en que el padre tenga estederecho sobre el hijo por haberlo
engendrado,sino por el consentimientodel hijo, ya sea este consentimientoexpreso o
declarado con otros argumentos suficientes(12). Ademrás,ese dominio en el estado de
nattralezano tiene por qué serdel padre mejor que de la madre:"... en su estadomeramente
natural, donde se suponeque no hay leyesmatrimoniales,ni leyesparala educaciónde los
hijos (...), o bien los padresdisponenentre sí, mediantecontrato, el dominio sobre el hijo,
o bien no determinanesedominio en absoluto(...). Si no hay contrato, el dominio pertenece
a la madre. Porque en la condición de mera naturaleza,donde no hay leyesmatrimoniales,
no puedesabersequién esel padre, a menosque la madre lo declare;y, por tanto, el derecho
de dominio sobre el hijo dependede su voluntad y es, en consecuencia,suyo" (13).
De hecho,continúa Hobbes,en el estadode naturalezaesla madre la que tiene derecho
sobrela prole, pues es ella la que decidecriar o abandonar a su hijo. Si decidecriarlo está
preservándolela vida (el bien absoluto) y ello es motivo de que la criatura se vea sometida
a un pacto de obedienciacon la madre y a un pacto de no convertirseen su enemigocuando
€rezca.Hay que tener en cuenta a esterespectoque Hobbes identifica a la hora de pactar
ruerdo voluntario y sumisión forzosa, o consentimientoy conquista. El problema, sin
cmbargo,es que en el estadocivil absoluto -a diferenciade 1o que sucedeen el estadode
¡aturaleza- hay matrimonios y, por tanto, familias que son la basedel Estado,y en las que
ssel padre el que detentala autoridad de maneraabsoluta.Lapreglnta, por tanto, escómo
st llega a estasituación,es decir, cómo se verifica el cambio de autoridad de las manos de
hs madresa las de los padres.
La hipótesisde Pateman a esterespectoes sumamenteinteresante(14). A su juicio tal
cambio se explica si suponemosque las mujereshan sido hechassiervasantesdel contrato
rrial. IIabna, pues, un contrato sexual previo que sometea las mujeres a los padres en
€alidad de esposasy madres de la prole. El contrato social sanciona e institucionahza
Pqteriormente estasituacióncon el matrimonio. Aunque en la obra de Hobbes no aparece
crplicitado nada que se parezcaa esta hipótesis,sin embargo, sí está en consonanciacon
rxrtas afirmacionesde este pensador.Precisamente,en el capítulo dedicado al dominio
dernal parece suponer como algo posible un enfrentamiento entre los sexos para
t¡erminar el dominio sobrelos hijos en los Estados,enfrentamientoque seresuelveen favor
231
Fnrr¿rNrsrr¡o
E ILUSTRACTóN.
1988-1992
232
ANcsr-Bs JIMÉNEZ PERoNA
para que el Estado exista, y que exista como oopersona",en el sentido que Hobbes da a
I esta palabra (18), esto es, como representantede las acciones o palabras de los
I individuos (en terminolosía mecanicista:reDresentav aúna las fuerzasindividuales).
I Ahora bien, la centralidad del concepto de autoconservaciónobliga a pensar los
I mediosconducentesa la eliminaciónde cualquierestadode guerra,pero sin aniquilación
I ¿. fuerzas. Cabe preguntarsepor qué Hobbes ve tan necesariala no aniquilación del
I enemigovencido (entiéndasebien: no se trata de conservarlafierza del enemigo,sino
I al enemigoen tanto que fuerza). La explicaciónla encierrasu mecanicismo:las fuerzas
I son los elementosdinamizadoresdel sistema como un todo. En efecto, así como el
I enfrentamiento de todos contra todos no desapareceen el estado civil, sinb que se
I institucionalizaen la competenciaque rige el modelo social,del mismo modo la guerra
I entre los sexos en casode existir seresuelveen un pacto de sujecciónsexualque no
I aniquila a las mujeres,sino que las institucionalizacomomadresde una prole que ahora,
I .n el estadocivil, es paterna.
I Ahora bien, teniendoen cuentala textualidad de la obra de Hobbes,¿essostenible
I lu hipótesisde una guerra de sexosen el estadode naturaleza?No, si tenemosen cuenta
I lu siguiente afirmación de Hobbes: "De modo que, en la nattnaleza del hombre,
I encontramostres causasprincipales de disensión. La primera es la competencia;en
I segundolugar, la desconfianza;y en tercer lugar, la gloria. La primera hace que los
I hombres invadan el terreno de otros para adquirir ganancia;la segunda,para lograr
I seguridad;y la tercera,para adquirir reputación. La primera hace uso de la violencia
t para que asílos hombressehagandueñosde otros hombres,de susesposas, de sushijos
t v de su ganado" (19). A raíz de esta cita puede explicarsepor qué las mujeres,como
I genérico,aparecensometidasen el estado civil. En efecto, ¿cómo un botín de guerra
t puedeguerrear?Podría objetarseque los varonestambién son botín de guerra, pero lo
t son en tanto que protagonizanuna guerra que pierden,pero nunca en tanto que
t posesióndel protagonistade la gterra, nunca en tanto que esposos.
I Lo que ocurre es que, realmente,las mujeresnunca han sido concebidascomo no
I sometidas,a pesarde las afirmacioneshobbesianasque anteshemosrecogido.De hecho,
I en esta última cita comprobamos cómo para Hobbes las mujeres ya en el estado de
I naturalezason oobotínde guerra" y esposas,a pesar de sus afirmacionessobre la no
I existencia de la familia en dicho estado de naturaleza. En contra de sus propios
¡ principios y afirmaciones(y completamentealejadode la forma de procederper rectam
I rationem Hobbes hipostasía la sujección de las mujeres. Ni siquiera han tenido la
I oportunidad de guerrear y de hacerseo no hacersesiervas,pues pareceque ya, por el
I hecho de ser mujeres,están alejadasde tal posibilidad.
I Esta hipóstasis puede ser entendida como una forma de autolegitimación. En
I efecto,lo que hay que legitimar es un modelo de Estado que, entre otros pilares, tiene
I el de una institución familiar que conviertea las mujeresen esposassometidas.¿Cómo
I conseguirlo?Caben dos posibilidades:o se suponeque las mujerescomo colectivo han
I perdido una guerra en el estadode naturalezay, en estamedida, han sido todas hechas
I siervas;o se suponeque las mujeresni tan siquierapueden entrar en guerra, dado que
I va en el estado de naturaleza aparecensometidas.La primera posibilidad presentala
t dificultad epistemológica,yaseñalada,de que obliga a suponer que las mujeres como
I colectivo (en general, y salvo excepciones)tienen tna razón deficitaria, lo cual
I contradice,como hemosvisto antes,el nominalismohobbesiano.La segundaposibilidad
I rambiéncontradicesu postulado de la igualdad natural, así como todas sus reflexiones
t n 3
a
F E V t \ r s M ¡o I r u s r n e c r ó Nl g. g g _ 1 9 9 2
NOTAS
234