Humberto René Cerrato Maltez

EL Desenredo
A una mujer que amare siempre.
Tus intensos y bellos ojos me revelan, la oculta verdad de una Historia
Antigua.
Las verdades se ocultan en mentiras, yo miento con verdad.

Capítulo I
Santiago Flores, viejo, diestro y respetados Capitán de lancha, zarparía rumbo al poblado de
Altagracia en la Isla de Ometepe, por doña Domitila María Miranda. Le habían avisado que se
encontraba muy enferma. Siendo ella su mujer y la insistencia de las dos amigas y hermanas de crianza
Marta Joyilla y Rosita Alemán, decidió enfrentarse a esa tormenta. La flota de Granada se encontraba
atracada en el Muelle, las fuertes bolsas de viento y la baja nubosidad anunciaban la inminente lluvia,
en dirección a San Carlos y la isla, se visualizaba un manto oscuro y el cielo se iba serrando en dirección
a la ciudad. En condiciones normales la navegación Granada - Isla de Ometepe-San Carlos duran12
horas, nadie se aventuraría bajo esas adversidades, exponer tripulación y embarcación durante tanto
tiempo. Los últimos Capitanes que navegaron de San Carlos a Granada, alertaron de lluvia copiosa y
viento fuerte en esa ruta, el mensaje sobre su mujer pareciéndole exagerada lo inquieto. Doña Domitila
María no era mujer de temer. La realidad era esa, ella se encontraba en estado de suma gravedad.
Llegado el momento, la embarcación zarpo frente a la tormenta, sin lugar a dudas la encontrarían
muy pronto. En sus adentros el aviso lo desconcentro, su experiencia le indicaba el peligro de navegar
en condiciones adversas de viento y oleaje, por mucho que el constara con la mejor lancha y una
tripulación que por nada del mundo lo abandonarían y mucho menos tratándose de doña Domitila
María. Perdiendo de vista la ciudad, entraron en contacto con la lluvia y arrecio rápidamente,
empeorando cayendo la noche. Al sur de la Isla de Zapatera hay un trecho de fuerte oleaje,
normalmente los pobladores encienden fogatas para que los Capitanes de las embarcaciones se
orienten con la distancia de la costa, ya que entre los riesgos que se corren esta el ser desviada la
lancha a la isla, aparte de la tentativa de naufragio. Percatándose los pescadores isleños de la presencia
de una lancha y suponiendo la viento estaba en contra de él, sorteando logro entrar en un costado,
alejándose así de la isla y colocarse con el vientos del norte a su favor, logrando de esta forma salir a
aguas menos agitadas, que por las condiciones del tiempo no dejaban de ser peligrosas y el trayecto a
navegar aun requería de mayor tiempo, producto del retraso en Zapatera, buscando la media noche
llegaron al atracadero de Altagracia. Los hombres del poblado se encontraban agrupados en espera
que la lluvia cesara y enviar a San Carlos en busca de una embarcación. Al llegar la lancha los ánimos se
alentaron e inmediatamente se dispusieron ayudando a fijar la embarcación al pequeño muelle.
Concluyendo y dejando todo en orden, la tripulación recibo las otras instrucciones. Retirándose el
capitán, los hombres agrupados ofrecieron a los tripulantes tragos de guaro pelón, comida y cobijas por
el frió, escuchando los comentarios de la tripulación sobre lo peligroso que esta la travesía por Zapatera.
Por el camino Flores se informaba sobre el estado de salud de doña Domitila María, amigas le
alarmaban con sus preocupaciones y consejos de transmitirle aliento, cariño confianza. Escuchando tal
martirio aquel hombre sin imaginarse lo poco que eso era para lo que viviría las próximas horas y días.
En la casa era un ambiente caliente, producto por candiles, candelas y veladoras encendidas, las
puertas, ventanas serradas por las corrientes de viento. Este fue su primer impacto con la realidad que
vivía su mujer. La enferma temblaba de frió y dolores se huesos, musculosa si como a un castado del
abdomen.
- No soporto estos dolores.
Con vos cansada, quebrada y débil lo repetía constantemente.

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 Teniendo a la par las mujeres más representativas del poblado, la curandera mayor, una mujer de
93 años le alentaba diciéndole.
- No te agites mí niña, Diosito lindo nos ayudara.
Calmado Flores tomo aire y entro a la habitación, doña Domitila María con la poca lucidez que
guardaba lo reconoció, él se acercó halando una butaca y sentándose a la par de la cama, le beso su
húmeda frente, a ella los ojos se le humedecieron y con una vos forzada le dijo.
- Chago, mi querido Chago.
Forzando sus pulmones respiro en varias ocasiones y levanto el brazo con la mano entre abierta.
- Llévame a Granada.
El Capitán le tomo la mano, su fuerte respiración se sentía en la habitación, mientras Flores
trataba de consolarla acariciándole el brazo y repitiéndole.
- Descansa amor, todo saldrá bien, ya veraz, en cuanto acampe saldremos.
- Por favor llévame a Granada, no me dejes, te lo suplico.
Serró sus ojos liberando dos lágrimas, no volvió a decir palabra. Su respiración era forzada
exhalaba por la boca, Chago tomo una toalla, con suavidad le seco la cara, le beso la mano y
suavemente acomodo el brazo de ella y se lo cubrió con la colcha.
El capitán se impresiono con esas últimas palabras y su mirada de súplica, tantos años de vivir con
aquella mujer de hierro, no recordaba un gesto de dolor en ella. Chago quedo fuera de si, sentía como
si en la habitación estuviesen solos los dos, que se encontraban a la deriva en medio del lago y la
oscuridad se los tragaba. Estando a punto de estallar en llanto, sintió unas suaves palmaditas en el
hombro que lo hizo volver, oía una vos lejana que le decía.
- Esta cesando la lluvia, Santiago.
Volvió a ver, era a la curandera mayor repitiéndole.
- La lluvia, está cesando Santiago.
Se incorporó rápidamente y exclamo.
- Dios Quiera.
Encomendándole a la curandera el cuido de su mujer, se retiró de la habitación. Se cubrió la
cabeza y salió de la casa, dirigiéndose al embarcadero para organizar a los hombres agrupados en el
lugar, desde ese momento hombres y botes disponibles estarían bajo sus órdenes, así lo entendía él y
los isleños. La lluvia disminuyo un poco, el viento no. Aun en nada era óptima la navegación hacia
Granada. Lo primero que descarto fue el navegar bajo mal tiempo. Tendrían que considerar otras
posibilidades, habría que conocer el estado de la ruta por tierra Rivas-Nandaime y mantener la
observación del tiempo desde Zapatera. Albergando de corazón zarpar hacia Granada esa misma
madrugada. Aprovechando el viento a favor zarparon dos botes de remo en dirección al atracadero de
San Jorge-Rivas y la Isla de Zapatera, con conocedores experimentados, remadores y nadadores. Estos
tendrían que proporcionarle una mejor idea de las rutas más rápida. Los hombres restantes se
mantendrían en el lugar por cualquier necesidad. Amaneciendo comenzó a verse un destello en
dirección de Zapatera, se agrando lo suficiente para verla aun con lluvia, para el capitán esto significo
que la navegación era imposible. Quedaba claro, mientras no cesara de llover la situación se
mantendría pareja. El bote de San Jorge regreso con el reporte del mal estado del camino. No quedaba
más alternativa que esperar, para zarpar sin riesgo alguno.
Por su parte las mujeres eran indoblegables en el cuido con la enferma, los fogones de las casas
del poblado no se apagaron, preparando comida, cocimientos de hiervas y raíces, extracción de
manteca de animales medicinales. Entraban y salían de la casa, lloraban ante tanta impotencia, sentían
el pecho oprimido y se preguntaban entre ellas mismas, porque tenía que sucederle algo así y en sus
manos a una mujer buena con ellas.
- Pudiendo doña Domitila María vivir y gozar su dinero sin importarle nadie, lo compartía con
nosotras las pobres, que Dios me la ampare.
Dijo la curandera mayor respondiendo a esos comentarios.
Otras rezaban el Rosario pidiendo por su sanación, encendían veladoras a sus imágenes de
devoción y lo que fuese a tomar o hacérsele frotado, se lo encomendaban a la Santísima Virgen María.
Después de tantos esfuerzos de aquella gente, no le pudieron detener la gravedad, esa herencia
ancestral de curaciones fue inútil.
- Lo que está en manos de Dios, solo él lo puede tocar.
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 Le decía la curandera mayor al capitán Flores recomendándole resignación,
De ella brotaron sendas lágrimas que se deslizaron por su sien y apretando el Rosario en sus
manos doña Domitila María Miranda murió. Con sus ojos abiertos y una lagrima en cada uno, como
una película viscosa que no logro huir de ella. Similar como cuando falleció su mamita Domitila. El
capitán Santiago – Chago - Flores, lloroso acarició su cara secándole las lágrimas y suavemente le serró
los ojos, el llanto y el dolor inundo la casa y corrió por el pueblo. Los dormidos despertaron y no hubo
candil sin encenderse. Aun con esa conmoción colectiva la lluvia y el viento no tuvieron compasión por
aquella difunta, como si conspiraran con el Gran Lago Cocibolca para no dejar ir el cuerpo de su
mayordoma.
Siguiendo las costumbres de la época, le rezaron tres Rosarios seguidos. Procedieron a limpiarle el
cuerpo con agua y cocimiento de hierbas aromáticas, la vistieron, el Rosario regreso a sus manos, la
colocaron sobre una mesa de mantel blanco con flores campestres y de patio, para velarla mientras
estuviera en el poblado.
Aquello era demasiada presión en Santiago, todo sucedía tan rápido que no encontraba ninguna
explicación de lo que estaba viviendo, era una visión absurda, su mujer había Muerto, sentía un dolor
fuerte en el pecho que no sintió ni cuando murieron sus padres, durante un naufragio frente a las
costas de Chontales. Logrando sobreponerse se retiró de la casa y reunió a los hombres, les explico que
se debía de avisar sobre la muerte de doña Domitila María a Granada, para eso y por el mal tiempo se
requería de los mejores remadores y nadadores para llevar la mala noticia, igualmente avisarles a los
poblados costeros del lago.
Los primeros en zarpar fueron los que iban a Granada, estos pasarían por Zapatera dando el aviso
e instrucciones, alcanzarían la costa en las faldas del Volcán Mombacho, para llegar por tierra a la
ciudad. Una flota de pequeños botes se desprendió de la Isla de Ometepe, algo nunca visto en el Gran
Lago de Nicaragua, pequeñas embarcaciones iluminadas a candil, parecían luceros en el infinito cielo,
ni en los tiempos de transito de los Vapores de la ruta Interoceánica hacia California, se hubiera podido
lograr vista tan maravillosa y mucho menos en esas condiciones de tiempo lluvioso. Tal despliegue
llegaría con la noticia hasta Costa Rica en pocas horas.
Con la mente más fresca ordenó a su tripulación que compensaran con mayor carga el peso, de
forma tal que la lancha pudiera mantener un mejor equilibrio. Se apartó a un techado por la lluvia, se
sentó en una butaca y al secarse la cara sintió la humedad caliente, eran lágrimas que sin darse cuenta
fluían de sus ojos, lloro conscientemente, llanto que le secaba el dolor del alma, logro desahogarse, se
sintió mejor y el cansancio lo venció. Se despertó al concluir los marineros su orden, la agitación del
lago y la lluvia continuaba. Nuevamente el capitán se dirigió a la casa donde tenían listo el cuerpo de
doña Domitila María en su caja, un tanto rustica pero útil para trasladarla a Granada, envió a traer cal,
ceniza volcánica y ramas de Níspero, material para recubrir el cuerpo al ser sellada la caja y no se
descompusiera rápidamente, a las mujeres de mayor confianza les dijo.
- Con algodón y gasas humedecido en alcohol introdúzcanlos en todos los orificios del cuerpo,
ustedes sabes…
Indicándole con la mano los lugares.
… Esto lo aprendí de un doctor, preparando a un hombre en San Juan del Norte.
Transcurrido determinado tiempo el cuerpo era limpiado con esencias aromáticas y en las
esquinas de la sala quemaban incienso. Rodeada de flores, imágenes Religiosas con candelas de
espelma encendidas. En el ambiente se sentía un olor entre mezclado a flores, espelma e incienso.
Al atardecer la lluvia continuaba. Comenzó a llegar gente de los pueblos costeros, consternados y
abrazando a cada persona que encontraban, por lo general eran familias por uno u otro lado y en ese
momento compartían el mismo pesar. El capitán les dio instrucciones de preparar condiciones para ser
Velada y continuar con sus Rosarios.
La preocupación del capitán Flores era estar en ‘’lago abierto’’ y se presentara una tentativa de
naufragio, de lo contrario él no vacilaría enfrentarse nuevamente a esa tormenta, su temor radicaba en
perder el cuerpo de doña Domitila María en el lago.
Dispuso que a la hora de montar el féretro debiera ser bien fijado al piso de la lancha y sus
órdenes concluyeron, diciendo.
- La caja debe de estar asegurada de tal manera que solo Dios pueda hacer que el féretro se
hunda en el lago y si pasa eso, la lancha se hundirá con ella y con migo.
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 Esta última parte de sus disposiciones las dijo el Capitán sin pensar y de la boca para afuera.
Al anochecer el panorama del tiempo era inestable, la lluvia disminuía y repentinamente volvía el
aguacero, los marineros colocaron Petates en los costados de la lancha, para que estos sirvieran de
protectores de los candiles que irían encendidos en el interior y a su vez como faros según la dirección
necesaria. El poblado estaba abarrotado de gentes de los pueblos costeros y caseríos de la isla, habían
llegado a darle el último adiós a la que consideraban su Protectora y la Mayordoma del Gran Lago de
Nicaragua doña Domitila María Miranda.
Los portadores de la noticia del deceso llegaron a Granada ya entrada la noche del mismo día. De
Zapatera navegaron a la falda del Volcán Mombacho y caminaron buscando el Cerro Posintepe,
durante ese día la lluvia no ceso. No entraron a la ciudad y se dirigieron por la costa del lago
directamente a la calle El Desenredo. Esta se ubicaba al este de la ciudad, en la parte trasera de la Iglesia
de Nuestra Señora de Guadalupe, era de las calles más próximas al muelle. Antes de ser incendiada la
ciudad de Granada por los filibusteros de Walker, esta calle no existía, en su lugar habían potreros
ganaderos y cultivos. Durante la reconstrucción de la ciudad don Joaquín Pasos compro parte de esa
propiedad y construyo cuartearías para trabajadores de su confianza. Durante los mejores tiempos de
doña Domitila María, la ciudad fue ampliándose, con la construcción de puentes, se crean nuevas calles,
el comercio creció y el tránsito por Granada de extranjeros y nacionales era esplendido, el mercado, el
cementerio, obedecían a un nuevo ordenamiento. El resurgir de Granada en las últimas tres décadas de
Conservador en el siglo XIX, le dio el brillo final a sus bellezas naturales y su riqueza. Gobiernos
extranjeros ponían sus ojos sobre Granada, antes y después de ser incendiada. Años después un
importante poeta Nicaragüense de apellido Coronel decía.
‘’El que no conoce Granada, no conoce Nicaragua’’.
Mientras en la Isla de Ometepe se Velaba a la difunta y en definitiva no había posibilidades de su
traslado, los mensajeros albergaban la idea que a la hora que llegaban, el capitán Flores ya habría
zarpado rumbo a Granada.
Como un manto oscuro de tristeza, aquella noche la gente temprano serró sus casa y cuarterías
por la lluvia, la calle El Desenredo estaba lóbrega y oscura como esperando al Ángel de la Muerte. La
lluvia y el viento no cesaban, a la oscuridad se unía un viento helado. Por muchos años, a estos
hombres portadores de la mala noticia, se les recordaría como los últimos Mensajeros de la Muerte que
visitaron la calle El Desenredo.
Capítulo II
Teniendo Domitila María 21 años de edad en 1876, se muren las dos personas que influyeron en
su vida, su proceder e inclinaciones sociales.
Fueron escasos meses transcurridos al fallecimiento de su tutora en letras, la niña Ángela María
Pasos Arellano, para recibir un mayor golpe con la muerte de su mamita Domitila, quien además de ser
su única familia, fue la portavoz de sus ancestrales de sangre.
Domitila antes de morir le dijo.
- Mire mí hija, espero haberle enseñado a defenderse en la vida, nunca olvide el valor de lo
aprendido y que tanto le costó, de esa manera en esta tierra nada la sorprenderá. Como le decía la niña
Ángela María sea feliz y no se pare por nada, parí tu hijo y se oportuna, sea niño o niña no importa…
- No te pongas así mamita, no llores, todos vamos a ser felices esto ya pasara.
Decía Domitila María en el lecho de muerte de su abuela.
…La niña Ángela María en eso tenía razón y me entendió también cuando le dije que además de
tú educación en letras, era importante que aprendieras en la cocina como tu abuelas, porque el que
sabe lo que entra y sale de la boca de una persona, vale más que un letrado, por saber valerse y
defenderse más en las vida.
Sin sofocarla, con fuerza la abrazo, sintiéndose orgullosa y seguridad. Le beso sus labios y en su
paladar quedo un sabor dulce, húmedo y cálido, que nunca había sentido, comprendió en su corazón
que era el último le daría en vida.
Le ayudo a recostarse y poco después sin volver a pronunciar una palabra, con los ojos abiertos y
una lagrima en cada uno como una película viscosa que no logro huir, su mamita Domitila murió.

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 Al día siguiente de regarse la noticia de la muerte de doña Domitila María en la Isla de Ometepe,
por la tarde llego a la casa de la difunta, su amigo el cronista Avilés, al no haber por menores se estuvo
sentado en una mecedora viendo el trajín y recordando a su amiga.
Recordó los hechos sangrientos del 1854-55.
La guerra entre Liberales y Conservadores, 1854 a 1857 fue la búsqueda de un poder absoluto de
una casta sobre otra en el País, afecto tanto a Nicaragua como a Centro América, por el
involucramiento de fuerzas extranjeras en el conflicto, que ensangrentaría esta región con el objetivo
de posesionarse del vasto territorio de México.
En el año 53 se dieron las elecciones Presidenciales según dicta la Constitución, ganando la
Presidencia por los Conservadores el General don Fruto Chamorro. Resultados electorales que no
aceptaron los Liberales, por considerar que habían favorecido a don Fruto a través de fraude Electoral.
El Presidente Chamorro reasume en el año 54.
El cronista se detuvo en esa fecha. Precisamente en esa casa, casi 30 años atrás había tenido una
conversación con doña Domitila María en la que ella insistió en esos años de 1854 y 1855. Su interés
era corroborar lo que su mamita Domitila le había contado, de hechos relacionados a la participación
de los Conservadores en la contratación de hombres armados de Estados Unidos de Norte América que
en ese momento se encontraba en guerra expansionista contra México.
El cronista Avilés se sonrió y recordó la conversación, explicándole los sucesos posteriores a las
elecciones de1854, en especial el no aceptar por parte de los liberales los resultados electorales. El
entonces Presidente don Fruto Chamorro ante la posición adoptada por los Liberales, aprovecho para
deportar del País a los principales líderes, de eso no hay dudas, lo del fraude electoral se desconocen
detalles, todo fue debidamente desaparecido por el carácter dominante como militar que era,
Chamorro en donde decía que algo no saliera, en ese lugar moría, entre estos dirigente deportados
figuraban don Máximo Jerez, don Mateo Pineda, don José María Valles y el General Francisco Castellón,
la expatriación fue a Honduras, que para entonces era Presidente el General Trinidad Cabañas, un viejo
Roble del Ejercito del General Morazán y leyenda viviente. La deportación de estos Liberales fue
suficiente para delatar el supuesto fraude Electoral y justificar la guerra en contra del gobierno de
Chamorro, por ser ilegitimo. En ese momento, la correlación de fuerzas políticas y militar en Centro
América favorecía a los Liberales. Con el apoyo decidido del Presidente de Honduras con armas y
embarcaciones. Esos líderes deportados por Chamorro y motivados por sus aliados, declaran la guerra
al Gobierno Conservador, desembarcando con tropas Liberales en el Puerto El Realejo. Posteriormente
conforman el Gobierno Provisional Presidido por el General Castellón compuesto por otros Liberales,
estableciéndose en la ciudad de León.
En un abrir y cerrar de ojos entro con prisa a la casa Marta Joyilla, el cronista se puso de pie y la
abrazo dándole a la vez sus condolencias. Ella le agradecía y por la prisa rápidamente le dijo.
- Profesor, me da pena, va a disculparme pero tengo que salir para organizar la gente en el muelle
y todas las personas que nos están ayudando en los preparativos de la espera del cuerpo de Domitila
María, cualquier necesidad usted ordene, la Chompipona ya saben que hacer, mande a prepararle algo
para mientras cesa la lluvia.
El cronista le agradeció y ella a como entro salió, el se acomodo nuevamente para continuar con
sus memorias con la difunta, recapitulo recordando.
La rebeldía de los Liberales llegó al punto que don Máximo Jerez se dispuso avanzar sobre
Granada, dándose fuertes combates en Mateares y Managua. Después de barios intentos de tomar esta
ciudad y no alcanzar su objetivo, decide sitiarla. La prolongación del sito provoco el descontrol sobre las
tropas Liberales, que eran un atajo de abusadores, libertinos más que Liberales, borrachos y ladrones, al
no poder tomarse la Plaza, don Máximo Jerez regresa con sus tropas a León.
‘’Más como derrotado que victorioso’’.
Resulta que al quedar mal parado don Máximo Jerez con sus correligionarios Leoneses, por el
fracaso de su campaña militar sobre Granada, Jerez aboga por la intervención norteamericana,
argumentando la ilegitimidad de las Elecciones y la ingobernabilidad, a finales del año 1854 el General
Castellón y Byron Colé en León firman la contratación de doscientos a trescientos hombres armados,
que entrarían por el Puerto El Realejo. Para ese entonces la muerte del Presidente don Fruto Chamorro,
era de dominio público y quien asumía el liderazgo político militar del General Chamorro en el Ejercito

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Conservador o Legitimista era el General Ponciano Corral. Es en ese momento que el argumento de
ingobernabilidad de don Máximo Jerez toma valides.
-Esa es la parte en la que tengo mayor interés profesor, hasta donde estuvo involucrado Corral en
la contratación de hombres armados al mando de Walker.
- Al momento de la muerte del General Chamorro, asume el General Corral el liderazgo, es cierto
que el gozaba del aprecio entre Conservadores, pero carecía de la fortaleza del don Fruto Chamorro, al
extremo que se tuvo que ocultar su muerte, para mantener el temor que le tenían sus enemigos.
Después del primer viaje a Nicaragua Byron Colé le propone al doctor William Walker la
Campaña Militar en Nicaragua y lo había puesto al tanto de las ventajas que este País ofrecía en todos
los campos económicos, políticos y militar. Esta información se la corroboro a Walker su gran amigo
Henri Crabb quien lo había acompañado en la campaña militar Cubana. Igualmente lo puso al tanto de
la situación militar de Nicaragua. En ese momento para que el doctor Walker pusiera manos en el
asunto se tendría que presentar la contratación de hombres armados por parte del Gobierno
Legitimista de Granada o el Gobierno Provisional de León, para que la contratación pudiese estar
acorde a las Leyes de los Estados Unidos.
Llego Rosaura Miranda, después de saludar al Cronista le sirvió en una mesa guaro pelón,
refresco, cerdo asado, tortilla y ensalada, nuevamente meneo la cabeza acompañada de una sonrisa, le
serró el ojo izquierdo y a la vez le lanzo un beso al aire con los dedos a manera de agradecimiento y ella
se retiro, el cronista se quedo sonriente viendo lo joven y hermosa que era.
A esta mujerona le decían Marta Jamela, hombre que comprara sus servicios sexuales no la
olvidaba y posterior a eso con solo oír su nombre les daba dolor en los huevos y calambres en la rodilla.
Algunos exagerados decían que hasta el cuerpo se les aflojaba.
En ese momento a cada instante la espera desesperaba unida a la impotencia, sentirse impotente
teniendo en sus manos tantos recursos, por su parte lo que vivía el capitán no daba lugar a envidia
alguna, posiblemente en algún momento alguien se acordó de Flores y se decía.
– Que coma mierda la que importa es doña Domitila María.
Posiblemente se secaba el sudor de la cara con un trapo curtido o tomaba un trago. Propusieron
enviar dos embarcaciones en apoyo al traslado del cadáver, ante la idea los capitanes argumentaron
inicialmente la fuerte lluvia y que a los mensajeros habría que ponerlos bajo custodia ya que no hay
otra prueba y podría ser una trampa.
Se fija Marta Joyilla, solo el capitán Flores tiene huevos para ese traslado.
Le dijo una de las putas de la calle El Desenredo.
Desde ese momento se le reconoció el merito de Flores por el valor sobre humano demostrado
por el capitán Santiago – Cago – Flores
El cronista ya satisfecho retomo el hilo de la conversación.
El doctor Walker se decide por la contratación de Castellón con Colé, por ser esta la ajustada, a las
exigencias de Ley del Gobierno de los Estados Unidos, dejando por fuera los ofrecimientos de su amigo
Crabb, igualmente de haberse dado Walker tendría que dejar por fuera cualquier contratación con el
General Corral, le permitía a Walker ejecutarlo con mayor ventajas estando dentro del territorio
Nicaragüense ya nos referimos a la diferencia de fortaleza que distaban entre don Fruto Chamorro y
Ponciano Corral.
Dijo Avilés.
El verdadero interés de doña Domitila María más que por la Historia era asegurarse que el criterio
que ella se había formado sobre la familia Pasos Arellano, antiguos patrones de su mamita Domitila y su
Madre, estaba en lo correcto y justo.
Seguida a otras explicaciones y entrando mas en el asunto del General Corral el Cronista Avilés, le
dijo.
- Detrás de ese asunto hay muchas cosas, entre falsas y verdaderas, como sucede en muchas
Historias sujetas a intereses particulares. Es posible que el Doctor Walker nunca olvido, el irrespeto del
General Corral comprometiéndolo con el Obispo Vigil a Jurar ante un Crucifijo fidelidad al Gobierno
Provisional, sabiendo que el doctor profesaba el Protestantismo. Por eso pienso doña Domitila María
que pudiera ser que el entonces General Walker dejara esa Contratación Corrales-Colé por fuera de su
testimonio Histórico en su libro ‘’La Guerra de Nicaragua’’ y no lo describiera ni lo mencionara, sería por
ese motivo y su culto al respeto de su inteligencia e integridad personal.
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 El Cronista Avilés en esa ocasión le entrego el libro escrito por Walker. Traducción de Fabio
Carnevallini fechada en el año de 1884 y le dijo.
- Si esa Contratación o Trama se planifico en Nandaime, reconozco, tuvo que haber sido
realmente en la Hacienda El Pitayal de la familia Zavala muy amigos del General Corral.
- Profesor yo le presente al capataz de esa hacienda desde esos tiempos y el contó delante de
Usted sobre las dos visitas seguidas del Byron Colé con el General Corral y lo hermética que fueron esas
reuniones con otros Conservadores, recuerde que dijo que en esa reunión estuvo presente el Papá de
don José Mercedes Gómez y le voy a contar más adelante lo que el mismo don Carlos José Gómez le
hablo a don Joaquín Pasos.
Dijo doña Domitila María a manera de reclamo de que el cronista era su testigo en ese testimonio,
para lo que el profesor Avilés le contesto.
- Yo recogí ese testimonio, pero usted entiéndame, en estos asuntos de Historia hay que tener
registros que prueben los hechos y de este asunto no cuento con algo probatorio para que sea tomado
en cuenta como un acontecimiento que realmente se dio.
La información que doña Domitila María conocía por boca de su mamita Domitila y sus propias
indagaciones, partieron del día que el General Corral llego a la casa de los Pasos Arellano sin previo
aviso y haciéndose acompañar por un extranjero que posteriormente sabrían que se llamaba Byron
Colé.
Al dirigirse Byron Colé hacía León a firmar el contrato de hombres armados con el General
Castellón, se reúne en Nandaime con Corral en la hacienda de sus amigos Zavala, en donde arman la
trama de lo que ofrecerían a los líderes Conservadores en una recepción que ya habían acordado el
General con don Joaquín Pasos y se dirigieron a la casa de los Pasos Arellano. Es a partir de esa visita
que doña Mercedes de Pasos se comienza a indagar sobre lo que sucedía, por la extraña recepción
estando fresco aun los sangrientos hechos del sitio impuesto por don Máximo Jerez.
Desde que doña Mercedes le asigno a Domitila los preparativos de la recepción ella dio por un
hecho que estaba sustituyendo en la realidad a su Madre, que además de cocinera de su familia,
pasaba a ser la confidente de su patrona. De esa manera Domitila, siendo su confidente supo de eso y
más, doña Mercedes sabia que la Mamá de ella la dejo al tanto de todo lo que ellas hablaban y que de
la boca de las dos no saldría nada, tan así era su confianza que si estuviera viva también en sus adentros
supiera que ella prepararía a su nieta Domitila María contándoselo.
El cronista continuó recordando ese relata de la mamita Domitila a su nieta.
El General Corral acompañado por Byron Colé visitan a don Joaquín en su casa, aquí en Granada
y logran que Colé sea invitado a la recepción, sin tocar el tema de la reunión de los líderes
Conservadores. Al regreso de Byron Colé de León, este firma con el General el Contrato de hombres
armados, bajo similares condiciones ofrecidas por los Liberales, la única diferencia era la justificación
para emplearse esos hombres en territorio Nicaragüense.
Don Joaquín Pasos se dio cuenta de esto después de la derrota de los invasores, eso se lo
confirmo su amigo don Carlos José Gómez y además de eso le comento.
Afinamos la Trama, Corral y Colé se dirigieron a Granada, con el objetivo principal de la
recepción en su casa don Joaquín, que era buscar el consenso general de los líderes Conservadores
para comprometerlos en su participación directa con la Contratación de hombres armados. Aun
cuando ustedes no estuviesen de a cuerdo, Byron Colé nos garantizaba legitimidad con los
Conservadores firmantes en respaldo al Contrato, que era lo requerido por el General Walker y era
suficiente para ejecutar el acto, pero para el General Corral la complicidad del resto era de sumo interés
para sus planes. Posteriormente los Conservadores logran el control del territorio Nicaragüense, los
Liberales fueron reducidos a los Departamentos de Occidente. Seguido esto el derrocamiento del
Presidente Cabañas en Honduras. La correlación de fuerzas en Centroamérica cambia el escenario
político, militar a favor de los Conservadores, situación que seguramente no había tomado en cuenta el
General Corra, por eso su relato concuerda en la Historia de esa guerra, porque usted me habla de un
General Ponciano Corral sin fuerzas y en ese momento así lo era. Por lo que al constar los Liberales con
fuerzas extranjeras, el General Walker se lanza contra Granada y es cuando Walker negocia con Corral
o lo obliga a la conformación del Gobierno Provisional. Teniendo Ponciano la correlación de fuerzas
Centroamericana a favor de los Conservadores no se resiste y con toda facilidad se dispone a tratar con
Walker, que le parece doña Domitila María. Posiblemente el General Corral quiso nadar en dos aguas
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María, en círculos importantes que vivieron el momento muy de cerca, se conoce que el General Corral
llego a tener mucha influencia sobre el Presidente Patricio Rivas, al extremo tal que se decía.
‘’Los vencidos parecen ser los vencedores’’.
Corral logro tener en su bolsillo al Presidente Rivas y estos tuvieron que auxiliarlo con don
Máximo Jerez nombrándolo Ministro del Exterior del Gobierno Provisional.
Se le acerco al cronista Avilés la Chompipona, una de las Putas antiguas que trabajaban para
doña Domitila María, ofreciéndole un hermoso trozo de lomo de cerdo asado con yuca y ensalada
picante, a lo que el cronista acepto con gusto. Contándole que ella se trasladaría al Parque Azul en
donde las Putas por no saber más que su oficio, serán las encargadas del abastecimiento al pequeño
ejército de voluntarios que trabajaban en torno a la espera de los restos de doña Domitila María, al
mismo tiempo invitándolo a que llegara cuando cesara la lluvia y que con ellas la pasaría bien,
serrándole el ojo y tirándole un beso sonoro, le dijo.
- Y si le parece podemos recordar viejos tiempos.
Capítulo III
Como única familia que conoció doña Domitila María fue su Abuela Materna, esta era una mujer
digna de sus antecesoras, descendía de más de una decena de Domitila Miranda, venían desde el siglo
XVII como criadas de casa-hacienda, cargando durante más de 200 años el mismo designio,
generación tras otra, hasta ser roto por doña Domitila María. En sus ignorancias, lo consideraban una
maldición. El abandono de sus hombres estando embarazadas, era el inicio, parían mujeres y por lo
tanto las recién nacidas serian llamadas Domitila y el Miranda por apellido, tradicional o por mal apodo,
daba lo mismo, no volvían a dejarse tocar por ningún hombre, un lunar de sombra detrás de la oreja
izquierda existía, redondo y pequeño era la marca familiar y cultivaban cualquier buen hábito que les
permitiera sobrevivir.
Todas ellas fueron trabajadoras de ‘’sacar raza’’, sin educación, brutas y fuertes como un animal,
con los años fueron ganando consideración de sus patrones y entraron a la cocina. En ella
desarrollaron el arte de cocinar, acompañado de virtudes como callar lo que veían y oían. El cocinar lo
aprendían con mucha facilidad, las recetas Españolas combinadas con ingredientes Nicaragüenses les
daban buen sabor y como desde niñas sus rutinas diarias fueron de la ranchería a la cocina de la casa
grande, ida y vuelta, no había otra cosa que aprender. El mantenerse en las labores de la cocina le
ponía su empeño y así alcanzar una forma más llevadera de existir.
Domitila Miranda, vivía con su hija y su Mamá. Ellas habitaban en una hacienda de la familia Pasos
Arellano, en la ladera sur del arrollo Zacateligue, a mil metros de la casa de sus patrones, en donde la
Madre de Domitila trabajaba como cocinera, ella y su hija igual de ayudantas. Así conformaban tres
generaciones al servicio de la misma familia. La patrona era doña Mercedes Arellano, esposa de don
Joaquín Pasos, un terrateniente Conservador acaudalado que gozaba del respeto y estima de su clase.
La Madre de Domitila desde que tenía memoria trabajaba con su Mamá para la familia Arellano y
han sido las criadas de confianza de las patronas. Durante las tardes de tertulias que organizaba doña
Mercedes, siempre le ordenaba a ella la preparación del refresco, bocadillos y pudines, que a doña
Mercedes muy bien le sabían y se enorgullecía por los elogios que recibía. Esto fue así igualmente con
la Mamá y abuelas de la señora Pasos Arellano, por eso la confianza que depositaba era tal, que para
ella cualquier error podría ser disculpado, pero cometerlo delante de sus amistades no tenía perdón.
Cuando murió la Madre de Domitila, doña Mercedes se prometió hacerse cargo de ella e hija. A
los días de la muerte de su cocinera, mando a llamar a Domitila para decirle.
- Domitila te vas a quedar trabajando en el puesto de tú Mamá en la cocina, tened cuidado con
las más jóvenes, no me decepciones ya que tú Madre fue una mujer muy cuidadosa y sabía hacer las
cosas como me gustan.
La envió a la cocina, el trato con ella fue normal como si nada hubiera sucedido, a Domitila lo que
le importaba era sobrevivir con su hija, además que nadie mejor que ella conocía esa cocina, los gustos
y exigencias de la patrona. Doña Mercedes, era una mujer muy rigurosa en sus cosas del hogar, blanca,
cara hermosa y elegante, con ojos azules y grandes, alta, por su edad un poco pasada de peso, de buen
vestir, gustos exquisitos y buenos modales, el corte de su educación era a la antigua, recia de carácter y
muy selectiva con sus amistades. Para con las criadas su lenguaje podría variar según el caso.

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 La servidumbre por lo general eran herencias de Madres a hijas y así sucesivamente, caso similar
al de Domitila, que al morir su Mamá pasó a ser la cocinera de la misma Patrona. Por eso que su trato
para con ellas podría ser desde muy amable o familiar, hasta hiriente si el caso lo ameritaba.
En una ocasión estando en la cocina, miro que la hija de la difunta Marta Rosales, apodada Marta
Joyilla, quiso levantar una cazuela caliente sin protegerse las manos y se quemo, inmediatamente doña
Mercedes la aparto y tan colorada como arrecha le grito.
- Apártate India bruta, que no estás viendo que la cazuela esta caliente, que hubieras hecho si se
te viene encima esa agua hirviendo, hubieras quedado lucia como una chancha para el destace,
habiendo en esta cocina más trapos que en cualquier otra de la ciudad. Mira Domitila lo que esta India
Jodida hace, échale manteca de Garrobo y Cebo serenado para que le cicatrice bien, ve Chavala
Jodidita, ya deseara verte trabajar en otra casa, aquí queda gente que te corrigen los errores a punta de
coyunda de cuero crudo, anda que te cure Domitila.
Antes de salir de la cocina, para calmar un poco los ánimos dijo.
- Domitila cuando termines me llevas en cocimiento Hoja de Naranjo Agrio con lechuga, todas a
trabajar que no tarda el patrón y voz Chavala Jodidita te lo digo por tu bien…
Ya un poco más calmada.
…Si te hubieras caído esa agua hirviendo de Marta Joyilla pasarían a decirte Marta Lucia.
Las mujeres de la cocina sonrieron respetuosamente.
Siempre las criadas terminaban dándole la razón y se la daban aunque no la tuviera, tenían una
necesidad de mayor peso, así que un regaño por muy fuerte no pasaba a más, su amor propio y orgullo
no aminoraba en absoluto. Lo grave seria recaer en el error, otro similar doña Mercedes no la dejaría
pasar, ella no olvidaba nada de lo que decía, veía o escuchaba. Por eso las viejas siempre aconsejaban a
las jovencitas tener cuidado con lo que hacían.
A Marta Rosales se le conocía como Marta Joyilla, porque cuando iban a lavar ropa al lago, entre
ellas Domitila, siempre encontraban una muchacha que era trabada de la lengua y no podía
pronunciar la ‘’J’’, Marta mucho la jodía, de tal manera que cuando se arrechaba la joven le gritaba.
- Deya Marta Yodida Hiya de Puta.
No les sonaba el Yodida y lo cambiaron por Joyilla. Reían sin saber Marta, que así se quedaría de
por vida y lo heredaría a su hija y nieta.
Marta joyilla, la quemada murió durante el parto, a su hija la crió Domitila con el consentimiento
de doña Mercedes, por no tener más familia en su tierna vida, le pusieron el nombre de su Madre Marta
Rosales mejor conocida como Marta Joyilla. La hija de Domitila ya estaba por parir a Domitila María.
Cuando Domitila le llevo a doña Mercedes el cocimiento de Hojas Naranjo Agrio con lechuga
para los nervios, ella le hablo sobre un refrán popular.
‘’Nunca falta un pelo en la Sopa’’.
- Eso es falso de que en la Sopa vas a encontrar un pelo, es casi imposible hallarlo por tantos
ingredientes. Cuando la gente dice eso, es mas a un problema inesperado al que se refieren. Domitila,
eso sucede principalmente cuando las cosas se hicieron o se dieron desamoradamente y de mala gana,
si procedes así se te olvida todo, porque no te interesa si queda bien o mal, te da lo mismo, lo que te
importa es aparentar que hiciste o distes. Ten cuidado con esas muchachas, ponerles mano dura, así se
ayuda más, yo no recuerdo haber visto a tu Mamá siendo blandengue contigo, porque ella no quería
que te saliera un pelo en la sopa, por eso siempre fue rigurosa en sus enseñanzas. Ponte fuerte con esas
jóvenes es por el bien de ellas, apura el almuerzo que no tarda en venir Joaquín que si se sienta y no ve
la comida servida, se va a molestar conmigo por blandengue como mi cocinera.
- Domitila María, esa era la escuela con doña Mercedes, don Joaquín se percato de eso ya muerta
ella.
Otra muchacha amiga de Marta Joyilla y la hija de Domitila, era Rosa Alemán, las tres fueron
inseparables desde niñas, así como lo fueron sus hijas hasta la muerte.
Rosa Alemán mayor que las otras dos fue la despabilada para amoríos con chavalos, dio que
hablar como ninguna y la primera en parir. Ella tuvo un hijo varón de nombre Carlos Alberto, dos niñas
Clotilde y Rosa la menor que heredaría el diminutivo de Rosita, los tuvo con diferencias de un año para
no volver a parir.
Resulta que cuando su hijo mayor de siete años el chavalo era un demonio de la boca, no podía
ver ni oír nada vulgar, porque inmediatamente lo contaba, por su inocencia no le importaba quienes
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estuvieran presente y tenia gracia infantil para contar con lujos de detalles lo sucedido. En una ocasión
a media noche, Rosa recibió una visita amorosa de Emiliano Zambrano, creyendo ella que el niño y las
niñas dormían, lo hizo pasar a su nido de amor, sin darse cuenta que Carlos Alberto estaba despierto y
además espiaba desde la tijera en donde dormía con sus hermanas, oía con claridad todo el amorío de
su Mamá.
Por lo general al caer el día, después de sus labores domésticas, las mujeres acostumbraban hacer
sus propias tertulias, igual que los hombres.
En una de esas Carlos Alberto sin ser invitado aprovecho la ocasión de contar lo sucedido en
aquella noche, Rosa trataba de callarlo, las mujeres le dijeron que lo dejara contar, bajo amenazas de
que lo Cachimbiaria si estaba de vulgar, aquel chavalo inicio el cuento.
- Llego al cuarto Emiliano Zambrano, en cuanto serraron la puerta, mí Mamá y el se desnudaron,
la cargo…
Haciendo la mímica de cómo agarro Emiliano a Rosa.
… La acostó y se le encajo encima…
Todas las mujeres se reían del chavalo.
… La tijera sonaba clic, clic, clic, clic, cuándo en eso Emiliano comenzó a decirle y meneándose
así…
El chavalo hacia movimientos de cintura y subía las manos como agarrando algo.
… Hay Rosita que rico, así Rosita, menéate, menéate, hay, hay, que bárbara Rosita, mas, mas, yo
creía que iba a llorar…
Decía inocentemente Carlos Alberto, aquellas mujeres no paraban de reír, incluyendo a la propia
Rosa Alemán.
… Después le decía, Rosita abrázame con la piernas, hay Rosita abrázame con las piernas, así, así,
así, ay, ay Rosita, ay, ya Rosita, que rico fue eso.
Suficiente para que Rosa reventándose de risa, se levanto tomando una rama de Jícara y siguiera
a Carlos Alberto corriendo y le gritaba.
- Vas a ver Chavalo Hijo de P… en cuanto lleguemos al cuarto te Cachimbeo.
Fueron carcajadas de todas las mujeres, viejas y jóvenes. Desde entonces todas le decían Rosita.
Esas eran las tertulias de las mujeres pobres en las rancherías, las de damas de sociedad no eran
tan diferentes desde el punto de vista que también se ‘’sacaban los pañales al sol’’ y del circulo no salía
nada, las señoras si se diferenciaban cuando sus conversaciones eran cargadas de cizañas y envidias,
situaciones que para las pobres no tenían lugar.
Por otro lado en las tertulias de los hombres, Emiliano Zambrano contaba otra versión de los
encuentros amorosos con Rosa Alemán.
Relataba de que el llegaba a media noche cuando todos dormían, ella y el entre besos intensos y
acalorados se desvestían, le acariciaba las piernas y caderas, acompañado de mímicas agregaba.
- Para que sólida la rejodida, no párese haber parido tres cipotes, yo la pongo de todas formas, la
agarro le subo la pierna y se la dejo ir de pie, después la pongo como perrita, que hasta la hago
bramar…
Todos los hombres riéndose, no por lo que contaba, más bien por la falacia, para entonces sabían
la versión de Carlos Alberto y termino diciendo.
- Después la acuesto y le doy merengue hasta que ella me pide cacao.
Eran carcajadas hasta que alguien le dijo.
- No seas baboso, si ya sabemos que es ella la que te hace pedir Cacao y ve Emiliano, ten cuidado
con esa mujer, que la Rosita Alemán, te puede volver hasta Cochón.
Las carcajadas se hacían sonoras, mientras en los cuartos las mujeres sabían de qué se reían sus
hombres.
Ese hecho pasional llego hasta los oídos de doña Mercedes, ella se moría de la risa cuando
Domitila se lo confirmo, el chisme se lo contó don Joaquín y no se aguanto hasta confirmarlo.
La Mamá de Rosita Alemán murió cuando ella tenía seis años, para ese entonces Marta Joyilla y
Domitila María tenían tres. De esa forma se armo el trío de amigas, que por criarse bajo la tutela de
Domitila se mirarían como hermanas.
Muchos años después, ya cuando Rosita Alemán hija gozaba de prestigio, doña Domitila María le
decía.
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 - De tal palo, tal astilla.
Se lo agregaba como resumen de alguna aventura amorosa que contara Rosita Alemán.
Don Joaquín y doña Mercedes procrearon tres hijos, Carlos el hijo mayor su nombre por el
emperador Carlos IV, Fernando, por el rey católico y Ángela María, por su abuela materna doña Ángela
María Arellano.
Carlos Pasos Arellano vivía en España terminando sus estudios superiores en la Universidad de
Salamanca. Los otros dos continuaban con ellos.
La familia Pasos Arellano era de las familias más prestigiosas y respetables de la ciudad por todo lo
largo de las costas del lago y el País, Conservadores de crema y nata, pero en ese sentido un tanto
moderados y justos con relación al trato con sus trabajadores y sus costumbres.
Se podría decir que para la primera mitad del siglo XIX era una de las Familias más Conservadoras
y adineradas, que gozaban de influencias y privilegios en lo político por su cercana relación con la
familia Chamorro.
Con mucha frecuencia en su casa, fueron tomadas decisiones de mucha importancia para la
Nación.
Capítulo IV
Don Joaquín Pasos le informo a su esposa doña Mercedes la decisión que había acordado con el
General Ponciano Corral, con relación a brindar una recepción con líderes Conservadores para discutir
sobre la situación política y militar que atravesaba el País y para ocultarla se haría con motivo de Año
Nuevo de 1855.
Después de comunicarle a doña Mercedes ese acuerdo con el General Corral, Don Joaquín
pensó que para su esposa una celebración brindada por su familia era la ocasión ideal para lucirse ante
la sociedad, mostrar su buen gusto, su delicadeza y poner en alto el renombre familiar. Pero doña
Mercedes comprendió que iban más lejos de lo normal…
“Solamente a un imbécil insensible se le podría ocurrir algo tan cínico y bajo, hacer una recepción
para decidir sobre las vidas ajenas”
Le contesto doña Mercedes refiriéndose al General Corral.
Ella no estuvo de acuerdo, la guerra estaba encima y no había para donde coger, don Joaquín
tendría tiempo suficiente para sus alianzas y marañas políticos. Fue después que se dio cuenta que
reuniones posteriores con otras personas, eran para idear una treta contra Corral, otra justificación que
el utilizo fue el de acercar a su hijo Fernando en los negocios, que tanto daño le causo al joven
involucrarlo en sus asuntos cochinos.
“La crema y nata de la sociedad Conservadora y la máxima autoridad de la Iglesia Católica
representada por el señor Obispo Vigil, serán los invitados al banquete para ensangrentarse el alma y la
Nación’’.
Se expresaba doña Mercedes con relación a los invitados y se sentía cierta amargura en ella.
En la realidad entre don Joaquín y el General Corral, las diferencias no eran políticas, más bien en
los métodos para solucionarlos, divergencias entre el criterio de un militar imperioso, al de un civil que
decía ser ‘’hombre pacifista y de pensamiento abierto’’.
Al día siguiente de hablar con doña Mercedes, le explico a la niña Ángela María sobre la
recepción, a ella le daba lo mismo, tenía una apatía natural para esos asuntos políticos. Sus libros eran
su pasión, no más.
Se dispuso a dar las órdenes respectivas para el viaje y enviar unos emisarios portando
correspondencia para los más allegados hacendados, amigos y socios. Antes de salir se dirigió a su
habitación para conocer el verdadero estado de ánimo de su esposa. Ella le aseguro que todo estaría
perfectamente ordenado.
- No será la primera ni la última vez Joaquín que te ausentas de la casa por trabajo o política,
quiero dejarte claro una cosa, no quiero música en esa recepción, los muertos les duelen aun a sus
deudos.
Se lo dijo tajantemente sin ocultar su desacuerdo con esa barbarie.
Era temprano aun cuando se marchó rumbo a la hacienda Panaloya. Doña Mercedes envió a una
moza a decirle a Domitila que le llevara el desayuno.

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 Estando servida la mesa doña Mercedes le indico con la mano que tomara asiento y durante
desayunaba le dijo.
- Llego el momento Domitila de demostrarme que podes y cuanto vales de verdad…
Se asusto, pero ella quedita no dije nada.
… Joaquín y yo ofreceremos una recepción especial, por motivo de Año Nuevo para invitados
muy importantes del País y quiero que te hagas cargo de los asuntos habidos y por haber para ese
evento, tiene que estar a la perfección, para eso tendrás a tus ordenes el personal necesario, tenemos
dos semanas para que las cosas se hagan bien y sin prisa. No hay que dejar ningún detalle para última
hora, Me contaba una amiga religiosa, que dejo los hábitos por un hombre, de que en los detalles esta
el pecado, de eso vos y tu hija saben más que yo…
Dando a entender que ellas buscando detalles en los hombres terminaron escogiendo lo peor
que había en el camino.
… Por eso no quiero absolutamente nada para última hora, te repito, organiza bien los trabajos y
confió en que no me falles y que nadie incumpla contigo.
Cuando Domitila se disponía a levantar la mesa, la patrona agrego.
- Hoy pansas bien de cómo vas a trabajar y a organizarte, habla con el personal, a partir de
mañana no hay horario para nadie, otra cosa, ojos y oídos al rededor de Joaquín, queda claro.
- No se preocupe doña Mercedes que ese quehacer ya lo conozco.
Domitila puso manos en el asunto, desde un inicio rebasando todas las perspectivas de doña
Mercedes, era la última en acostarse y la primera en iniciar las labores, las otras criadas entendieron
sanamente que Domitila ‘’se estaba jugando el pellejo’’ y si ella ganaba, todas salían favorecidas, desde
entonces muy consecuentemente, se acoplaron al ritmo de ella, con esa aptitud las cosas se agilizaron y
quedaban con mayor puntualidad, no eran menos trabajosas, pero si lograban un descanso completo.
En una ocasión Domitila le pregunto a su nieta.
- Hija ya te conté la historia de los compadres.
“El compadre cobrador y él otro mala paga”.
- No mamita.
Le contesto Domitila María.
- Estos eran dos capataces compadres, uno de ellos le debía dinero al otro, nadie pone en dudas
la palabra de esas amistades. El tiempo pasa y la deuda estaba quedando en el olvido, el compadre
cobrador se dispuso ir donde su amigo por el asunto.
Este hombre le dio un buen forraje a su yegua, limpio bien su pistola y balas. Muy de mañana
estaba en la casa de su compadre, salió su ahijado a recibirlo y le dijo.
- Mí Papá ya viene padrino.
Cuando el compadre se presento, fue directo al asunto, sin desmontar y colocando su mano en
su pistola fajada a la cintura, le pregunto.
- Compadre me va a pagar o no.
El otro le respondió a secas, igualmente colocando la mano en la pistola.
- Compadre no le voy a pagar.
- Y que hiciste.
Le pregunto su mujer toda asustada, pensando que su marido había matado a su compadre y
este le contesto.
- Mujer yo sentí en mi nariz un olor a flores, espelma e incienso. Di la vuelta y me vine para la casa
a contarte el cuento.
Así era la situación en la que vivían los Conservadores.
Don Joaquín y su hijo Fernando regresaron de las diligencias en que andaban, sin novedades,
solo con la diferencia que el muchacho regreso reservado, porque miro y escucho asuntos que en el
futuro serian de su total repudio y le marcarían en su vida el criterio sobre la política, la guerra y la
traición, principalmente la imagen que el tenia sobre su Padre. De esto se dio cuenta doña Mercedes ya
estando muy enferma.
‘’Te encomiendo a Joaquín y mis hijos’’.
Le dijo a Domitila, Llorando con dolor y tristeza.
A medida que la fecha de la recepción se acercaba la casa se iba reduciendo para tanto personal
en movimiento. Como algo imprevisto y en plenas labores, se anuncio sin previo aviso la visita del
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General Ponciano Corral y un acompañante de aspecto extranjero, por avisado don Joaquín, doña
Mercedes ordeno que se condujera a las visitas al despacho en donde los esperaría don Joaquín y me
indico que atendiera a los visitantes.
Domitila contaba que en esa ocasión doña Mercedes se quedo en la cocina armando la
conversación con lo que ella le informara y relato.
Don Joaquín con toda la cordialidad acostumbrada se dispuso a saludar a su amigo y al
acompañante, inmediatamente fueron presentados por Corral, entablaron una conversación
relacionada mas a características y oportunidades que ofrecía la ciudad de Granada, con todo su
recurso terrestre, lacustre y la hospitalidad humano especialmente. Su belleza natural única en
Nicaragua, sobre las ventajas que brindaba la ruta interoceánica especialmente a Estados Unidos…
Domitila entraba y salía dejando café y empanadas rellenas con carne.
… Don Joaquín hablaba con la soltura que corresponde a un hombre conocedor de la
Geografía e Historia del País. Domitila entraba y salía dejando refrescos, café y empanadas rellenas con
carne, excusas no faltaron para regresar, para ellos no fue ninguna incomodidad por ser una criada
insignificante. Don Joaquín fue rigurosamente precavido en no abordar el tema del o los motivos que
habían traído a tierras Nicaragüenses y en especial a Granada al extranjero. El General Corral se
disculpo de la visita sin previo aviso y excusándose que el motivo era solicitarle su consentimiento de
dejarse acompañar a la recepción con su amigo, don Joaquín respondió inmediatamente con
cordialidad y familiaridad estrechándole la mano al extranjero y diciéndole que era un invitado no un
acompañante, que no permitiría un desagravió.
‘’Será un placer tenerlo en casa ese día’’.
Con recursos de Palabras, pretextos y mañas de sus viejas escuelas, se despidieron con mucha
amabilidad, doña Mercedes posteriormente le contó a Domitila estando en su cuarto y riéndose de
buenas ganas.
- Domitila fíjate como eran las escuelas de nuestros Padres, yo con toda claridad mire que
cuando Ponciano y Joaquín se despidieron, se hicieron la guatusa en las dos manos.
Ella se reía placenteramente, Domitila sonreía con precaución, el comentario que ella hacía
involucraba a su esposo y en su escuela el respeto no hay que perderlo por mucha confianza que
exista.
Cuando Domitila le conto esa pasad a su nieta le agrego.
- Por mí parte Recordé, Que en una ocasión íbamos a lavar ropa al lago y una dama de sociedad
saludo a Rosita Alemán – Abuela - de esta Rosita, Marta Joyilla igual y yo, nos sorprendimos y ella nos
dijo…
‘’Somos iguales en gustos, nada más que ella es señora de la alta sociedad y yo no, por eso nos
saludamos de largo’’.
A solas don Joaquín en su despacho se quedo un tanto intrigado, preguntándose que había
detrás de esa visita, se sintió en la obligación de comunicarles a sus aliados sus respectivas
consideraciones de lo sucedido, pero primero hablaría con el General para aclarar algunas inquietudes,
para así tener una mejor panorámica de la extraña visita.
Se dispuso a enviarle una nota al General Corral, en donde le solicitaba llegar a su casa por la
tarde para unos detalles que no los quiso tocar por la presencia de su acompañante, explicándole que
no era desconfianza, por no estar autorizado a comentar ningún asunto sobre la reunión a otras
personas. El General Ponciano Corral llego a una hora de la tarde que fuese menos caluroso. Don
Joaquín ya lo esperaba y fue recibido de forma acostumbrada. Doña Mercedes le ordeno a Domitila
que dejara todo servido, que ella espiara desde la habitación contigua. El General noto la primera
diferencia, en una mesa ya estaba el refresco y la canasta de empanadas rellenas de carne.
- Volvía a ver en toda dirección, de arriba para abajo, entendió el jodido que la conversación no
sería interrumpida por ninguna criada, de seguro las orejas se le calentaron, se miró solo y fuera de su
campamento el muy Hijo de P.
Riendo doña Mercedes le contaba a Domitila.
Habría que ser cauto. Aunque eran amigos de muchos años, Ponciano estaba claro que
comulgaban en Capillas diferentes, pero eran de la misma Escuelas.

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 Joaquín inicio hablando sobre algunos detalles de la reunión, como la iban a organizar para que
fuese ágil y no levantar sospechas. Poco a Paco fue desviándose al motivo del encuentro entre ellos y
bien orquestada se dispuso y cambio completamente el tema, diciéndole primero.
‘’Mire mi amigo General Ponciano Corral, nuestra amistad a estado por encima de muchas
contradicciones y los dos siempre hemos puesto en primer lugar la Patria y nuestros ideales
Conservadores, mi familia y la suya han sido unidas en todo momento, por ese motivo quisiera saber si
yo o míos en algún momento le hemos faltado a ustedes, para así personalmente pedirle mis sinceras
disculpa’’
… Ponciano meneaba la cabeza a manera de indicar que ‘’No’’. Pero a su vez en un momentito
comprendió que el asunto se relacionaba con su acompañante.
‘’De ser a como lo estoy entendiendo, como un no, desearía conocer que lo impulso
a faltar el irrespeto a mí persona y familia en esta casa en donde ha sido bien acogido, presentándose
con el señor Byron Colé. Usted sabe perfectamente quien es ese hombre, un tipejo que se ocultaba en
un periódico, que me di cuenta que vendió sus acciones, para ser un activo traficante de esclavos, un
hombre sin escrúpulos dispuesto a involucrarse con quien sabe que gente, siempre y cuando salga
ganancioso, además me solicita que lo invite a una recepción en donde estará lo selecto del
Conservatismo Nacional. Lo acepto únicamente por usted, pero la responsabilidad de su presencia la
tendrá que asumir su persona y no yo’’.
De esa forma don Joaquín Pasos encontró la primera excusa para irse distanciando de las
posiciones del General Corral. Se despidieron cordialmente, con motivo de que Corral se dirigía hacia
Rivas. Después don Joaquín se dio cuenta por don Carlos José Gómez que en Nandaime esperaría el
regreso de Byron Colé de León, en donde firmaría con el General Castellón la contratación de hombres
armados en Estados Unidos y que igualmente contraerían el mismo acto con ellos, al mando del
General Ponciano Corral.
Capitulo V
Al tensarse la situación militar la familia Pasos Arellano se traslado a la hacienda Panaloya. En ese
clima nació Domitila María Miranda, el Domitila por su Abuela, Madre y antecesoras. Fue una tierna
hermosa, pesada como un ternero, de carita redonda, sus ojitos grandes y negros muy vivos, tenia
pulmones fuertes, sus llantos se podía escuchar hasta la otro rivera del río Tipitapa, su piel era morena
lavada y se miraba saludable, detrás de la oreja izquierda tenia la marca de las Domitila.
Cuando Domitila llevo a la bebe al cuarto de doña Mercedes, en presencia de don Joaquín para
ponerles la niña a la orden como era la costumbre, la patrona estando en mal estado de salud, pidió le
ayudaran a incorporarse y poderla ver.
Le acaricio la carita, con las manitos de la criatura le hizo la señal de la Cruz en la frentecita, la
niña reía, ella emocionada dijo.
- Domitila felicidades, es una niña hermosa y se mira sanita.
El estado de salud de doña Mercedes era delicado y las emociones no le hacían bien. Después
que don Joaquín cargo a la niñita como un gesto de bienvenida y de saludo de su familia, su esposa le
pidió que por favor las dejara solas, el salió de la habitación, haciéndole una mueca cariñosa a la niña y
acariciarle las manitos, la tierna jugueteando, a la par de reírse tiraba pataditas tratando de impulsarse
hacia delante. Don Joaquín entendió que el asunto a tratar era entre mujeres.
- Mira Domitila, para que salga de tu familia esa maldición que tú Mamá me hablaba que existe,
aunque no seas una mujer tan creyente.
- No mi señora, en los que no creo es en los curas de la ciudad, esos no son como los padrecitos
del campo.
Dijo Domitila interrumpiéndola.
- Bueno, vas hacer esto por esta niña, encomiéndasela a nuestra Señora la Virgencita María,
madre de nuestro Señor Jesucristo, veraz como a este angelito de Dios le va a ir diferente, pero para
bien…
A Domitila se le enternecía el corazón al escuchar aquella voz lenta y amorosa en su patrona.
… Te voy a contar, yo a mi hija le puse Ángela María supuestamente por mi Madre, pero de
corazón le puse María, por nuestra Señora la Virgen María. Cuando ella nació nadie me le deba

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esperanzas de vida y ya vez como mi Santísima Señora me la ha cuidado. Yo soy más vieja, soy tu
patrona y te he querido mucho…
Hizo un breve respiro, dio un sorbo de agua de un vaso que le alcanzo Domitila, pauso y
continúo diciendo.
… Cuanto quisiera yo que tu difunta Madre estuviera aquí gozando de la felicidad de ustedes con
este regalo de Dios…
Hizo pausa mostrándose cansada, tomo unos sorbos de agua más y prosiguió.
… Quiero Domitila pedirte dos grandísimos favores…
Usted disponga patrona.
Dijo Domitila mostrando mucha disponibilidad a la petición que le dispondría doña Mercedes.
… Si muero no desampares a Joaquín y mis hijos, cuídalos por mi, yo se lo duro que será, detrás de
la apariencia el también es débil y frágil, así fuimos educados por nuestros Padres a ocultar nuestras
debilidades con brusquedades y el otro favor es que a tu nieta le ponga el nombre de Domitila María.
Domitila con los ojos llorosos al escuchar a su patrona hablar con tanta familiaridad y cariño, le
dijo.
- Lo voy hacer a como me lo pide Patrona, usted no se me preocupe que todavía no le toca la
hora, además le falta el bautizo de la niñita Domitila María…
Dijo Domitila besándole la frentecita a la recién nacida y acercándosela a doña Mercedes que
igualmente la beso, le acarició las manitos y los cachecitos.
… Usted es un mujer fuerte y dentro de poco nadie se acordara de este mal momento se lo
aseguro doña Mercedes.
Tratando así de darle animo y un gesto humilde de agradecimientos por la forma tan especial que
recibía a su nieta.
En el año 1855, la situación política y militar del País ya estaba definida con relación a la presencia
de los invasores, sus objetivos en Nicaragua y Centro América. Los Filibusteros con un Batallones de
Caballería y dos de Fusileros se toman la ciudad de Granada. La misión era apoderarse de la base
operacional Conservadora, para obtener mejores condiciones de negociación a los Liberales y de esta
forma aparentar Unidad Nacional y que la instauración del Gobierno Provisional gozaba de consenso
de las fuerzas en conflicto, este fue encabezado por don Patricio Rivas como Presidente y en el estaban
el General Ponciano Corral Ministro de la Guerra, don Máximo Jerez Ministro del Exterior y William
Walker como jefe del Ejército, todo haría aparentar que en el ambiente del País se gozaba del
consenso’’.
Walker nunca tuvo interés en quedarse en Granada, su objetivo eran los Países Centroamericanos
y Nicaragua seria su base operacional. Los invasores miraban a estos países con una codicia macabra,
perversa, que ni la fiebre del oro en California se podría comparar con las riquezas de esa campaña
militar. Todo en manos de los futuros Estados esclavistas y expansionistas en los Estados Unidos de
Norte América. La posición geográfica de Nicaragua era tan ideal para sus planes de expansión sobre el
territorio Mexicano, que miraban como acorralaban México por el norte con los Estados esclavistas
fronterizos y por el sur con Centro América.
Don Fabio Carnevallini y traductor del Libro ‘’La Guerra de Nicaragua’’ de William Walker en
1884, expresa.
‘’En los bordes de la bandera del Primer Batallón de Fusileros al mando del coronel Sanders se
leía.
Cinco o ninguno’’.
Haciendo referencia a los cinco Países Centroamericanos’’.
Al cesar la lluvia el cronista Avilés se traslado al Parque Azul, atendiendo la invitación de la
Chompipona de que sería atendido como doña Domitila María lo hubiera ordenado, al llegar y después
de saludar todas las putas, se sentó en una banca del Parque, le sirvieron tragos con ‘’bocas de pájaro’’
y una que otra coquetería, por ser el único hombre entre mujeres sedientas de placeres sexuales en
extremo. Al mismo tiempo tuvo que opinar con mucha autoridad sobre las cautelas tomadas con los
mensajeros, lo que considero de mal gusto y desconsideración par con esas personas. A esas alturas el
cronista ya estaba al tanto de la moción de los capitanes de lanchas para no reforzar con dos
embarcaciones el traslado del cuerpo de doña Domitila María.

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 - Esos hombres pusieron sus vidas en verdadero peligro en pequeños botes de remo para
traernos esta maldita noticia.
Concluyo diciendo el cronista.
- Sobre el asunto de quien trajo a los filibusteros, según los datos históricos fueron los Liberales, ya
le explique mis consideraciones del por que el doctor Walker se inclina por ellos, ahora sobre las
artimañas, hubieron traductores y estudiosos que llegaron a pensar lo que usted me dice…
Pensó Avilés al retomar sus recuerdos con el lago de frente.
Que se sabe quien o quienes Contrataron a los Filibusteros, quien abrió la puerta, por donde
entraron, pero en medio de las ambiciones de los dos bandos, no se sabe a ciencia cierta quién los
atrajo a Nicaragua. A diferencia de Crabb que viajo por el Lago Cocibolca y observo la situación de
Nicaragua, incluso Crabb fue quien habla con Walker sobre el sitio a Granada por parte de don Máximo
Jerez, igualmente es posible de que por viajeros de la ruta de tránsito hacia California y como socio de
un Periódico Byron Colé haya recibido informaciones sobre Nicaragua, la duda que me parece que
puede calzar, es como Byron Cole entablo contacto con el General Castellón, tan así que posiblemente
en dos visitas a Nicaragua fueran los suficientes para firmar una Contratación de hombres armados, me
párese a mí en ese vació puede considerarse lo que se a deducido, es posible igualmente que en ese
detalle pueden entrar los intereses del comodoro Bandervil, siempre se a dicho.
‘’Que el contubernio de Liberales y Conservadores, con jugosos ofrecimientos y sus intereses
personales, terminaron vendiendo o entregando en manos extranjeras la Soberanía y Dignidad
Nacional’’.
- Profesor, don Joaquín Pasos le hizo un comentario a mi mamita Domitila en donde el al referirse
a los dos bandos en contienda lo hace uniendo las fuerzas a favor o en contra de los filibusteros…
‘’Esto fue complejo Domitila. Mientras aquellos líderes Conservadores y Liberales que no
apoyábamos la presencia de tropas extranjeras en el País, agitando el levantamiento en contra de los
Filibusteros, llegábamos cada vez más a ponernos de acuerdo en la Unidad Centroamericana, otros
líderes de los dos bandos insistían a favor de los invasores’’.
… Prueba de esto es que don Máximo Jerez les notifica a todos los Países de Centro América, en
su carácter de Ministro del Exterior sobre la legitimidad del Gobierno Provisional y solo el Gobierno de
El Salvador, le responde felicitándolo, ellos buscaban el respaldo internacional para esa guerra, al
contrarió eso dejo claro el repudio, por la presencia extranjeras en el País, la Región y que la correlación
de fuerzas estaba en contra de los Liberales como dueños del Contrato de los Filibusteros, mientras en
Nicaragua promovían el apoyo a los invasores.
A lo que Avilés respondió.
- Estoy de acuerdo con eso, en ese momento la guerra no está definida y hay que seguir
jineteando el macho, los Filibusteros tenían mejor armamento y mayor experiencia de guerra. No me lo
va a creer pero también hubieron pobladores del campo y la ciudad que prefería combatir contra los
Patriotas y Centroamericanos que estar a favor de ellos, se escucha mal pero esas tropas Patrióticas, no
dejaban de ser un atajo, ya sabe usted de que, eso es normal de tropas combatiendo en otro País, eran
idénticas a las que trajo don Máximo Jerez, no hay que revolver con esta expresión a los verdaderos
Patriotas con muchos abusadores como sucede en toda guerra.
Las batallas se daban en desigualdades tantos para unos como para otros en el Istmo de Rivas.
Los invasores filibusteros insistían en asegurar el paso por el Istmo para su reforzamiento y
abastecimiento de las tropas, la rutas Inter.-Oceánica era ágil para sus propósitos. Al mismo tiempo los
Filibusteros ofrecían valores a los norteamericanos que se incorporaran a la lucha en Nicaragua, para
disponer con las fuerzas necesarias y ampliar la campaña militar hacia el norte, pero los
norteamericanos desconocían sobre las riquezas de Nicaragua, aun así la tropa de Walker era grande.
- Entonces profesor Avilés en donde queda Corral.
Pregunto doña Domitila María.
- La conformación del Gobierno con Liberales y Conservadores tenía como principal objetivo que
los dos bandos negociaran con sus aliados Centroamericanos. En eso radico el interés de Walker para
negociar con Corral, ya que la nueva correlación de fuerzas en Centro América podría ser manejada por
el y sin obstáculos.
Dijo el cronista Avilés.
- Y la existencia del Documento de Contratación firmado con Byron Cole.
16 | P á g i n a
 Pregunto Doña Domitila María.
Se le acercaron un grupo de Putas aprovechando un leve respiro en la faena de estar
despachando y enviando todo tipo de requerimientos, le llevaron carne con tajadas fritas y comenzaron
a contar sus historias de el porqué se prostituyeron.
Mil historias diferentes con un mismo final, para la edad de 63 años que tenía el cronista Avilés,
cada uno de esos relatos le parecían fascinantes, edemas que en sus tiempos mozos e iniciando doña
Domitila María con los primeros burdeles, al igual que don Fernando Pasos y sus amigos gozaron de
muy buena carne, nueva y fresca. Las mujeres se fueron retirando, no era fácil la tarea de atender al
personal que trabajaban en torno a la espera de la Lancha Fúnebre.
En medio de la grave situación militar del País, en el año de 1855 falleció doña Mercedes Arellano
de Pasos, sus funerales fueron modestos pero muy ceremonioso, un misionero Franciscano se encargo
de los oficios religiosos y fue destinada una área como cementerio provisional.
Los Conservadores agrupados en torno a Don Joaquín entre sus precauciones habían enviado a
sus hijos e hijas y esposas a España, doña Mercedes no quiso irse si no lo hacia con su esposo, termino
quedándose ya que don Joaquín por la situación que se avecinaba se negó a marcharse.
Para esa fecha igualmente murió la hija de Domitila, Madre de Domitila María, la peste del Cólera,
se la llevo al igual que cobro muchos muertos a los invasores, en especial en el cuerpo de oficiales y con
muy buena puntería. Fue enterrada en el mismo cementerio provisional por orden de don Joaquín.
Pocas semanas después del fallecimiento de doña Mercedes, se recibió el aviso que su hijo mayor
don Carlos Pasos Arellano, se encontraba en el embarcadero de San Carlos, que gozaba de salud,
seguridad y próximamente sería trasladado a la hacienda Panaloya, firmada por fieles amigos y socios.
Esta noticia levanto notoriamente los ánimos de don Joaquín Pasos, volvió a ser el hombre activo,
diligente en lo político y comercial, en ocasiones el no negaba su temor por la vida de su hijo. Con solo
la noticia ya sentía la presencia y la fuerza de su difunta esposa, se convirtió en un hombre robustecido
y enérgico.
- Sus debilidades quedaban atrás, pero la traición se lleva en la Sangre y no podría ser separada de
sus vidas.
Le dijo Domitila a su nieta.
Igualmente le contó a Domitila María como fueron sus cambios y sobre el grado de confianza que
ella había alcanzando con don Joaquín, a partir de la recaída en cama de doña Mercedes.
En una ocasión sucedió que a don Joaquín le puso atención a la dedicación que Domitila le ponía
al trabajo.
- Tenía razón mi difunta Mercedes al decirme que usted Domitila, eras una mujer pencona en el
trabajo.
- Para el trabajo he nacido patrón,
– Todos nacimos para eso, hasta los animalitos de Dios, dejan solas a sus crías para buscarles la
comida y ese es trabajo también. Algunas personas nacimos con mejores posibilidades, te imagina que
yo me eche dejando las haciendas al libre albedrío, fracasaría inmediatamente y quedaríamos sin
trabajo. Mi Papa decía…
‘’Dios da para todos, siempre hay que dejar algo para los otros. Te imaginas hijo que yo piense en
mejorar algo en la hacienda necesitaría de más personal, entonces mayor número de trabajadores y
familias alimentándose’’.
… Pero yo miro Domitila, que si por tu parte pudiera hacer todas las labores, tendría que despedir
al resto del personal, entonces la gente sin trabajo y hogares sin alimentos. Me entiendes Domitila, es
cuestión de distribuir el trabajo entre todos y ganemos, algunos o muchos por lo menos comiendo,
vistiendo y bajo techo. Para que mires lo sencillo de este razonamiento y me des la razón, de los
preparativos para el retorno de mi hijo dejé un poquito para mí y así le estarás ayudando como si fuera
alimento a un patrón viejo y solo.
De la forma como lo dijo quedaba en evidencia, la nueva aptitud para con la vida, Domitila sintió
un profundo regocijo por el patrón y la promesa hacha a mí patrona.
“Usted estará sin su difunta esposa, que Dios la tenga en el cielo, pero el señor tiene a sus hijos e
igualmente a nosotros. Ya lo sabe no está, ni anda solo en la vida”.
Le contesto Domitila.

17 | P á g i n a
 En medio de la dramática situación política y militar del país, la hacienda Panaloya se recuperaba,
secretamente se hacían de recursos frescos a través del contrabando de ganado y otros productos con
Costa Rica. Un día recibió una correspondencia que lo inquieto, en donde se le comunicaba que por
ordenes de su hijo don Carlos, a partir de cierto tiempo se había estado intercambiando ganado por
armas con contrabandistas Caribeños, no con fines guerreristas, más bien para reforzar la seguridad y la
evacuación de ser necesario de la hacienda Panaloya y proteger el acceso a las zonas de Chontales y
Boaco.
Aunque las explicaciones fueron explicitas con relación al criterio anti-guerrerista de su hijo, lo
bien que compartía las convicciones políticas Conservadora y Patriótica ante los invasores, fue
inquietante y mucho pensaba don Joaquín que por su culpa murió doña Mercedes y de hasta adonde
arrastraba a su hijo, al extremo de negociar con contrabandistas pertrechos militares, siendo un
hombre pacifista, amante de la paz y el orden, como deben ser las personas que saben respetar las
Leyes de Dios y de los hombre. Recordó al difunto general Ponciano Corral, hasta donde lo había
llevado la guerra y sus ambiciones. Ahora su hijo de igual forma que Corral negociaba con
contrabandista, ladrones, asesinos o quien sabe cuántas cosas y tipo de gente, también por ambiciones
e intereses familiares.
Sobre esas preocupaciones, en una ocasión Domitila le dijo.
- No se preocupe tanto don Joaquín, mire que eso nada bien le hace…
Recordándole que ya no era un joven.
… Son corajes de juventud y por lo que párese no hay malicia, ni mal camino en ello, de lo
contrario sus amigos se opusieran y desde el primer momento se lo hubieran comunicado o urgirían de
su presencia…
Le serbia una tazón de café con una bajilla de galletas.
…Él es de los hombres que pierden a su Mamá antes de aprender a ocultar lo frágiles y débiles
que son cuando andan solos, se ocultan en la fuerza de la juventud que arde en sus pecho, usted cree
que los Patriotas Voluntarios que luchan y mueren a diario andan con sus Madres o Mujeres, andan
solos también por su causa personal, ocultando sus temores…
Domitila tratando con buena voluntad de recordarle que esas eran las consecuencias de aquella
recepción.
… Don Carlos no es un aventurero, su preparación son pocos los que la tienen, no se preocupe.
Mire la diferencia, doña Mercedes aun con las preocupaciones que tuviera estaría orgullosa y apoyaría
a su hijo, mientras usted, me parece que sus preocupaciones son otras las que carga y no de que algo
bueno o malo le suceda, no lo escucho que hable de darle su apoyo para que sepa que tiene un Padre
que lo respalda en toda decisión que tome, que en estas condiciones hasta las malas actuaciones al
final resultan haber sido buenas, me disculpa patrón por ser boca floja e irrespetuosa con usted, pero
creo que es necesario que alguien le hable así de vez en cuando.
Don Joaquín le clavo una mirada penetrante, quiso decir algo, posiblemente fuerte, sonrió como
si cayera en una conclusión que siempre la tuvo a la vista y era que su difunta mujer fue capaz de
moldear, pulir y preparar expresamente para esos duros tiempos de su ausencia a esa criada. Para el
quedaba claro, esa mujer que le hablaba de esa manera tan atrevida, era la hija de la cocinera de su
mujer por muchísimos años y posteriormente ella sustituyo a su Mamá, acompañante en su lecho de
muerte de doña Mercedes y quién sabe si hasta su confidente.
Ella conocía tanto coma su difunta esposa. Nunca se puso a pensar, porque al morir la Mamá de
Domitila, doña Mercedes, la coloca en un segundo plano a manera de prueba y tendría que
demostrarle lo que valía en aquella recepción, en la que él se oculto en su poderío económico, sus
relaciones y la traición a sus socios y amigos.
En un instante comprendieron lo equivocado y ensangrentado que estaba, haber sido pasivo en
un momento tan crucial, fue su difunta mujer y Domitila las únicas personas que supieron de su
debilidad y cobardía.
Se quedo en aquel infeliz pasado recordando aquella recepción, observaba a Domitila sacudir los
sillones con una escobilla de plumas y sintió nostalgia por su mujer.
Capítulo VI

18 | P á g i n a
 Los mensajeros al llegar a la calle El Desenredo, fueron directamente a una casa de acera y
paredes altas, de adobe, blanqueada con Cal, golpearon sin recibir repuesta alguna, sintieron que se
abría la puerta contigua, una vos ronca pregunto a quien buscaban, el mayor de ellos contesto.
- Buscamos a Rosita Alemán o Marta Joyilla, traemos noticias de la Isla sobre doña Domitila María
Miranda…
El hombre pauso secándose el agua de la cara.
…No son buenas noticias. Sabe en donde la podemos encontrarlas.
- Rosita dijo.
Pregunto otra persona desde el interior, ellos le contestaron.
- Si, Rosita Alemán.
Se escucho una vos fuerte decir.
- Buscan unos hombres de la Isla, traen noticias de doña Domitila María.
- Ya vamos.
Contesto una persona con vos de mujer. Inmediatamente se abrieron tres puertas más, personas
iluminadas a luz de candil, se escucho bulla en la casa de Rosita Alemán y se abrió la puerta, en otra
puerta una mujer comenzó a golpear diciendo.
- Marta Joyilla, hay unos hombres que traen noticias de doña Domitila María.
Igualmente en esa segunda casa se escucho bulla.
De la casa salió una mujer alta y recia, de piel morena, se miraba un tanto mayor que doña
Domitila María, era Rosita Alemán, se les unió Marta Joyilla y ellos entraron a la casa.
La calle y sus contornos fue iluminándose, se formaron grupos de mujeres o varones en las
esquinas, puertas y cuartearías, se fueron acercando los que vivían en las rancherías, los pescadores de
la costa y calle aledañas, gritos y lamentos se oían en la casa de Rosita Alemán, eran llantos de Muerte.
Para la madrugada toda la gente pobre de la ciudad, alrededores y en distintas direcciones del
campo se supo de la noticia. Las autoridades civiles y militares, se presentaron a velar el orden y no
hubo restricciones, por cualquier actividad que se tomara en espera del cadáver, los marineros,
cargadores y pescadores encendieron fogatas cerca del muelle para orientar la lancha que trasladaría a
la difunta desde la Isla.
El muelle prácticamente fue invadido por hombres, marineros para fondear embarcaciones,
atracar la lancha, cargando tablones, atizando las fogatas e improvisando techados por la lluvia y
grupos de mujeres llevando café negro, comida y guaro pelón. Trabajando bajo la lluvia.
- Él no le fallara a Domitila María.
Decía Marta Joyilla refiriéndose a Santiago Flores y por lo que para él significaba la difunta.
Para esos años, mientras Nicaragua entraba a un mayor auge económico y comercial, la alta
sociedad Granadina por conflictos económicos y políticos, había entrado en decadencia económica.
Granada no representaba el mismo atractivo comercial del siglo anterior. El creciente empuje industrial
y comercial lo acaparaba Managua, en donde se abría la nueva ventana al mundo y el desarrollo. El
Puerto Corinto en el Océano Pacifico, tenía comunicación a través del ferrocarril y de los dos lagos y ríos
con el Océano Atlántico. Granada se consumía como una vieja historia Conservadora, con la fama de lo
jactanciosa, mientras otras regiones del País fortalecían sus rublos de producción, hasta exportación
Café, Algodón, Azúcar.
Para ese entonces doña Domitila María había construido un pequeño imperio, desde un inició ella
no ponía reparo en negociar con contrabandistas o con cualquiera que comerciara al margen de la ley.
Invertía en Cantinas, Prostíbulos. Casas de Juegos, Usura y reinvertía en Cuartearías, Almacenes,
Acopiadoras de Granos Básicos, Madera, Ganadería, Lecherías, Pesca, Transporte Lacustre y Terrestre,
Pulperías, etc. sobre lo largo y ancho de las costas del Lago Cocibolca, sus Islas y las riveras del Río San
Juan. Así como grandes extensiones de cultivos de Café en Carazo y el Volcán Mombacho, Caña de
Azúcar en Rivas y Nandaime, que las había adquirido durante el gobierno Liberal del General José
Santo Zelaya en complicidad con el General Juan Bodan.
Entre las mujeres aristocráticas de la ciudad, no les dolía que tuviera tantos bienes, lo que no
soportaban era su fuerza y el poder que ella representaba, siendo su origen de gente extremadamente
pobres.

19 | P á g i n a
 Con la institución del Colegio Centroamérica en Granada, ella se relacionaría con la avanzada del
pensamiento del siglo XX, muchos estudiosos que llegaron a ser Presidentes o Ministros de Estado,
acaudalados Empresarios y brillantes profesionales e intelectuales.
Al regarse la noticia de su muerte y llegarles a las aristócratas, sus almas sintieron un gran alivio en
sus existencias, como si se esfumara un fantasma que les asustaba sus sueños de grandeza. Para ellas las
cosas cambiarían, tenían a la Iglesia Católica que en su mayoría se inclinaban a ellas como si fueran
Diosas.
La gente pobre se aprestaba a ayudar en quehaceres de cocina, limpieza o cualquier labor
domestica que fuese necesario, para ellos lo importante era ser útil. En la otra cara de la moneda social,
iniciaron ruedas para jugar al papel de Corte Celestial, condenar a doña Domitila María por los Pecados
cometidos, por cometerse en su nombre y hasta los cometidos por los conquistadores Españoles.
Después de la muerte de Domitila, el odio y la envidia en contra de la joven Domitila María
floreció, las aristócratas de la ciudad quisieron aprovecharse al verla joven y sola, la cizaña sobrepaso los
límites del chisme y calumnia, para alimentar odios vengativos y de muerte, despertando en ella su
sangre ancestral.
La mamita Domitila no la dejaba en el desamparo, le heredaba la calle que se llamaría
posteriormente El Desenredo, el comedor El Mesón Granadino, la Pensión El Pueblon y otras
Propiedades compradas a don Carlos Pasos. Esto hacia de ella la joven mas adinerada de la ciudad. Esta
posición dio rienda suelta a la envidia y al odio de las aristocráticas. Ellas aprovechaban todo momento
para descargarlo, hasta que la tocaron y abrieron en sus venas rencores y venganzas ocultas por
muchas generaciones.
La sangre comenzó a correr con el asesinato del déspota terrateniente Vicente Ulloa, este hombre
alquilaba un cuarto en la calle El Desenredo, propiedad de la joven, este hombre la rentaba para sus
amoríos con su concubina.
El hombre en sus transacciones comerciales, se hacía custodiar por el Mico Zapata y se acuerpaba
en la mala fama del Mico, sin imaginarse que ese matón y sus abusivas prepotencias lo conducirían a su
muerte.
En una ocasión durante la travesía Ometepe-Granada, la lancha Santa Inés por motivos
desconocidos y distantes de la Isla Zapatera tomo fuego y tan rápidamente que en medio de la
desesperación la gente no supo qué hacer. Al rescate acudieron los pescadores de la Isla y sin perder las
esperanzas remaron rescatando algunos que trataban alcanzar la costa. Llegaron al punto y
encontraron únicamente en un tablón al Mico Zapata, buscaban con la vista llorosa algún otro
sobreviviente. Al regresar los pocos sobrevivientes a la Isla, el Mico desapareció. Una mujer entre llanto
y moqueo narro haber visto a ese hombre dándoles garrotazos a aquellas personas que se acercaran al
tablón que utilizaba de flotador, no lo dijo antes por temor.
Esto fue comprobado a medida que salieron a flote los cadáveres de ‘’ahogados’’ o el oleaje se
encargaban de sacarlos a la costa, una buena parte de los cuerpos presentaban severos golpes en la
cabeza. La mayoría de los muertos rescatados eran de Ometepe, mujeres y niños. Cuando esto se supo
en las ciudades buscaron al Mico en Rivas, Nandaime y Granada, sin saber que don Vicente Ulloa lo
envió a ocultarse donde un familiar buscando la frontera con Honduras, con la advertencia de que no
regresara hasta que él lo mandara a traer. Pasaron dos años y Ulloa lo considero caso olvidado. El Mico
regreso, se convirtió en la sombra de don Vicente y por cualquier contradicción con su patrón
inmediatamente desenfundaba el arma, eso le gustaba al terrateniente, no quería respeto más bien que
le temieran.
En ocasiones se le escucho a la joven Domitila María comentar.
- En cualquier momento les llegara su hora a esos dos malditos.
Un día tres hombres se hospedaron en la Pensión El Pueblon, que se encontraba en el fondo del
patio de la casa de la joven Domitila María, era simplemente un techado de una caída de agua y dos
hileras de postes en donde el huésped colgaba su hamaca.
Los hombres le entregaron a ella obsequios que le enviaban amigas de la Isla de Ometepe, eso la
comprometió a brindarles excelente hospitalidad. Estos con el pretexto de que esperaban a unos
comerciantes que regresarían con ellos a la Isla no salían del local, A la joven no le pareció convincente
la excusa, pero la otorgo, ella sentía olor a flores, espelma e incienso como el ‘’Compadre cobrador’’.
Una tragedia se avecinaba, su olfato se lo decía.
20 | P á g i n a
 A los días apareció don Vicente con su sombra y se dirigió al cuarto, solamente pudo quitarse la
camisa cuando recibió un disparos certero en la parte posterior de la cabeza, otro recibió en la frente la
concubina estando desnuda.
El Mico al primer disparo quiso acudir, al voltearse un segundo hombre descargo su revólver en su
pecho, un tercero con un machete en mano y de un solo filazo corto la cabeza de aquel despreciable
hombre. Las autoridades militares, solo lograron recabar sus rasgos físicos, sin dirección, nombres, ni
apodos, al recibir la información el Jefe de la Plaza dijo.
- De que sirve esta mierda, si todos esos Indios Hijos de Puta, pareciera que fueron paridos por la
misma Mujer.
La participación de la joven Domitila María en ese crimen nunca fue probada. El desprecio
declarado por las aristócratas aprovechó para culparla de las tres víctimas. Ella argumento, que don
Vicente era su cliente, por esa razón no tendría ningún motivo para hacerle daño y dejo entre dicho
que a otras personas si les podría interesarles afectarlo a él o a su viuda doña Pilar del Valle de Ulloa.
Las autoridades sin encontrar ninguna conexión y con suficientes cuartadas por su parte, se vieron
obligados a desistir de sospechas en su contra.
Los militares eran conocedores de cuentas pendientes del Mico, pero que tenía que ver don
Vicente en esa venganza. El asesinato de la concubina dirigía la vista hacia la viuda doña Pilar de Ulloa,
que era una mujer dura de carácter y no daría lugar a la ofensa de compartir la ciudad con una
concubina.
Las autoridades civiles intervinieron en el espinoso asunto, había mujeres de importancia social
con presunciones en el crimen, eso debía pararse de un solo golpe y fue declarado un crimen pasional.
Para doña Pilar el asunto no terminaba así y alguien tenía que pagar por la muerte de su esposo.
Con el apoyo y la instigación de las aristocráticas de la ciudad, la venganza no se hizo esperar. En el
Occidente del País habían familias que gozaban de buena reputación para esos trabajos, ejecutores sin
nombre y sin dejar rastros, eligieron a Clotilde. Era un objetivo fácil de atraer hacia las costas del lago,
dolería lo suficiente considerando que fue hija de crianza de Domitila. La hicieron llegar hasta la parte
sur de la costa de Granada, un área poco visitada y nunca usada para un crimen. Comenzaron
golpeándola, sufrió múltiples violaciones, para concluir le descargaron cinco balazos en el cuerpo, le
cortaron la cabeza enterrándola en otro lugar y dejando el cuerpo desnudo. Un mensaje claro para la
joven Domitila María. Ahora el asunto era hasta adonde ella tendría que intervenir.
El olor a sangre se sentía en todo lugar, acompañado del peligro a extenderlo tomando en cuenta
los niveles que alcanzaba la violencia entre Conservadores y Liberales, por la fuerte sospecha de que los
asesinos eran de León.
El Mesón Granadino y la Pensión El Pueblon no paro.
- Luto es uno, negocio es otro.
Les dijo a Rosita Alemán, hermana de la difunta mutilada y Marta Joyilla.
En un momento recordó a su Mamita Domitila y entre recuerdos se detuvo en la llegada a
Nicaragua de don Carlos Pasos. Su Mamita Domitila, le contó en ese particular.
´´ Don Joaquín pasaba noches enteras tratando de sacarse la culpabilidad de la muerte de doña
Mercedes y el de atraer a su hijo a Nicaragua en un estado de guerra, que él había financiado en
aquella recepción…´´
Eso le recordó que ella tuvo el tiempo suficiente para detener el crimen de aquellos tres
desdichados, por mucha justificación que este tuviera esas eran sus consecuencias. La joven Domitila
María, con un carácter fuerte se puso de pie, estiro su bata y salía de su cuarto con la determinante
decisión de vengar con dureza el crimen de Clotilde, para sellar el asunto y no tener que mirarse
después bajo el peligro de encontrarse entre los dos bandos sin pena ni gloria.
Capítulo VII
Mientras las damas invitadas a la recepción se disponían al postre en los corredores y salas de la
casa, los señores se reunieron en el despacho improvisado de don Joaquín.
Domitila era la encargada de atender.
El General Corral logro que la presencia de don Byron Colé fuese aceptada. Colé hablaba un
español aprendido en Sonora, México y rematado en Cuba, para claridad le serviría de traductor don
Carlos José Gómez.

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 Doña Mercedes no perdió ni un detalle de esa reunión, lo que Domitila le contaba, ella lo utilizaba
para completarlo en la cama preguntándole a don Joaquín.
La exposición militar la inicio el General Ponciano Corral, como jefe y conocedor del escenario de
las acciones, sus planteamientos un tanto alterados, dejaban evidentes peligros de perder la guerra aun
cuando las posición militar Conservadoras estuviesen a favor, habían logros de campo, la incertidumbre
era, hasta donde se podría sostener la balanza ventajosamente.
Ante la gravedad del momento el General consideraba como alternativa, la de contratar hombres
armados. Esto daría tiempo a reorganizar las fuerzas y mantener el orden.
‘’ Ponciano es de esas personas que hablan y se retractan al momento, ‘’Te digo pero no te conté’’.
- Esa gente es peligrosa, son traicioneras por la inseguridad en que viven, bien sabes eso de
conocer a las personas por lo que entra y sale de su boca como decía tú Abuela.
- Me dijo doña Mercedes, recordándome lo que le decía mí abuela, entonces mi hija la reunión
continuó.
Don Byron Colé por su parte en una breve intervención y con carácter de informante periodístico,
reafirmo lo dicho por el General Corral, con relación al tiempo critico de la guerra, que él había recibido
información de que las fuerzas Liberales buscaban como conformar en el Caribe una fuerza
considerable para invadir Nicaragua entrando por el río San Juan y otros países vecinos como
Honduras y El Salvador por tierra y el puerto El Realejo, como lo habían hecho los lideres Liberales el
año anterior.
Don Joaquín sintió la impotencia de carecer de mayor información sobre los movimientos en
Estados Unidos de William Walker y Henry Crabb en torno a la contratación de hombres armados por
parte de los dos bandos Liberales y Conservadores, que pudieran servir de argumentos y
desenmascarar aquella farsa de Cole.
Según Byron Colé, para limitar las acciones de esos expedicionarios del Caribe y a los Liberales,
tendría que ser con fuerzas militares experimentadas y aún así todo dependería de la rapidez en que
estas estén dispuestas para asegurar el Territorio Nicaragüense.
Concluyo Colé haciendo su ofrecimiento.
- Les ofrezco con otros socios Norteamericanos contribuir en el reclutamiento de esas fuerzas de
hombres experimentados y sin sangre, para luchar por Nicaragua y sus intereses principalmente.
Esa expresión le cayó repugnante a don Joaquín.
Tanto Corral y Colé, entre otros Conservadores influyentes tenían elaboradas las intervenciones
acorde con la marañas que armaron en Nandaime, que pretendía conseguir la aprobación de la
contratación de las tropas extranjeras y así instituir con tretas políticas, militares y financiamiento, la
complicidad principalmente de todos los participantes. Así el futuro del General Corral y sus cómplices
quedaba asegurado, perdieran o ganaran la guerra los Conservadores.
´´ Fíjate Domitila a mí me costo creer que el General Corral con el ruido de los caites se orino ante
los extranjeros ´´.
- Me contaba don Joaquín.
Le repuso Domitila a su nieta.
- Como el compadre cobrador.
Pregunto la adolescente Domitila María.
- Así mismo mí hija.
Dijo Domitila y agrego.
- Don Joaquín no dudaba que sus correligionarios Conservadores ya tenían arreglos jugosos con
los extranjeros, pero su posición era inconsistente, por lo tanto espero barias intervenciones y pidió la
palabra para exponer sus puntos de vista.
- No voy a negar la delicada y peligrosa situación en que nos encontramos y mucho menos me
voy a tapar los ojos y no ver que entre pasa el tiempo mas se recuperan los Liberales del fracaso de
Jerez y que estos cuentan con el apoyo del Gobierno de Trinidad Cabañas, aun que los tengamos
reducidos al territorio de Occidente, sus ambiciones no tienen limite y mientras más crezcan en fuerzas
y mas seguidas son afectadas nuestras propiedades, por los dos bandos si son Liberales arrasan
nuestras haciendas y los Conservadores lo toman como contribución, perdemos cosechas, ganados y
bienes, muchos de nuestros hombres obligados o de cualquier forma se enfilan en sus fuerzas por
sentirse indefensos y si esta situación continua nos llevara al fracaso por no poder definir decisivamente
22 | P á g i n a
esta guerra. Para mí el caso es, que le vamos a ofrecer a los extranjeros lo que les podemos dar a
nuestro hombres, que están en su territorio, están aclimatados a este ambiente y de esa forma
aseguraríamos mayor fidelidad de parte de ellos por la seguridad de sus familias.
En ese momento se puso de pie el General Corral como arrecho por la contradicción y advirtió
diciendo.
- Mis disculpas Joaquín eso es perfectamente cierto, pero olvidas que a la hora de aplacar a la
peste Liberal, tendríamos que lidiar condiciones con el ejercito que nosotros armamos y alimentamos.
Tome en cuenta, ya con la victoria en las manos nuestras, las armas estarán en las de ellos, no dude
usted que aprovecharan para alzarse en contra de nosotros y querer quitarnos nuestras tierras,
nuestros bienes, nuestras vidas y de nuestras familias que estarían en completa desprotección ante esa
bandada sedienta y reclamando lo que ellos quieran…
‘’El tema familiar era una carta determinante y de alta persuasión’’.
- Dijo doña Mercedes cuando Domitila le conto esta parte de la intervención del General.
… No es la primera vez que se miran esos casos después de una guerra y nosotros no seriamos los
últimos ingenuos que caeríamos en esa trampa.
Don Joaquín, con mucha ceremonia se levanto y rodeo el escritorio y retomo la palabra en forma
más directa al involucramiento de extranjeros en este conflicto completamente de Interés Nacional.
- Permítame mi amigo y honorable General, con el permiso de todos, el caso no es que si los mozos
o la peonada se alce en contra nuestra, todos conocemos el cebo de nuestro ganado, esto es serio, no
es repartidera de chicha, quedemos claros de que necesitamos tropas bien armadas y fieles a nuestra
causa e ideales de nuestro partido, gente que esté dispuesta a todo, pero que también la conozcamos
lo suficiente para enfilarlos en esas tropas y además de eso serian voluntarios, dado que ellos no solo
lucharían por nosotros, sino también por ellos mismos, sus familias y sus vida, lo posterior, quedara a
discreción de cada quien, estoy claro que ya no serán los mismos peones y en algo hay que
reconocerles el sacrificio aportado a la Patria, de eso estoy seguro que estamos de acuerdo…
Sabiendo don Joaquín que sus correligionarios eran explotadores despiadados que se
diferenciaban de el por unas pizcas.
… Pero también nosotros tendríamos un País bajo pleno control y reconocimiento suficiente como
para pedir ayuda a otras Naciones.
- Don Joaquín volvemos a lo mismo…
Interrumpió el General Corral nuevamente.
… Para mí resulta más conveniente lidiar con tropas Extranjeras. Terminada la guerra y si algunos
desean quedarse les damos de que vivir como todo natural Nicaragüense y si quiere regresar a su País,
se le paga muy bien y se le extiende un reconocimiento para que en sus Países se les reconozca el
merito y no se le trate como vago. En eso termina todo y nada más.
- La fidelidad de tropas victoriosas no se pagan con tanta facilidad, en ocasiones ni con oro, más
cuando no sabemos absolutamente nada de ellos. Por mi parte hasta donde yo sé, en el sur de los
Estados Unidos solamente se podría conseguir bandoleros, forajidos y uno que otro esclavista
aventurero, idealista con aspiraciones de establecer un Estado esclavista para su expansión en Estados
Unidos de Norte América y México. Yo personalmente en mis viajes por Europa y Norteamérica…
Dirigiéndole la vista directamente a Byron Colé, que se puso todo colorado como un tomate.
… Yo pude constatar que nadie quiere nada con ese tipo de gente, entonces General,
correligionarios, señor Colé.
¿Quién responde por esas tropas?
¿Quién nos asegura a los aquí presentes que al restablecerse el orden y conociendo nuestras
debilidades, no se lanzaran sus tropas Victoriosas, en contra nuestra?
¿Quién pone la mano en el fuego por aventureros fuera de su País y luchando contra una raza
que la consideran inferior?
… Yo por mi parte si me atrevería a poner la mano en el fuego por la Tropa de Voluntarios que
pondría a disposición de nuestras fuerzas.
- El asunto nuestro no se analiza en los círculos que usted concurre en Europa y Estados Unidos
Joaquín…
Dijo Corral.

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 … Y dudo sean de su interés. Los Liberales están en guerra con nosotros y no están dudando en el
uso de cualquier recurso para vencernos, la pregunta es como procederemos en esta guerra que usted
mismo nos acaba de decir que no podremos sostener.
- Mi opinión es clara general, no es posible confiar en tropas extranjeras, en todo caso a nosotros
nos tocaría poner los muertos, nuestra tropas solo servirían de carne de cañón de ellos, que al final
serian los victoriosos, con los que quedaríamos en deuda y después con los muertos que hacemos, que
coman mierda ellos y sus familias, por brutos defensores de esta chochada y que sigue. Es a nosotros los
que nos tocaría pagar las consecuencias de esos muertos pendejos, mientras los extranjeros saquean
este País. Discúlpenme que estas propuestas hasta el lenguaje me lo ponen jodido.
La concurrencia en el despacho quedo sorprendida al escuchar como con tal determinación se
expresaba don Joaquín y con un vocabulario que en él no era común escuchárselo. Doña Mercedes se
reía con un aire de orgullo por su hombre, cuando se lo conto Domitila.
Después de su intervención se planteo las posibilidades de solicitar ayuda al Gobierno
Estadounidense por sus intereses en la ruta Inter.-Oceánico o el bloqueo por parte de ellos a cualquier
fuerza que quiera intervenir en asuntos del País.
Lo que llamo la atención de todos, cuáles eran sus garantías personales y de sus familias a la hora
de ser victoriosos o vencidos, ese fue el momento oportuno para Byron Colé muy cortes pidió la
palabra, a lo cual todos accedieron.
Don Carlos José Gómez traduciendo.
- Agradezco don Joaquín su hospitalidad y en gran parte estoy muy de acuerdo con usted con
una u otras reservas, igualmente a todos por permitirme este honor, la realidad de la situación no es
quien o cual es el confiable o barato, aquí hasta donde yo he entendido, la situación exige movimientos
rápidos y que no se le siga dando tiempo y oportunidades a los Liberales en alcanzar posiciones
favorables. Desbandar las tropas Conservadoras en una acción decisiva y con tropas extranjeras no
serías imposible para ellos y más aun cuando sus adversarios les dan el tiempo para traer fuerzas frescas,
mejor armadas y preparadas…
Teniendo en sus manos los Contratos firmados, uno con el General Castellón, el otro con el
General Corral y sus allegados Conservadores.
… Los Liberales le están sacando provecho al tiempo, en equiparse con armas y alimentos, mientras
ustedes discuten quien o con quienes deben poner en orden a esos rebeldes...
Don Joaquín, observaba el cinismo de Colé y los grandes intereses que se estaban jugando en
este País.
…No deseo precipitar ninguna decisión, ni mucho menos esta, que es de gran trascendencia para
la Nación y en particular para ustedes y sus intereses, después de escuchar las distintas exposiciones
considero que la forma más rápida de hacerle frente a la actual situación es Contratar una pequeña
fuerza que frene los alcances de los Liberales y les brinde la necesaria seguridad a ustedes y sus familias,
de ataques Liberales y otros oportunistas. Ganar tiempo en este momento es más importante que
cualquier deuda. Lograr tiempo para organizar y adiestrar las fuerzas Conservadoras y de esa forma ir
asumiendo el control total del País…
Dando un aspecto de generosidad e inteligencia de los líderes reunidos en ese momento agrego.
…Igualmente estas tropas extranjeras podrían representar con solo su presencia o acciones a baja
escala, el punto de equilibrio para que las fuerzas en contienda entren en un arreglo, el inteligente
empleo de los recursos los debería conducir a evitar un derramamiento de sangre injustificable…
- Byron Colé quiso hablar en español, al no entendérsele don Carlos José Gómez retomo la
traducción y dijo.
…Repito nuevamente esta es una opinión de la que solo espero sirva para encontrar otras
alternativas o alimentar una idea apropiada a sus intereses y necesidades.
El general Corral, con toda claridad y con cierta desesperación, urgió de la aprobación a la
Contratación de hombres armados, el estaba claro de que sin esas aceptación por los líderes
Conservadores, le limitaba sus niveles de negociar con los extranjeros. Con el Contrato que tenía Colé y
el General Castellón serraba las posibilidades de un arreglo político y militar entre los dos bandos y el
peligro que los Estados Unidos por sus intereses en el Canal Inter.-Oceánico no les importaría hacerse
los de la vista gorda, la no aprobación dejaba al General Corral en una posición desventajosa. Las
ambiciones políticas y económicas de los Conservadores era más grande que cualquier razonamiento,
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ellos miraban solamente las ganancias que dejarían las masivas expropiaciones de los derrotados
Liberales, el General Corral soñaba con el control absoluto de la Nación en sus manos, sería una
campaña de voluminosas ganancias.
Don Carlos José Gómez después del incendio de Granada le contó a don Joaquín sobre el
razonamiento del General Corral con respecto a los extranjeros.
‘’Con relación a los extranjeros ya todo bajo control, lo que restaría por hacer, Seria aumentarles la
paga, estimular a los jefes con algunas propiedades y hasta ver la posibilidad de extender el plazo de su
retirada, de no acceder a estas condiciones obligarlos por la fuerza militar, que para entonces serias
superiores en hombres, armamento y con la destreza necesaria, sin remedio que retirarse a su País dado
que ningún otro estado de Centro América les daría acogida. Todo esto partiendo de que las
negociaciones de Contratación se den con Byron Colé y al final el mismo Colé quedaría atrapado en sus
trampas, sin remedio que salir.
Una figura no se había pronunciado con relación al asunto y como iban las cosas era decisiva la
opinión del Clero. El Obispo Vigil hasta el momento había optado por mantener cierto distanciamiento
por conveniencias en espera por quien se inclinaba más la balanza, que en definitiva será el que recibirá
la bendición.
Para los aliados de don Joaquín la sensatez les obligaba a caminar delante de aquellos que tarde o
temprano, con o sin la autorización se lanzarían a una guerra sangrienta con extraños y peligrosos
agentes que no se conformaran con migajas, teniendo la posibilidad en sus manos de vivir como
conquistadores en un paraíso terrenal con toda la gloria que exista y con todo el poder.
Al siguiente encuentro no hubo necesidad de someter a discusión absolutamente nada, de
entrada Byron Colé ya se había marchado hacia los Estados Unidos, ahora solamente se trataba de fijar
cuotas económicas monetarias y de abastecimiento alimenticia de las fuerzas extranjeras. Por su parte el
grupo de terratenientes Conservadores que apoyaban la propuesta de don Joaquín, ya habían
determinado de antemano su posición e igualmente llevaban su ofrecimiento del financiamiento de esa
guerra. No pusieron ningún tipo de resistencia según habían acordado entre ellos mismos, como
también no rendirían cuenta de sus planes de autoprotección que tomarían con sus familias y
propiedades, aunque estaban seguros de que no habría necesidad de ningún detalle de este tipo, por
el jugoso ofrecimiento de entrada, que pondrían a favor del jefe de los destacamentos militares que
entrarían en acción.
Desde ese momento en que fueron prácticamente utilizados y por intereses propios, sus
proyecciones se echaron a andar. Hijos, hijas y esposas de los Conservadores, a excepción de doña
Mercedes que se opuso rotundamente a dejar a don Joaquín, sigilosamente iniciaron a prepararse para
viajar hacia España, trasladar el mayor volumen de valores en oro y plata, distribuir en distintas
propiedades otros bienes de valor familiar. Todo fue encomendado a trabajadores de confianza que sin
levantar sospecha ni desconfianza ejecutaron los distintos traslados. Cuando Walker tomo la ciudad en
muchas propiedades de estos Conservadores solo quedaba las paredes. Para entonces solamente
quedaba en la casa de los Pasos Arellano, don Joaquín y empleados de su confianza, quien fue retenido
por Walker en espera de comunicación con el General Corral. En ese momento doña Mercedes vivía en
la Hacienda Panaloya.
Don Joaquín, ido y mirando a Domitila sacudiendo el polvo del nuble de los libros, seguía
extrañado de aquella mujer, cocinera e ignorante, como pudo haber sido confidente de su mujer y se
preguntaba hasta donde conocía de él y su familia. A la misma vez se le venían diferentes recuerdos
que se le cruzaban unos con otros, su cabeza era un laberinto de añoranzas, pero extrañamente se
retrajo la imagen de un hombre loco que vivía en las calles de la ciudad y se alimentaba de las migajas
que le daba la gente, nunca se supo de donde era, unos decían que era de Managua y hubieron
algunos que dijeron de León, dado que esa ciudad, fue considerada ‘’Poblado de los locos’’, para los
Granadinos, ‘’Granada es ciudad el reto es monte’’. A ese pobre hombre le llamaban Oliver el Loco, les
caía en gracia a la gente., era inofensivo, gustaba una frase cantadita que el repetía continuamente y
decía.
Mañana se entierra el baleado, Sun.
Mañana se entierra el baleado, Sun…
Señalaba con un dedo a quien se dirigía, eso era todo el día y a cada momento que escuchaba
mencionar su nombre Oliver el Loco, don Joaquín sonrió al ver en su memoria aquella imagen
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divertida, de ese hombre de caminar rápido y su cantadito, pero a su vez recordó algo que si lo
conmovió.
El día en que el pelotón de fusilamiento custodiaba al General Ponciano Corral al costado norte
de la calle Iglesia de San Francisco, para ser fusilado públicamente por traición a la Patria, en ese cortejo
iba Oliver el Loco señalando al General y cantándole, ´´ Mañana se entierra el baleado, Sun. Mañana se
entierra el baleado, Sun ´´. Algunos pocos que desde ventanas o patios lo vieron decían.
- Velo si no es tan loco el jodido, sabe lo que está sucediendo.
Don Joaquín de un sobresalto se quito las gafas y se froto con las palmas de la mano la cara,
volvió en si cuando Domitila serró la puerta del despacho.
Capítulo VIII
En el año de 1865, nueve años después del incendio de la ciudad de Granada, murió don Joaquín
Pasos, para entonces su hijo don Carlos tenía bajo control y manejo de los bienes de la familia Pasos
Arellano. A medida que entraban inversiones extranjeras y Nacionales, el ritmo de reconstrucción se
aceleraba y restablecían la destrucción, todavía en ella se miraban estragos por falta de recursos de los
dueños.
Según algunos Historiadores Granadinos basándose en testimonios de extranjeros que visitaron
Granada antes del criminal incendio, relataban.
‘’Entre la Iglesia Catedral y la Nuestra Sra. de Guadalupe, en la calle La Calzada, existió una Iglesia
de nombre Nuestro Señor de Esquipula, en donde se dio férrea resistencia a los Filibusteros, sus partes
de guerra resaltan los cruentos combates en ese lugar, al extremo de llegar a creer que se trataba de la
Iglesia de Guadalupe, a esa esquina se le llamo ‘’El Martirio’’ de los filibusteros. Buena cantidad de
patriotas quedaron sepultados entre las ruinas y las cenizas. Muchos años después, al remover esos
escombros, se encontrarían las Osamentas. Para ese entonces la Iglesia Católica no tenía recursos y sus
prioridades eran otros templos y edificios con valores Históricos de su herencia Española. Sin tomar en
cuenta que esos héroes murieron defendiendo la Patria y el Catolicismo’’.
Don Joaquín trabajo en la reconstrucción de la ciudad y logro ver gran avance del crecimiento y
progreso, la antigua ciudad incendiada fue sustituida por nuevas construcciones, recuperando sus
características Arquitectónicas Coloniales que le dieron un toque único de belleza en América Central.
Don Joaquín Pasos decía.
” Si hubiera tenido este respaldo antes de la guerra, otro gallo nos cantara y no hubiéramos
pasado por esto, tanta sangre derramada y destrucción por ambiciones económicas, orgullo y
cobardía”.
Recordando dentro de sí mismo que fue uno de los financieros de la traída de los extranjeras y de
esa forma resguardo sus intereses, su espalda y protegió su familia.
Parte de los viejos potreros cercanos al lago, los compro y construyo en ellos dos hileras de
cuarterías para sus trabajadores de mayor confianza, entre ellos Domitila, su nieta y sus hijas de crianza,
Marta Joyilla, Rosita y Clotilde Alemán, a quienes les construyo una casa independiente a las cuarterías.
Domitila se sintió muy agradecida con el gesto de don Joaquín y don Carlos que estuvo de acuerdo con
su Padre. Domitila no sabía que al igual que su patrona doña Mercedes, ahora don Joaquín quería
asegurarla a ella y su nieta, estaba seguro de que a su muerte su hijo no la iba a dejar trabajar para él,
don Carlos ya tenía su personal de confianza.
Cuando don Joaquín murió su hijo Carlos llamó a Domitila y le dijo.
- En cuanto llegue mi hermana requeriré de sus servicios Domitila, por el momento descansara y
yo le pasare lo necesario para el sustento de la Casa y cualquier cosa que te urgiera no lo dude en
solicitármelo, no olvides que siempre estaré agradecido contigo por mi Madre y Padre.
Domitila no estaba acostumbrada a vivir de la caridad, su vida era el trabajo. Al poco tiempo
recordaría un consejo que don Joaquín le dio.
El desgaste físico era notable, demacrado, decrepito, ni la sombra del don Joaquín de doña
Mercedes Arellano, sentado en un sillón con los pies sobre una butaca y cubierto por un cobertor,
Domitila se acerco llevándole un tazón de chocolate caliente, lo tomo con sus dos manos y le indico
que halara una silla y se sentara. Mirándola fijamente le dijo.
- Mira Domitila, lo que te diré no quiero que salga de esta habitación hasta que yo muera, esto es
entre los dos. Granada se recuperara rápidamente, es el momento adecuado para los negocios de todo

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tipo, desde vender una tortilla hasta una hacienda con su ganado, comprar barato y vender a mejor
precio, es el movimiento económico del momento, no importa el producto con tal de que alguien lo
necesite y lo pueda pagar…
Tomo un sorbo de chocolate y prosiguió.
… La Nación quedo en la ruina total, pero está entrando dinero de extranjeros interesados en
establecerse en el País, esa gente va a mover mano de obra y el comercio se restablecerá, habrá
movimiento de dinero…
Domitila no entendía con claridad a que se debía aquel palabrero, ni a donde quería llegar don
Joaquín.
…Si sos observadora habrás notado que mi hijo Carlos a estado deshaciéndose de algunas
propiedades y a estado comprando otras. Lo que quiero decirte con esta explicación, es que si algún día
te interesaras en entrar en algún negocio, que sientas de que podes manejarlo, no dudes en
comunicárselo a mi hijo, esto que te digo ya esta hablado con él y no es un favor, es parte de mi última
voluntad, tener por seguro que el de buen gusto te proporcionara lo necesario. No decepciones a
Mercedes, tu patrona, que ni idea tengo de cuanto te quiso, aprovecha la ayuda de estas manos y dale
a tu nieta la oportunidad de un mejor futuro.
Es así como en el año de 1865, Domitila inicia su negocio propio de comideria en su casa, como
recomendaciones don Carlos le dijo.
- Te recomiendo Domitila que por nombre le pongas El Mesón Granadino, dale carácter popular
en sus precios, eso te servirá de propaganda, todo el que coma en tu Mesón lo recomendara por lo rico
y barato, es posible que de este lugar salga un nuevo ejército de voluntarios para defendernos.
Sin tener la más mínima idea de que no solamente saldría una fuerza, si no que tendría las
características de antiguas sociedades secreta como las Logias Masonas o de los Templarios, de sus
tiempos y tan serradas, como fieles a una sola persona y el sería uno de los Mensajeros de la Muerte
que la visitaría, para traicionar a doña Domitila María,
Comenzó Domitila su comideria con tres ayudantas, más que eso eran su familia, tres hijas de
crianza y su nieta, Clotilde dos años después se fugo con un hombre. Iniciaron vendiendo desayunos a
los que llegaban en las lanchas a la ciudad y uno que otro almuerzo, reinvertían lo realizado y siempre
iba quedando un poco de ganancia. Con persistencia, poco a poco la demanda fue creciendo hasta
llegar a vender comida el día entero. Con el tiempo requirió de personal y no solamente eso, don Carlos
la había recomendado con las familias aristocráticas tradicionales y recién llegadas a la ciudad, por el
buen gusto de sus postres. Esos compromisos los asumía por la tarde en compañía de Domitila María.
Sus obligaciones llegaron a tal extremo, que cuando regreso la hija de doña Mercedes, ya ella no pudo
hacerse cargo de sus atenciones y tampoco hubo necesidad de hacerlo, ella regresaba hecha una
mujer que se valía sola.
La niña Ángela Maria era una mujer alta, delgada con figura maciza, de un color de piel
extremadamente blanco, en una ocasión Domitila María le pregunto porque ella se asoleaba por las
mañanas y de manera juguetona le contesto.
- Si no me asoleo corro el peligro de volverme transparente.
Sus labios y mejillas mantenían un leve sonrojado, no necesitaba de maquillajes, su cara hermosa y
bella, lo que estuviera a la vista de su conjunto físico era agradable para ojos masculinos y femeninos.
- Lo no visible es para considerables suposiciones.
Decían los hombres al verla.
Carecía de vanidad femeninas, sus ojos eran azules intensos que hacían un buen conjunto con sus
pestañas y cejas rubias, de labios pequeños y bien formados como los de las muñecas Chinas de
porcelana y sus manos eran como tocar una tela de seda, largas con dedos gruesos, con su vestimenta
fina y sencilla, pasada de moda, se burlaba de las vanidades femeninas.
- La moda son asuntos del momento, por lo tanto no son para mí, yo soy de una clase que razona,
que crea el nuevo pensamiento, eso sí es perdurable, nos satisface el espíritu, libera nuestra alma para
así alcanzar la plenitud del gozo. El que adora la moda pierde el gusto por eso prefiero los colores que
mantienen y dan vida, por ser parte activa de la belleza de nuestra naturaleza y están a la altura de los
mejores placeres.
Su mayor gracia radicaba en su delicadeza y amabilidad con las personas, así como su voz tan
suave y melodiosa. Se encariño mucho con Domitila Maria, ella no la conocía ya que nació poco
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después de haberse marchado a España. Le solicito a Domitila que le enviara a la niña por las tardes,
para ella enseñarle a leer y escribir, costuras y otros modales apropiados de una señorita, a lo que
Domitila acepto con mucho gusto, además que coincidía con el tiempo en que la niña le ayudaba, en
donde aprendía a cocinar. Para Domitila el aprender el oficio de sus ancestros era igual o más
importante que saber leer y escribir, Domitila le dijo.
- Recuerde niña Ángela María que la persona que domine los que entra y sale de la boca de otra,
vale más que cualquier letrado, por saber valerse y defenderse más en la vida.
Domitila Maria nunca se quejo de aburrimiento, ni de cansancio, todo lo hacía de buenas ganas,
divertido y aprendía con mucha facilidad, era una niña fuerte, con mucha energía y agilidad, bien se
miraba que iba a ser una mujer de mediana estatura, de contextura recia, que todo su conjunto saldría
bien con su cara redonda, de nariz pequeña, labios carnosos, ojos grandes, negros y vivos, al contrario
de la niña Ángela Maria, su voz era ligeramente ronca y su risa era contagiosa, tenía una gracia única.
Todas las mañanas se obligaba como trabajo matinal acarrear agua del Pozo a la casa, era abnegada al
trabajo, no lo sentía con sus cantos alegres y cuando le tocaba lavar la ropa en el lago, armaban juegos
con los chavalos y chavalas, aprovechaban a nadar, entre juegos y competencias. Por la noche también
la pasaba divertida con historias de su mamita Domitila, en algunas ocasiones se reunía el chavalero
alrededor de Domitila para oír sus cuentos de miedo sobre la Carreta Nagua, el Padre sin Cabeza, el
Cadejo, la Chancha Bruja y cuentos como los de Tío Conejo y Tío Coyote.
Domitila recordaría siempre el consejo de su difunto patrón, que de buen provecho le había sido.
En determinado momento los que habitaban las cuarterías las fueron abandonando, para construir sus
propias casas en las nuevas calles. Al presentarse estas desocupaciones Domitila le ofreció a don Carlos
comprarle las cuarterías para ella ponerlas en arriendo, a él le pareció el negocio, ya que esas
propiedades no le rendían ninguna utilidad. De un momento a otro Domitila Miranda se convirtió en
casa-teniente. Le faltaba dinero por pagar pero la propiedad fue entregada, arreglaron de qué forma
iría pagando el restante, don Carlos se sintió satisfecho con el trato y más aun de esa forma daba por
cumplida la palabra que le había dado a su Padre en su lecho de muerte y sus obligaciones para con
aquella familia. De este trato solamente la niña Ángela Maria se dio cuenta, dando su aprobación como
condueña de la herencia Pasos Arellano. Los cuartos fueron puestos en arriendo, no faltaron
huéspedes entre comerciantes, contrabandistas, extranjeros y nacionales que transitaban por la ciudad
por distintos motivos y duración. Habitación y comida en la misma calle, para ellos era muy favorable,
con el centro dé la ciudad y el muelle a su alcance. Por el carácter popular que le daba Domitila, no
encontrarían otros pecios mejores.
Al saldar la deuda con don Carlos, ella llamo a su nieta, para entonces Domitila Maria era una
señorita, muy bien cuidada y aplicada, ella le dijo.
- No te podes acordar hija de tu difunta Madre, así de bonita era…
Acariciándole la cara.
… En donde este debe de estar orgullosa y feliz por su hija, tan buena, bonita y educadita que
hasta leer y escribir sabe…
Las dos se sonrieron, Domitila María se sonrojo por el cumplido de su mamita Domitila.
… Quiero explicarte algo muy importante y que me ponga mucha atención, bien sabes cuánto
hemos sufrido y trabajado, has aprendido de cómo nosotras las pobres dejamos la vida en las casas de
los ricos, la voluntad de Dios nos ha favorecido, algo que a nuestras abuelas y madres no, caímos en
manos muy generosas que nos quisieron en medio de nuestra pobreza y aun después de muertos nos
han ayudado…
La joven Domitila Maria hizo un gesto interrogativo lo cual fue parado con una señal de las manos
de su mamita Domitila.
… Aun que no lo creas, por cariño que nos tuvieron tenemos esta casa, este negocio fue por ayuda
de ellos, Dios los tenga en su vendita Gloria…
Agacho la mirada, hizo una pausa y prosiguió.
… A medida que el negocio ha mejorado y ya tenemos buenas ventas de comida, al punto que
hasta trabajos hemos dado, yo he ido ahorrando un dinerito siguiendo los consejos de mí difunto
patrón don Joaquín, que en una ocasión me recomendó comprar para después vender a mejor precio
y así lo hice. Hoy por la mañana termine de pagarle a don Carlos la compra de todas las cuarterías o sea
toda la calle ya es nuestra…
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 La joven Domitila María sintió un salto en su pecho, sus ojos se agrandaron y comenzaron a salirle
lágrimas, fue cuando su mamita Domitila se levanto con ella y se abrazaron.
… No llores mi hija, primero hay que darle las gracias a nuestro Señor Jesucristo de que estamos
juntas, pedirle que nos socorra y así nosotras ayudar a otras personas que no han tenido la suerte que
tuvimos. Para con generosidad y humildad agradecer esta bendición…
Se volvieron a sentar, fueron mil preguntas con igual cantidad de repuestas, Domitila llego a un
acuerdo con su nieta, el de guardar el secreto, mientras miraban como les iba con el asunto de arrendar
cuartos, pero por su parte ella compartiría el secreto con dos persona.
… Únicamente les diré a las hijas de las dos amigas de tú Mamá y nietas de las mías…
Refiriéndosela a Rosita Alemán y Marta Joyilla.
… A las cuales le daré una casa a cada una de ellas, por amistad, cariño y agradecimientos. Con
ellas hemos sido como una sola familia, yo se que nunca te abandonaran y siempre estarán a tú lado,
en las buenas y malas.
Le dijo su mamita Domitila.
A Domitila María la noche se le hizo interminable, fue el primer insomnio de su vida. Amaneció
agotada, su mamita Domitila entendió y le dijo.
- Quédate acostada y descansa, té voy a levantar al medio día para tus clases con la niña Ángela
María.
Tomo un huacalito de Chocolate caliente y logro quedarse dormida.
Estando a solas con la niña Ángela María y esta al verla distraída le pregunto que le sucedía, la
joven con deseos de compartir tal acontecimiento, soltó la lengua y le contó lo sucedido, fue mayor su
sorpresa de que ella era conocedora del negocio y no solamente eso sino que desde cuando su mamita
Domitila le entrego la primera parte del dinero a su hermano. Domitila Maria, pregunto.
- Porque no me lo había dicho niña Ángela María.
- No podía, primero por haber dado mi palabra de no hablar al respecto con nadie y en segundo
lugar yo estaba segura de que llegaría el momento adecuado para que tú lo supieras…
Le contesto, le indico que se sentara en el sofá a la par de ella, Domitila María dejando sus
materiales de estudio en una mesa obedeció y ella agrego.
- Te voy a contar una historia muy bonita que muy pocos la recuerdan o saben. Cuando yo te miro
detenidamente con toda claridad recuerdo a tu Mamá. Sabias tu que ella y yo éramos de la misma
edad…
Domitila María meneo la cabeza de un lado a otro, en señal de no saberlo y sonrió.
… Mucho menos que sepas que las dos dimos juntas la primera comunión con Marta Joyilla
Madre, entre otras, el caso es que mi Mamá siempre seguía la costumbre de que las hijas al dar la
comunión hicieran una Acción de Gracia, en homenaje a quien se le ofrendara el Sacramento, esto
consistía en darla con las niñas de las o los criados que tuvieran la misma edad de su hija, en mi caso
solo las dos la tenían. Entonces mi Mamá tuvo que decirles a sus amigas que bien aceptaba niñas que
dieran la comunión con migo, así ellas se encargaron de enviar a las de sus haciendas. La rutina era que
teníamos que pasar cinco días en seminario aprendiendo los deberes del Cristianismo y otras cosas de
los respectivos rezos, para posteriormente confesarnos con el cura y recibir la Sagrada Comunión…
Sus ojos se pusieron llorosos al recordar que fue el primer defraude de su vida, mientras Domitila
María se conmovía al notar el cambió de ella por aquel hecho.
… El caso fue de que en esta costumbre las patronas, compraban lo necesario para vestir a las
niñas que la acompañaban, todas tenían que vestir de la mima forma que su hija, ni una cinta podía ser
diferente, igualmente se hacia una fiesta con todas ellas y sus familias, todo era parte de la Acción de
Gracia, pero lo importante era de que todas por igual teníamos que ir descalzas desde la casa hasta la
Iglesia, después de misa nos podíamos poner las Sandalias, eso quería decir que efectivamente ya
habías tomado la Consagración de la Fe Cristiana…
La Joven Domitila María tuvo una expresión en su cara de pesar y no de alegría.
… Yo anduve con pena por mucho tiempo, me les escondía a las amigas de mi Mamá que me
habían visto descalza por la calle, pero también con las niñas porque de todas a las únicas que conocía,
que eran hija y nietas de las cocineras, eran tú Mamá y Marta Joyilla, a las otras niñas nunca las había
visto y que me miraran descalza, en ese tiempo y a mi edad eso fue trágico para mí, me dio una
vergüenza de muerte, lo recuerdo como si fuero hoy…
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 Con sus manos hermosas y dedos largos y gruesos se seco sendas lágrimas, se sonrojo, cosa que a
metros de distancia se podría notar y sonrió.
… Eso me endureció y aprendí a no importarme lo que piensa o dice la gente tonta, que gasta su
vida en la ajena, a partir de ese hecho rompí con muchas tradiciones entre ellas confesarme y
comulgar, mis pecados los hablo con Dios. Si eso fuera ahora, no me importaría que la gente me viera
caminar descalza. Creo que ni tú mamita Domitila te podría contar esta historia a como yo te la conté…
La niña Ángela Maria se sonrojo nuevamente y las dos se rieron, ella continúo.
… Por otro lado Domitila María, sabes que la mayor diferencia del hombre con los animalitos de
Dios es el razonamiento, esa es uno de los castigos por su desobediencia, un animalito come lo que
necesita, ve, escucha y olfatea para sobrevivir, el no razona que deba de comer mas que el otro, ni vivir
mejor, dominar y maltratar al indefenso, ellos obedecen a su naturaleza, un par de cachorros pelean si
le sirves la comida junta a los dos, pero cuando terminan de comer juegan a su manera, no guardan
rencor.
La joven Domitila María comenzó a tomar un aire de frescura en su rostro que sorprendía a la niña
Ángela María.
La niña Ángela María miro en ella un aura de plenitud del entendimiento y la joven sintió gozo en
su espíritu, ni los glaciares del polo norte tendrían más frescura que la reinante en ese ambiente.
De esta forma sencilla Domitila María aprendió muchísimas experiencias, que en la vida le fueron
de utilidad e igualmente se posiciono en ella la virtud de callar, la cualidad oculta de sus antecesoras de
recordar lo que aprendían viendo y escuchando.
Capitulo IX
Embarcar el féretro se retrasaba por la gente aglomerada en los alrededores del embarcadero. La
lancha partió rumbo hacia Granada, el llanto era colectivo y lanzaban flores, aun cuando cayeran estas
en las aguas del lago, con los reflejos de los faroles de Kerosén y candiles, se miraba una alfombra
multicolor, que se ondulaba al ritmo de las olas, ofreciendo un espectáculo triste y asombroso, cientos
de personas movidas por el mismo pesar en sus sentimientos. A medida que se alejaba la lancha, Flores
recordó que doña Domitila Maria dio a construir ese embarcadero, para que los Isleños pudieran sacar
sus productos a Granada en mejores embarcaciones, así también cuando por los poblados costeros y
los isleños la nombraron Mayordoma del Gran Lago de Nicaragua.
La Isla de Ometepe significo mucho para ella en su vida, recordaba el capitán que desde joven le
preguntaba cómo era la Isla, si era más grande que las Isletas, que si habían Volcanes como el
Mombacho, todas preguntas inocentes, que solo la niña Ángela Maria podía responderle sin conocer.
- Un día te voy a llevar.
Le decía el entonces aprendiz Santiago Flores. Este aprovechaba la situación para robarle un beso,
ella lo empujaba, pasándose la mano por sus labios se sonrojaba y reían.
Fueron sus primeros besos.
El Capitán, pensando y mirando a la multitud, levantando la mano y gritando.
- Adiós doña Domitila María, amiga, amiga. Adiós doña Domitila María.
Volvió a ver Zapatera y noto que se iniciaba las encendidas de las fogatas indicándole que tendría
buena visibilidad por el estrecho de fuertes oleajes y grito.
- Vamos bien y seguros, llevamos cuatro pasajeros, a doña Domitila María y las Tres Divinas
Personas.
Los marineros alzaban el brazo despidiéndose, la Isla se perdía de vista y la oscuridad se serró.
Nada podía entrar en la cabeza de Flores, los recuerdos se le revolvían como el estrecho de fuerte
oleaje de Zapatera. De pronto se miraba quitándole el vestido y mirando sus pies pequeños con sus
deditos bien cuidados a como la niña Ángela María le había enseña que una mujer debería de
cuidarlos, pero eran hermosos, sus pantorrillas rollizas como los de un tronco de madero joven, sus
pierna y rodillas achocolatadas y seguidamente un poco claros sus mulos, hasta quitarle toda el vestido,
ella se lanzaba una fuerte carcajada que nunca perdió su gracia y echándole los brazos fuertes sobre los
hombros se besaban, Chago la tomaba de la cintura con fuerza para levantarla…
En eso se sacudía la cara volviendo en sí.
Estos recuerdos le regresaron en varias ocasiones durante la navegación fúnebre, pero no fueron
su único martirio, ni se imaginaba como desde un inicio que el tormento que le esperaba y serian

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vencidos únicamente por la muerte. Para sacar esos pensamientos caminaba, revisaba a la tripulación
de que estuvieran en sus puestos y no levantar sospecha de sus recuerdos pervertidos con la difunta.
Entre sus ideas sexuales con la difunta, recordó cuando después de una noche de sexo, ya cansados,
boca arriba, sudados y desnudos, ella le dijo.
- Estoy tomando cocimiento de raíces Solda-Solda para que me preñes.
Esa es una planta que crece comúnmente en los arroyos y se usan para fijar los embarazos y hasta
evitar la caída del pelo, tomándolo o frotándolo en cocimiento todo queda soldado al cuerpo. Quería
parirle un hijo, se sonrió y en su mente se dijo.
- Hubiéramos sido tan Felices, los tres.
Era una noche interminable y la travesía apenas comenzaba. El aprendiz le indico del paso
por el estrecho agitado de Zapatera, se salió y miro las grandes fogatas y gente amontonada en la
costa. Muy lejos se oía decir.
- Adiós Amiga, Adiós Amiga, Adiós Amiga…
Gritaban hombres y mujeres. Eso lo conmovió y lo saco de aquellos pensamientos,
nuevamente tomo el control de sus recuerdos.
Estando en el estrecho la lancha se agitaba con mayor fuerza, el equilibrio estaba bien
tomado, el Capitán no dejo de estar pendiente del lugar en donde iba la caja y comenzó a notar que la
cenizas volcánica y la cal, se removía y se filtraba por las grietas, por perder su compactación y estarse
aflojando, se acerco para ver qué remedio tendría, fue peor la situación cuando sintió que ese material
despedía mal olor de descomposición de la difunta, pero por el momento la urgencia era salir a aguas
mas calmas para tomar otras medidas de reforzamiento de la caja. Converso el caso con su aprendiz y le
instruyo.
- En cuanto lleguemos a Granada, té encargaras de desembarcar solo y buscar rápidamente los
químicos apropiados y materiales que podrían ser útiles para evitar o disminuir el tufo a muerto y
también hablar con algún médico para cualquier consejo que sea necesarios.
Antes de desembarcar la caja, solo tendrían autorización de abordar la lancha, Rosita Alemán y
Marta Joyilla, con ellas se pondría de acuerdo para el resto y reparar cualquier percance. Al pasar el
estrecho las aguas se calmaron y el Capitán con ayuda de marineros cubrieron la caja con una lona y
rosearon un litro de creolina que llevan para la limpieza, esto recupero los ánimos de Flores, ahora solo
era cosa de tiempo y estarían en Granada.
Se volvió a sentar queriendo descansar, los recuerdos volvieron. Los primeros agradables e
inocentes, después recordó cuando la joven Domitila María le dijo que ejecutaría su plan de venganza
por el asesinato de Clotilde en el poblado de Malpaisillo, León. Con claridad recordó lo que ella le contó.
- Los asesinos de Clotilde, fueron contratados por personas de Managua, encargo de un
comerciante a petición de granadinos, se todo sobre ellos, estos Managua contrataron a matones de un
poblado llamado Malpaisillo, de León. Estuvieron viajando de dos en dos a Granada para conocer y a
su vez que en la ciudad fuera ya común verlos, venían y regresaban a Managua, en la última semana de
uno en uno ya se fueron quedando en Granada, para coincidir la llegada del jefe con el día del crimen…
Chago se quedo helado, preguntándose cómo pudo darse cuenta sin salir de Granada.
… Me informaron que a estos asesinos les dicen los Cheles y son reconocidos matones a
sueldo, por esos lugares es muy común ese oficio y lo hacen como un negocio familiar.
- Entonces que, vas a pelear contra una familia de matones.
- Nada de eso…
Dijo ella.
…Será sencillo.
Según ella, echaría a pelear a otra familia con ellos.
– Y como lo vas a lograr.
- Será seguro y simple.
Posteriormente le indico.
- Quiero que me contrates varios comerciantes que viajen a León y que traigan noticias sobre la
vida de los Leoneses y cualquier suceso, principalmente información sobre crímenes, deja claro que a
nosotros nos tendrán que contar primero. Los Cheles eran una sola familia dedicada al crimen por
encargo. Mucho llegaban al Sauce a tomar licor y armaban alborotos, peleas, sacaban puñales y hasta
pistolas cada vez que se emborrachaban, en el poblado les temían, pero tampoco eran unos babosos,
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con los hacendados de los alrededores no se metían, sabías los limites con esa gente y que también
eran iguales a ellos.
El caso fue que la gente de la joven Domitila María, bien instruidos ejecutaron el plan en una de
esas visitas de los asesinos a sueldo.
Los Cheles llegaron al Sauce a celebrar la conclusión de un trabajito. Mientras se emborrachaban,
los enviados aprovecharon robarles de sus caballos, mecates, alforjas, puñales y machetes. Estando los
Cheles ya borrachos se marcharon sin darse cuenta de lo faltantes en sus animales, al pasar frente a la
hacienda de la familia Hernández se detuvieron para dar una referencia a unas hombres desconocidos
que andaban perdidos, terminado se marcharon entre gritos e insultos entre ellos mismos Sin
percatarse que esos extraños estaban más orientados que ellos.
Al día siguiente a la entrada de la hacienda de los Hernández, en un árbol de Mango el menor de
la familia amaneció ahorcado. El mecate, más otros objetos encontrados tiradas en el suelo, alforjas,
pichingas de Guaro y otros en dirección a Malpaisillo, pertenecían a los Cheles, así como objetos del
joven muerto tirados en el camino. Todos esos hallazgos y coincidencias, hacia indicar que los Cheles
habían sido los ejecutores del joven Hernández. En menos de un mes la familia de los Cheles habían
sido exterminada, las dos familias por Padre y Madre del joven se encargaron de la venganza, en mes y
medio toda Nicaragua conocía hasta los por menores de cómo habían sido ejecutados uno por uno,
desde niños hasta el viejo jefe de la familia, según la información que regaban los comerciantes
contratados por el Capitán Santiago Flores. Los Managua y granadinos involucrados en el crimen de
Clotilde, temblaban de pánico y más cuando por campaña política, que así lo entendieron los
Hernández, los Liberales dijeron que eso había sido orquestado en Granada por los Conservadores en
contra de ellos.
El Capitán se reía solo y en esta ocasión lo miraron varios de sus marineros, mientras él se decía
por dentro.
- Mi Domitila Maria, como mala también eras exagerada. Como tembló el País por esa matancina
entre familias y lo peor entre los mismos Liberales.
Al final Generales y líderes Conservadores y Liberales optaron por guardar el asunto, dado que esa
pólvora les podría ser útil en el futuro por el efectivo método y desde ese momento paso a ser doña
Domitila María.
Abrió los ojos y pregunto por la situación, a lo que le respondieron que todo marchaba bien,
luego pregunto si miraban luces de fogatas, el aprendiz le respondió que no, le recomendaron que
descansara que en cuanto tuviesen algún destello de luz le llamarían.
Volvió a serrar los ojos, estuvo pensando en donde agarraba doña Domitila María el coraje y la
sangre para idear cosas como esas, ni su mamita Domitila y la niña Ángela María, serian capases de
enseñarle eso.
Comenzaron los recuerdos nuevamente, floreció uno como si estuviera entre dormido y despierto,
producto del agotamiento y así tratando que el tiempo corriera. Miro como doña Domitila María quería
a los niños y niñas, los besaba y abrazaba, en ocasiones la hacían llorar al no poder parir el suyo,
aunque fuese mujercita y la maldición de las Domitila Miranda continuara.
- También se llamaría Domitila María.
Decía en cada ocasión que tocaban el tema. Cada salida de la ciudad lo primero que preparaba
eran los regalos de los niños, continuo la tradición de las comuniones colectivas y a las niñas les hacían
trajes iguales, una sola fiesta con sus familiares, que prácticamente era todo el poblado, lo único que
rompió con la tradición, fue la llegara a la Iglesia descalzas, recordando la vergüenza que paso la niña
Ángela Maria, historia que cuando la recordaba sentía lo mismo como si estuviera en el momento y con
la edad que tenía, aun ya vieja tuvo esa impresión.
Sin sentir diferencias con los otros recuerdos, el capitán se sonreía de la habilidad de doña
Domitila María. Primero, hizo que la verdad de los hechos en Malpaisillo fuese tergiversados en marañas
políticas de Liberales y los chismes populares que hizo correr de que ella era capaz de eso y más. Así
quedo bien con los dos partidos. Los Conservadores aplaudían la masacre entre Liberales y los Liberales
aprovechaban el hecho de darle un motivo para enfilar fugitivos y bandoleros contra los
Conservadores. El joven Hernández y los Cheles eran insignificantes para ellos. La familia Hernández dio
por un hecho que esos comentarios eran politiquería, su venganza fue por honor de su hermano y
pueda descansar en la paz del Señor.
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 Otra mañana amaneció en Granada ahorcado un comerciante y contrabandista que viajaba a
Managua, Isla de Ometepe y Costa Rica, era hombre de buen dinero y relaciones sociales, no se
encontró motivos de robo, ni se le conocía enemigos, pero fue colgado de la mismo forma que el joven
Hernández de el Sauce. Posteriormente se supo que este hombre fue el encargado del arreglo con la
gente de Managua para el crimen del lago. Tres familias de la alta sociedad Granadina, incluyendo a
doña Pilar viuda de Ulloa, se fueron del País. Antes de irse vendieron sus bienes a ‘’guate mojado’’ y el
colmo fue que a sabiendas que la mano de doña Domitila María estaba detrás de todo el asunto,
tuvieron que venderle a un testaferro de ella, así que edemas de lo sucedido, se quedo con sus
propiedades, agregando a sus bienes las haciendas del terrateniente Vicente Ulloa, con lo que se gano
la admiración y respeto popular. Los líderes Conservadores y Liberales con diferentes criterios,
reconocieron el merito de doña Domitila María, su habilidad y valor, vengó la muerte de Clotilde y se
hizo de buenas propiedades. De haberse dado una reacción, los dos bandos o la familia Hernández,
actuarían demasiado tarde y bajo el riesgo de ser presa fácil.
El capitán se sacudió la cara con las dos manos, abrió los ojos y volvió a preguntar por las fogatas
de Granada y le respondieron que nada, en su mente se repetía una y otra vez.
- Esa era mí Domitila María, Esa era mí Domitila María…
Poco a poco repitiendo en su mente lo mismo se quedo dormido del cansancio o de tanto pensar
de una forma tan desordenada
Se le vino a la mente cuando murió la mamita Domitila y por disposiciones de la joven Domitila
María, las puertas de la casa fueron cerradas y solo personas de su confianza podían entrar. La difunta
recibió sus respectivos rezos y llantos. Con eso rompía con la tradición popular del velorio, el mismo don
Carlos se sorprendió cuando llego a darle el pésame. En esa ocasión la calle El Desenredo se mantuvo
en vela, las puertas de sus cuarterías abiertas, en donde se acomodaron a los que asistían de otros
lugares. En las casa de Rosita Alemán y de Marta Joyilla se preparaba café negro, rosquillas y
reposterías, que las enviaban a las distintas cuarterías y casas, prepararon comidas para aquellos que
pasaron la media noche y amanecieran en vela, a los borrachos que asistieron les dieron guaro pelón,
pero frente a su casa nadie fue permitido.
Con los ojos serrados, el capitán Flores se sonreía, no por la vela, más bien de cómo tan joven
Domitila María tomaba desde ese momento las riendas de su vida, de acontecimientos que vendrían
adelante y que marcarían las vidas de muchas personas.
Las morbosidades de la mente entraban y revoloteaban, cuando se vio estaba recordando cuando
acariciaba aquellos pechos redondos y sólidos, el estomago de Domitila María, se hundía hasta no
aguantar y expulsaba el aire con un gemido suave y ronco, lo hacia una y otra vez, sus fuertes manos le
agarraban la nuca con fuerzas y echaba la cabeza para atrás dejando los apasionados besos, sus ojos
subían, la mirada como buscando el cielo y se abría su alma, apretaba fuertemente sus pestañas y
dejando salir sus gemidos que eran cada vez prolongados, su boca entre abierta y su lengua sobre su
labio inferior.
El capitán Flores, se levanto todo sudoroso y con la sensación que no había sido un recuerdo, lo
vio y sintió tan real. Se sacudió la cara y se la enjuago con agua limpia de un balde con tapa.
Volvió a ver lentamente el féretro y le pidió disculpa por esas cosas que no salían de su cabeza,
tantos años de no recordarlas, ya su amor se había encarnado en su pecho y con solo verla, tocarle el
brazo, un dedo, un pelo de su cabeza, su aroma y sabor lo sentía en las narices y la punta de la lengua.
- Me van a volver loco estos pensamientos de mierda como si fuera un Cipote pendejo.
Se recriminaba, se levanto salió del curul y con autoridad les dijo a los marineros que le dieran un
trago grande de hombre viejo, un marinero le recomendó de largo.
- Así es mi capitán tómeselo grande y ya deje de joder la paz de doña Domitila María, que si ella
pudiera ya lo hubiera cachimbiado aquí mismo y delante de nosotros.
La tripulación se hecho a reír, hasta el propio Capitán, levantando la botella brindo por la difunta.
- Clase vergajo mi Capitán.
Comenzaron a gritar como si estuvieran en una cantina, Flores les dijo que guardaran respeto.
Tomaron buenos tragos y así se dieron la una de la madrugada, cuando escucharon la voz del
aprendiz que se miraban un reflejo de luz en el frente, al verlas el capitán lleno de emoción advirtió que
eran las fogatas de Granada, ordeno se colocaran mas candiles como señal de su arribo y que bajaran
la velocidad para no tener que hacer maniobras innecesarias, hasta poder precisar la dirección del
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muelle. El capitán pedía a Dios que los de la costa entendieran que necesitaban una sola fogata, la del
muelle para dirigirse directamente. No tenía idea de la multitud que se encontraba en Granada.
Al ver que se acercaba a la última morada de doña Domitila María, entonces entendió que no era
el fin, simplemente era el inicio de una vida sin ella, sin verla, sin tocar aunque sea sus hombros, sin oír
su voz ordenando, aconsejando o regañando y se preguntaba qué sería de él, como será el fin de lo
que después de tantos años inicia hasta ahora, estos pensamientos lo angustiaron, ya no sabía si quería
llegar o tal vez mejor quedarse navegando toda la vida con su muerta y olvidarse de la morada final.
- Viejo mas mierda que soy, que tengo que estar pensando en pendejeras en este momento.
Se dijo para sí mismo.
Volvió a buscar su refugio cerca de la caja como para conversar a solas por última vez con su
difunta.
Capitulo X
La espera se hacía desesperante en la ciudad, bajaban a ella gente de caseríos, poblados y
ciudades, Nandaime, de los Pueblos de Carazo, Diriomo, Diría, del Mombacho, Masaya, Rivas y los
pueblos costeros del lago, en fin de muchos rincones y ciudades. Granada fue abarrotada de gente, la
guarnición militar La Pólvora tuvo que ser reforzada a petición del Alcalde. Jamás se había llenado
tanto una ciudad en el País. Algunas autoridades llegaron a temer en las primeras avanzadas de gente
por una epidemia, esto sería un verdadero colmo que una sola muerta desatara una epidemia Nacional.
La multitud al atardecer fácilmente triplicaba la población urbana de la ciudad e igual que la lluvia iba
aminorando pero no cesaba de llegar personas.
- Por lo menos cuando Walker el Cólera fue útil contra esos Hijos de Puta.
Decía el Cronista Avilés, que se encontraba en primera fila con las mujerzuelas de la calle El
Desenredo en el Parque Azul, recreándose como en toda vela, contando y escuchando sus historias de
puteríos y puterías.
La gente del campo salen llevando adelante la comida, por eso no habría preocupación de lo
contrario se hubiera sentido escasez y desabastecimiento alimenticio, todo tipo de abastecimiento fue
suspendido. Muchos acamparon en las faldas del Cerro Posintepe, otros en la costa sur en donde
asesinaron a Clotilde, igual a los lados del arrollo Zacateligue y también cubrieron por el norte sobre la
costa del lago sobrepasando al Colegio Centro América, era multitud de gente desde la costa del lago
hasta la altura del Mercado Municipal por el sur y la Estación del Ferrocarril al norte. Por respeto al luto
el comportamiento de esa multitud era dócil y seguían con sumo cuidado las instrucciones de las
autoridades, con relación a la higiene de las áreas utilizadas, la prohibición absoluta de la pesca, el
acopio de los desechos alimenticios y humanos en fosas, limpieza de los utensilios de cocina, etc. Estas
medidas fueron necesarias al ver las autoridades de que ni la lluvia paraba la llegada de gente y ya
estando en las afueras de la ciudad lo que tenían que hacer era esperar la llegada del cuerpo de doña
Domitila María. Las personas de renombres social, político y económico, así como algo pudientes se
hospedaban en donde familiares, amistades, hoteles, hospedajes y pensiones, pero su personal
acompañante se acomodaban ordenadamente en las Plazas y Parques de la ciudad.
En esa segunda noche y considerada la noche de la gran vela de doña Domitila María, Granada
era una réplica ampliada del incendio filibustero de la ciudad, en el cielo se reflejaba la luz de una
inmensa fogata, sin saber esa gente que lo importante era la iluminación del muelle. Después de esos
días los distintos caminos quedarían por buen tiempo inutilizables por el paso de las carretas bajo la
lluvia, la costa del lago con noches lóbregas y con una oscuridad fantasmal.
El área cercana al muelle fue restringida, así como el acceso masivo al centro de la ciudad, esta
custodia fue reforzada con pescadores y jornaleros voluntarios, que tendrían que velar por mantener el
orden de toda esa pobretería, cualquier necesidad tendría que ser canalizada por la autoridad
competente. Los pobladores y trabajadores de la ciudad tenían acceso solamente a las costas aledañas
al muelle excluyendo el Parque Azul, la Alameda, y el Atrio de la Iglesia de Guadalupe, prohibiendo a su
vez la preparación y elaboración de alimentos cerca de esa área. Comidas, café, refrescos y otros
materiales de necesidad para el personal voluntario tendrían que ser elaborado y trasladada desde las
calles El Enredo y El Desenredo. El Parque Azul fue tomado prácticamente por las mujeres de las calle El
Desenredo, en ese lugar tenían reservas para lo necesario, dos carretas haladas de bueyes para cargar
madera y los grandes peroles, porras de todo tamaño con exageradas cantidades de alimentos,

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solamente faltaba un muerto para que fuera una vela completa al aire libre y con las brisas del lago. El
personal de menor funcionabilidad en las labores de cocina, fue el seleccionado para ese puesto, por
no saber más que su ofició esas eran las Putas. Su naturaleza temeraria estaba dotada de un sistema de
autodefensa contra aquellos que se quisieran pasarse de vivos con ellas, era un gremio unido y el mal
intencionado que entrara a ese nido saldría despellejado.
Las Putas eran queridas y tratadas con igualdad, por lo general eran mujeres que llegaron de sus
pueblos siendo muy jóvenes, llegaban de los diversos lugares de Nicaragua, unas eran feas de caras
pero con figuras esplendidas, habían muy bonitas de cara, buena contextura y sin nalgas, igualmente
con cuerpo y culo de negra, otras de piernas largas, bajas de estatura, de cuerpos rellenitos, chichas
grandes, pequeñas, redondas, puntuditas. Todas tenían distintas historias del por qué se habían
prostituidos, distintas ambiciones, dolores y tristezas. Igualmente compartían un mismo destino, se
decían ellas mismas.
- Terminaremos dignamente, como Putas viejas y Alcohólicas.
Algunas lograban salir otras se hundía a mayor velocidad. En uno de esos momentos en que se
agrupaban en torno al cronista Avilés, el le pido a la Chompipona que contara su historia ya que era
una de las más veteranas del Club de Putas de la ciudad, ella inicio diciendo.
- Yo llego a Granada procedente de León a la edad de 19 años decidida a ser una buena Puta,
tenía buenos atributos y entre ellos mí juventud, el objeto de vida que traía era lograr al costo de lo que
sea poder olvidar un gran Amor. Rodé durante tres años rutiando en cantina hasta llegar a Granada a
ser puta de burdel.
La joven Rosa Castillo, apodada La Chompipona desarrollo a la corta edad de 13 años y se
enamoro de un joven de 15, vecino de su casa, estuvieron de novios por dos años. El muchacho era
buen hijo y trabajador que ayudaba a su Mamá en las compras para el negocio de venta de Sopa de
Res en su casa, también ayudaba en la preparación y elaboración de los alimentos, alistar mesa y cargar
con ayuda los grandes peroles, servir a los clientes o lo necesario. Rosa con las intenciones de estar
mayor tiempo cerca de él, comenzó ayudando a la Madre del muchacho en los quehaceres de lavado
de trastes, servir la sopa, lavar los manteles, limpiar piso y mesas. La señora al verla interesada en el
trabajo le arreglo una paga, además de hacer lo mismo la coloco también de ayudanta en la cocina, en
donde medio aprendió hacer Sopa de Res, su interés era otro. Para iniciar en la vida todo marchaba
bien. Ella tenía como única familia a su Mamá, con ella se esmeraba en atención y cariño, en ese
momento todos los amores, gustos y placeres estaban a prueba por el amor que sentía hacía aquel
joven. Algunas situaciones ya daban síntomas fuertes de su preferencia, si llegaba tarde a la casa ella
decía que se había retrasado ayudando a pelar yuca o decía que el Domingo iría de paseo con las
amigas de trabajo y se iba con el novio a las Playa de Poneloya, inicio con inofensivas mentiras hasta
recaer en el extremo de sostenerlas bajo juramento.
Su primer gran Amor, con mucha exageración para los primeros amores normales. Al cumplir los
quince años decidió entregar su cuerpo al joven. Idearon la mentira de ir a Chinandega a ver a una tía
paterna, que estaba en el hospital grave. Su Mamá accedió sin ninguna preocupación ni sospecha de lo
que pretendía la muchacha. Fue una noche y medio día solo para ellos. Todo fue a pedir de boca, el
acto amoroso fue consumado y en adelante el rigió fue aplacado con placeres, uno tras otro. Al regreso
se apearon de la carreta un kilómetro antes de llegar a León para sellar su pacto de pasión a las puertas
de la ciudad, haciendo el amor en el monte a un lado del camino. La Chompipona lo recordaba con el
único aire de placer que se le conoció.
- Fue el Polvo más rico que he sentido en mi vida.
Decía mientras las otras Putas y el cronista escuchaban.
La vida seguía igual para todos, pero ellos cayendo la noche se trasladaban a cualquier matorral
en las afueras de la ciudad en donde anidaban. A Rosa, hasta rosadita se le iba poniendo la piel, su
alegría y disposición al trabajo era extraordinaria, se miraba más desarrolladita, por tanto se
comenzaron a levantar sospechas y comentarios que decían.
- Esa muchacha ya está comiendo, el caminado se le ve diferente, en una de esas la vemos
timboncita.
Para ellos dos sus matorrales eran lo único que les interesaba y para evitar más comentarios, que
de una u otra forma llegarían a los oídos de sus respectivas Madres, decidieron fugarse e irse a vivir

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solos a la ciudad de Estelí o Matagalpa. La fuga fue fijada para el día miércoles de la siguiente semana,
serian uno para el otro.
Ese día la fuga fue fijada para después de las labores para evitar que los siguieran y poder reunir
algún dinero de más. La jornada diaria inicio con normalidad y cada quien en su trabajo, el joven se
dirigió al poblado de Telica en donde compraba la yuca y resto de verduras para tres o cuatro días de
Sopa. Resulto que al regreso él venía en la parte superior de la carga, lleno de alegría por la cercanía de
la hora de fugarse con su mujer, hasta se le llenaba de aire los pulmones, cuando el mismo se decía,
- Mí Mujer.
Con los ojos serrados y con gratos planes en su mente el joven ni cuenta se dio cuando la carreta
se ladeo por un hoyo del camino y el peso de la carga la volcó, quedando sepultado por los pesados
sacos de Yuca, Quiquisque y mas, nadie podía hacer nada por él, murió instantáneamente desnucado.
Cuando la noticia llego a su casa, tres mujeres pasaron a ser muertas en vida. La Madre perdía a su
único hijo, su todo en la vida, Rosa que ya era su mujer, siendo su primer y único amor, sin el todo se
secaría o ella misma lo secaría y la Madre de Rosa, con la muerte del joven, perdería a su hija, una
desgracia tan dolorosa, que amistades y vecinos suplicaron consolación por el sufrimiento de esas tres
mujeres, fue un dolor que conmociono a muchas personas en la ciudad de León. La Chompipona se
aguanto los nueve días de rezos de duelo y ninguna de su amigas y mucho menos su Madre se
percataron, al décimo día no amaneció en su casa.
Rodando de un lugar a otro llego hasta Granada, en un abrir y serrar de ojos ya estaba
trabajando en el Mesón Granadino y limpiando El Pueblon. Doña Domitila Maria la recogió de una
cantina en la calle El Enredo en donde abusaban de ella cuando se emborrachaba y se la llevo a la casa
de Marta Joyilla, pero se observaba en ella, además de su tristeza, una fuerte obsesión injustificada por
el sexo y el licor. La colocaron como ayudanta de cocina para controlarla más pero era imposible, hasta
que doña Domitila Maria hablo con ella y conoció de su triste historia. Acordaron de que durante el día
trabajaría en la cocina para aprender un oficio y darse tiempo de decidirse por su destino, pero no
resulto, cada día sus ausencias eran más seguidas. Por su juventud amanecía con toda la noche de licor
y sexo insatisfecha. Por último, agradeciéndole le pidió la dejara en el camino que la puso su destino
que era el de ser Puta, por mucho que quiso doña Domitila María persuadirla de que desistiera de eso,
ella insistió y se empeñaba mas en abusar de su cuerpo y su organismo. Doña Domitila María se miro en
la obligación de entregándosela a Rosita Alemán y le recomendó mantenerla bajo control y no
permitirle mayores abusos, eso la calmo al encontrarse en lo que ella consideraba era su destino. Así
terminaba de contar su historia La Chompipona.
- Llegue a ser puta de burdel hace unos veinte y siete años, por mucho que doña Domitila María
quiso convencerme de dejar este oficio, hasta hacer el papel de Madre, igual que con muchas de
nosotras, con migo la pobre no pudo hacer nada. Mí Madre que me parió murió y ni a su entierro fui,
todo por ese bello amor que me destino a este oficio y al guaro.
Algunas de las Putas se le salieron las lágrimas, ella concluyo diciendo.
- Ahora espero a la que fue como una segunda Madre, que ni me parió y la voy a enterrar. Yo ya lo
presentía, soñé con inundación del arrollo y eso es seguro que por mi camino iba haber tristeza, mis
sueños avisan desgracias, los de fortuna desaparecieron de mí ese Miércoles de mí huida.
Algunas de la que escuchaban ese relato terminaron llorando, el cronista Avilés las consolaba
diciéndoles.
- No se avergüencen ya que eso demuestra que ustedes son mujeres que sienten y sufren al igual
que cualquier otra, por eso merecen cariño y respeto.
Otras de ellas ya llegaron con el oficio y trayectoria de varios años de experiencia, que eran
atraídas por la Plaza de Granada, la fama de que en ella vivía muchos terratenientes y comerciantes de
dinero y pagaban bien, el tránsito de gente ida y vuelta, que la ciudad era visitada por extranjeros
adinerados. Todo eso representaba un gran atractivo para abrirse camino, no para salir de Puta pero
por lo menos llegar a tener una cantinita con un puterito reservado y ganar mejor. Con esas mujeres
doña Domitila María y Rosita Alemán no tenía mayores problemas, más que su seguridad física por los
abusadores que querían golpearlas, no pagarles o por alguna cuenta pendiente que dejaron en otro
lugar, por lo demás eran sus vidas las que tenían en juego. Igualmente estas acarreaban con sus Chivos,
que era otro juego de azar para ellas, a unas les salían Chivos acomodados, mansos, a otras Chivos
malcriados y hasta fijados. A diferencia de las Putas iniciadas, ya que todavía se dejaban engañar como
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pendejas, con muchos cuentos de amor y muchas promesas de una mejor vida, aventuras e irse a un
lugar en donde nadie las conociera, todo a cuenta de sus cuerpos. Así entre sueños quedaban
atrapadas en prostitución y licor.
En los locales había normas de comportamiento para los clientes y ellas. El cliente tenia su mesa y
ordenaba lo que deseara tomar, ellas permanecían sentadas en largas bancas, si alguno requería de los
servicios de alguna de ellas, el la invitaba a la mesa y se ponían de acuerdo, el pago del cuarto era tarifa
fija y su servicio ella misma lo negociaba. Las mujeres no podían portar armas corto punzante, menos
los clientes, solamente los representantes del orden podían, en caso de algún escándalo la mujer
involucrada se apartaba y dejaba al personal de la rufiana para esos casos. Los Chivos podían
mantenerse en la cuartearía mientras ellas estuviesen presente. Los escándalos maritales eran resueltos
por las autoridades y tanto la mujer como el Chivo podrían ser desalojados de la cuartearía y perder el
puesto de trabajo. En la realidad no eran muy común los escándalos, ni revueltas en la calle El
Desenredo, más bien los problemas llegaban ya sea del muelle o de la calle de El Enredo y otras calles
aledañas, en esa calle doña Domitila Maria se encargaba de desenredar cualquier asunto, fue por esas
circunstancias que esa calle fue siendo conocida popularmente como la calle El Desenredos, además
por regalías al comandante de la Plaza y a sus guardias, la presencia de esa autoridad era efectiva, a tal
grado de que por petición de doña Domitila Maria sacaban o echaban preso a cualquier persona del
Populacho.Con esas mujeres al final daba lo mismo hablar o no con ellas, algunas salieron de ese
mundo pero esa marca era como una cicatriz en la cara, en el fin del mundo o la Con Chinchiná
podrían ser reconocidas, como se dicen.
‘’Una Puta de largo se reconoce’’.
Otras de un inicio no caían bien, en cierta ocasión llego una mujer con una niña de unos seis años
de edad. La rufiana la acepto mas por la niña que por ella, ya que estaba entrada en edad, en ese
momento doña Domitila María y Rosita Alemán se encontraban fuera de la ciudad. Llegaron unas
hermanas religiosas para solicitarle a la mujer que enviara a la niña por las tarde a la Iglesia para darles
clases religiosas y enseñarles a leer, escribir y manualidades como a los otros niños y niñas, les
respondió que se las enviaría al día siguiente, todas vieron de buena ganas la aptitud de aquella Puta
vieja, pero resulto que al día siguiente no amanecieron. Cuando doña Domitila María regreso y se dio
cuenta del asunto se disgusto por esa pobre niña, que no se supo si en realidad era de esa mujer o se
la había robado. Desde ese momento quedo prohibido admitir mujeres que no eran revisadas por ella o
Rosita Alemán que era la encargada de esos negocios.
Capitulo XI
Don Carlos Pasos Arellano teniendo asegurada la ruta por rió y tierra con el Atlántico para
abastecimiento de armas y municiones con los contrabandistas del Caribe, se dispuso avanzar en
dirección a Chontales, dejando equipados voluntarios que resguardarían poblados y haciendas de
lugares por donde pasaba, hasta la ciudad de Juigalpa, posteriormente partió hacia la hacienda
Panaloya, reforzándose con Voluntarias que se le unían. Pero don Carlos con todo y lo que hizo no
entendió la situación, el momento que vivía, la clase que defendía, la causa por la que daban su vida el
populacho y menos a los que le rodeaban, se engaño en un liderazgo que no existía y se fue serrando
en las paredes de Salamanca. Los terratenientes le decían que su comportamiento era la propuesta de
don Joaquín a los líderes que se involucraron con los extranjeros y lo elogiaban, limitándole sus
sentidos a la simple creencia que con esas expresiones daba por cumplida la palabra de su Padre para
con sus socios y amigos de esa zona,
En Acoyapa, Chontales, fue su centro de operaciones donde dirigía sus acciones, era un lugar
seguro y propicio para sus planes, dado que en la hacienda San Ramón propiedad de su Padre, era un
lugar conocido por él, del que tenía claros recuerdos de rincones y personas, se sentiría más en
confianza con viejos peones de don Joaquín. En el pequeño mundo que armo se fue nutriendo de
serviles, seudo líderes locales que les interesaba sacar ventajas de su desconocimiento del terreno y la
gente, en nombre de él chantajeaban, abusaban, lo manipulaban a favor o en contra de alguna
persona o grupo, justificando de esa forma la coacción a la población.
Contiguo a la hacienda San Ramón quedaba la hacienda Las Animas en donde don Carlos,
conoció a una mujer de nombre Marlene Echeverría.

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 En todas esas andanzas tuvo otros amoríos. En Acoyapa don Carlos se acostaba con una mujer
casada con un terrateniente Chontaleño, este al darse cuenta quiso venganza. Escogió la hacienda
Masapiya para cobrarse la deuda en su propia zona, igual que él le manoseaba a su mujer en su casa y
cama. Con poca experiencia de sus fuerzas y con solo el hecho de sentirse superior por el factor
sorpresa, el terrateniente fallo en su intento. Don Carlos respondió mandándolo a matar con su capataz
Rodimiro, el caso fue borrado y olvidado.
Doña Marlene era una mujer de buena estatura, de piel blanca, dotada de una hermosura física de
cuerpo y cara envidiable por cualquier mujer, sus ojos de un azul claro, sus mejías y labios rojos eran
adornados con camanances que con una leve sonrisa relucían en su cara, de educación media, de
modales graciosos y campechanos, espontánea. Don Carlos se había prometido conquistarla, hacerla
su esposa y madre de sus hijos. Cuando don Carlos envió las fuerzas de avanzada a Panaloya,
aprovecho enviar a doña Marlene su mujer embarazada en compañía de doña Miriam Zelaya, se sabía
que las fuerzas de Walker, necesitaban incursionar la zona central entrando por Tipitapa. Meses antes
del incendio de Granada nació su primer hijo, le puso el nombre de Carlos Joaquín Pasos Echaverria.
Fue en esos tiempos en que Walker, con información de contrabandistas del Caribe, quiso reunirse
con don Carlos, el no acepto por recomendaciones de su padre, al contrario don Joaquín le recomendó
golpear al invasor con fuerzas, el se guardo el consejo, aun así no recapacito sobre su incapacidad de
enfrentar a un igual de clase y capacidad, enfrentándose a todo fuera de su tierra. Walker conociendo
el volumen de fuerzas y armamento con que contaban los Pasos en Panaloya y desconociendo sus
debilidades no intento aventurarse en una campaña en contra de ellos, por no desgastarse y separarse
de su objetivo principal que era Rivas, Antes de salir de la hacienda San Ramón, la situación se torno
apretada por las incursiones de los Filibusteros en Vapores de la compañía de transito, con intenciones
de atacar y tomarse San Carlos en la desaguadero del lago en el río San Juan, ejerciendo control sobre
el río, para ese entonces don Carlos Pasos tenía definidas sus rutas alternas.
Al no lograr los filibusteros el reforzamiento de tropas por Rivas y de abastecimiento de
municiones, su ruta de proveerse fueron sus aliados contrabandistas del Caribe, pero los locales y
algunos refuerzos de costeños del Atlántico, les dificultaban las incursiones con regularidad y
trasladarse por tierra era riesgoso. Los invasores y contrabandistas Caribeños trataban de mantener el
acceso seguro y fluido de armas, municiones y refuerzos con hombres a través del río San Juan. La
presión sobre Granada era otro factor en contra de ellos, al igual que la declarada Unidad
Centroamericana en contra de los invasores. En esta situación Walker urgía de un aliado Conservador
con el suficiente peso político y mejor aun con tropas para negociar y así ganar tiempo. En ese
momento Byron Colé pretende negociar con los Conservadores Chontaleños, que participaron en la
recepción en la casa de don Joaquín y choca con la resistencia del General José Dolores Estrada, con
poca fuerzas y más que militares eran vaqueros que trasladaban ganado para que no sirvieran de
alimento a los invasores, mientras Colé es derrotado, Walker buscaría hablar con don Joaquín. Esta
urgencia limitaba cualquier ataque contra Panaloya. Walker intento de muchas maneras de conseguir
que fuese aceptada su propuesta de reunirse los dos. Antes de embarcarse Walker en dirección a un
embarcadero de Rivas, ordeno a uno de sus generales amenazar a don Joaquín con incendiar la ciudad
de Granada en caso no aceptar recibirlo, a lo que el entendiendo que fue mucho pedir a su hijo
golpear a Walker, se olvido del pacifismo y respondió.
Señor William Walker.
El hecho que yo no hago uso de algunas expresiones populares nicaragüenses no quiere decir que no las sepa o no las
pueda pronunciar. Yo Joaquín Pasos, no me reúno con ningún Hijo de Puta extranjero enemigo de Nicaragua.
Si hay Demonio que pretenda incendiar la ciudad, yo hablare con el mismo Diablo y no con usted.
Joaquín Pasos.
Después del incendio de Granada y la derrota de los filibusteros por los patriotas
Centroamericanos y nicaragüenses, muchos terratenientes nacionales y extranjeros pusieron los ojos
sobre Granada. Costa Rica, fue uno de los Países que pretendieron quedarse con una parte de Granada,
como Botín de Guerra aparte del Territorio del Guanacaste.
Las únicas personas que supieron del proceder incorrecto de don Carlos y sus serviles, fueron su
esposa doña Marlene y Domitila, una por intuición o inteligencia natural y la otra por información de

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sus tropas, ellas por distintas maneras quisieron hacerlo entender de la realidad del momento, en una
ocasión doña Marlene tuvo que ser directa con el desentendido y le dijo.
- Cuando un capataz tiene los mandos que tiene Rodimiro, el patrón no vale lo que aparenta, ten
cuidado.
- Son ideas tuyas mujer, yo le doy a Rodimiro el lugar que le corresponde, el me ha demostrado
fidelidad.
Le respondió don Carlos.
- Yo conozco esta gente más que usted querido esposo, se cuándo y por qué no me miran a los
ojos, me ocultan algo muy delicado y me preocupa el que no los conozcas, esa fidelidad que me hablas
de Rodimiro, no la conoce ni para con los suyos.
Dijo tajantemente doña Marlene.
El capital de los Pasos Arellano prácticamente estaba intacto, así como el de algunos hacendados
de Nicaragua, que lograron sacarlo antes de la entrada de Walker al País. Eso les dio poder ante la
aristocracia, contaban con recursos económicos y voluntarios armados. Esto fue una tentación mayor
aun en la mentalidad inflada del triunfalista de don Carlos Pasos y en ese mundo quedo atrapado.
Doña Marlene parió su segundo hijo al que le pusieron Fernando José. Posteriormente nació una
niña, don Carlos le puso Mercedes María por su difunta Madre. Pasaron dos años y sucedió algo fuera
de lo común en doña Marlene, con relación a su estado racional de ver y hacer las cosas, tenia
imaginaciones de ver personas extrañas a ella, animales que la atacaban y hablaba sola, sin tener
noción de quien estaba con ella, su estado fue empeorando, sufría de convulsiones corporales en
donde se rasguñaba, perdió el apetito y de los mejores médicos ninguno pudo dar con la enfermedad y
la razón de la misma, finalmente postrada, atada a una cama y débil murió.
Las personas que tuvieron acceso a ella eran don Carlos, don Joaquín, los médicos y Domitila, se
corrió el rumor que le había hecho un maleficio.
‘’Polvo de Hueso de Mocoana con cenizas de muerto, diluida en agua amanecida de bebedero de
baca recién parida y tomado en cocimiento de Manzanilla en día viernes con Luna Llena’’.
No era para cualquier brujo el preparar ese brebaje. Cuando Domitila le contó a don Joaquín lo
que la gente decía, este se carcajeo con ganas y le respondió riéndose aun.
- Las cosas que piensa la gente pendeja cuando no tienen nada que hacer.
Domitila se persigno diciendo.
- Las Tres Divinas Personas, nos libren de gente tan malvada y cochina.
Con el tiempo don Carlos se volvió a casar con la joven Francisca Sacaza, un año mayor que
Domitila María. Una joven simpática y alegre, de muy bonito cuerpo, piernas largas y rollizas, su
cabellera encrespada rubia, ojos cafés, sus labios daba sensación jugosa y además de eso era sobrina de
un importante comerciante Siciliano adinerado, pariente de políticos que alcanzaron la Presidencia de
la República. De este matrimonio a don Carlos le parió doña Francisca un hijo que le puso de nombre
Alberto Manuel Pasos Sacaza, un año después en 1882 nació una hija y le llamo Ángela Maria Pasos
Sacaza, por su hermana muerta.
En el año de 1877 uno después de morir la niña Ángela Maria, regreso a Nicaragua don Fernando
Pasos Arellano. Desde que llego a Granada, dio a conocer a su hermano mayor sus deseos de vivir solo
y llevar una vida tranquila sin ataduras sociales, matrimoniales, hijos, política, mucho menos guerras y
en efecto así fue, se retiro a una hacienda de ganadería ubicada en la Laguna de Apoyo, a dar con el
Cementerio nuevo. En donde abrió su línea comercial de ganado y cerdos con Masaya y los pueblos de
Carazo. Se convirtió en un Casanova empedernido y un soltero cotizado por señoritas y señoras, no
tenia escrúpulos para nada, ni con nadie en materia de amoríos, destruyo el futuro de señoritas
dejándolas embarazadas y sin porvenir. Las familias las obligaban a marchase para España, otras
criaturas tuvieron que hacerlas pasar como hijo de alguna criada de confianza. Dos familias pidieron a
don Carlos que intercediera, lo más que pudieron lograr, fue el hacerse cargo por el mantenimiento
económico de la joven, la criatura y reconocerlos como legítimos Pasos, de esa descendencia de don
Fernando, no se supieron más y nadie se preocupo sobre que había sido de ellos, pero el apellido lo
llevaron.
Muchos años después el cronista Avilés recordando esta pasaje de la vida de don Fernando, le
hablara a doña Domitila María de un destacado intelectual Pasos de una ciudad cercana, no puntualizo
el lugar por petición de doña su amiga, ella se alegro mucho de recibir alguna referencia sobre un hijo
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de aquel amigo ya difunto, pero no intento entrar en contacto con el por no entorpecer su vida
removiendo un pasado del que ella no sabe que conoce o le han dicho.
Don Fernando se fue haciendo de mala reputación, a diferencia de su hermano don Carlos. Era un
parrandero y tomador que se podría encontrar en ocasión en los mejores centros de diversión en
Managua a como en cualquier pueblo aledaño a su hacienda, estancos o cantinas. Es por eso que fue
uno de los primeros e importantes clientes de doña Domitila María, además del nexo amistoso con su
familia, fue el promotor de llevarles a otros terratenientes a sus establecimientos del placer, en donde
gozaban de diversión y seguridad, por ser clientes de lujo. A don Fernando lo visitaba importantes
personalidades de Europa entre ellos el conde don Guillermo D´Ibarra descendiente directo de la
nobleza Francesa y Española. Desde su primera visita a Nicaragua fue huésped de honor en la casa de
doña Domitila María. Los hijos de estos mismos hombres y amistades Europeos y Americanos, eran
asiduos visitantes de la calle El Desenredos, es mas por el clima social y los distintos comportamientos
de sus concurrentes ellos bautizaron como un juego de palabras, la Calle El Enredo por bulliciosa y
escandalosa, origen de muchos enredos persónales, de faldas y de licor y la Calle El Desenredos en
donde se desenredaban los conflictos y lo contrario de la otra, era ordenada y de menor bullicio. Y así
quedaron finalmente bautizadas las dos calles. Las primeras calles de pobres con sus propios nombres
en Granada y posiblemente en el futuro las más pequeñas y únicas en la ciudad.
Al borde de la caída del Gobierno liberal del general José Santos Zelaya en 1909, sus grandes
amigos y hombre de confianza, el general Rigoberto Cabezas y el general Juan Bodan, lotificaron un
campo de Managua, que al finalizar la guerra contra Walker fue utilizado como campamento de las
tropas Centroamericanas. Esto con el propósito de congraciarse y ponerle de nombre Reparto General
Zelaya y así vender una imagen de popularidad del caudillo, como contraparte al ya bautizado
Departamento de Zelaya, en la Costa Atlántica Nicaragüense, el cual secretamente había sido repartido
entre los tres Generales a un tercio de territorio para cada uno. Resulta que don Fernando en sus
aventuras amorosa fue a parar en Managua al recién lotificado campo y que nunca fue reconocido
como barrio, aun sin nombre ya que el general Zelaya no acepto el ofrecimiento, estaban por decidir si
debería llamarse barrio General Cabezas o General Bodan cuando cayó el Gobierno Liberal. Don
Fernando anduvo enloquecido por una negra que el General Cabezas se trajo de la Costa Atlántica, era
un negra completa, de piernas trochadas y bien torneadas, caderas repingadas, cintura delgada y de
cuerpo parejo, sus pechos redondos y de cara fina con ojos garzos y labios carnosos, su piel era de color
canela, tenia una gracia original al caminar que parecía una yegua Peruana dando sus pasos con la
puntilla de los pies, un caminado con tal gracia en Granada solo se volvería a ver cuando regresara de
España la hija menor de don Carlos Pasos la preciosa joven Ángela María Pasos Sacaza. La morenaza no
era lo suficientemente bella para el General Cabezas y aguantar la humillación de bajarlo a Cabron, por
culpa de un Conservador y menos de uno de la familia Pasos de Granada, que por su reputación de
negociadores se salvaron de las represalias durante la Revolución Liberal. Ese fue el error que le costó la
vida a don Fernando Pasos, en la primer oportunidad que tuvo el General, armo una escaramuza y el
personalmente lo mato.
El gobierno inmediatamente entrego el cuerpo y presento sus condolencias de parte del General
José Santos Zelaya. Dieron su versión oficial, pero don Carlos no se trago el cuento y lo considero una
venganza, no tardo en conocer como fueron dándose los hechos amorosos, esto aun que fue por un
mal camino y le recordaba lo sucedido en Acoyapa, lo dejaba libre de cargar con su hermano muerto,
con su conciencia limpia de tener que vengarlo para que descansara en la paz del Señor.
Con la caída del General Zelaya, la muerte de don Fernando, su historia de amor con el Culón
Negro, aquel barrio quedó en el olvido. Años después resulto que un Yankee que era asiduo visitante
de una cantina del lugar, haciendo y deshaciendo por gusto, como si tuviese licencia de golpear y
matar, fue apuñalado, por un comerciante Rivense de apellido Talavera, este hombre era muy hábil,
aun estando preso le serbia al Gobierno en negocios personales del gobernantes de turno para
contrabandear ganado de Rivas a Costa Rica, el Embajador de los Estados Unidos enterado de lo que
sucedía con el asesino de su compatriota, presiono al Gobierno y este ordeno que a Talavera lo
mataran en la frontera simulando una emboscada de cuatreros. La población que se mantiene al tanto
de estos hechos para recrearlos y burlarse de la desgracia ajena, comenzaron a llamar el barrio con el
apellido del Yankee que era Bruce y desde entonces quedo popularmente conocido como Barrio
Campo Bruce.
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 Capitulo XII
Desde los tiempos en que se iniciaron los hechos sangrientos, con el crimen de don Vicente
Ulloa y su escolta el Mico, el crimen de Clotilde por venganza, el ahorcamiento del joven Hernández y el
exterminio total de la familia de los Chele de Malpaisillo, los Conservadores y Liberales utilizaron ese
polvorín para alimentar la guerra civil y el odio ya existente entre Granadinos y Leoneses.
En una caserío al final de la calle El Arsenal, por accidente agarro inexplicablemente fuego una
choza, el fuego fue voraz y rápido sobre aquel caserillo de madera y techo de paja, consumiendo una
cuadra ente las calles El Arsenal y La Corral, sin muertes solo perdida material.
Los Conservadores aprovecharon para culpar a los Liberales. Doña Domitila María al ver que en
nada tenía que ver con sus intereses y que al ser una acción dirigida, seria en contra de los
Conservadores, por ser esas propiedades de un conocido político, a ella no le intereso pero si acogió
algunas familias desamparadas y llenas de niños. Igualmente una lancha tomo fuego en el lago y la
acción fue atribuida a los Liberales, con estos y otros accidentes aislados, que en la realidad nada tenían
que ver los Liberales, los Conservadores aprovecharon para llamar fuerzas Voluntarias para reforzar sus
cuarteles y lugares importantes de las ciudades y el campo.
Doña Domitila María cada vez sentía con mas fuerzas los aires de guerra, pero también sus
enemigos lo sentían y aun mas, sabían que esa era su oportunidad de atacarla y la culpas serian
achacadas a los Liberales, por lo tanto no habría por quien temer o se repitiera lo sucedido con doña
Pilar viuda de Ulloa.
- No podría repetirse.
Se decían durante sus tertulias cargadas de odió y cizaña de las damas de sociedad.
En esos días de imprevisto se presento a su casa, don Carlos Pasos Arellano. Doña Domitila María
sintió un fuerte escalofrió de pies a cabeza y volvió a sentir aquel olor a flores, espelma e incienso que
cuando miraba a don Vicente Ulloa y al Mico Zapata. Rápidamente comprendió que don Carlos Pasos,
en ese momento era una especie de Mensajero de la Muerte, tendría que ser algo extremadamente
delicado para que el en persona llegase a su casa sin previo aviso y con tanta serenidad. Después de
tomar asiento y encontrarse ellos dos completamente solos, se acerco un poco, le tomo las manos y le
dijo.
- Ya sabes a que vengo.
Ella lo miro fijamente con los ojos más grandes y más fuertes de carácter que cuando era una
joven y sola, le respondió.
- Si don Carlos y usted sabe que puede constar con migo para lo que sea.
El se recostó a la mecedora dándose barios mecidas sin quitarle la vista a doña Domitila Maria, le
sonrió, a lo cual ella respondió amablemente, se acomodo mejor y le dijo.
- Quiero que me pongas mucha atención aun que me tarde un poco en explicarte las cosas que
están por suceder. Ya estamos en las puertas de la guerra civil no hay ningún arreglo, ni nada que
parezca que pueda pararla, los Generales Conservadores y Liberales están meneando todos sus
recursos en sus ejércitos, también comienzan a desplazarse, parecen pequeñas bandas pero al fin y al
cabo son los ejércitos que se han estado enfrentando y nosotros estamos en medio, digo nosotros a los
que aspiramos a un arreglo pacífico entre los dos bandos políticos. Esto es diferente que cuando
Walker.
- Esos extranjeros querían regenerar la raza, entiendo yo.
Dijo doña Domitila María, interrumpiendo malintencionadamente y de forma burlesca,
interpretación que don Carlos prefirió mostrar desinterés.
- No andes creyendo en esas historietas y si vine no es por mí, es mas por tu seguridad.
Respondió don Carlos.
Doña Domitila María igualmente comprendió de que no estaba hablando con alguien que
estuviese acostumbrado a bromear con ella y que en todo caso cualquier chifleta la comprendería, su
lenguaje lo comenzó a manejar con mayor precaución. Don Carlos Continúo.
- En ese tiempo los Conservadores que junto con mi Padre se oponían a la presencia de tropas
extranjeras en nuestro País, estaban unidos y cuando yo vine al país para mi nada se me hizo difícil, solo
faltaba saber convencer a la gente de apoyarnos por el bien de todos, el de ellos y nuestros, que la

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causa era común, la gente nos apoyo con mucho Patriotismo, pero hoy las cosas son diferentes, el
individualismo es mayor, eso hace difíciles la situación, como dice el dicho,
‘’Todo el mundo, hala agua para su Molino’’.
Doña Domitila María recordó a su mamita Domitila, ella le contó que en ese tiempo, el estar en
contra de la guerra era un decir, don Joaquín se opuso a la presencia de tropas extranjeras por
conveniencia, tan fue así que Financio la entrada de los extranjeros, acarreo en eso a sus amigos y
socios Conservadores y les oculto la poca o suficiente información que recibía de Estados Unidos, con
relación a las gestiones que realizaban Walker y su amigo Crabb.
Don Carlos continuó.
- Ya no hay en quien confiar así que uno propio tendrá que guardarse las espaldas, ante esta muy
posible guerra al igual que antes un fuerte grupo de Conservadores hemos estado tratando que se dé
un arreglo político, hemos dicho que entre los dos partidos convoquemos a toda la Nación a elecciones
y que sean los votantes los que elijan, esta podría ser la salida civilizada que exista, pero como te dije, en
estos tiempos no hay en quien confiar, ellos, ni nosotros confiaríamos en esos resultados, igual a lo
sucedido en los tiempos de don Fruto Chamorro o un Gobierno Provisional que en nada ayudaría y
empeoraría la situación, el Gobierno de la República impulsa una campaña en contra de los Liberales,
acusándolos de ser Masones, enemigos de la Iglesia, ladrones y criminales, que sin ningún reparo
asesinan niños, ancianos y mujeres, toda una campaña que prácticamente no ayuda en nada a un
arreglo político entre los dos bandos. Yo en lo personal, como Conservador, apoyare sin reservas al
general Chamorro, hombre honesto, del que tengo plena confianza.
- Como don Joaquín.
Pregunto doña Domitila María de una manera irónica de la que don Carlos no se percato.
- por supuesto.
Respondió inmediatamente don Carlos. Continúo y levanto la mano con la palma abierta,
indicándole que no lo interrumpiera.
- Con esto en ningún momento te estoy pidiendo nos apoyes, son otras cosas las que yo vengo a
hablarte, esto te lo digo para que estés al tanto del peligro de una inminente guerra civil. Bien sabes
que mis primeros tres hijos con mi difunta esposa Marlene viven en España y de paso te aviso que mi
hijo e hija con Francisca estamos prontos a salir del País hacía España, yo iré a arreglar asuntos de
negocios y escuchar la opinión de personas conocidas y que están muy bien ligadas al Gobierno
Español. Hable con Fernando, pero el se niega rotundamente a participar en política, mucho menos en
guerra y dice que esos asuntos los resuelvan los involucrados y que por nada del mundo se marcharía a
España. Contra esos prefiero no hacer nada, con relación a los negocios y propiedades de la familia ya
los dejo organizado todo y con las disposiciones necesarias para cada situación que se puedan
presentar en contra de los bienes e intereses de la familia, en este particular estas incluida, por cualquier
necesidad que se te presente y el apoyo este en nuestras manos, te pido no pardas la comunicación
con mi personal administrativo que ya están claros de mis órdenes.
Doña Domitila Maria sonrió amablemente con gestos de agradecimiento y un mayor escalofrió
por aquel ofrecimiento del que no se percato tampoco del sonrojo de su piel que era difícil notarlo.
Don Carlos le pidió un vaso de agua, ella se levanto y se dirigió a la cocina a tomarlo de una Olla
que la mantenía fresca para pasárselo, en eso don Carlos se levanto también y se asomo a ver la calle, a
manera de comentario le dijo.
- Recuerdo como si fuera hoy, el día en que le vendí a tu mamita Domitila todas las cuarterías de
esta calle, casi se desmaya cuando me entrego el último centavo.
Los dos rieron con mucha familiaridad, le entrego el vaso de agua y antes de sentarse ella le dijo.
- Me contaba mi mamita que don Joaquín le aconsejo que comprara cuando las cosa cuando eran
baratas y vendiera cuando fuesen caras, que ese era el negocio del momento, siempre y cuando
alguien necesite lo que ella venda y tenga con que pagarlo.
Se rieron, rápidamente don Carlos se percato que ese comentario hecho por su Padre a Domitila
no lo conocía. Tomaron asiento, don Carlos continuo.
- Ahora voy con el motivo que me trajo a tu casa, resulta que en medio de esta situación que te
explique, tus enemigos o enemigas se aprovecharan del clima para declararte la guerra y no es de
dudar de que te comiencen a acusar de Masona y de colaborar con los Liberales o cualquier falso que

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encienda los ánimos de guerra en contra tuya, pero esto no es nada con lo que en realidad desearían o
son capaces de acerté.
- De eso no hay dudas y preferiría que alejáramos las preocupaciones, continúe don Carlos.
Interrumpió doña Domitila Maria.
- Yo se que tenes capacidad de enfrentarte y con mayor dureza. Ese es el problema que yo te
quiero advertir, se prudente en tus repuestas, podes salir involucrándote contra un bando y esto fuera
un gravísimo error por parte tuya, seria la debilidad que tus enemigos o enemigas necesitan, ellos
buscan que sea uno de esos bandos el que se encargue de destruirte. Te digo esto sin olvidar aquel
viejo dicho que reza…
‘’Muerto el Perro, se acaba la rabia’’.
… Te lo menciono porque sos arrecha a recordar. No descartes un ataque directo en contra tuya y
con tu caída todo termina. Yo soy de un criterio muy diferente a los de mis amigos Conservadores y me
jacto de tener un pensamiento liberado…
Doña Domitila María recordó que su mamita Domitila le dijo.
‘’El General Ponciano Corral tenia criterios de un militar prepotente y don Joaquín se jactaba de
ser un pacifista de pensamiento liberado ‘’.
… propio de mis tiempos de juventud en España, por eso me atrevo a aconsejarte de que tu línea
de ataque en defensa o venganza a lo que te hagan, sea favorable para los dos bandos y de esta forma
te asegurarías no solamente de la venganza, sino también del apoyo de los bandos en contienda y en
definitiva con el que gane estarás bien y la vida continuara igual, sin que una culebra te muerda…
Con estas palabras confirmaba lo que le decía su Mamita Domitila,
‘’Cuando se reunió don Joaquín con el general Corral, la única diferencia que existía entre ellos,
era la sutileza con que le clavaban el puñal a una persona por la espalda. Eran de la misma Escuela’’.
… A nosotros los Pasos Arellano nada en absoluto nos debes, mis Padres y tu Mamita Domitila
estarían orgullosos del valor que has demostrado en salir adelante y darte a querer por la gente que te
rodea y eso lo has logrado sola. Me contó don Guillermo D´Ibarra sobre el nombre de la calle ‘’El
Desenredo’’…
A doña Domitila María la sangre le hirvió por un momento, sonrojo y los ojos se le engrandecieron
más aun cuando escucho el nombre de Guillermo D´Ibarra.
… Me dio risa, pero no de burla, si no de pensar que una mujer joven es dueña del único rincón en
Granada o tal vez en el País, en donde se Desenredan los asuntos personales, familiares, laborales, de
faldas y de licor, aquí es donde se debiera de discutir los asuntos políticos, para que se desenreden y
todo el País quede contento y en paz.
Doña Domitila Maria ya más familiarizada, hizo el comentario.
- El problema don Carlos, seria por cual calle saldrían, por el sur tenemos la calle El Enredo y por el
norte la calle El Arsenal, por donde salgan regresamos a lo mismo.
Los dos rieron y el dio la razón a ella.
- Ese era el asunto que me trajo a tu casa y es de mas decirte que aquellas personas que
voluntariamente se nos unan y sean de tu gente, no abandones a sus familias ni los mires como menos
si llegan a regresar vivos.
Ya en plan de despedida conversaron de cómo estaban los negocios en los poblados de la costa
del lago, sobre el ganado, las plantaciones y otros asuntos relacionados con el comercio, sin tocar el
tema de los Putales, Cantinas, Casas de Juegos y otras actividades económicas ilícitas. Recordaron
algunas pasadas chistosas y claro está, no olvidaron a sus difuntos, por ultimo doña Domitila Maria le
prometió.
- Yo velare por la seguridad de don Fernando, aparte de la dispuestas por usted, ahora en
cualquier dificultad o yo tuviese que abandonar la ciudad, que la familia Pasos me perdonen pero no lo
voy a dejar, aun que fuese amarrado me lo llevo.
Don Carlos sonriente le agradeció, la invito a que pasar por la hacienda antes del viaje a España,
para charlar con doña Francisca, que bien la pasa cuando ella llega a acompañarlos, quedó de acuerdo
y se despidieron.
Todas las explicaciones de don Carlos, inquietaron a doña Domitila Maria. En algunas de ella se
había mantenido en alerta, pero en otras realmente debería que ser muy cuidadosa.

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 Después de la guerra en contra de William Walker, se podría decir que el País quedo un tanto
saneado en cuanto a las rencillas políticas entre Conservadores y Liberales. Así como se hicieron de
propiedades que fueron abandonadas por sus antiguos dueños o las vendieron para trasladarse a la
Capital u otra zona del País, también en muchos casos hombres o mujeres Leonesas contraían
matrimonio con Granadinos, todo esto se dio en la alta sociedad aristócrata de Nicaragua, apellidos de
renombres políticos se entrelazaron, las diferencia entre Granadinos, por ser la cuna del Conservatismo
y los Leoneses por ser igualmente del Liberalismo, fue prácticamente desapareciendo y solo fueron
quedando apodos y defectos. De los Granadinos se decía que eran tan ‘’fachentos’’ que se vestían bien
aunque anduvieran las tripas vacías o que comían arroz con frijoles y eructaban pollo. De Leoneses
igualmente que eran tan ‘’pinché’’, que ni golpeándoles los codos habrían las manos para dar algo, de
tal forma que todo parresia inofensivo, sin considerar que todavía las espinas políticas estaban dentro y
llegaría en cualquier momento la hora de sacárselas. Las diversidades en lo socio-económico a través de
matrimonios y transacciones comerciales en Managua, se dieron en el País. Esta nueva distribución
geográfica de las familias con distintos sentimientos políticos seria de mucho beneficio para doña
Domitila Maria, don Carlos tenía razón en decir que no había en quien confiar refiriéndose sin duda
alguna a su círculo político Conservador, sin tomar en cuenta esta nueva redistribución que no eran
parte de sus relaciones y por lo tanto les conocía por referencias, sin poner reparo en que estas mezclas
eran tan útiles a como peligrosas en el ámbito político, económico y social, dependiendo de la buen o
mala utilidad que se le diera. Era la nueva generación que promovería las nuevas corrientes del
pensamiento en el próximo siglo, que don Carlos y sus tiempos de juventud ya no eran tan útiles para
las sociedades nuevas, como lo fueron a inicio y mediado del siglo, este razonamiento era manejable
para doña Domitila Maria por su juventud, sus relación con la generación de don Fernando y con
personas que venían de Europa y Estados Unidos, con las nuevas ideas para el futuro, además que no
hay que olvidar de que sus clientes predilectos eran profesionales, estudiantes de importantes
Instituciones Educativas extranjeras.
En este panorama es que tendría que poner mayor atención doña Domitila Maria, su destino y el
de muchas familias que dependían del trabajo para ella y de los beneficios que esto significaba
dependerían de su proceder. Buen tiempo anduvo distraída con ese asunto y de una u otra forma
comenzaba a tomar sus primeras precauciones, especialmente informarse de los movimientos que se
daban en los posibles nidos de conspiración en contra de ella, ya que Rosita Alemán al igual que su
Madre mantenía relación de largo con señoras de sociedad igual a ella, a las que les conseguía
igualmente que a los señores, carne fresca y de monte, con toda seguridad de no ser delatadas. En
todo caso cualquier tipo de acción represiva que ella tomara, tendría que ser ejecutada hasta después
que se marchara a España don Carlos y el resto de su familia. Había algo en sus instintos que no la
dejaba dormir bien, todo calzaba bien y ella se preguntaba de donde le venía aquella inquietud, que
tendría que ser tan grande para tenerla en ese estado de ansiedad. En muchas ocasiones desistía en
pensar en ese asunto y se decía ella misma.
- La Cáscara Protege al Árbol.
Pero al poco tiempo volvía a la mente la visita de don Carlos. El mismo día que don Carlos fue a
casa de doña Domitila Maria, llego a Panaloya con otros correligionarios Conservadores su gran amigo
el General Chamorro y en medio del café, revisaron las diligencias que don Carlos y otros que a manera
de comitiva oficial llevaban por España y Estados Unidos, entre otros asuntos al final se abordo sobre
su visita a doña
- La semilla fue sembrada.
Capitulo XIII
- Chago, decime una cosa, es cierto que ésta Isla…
Refiriéndose a la ciudad de Granada.
… Es más grande que la Isla de Ometepe.
El aprendiz a marinero Santiago Flores se rió burlescamente, ella le pego una palmada sonora en
el hombro y le advirtió.
- De mi no te vas a reír o te garroteo aquí no mas, ahora contéstame ésta Isla es más grande, sí o
no.
Chago calmó la risa y dijo.

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 - No chavala loca, no vez que esta no es una Isla, las Islas solo existen en el lago.
- Eso pensé yo.
Le interrumpió Domitila Maria.
- Haber que pensaste.
Pregunto Santiago.
- Que sos un mentiroso, como es posible que esa Isla que tiene dos cerros y esta que tiene solo
uno sea más grande, esta tendría que tener tres cerros para ser más grande.
Chago solo se sonrió para no recibir otra palmada.
- No, ya te dije que esta no es una Isla, haber, el lago está rodeado por tierra y dentro del lago
están las Islas, por eso una Isla se llama Ometepe, la de los dos cerros y la otra se llama Zapatera en la
que también hay un solo cerro, ahora me entiendes…
Domitila Maria solo meneaba la cabeza afirmativamente.
… y si no me crees pregúntale a la niña Ángela Maria.
- Yo le voy a preguntar, vos crees que soy una pendeja que se va a dejar engañar por un Indio
jodido y mira bien, si me está mintiendo, por esta…
Enseñándole la señal de la Cruz con los dedos y besándola.
… la que te pega una buena palmada soy yo Domitila Maria Miranda, Indio baboso.
Se levanto y se fue haciéndose la arrecha, aunque al darle la espalda a Chago se iba riendo, Chago
igualmente se quedo riendo y se fue al muelle a buscar que hacer en la lancha de su tío, el único
familiar que tenía en la vida.
Su mamita Domitila, la miro entrar sonriente y contenta, desde luego ella sabía de dónde venía y
lo que estaba haciendo, a ella le gustaba la amistad y cariño que se tenía con Santiago Flores, pero no
le parecía esos juegos de manos tan groseros, que en ocasiones se escuchaban las palmadas que le
daba en la espalda hasta una cuadra de distancia.
- Estabas con Santiago, seguramente.
- Si mamita.
Le contesto.
- Con razón venís contenta de la apaleada que le distes al pobre.
Ella se rió y le dijo.
- Si fueron solo unas palmaditas mamita.
- Si palmaditas, pues mire mi hija, cuando deje a ese pobre muchacho sin pulmones o se arreche y
le deje ir una buena trompada, a mi no me venga llorando.
Ella se moría de risa, tan sonora y graciosa que tenia, que si su mamita Domitila estuviese
disgustada con ella, por su manera contagiosa de reírse, terminaba riéndose ella también, eso mismo le
sucedía a la niña Ángela María.
Teniendo estos recuerdos y con el resplandor de la ciudad, el capitán Flores se sentía tranquilo y
no le importo dar la orden de disminuir la velocidad. Aquellos pensamientos degenerados que se le
cruzaban por la mente, cambiaban por recuerdos agradables, mas con los tragos que ya surtían efecto
el se sentía livianito y con fuerzas suficientes para navegar con su muerta el resto de su vida, de un
costal saco una pichinga de guaro y se tomo un trago de esos grandes para hombres viejos, se a
recostó y los recuerdos comenzaron a volverle en su mente.
Cuando fue de manejo publico el enqueridamiento de Domitila María y Santiago Flores, para la
pobretería era común y corrientes, igual como se apareaban los animalitos de Dios, pero para el cura
párroco de la Iglesia de Guadalupe no era de esa forma que Dios mandaba la unión de una mujer con
un hombre y para eso existía en las Sagradas Leyes, el Matrimonio entre ellas. Siempre estos asuntos
como exigencia de la Iglesia Católica pasaban al olvido, cuando la mujer paria el primer hijo, la Iglesia y
los curas tenían la obligación Cristiana de Bautizar el fruto de aquella relación pecaminosa. Para ese
entonces los burdeles de la que sería dueña doña Domitila María y sus socias Rosita Alemán y Marta
Joyilla eran semiclandestinos.
Después de escuchar los muchos comentarios y quejas de las Señoras de sociedad, de que el
padre Rodrigo tenía entre sus feligreses una colaboradora que vivía en el pecado de la Fornicación, el
señor Obispo envió a llamar al padre Rodrigo. El Cura Mayor cariñosamente le presento las quejas que
a diario recibía de sus parroquianas con relación al enqueridamiento de aquella joven pareja, siendo

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especialmente ella una colaboradora de la parroquia y de muy cercana amistad con la familia Pasos
Arellano, el curita le respondió.
- Mire señor Obispo, con todo el respeto que su autoridad y su persona merecen, yo no
puedo ser quien lance la primer piedra en contra de esa joven o de todas las mujeres, excluyendo a las
señoras de sociedad ‘’que bien saben cumplir’’ las Sagradas Leyes de nuestro Señor. No es solamente
ella la que vive en el pecado de la fornicación, son más que muchas las que viven así, ellas cumplen con
todas las leyes que usted les mande menos esa ley, yo puedo inducirlas, aconsejarlas, reprenderlas y
ponerles muchas penitencias, no logro que entren en razón. Aconséjeme señor Obispo que mas puedo
hacer por estas almas descarriadas del camino de Dios Padre.
Esto fue más que suficiente para que el señor Obispo diera por entendida y olvidada esa
conversación, se limito aconsejarle al padre Rodrigo.
- Ore y acérquese más a ellas y ellos, explíqueles que el Matrimonio les da seguridad a sus hijos
ante los ojos de Dios, mucho más aun que en las leyes de los hombres, que en algo les es útil.
Saliendo del Obispado, el padre Rodrigo se dirigió directamente a la casa de Marta Joyilla, en
donde Domitila María lo esperaba con un almuerzo que parecía un banquete. El cura mientras comían
les contaba con lujo de detalles la entrevista con el señor Obispo, todas riéndose por las irónicas
maneras con que les contaba aquel curita picaron. Antes de retirarse, el padre Rodrigo. Les dijo.
- En ningún momento yo podría estar de acuerda con esta forma de convivencia que ustedes le
llaman enqueridamiento, esa relación no está bendecida por Dios, se llama Fornicar y el No Fornicaras,
se encuentra entre los 10 Mandamientos de la Ley de Dios, por mi parte atrevidamente, me puedo reír
del señor Obispo, el es un hombre y pecador igual que yo, pero de las Leyes de Dios no.
- Por favor padre, no lo tome de esa manera, todas le pedimos a Dios que nos bendiga.
Dijo Domitila María.
- Con la edad nuestro Señor nos da sabiduría, como al que pierde un sentido y se le abren otros
para su propia defensa, yo pase mí juventud, ahora como viejo que soy puedo ver y oír todo lo que
pasa al otro lado del lago, si quiero saber algo se en donde acercarme y se cuales son los temores e
inseguridades que ustedes sienten hacia el Matrimonio y no les quito la razón, si Dios me da esa
facultad de saber esas y otras cosas, es para que se las diga, hablar con un viejo, no es como ustedes
dicen…
‘’Solo chochadas habla ese viejo pendejo’’
Los concurrentes hombres y mujeres rieron.
… Ustedes no pueden ver en realidad que hay detrás de un viejo, cuanto ha vivido, visto y sabe.
Por eso con toda seguridad les puedo decir…
´´ Yo conozco el cebo de mi ganado ´´
… Yo las conozco desde niñas y ninguna de ustedes me puede engañar, yo conozco lo que
Domitila María y sus cómplices Rosita y Marta están haciendo, hasta donde se proponen llegar, lo sé,
pero yo no puedo parar eso. Se me es más fácil arrancar la Iglesia y llevármela para otro lado. Si puedo
pedirles de que piensen en las otras personas, las ayuden a salir adelante fuera de cualquier vició,
extiéndanles la mano, dejen aunque sea un poquito las ambiciones personales y ayuden al necesitado,
acérquense a Dios, pídanle fuerzas para ayudar y resistir a las injusticias de la sociedad, sin juzgar a
nadie. Los antiguos persas decían.
‘’Detrás de un error, hay mil virtudes’’.
Les dio la bendición a todas ellas y conservando el buen humor a los hombres les dijo.
- A ustedes no, por ser culpables de que estas lindas mujeres vivan con miedo de sus cambios
después de casados, ustedes creen que no me doy cuenta que ellas temen que si se casan, se podrían
volver ustedes unos borrachos irresponsables, tendrían cinco queridas y ellas aguantar por el simple
hecho de estar atadas al Matrimonio. Delante de ellas los digo que también ustedes tienen miedo de
que se las peguen y de Chivos pasen a ser Cabrones o se les vayan a ir con otro hombre. No se hagan
los tontos amigos, yo todo lo sé y veo, confíen ustedes en ellas y también van a confiar en ustedes.
Riendo por el regaño que les hizo a los hombres, les dio la bendición y se marcho.
Medio abrió los ojos y se volvió a entregar conscientemente a sus recuerdos y rápidamente se le
vino a la memoria, de que a partir de la visita de don Carlos, doña Domitila Maria cambio de aptitudes
para con muchas cosas. A los días envió a Rosita Alemán y Marta Joyilla, hacer un recorrido por todos
los lugares en donde tenía negocio. Eran un itinerario de unos dos meses y midió. Dio las instrucciones
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muy detalladamente por lugar, con la exigencia de que eso tendría que hacerlo de manera personal,
tenían que comentar sus diligencias. La salida de las dos fue de inmediato. Para cualquier extraño las
diligencias eran rutinarias, por lo que ellas eran administradoras en sus distintos ramos, Rosita Alemán,
era la encargada de los Juegos de Azar, Putales, Cantinas y los Contrabandos, mientras Marta Joyilla de
los capataces, almacenes, comercialización de las Producciones, es decir, la encargada de lo Licito y la
otra de lo Ilícito. Otro cambio fue su decidido apoyo a la Iglesia de Guadalupe en todas sus actividades
religiosas, mando a rellenar con piedra volcánica la parte trasera de la Iglesia para que los animales y los
borrachos no se cagaran, ni orinaran en ese predio, cercar con alambre el área, celebro varias Primeras
Comuniones apegada a las costumbres del tiempo de la niña Ángela Maria, patrocino Bautizos y hasta
algunos Matrimonios.
En una ocasión el Capitán Flores se atrevió a preguntarle por esos cambios tan bruscos, a lo que
ella le respondió.
- A su momento lo vas a saber…
Ella clavo una mirada directa a los ojos de Santiago, este se estremeció y continúo diciéndole.
… Cuídate mucho que es posible que hasta nos Casemos.
El capitán pego un brinco que los marineros creyeron que la muerta lo estaba cachimbiada o no
se aguanto la brama y se le había encajado. Del brinco se trompezo con el balde de agua limpia,
arranco de un solo guiñon dos petates que se habían puesto como faldones rompe vientos, tiro para
afuera varias butacas, intento correr y se tropezó con la caja de la difunta, cayendo sobre las butacas,
cayo de arrodillo en una pierna y la otra la tenia estirada bien engarrotada, que los marineros al acudir
tuvieron que ayudarle a levantarse y poderlo acomodar en la butaca con la pierna engarrotada estirada
sobre otra, sangraba del labio inferior, la cabeza le daba vuelta por un fuerte golpe en la frente, sudaba
a mares y una palidez fantasmal, alguien le paso un buen tragó de a cuarta de guaro pelón, se lo tomo
como agua, quedo quieto y sin fuerzas cuando escucho al aprendiz decirle a los marineros.
- No me joda este viejo hijo de Puta. No vuelvo a trasladar muertas, al mando de un Capitán
chancho y embramado.
El Capitán a duras penas pudo sin menear las manos de las piernas, solo los dedos, hacerle las dos
guatusas y le contesto.
- Tu Madre.
El Capitán Flores, pensando llego a creer que era él quien estaba penando y no doña Domitila
Maria o será a como les dijo una vez a Rosita Alemán y Marta Joyilla.
- Ustedes deben de cuidarme y mimarme, si la patrona doña Mercedes cuándo se murió se llevo a
mí Mamá y la niña Ángela María a mi mamita Domitila. Así que cuando yo muera tendré que escoger a
cual llevarme.
Entonces el capitán se pregunto.
- Será que esa chifleta me la lanzo a mí, como dicen.
‘’Se lo digo a Pedro, para que entienda Juan’’.
Se quedo un instante pensándola y el mismo se respondió
- Válgame Dios.
Por si acaso se persigno.
El calambre se le fue calmando y logro pararse apoyándose en las paredes del ventanal de la
lancha y renqueando se paso donde el aprendiz, preguntando cómo iban las cosas, aquel le respondió.
- Mírelo, usted mismo Capitán.
Lo que miraba no lo podía creer. Granada envuelta en llamas, era como una salida del sol, algo
maravilloso que cuando lo contara, ni los mismos que avivaban las fogatas iban a creerle. Con
seguridad a ellos también los estaban viendo desde la costa del lago, pero en realidad aun que la vista
era bellísima el muelle no se miraba en absoluto.
- Debe de ser que estamos algo largo.
Pensó.
Ordeno el mínimo de velocidad aprovechando la calma que queda después de la tempestad, el no
ver el muelle lo preocupo, tendría que haber alguna señal especial para el muelle, navegaron
aproximadamente una hora, cuando de pronto varias lanchas se apartaron del muelle y fue entonces
que logro medio orientarse en la dirección del muelle. En efecto las lanchas estaban abriendo suficiente
espacio para que el capitán Flores pudiese maniobrar con toda seguridad, así lo comprendió, pero mas
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cerca estuviera del muelle el reflejo de las fogatas le cegarían la vista para precisar la distancia y lugar de
atraque, de lo contrario chocaría, se acercaron un poco y se anclaron al igual que las otras lanchas,
prepararon un bote y envió al aprendiz con las primeras instrucciones sobre los productos que
necesitaba y le agrego.
- Que manden a sofocar las fogatas cercanas al muelle para poder libremente atracar y sobre el
otro asunto háblalo solamente con Marta Joyilla y Rosita Alemán.
El bote se marcho con candiles encendidos y al tiempo se desprendían otros iluminados
igualmente en dirección a la lancha del Capitán Flores, eran los Capitanes de las otras embarcaciones
que creían que había algún problema abordo. Era un espectáculo de la edad media, Granada en llamas
y sitiada por siete embarcaciones piratas prestas para el asalto. En los tiempos de Walker una
demostración de fuerza similar hubiera salvado la ciudad del fuego filibusteros y muchos patriotas se
hubieran salvado de la muerte por balas o por llamas y de haber muertos traicionados ya que de esa
guerra por el poder absoluto, enriqueció más a Conservadores y Liberales que supieron ver cuál era el
negoció del momento.
El aprendiz llego a la costa cercana al muelle, a esa baja altura del bote la luz y el brillo del reflejo
no molestaba la vista. En el lugar lo esperan Rosita Alemán y Marta Joyilla, custodiadas por soldados
descalzos para evitar gente que se amontonaran en donde orillara el bote con mensajeros de la lancha,
al llegar les explico del asunto de las fogatas que segaban la vista y se correría el riesgo de chocar con el
muelle, inmediatamente dispusieron enviar a los militares acompañados de pescadores y cargadores a
sofocar las fogatas y dejar solamente una encendida en la costa que y candiles al borde del Muelle.
Todas atareadas por la espera y la prisa de desembarcar a doña Domitila María, ordenaron que aquella
gente procediera a obedecer las instrucciones, sin imaginar la samotana que se armaría. Mientras
ejecutaban por un lado la sofocación de las fogatas, por otro lado se trasladaban más voluntarios para
lo mismo. Las dos mujeres con el aprendiz se trasladaron al Parque Azul para recibir las instrucciones del
Capitán en privado como se le ordeno.
Al oír lo que sucedía con el cuerpo de doña Domitila Maria las dos amigas se atacaron en llanto,
eran alaridos los que pegaban, las Putas acudieron igualmente llorando a agarrarlas y abrazarlas, las
dos amigas se arrodillaron y se acurrucaban gritando.
- Porque Dios Mi, porque a mi amiga, Dios mi, mi hermana…
Nadie se atrevió a hablar una sola palabra, era un silencio escalofriante que recorría a toda aquella
multitud al escuchar aquellos llantos, suplicas, todas las miradas y los corazones acelerados estaban en
dirección al muelle, las lagrimas y leves temblores en el cuerpo de la gente eran como un ritual
silencioso y colectivo. Al apagar las fogatas toda la ciudad quedo en completa oscurana, pero ya se
miraban en el horizonte los primeros signos del amanecer, como anunciando que la espera llegaba a su
final, pero las marcas de aquella difunta todavía no habían terminado, faltaba mucho para llegar a su
morada final. Ya bastante calmadas y la mente fría decidieron que Rosita Alemán se trasladaría a la
lancha y Marta Joyilla haría las diligencias con el aprendiz en la ciudad, quedaba claro de que
desembarcarían el cuerpo con la claridad del día y el asunto de su amiga muerta resuelto, dieron
instrucciones de avisarle a la multitud para que descansen.
En efecto Rosita Alemán se traslado a la lancha llevando con ella a la Marta Jamela, la Chepa
Cagona, la Caballona, la Siete Copas y la Rococó, mujeres activas y decididas a todo, la Chompipona
quedo a cargo del Parque Azul con el remanente de flores del jardín de la calle El Desenredo.
En cuanto llegaron a la lancha fue otro cuadro de llanto, entonces por discreción y por
conocimiento de lo que pasaría después, Flores le pidió a los otros capitanes que regresaran a sus
lanchas, mandaran a descansar al personal y les explicaran que atracarían con la claridad del día, lo
difícil había quedado atrás no había prisa de buscar tragedias.
La gente que estaba en la costa y los alrededores de la ciudad, consientes que no había más que
hacer se dispuso a descansar. En medio del silencio y la oscuridad una pareja joven no se aguanto las
ganas de hacer el amor, eso no era el problema, si no que la mujer era una bulliciosa incontrolable, no
había gozo sin escucharse ella misma y para eso tenía que ser maltratada y maltratarse, ya en su afán
no les importaba nada. Eso levanto los ánimos de otras parejas, parecía competencia de gritos, gemidos
y hasta rechinar de dientes los que se escuchaban, como si fueran dos ejercito lombrices los que se
enfrentaban, en todo caso las promiscuidad de donde vivían les daba un sentido de algo normal,
aunque en sus cuartos fuese un acto amoroso un tanto silencioso, por eso preferían los matorrales o las
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riveras de los ríos. A cielo abierto y entre adultos lo cuidadoso carecía de valor, mas cuando los vecinos
daban rienda suelta a sus instintos y la libertad a como la gozan los animalitos de Dios, la agotadora
jornada del día merecía una agradable recompensa sexual y que mejor que en colectivo. La oscuridad
les deba la seguridad de no ser identificados. El viento heladito en el ambiente el sexo era seguro y
placentero, en ese momento ni las grandes habilidades de Carlos Alberto, hermano de Rosita Alemán,
hubiese sido capaz de reconocer e imitar los movimiento a como los contaba en las tertulias de mujeres
y mucho menos que escuchara alguna conversación, ya que esta brillo por su ausencia, solo gemidos,
suspiros, gritos y toses se escuchaban. Aun cuando las masivas relaciones sexuales se estaban
realizando en la costa y un poco adentro en campo abierto, parecía un gemido de diferentes coros y
tonalidades que salía del mismísimo lago y el viento con su zumbido, el acompañamiento de las
fricciones de las ramas de los árboles, se encargo de distribuirlo por toda la ciudad.
Melodías y olores sexuales entraba en las grandes casas aristocráticas, en todos sus recintos y
habitaciones acompañado de un hielito excitante, que hasta los patrones se unieron a la samotana
colectiva en la noche de la gran Vela de doña Domitila Maria. En los placeré de los pobres los ricos
gozan por ser naturales pero en sus alegrías los pobres sufren y no alcanzan por estar contra la
naturaleza y la distribución social que establece el poder y la Iglesia.
Increíble pero muy cierto fue, la única ocasión en que las ausentes a ese festín de placeres
desenfrenados, fueron las Putas de la ciudad, que con envidia, asombro y acaloradas, se encontraban
solas en el Parque Azul.
De pronto se escucho el grito desesperante de la Germina Lagarta que dijo.
- Gente mierdas, hijos de la gran P… no solo se oye, si no que hasta aquí se sienten los jincones,
respeten a la Muerta, hijas de P…
Ellas eran en ese momento, las leonas que estaban enjauladas en el Parque Azul y fuera de la jaula
se estaban repartiendo la carne cruda y ensangrentada.
La Matilde Chicharrona no aguanto y pego un gran alarido.
- Chanchas hijas de P… ojala les salga el Diablo y les queme el Bicho...
Esos y otros comentarios similares y hasta más fuertes, fueron parte del acompañamiento del
concierto, Mete y saca, jala y puja…
Pocos minutos antes del alba el silencio retomo su trono alterado por aquellos irreflexibles
actos amorosos, los grillos un tanto temerosos comenzaron sus cantos de fricciones de patas y las ranas
prefirieron quedarse en completo silencio y reanudar sus propias samotanas para el nuevo anochecer.
La claridad a su ritmo natural, inicio a descubrir la costa y los campos para sorprender con su magia
diaria que todas las parejas habían amanecido en distintos lugares, los que se acostaron debajo de un
árbol de Mango, amanecieron debajo de árbol de Hicaco o de Limón, de coco, en fin nadie podía
asegurar de que la pareja de enseguida hubiese sido la que estaba a la par durante aquella mega
samotana sexual. Los desvergonzados se levantaban y daban los buenos días al que se encontraran,
pero la gran mayoría no mostraba palabra mucho menos la mirada por temor que una de las dos
acciones les delatara su satisfacción.
Marta Joyilla y el aprendiz pasaron el concierto con el doctor Luís Sánchez, cargando sus
utensilios y los productos químicos posibles a necesitar y retirando de distintos almacenes de su
administración los productos encargados por el capitán, de igual forma retiraron una caja fúnebre de la
carpintería de don Jacinto Pavón, era una caja forrada en el interior con metal y que en otros casos
similares habían dado buen resultado. Solamente el doctor Sánchez como hombre muy educado y
graduado en la Universidad de Sobona París, Francia, hizo comentarios inocentes de aquellos sonidos
eróticos nunca antes escuchados en la ciudad y recorrían llenando todos sus rincones.
Al llegar al Parque Azul, ya se encontraban los dos botes que los trasladarían y transbordarían la
carga, también encontraron a todas las mujerzuelas de la ciudad en un estado de envejecimiento,
como si hubiesen sido ellas las que se echaron aquella multitud de hombres, el médico dijo de forma
burlesca.
- Se encuentran en estado de Chok emocional y saciedad. Como si la jaula de las leonas fuese sido
abierta y lanzadas las fieras a los hombres, pobres cristianos condenados a la muerte.
Las pobres eran ellas, como un orgasmo, que dura un cortito tiempo y el placer dura, ese
momentito que duro esa samotana, fueron para ellas largos años de torturas y de infinitos placeres

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tormentosos, similares a la recuperación de un ahogo con ojos desorbitados y la mente fueras de la
realidad.
Al grupo que soporto todo esa experiencia sexual sin riesgo, les apodaron.
‘’El Club de las Putas Cueros’’.
Rosita alemán, puso orden femenino en aquella lancha que hasta ese momento era
absolutamente del Capitán Flores.
Mirando Chago como Rosita Alemán, su personal y la tripulación se dispusieron ordenar la lancha.
Las banquetas lanzadas por Flores durante su pesadilla matrimonial, reparar los dos petates que servían
de faldones, llenar baldes de agua, agregar dos petates al acceso del timón de tal forma que todo
estuviera listo para las labores quirúrgicas que se realizarían en conjunto con el doctor Sánchez. Rosita
Alemán repetía constantemente que todo tiene que estar perfecto para que el doctor no tuviera una
mala impresión, del cariño y respeto que le tuvieron a doña Domitila Maria, ya listo, en orden y
especialmente al tanto de lo sucedido durante el viaje, del comportamiento fuera de lugar del Capitán y
su fertilidad mental para con la muerta, que no era del otro mundo adivinar lo que pasaba por su
mente. Ella mando a descansar a los marineros y a las cinco mujeres les prohibió menearse del lugar en
donde ella pudiera verlas, ya que eran capases, de armar la zanganada con la tripulación y de otras
lanchas, muy bien sentenciadas las tubo en ese lugar, mientras ella tendría una conversación con el
Capitán Flores a solas.
Éste hombre que por la travesía había envejecido, estaba claro que le venía hierro caliente sobre su
cara. Con su pecho dolido por lo que estaban pasando, Rosita Alemán se le acerco al Capitán Santiago
Flores, lo abrazo y acariciándole la espalda, lloraron juntos, se sentaron y conversaron de sus tristezas y
lo vivido en Altagracia, concluyendo ella le dijo.
- Chago, voz sabes cómo te hemos querido nosotras tres, como Marta Joyilla y yo no hacíamos de
tu lado cuando enamorabas a Domitila Maria y mejor que nosotras nadie sabe cuánto ella te quería,
como se fue formando ese amor y el por qué nunca fue tan completo para ella, para vos no sé, pero
recordé que en un tiempo estuviste muy feliz con aquella Hija de la Gran P… de la Petra Culona, que te
parió dos chavalos, que por ordenes de Domitila Maria, nunca se te dijo de que es seguro que no son
tuyos…
Sintió aquella primera bofetada de mano pesada con dureza que hasta le ardió el culo.
De la boca que salía aquellas palabras nadie podía poner en duda su veracidad, aun cuando la
Petra era maestra del Abecedario y el Catecismo en la Iglesia de Guadalupe.
… Esa Hija de P… Te la pegaba al revés y al derecho, sabes lo que hacia la desgraciada, le mandaba
a decir Domitila Maria, que ella si sabia domar un Cabro y parirle chavalos de otros hombres, ya que voz
no podes preñar…
Esa segunda bofetada le dolió más que la primera, que casi se va en mierda, igual que la Chepa
Cagona, que cada vez que se mete con un hombre, decía que con solo verle la leva casi se cagaba.
No habían dudas, el estaba consciente que de otras mujeres no tenia hijos y eso que fueron
muchas las que tuvo en sus brazos.
… Aun así mi amiga…
Continúo Rosita Alemán.
… Te perdono y nunca le paso por la mente meterse con un Hijo de P… extranjero bonito...
Rosita Alemán se detuvo por un instante como queriendo agregar algo pero se contuvo, con la
cara colorada de mentirosa, se sobrepuso y prosiguió.
… Que la preñara y parir la criatura que la hubiera hecho feliz toda su vida, sin necesidad de tener
más hombres como sus abuelas y madre, que en paz descanse. Te quiero decir o advertir algo, yo sé
cuanto quieres a Domitila Maria, aun estando muerta, cuanto te duele y cuanta falta te va hacer, yo no
soy un animal y tengo sentimientos, cuando murió mi madre que mucho la quise me dolió mucho, pero
mi hermana fue tanto como si me arrancaban el corazón, tal vez por la forma en que la mataron y
porque nos quedamos solas pequeñas y la mamita Domitila nos termino de criar, yo sé de ese dolor que
sentís y que sentimos por Domitila Maria, pero lo que te voy a decir, te lo juro que solo una vez te lo
digo, mas ahora que sabes del gran amor que te tuvo ella….
Tomo aire y le advirtió.

50 | P á g i n a
 … Mire muy Hijo de la Gran P… si por arrepentimiento, arrechura o brama me le hace a mi amiga,
un bochorno, como el que hicieron los Maltez en la vela de Jesús Cochino, tenga la seguridad de que
yo lo mato a cachimbazos limpios.
Le limpio las lágrimas de los pómulos con sus dedos al Capitán Flores y se fue a donde estaban
sentenciadas sus Putas.
Capitulo XIV
Con el interés de mantenerse informada y constatar la información que le proporciono don Carlos,
referente a tomar precauciones con determinadas personas que pretenderían perjudicarla, decidió que
sin importar tener que matarlas, primero se indagaría bien. En casi todo coincidía, también en poco
tiempo doña Domitila Maria se puso al corriente y logro una mejor vista panorámica de la situación
política-militar, principalmente de León, en donde establecía una red comercial clandestina. Aun así no
lograba sacarse aquella inquietud que le quedo pulsando en su cuerpo después de la visita de don
Carlos y más aun sus preocupaciones, que le parecieron algo anormal, tanto como su visita.
Ella se sentía llena y de buena satisfacción con sus nuevas actitudes para con la Iglesia, el apoyo al
padre Rodrigo le regocijaba el espíritu, al extremo de que sus intenciones iníciales pasaron a segundo
plano, la venganza sobre cualquier represalia dejaron de ser su principal motivación para colaborar con
el curita. Aquella espina no le salía, para bien de ella y otras personas ajenas al asunto, decidió
adelantar la visita a la casa hacienda de la familia Pasos Sacaza. Una mañana dio aliñar a Rafaela Urbina
frutas, hortalizas, verduras, cuajadas, quesos ahumados, mantequilla, etc., todo fresco y de la mejor
calidad, para llevarlas a la hacienda Panaloya en ocasión de su visita a los Pasos, le envió un encargo de
igual proporción a don Fernando. Todo debería estar listo para el día siguiente. Efectivamente, muy de
mañana envió a la Rafaela a entregarle personalmente a doña Francisca el encargo a manera de aviso
de su visita por la tarde y que le dijera que no se preocupara por postres, que ella los llevaría elaborados
con sus propias manos, a don Fernando se las envió con la Marta Jamela para que lo alegrara,
inocentemente con la recomendación de no exagerar aun que se lo pida o quisiera dárselas de gallito
tierno, sin imaginarse que don Fernando le tenía horror a esa mujer hermosa por la bonita figura y
diabólica fama que tenía. También envió a las casa de las familias Libero - Conservadoras Sansón
Chamorro y Mongalo Barrio. En algún momento y sin darle interés sintió que caminaba por buena
dirección en cuanto a sus preocupaciones, claro quedaba que si don Carlos dejó esas dudas, con el o
en su casa se debería de aclarar y salir de ella.
De muy buena actitud para con la vida se dispuso a preparar pasteles, Empanadas Rellenas
de Carne o Miel, Cajetas de todo tipo, Galletas de figuras o con colores de miel y otras confiterías para
los niños y niñas de la hacienda. Fue una preparación minuciosamente elaborada por ella sin
intervención de nadie, más que el de alimentar con leña los hornos que utilizaba. Al mismo tiempo sin
idear nada para socavar durante las conversaciones, suponiendo que don Carlos estuviera en casa y se
viese en la necesidad de conversar con él en privado, ella no se precipitara con preguntas directas, bien
se dejaría llevar por él, hasta donde llegara y si fuese necesario hacer otra visita la tendría que hacer
hasta quedar tranquila.
Se preparo adecuadamente como toda una dama de sociedad, propia para la ocasión y se puso
en marcha por el camino a Malacatoya, a la hacienda Panaloya.
Al llegar a la hacienda ya la esperaban.
- Pase adelante doña Domitila Maria, la señora espera por usted en la terraza.
Dijo una criada joven, bonita, delicada, blanca de color y muy amable. Ella dio instrucciones al
cochero de entregarle a la cocinera de la casa una canasta y la otra a la Mamá de la joven que la había
recibido, era una canasta extra que llevaba para ser repartida entre niños y niñas de la hacienda.
Rápidamente pasaron la sala de amplio sofá y muebles muy bien distribuidos de tal manera que
no estorbaran y no dieran una impresión cargada, era de un ambiente bastante desahogado y fresco,
dieron con un pasillo que daba con el despacho de don Carlos seguido de una amplia terraza, en
donde atendía a sus amistades mas apreciadas, para doña Domitila Maria no era algo novedoso que la
recibiera doña Francisca en esa estancia, pero si le advertía dos cosas, una que don Carlos las
acompañaría y la otra era que doña Francisca deseara mayor privacidad.
- Algo sin mayor importancia referente al viaje.
Pensó.

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 Entraron a la terraza y doña Francisca inmediatamente salía a recibirla con la misma alegría y
algarabías de siempre.
- Mi amiga Domitila Maria desde que Carlos me dijo que vendrías me dije, por fin después de tanto
tiempo voy a tener una tarde libre y divertida con mi amiga Domitila Maria.
Entre besos y abrazos.
- Lo mismo digo yo mi querida, que tanto gusto me da verla no crea que por el tiempo que
teníamos de no vernos y le digo con relación a lo de libre no sé, pero lo de divertida se lo aseguro.
Rieron como diciéndose, ‘’diversión a rienda sueltas’’.
Hablaron asuntos de familia y obligaciones, para no precipitar por ninguna de las dos las
curiosidades que en realidad reunía a dos mujeres libres y de mucha fertilidad femenina, como para
darse cuenta de los secretos que podía esconder una simple mirada y que fuese lo suficiente para fijar
un lugar en donde poderse encontrar y hora de una cita amorosa.
- Domitila Maria contarme algo que me ha tenido intrigada todo éste tiempo, desde que Carlos me
dijo que vendrías, explícame como es esto de que de un momento a otro te has vuelto otra persona, así
que no me pongas cara de mujer arrepentida, caritativa y extremadamente religiosa, recordar que a
una legua diferencio a una monjita de una mojigata.
Doña Domitila Maria riéndose al escuchar la forma tan atrevida que le concluyó la pregunta que
solo falto decirle que a una legua también reconocería a una Puta.
- Usted sabe en primer lugar de que en la guerra y en el amor todo es permitido.
Doña Francisca se tapo la boca con sus manos abiertas en donde relucieron el cuido de sus uñas
pintadas de un color crema bajo que salía muy bien con el color y figura de sus dedos, mostrando
asombro dijo.
- Esto si viene picante.
- No doña Francisca, se trata y eso usted bien lo sabe que ante las Españolas yo no soy bien vista,
son mujeres anticuadas, hipócritas y sin gracia, además de insatisfechas, todo lo contrario de ustedes las
Italianas, prestas a lo moderno, sinceras o sea directas y alegres hasta no poder.
- Hermosas y guapas, no lo olvides.
Se puso de pies y dio media vuelta de un lado a otro como modelando su cuerpo, riéndose las dos
a la vez.
- Así mismo doña Francisca, pero igual como es su alegría y la de sus paisanas, es el odió que
han cultivado las Españolas en contra mía y todo lo que me rodea, yo para evitar algo que han
intentado en varias ocasiones en contra mía, es denigrarme ante el obispo y no tardaran en decir que
hasta soy Masona o colaboradora de los Liberales.
Doña Francisca se tiro una risa sonora que hasta doña Domitila Maria se sonrojo.
- No se ría de mi doña Francisca.
- No mi amor, no es de ti que me rió, es de ellas.
- Es por eso que para evitar esas lenguas, estoy colaborando en todo con el padre Rodrigo,
además de que el es un buen aliado mi.
- Si, te entiendo, pero contigo misma como te sientes, aquellas ni digamos.
Haciendo un movimiento despectivo con las manos dando a entender que no le interesaban, ni
que decían o que pensaban las Españolas.
- Por mi parte me siento muy bien, me agrada, lo hago de buenas ganas y de corazón, ahora
agárrese bien lo que viene son pendejeras que solo a mi me pueden suceder.
Doña Francisca simulo acomodarse y repuso.
- Por el lenguaje ahora si viene lo bueno o bonito. A ver mi amiga suelte esas pendejeras que solo
a usted le pueden suceder
Meneando los ojos con cierta coquetería.
- Debe de ser como le decía su señora suegra doña Mercedes a mi Mamita Domitila, de que el pelo
en la sopa es cuando uno da o hace algo de mala ganas o dicho de otra manera, lo que interesa es
jactarse por lo hecho o lo que dio, el asunto es que yo de adelantada y darles duro a las Españolas me
hice cargo de la Vía Sacra. Todo marchaba bien, hasta el curita estaba contento.
- Todo lo entiendo pero eso no es justo contigo.
Dijo doña Francisca.

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 - Así es, internamente me agrada lo hago y actuó de buenas ganas y me place. Le cuento, el único
y gran problema que teníamos era con el que representaría a Jesús, el hombrecito no podía decir con
claridad…
´´ tengo sed ´´ y decía ´´ tengo sek ´´.
… Hasta que encontramos a un joven de familia muy Católica, flaco que daba lástima, pelo
encolochado y algo claro, resolvimos el asunto, nos decíamos que hasta salimos ganando con ese
cambio.
- Esta bien, me gusta cómo me lo estas contando, así podré llevar bien los hechos que se van
dando, sin tener que interrumpirte.
Dijo doña Francisca, el relato prosiguió.
- En esas actuaciones no hay muchas exigencias para los que representan a los romanos, el que
necesita ayuda es el Jesús falso porque en ocasiones a los Romanos falsos se les pasa la mano y le dejan
ir coyundazos de verdad…
Doña Francisca se comenzaba a reía de aquel Jesús.
… Resulta que cuando salimos de la Iglesia San Francisco a la de Guadalupe, los Romanos
falsos ya iban borrachos y le pegaban unos coyundazos a aquel pobre hombre, que hasta se retorcía de
dolor, en definitiva si el Señor aguanto, por que él no, como buen católico tenia que soportarlos,
aquellos picados jodidos lo insultaban una y otra vez, no los bajaban de Hijo de P… para arriba.
Aquella doña Francisca no se aguantaba, ella se agarraba el estomago, se apoyaba en los
brazos de la mecedora, la cara se le ponía colorada y doña Domitila Maria riendo le decía.
-Deje risas para el final del cuento.
- Eso es más cruel que la propia pación de Cristo.
Le contesto doña Francisca riéndose
- No es de que lo fueran mal matando al hombre, si no de que de vez en cuando se les
pasaba la mano y venia el quejido de aquel pobre. Ya estando amarrado el Jesús falso, simulando en la
cruz como un crucificado, el soldado Romano tenía que clavarle la lanza en el costados, aquel borracho
pendejo perdió el equilibrio y en vez de clavarle la lanza, que era un cartón en un palo, el picado
pendejo se le pasa llevando el tapa rabo al hombre y este amarrado a la cruz va quedando con los dos
huevos colgados que al tratar de soltarse para taparlos se le balanceaban que parecían las bolas de la
campana de la Iglesia y las viejas gritaban como si en realidad lo estuvieran asesinando y el alboroto se
me va armando en medía celebración.
Eso ya no lo pudo soportar doña Francisca, se lanzo sobre un sofá y le dio un ataque de risa
incontrolable, se le soltó un lagrimeo que le dejo toda la cara desfigurada en maquillaje, era una
cabaretera amanecida con la noche enzima llena de sexo y licor, toda desgreñada del pelo y la cara
manchada de coloretes.
Doña Domitila Maria llamo a una criada para que le llevara un vaso de agua, para que tomara y se
pudiera calmar. Aun riéndose pero algo calmada se fue a arreglar a su habitación en compañía de la
criada. Al regresar dijo.
- De que te quejas Domitila Maria eso si es saber vivir, que no diera por haber vivido en medio de
toda esas babosadas.
Pregunto al final.
- Como término ese pobre hombre
- Eso es lo de menos, doña Francisca, pues al hombre lograron taparlo, las viejas tapándose los
ojos, lo desataron y lo bajaron, pero a la gente le gusta burlarse de la desgracia ajena y a que no sabe le
encajaron.
- Como amiga.
Pregunto doña Francisca, riéndose aun.
- El se llama o se llamaba Trinidad Sandino. Ahora nadie lo conoce por su nombre, solamente
como Jesús Cochino.
- Ya, ya Domitila Maria, ya no aguanto el estomago.
Se reían las dos.
- Hay situaciones que se hacer con la mejor intención, otras que deberían salir bien y resultar caer
en desastre y no solamente eso, hasta dejan secuelas imborrables en las vidas de las personas, cuando
alguien me habla sobre Trinidad Sandino me dices.
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 ´´ Dice Jesús Cochino tal o cual cosa… De la casa de Jesús Cochino media cuadra en al lago ´´
- Ahora te entiendo mejor.
Dijo calmada pero siempre riéndose doña Francisca y agrego.
- Pero hay que agregar. En la Guerra, el Amor y la Diversión todo se vale.
Continuaron riéndose.
Tomando refresco de papaya y empanadas o pudines, continuaron aquellas mujeres devorando al
pobre hombre que muy heroicamente desempeño el papel de Jesús, pero en una de esas doña
Francisca, abrió la puerta de la conversación de interés para doña Domitila Maria.
- Mira Domitila Maria, para cuando regresemos Carlos y yo de España y Estados Unidos…
Don Carlos en ningún momento había mencionado que su viaje de negocios incluía ese País,
doña Domitila Maria rápidamente reviso y no encontró motivos para ocultárselo, siendo más
comprometedor el haberle recomendado quedar bien con los dos bandos, por si los Liberales ganaban
la guerra.
…quiero que me guardes todas esas cosas que sucedan, yo pienso traerme una prima a pasar una
larga temporada aquí con migo, por lo menos mientras no encuentre hombre con quien irse.
- Tan rápida es.
Pregunto doña Domitila Maria.
- Para ella rápido es poco, es una perrita en sólo, yo mucho la quiero vas a ver que con ella la
vamos a pasar muy bien.
- Pero éste su viaje no va a ser muy largo me imagino…
Pregunto.
…Digo esto por que las cosas aquí se pueden poner muy feas y tal vez no puedan ni entrar,
aunque don Carlos lo ha hecho anteriormente, el ya no es tan joven como entonces y el poder no le
regresa esa fuerza, no estuvo solo, según me contaba mi Mamita Domitila su primer esposa doña
Marlene era una mujer de campo, acostumbrada a esas montañas.
- Domitila Maria, yo creía que eras mi amiga y me pones como un objeto inservible.
- No, no es así doña Francisca.
Repuso doña Domitila Maria.
- Con nosotras las Italianas cualquier persona se equivoca, por mi parte yo vengo de una familia
brava y de una región de Italia igualmente arrecha como dicen ustedes, gente luchadora hasta la
muerte, en donde las Madres se enorgullecen de sus hijos cuando estos ya pueden usar un arma y no
solamente eso, tienen que ser capaces de pasar encima de cualquiera por la familia, aunque uno tenga
que traicionar amistades y familiares que la deshonren, todo por defenderla y poner en alto su honor y
el de la Patria, así somos…
Esto sacudió todo el ser de doña Domitila Maria.
… Aun que la traición sea detestable nosotras las aplaudimos cuando es por la familia. El traidor es
un ser indeseable, al final termina traicionado por sus propios seres, que dio todo y así el honor del Clan
regresa.
Ese último juego de palabras fueron demasiadas fuertes para doña Domitila Maria, considerando
ella que doña Francisca se estaba dejando llevar por cierta emoción y exageración. Reflexiono que
después de sacrificar su honor, su respeto y dignidad, tendría que ser vendido, botado a su suerte y
traicionado por aquellos por los que dio todo, como la hembra Alacrán que al final es devorada por los
Alacrancitos. Doña Domitila Maria refuto esa forma de llevar en alto la honorabilidad de una familia.
- No es de mis temas preferidos pero le digo una cosa, que el honor de la familia lo lleva el que dio
el golpe fuerte e infundió respeto y temor a sus enemigos, por lo tanto la familia le queda en deuda con
respeto y no con temor, como para tener que traicionarlo, sin él, la familia o Clan como usted le llama,
pierde la supremacía sobre sus contrarios, todo lo alcanzado por el se esfuma, al contrario con ese acto
marcan indignidad a esa familia y será para ellos su debilidad, por lo tanto su división y destrucción.
Doña Francisca se sintió completamente minimizada en juicio e impotente al no poder refutar los
argumentos de doña Domitila Maria y no poder siquiera salir del tema y retomar la conversaciones
mundanas, situación que su amiga comprendió sin mayor problema y se prestó muy delicadamente a
liberarla del atolladero, en todo caso supo de algo común, que en ningún momento lo había visto
desde ese ángulo, con solo ese elemento era suficiente para con ella, opto por salir y decir.

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 - Doña Francisca, esos temas son para hombres y presos, que no tienen nada de que hablar y
hasta donde yo recuerdo, al saludarnos usted me dijo que por fin iba a tener una tarde libre y contenta,
entonces mejor sigamos así, riéndonos de los Huevos de Jesús Cochino.
- Tal vez por eso los hombres tienen un reflejo grosero de comprensión para con las mujeres, yo
creo Domitila Maria que el temor de los hombres es compartir con las mujeres una de sus obligaciones,
porque terminaríamos siendo nosotras las que tomáramos importantes decisiones de la familia en
muchas cosas que en nuestros tiempos no andan nada bien y ese es el cuido de ellos, el no perder el
control y al contrario tener dominio para sus propios provechos.
Doña Domitila Maria comprendió la inconformidad con el viaje por España y los Estados Unidos,
su aptitud fuera diferente si don Carlos la dejara en Nicaragua o en Italia, libre de cualquier compromiso
y con el tiempo disponible a su gusto y antojo, saciando sus insatisfacciones y la necesidad de
administrar su propio tiempo y espació.
- Doña Francisca, no olvide que la responsabilidad de un hogar recae más en la mujer que en el
hombre, una Persa amiga del conde D´Ibarra me contó que en su País, si una pareja tiene dos hijos,
mujer y varón, así como usted y solo pueden educar a uno, eligen a la niña, porque ella tendrá la
obligación de sacar adelante a sus hijos, el varón fue dotado por Dios para ganarse el pan de cada día
con el sudor de su frente.
Doña Francisca aplaudiendo lo dicho por doña Domitila María dijo.
- Me gusto muchísimo eso, pero yo me refiero a otras responsabilidades, como el de administrar
bienes y tiempo propio para una misma y poder optar a un poco de libertades.
Entendió mejor las insatisfacciones de aquella mujer y para sacarla del tema de una forma hábil le
dijo.
- Todos, ricos y pobres tenemos las mismas dificultades, tristezas y alegrías en esta tierra. Yo en lo
particular le cuento, trabajan para mí mujeres de las que pueda imaginarse, le conozco distintos tipos,
de ellas todas sus necesidades y gustos, con diferentes problemas, con sus propias ambiciones, se lo
aseguro. Son o somos iguales que cualquier otras mujeres, por muy rica que sea, a mi me decía la niña
Ángela Maria, mira hacia adelante y se feliz, no te pares por riquezas, ni bienes, por amor a un hombre,
lo único en la vida que justifica el detenerse uno son los hijos, pero eso no significa tener que pararse,
no estancarse, parí tu hijo y se feliz. Míreme bien doña Francisca, tengo riqueza y mucha, bienes y no
soy tan feliz como se supone, me estanque en el amor a un hombre y soy desdichada, no me pare,
siempre supe aunque me doliera, que era lo importante en mi vida, le voy a contar otro caso, los gustos
de Yolanda Pérez.
Doña Francisca se acomodo en la silla y dijo.
- No sea tan cruel como con el pobre Jesús Cochino.
- No es tan así, pero va a conocer otros gustos para llevar la vida.
- Chocho que duro suena eso.
Le contesto riéndose doña Francisca.
- Esta Yolanda es una Puta hermosa, alta, se puede decir que tiene buen cuerpo, usted sabe que a
los explotadores de esas mujeres son hombres que viven de las ganancias de la vente de su sexo, ellas
confunden todo por unas migajas de amor, algo de protección y ya cuando paren también tienen que
venderse por sus hijos, es una vida triste para nosotras, para ellas no hay fuerzas que las saquen de su
mundo, todas ellas llevan una vida igual, claro unas con mayor o menor suerte.
- Pero llevan sus propias vidas y eso es libertad.
Dijo doña Francisca.
- Si pero atiéndame, Yolanda tiene un hombre, su chivo, tan raro como ella misma, a el no le
importa que ella sea Puta, al igual que a todos los chivos, con la diferencia de que este no vive del
trabajo sexual de ella, el tiene su trabajo formal y tampoco le importa que sus amigos sepan que su
mujer es comprable o que en algunas ocasiones ellos mismos paguen por sus servicios…
Doña Francisca se acomodo mejor en la silla mostrando mayor interés.
… Yolanda le deja su comida servida y se presenta a su puesto de trabajo del burdel. El hombre
llega come y se acuesta, cuando ella regresaba se bañaba y después armaban una cogedera que hasta
los perros de la calle tienen que ver con aquella samotana, no es diario pero con frecuencia. Ella le parió
dos hijo varones a este hombre, no hay dudas de que son de el, un parecido tal, mire doña Francisca
los chavalos son idénticos a el. Al inicio yo tuve dudas que fuera su hombre, que posiblemente era
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familiar que le daba posada y que las samotanas eran fingidas, que va doña Francisca eso era amor
legitimo.
- De esos amores arrecho Domitila Maria.
- Así mismo doña Francisca, sucede que los días Sábados que son de pago, cuando el sale del
trabajo se toma algunos tragos. Son bochinches los que le arma aquella mujer, después el la golpea y
no es baboso, sabe donde darle, se le encajaba como un animal y todo terminaba en Santa Paz, los
niños fueron creciendo y ya algo grandecitos nos pudimos dar cuenta de lo que en realidad sucedía los
días Sábados, solamente lo que se escuchaba y mirábamos al final, sabíamos.
- Tan así de calculadora para que usted no comprendiera o determinara que sucedía.
- Así es. Ella sabe bien la hora de llegada del hombre, envía a los niños uno en cada esquina para
que vigilen si venia su Papá. El hombre aun estando picado es una persona muy educada, respetuosa y
amable, se lleva bien con todos en la cuartearía, resulta que el niño que lo mira, sale corriendo y
gritando.
- Mamá, Mamá, ya viene mi Papá picado.
Esa Yolanda corre y se mete debajo de la bata, almohadas, sabanas o cualquier trapo para
amortiguar los golpes, el hombre entra a la cuartería y muy cortésmente saluda al que se encontrara,
les da las buenas tarde o pide permiso para pasar, al entrar a la casa, se sienta y le dice a Yolanda.
- Amor me regalas algo de comer, por favor traigo hambre de naufrago.
Yolanda entra al cuarto y a gritos partidos le contesta.
- Y que no te dio de hartar, esa Hija de la Grandísimo P… si hasta aquí se oían los pujidos que daba
la muy chancha cada vez que la hincabas…
Doña Francisca se tapaba la cara con las dos manos riéndose.
… Y así esa mujer se enflata con aquel hombre, le mentaba a su Madre de arriba para abajo, hasta
que el hombre se arrechaba y le comienza a pegarle una cachimbiada de ‘’sacar raza’’ y después se le
encaja encima y se la muele, los niños, afuera todos asustados los pobres esperándolos y al terminar los
dos pijudos, abren la puerta salen todos sudados y ella acurrucada al hombro del jodido, agarran de la
mano a los dos niños y se dirigían a la bodega a comprar y regresaban de la misma forma, sierran la
puerta y Yolanda feliz de la vida se acuesta y se duerme.
- Por favor no sea tan cruel.
- Ahora dígame usted doña Francisca, en donde está la felicidad, se tiene riqueza y no se es feliz,
las que podemos tenerla buscamos como ser infelices, a Yolanda nada le costaría dejar esa vida, trabajar
en otra cosa y vivir con su familia, para mi viviría feliz de la vida y sin necesidad de riquezas.
Doña Francisca riéndose y diciendo.
- Que gusto de mujer
- Qué no le he ofrecido yo para que rehaga su vida, pero como usted dice, ese es su gusto.
Malo, pero así es feliz.
- Así, somos todos, hombres y mujeres, ya ve si el hombre se nos pega como un pegaste nos
estorba y si se va a otro lado, nos hace falta.
Riéndose, de una forma más picara, agrego.
- Como voy a preferir que vivo en este rincón, lejos de la vida alegre de mi Italia, aun en esta
tristeza, que en ocasiones ni las hojas de los árboles se menean y que Carlos llegue borracho a pegarme
una buena pifiada para después hacerme el amor.
Doña Domitila Maria le interrumpió para aclararle algo más con respecto a ese tipo de mujeres.
- Pero mire doña Francisca, Yolanda es una mujer, yo le conozco muchas de todas sus formas de
vida y comportamiento, no necesariamente tienen que ser Putas, los hombres igualmente las golpean,
siendo mantenidos y por gusto, lo contrario de Yolanda que es ella la que juca al hombre. Lo que pasa y
yo personalmente me he preguntado y digo, ‘’Que debe de ser Rica esa Chochada de que te
cachimbeen y después te peguen una buena molida’’.
Doña Francisca ya no pudo aguantarse y se tiro la carcajada acompañada de doña Domitila Maria,
que en determinado momento se pregunto el motivo real de esa carcajada de doña Francisca, si se reía
de las cachimbiadas o del placer sexual después de los golpes.
- Usted Domitila Maria sale con unas cosas…
Se volvía a tapar la cara, muerta de risa y su cara con poco maquillaje, se le ponía mas colorada que
en la ocasión anterior. Fue suficiente para deducir que en realidad se reía.
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 - Yo creo que usted inventa todo solo para hacerme reír.
Las dos se reían y cuando se miraban a la cara se volvían a reír con más fuerza como si entre las
dos compartieran o sellaran un secreto muy íntimo. Aunque doña Domitila Maria, se reía mas por haber
descubierto un gusanito que a doña Francisca la ponía algo más inquieta de lo normal y esa
morbosidad también a ella le gusto compartirla con su nueva amiga intima, se podría llamar así, por
que esa era posiblemente la mayor debilidad de doña Francisca, doña Domitila María no conocía esa
parte de ella y le podría ser de mucha utilidad.
- Que va doña Francisca, que voy a poder inventar eso yo, dígame una cosa.
Ya con malicia y maldad que inexplicablemente le broto de muy adentro.
- En su tierra, que como usted misma me a contado, que las mujeres son tan alegres, que mucho
bailan y cantan, dígame de corazón, no se miran esas cosas o no hay ese tipo de relaciones amorosas
que son bastante parecidas a los juegos de los animalitos de Dios, con la diferencia que ellos no se
azulean los ojos, ni se moretean los brazos, costillas y muslos, mucho menos que sangren de la boca,
me entiende.
Las dos continuaron riéndose y desde entonces doña Domitila Maria no le despegaría la vista y se
fijaría hasta en el más mínimo gesto.
- Claro que se mira, eso y hasta otras cosas más.
Doña Domitila Maria se acomodo mejor en la silla para aparentar curiosidad.
- En Sicilia mi familia vive fuera del poblado, más o menos así como vivo aquí, no tratamos con la
gente del pueblo. Tenemos parentesco con todo el pueblo, en fin algunos parientes son más cercanos
que otros, es con esa ala de la familia con la que más nos rozamos. Pero si Domitila Maria, eso es
bastante común, lo demás es de que hay hombres que tienen hasta tres mujeres después de sus
esposas y hacen lo mismo con las tres y hasta en el mismo día, pero no lo hacen con su esposas, ellas
son como un templo religioso y válgale Dios al hombre que intente tratar de esa forma a su esposa, si lo
hace tendrán que tener mucho cuidado de que nadie, ni los hijos o criados se den cuenta.
- Entonces tal vez por eso prefieran vivir en el campo.
Interrumpió doña Domitila Maria. Ella se puso colorada sin parar de reírse y continúo.
- El resto se mira como algo normal y si las mujeres están de acuerdo, de lo contrario el hombre
caería preso, pero lo fuera de lo normal es que a dos o tres mujeres les guste el mismo trato y de parte
del mismo hombre, ese masoquismo es a como usted dice...
‘’Debe de ser Rica esa chochada’’
… Ya me imagino, bien cachimbiada, sudada, desgreñada y después soportar a aquel animal
encima de mí dándome merengue con toda la fuerza y diciéndome todo tipo de groserías en el oído y
con todo el bajo a guaro en la cara.
Doña Domitila Maria, a cada momento se sorprendía más de las novedades que estaba
presenciando y encontrarse frente a una mujer sexualmente insatisfecha y con su sangre hirviendo.
Se despidieron con mucha alegría riéndose las dos, poniéndose de acuerdo de que al regreso no
le perdonaría a doña Domitila Maria que ella no tomara la iniciativa de regresar a visitarla, todas llenas
de fraternidad y con los ojos algo llorosos se abrazaron se besaron las dos mejillas y muy suavemente se
deslizaron sus manos.
Doña Domitila Maria se encamino a su coche mientras doña Francisca miraba marcharse a su
única cómplice que tendría en la vida, limpiándose los ojos, para volver a ser la patrona, entro a la casa
sin darse cuenta de los dos mostos que había despertado en doñas Domitila Maria, quien igualmente
en medio de su satisfacción por el alcance de su visita, nunca se le ocurrió que detrás de esa emoción,
vendrían a florecer tantos rencores reprimidos de generación en generación en las Domitila Miranda,
sus abuelas maternas.
Capitulo XV
Don Carlos y su familia partieron a España en compañía de las familias Benard, Chamorro,
Lacayo, entre otras, que sin reservas como en la salida anterior cuando Walker, que fue reservado y
semiclandestinos, fue de conocimiento general que iban a dejar a sus familias por seguridad de
cualquier eventual conflicto militar entre los partidarios Conservadores y Liberales o bien querían que
así fuera manejada ya que la realidad era otra. Sin duda alguna doña Domitila Maria se dio cuenta de
que los Liberales hacían lo mismo con sus familias, con la diferencia de que estos evacuaban lo posible,

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valorando los peligros que representaba la salida de esas personalidades del escenario político
Nacional. Para los Liberales significaba que el juego podría ser con ‘’dados cargados’’, mismo proceder
de don Joaquín Pasos con sus amigos y socios hacendados de la costa del lago, Chontaleños y
Boaqueños. Antes de todos estos movimientos familiares, se dieron muchos encontronazos entre
fuerzas Liberales y Conservadoras, en Managua y Tipitapa.
Entre estos choques se dio una acción de gran resonancia. De forma inexplicable desaparecieron
cinco líderes de los Conservadores y fieles colaboradores de la familia Chamorro y otra cantidad igual
de allegados del General Zelaya, con pocos días de diferencia. Todo fue manejado en círculos muy
serrados en los dos bandos e incluso los mensajes tendrían que ser entregados personalmente a pura
vos, nada por escrito. Esto dio inicio a una búsqueda por tierra, lago y mar, fueron días de constantes
movilización, los Conservadores tomaron la precaución de sacar de la ciudad a las familias de los
desaparecidos con el pretexto de que estaban en un lugar secreto por seguridad, también tuvieron que
esconder a otras.
Al décimo día, amanecieron tres cuerpos irreconocibles, con las caras baleadas, sin lengua, las
manos mutiladas, desnudos y sin testículos, un cuadro dantesco. Esa misma madrugada dos hombres
fueron encontrados caminando en dirección a Granada, por el camino de las diligencia, desnudos pero
calzados. Los cadáveres fueron dejados abandonados en la Plaza Central en horas de la noche e
irónicamente nadie vio ni siquiera pasar gente a píe mucho menos carretas, estando este sitio bien
iluminado con faroles de kerosén por órdenes del Gobierno. Los dos sobrevivientes fueron los que
tuvieron que reconocer los cuerpos, por señas particulares y su poca ropa ya que estos fueron
mutilados frente a ellos, así como también declararon que las mutilaciones habían sido hechas estando
vivos y que los secuestradores asesinos eran Liberales, querían que ellos les pasaran información de los
movimientos de las fuerzas Conservadoras y sus planes, esto entre golpes y amenazas contra sus
familias, posteriormente los separaron, para asesinarlos, no se explicaban el por que a ellos no les
hicieron lo mismo y después de viajar atados de pies y manos todo el día y gran parte de la noche. Con
los ojos vendados en la madrugada los liberaron.
Muy parecido a esto pero sin mutilaciones pasaron los Liberales.
- Yo no he ordenado ningún tipo de secuestro, ni asesinato…
Le dijo tajantemente doña Domitila Maria a don Carlos durante los funerales en Granada de
aquellos tres muertitos desdichado.
… No acostumbro mandar a matar por diversión como muchos que gustan de la guerra, en
ningún momento me prestaría a algo así sin tener fuertes motivos, a menos que ellos ocultaran algo en
contra mía, situación que desconozco, le voy a decir una cosa don Carlos que tal vez usted no se da
cuenta, desde el primer momento yo personalmente dirigí y ordene la provocación con la muerte de
aquel joven en Malpaisillo y yo di la orden de las siguientes muertes, yo le confieso eso a usted pero mi
motivo fue de venganza por lo que le hicieron a Clotilde, esta de mas decirle lo que a mí me unía con
ella y si no lo hubiera hecho yo ya fuera adelante como esos muertitos.
- No te me pongas así Domitila Maria, todo lo que me has dicho yo lo sospeche y después lo
comprobé con todos los detalles, te pregunto sobre tu participación en estas represalias, por la sencilla
razón, que tu eres una de las pocas personas que pueden manejar una situación así en León y Granada
en tan corto tiempo de nuestra conversación, además de eso no tenes ninguna inclinación por partidos
políticos y me preocupe de que por temor o precaución te hayas precipitado a acontecimientos que en
contra tuya algunas personas quieran hacerte. Es o no de esperarse, a menos de que esta
confabulación sea de traidores nuestros que pretendan descabezar el Conservatismo metiéndonos en
miedo y entregarle el país a los Liberales, pero si fuera así, entonces qué necesidad la de matar a sus
propios Liberales, personas tan cercanas a Zelaya.
- No soy matoncito, pero para eso tengo la sangre lo suficientemente fría para no precipitarme, me
acuerdo que mi mamita Domitila me contaba que en determinado momento tuvo un desagravio y
olvidándose del pacifismo le escribió una carta respondiendo don Joaquín a Walker y le decía.
El hecho que no use esas palabras, no quiere decir que no las sepa.

- Mi papa era arrecho en esos casos.

Se sonrieron los dos.

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 - Esa fue sido mi escuela de la vida, mi otra escuela es toda la pureza y desinterés de la niña
Ángela Maria y mi Mamita Domitila, ya me he preocupado de indagarme bien de lo que sucedió o que
planean esas personas hacer. Espero no ser atrevida con lo que voy a decirle don Carlos, hay que tener
cuidado por ustedes y con algunos políticos amigos suyos, me atrevería asegurar que ese gato está
escondido aquí cerca por que el olor a muerte se siente y en León se debe de sentir igual, cuidado los
quieren descabezar a los dos paridos.
A don Carlos le dio escalofrió esas últimas palabras de doña Domitila Maria.
- Siempre que hablamos me dejas sorprendido con tu memoria y no me explico, como lo
podes mantener tan fresco, decirlo con tanta naturalidad y facilidad, te felicito. Ya estamos pronto a
irnos a España y espero que te cuides mientras estoy fuera y quiero encontrarte saludable, así bonita y
rellenita en carne.
Sin hablar nuevamente del viaje por Estados Unidos, ella rápidamente lo noto pero tuvo que
disimularlo y de una manera muy graciosa de despedida le contesto
- No se preocupe mi Patrón, que tengo cincuenta Chanchas por parir.
Riéndose de buenas ganas tomo su coche y se marcho, siendo estas de gran valor e interés para
la causa de sus fuerzas, los Liberales fueron los primeros en recibir el golpe, entonces se preguntaban
quien había ordenado la venganza. Si no fueron los Liberales como indicaba el informe recibido, por lo
tanto tendría que haber sido un Conservador. La pregunta es, cual era su objetivo al aplicar la misma
receta a los dos bandos, a menos que uno de ellos esté limpiando la casa, otra pregunta era cual es el
objetivo al dejar dos vivos con una versión mínima de lo sucedido, nada de lo hechos tenía sentido,
claro estaba para ellos que los sobrevivientes eran fichas de menor rango e importancia política.
Carente de toda venganza personal y completamente como una advertencia de que los traidores entre
ellos mismos se matan, por donde le buscaban no hallaban sentido. Las conclusiones de los Liberales
eran que hay un tercero, persona o grupo y advierte que es capaz de tocar las cabezas Conservadoras y
Liberales a su gusto y antojo, no hay lógica absolutamente en nada decía el general Zelaya, hombre de
formación y carácter militar. Aun cuando los conservadores tuvieran las mismas conclusiones que los
Liberales, don Carlos y los líderes Conservadores, tenían en sus manos las fuertes dudas, de hasta donde
doña Domitila Maria tuvo participación en el asunto, don Carlos había sido tajante en aquel resumen
que dio al jefe de haber sembrado la semilla, en presencia de algunos dirigentes Conservadores, de los
cuales tres de ellos ya estaban muertos. Esa acción se les revirtió creándoles torturozas dudas, de quien
podría estar tan adentro de ellos como para realizar una acción similar en contra de los dos bandos
simultáneamente.
Por su parte don Carlos en víspera de su salida de la Nación, se le hacía angustiosa la idea de que
fuese doña Domitila Maria la causante de tal tragedia, para el rumbo que llevaban los acontecimientos,
por orientaciones de líderes Conservadores y su caudillo, el tendría que mantenerla muy de cerca, bajo
vigilancia y protección, por si en caso sea ella y algo le llegase a suceder por represalias Liberales,
tendrían serias dificultades con sus propias fuerzas Conservadoras, dado que ellos no sabían hasta
donde tenía dominio de la manipulación que pretendían tenderle y quienes eran conocedores de la
traición en el momento en que dejase de ser útil para sus objetivos, la otra orden era agilizar el viaje y
reducir el tiempo de regreso, para ganar tiempo a los Libérales.
Don Carlos por su parte compartió con el General y sus correligionarios las precauciones
personales que tomaría y les anuncio que su esposa doña Francisca, regresaría a Nicaragua como
decisión de última hora, que antes de lo sucedido no estaba entre sus planes, no hubo ninguna
oposición. Las verdaderas intenciones de don Carlos era el de utilizar a su mujer para asegurar un
mayor acercamiento con doña Domitila Maria y así tenerla de su parte con mayor firmeza, su fidelidad
para con él y la familia a la hora de que las cosas no salgan según sus cálculos. Sin darse cuenta don
Carlos, de que sus últimas esperanzas estarían entregándose en bandejas de plata a doña Domitila
Maria.
Al día siguiente doña Domitila Maria, recibió en su casa la visita sorpresa de don Carlos en
compañía de doña Francisca, sin aviso y solicitándole que se preparara rápido ya que deseaban pedirle
un favor, mientras se alistaban irían a visitar a la familias Cardenal y Chamorros, le enviarían el coche a
traerla, inmediatamente doña Domitila Maria se le adelanto para solicitarles que le aceptaran almorzar
con ella en una finquita que tenía en las faldas del Volcán Mombacho, que gozaba de una vista
preciosa, a lo cual don Carlos no tuvo tiempo para negarse y rápidamente pensó que sería de buen
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provecho para escudriñar hasta donde doña Domitila Maria, estaba involucrada en el asunto de los
muertitos y hasta donde se podría llegar con ella, en un dado caso este limpia en ese asunto. Se
marcharon pero los ojos de águila de doña Domitila Maria miraron un brillo, un destello y una sonrisa
de cómplices en doña Francisca, que parecía una niña feliz por haberse salido con las suyas en sus
caprichos.
No terminaban de dar la vuelta en la esquina cuando ya se encontraban con ella Rosita Alemán y
Marta Joyilla, recibiendo las orientaciones de preparar con el máximo esmero el recibimiento de la
pareja Pasos Sacaza en la hacienda del lago, tenían que tener todos los cuidados del mundo, sin
importar que tuvieran que hacer, aun así fuese necesario poner a trabajar a toda la calle El Desenredos.
Marta Joyilla se aria cargo de preparar lo requerido en la Hacienda y Rosita Alemán de proveerla de lo
necesario, en caso haga falta, a toda persona que esté a la vista tenía que estar presentable, mostrar
buenos modales y la limpieza impecable, por ultimo les dijo a las dos.
- Esto puede ser de vida o muerte, la culebra venenosa puede sacar la Cabeza Peluda.
- Toco madera Machala, Machala, toco madera, toco madera, Diablo maldito.
Decía repetidas veces Rosita Alemán dando golpes a la mocheta de la puerta, empuñando la
mano como si tocara a una puerta.
Cuando doña Domitila Maria enrumbo hacia Granada, después de la visita a la hacienda Panaloya
de los Pasos Sacaza, llevaba la mente toda confundida, con las repuestas que buscaba todas enredadas
y tenía que desenredarlas, ponerlas en orden para saber que era en realidad lo que pretendía don
Carlos y sus correligionarios Conservadores. Después de tanta inquietud y desordenes, logro ir
poniendo lo que para ella posiblemente serian las intenciones de ellos. Como siempre la fiel consejera,
su Mamita Domitila tal vez sin esa intención y mas bien como un reflejo materno de darle a su nieta
consejos con elementos que por experiencias de la vida había aprendido, todo lo que ella vivió se lo fue
contando poco a poco, cuando ya alcanzara cierto razonamiento y entendiera la realidades de la vida,
momento que por casualidades del destino fueron reforzadas con la llegada de la niña Ángela Maria,
que también le va a prevenir los peligros y la fuerza con que había que enfrentarlos.
- Si no sabes enfrentarte a los problemas, el vivir perdería toda tu naturaleza y no tendrá sentido, la
mecánica de la vida en ocasiones es muy dura aun para aquellas personas que no estén listas o
preparadas para enfrentarlas, estas encuentran soluciones generando mayores dificultades, tu
inteligencia te proporcionara el tiempo y espació en que lo resolverás, la desesperación a nada te
conduce.
Le decía la niña Ángela Maria.
Los recuerdos comenzaron a florecer, cuando su mamita Domitila le explicó como don Joaquín
había nadado en las dos aguas que tenía enfrente, los Conservadores que opinaban a favor de hacerles
el juego a los Liberales con la contratación de Tropas Extranjeras y no los apoyo moralmente, pero lo
hizo financieramente, asegurándose que si las tropas extranjeras cumplieran su papel, sus intereses
quedarían intactos y con posibilidades de participar en el despojo de los vencidos Liberales, dejando de
esa forma abandonados a los Patriotas Voluntarios que se sacrificarían en esa guerra, en segundo
lugar, a sus correligionarios que arrastro en su oposición no les dio ni el mínimo de participación de sus
planes, para proteger sus intereses en caso la situación empeorara y hubiera que salvar el pellejo y el
tiempo que requirió para eso ellos se lo proporcionaron. Fue todo tan bien calculado que los
Filibusteros quemaron más enseres de valor familiar en una choza que en una de esas casas de
terratenientes Conservadores, al final sus tácticas funcionaron. Después de la guerra don Joaquín tenía
suficientes recursos económicos, mayor liderazgo político que antes, fueron esos dos éxitos lo que les
impulsa dar prisa por parte de los Pasos a la reconstrucción de Granada, que además los hizo más ricos,
con las mejores tierras de aquellos terratenientes que perdieron en su aventura militar. Este recuerdo le
vino a doña Domitila Maria por la expresión de don Carlos.
‘’En este momento no hay en quien confiar, como en los tiempos de la guerra contra Walker’’.
Y lo remarco diciendo.
‘’La gente ahora jala agua solo para su molino’’.
- Claro.
Se dijo doña Domitila Maria.
- En esta guerra no tienen alternativa que enfrentarla solos y no hay a quien lanzar a la pelea en
nombre del Conservatismo y de la Patria, al igual que Walker necesitaban un aliado fuerte como el
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Gobierno Estadounidense, eso requería de tiempo y en este momento los Conservadores lo darían, y yo
jugando a las venganzas en nombre de los Pobres, se los proporcionaría. Le calzo claramente que ella
era una buena carnada y dócil a la hora de la traición, mas nunca perdería el apoyo de los Pasos. El
doble filo lo encontró, en el motivo de la visita que era advertirle sobre el peligro de que sus enemigas
aprovechen el momento para sus represalias. Si las que la odian son las esposas, hijas y amigas de los
líderes Conservadores amigos de don Carlos. Que mejor presa de regalo que un venado con las patas
quebradas solo para enterrarle el cuchillo, en donde los Pasos harían de todo sin alcanzar nada y al final
no podrían intervenir, así ocultarían la traición, al enfocar sus venganzas sobre los Liberales, igualmente
los aristócratas y sus familias estaría protegidas por sus propias acciones ya que el otro bando
priorizarían tomar represalias en contra de ella primero.
Con todas sus piezas que calzaban perfectamente en la repuesta que buscaba, se resistía a creer
que de la familia Pasos saldría una vulgar traición en su contra, utilizándola para enfrentarla con los
Liberales a favor de los Conservadores y dejarla sin pena ni gloria entre los dos bandos. Desde ese
momento decidió someter a prueba y convencerse con sus propios ojos que no fuese su imaginación la
que le indicara cual era la realidad del camino que pisaba y se reservo la fragilidad de doña Francisca
para ella sola, que ‘’al fin y al cabo’’ no la miraba como una pieza simplemente a utilizar, mas bien al
final ella misma se lo agradecería, por darle plenitud en la vida, principalmente siendo ella una simple
observadora de las variedades de gustos, el enseñarle el buen camino del placer y la felicidad se lo
agradecería. De esa resolución salía, la prueba con los Muertitos, organizo, ordeno su ejecución, de tal
manera que doliera. La duda igualmente sería darles el golpe primero a los Liberales y confundir su
operación con repuestas o represalias políticas.
El coche llego a traer a doña Domitila Maria y se trasladaron a la casa de los Pasos Arellano, en la
cuadra al este de la familia Cardenal en la calle La Calzada. En la propiedad ya se encontraban don
Carlos y doña Francisca, era hermosa con muchos detalles coloniales, por el frente de dos pisos,
contaba con una enorme sala principal y dos salas menores pero grandes a los lados, cuatro corredores
con sus respectivos jardines en el centro. El primer corredor a los lados era de cuartos amplios
destinadas para el despacho, costuras, manualidades, juegos de los niños menores y de otros usos,
entre el primer corredor y el segundo estaba el comedor para 24 personas, a la par de este, saliendo
para el patio derecho, en donde estaban los corrales de animales domésticos y reses con un ranchos de
cuatro cuartos, la cocina y una área destinada para los alimentos ya elaborados listos para servir, eran
parte del conjunto de la casa, seguía el segundo corredor, de igual manera que el anterior rodeado de
habitaciones destinadas para dormitorios de los hijos y salas de estar. Y en el tercer corredor las
habitaciones de huéspedes, en el costado izquierdo de la casa quedaban las cuartearías de los criados,
la caballeriza y en donde estaban ordenadas los coches, carretas y carretones de bueyes y caballos. El
cuarto corredor era utilizado para bodegas de distintos tipos de productos, así como lo escusado de
damas y caballeros, baños y cuarto, armería, esa era una área restringida para los empleados y solo
tenían autorización de entrar la ama de llaves y el capataz de la casa, el frente de dos pisos sobre el
primer corredor con entrepiso de madera, las habitaciones del frente con sus balcones haciendo juego
con las grandes puertas de arco en el primer piso y en las habitaciones daban una presentación
imponente en la ciudad, eran pocas la familias con propiedades tan elegantes, también tenían
corredores con habitaciones, con un decorado que daba un ambiente de terraza, sus paredes
decoradas con fotografías, espejos y uno que otros adornos, mal amueblada y con muchos espacios
vacíos, es decir la gran casa no tenia las condiciones mínimas para ser habitada por ellos, por lo que el
favor era dirigido a la casa.
Aun que ya a esas alturas, tanto don Carlos y doña Domitila Maria, tenían sus cuchillos bien
afilados, así que en cualquier momento podría surgir alguna intriga y habría que estar listos, como se
dice.
‘’Ojo al Cristo’’.
- El favor que te queremos pedir Domitila Maria, es de que dirijas la restauración de la casa, mejor
dicho queremos que le des el toque femenino y de acondicionamiento, para ser habitada en cuanto
regresemos del viaje por España y ya que constas con personal adecuado, en todo caso, para cuando
regresen nuestros hijos, habrá suficiente tiempo, pero queremos que todo esté listo tan pronto como se
pueda.

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 Sin mencionar Estados Unidos. Para ella con eso su prueba con los muertitos estaban más que
justificada su ejecución.
Para que quisiera más doña Domitila Maria, mientras en otro tiempo evacuaron, ahora invirtiendo
en una casa y tenerla cerca como chivo expiatorio.
- Que soy yo.
Se pregunto por dentro y le respondió a don Carlos.
- Para mi será un gusto y placer, por ustedes y en especial por doña Francisca que no se va a sentir
tan sola y en este caserón hay espacio para tener mil visitantes, espero que para entonces no se olvide
de mi…
Esa expresión de acercamiento entre ellas le gusto a don Carlos.
…Y por otro lado me puedo venir a pie a visitarla, les digo sinceramente yo detesto los coches.
- No te me preocupes amiga Domitila Maria cuando yo viva aquí no te me vas a escapar de mis
clases de baile Italiano, que estoy segura que te gustaran mi buena amiga.
Doña Francisca era un mar de alegría, su piel era rosadita y sus ojos tomaban un brillo encantador,
al extremo de no notar que se encontraba en medio de dos víboras asesinas.
- Eso espero verdad don Carlos, aunque sinceramente no creo que cambie los bailes de cinturas y
caderas que bailamos nosotras, que rinden y cansan, los hombres con solo ver se babean, si no
pregúntele a don Carlos que de seguro muchas mujeres le coquetearon con esos movimientos de
rabadilla.
Don Carlos se sonreía, con mucha confianza de poder poner el orden en casa, si algo intentaba
salir de su control.
- Bueno Domitila Maria la casa está lista para que hagas lo necesario a tu gusto, lo que consideres
requerir en materiales y personal voy a dejar a cargo a mi administrador de la hacienda, que bien lo
conoces y a Ismael que será el encargado de llevar la obra de restauración. Por último también quisiera
que me consigas algunas mujeres que quisieran trabajarme en la cocina, limpieza, lavandería y otras
cosas, que sean de tu confianza, dado que al pasarnos no se vendrán todos a trabajar aquí, recordemos
que en Panaloya está el dinero para vivir.
Doña Domitila Maria recordó que don Carlos despidió a su mamita Domitila de los servicios en su
casa después que murió don Joaquín en su justificación fue claro por tener su personal de confianza.
Para los dos ese primer paso fue provechoso y sin necesidad de desenfundar los cuchillos que se
desesperaban por salir a dar un paseo aunque fuese de refilón, doña Francisca no hallaba que hacer
con doña Domitila Maria, la abrazaba, la besaba y ya en el primer corredor caminaron agarradas de la
mano. Ahora a don Carlos solamente le faltaba el otro asunto de importancia, para así poder viajar
tranquilo, salieron de la casa y se pararon frente a ella para apreciar su imponencia, conversaron
algunas cosas del frente, de la calle La Calzada y su vista hacia el Gran Lago Cocibolca y por el otro lado
La Plaza de la independencia y el terreno que utilizaba la Catedral que sería reconstruida.
Capitulo XVI
Los botes que trasladaron a Marta Joyilla con el doctor Luís Sánchez, la caja y los materiales se
acercaron a la lancha, trasbordaron a los dos ellos, el aprendiz se hizo cargo del trasbordo y despachar
de regreso a los remadores. Estando abordo entraron directamente al interior de la lancha en donde se
encontraba el cadáver, esperaron un poco que los botes descargaran y se retiraran, levantaron la carpa
y el hedor se sintió inmediatamente en todo el interior, el doctor indico a Marta Joyilla que prepararan
un bote en donde echarían todo lo que estuvo en contacto directo con el cadáver para enviar algunos
marineros a quemarlos lejos de la ciudad, fuera de la vista y presencia de otras personas.
Los marineros llenaron los nuevos recipientes con agua y alistaron dos botes uno para los
remadores y otro para las cosas a quemar, que al final no fue necesario ya que en una lancha
remolcaron el bote con los desechos, por otro lado el capitán Flores un poco mas recuperado, envió a
prestar dos botes para mantener el enlace con el muelle.
Todos los hombres salieron del local con órdenes de no entrar hasta ser necesario. Primeramente
las mujeres preparaban la caja con creolina, mientras el doctor humedecía gasas con formalina y los
introducía con fuerza grotesca hasta que sonaran huesitos nasales, de esa forma relleno nariz, boca y
otros orificios, posteriormente se la inyecto en distintas partes del cuerpo que producía un sonido de
piel endurecida, sonaba como un plástico al introducir la aguja. Comenzaron a lavar el cuerpo con

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agua, creolina y el doctor procedió a introducir gasas húmedas de formalina en su vagina y ano,
nuevamente la volvió a rociar por el frente y por la espalda ya que por el movimiento de la lancha, lo
áspero de la cal y la ceniza volcánica, la piel la estaba maltratada y en algunas partes hasta cortadas,
vistieron a la muerta y la acomodaron en la caja metálica forrada con madera. El capitán y el aprendiz
fijaron la tapa a la caja y la dieron por sellada, el ambiente quedo impregnado a formalina, era tanta la
concentración que hasta picaban los ojos.
Los marineros evacuaron todo los desechos o desperdicios y se los llevaron a quemar al primer
lugar desolado que encontraran y con ordenes de que se fijaran bien de que no quedara rastro alguno
de lo quemado y si era necesario hasta el bote quemaran, mientras el resto de marineros se encargaron
de lavar la lancha y desplegar los petates que sirvieron de cortina para que hubiera una completa
ventilación.
Para Rosita Alemán y Marta Joyilla fueron momentos dolorosos al que le tuvieron que poner todas
sus fuerzas, valor y amor para con su amiga muerta. A eso de las nueve de la mañana la lancha se
encendió en disposición de atracar en el muelle de la ciudad, en ese momento toda la concurrencia se
acerco a la costa para no perderse de ningún detalle de la llegada a tierra del cadáver de doña Domitila
Maria Miranda.
De Masaya y los pueblos de Carazo por la madrugada llegaron a Granada carretas cargadas de
todo tipo de flores y rosas, para la venta a las personas que desearan comprar una ofrenda floral para la
difunta, negocio que ya para las ocho de la mañana estaba completamente agotada. Hubo una hora
de espera, mientras los marineros hacían de todo tipo de diligencias. Enviaron al doctor Sánchez a la
ciudad por tener labores que realizar y también se negó a recibir honorarios por su servicio, aduciendo
que en ningún momento en esas condiciones lo haría por dinero. Manifestó su pesar de no haberle
servido a doña Domitila Maria en vida.
En esa espera Marta Joyilla usando un lenguaje muy cosquilloso le contó a su amiga Rosita
Alemán la gran samotana que armaron toda esa gente en la costa, aprovechando la oscurana en
cuanto apagaron las fogatas, lo maltrechas y descachimbadas que había encontrado a las Putas en el
Parque Azul, Rosita Alemán no se aguantaba las ganas de tirarse una buena carcajada cosa que no
podía por respeto al luto, pero al mismo tiempo no perdió la oportunidad de desquitarse de las malas
intenciones de Marta Joyilla de torturarla de esa forma y con lujo de detalles le contó lo sucedido con el
Capitán Flores y como quería hasta fornicar a la difunta, eso era un aguante extremo para las dos, de tal
forma que salieron juntas corriendo a la parte trasera de la lancha en donde no había nadie, con trapos
se taparon la cara y la boca, comenzaron a reírse hasta tirarse pedos y orinarse, como solo se oían los
pujidos que parecían sollozos, todos creyeron que estaban llorando y se decían.
- Pobrecitas como han sentido y llorado a su Amiga del Alma.
Mientras el Capitán Flores como paloma de alto vuelo, por dentro también se decía.
- Como se ríen de mí, estas dos Hijas de la Gran Putas que las Parió.
Desde tempranas horas de la mañana en los coches de la aristocracia solo se miraba movimiento
de mujeres y era que se estaban reuniendo en distintas casa, para continuar poniendo por el suelo a la
difunta y ponerse al día de los últimos acontecimientos, pero en esa mañana las cosas fueron diferentes,
comenzando que fueron ellas las que dejaron a sus esposos acostados y muy agotados, mientras ellas
se levantaron enérgicas, muy vigorosas y con un aura brillante de placer, parecían conejitas con la
agilidad de sus movimientos, sin dolores de espalda, ni jaquecas, que tanto padecen en sus vidas
oseosas. Disfrutaban del aire y del sol, hasta ganas de saludar, bailar, correr descalzas por la costa como
cuando jóvenes. Ninguna de ellas comento lo que en realidad sentían en lo más profundo de sus
intimidades, pero por mucho que lo quisiera ocultar no podían ante la picardía y suspicacia de las
Abuelas y Madres, mucho menos que se escaparan de personas como doña Sulunga Ubau. Se pusieron
al tanto de todo lo ocurrido durante la noche, la salida del doctor Luís Sánchez para preparar la difunta
a lo que se decían, que ni por una gravedad se dejarían tocar por él, después de saber que toco a esa
muerta desgraciada, maldita, satánica, que la hubieran dejado podrirse o la quemaran como los
muertos por Cólera. El Doctor Sánchez que tanto apreció, respeto y admiración había causado en tan
corto tiempo en aquellas mujeres por su elegancia, educación y por el hecho de ser de los pocos
hombres en la ciudad que hablaran cinco ideosas, el Ingles, Francés, Italiano, Portugués y Español,
atlético y joven, para esas mujeres era un espécimen interesante.

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 Mencionaron palabras sobre el fuerte olor a flores y rosas que se sintió en la madrugada, fue en
ese preciso momento en el que doña Sulunga Ubau metió su cuchara en la plática, era el momento que
estaba esperando. Ella era una dama de sociedad que al enviudar se miro en la necesidad de meterse
en el negocio del destace de cerdos y venta al mismo tiempo de carne en el mercado municipal, que
por sus actividades económicas tuvo que aprender a relacionarse con todo tipo de gente y tratos, por
eso era una mujer trozada y mal hablada, con muy buen lenguaje cuando era necesario, pero directa,
sin rodeos.
- Ese fuerte olor a flores…
Les dijo.
…Fue después que esa gente alma de mierda terminaran la madre culiadera que armaron en la
costa…
Todas las presentes se sonrojaron automáticamente y sus bocas se les sellaron al tiempo que se les
aceleraron las palpitaciones del corazón.
… Si eran alaridos como si esos Hijos de P… las estuvieran degollando o despellejando poquito a
poco, se oyeron chillidos peores que el de los chanchos cuando los cuelgan de las patas para el
destace, yo creo que hasta el maldito diablo salió corriendo antes de que lo jodieran también.
Las mujeres no hallaban como pararla, pero doña Sulunga estaba emocionada, aunque de eso ya
no pudiera dar más.
- Ustedes parecen pendejas si creen que me engañan diciéndome que no escucharon o que
estaban dormidas, olvídense mis niñas, les digo una cosa que si una de ustedes me dice que no viene
bien culiada de su casa, estuviera ahorita como jugada de Segua, toda babosa. Esas chanchas jodidas
deben de estar roncas o mudas de tantos alaridos, yo que vivo en Jalteva casi llegando a La Pólvora, lo
escuchaba con tanta claridad que me parecía que estaba en el Parque Azul.
Cuando doña Sulunga se rindió un poco de tanto hablar y de ver a aquellas mujeres coloradas
prefirió marcharse para atender algunos asuntos de negocio. Al salir de la casa todas ellas se pusieron a
reír y algunas para echarle mas leña al juego, les dijeron.
- Que rica fue esta madrugada.
- Como nunca.
Contestaban.
Contrario a doña Sulunga que por todo el recorrido del coche se fue carcajeando de verles las
caras a aquellas mujeres.
- Parecían apendejas las jodidas, desearan haber vivido mis tiempos.
Se decía ella misma y continuaba riendo.
Pero por lo menos eso sirvió para dejar en paz por unos momentos a la difunta, en todo caso lo
sucedido en esa madrugada era una recompensa para ellas por tantos años de espera de aquel
momento, de lo contrario anduvieran lagrimeando en su intimidad por tener relaciones sexuales, al
contrario para aquella multitud participante era simplemente una práctica de lo que sucedería por la
noche en sus casas, riveras o matorrales.
Escucharon como un trueno prolongado, demasiado para serlo, siendo vibraciones y aplausos de
la gente que rodeaban como un rió la ciudad, fueron de saludo para doña Domitila Maria en cuanto
lanzaron las cuerdas para atracar la lancha al muelle, salieron a la calle y miraron que toda la gente
dirigía la vista en dirección al lago, diciéndose entre ellos.
- La están desembarcando o simplemente la lancha ya toco muelle.
Se metieron a la casa destilando odio hasta por los poros y todas hablando a la misma vez, sin
ninguna coherencia, unas decían maldita, otras Hija de Puta, desgraciada y deseando que se estuviera
quemando en el infierno, se sentaron y sin una conversación organizada, estuvieron un buen rato,
cada una con su propio dolor que le causaba el odio en sus heridas que cada vez se les abría mas y ese
ardor en el alma aumentaba. Sus abuelas, madres y ellas, todo el tiempo se sintieron humilladas por una
mujer que desde lo bajo de una criada como fueron las antepasadas Domitila Miranda y que la última
de ellas llegara a construir un poder económico, en las propias narices de la sociedad rancia del
Conservatismo y se los restregara en la cara compartiéndolo con la gente de su misma clase y
protegiéndolos de ellos, que con impotencia de poder, tuvieron que aguantar su presencia vulgar, por
su origen social y burlesca, a sus pasos tenían que agachar la cabeza por ser menos que ellas en

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Granada y en todo el País, por su alcance político, económico y lógicamente popular, al extremo que
hasta sus vidas podrían los pobres haber dado por ella.
- No es lo mismo un rico protegiendo a los pobres que uno de ellos llegue a ser adinerado fuerte y
los defienda, son su gente, clase y sangre.
Decía don Fernando cuando se refería al proceder de doña Domitila María en cuanto a ayudas a
sus semejantes, principalmente para salir adelante en la vida.
En ese momento estaba atracando la lancha en el muelle de Granada, era algo tan emocionante y
emotivo que la ciudad entera tembló, en las altas paredes de las casonas de ricos se sentía la vibración.
Puestos los tablones bajaron Rosita Alemán y sus Putas, Marta Joyilla, seguidas del Capitán Flores quien
asumió los trabajos desde el muelle, asegurándose de que todos los mecates estuvieran bien fijados,
amarrados y viendo con los cargadores la colocación de los cuartones de madera para desembarcar el
féretro. Bruscamente el tiempo cambio, el lago comenzó a agitarse violentamente producto de fuertes
bolsas de aire, a como decía don Joaquín Pasos.
‘’Las cosas que la gente inventa cuando no tiene nada que hacer’’.
Se comenzó a murmurar.
- El lago se está despidiendo de su Mayordoma.
Otros dijeron.
- Este cambio tan brusco son signos de mal presagio.
No falto quien les contestara que se callaran y no fueran aves de mal agüero, en la ciudad se
daban similares comentarios, pero en las grandes casa de la aristocracia en donde se establecieron las
guaridas de las almas que de felices pasaban a la desesperación, retomaron las conversaciones
denigrantes contra doña Domitila Maria.
Sacaron el féretro y lo colocaron en el costado de la lancha que daba al muelle, el Capitán se
cruzaba lentamente para probar el equilibrio que permitían los tablones, sintiendo que se mecía mucho
y que ya con carga mantener el equilibrio se hacía mas incomodo el pase de los tablones, hizo pasar
diez hombres a la lancha para sujetar desde la lancha los cuartones haciéndoles un contrapeso en ese
extremo, aparte que estos estaba muy bien amarrados con doble mecate, volvió a cruzar y se regreso al
centro en donde estuvo parado unos instantes, regreso al muelle y ordeno que al momento de cruce le
hicieran peso en las puntas a los cuartones, el oleaje aumentaba con mas bravura pero se tenía que
desembarcar a toda costa el cajón con la difunta. La decisión fue tomada y entre seis hombres fuertes
se echaron al lomo el féretro, en los primeros segundos se tambalearon hasta fijarse bien al piso de la
lancha, el oleaje golpeaba con mayor fuerza, en la costa se dio un silencio sepulcral y los nervios se
generalizaron a flor de piel, adelante dos hombres y dos atrás reforzarían el equilibrio de los seis
cargadores, la caja, la difunta y toda aquellas gasas con formalina absorbida por el cuerpo y el
zangoloteo de la lancha, hacia que ese féretro pesara tanto como una tonelada. Con mucho cuidado y
lentamente los diez hombres ya estaban sobre los tablones, cuando en un parpadear de ojos, se dejo
venir una ráfaga de viento con olas expresas para chocar contra la lancha, los hombres a bordo que
sujetaban los cuartones de un solo golpe cayeron a un lado uno sobre otro al cortarse los mecates, la
lancha choco con el muelle con la parte de la popa y los tablones se separaron entre ellos, los
cargadores perdieron el control y una parte de ellos cayeron al lago llevándose el féretro, que gracias a
Dios la caja no cayó sobre ninguno de los cargadores de lo contrario hubiera sido otra muerte segura.
El Capitán Flores inmediatamente recordó cuando de la boca para afuera dijo.
‘’Aseguren la caja de tal manera que solo Dios pueda hacer que caiga al agua’’.
Igualmente Dios complacía al Gran Lago de Nicaragua de querer quedarse con el cuerpo de su
Mayordoma, por ser el lago parte de su creación. Pero la voluntad de Dios no era esa y así la despedida
de doña Domitila María se prolongaría y su morada final esperaría que se cumpliera la marca que ella
dejaría. Los hombres que estaban en el muelle y los que se encontraban en la costa de ese lado de la
lancha se lanzaron al lago y como peces en un instante la lancha estaba rodeada de casi cien
nadadores, para entonces habían podido evitar que la caja se hundiera hasta el fondo del lago y la
sostenían a flote, en la costa era un alboroto, gritos, llantos, las viejas bajando Santos, de tal forma que
por el revoltijos volvió a temblar la ciudad con la única deferencia que en esta caso el temblor se sintió
que avanzaba de la costa a la ciudad, como si entrara en ella una gran ola, una estudiosa y pintora de
Managua de apellido T, Bravo que visitaba Granada, al fenómeno que se sintió y el parecido a un
Maremoto, con mucha gracia le llamo..
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 ‘’Lagomoto’’
Otros marineros lanzaron mecates para amarrar la caja y subirla al muelle, a medida que subían el
féretro se iba achicando de una agua pestilente a muerte y formalina que caía sobre los nadadores,
subieron el féretro y lo colocaron sobre los rieles del tren para que terminara de achicarse. Mandaron a
traer al doctor Luís Sánchez para revisar el cuerpo, en cuanto llego desalojaron el muelle y solamente
quedaron las personas que tendrían algo en que ayudar. Los nadadores que les cayo aquella agua
pestilente se fondearon, como las lanchas y al rato regresaron a la costa, en donde los esperaban con
sus tazones de café negro para calentarse, aunque algunos primero tomaron un buen trago de guaro
pelón. El personal que quedaba en el muelle lavaba el agua pestilente a medida que se achicaba, le
echaban creolina y agua limpia, la gente fue retirada a la alameda dejando un espacio para el acceso
de coches o carretas de ser necesarias. El capitán durante la espera del diagnostico que daría el doctor
Sánchez, se aparto un poco y se sentó en un taco de Madero Negro, una especie de madera, que con
los años o la humedad se convierte como en piedra por su dureza, por eso la usaban para construir
puentes, muelles y durmientes de la vía férrea, se tapo la cara, comenzó a recordar que por amor
Domitila Maria se había sacrificado a no parir el hijo que tanto deseo tener, pero también recordó la
advertencia de Rosita Alemán cuando le dijo que cuidado le hacia lo que le hicieron los Maltez a Jesús
Cochino en su vela y recordó.
Cuando murió Jesús Cochino que su nombre era Trinidad Sandino y después que expuso al aire y
frente a una procesión religiosa sus huevos, como si en la memoria de la ciudad fuese borrado ese
nombre y sustituido por el apodo de Jesús Cochino, su vela fue concurrida. El vivía en la calle La
Calzada a escasos metros de la cabecera este de la calle El Enredo, en esa esquina de La Calzada es la
cabecera sur de la calle El Ganado. En el tramo de calle entre La Calzada y El Enredo, vivía la familia
Maltez, propiamente al costado oeste de la iglesia de Guadalupe. Esta familia era gente de origen
humilde que vivían de las labores de albañilería, entre hijas e hijos estaban Carlos y Alejandro eran los
menores de ocho, el primero era joyero y el segundo trotamundos sin salir del País. Carlos además de
ser un buen orfebre también era igual o mejor tomador de guaro, al extremo de romper su
compromiso matrimonial con una muchacha, por la sencilla razón de tener que escoger entre el guaro
y ella. Cuando ella inocentemente le pregunto.
- Carlos decime una cosa antes de casarnos a quien prefería a mí o al guaro.
La repuesta se la dio el silencio. Carlos dio la vuelta y se entrego a la vida de las cantinas perdiendo
el arte de la orfebrería, su inteligencia, una mujer que lo quiso. Sus padres eran personas pobres pero
respetadas en esas calles y la ciudad, el también se daba a querer con su cortesía, educación y
respetuoso trato para con las personas. Alejandro por su estilo de vida era abierto de mente o tenia mas
malicia, le daba lo mismo acostarse en Granada y despertarse en Masaya o cualquier pueblo de Carazo,
en donde el estuviera sobrevivía gracias a sus habilidades manuales en las artes de la albañilería,
carpintería, orfebrería y manejo de otros materiales y oficios, imitando el material con el empleo de
otros, sus curiosas conversaciones de los lugares en donde había estado y finalmente timando a la
gente. Le gustaba mucho el guaro y especialmente elevar sus inspiraciones con Hongos de Estiércol de
Res, el les explicaba a los nuevos consumidores que tenía que ser de Res por que el Hongo de la Mierda
de Caballo y de Madera son venenosos, mientras que el de res es altamente alucinógeno, también
hacían cocimiento de una flor llamada Floripón y un monte que por su parecido a la Hierba Buena
cuando estaba seca, le llamaban entre los mismos adeptos Mala Hierba, por sus fuertes efectos
electrizarte en el cerebro, esta era fumada, los Hongos comidos crudos y el Floripón tomado en
cocimiento mezclado con guaro.
Dio la casualidad que el día en que muere Jesús Cochino los dos hermanos están en su casa, ya
para ese tiempo sus padres habían muerto y en la casa matriz de la familia vivía solamente una
hermana con su esposo, sus hijos y ellos dos. Se prepararon cada quien a su manera y se fueron juntos
a la vela. Alejandro se le perdía a Carlos por poco tiempo para ir detrás de la Iglesia de Guadalupe a
fumar la Mala Hierba para ver mejor al muerto, se decían entre ellos mismos, para alegrarse mientras
rotaban el puro. Regresaban a la vela, entre tragos y chistes la noche avanzaba, le daban al Floripón y al
licor mezclándolos, comían Hongo mientras rotaba la fumarola de mala hierba, esa dosis era suficiente
para que hubieran uno o más muertos acompañando a Jesús Cochino o dormir una manada de
caballos bien alimentados y de raza. Acercándose las dos de la mañana la vela seguía concurrida pero
ya nadie lloraba al muerto, las mujeres familiares y sus amigas estaban agotadas de tanto llanto y
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todavía les faltaba la salida de la casa, después de la Misa y el entierro, era tarea difícil aquella jornada
de llantos.
- No es chiche esta tarea.
Se decían entre ellas.
Ya bien fumado, tomado de licor con floripón y arto de hongo, Alejandro se levanto, se dirigió
directamente a la caja y abrazándola comenzó a llorar, al inicio fue un alivio para las mujeres, era un
llanto desconsolador, así estuvo buen rato, cuando le dijeron a Carlos que fuera a traer a su hermano
este se levanto y fue en busca de el, al ver el cuadro lamentable de Alejandro abrazando aquella caja,
se enterneció y también abrazo con una brazo la caja y con el otro a su pariente y comenzó también a
llorar al muerto, aquel llanto se puso fatal el aguantarlo era para muertos, hasta los perros aullaban,
como si miraran almas infernales solicitándoles baba para sanar sus llagas y les siguieran por calles y
patios. Los concurrentes se rascaban la cabeza y no sabían que hacer irse o acompañar a aquella pareja
de pendejos dolidos que tanto sentía la pérdida del amigo, el cuadro era de meterlos a los dos en la
misma caja con el muerto. Al rendirse Alejandro de tanto gritar, se quiso separar de la caja y de su
hermano, este lo halaba para que siguieran juntos, en medio de ese forcejeo, que vamos, quédate, que
si, que no, los dos hermanos fueron haciéndose guiñones cada vez mas fuertes hasta que por último se
fueron de trompa los dos con todo y caja, la tapa de esta no había sido clavada, por que los familiares
querían besar al muerto antes de que se lo llevaran al cementerio nuevo, al caer la caja por el golpe en
el suelo se abrió y el aburrido muerto aprovecho para salir rodando por el piso de tierra, hasta
estrellarse contra la pared y quedar boca arriba. Eso fue tontera, lo que impacto los sentimientos de los
concurrentes era que el muerto solo llevaba camisa y nada más que lo tapara, como despedida del
muerto vulgar, la gente tuvo que volver a verle los huevos y la paloma a Jesús Cochino. Al instante
todos los picados acudieron a levantar a los Maltez, la caja y por ultimo al muerto para meterlo
nuevamente en su caja, el muy considerado Cara de Picha le sacudió con la mano las nalgas y los
muslos para limpiarle la tierra, así que hasta manoseado se fue el difunto, lo taparon y para evitar otra
escena tan denigrante para un muerto que ningún daño le estaba haciendo a nadie, clavaron la tapa
de la caja y por si las dudas la reclavaron.
- Chago, Chago, jodido y todavía estas de degenerado…
El Capitán de un solo brinco se levanto.
… Échate picapica en la picha y los huevos para que se te pase esa brama Hija de P… que ya es
demasiado
Le dijo Risita Alemán.
Chago le respondió con tono amenazador
- Solo babosadas sos pendeja, ya mucho jodes, te lo digo, mucho jodes con esa mierda.
- Dice el doctor Sánchez de que es imposible velar a la Domitila Maria, por su pasado estado de
descomposición y que pronto sea sepultada.
- Rosita, yo honestamente no se que se hace en estos casos, lo de enterrarla eso sí.
- Té fijas que ni hablar bien podes, como es esa chochera que podes enterrarla.
- No seas babosa, yo creo que lo mejor sería preguntarle al padre Valentín, a ver que dice, jodida
pendeja, cara de baboso me has visto.
En efecto, de eso se encargo Marta Joyilla en compañía del doctor Sánchez, fueron donde el
padre Valentín, se pusieron de acuerdo, con el tomaron algunas disposiciones, siguiendo lo indicado
por el cura y posteriormente se dirigieron ante las autoridades civiles y militares para arreglar todo lo
relacionado con el entierro.
Durante todas esas diligencias Marta Joyilla se apesaraba del Capitán Flores por lo que le había
dicho Rosita Alemán y recordando que para ese tiempo en que la Petra Culona salía embarazada del
primer cipote supuestamente de Santiago Flores, doña Domitila Maria muy cuidadosamente como solo
ella podía ser, soltó la perra con todo extranjero bonito que pasara frente a ella, después se perdió por
un año y medio de Granada, con el pretexto que no quería saber nada en la vida, que tal vez el monte
le hacía bien, dejándolas a las dos amigas a cargo de todo, menos de la hacienda en la que se
encontraría, se prohibió llegar o mandarle recados, solamente Rosita Alemán y el padre Rodrigo podían
llegar.
Tampoco ella tenía la seguridad de que doña Domitila Maria, ocultara un embarazo o que haya
parido un hijo o lo haya perdido, en tantos años de eso nunca nadie ha hablado de ese asunto. Eso
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estaba como cuando le contaron a la Marucha, que su hija menor andaba de alegrona, a lo que ella les
contesto.
- Mientras yo no mire salir la cabeza de un Cipote, mi hija seguirá siendo cuerito para mí.
Capitulo XVII
Llegando a la hacienda de doña Domitila Maria don Carlos le hizo el comentario de que el no
conocía ese lados de Granada, que le gustaba como para una casa de descanso, que era cerca de la
ciudad, estaba poco poblado y su clima era agradable. Lo que don Carlos nunca supo ni se lo
imaginaria, eran que así como se extendió la ciudad hacia el norte, sur, y oeste, en un futuro lo haría en
esas tierras que ofrecían mayores privilegios por su altura, su paisajes acompañado de su acceso al lago.
Fueron recibidos por Marta Joyilla. Doña Domitila Maria les enseño la casa, posteriormente los llevo a
un pequeño embarcadero para lanchas pequeñas y poder ir a cualquiera de las Isletas, regresaron a
una terraza que gozaba de una hermosa vista del lago, de un conjunto de Isletas, tomaron distintas
temáticas de conversación, Marta Joyilla les acompaño, almorzaron de manera campestre en la misma
terraza, al ser retirado los utensilios que utilizaron y dejando el postre, don Carlos abrió la conversación
que le interesaba.
- Domitila Maria si yo quisiera, armar un pequeño ejército de voluntarios como en tiempos de
Walker, tu Mamita Domitila te contó esa historia, crees que se pueda en este caso que sean tropas
propias o sea que solo a mi me obedecieran.
- Honestamente don Carlos yo de eso no se absolutamente nada, pero me imagino que debe de
ser caro, con solo el hecho de estar alimentando a tanta gente y además pagarles eso es mucho dinero,
hay que buscar los hombres que deseen o puedan trabajar en eso, usted sabe que el hombre y la mujer
del campo es completamente diferente al de la ciudad, a esta gente si comen arroz y frijoles les da lo
mismo, pero tiene que ser buena porción y a las mujeres si no comen diario, ustedes me entienden, la
mujercita se les va con otro hombre.
Don Carlos y doña Francisca se sonrieron por la picardía de ella.
- No me he hecho explicar bien. Entre nosotros dos tenemos más hombres trabajando que todo
un ejército, suponiendo, nosotros requiriéramos de su servicios para la guerra crees que esa gente se
armaría a favor nuestro.
- No lo creo don Carlos, ya no hay babosos que quieran morir por otros. Si ellos miran que la causa
realmente les va a beneficiar no lo dude ni un segundo que ellos mismos le pedirían las armas, pero
desgraciadamente en este país los pobres solo sirven de carne de cañón. De un peor a otro mayor, jefe
o patrón, por eso es mejor para ellos dejar la vida bajo el sol a morir quien sabe con dolor y sin amor.
Usted mejor que nadie lo sabe que cuando Walker los hombres preferían unirse a las tropas de Walker
que a las Tropas Costarricenses, ellos se sintieron amenazados por los ticos que de los Americanos en
Rivas. Por otro lado La gente que yo é visto de militares rasos, son gente que no les gusta el trabajo,
abusivos del poder que les da el arma y criminales de su propia gente, aunque al final el rico, si salen
vivos les da una patada en el culo.
- En eso tenes razón…
Dijo doña Francisca.
…Por lo menos en las guerras que se han dado en mi País, al pobre nunca le han cumplido y es el
que pone todo el sacrificio humano. Mientras los Generales y políticos comen en el mismo plato, los
pobres se matan entre ellos mismos. Cuantos abuelos, tíos, primos, se han ido a la guerra como
buscando algún tesoro oculto, cuando estas terminas regresan mas inútiles que cuando se fueron, por
lo menos en Sicilia por ser familiar se les acoge, pero en otros lugares lo que no lo mato en la guerra, lo
va a matar en la libertad alcanzada con su sangre y al final los ricos nos quedamos con todo.
- No se me pongan sentimentales las dos…
Les dijo don Carlos.
… Que eso ha sido siempre, así será, de que comemos, viajamos, nos vestimos y todos los lujos que
nos damos, acaso no es por el trabajo de ellos o somos nosotros, nuestros hijos o familiares los que
vemos el ganado, los siembro y todo lo que sea trabajo pesado como el de los animales, vamos a comer
riquísimo, mientras mucha gente en este momento anda sin comer arreando nuestro ganado para el
ordeño de la tarde, igual es la guerra, a unos les toca morir para que otros vivan, así que no estemos
con pendejeras, que las dos entienden perfectamente lo que estoy preguntándole a Domitila Maria y es

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que si nosotros uniéramos nuestras fuerzas para defendernos y defender nuestros trabajadores y sus
familias, podríamos armar un ejército propio, sin partido y sin otros mandos. Esa es la pregunta.
A don Carlos le estaba gustando el juego y la participación de doña Francisca, para ver las
inclinaciones políticas de ella, que en la realidad no las conocía y es muy posible que por la diferencia
de edad no hubiera abordado esos temas. El continuaba insistiendo a la vez en el tema para sacarle a
doña Domitila María algo que le orientara sus conocimientos e inclinaciones militares.
- Don Carlos, yo desde un inicio le entendí su pregunta y lo que le voy a decir, nadie en esta tierra
mejor que usted sabrá si estoy mintiendo, yo fui educada por su hermana la niña Ángela Maria y mi
mamita Domitila, que Dios las tenga en su Santa Gloria, tal vez ellas dos por doña Mercedes y don
Joaquín…
Como diciéndole que eran del mismo corte.
… Y la vida se ha encargado de enseñarme y despertarme mi herencia de sangre, que viene de
todas las Domitila desde el siglo XVII.
Don Carlos, comprendiendo eso como una advertencia de que eran de diferentes clases, a
diferencia de don Joaquín y Corral que comulgaban en diferentes Capillas, pero eran de la misma
escuela.
- Eso es otra cosa Domitila Maria, lo nuestro es negocio y no de sangre
Dijo don Carlos.
- No don Carlos, yo sé lo que son asuntos de negocios. Yo desde niña é visto hombres con la
piernas totalmente desprendidas por mordedura de tiburón, con todas las tripas de fuera apuñaleados,
cortarle la garganta a otro como si fuera un chancho, morir de tétano, por mordedura de culebras, que
trabajo de hombre yo no puedo hacer, a mí me respetan por eso, no solamente por dinero, los
enemigos de mi gente, son míos también y esos que les quieren hacer daño a ellos me temen como los
que participaron en el asesinato de Clotilde y por eso el populacho me quieren. Yo no pienso en la
guerra por que no le hago daño a nadie, ni le deseo mal a ninguna persona, mucho menos que viva de
ellos, pero si con solo tocaran, con una mala mirada a doña Francisca que es mi amiga y eso le causaría
un daño, es como si me lo hicieran a mí y yo no respondo, así tenga que ir a la propia Sicilia…
Doña Francisca, aplaudió y los dos dieron las gracias.
…Yo creo don Carlos que si a uno de nosotros nos tocan, me refiero a su familia, propiedades con
todo y trabajadores, sea quien sea, Liberales o Conservadores, Nacionales o Extranjeros, la tierra misma
será aliada de nuestro ejército.
Doña Francisca mas emocionada aplaudía, inocente de que estaba poniendo en advertencia a su
esposo y amigos.
- Así se habla Domitila Maria, que cuando las mujeres usemos pantalones no va haber potro que
nos lance al suelo.
Don Carlos sonrió como diciendo que cuando eso pase ella va a tener muchos años de estar
volando espalda en una bóveda del cementerio.
- Ya te lo he dicho en otras ocasiones Domitila Maria, que si tu Mamita Domitila, mis Padres y mi
Hermana te vieran, se sentirían muy orgullosos de ti, pero antes de seguir, tal vez cuando regresemos
Francisca y yo de España me tenes la suficiente confianza para contarme los pormenores del asunto ese
de los Cheles, lo sucedido en Granada principalmente.
– Claro que si don Carlos.
Le contesto con la confianza y satisfacción con que hablan dos asesinos de altura, de Taurete a
Taurete.
- Yo estoy de acuerdo en que las guerras por asuntos políticos son absurdas e innecesarias, pero
para poder hacer entrar en razón al otro bando a veces solo queda la guerra, por eso me dicen, si lo
sucedido en León fue un plan así concebido, entonces fue una acción conspirativa de alta jerarquía
militar, pero si no fue así, fue una irresponsabilidad por que en ese momento la Nación entera se pudo
haber visto en una guerra civil, es por esa curiosidad que abordo temas militares.
Ya no había espacio para ocultar el doble mensaje de don Carlos, uno atacar a los Liberales para
proteger a los conservadores asumiendo ella la responsabilidad y lo otro darles el tiempo para armar
sus alianzas, que detrás hay otras personas que saben del asunto y que es un simple emisario, como ella
lo mira siempre, un mensajero de la muerte con olor a flores, espelma e incienso.
- No don Carlos, ante ustedes yo soy una simple ignorante, y así es don Carlos…
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 Lo recalco como repuesta al gesto negativo que le hicieron y más aun por la ofensa que su
operación en Malpaisillo la calificara de una acción irresponsable.
… Pero quien hubiera saltado en ese momento se exponía a ser derrotado y por eso no lo hicieron
ganas es lo menos que faltaban, le estoy hablando de Generales y familia de criminales, no de
aventureros, me parece que a usted le sucede lo mismo que a las Españolas, me miraron joven, sola e
ignorante por mi origen humilde y pobre, quisieron aprovecharse de mí, no matarme, era muy riesgoso,
pero si poner a mis píes un río de sangre, de mis hermanas, amigas y amigos.
- Esa era la repuesta que yo quería escuchar.
Dijo don Carlos.
- Hay personal que dicen ser inteligentes o intelectuales y en la realidad lo que saben es citar a
otros sujetos, por eso son fáciles de comprar. Yo prefiero ignorar esa escuela y nombres famosos, pero a
mí no es fácil que se me escape algo, no le hago daño a nadie, pero tampoco olvido.
- Me gusta eso Domitila María, ese carácter y determinación femenina.
Dijo doña Francisca, los tres sonrieron y doña Domitila María prosiguió.
- Cuando don Joaquín no pudo hacer entrar en razón a sus líderes Conservadores, no les declaro
la guerra y prefirió ensangrentarse las manos haciendo su aporte económico para la guerra, pero no les
confronto, usted no fue su salvación por que sin el nada hubiera hecho, quizás ni desembarcar pudiera
haber logrado, esa contribución económica fue lo que le dio tiempo a usted para continuar, lo que el ya
estaba haciendo y esto no lo estoy inventando, me lo contó de esa misma forma mi mamita Domitila e
indague para confirmarlo, don Joaquín no lo hizo solo y por sus precauciones en unas zona del
territorio no se sintieron con crudeza los efectos de la invasión extranjera y eso la gente del lago se lo
agradece a usted, don Joaquín y amigos, eso es saber ubicar sus verdaderos intereses en un momento
tan difícil.
- Yo personalmente no lo miro tan así Domitila Maria…
Dijo doña Francisca.
… Todo debe de tener una base de conocimientos.
- Cuando me hablan de conocimientos solo me acuerdo de la niña Ángela María que me decía…
“El conocimiento es copia, sirve para engañar o distraer la dirección propia de la realidad y necesidades del ser
humano, el poder de utilizarlo en otra dirección es facultad de la inteligencia, que es lo que en realidad vale y ella es el
saber posesionarse de una línea recta, limpia y te permitirá tener precisión en una sola dirección, la realidad objetiva, por
tu bien y el común, porque nadie es solo en este mundo”.
… Usted es un hombre que goza de grandes y útiles conocimientos para este País don Carlos.
Comparemos el ayer con hoy, voy a contar, ya que doña Francisca no sabe de este pasaje, recuerda
don Carlos cuando lo emboscaron a usted en la hacienda Masapiya…
Don Carlos hasta que le rechinaron los dientes de tan colorado que se puso.
… Continúo...
Desafiándolo y en la sin remedio tuvo que dar su aprobación…
… De haber acertado esa emboscada en donde solo se pedía su cabeza, se hubiera entendido
como una declaración de guerra para don Joaquín, no lo mataron y con sus habilidades eso quedo así
no más y al olvido, solo tres personas supieron la verdad del asunto, usted, su capataz-matón Rodimiro
Morales…
Doña Francisca se tapo la boca con la mano al escuchar ese nombre.
… Su hijo que se encontraba escondido arriba de un árbol y escucho todo, yo le saque la verdad
estando chavala por que el degenerado siendo mayor me quiso abusar, el me contó con la promesa de
que se lo prestaría y el ‘’moclin’’ se babeaba yo le dije que sería la primera vez, que no sabía lo que era
sexo y en realidad así lo era, pero no se percato que a una señal aparecería Chago y todos los chavalos
de la calle…
Don Carlos mostraba serenidad pero por dentro estaba impresionado de cómo aquella mujer
hablaba de asuntos que los consideraba olvidados y que habían quedado en un circulo muy serrado
… Resulta que después de meses de estarse acostando usted con la mujer a don Rogelio Suazo y
este al estar cansado de encontrarla indispuesta para el sexo, para que mas, usted la dejaba llena de
placer, claro un joven fresco y fuerte…

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 Doña Francisca reía y don Carlos también pero con descaro y vergüenza, ante dos personas muy
menores y además mujeres.
… El mando a espiar y fue de esa forma que se dio cuenta que usted se acostaba con su mujer, el
no pensó en la guerra, sino en el hecho de que lo mataran a usted en su propio territorio, como usted
se lo hacía a su mujer en su propia cama, al fallar, usted lo mando a matar con Rodimiro. Al traste con
todo por unos polvos mal echados. Si todo hubiese salido bien a don Rogelio, que falló en ese
momento, su inteligencia o el conocimiento.
- Domitila Maria eso fueron cosas de juventud.
Dijo don Carlos.
- La historia es tontería, estamos entre adultos, aunque yo sea la menor…
Doña Francisca inmediatamente reclamo que ella estaba entera todavía, que tenia de sobras para
dar y también ponía la mano en el fuego por su esposo de que respondía, los tres reían de las
ocurrencias de doña Francisca.
- Me decía mi mamita Domitila que en esos tiempos que aun en los Pacifistas se escuchaba aquella
frase…
‘’Uno más, uno menos en estos asuntos de la guerra la cuenta da lo misma’’.
… Habemos personas que llegamos a viejos jugando como en el pasado, manoseando
conocimientos y traicionando la inteligencia, no aprendemos o carecemos de ella para enfrentar los
obstáculos de la vida. Ahora usted don Carlos va hacia España encomendado a frenar esta guerra y no
ir a buscar mujerzuelas, eso se debe a que ahora si es un hombre inteligente, sabe encontrar la línea
recta por el bien propio y común, por sus conocimientos es de mayor utilidad fuera de aquí, que
estando adentro, ante la carencia de inteligencia en los Conservadores corren el riesgo de ser presa
fácil, por culpa de sus sabios fáciles de comprar y por ser fácil el recurrir a la traición que con muchos
conocimientos es cómodo el ocultar la verdad.
A don Carlos ya no le puso interés a lo último y se centro en la frase, jugando como en el pasado,
manoseando y traicionando.
- Me párese bien como se sale usted Domitila Maria, pero eso de jugar como en el pasado,
manoseando conocimientos y traicionando la inteligencia a que se refiere.
Pregunto don Carlos.
- Usted sabe que a mi casa de las pocas personas que acepto que lleguen a tomar es a mi amigo el
cronista Avilés, cuando el no está trabajando en el Colegio Centro América o en sus investigaciones,
conversamos y me dijo en una ocasión, que un escritor puede contar e inventar las versiones sobre el
tema que quiera, pero la Historia no se puede borrar, se puede ocultar algunas pasadas como sucede
por lo general cuando la Historia la escriben los vencedores, sin tomar en cuenta a los vencidos, pero
los sucesos no mienten y el vencido es parte de esos hechos igualmente y la verdad siempre sale a
relucir.
- A mí me han hablado muy bien de Avilés y de alguna manera el me agrada, yo me sorprendo de
que siendo este hombre tan joven se lleva bien con Fernando.
Dijo don Carlos, haciéndole señal con la mano a doña Domitila María cediéndole la palabra.
- Así es, ellos se llevan muy bien, el aprende de don Fernando y compartes similares gustos por
mujeres, licor y comida aunque sea chancha las tres. Me gusto cuando el cronista Avilés me dijo.
´´ La historia es lo único mortal en este planeta que por mucho que lo intenten no puede ser
traicionada. Primero ella dura más que cualquiera que quiera burlarla y la inteligencia de ella es su
memoria que a la vez es ella misma ´´.
… Entiende don Carlos, Habemos viejos que jugamos con conocimientos y nos olvidamos que la
Historia es memoria y a su vez esa es su inteligencia. La intelectualidad, el saber y el copiarse que
permite, manosear con mentiras la verdad y así traicionar la inteligencia, no a la Historia, ella sabrá salir
a flote. Cuando el cronista Avilés me dice la Inteligencia de la Historia es la Memoria, yo entiendo como
que son tres cosas diferentes en una sola, igual a las Tres Divinas Personas, un solo Dios y me gusta
como el termina diciendo.
´´ Por eso es lo único mortal que no puede ser traicionado, por ser una memoria inteligente,
carecer de valor material y proporcionar conocimientos peligrosos para el que no se sabe enfrentar a la
realidad del presente y ver hacía el futuro ´´.

71 | P á g i n a
 - Me gusta que pienses así Domitila Maria, pero cuando vayas a contar otro de esos secretos mío,
por favor tal vez me lo Recordas a mi primero y así le damos una reparacioncita, me gustaría que lo
hicieras a como dice Avilés, de manera novelesca con una versión favorable.
Dejando al descubierto su preferencia por ocultar la verdad con mentiras. Tratando de cambiar el
rumbo de la conversación agrego.
- Te repito me gusta mucho este lugar, verdad amor.
Dirigiéndose a doña Francisca, quien le contesto que estaba bellísimo y calmo. Doña Domitila
Maria interrumpió y dijo.
- A la orden don Carlos y si lo quiere se lo vendo, a como le dijo don Joaquín a mi Mamita Domitila.
Siempre que alguien lo necesite y puede pagarlo, vendérselo a mejor precio, ese es el negocio. Yo le
quería decir dos cosas, una que por la mañana me trajeron el reporte por dos informaciones que
coinciden y ya sé que la gente del crimen de los muertitos de aquí fueron unos de Tipitapa y los de
León fueron unos de Nagarote y que la cabeza de todo vive en Managua, cuando usted quiera le
puedo dar los detalles para no comprometer a doña Francisca en esto.
Don Carlos respondió que ya tenían toda la información y que eso prácticamente estaba resuelto,
sin darse cuenta de que eso era un chamarro de doña Domitila Maria a manera de burla y comprobar
lo lejos de saber que suelo estaba pisando, de todas forma el sería incapaz de reportar ese comentario
al General, por lo débil que era, como lo fue su Padre.
- Yo conocí el sexo a la edad de 21 años y se lo entregue a Chago…
Continúo sin poner mayor interés a la absurda repuesta que recibió.
… Fue un desgraciado, nunca me preño y me dolía mucho el no poder salir preñada, eso me
endureció y me encerró en un mundo en donde los escrúpulos no valían nada, que puede doler mas
para una mujer, el hecho de no poder parir su propio hijo, lo digo así, porque mis dos amigas me
decían que le pidiera un niño o niña, a alguien que no pudiera sacar adelante a sus hijos o si yo quería,
ellas se ofrecían a parirme uno, en ese tiempo no podía estar en contra de la voluntad de Dios, estaban
recién muertas mi mamita Domitila y la niña Ángela Maria, así lo entendía, para entonces era muy joven
y no comprendía que la voluntad de Dios se manifiesta mas en lo espiritual que en lo material, que lo
del momento la vida es algo mecánico, mi fuerza espiritual es la que tendrá que vencer ese mundo,
Satanás podrá corromper la carne, no lo que es la esencia, el espíritu que es toda la creación, es de mi
criterio propio que su voluntad está en la lucha contra la materia descompuesta, que es donde el mal
corrompe. La vida metalizada que nos cobija y dista mucho del reino de Dios.
- Entonces Domitila Maria, para usted si me caigo de un caballo y quedo tullido para toda mi vida,
ese hecho no es por la voluntad de Dios.
Pregunto don Carlos.
- Para mi don Carlos, esos hechos de la vida no constituyen la expresa voluntad de Dios, son partes
del sistema de vida del ser humano y su contorno, excluyendo el hecho de morir, en donde ya no hay
nada que hacer, no nace una presa exclusivamente para determinada fiera si el cordero se pierde el
Lobo que este cerca lo caza, ni crece una persona para determinado sujeto con instinto criminal,
nuestro Padre Celestial no doto de inteligencia para prevenir los peligros y no aventurarnos sin tomar
en cuenta la fragilidad de nuestra fuerza física, todo por una ambición material o mentalidad
metalizada, aun así el Señor da fuerzas por esa misma incapacidad humana, ya que ese desdichado
tullido que ejemplifica usted es capaz aun de hacer mil cosas, del color y tamaño que usted quiera o no
puede ser predicador de la palabra de Dios, ser tan generoso de dar su propia cama para otro que la
necesite mas, la lucha de la carne con lo espiritual es que también actuando solo puede ser un asesino
feroz, un animal temible, le repito para la voluntad de Dios, está en lo espiritual y no en lo material, lo
interior de cada quien y proceder le dará el valor ante la presencia del Señor.
Don Carlos, sintió cierto recelos al ver que también en otros campos propios de su clase y
dominio, Domitila Maria con o sin la razón igualmente tenía sus propios criterios y con argumentos
personales sostenibles, únicos para hombres o mujere del calibre de la niña Angela Maria y en especial
con capacidad académica.
- No estoy muy de acuerdo…
Dijo doña Francisca.
… Las Sagradas Leyes en ningún momento se refieren de que estas estén sujetas por
acontecimientos posteriores a su violación, el que mata, no hay forma alguna de justificarlo, el que roba
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igual, de lo contrario las Leyes Sagradas de Dios, está expuestas de cualquier persona pecadora que las
interprete a su favor, dejarían de ser leyes, para ser simples recomendaciones. No cree usted Domitila
Maria.
- Estoy completamente de acuerdo con usted doña Francisca, pero hay que acomodar algunos
términos que usted utilizo…
Don Carlos se animo más en la plática por lo directo, que sintió la intervención de su esposa.
… Si la Ley la vemos desde ese punto de vista de los hombres, la ley es orden, cualquier violación a
ella tiene su pena y se les aplica con el rigor que establecen los humanos. Las Sagradas Leyes de Dios,
no están sujetas a interpretaciones, ni permite a nadie ser juez y parte, por lo tanto no somos quienes
para pretender saber o interpretar la voluntad de Dios, con esto me refiero a que la materia juzga lo
material y Dios lo espiritual, haber don Carlos, doña Francisca, quien peca mas, el que mando a matar o
el que mato…
- El que mando a matar peca más.
Contestaron los dos casi a la misma vez.
… Pero si a este asesino yo lo comparo con una persona adulta que comienza a envenenarle el
alma a un niño, hasta convertirlo en un Mostró, quien peca mas el asesino de carne o alguien que
corrompe con sus instigaciones el alma de aquel inocente, entonces, para mí ese alguien desvirtuó el
alma del que mato y creo en mi ignorancia ese es el mayor delito que se cometió en ese acto, recuerde
que el alma es el aliento de vida que Dios da a un cuerpo material. Con relación a lo que usted dijo al
final, toda ley es un consejo para no incurrir en ella, Adán y Eva no acataron el mandato, que en boca
de su creador pasa a ser ley, de no comer fruto de aquel árbol, si una persona mata, roba, irrespeta sus
Padres y peor, antepone la carne y lo material por encima de Dios estará condenando su alma y
alejando su espíritu, al contrarió obedecer es acercarla a su creador, hecha a su imagen y semejanza.
- Eso me gusto mucho, pero yo pregunto en qué momento se juzga la falta a las Sagradas Leyes de
Dios.
Interrumpió doña Francisca.
- Cortar el fruto podrido o el árbol que da malos frutos es o no voluntad de Dios. Esas son
imperfecciones de la mecánica de la vida que ha sido corrompida, el alma y el espíritu son creaciones
perfectas, para mi es eso lo que no se puede tocar ya que están en las manos de Dios. Para la sabiduría
del Señor esto se descifra en el momento, para nosotros, descifrarlo es completamente imposible. El
mayor castigo que Dios Padre le impuso a Satanás es el no poder ver el futuro, que triste debe de ser
estar eternamente condenado a solo poder mirar el pasada y presente, nuestro Señor Jesucristo nos
abrió las puertas del arrepentimiento y eso el Ángel traicionero no lo puede ver, el pudo gozar como
vencedor con su crucifixión, sin poder ver que ese acto de amor significara una derrota a la carne
corrompida, para eso está la justicia divina, el momento creó que puede estar con el arrepentimiento,
porque para enmendar la falta uno tendrá que desprenderse de satisfacciones de la carne y eso es duro
para ella, la materia negándose ella misma…
Tomo un poco de agua, pidió disculpas y prosiguió…
… El hombre, la carne o la materia corrompida por aquel jodido maldito, no juzgan, condena por
ser lo más fácil, por eso es de nuestra preferencia por en cara al otro los defectos y es tanta relevante
este asunto que nuestro Señor Jesucristo lo trasmite de distintas maneras. Fíjese que hasta puede
coincidir, igual con lo que hablábamos anteriormente, el intelectual por sus conocimientos cree tener
suficiente inteligencia en sus manos y estar por encima de otros, ese último hecho de creerse, es
anteponerse por arriba de Dios, sintiéndose juez y parte, careciendo en su totalidad de inteligencia para
ver su ignorancia y temores al bien común.
Trataron un poco sobre el tema y aun siendo interesante entre risas y formalidades, tomaron otros
temas variados, doña Domitila Maria les contó pasajes de su vida, de dónde sacaba escuela para
algunas habilidades y trucos, que al verlos de cerca eran tan cansillos de realizarlos, recordaron historias
pasadas y doña Francisca no quedo atrás con sus historias fabulosas de los Clanes de Sisilla y hasta
hablo de algunos secretos que su familia compartía con otras, compartieron similitudes de las tres
culturas, partiendo de la raíz de las lenguas.
Aunque doña Domitila Maria, no ocultaba su poca simpatía para con los Españoles, en fin pasaron
una tarde agradable, de éxitos compartidos por todos, principalmente don Carlos y doña Domitila
Maria, que entendió que ya don Carlos, rápidamente perdía su utilidad para la familia Chamorro y
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subestimándolo creyó que era la hora de volar directamente en las ramas mayores y de una u otra
forma terminar con la zozobra de la guerra y sus consecuencias, sin tomar en cuenta que el envió de
don Carlos a los Estados Unidos sería el mayor y último servició que le brindaría a la familia Chamorro.
Cuando se despidió don Carlos le comento a doña Domitila.
- En cuanto regresemos, esperamos encontrarte bien y vuelvas a convidarnos a este tu paraíso,
cuídate mucho que el mundo está dando vuelta demasiado rápido.
- No se preocupen que nos volveremos a ver, yo creo que esta situación todavía tiene solución y
no crea, hay males que parecen serlo solamente.
Se despidieron de besos y abrazos. Para entonces el coche de doña Domitila María la esperaba y se
repitió el ejemplo de saludarse de largo, ya estando doña Francisca en el coche volvió a ver a doña
Domitila María y cruzaron miradas sellando su pacto, de largo se saludaron porque eran las mismas,
como Rosita Alemán Madre cuando saluda a su misma, aquella dama de sociedad…
Capitulo XVIII
EL padre Valentín, era un hombre contemporáneo de la difunta, de origen Italiano que tenia de
estar a cargo de la Iglesia de Guadalupe hacia ya muchos años, después de la muerte por vejes del
padre Rodrigo. A petición del difunto sacerdote el padre Valentín se hizo cargo con la familia Favili de
darle su Cristiana Sepultura. El padre Rodrigo fue enterrado en las tierras que habían sido seleccionadas
para la construcción del Cementerio nuevo, en donde la familia Favili tuvo mucha influencia en el
diseño arquitectónico y de dirección en la construcción de la Capilla de las Ánimas. Desde entonces el
padre Valentín paso a ser el párroco de la Iglesia de Nuestra Señora de Guadalupe y por confesión del
curita Rodrigo antes de morir, no quería ser enterrado por ningún motivo en la Iglesia, por secretos de
confesión nunca se supo el primer y principal motivo de no ser sepultado en ella, pero el segundo
motivo si, ya fuera del secreto de confesión decía, que mucho menos lo depositaran en los predios
vacíos en donde todavía algunos picados se cruzaban el cerco para orinar y cagar. En poco tiempo
logro conocer muy bien a todos sus parroquianos , en especial a su alcahueta doña Domitila Maria, que
además de utilizarlo ´´ al revés y al derecho ´´, le abriría los ojos para muchas cosas de la fe y la vida.
En esa selección tuvo razón el Capitán Flores, el padre Valentín era la persona apropiada para
ayudarle en esos asuntos referente al entierro y no a enterarla como dijo Chago, tan apropiado fue que
en primer instancia no permitiría la entrada del cuerpo de la difunta a la Iglesia, por sus tantas
bondades y pecados de grandes proporciones y no podía quedar bien con Dios y el Diablo a la vez, así
que se amparo en el diagnostico del doctor Sánchez y la gran multitud de gente para disponer que la
misa responsorial seria en las afueras del cementerio frente al camino de la Capilla de las Animas.
Dispuso Flores el trasladar el féretro al techado de la Capitanía para que estuviera en la sombra y
colocarlo en una mesa, otras ayudantas colocaron butacas para las mujeres acompañantes de Rosita
Alemán quien no se opuso absolutamente en nada y bien se sentó como niña sentenciada a un castigo
severo, les llevaron café negro con comida a ellas y al personal que se encontraba ayudando.
Una carroza muy limpia y halada de dos caballos de raza comilona pero bien alimentados era el
Coche Fúnebre, se estaciono frente a la capitanía que era custodiada por militares que por ordenes de
arriba, tenían que estar con uniformes limpios, calzados y cascos blanqueados con cal.
El Capitán Flores se sentó en una butaca cerca de la entrada a la Capitanía por cualquier
necesidad, con un semblante agotado, pálido, media barba y mas flaco, se a recostó a un palo de
Mango y comenzó a recordar los juegos en la playa cuando las muchachas llegaban a lavar ropa de la
casa.
Era una banda de chavalos algo grande, de todo tipo de maromas les hacían, recordó a Panchito
los Bollos, que después fue recadero de doña Domitila Maria y nunca requirió de caballo o carreta para
hacer un mandado, los hacía corriendo, tenía una gran velocidad en sus piernas y era tan admirado
que en una ocasión unos jóvenes hijos de ricos lo quisieron echar a correr contra un caballo y el estaba
dispuesto a hacerlo, alto , flaco, con unas piernas tan largas que en cada zancada avanzaba dos metros.
Recordó a Salvador Mena, la Lora Mena, por que espiaba a las hermanas, tías y a su Mamá cuando
estas se estaban bañando desnudas en el patio de la casa, este se subía a un árbol de Naranjo Agrio y
ya estando en lo alto no le quedaba espacio para menearse, por las espinas de las ramas del Naranjo,
entonces solo le quedaba espacio para menear la cabeza y los ojos como las Loras. También a Cara de
Hambre, que le decían así por su abuelo, decía la gente, que si hubiera tenido una crianza de chanchos

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estos se hubieran muerto de hambruna, por que el se les hubiera comido el Maíz cosido, los Guineos,
en fin hasta el Machigüe y al final sus nietos fueron destazadores de cerdo y sus nietas vendían
Chancho Frito con Tortilla, Vigoron, Morongas, Chicharrones y Nacatamales, abundaba la comida en
esa casa de la calle Santa Lucia, pero el ya había muerto, entonces sus nietos y nietas se quedaron con
el apodo de las y los Cara de Hambre.
Otros eran el Indio y el negro, que les decían así por sus aspecto, al primero por su nariz, pelo
chuzo y chaparro requeton, puro indígena, al otro por su color a carbón, de tan Negro, a sus otros dos
hermanos por lo mismo de lo oscuro les decían, el Zopilote y Sánate.
Adolfo Vaca, por su apellido le decía, La Vaquita, así otros que vivían en las mismas Calles El
Enredo, El Desenredo, El Arsenal, La Corral y Santa Lucia.
Siguiendo un curso natural de la vida comenzaron con juegos infantiles, juveniles, en donde
sacaron buenos provechos y premios, Rosita Alemán que le parió una hija a Cara de Hambre, le puso su
nombre con cierta gracia Rosalía. Marta Joyilla que le parió un hijo a Caballo Viejo, que la decían a su
Papá, este manejaba un coche de carga de la familia Pasos con un buen potro, entonces le daban
bromas diciéndole que era el caballo viejo que andaba educando al potrillo.
Todos habían muerto o mejor dicho fueron asesinados, el Capitán Flores se salvo de esa redada
por la sencilla razón que el mismo día que se iniciaron los asesinatos había partido con doña Domitila
Maria, rumbo al río San Juan, acompañada de Marta Joyilla, quedando en Granada Rosita Alemán.
Era un viaje que duraría por la parte menos unos veinte días.
Los dos primeros en ser asesinados fueron El Vaquita y El Negro, nadie puso mayor atención mas
que notificar el asesinato de ellos, fueron asesinados a balazos por la espalda, Rosita Alemán
inmediatamente envió aviso a San Carlos, para que le comunicaran lo sucedido a doña Domitila Maria,
resulta que a los dos días después del crimen, mataron a Panchito los bollos, en el que se ensañaron
cortándole una de las piernas y los hermanos Zopilote y Sánate, a esas alturas Rosita Alemán les había
dicho a las amistades de infancia de doña Domitila Maria que se escondieran mientras ella regresaba,
para entonces doña Domitila Maria se disponía a regresar de inmediato a Granada, pero horas antes de
llegar a la ciudad aparecieron asesinados Caballo Viejo, El Indio, y La Lora Mena, todos ellos asesinados
a balazos por la espalda y abandonados en el lugar del crimen, a excepción de Panchito que le cortaron
la pierna, decían algunos que un favor le hicieron con matarlo ya que sin su pierna también se hubiera
muerto, pero de tristeza. Desde que doña Domitila Maria venía de regreso nada le sacaba de la mente
que si la noticia fuese cierta, eso tendría que haber sido ideado, planificado y pagado por gente de
Granada, los Liberales no cometerían la imprudencia de ejecutar los crímenes en días de por medio,
sabiendo que la ciudad en cualquier momento podría ser serrada para capturar a cualquier asesino e
igualmente de hacerlo se irían directamente a ella, por otro lado la información de esa gente y el tipo
de relación que tenían con ella desde la infancia, movería mucha sospechas para recabarla en tan corto
tiempo que separaba el caso de los muertitos y estos crímenes, por ultimo resulta que tiene igualmente
poco de haberse ido don Carlos y ya se presentan estas acciones contra ella.
Al llegar mando a serrar todos sus establecimientos con órdenes de no abrir ni atender a nadie por
diez días a partir de aquel momento, esa orden alcanzaba a Masaya, Carazo, Rivas, Nandaime,
Malacatoya, Ometepe, San Carlos y el Río San Juan, solamente se les vendería alimentos a las familias o
personas que trabajan para ella. Las lanchas en las que ella tenía sociedad con los marineros se
fondearían frente al muelle, con el objeto de causar escasez en la ciudad, fue personalmente y sin
compañía como muestra de no tener miedo, a solicitarle al padre Valentín oficiara una misa en nombre
de todos los asesinados, seguidamente y a pie se dirigió a la Prefectura a solicitarle al Prefecto poner
manos en el asunto y le comunico lo que solicitaría a las autoridades de Managua. Se dirigió a La
Pólvora, igualmente a poner en conocimiento de todo al Jefe de la Plaza y de la misma forma que llego
regreso a su casa. Todas la mujeres aristócratas de la ciudad aplaudían de que la hayan tocado y por lo
que miraban la golpearon donde le dolió.
- Mataron a todos sus queridos, solo falto el Chivo Mayor.
Se decían entre ellas mismas, sin darse cuenta de que en ese asunto eran inocentes palomitas que
nadie les tomo ni las tomarían en cuenta.
Las autoridades de Managua se menearon inmediatamente reforzando la guarnición de la Plaza y
con personal con capacidad de investigar los sucesos, igualmente la Presidencial envió a una
delegación que dispusiera en el menor tiempo posible para resolver el caso de los asesinatos en
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Granada. Desde arriba ya de antemano se conocían los resultados de que habían sido los Liberales,
pero el proceder de doña Domitila Maria no lo esperaban de esa forma, de tal manera que al conocerse
la trama esto les afectaría con relación a la imagen que le han vendido a España, los Estados Unidos y
Países de Centro América. Desde el preciso momento en que las familias aristocráticas de la ciudad
vieron pasar a doña Domitila Maria, sola en dirección a la Prefectura y posteriormente a La Pólvora, el
clima de pánico se hizo sentir, las mujeres e hijas de esos terratenientes entraron de los balcones al
interior de sus casas y fue hasta entonces que la alegría termino, cuando sintieron los temblores del
cuerpo de sus esposos y padres respectivamente, los peones mensajeros de otros hacendados iba y
venían de una casa a otra, en las mujeres principalmente se les formo una zozobra espantosa, digna de
una muy buena jaqueca, pero el clima, el terror, los sudores y aquella mudes de los jefes de familia, no
les daba tiempo de perderlo con cosas menores y aunque les diera no había nadie con ese tiempo para
atenderles, los Conservadores, terratenientes o aristócratas se reunían por separados en grupos de tres
o cuatros y ponían al borde del llanto a cualquiera, ni lo sucedido en León, años atrás los había puesto
así. Por otro lado al día siguiente doña Domitila Maria recibió información precisa y de buena mano de
que los Liberales, aparte de sus precauciones que son extremas, también celebran ya que ninguno de
los Generales de Zelaya asume haber dado la orden de esa acción y que para ellos estos actos
delincuenciales les dejaba en evidencia lo que ya imaginaban sobre el asesinato de los muertitos, juicio
que se hacían sin saber la realidad de quien había ordenado esa ejecución. El General Zelaya con
subalternos y lideres Liberales estaban claros de que esa situación era extremadamente peligrosa,
delicada y que podría adelantar muchos acontecimientos de guerra a los que no estaban preparados
aun. El hecho de que si la conspiración fue ordenada por los Conservadores estos estaban agarrados
con solo capturar a uno de los ejecutores y oriento a la vez no inmiscuirse absolutamente en nada a
Liberales y sus fuerzas.
La información que esperaba de un momento a otro, cotejarla con otra para dar con la realidad de
los Liberales y así poder presionar más en la dirección que aparentemente marchaban los
acontecimientos, llego y claramente dejaba por fuera la participación de ellos. Al recibir el último
informe si le aseguraba que estaba en lo correcto. Día después muy de mañana recibió comunicación
de que en la hacienda Pozo de Oro propiedad del terrateniente Manuel Sequeiro, que vivía en
Nandaime, se encontraban siete personas que no eran trabajadores del lugar y que eran trabajadores
de distintas haciendas de terratenientes Conservadores Granadinos, entre ellos don Roberto Suárez y
don Leopoldo Téllez, que vivían uno en el Capulín y el otro en Tisma.
Doña Domitila Maria se reunió en la Iglesia de Guadalupe con los familiares de las víctimas, pero
esto fue para disimular otro encuentro que le serviría posterior a los actos de violencia que
continuarían. Con el permiso del padre Valentín se reunió en la Iglesia con don Roberto Mongalo
Liberal de León y su esposa doña Matilde Barrios Conservadora de Rivas, de iguales procedencias don
Miguel Sansón y su esposa Esmeralda Chamorro de Granada, muy amigos de don Fernando Pasos y
que de una u otra forma doña Domitila Maria mantenía una relación estrecha con estas dos familias
Libero - Conservadoras. Los puso al tanto de la situación que ella estaba manejando hasta el momento
y les pidió que esa información que les proporcionaba, no la divulgaran hasta después de los hechos
sangrientos que sucederían cuando las familias agredidas tomen venganza, sobre los actores
intelectuales y materiales. Las dos parejas acostumbradas a esos ritmos de violencia no solo se
comprometieron a guardar silencio, también dieron opiniones aprobatorias a la acción y acordaron
entre ellos mismos trasladarse inmediatamente a León y así podrían estar los amigos de doña Domitila
Maria tranquilos, por su neutralidad desinteresada de los futuros acontecimientos. Internamente
actuaban de esa manera para protegerse de cualquier acusación en complicidad en esos actos y
mantener la honorabilidad de sus apellidos. Le dieron las gracias por su confianza y dentro de la Iglesia
se despidieron con mucha cordialidad, así como también fueron despedidos por el padre Valentín en la
puerta de la Iglesia a la vista de los vecinos para no levantar comentarios, al concluir sus rosarios, así
mismo los despidió el padre Valentín, a doña Domitila Maria y los familiares de las víctimas.
Por la madrugada del día siguiente el General Chamorro recibió una comunicación de advertencia
que si no entregaba a los asesinos, a tres familias de los involucrados en los crímenes les pasaría lo
mismo que a las familias Suárez, Téllez y Sequeiro. El General ordeno que fueran a las haciendas de esas
familias y que enviaran a Nandaime, a informarse de que sucedía y de no pasar nada brindarles
custodia hasta nueva orden, las tres familias habían sido asesinadas, de arriba para abajo y como
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siempre pasa los capataces y los empleados que se encontraban en las casas corrieron la misma suerte.
Chamorro envió por doña Domitila Maria, pero esta se encontraba desde la mañana del día anterior
apostada frente a La Pólvora con familiares de los asesinados, al llegar el mensaje de Chamorro ella se
negó a acudir y envió por el delegado Presidencial y el Jefe militar de la Plaza, que en ese momento se
encontraban en esa guarnición. Al acudir ella les presento el mensaje del General, lo que aquellos
negaron su presencia en la zona de Granada, por lo que procedieron a encarcelar al supuesto espía
que se había hecho pasar por mensajero del jefe, una hora después se dio un fuerte movimiento de
soldados, que todo Jalteva se salió a ver y ante la vista de todos vieron como un hombre salto corriendo
unos muros de La Pólvora y los soldados lo acribillaron a balazos por pretender fugarse, al conocerse la
verdad de lo sucedido, la gente de Granada que para enjuiciar se lucen, a ese tipo de juicio le llamaron
‘’La ley fuga’’. Hasta ese momento la maraña Conservadora caminaba bien, el traidor había confesado
en donde se escondía la banda de Liberales culpables de los crímenes y después dieron a conocer que
además de eso habían asesinado a tres familias Conservadoras y todo sucedió ante los ojos de
Conservadores y pobladores en general, entre ellos extranjeros.
Los embajadores de varios Países y otras personalidades se interesaron muchísimo por saber los
detalles de lo sucedido en Granada. Los Liberales con fines propagandísticos regaron información de la
conspiración contra sus mismos conciudadanos y todo por culpar al Liberalismo. El General Zelaya, que
era un hombre recio de carácter y desconfiado de sus amigos y enemigos, miraba en doña Domitila
Maria a alguien tan peligrosa y malévola que aun estando lejos de ella, habría que tener cuidado, era la
segunda ocasión que ella planeaba quien sabe que otra persona, acciones que terminaban en
completas carnicerías, como si el mismo odio le pusiera todas las facilidades para hacerlas y salir limpia
ante todo el mundo, ganarse la simpatía y el respeto, ignorando aun que ella había ordenado la
ejecución de los Muertitos, el general Zelaya decía.
- A esa mujer, hasta pedirle un favor, me daría miedo, quien sabe que cochinadas usa esa diabla
Hija de P…
El Capitán Flores se reía el solo cuando Rosita Alemán le dijo.
- Chago, mando a decir Marta Joyilla que le avisáramos a la gente que la misa va ser en el
cementerio para que se fueran encaminando y que te fuera a preparar lo de la tumba en la alameda de
Mangos, al borde de la finca que Domitila María le compro a don Carlos cuando asesinaron a don
Fernando, que en la parte de la finca se podría acomodar a la gente que se pueda, pero hay que
acordonar con hombres para que se evite que esa multitud de gente se lance en las tierras del
cementerio, propiedad de la Alcaldía. Inmediatamente dispuso de hombres y se traslado al lugar, se
fueron de cruzada por lo cerca y para evitar a la gente, que si uno pasa cien veces, las mismas
preguntan hacen.
Sintiéndose un tanto agotada Rosita Alemán se volvió a sentar con la intención de dar una leve
descansada, se sentía pesada por tanto trajín, serró los ojos y no dejaba de ver a su amiga Domitila
María, pero se percato que también en su mente podía ponerle movimientos a las imagen de ella,
entonces prefirió recordar, se acordó del Capitán Flores y sus recuerdo degenerados con la difunta,
pero ella no lograba concebir ninguno de esos recuerdo que en el momento que sucedían eran tan
ocurrentes que a veces pasaban días riéndose de esos sucesos, cuando en eso se le vino sin darse
cuenta, cuando doña Domitila Maria le dio la idea de contratar entre las mujeres para presentar Show
de mujeres desnudas y que se podrían destinar una sola casa para eso. La idea se la dio don Fernando y
el Conde D´Ibarra, le contaron cómo se realizaban en Europa y el gran éxito que tenían y ella tenía
locales de sobra, podría brindar ese servicio a clientes de determinados rangos sociales y que se podría
incluso hacer de una forma que uno se pudiera pasar de un local de tragos, cantina o de juegos para
que la gente en la calle no sospeche del uso del local y al cliente le dé mayor privacidad y seguridad. A
doña Domitila Maria le gusto muchísimo la idea, en definitiva todo lo que el conde decía a ella le
gustaba, después de darle mucha vueltas, se lo planteo a Rosita Alemán. Se pusieron de a cuerdo y
comenzaron a acondicionar una casa de los Putales para utilizar el fondo que daba a la calle El Ganado
y así el cliente podía salir por cualquiera de las dos calles, la cuartería de las mujeres temporalmente las
pasaron a las otras cuarterías, construyendo mas cuartos y en cuestión de una semana el Maestro
Gabriel Cárcache ya tenía listo el local, don Fernando y el Conde D´Ibarra lo revisaron, le dieron el visto
bueno. Comenzaron a traer mujeres de poblados bastante retirados de Granada como Boaco, Estelí,
Matagalpa y hasta de Managua, el éxito del local era rotundo, de persona a persona avisaban de donde
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eran las mujeres que bailarían esa noche, los hombres de negocios, jóvenes, hijos de ricos y
terratenientes asistían con frecuencia, los servicios sexuales estaban disponibles con mayor discreción
que las otras ya que eran mujeres de transito por el local y si alguna de ellas quisiera hacer carrera,
inmediatamente era remitida a los grupos profesionales. Con el tiempo se comenzó a decir que las
mujeres que traerían próximamente eran de Costa Rica, Panamá, Jamaica y Colombia.
Había un famoso truchero que abastecía a todos la trucherías desde Costa Rica hasta Managua y
se había asentado en Granada, con su familia compuesta de su mujer y dos hijo, el se llamaba Ricardo
Bustamante, su esposa Rafaela y sus dos hijos Martín el mayor y el otro Octavio Ramón, mejor conocido
entre sus amigos como Cojoyo, a este muchacho que era delgado y ágil en quiebres de cintura, tenía
unos hábitos muy femeninos, le gustaba cocinar, maquillarse y acostarse con sus amigos hasta llevarlos
a la complicidad de tener relaciones sexuales, jóvenes, viejos, pobres y ricos tenia Cojoyo en su lista de
amantes. Visito en varias ocasiones a escondidas el local de los show Nocturnos, lo hacía
clandestinamente por su Papá don Ricardo que era asiduo visitante y más cuando eran nuevos Show.
Logro hacer amistad con Rosita Alemán y se le identifico sin rodeo que era Cochón y que le fascinaban
los hombres, que le decía todo eso porque quería que le permitiera bailar con los candiles apagados y
a la luz de candelas de cebo La Danza Muda, Rosita Alemán, por muy diestra en esos asuntos de la
creatividad sexual, se quedo impresionada con solo el escuchar el nombre, de la pieza que le proponía
danzar. Quedaron en verse al día siguiente para ver que se podía hacer y que llegara listo para hacer
una demostración de su danza. En efecto, al día siguiente Cojoyo se presento ante Rosita Alemán, esta
lo llevo al local de las desnudas en donde esperaban doña Domitila Maria y Marta Joyilla, conversaron
sobre el show y algunos por menores del mismo, encendieron tres candelas de cebo y se levanto el
telón.
Inicio su actuación.
- Sin música por que la danza es muda.
Les dijo Cojoyo.
Sus movimientos eran eróticos con una tanguita de hilos trenzados que el mismo se elaboraba
para tal efecto y poder ocultar sus genitales amarrándolos, de tal manera que daba la impresión de una
vagina carnuda y velluda. Lo sorprendente fue cuando aquellas nalguitas pequeñas pero redonditas,
comenzaron a calentarse con las llamitas de las candelas, una por una, de derecha a izquierda y de
arriba hacia abajo, el cuerpo y los brazos los contorsionaba al ritmo del movimiento de nalgas y cintura,
cuando en esos sorprendentemente con la mecha encendida se introdujo una candela en el ano, sin
parar los movimientos y sin pujar, jugó con la flexibilidad de la candela sacándosela rítmicamente y con
un pujido erótico indicaba que la candela estaba afuera, al ritmo de vueltas y movimientos se pasaba a
la otra candela y bajándose con el movimiento de izquierda a derecha, repetía lo mismo, hasta que
apagaba las tres candelas, después con pasos hacia delante y hacia atrás con media vueltas como toda
despedida de una bailarina de Circo se retiro del escenario. Las tres mujeres quedaron súper
impresionadas, nunca en sus fértiles imaginación se les hubiera ocurrido que alguien hiciera semejante
acto de extrema sexualidad. Cojoyo se puso su ropa y regreso donde ellas, quienes lo recibieron con
aplausos y hurras, le preguntaron que si no se quemaba el ano y les contó su secreto que usaba
igualmente cebo untado para apagar la mecha y con movimientos se enfriaba para introducírsela, que
era un asunto de práctica.
Lo invitaron a almorzar y doña Domitila Maria que de nada se quería perder elaboro el primer
inventario de cochones y cochoneros de la ciudad, quienes eran parejas, quienes compartían parejas y
en donde se armaban las sodomías, quienes participaban, en esa lista para sorpresa de las tres, salió a
pasear el nombre de Emiliano Zambrano, el que sus amigos le decían que se alejara de Rosita Alemán
Madre, que lo podía volver hasta cochón, eso fue impresionante para ellas, tan súper como la Danza
Muda.
- De suerte no fuiste hija de ese jodido cochón.
Le dijo doña Domitila María a Rosita Alemán
Quedaron con Cojoyo que le harían un despliegue publicitario único para su presentación para el
día sábado. La información de Cojoyo, en al gún momento tendría su valor para doña Domitila Maria.
En eso Rosita Alemán sintió palmaditas en el hombro, era la Chompipona que le decía algo
señalándole a Manuel Ugarte, ella se incorporo y se dirigió directamente donde el.

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 - Me envió Marta Joyilla a traer esta carroza fúnebre. Me dijo el señor de la funeraria que era la del
mejor servicio que tiene, el cochero es el Conejo y este pregunta en donde se puede parquear, también
no tardan en venir dos carretas con flores y rosas para que usted haga el arreglo de la carroza y por
último que envié la mitad de las flores y rosas para adornar la entrada al camino de la Capilla de las
Animas.
- Esta bien Manuel, anda y búscame a Cojoyo y decile que se traiga su equipo la Rosa, la Chiki, la
Paca, a la Perlita y que no olvide a Andrés Galletas…
Todos ellos cochones declarados y reconocidos en la ciudad.
…necesito que vengan a arreglar con las flores el Coche Fúnebre y después la entrada al
cementerio y en donde se va a celebrar la misa, no dilates Manuel, que te voy a necesitar para otros
mandados y decile al Conejo hijo de… ya sabes, que mal me cae, que meta el coche a esta misma
bodega, de aquí vamos a salir.
Al instante que se fue Manuel, Rosita Alemán volvió a sentarse para continuar con sus recuerdos.
Le vino el recuerdo de la presentación se sonrió y la miro la Chompipona, que hizo el comentario con
las otras.
- El que solo se ríe, de sus travesuras se acuerda.
Serrándoles el ojo izquierdo a sus colegas.
El aviso muy elegante decía.
La sensacional Octavia, traída desde la Isla Caribeña de San Andrés, Colombia, en presentación de su último
Show, puro en erotismo y sexualidad sin límite, OCTAVIA Y SU DANZA MUDA.
Sábado a las once de la noche.
Estas invitaciones fueron enviadas a personas selectas, entre ellos el señor Bustamante. En cuanto
llego la publicidad y leyó la invitación Bustamante se dispuso a invitar al Show a sus mejores clientes
trucheros, diciéndoles que no llegaran tarde para agarrar las mesas más cercanas al escenario y no
perderse ni del mínimo detalle. Por su parte los Chiminos si llegaron temprano para ensayar las rolas
que tocarían esa noche, en especial la entrada con violín de La Danza Muda. Esa noche estuvo
completamente lleno el local, tuvieron que pasar mesas y sillas, en cuanto llego el turno a la
Colombiana Octavia, los ánimos estaban encendidos, inicialmente Rosita Alemán hizo la gran
presentación, con fondo musical de violín, en cuanto menciono el nombre de Octavia y su Danza
Muda, los faroles de kerosén se apagaron y el escenario se ilumino únicamente con tres candelas. Salió
la Octavia. La cara no se le identificaba por la escasa iluminación, pero nadie quería ver cara, al observar
la osadía de aquella mujer con quiebres de cintura se iba desvistiendo sensualmente, el calor
comenzaba a hervir cuando vieron aquellas nalguitas redonditas asándose a fuego lento en las
candelas, hasta ese momento los hombres ya llevaban media camisa desabotonada por aquel calor
sofocante que sentían en la sangre, como envidiando aquel fueguito tibio en las nalguitas de la
Octavia, ella continuando su rutina. Eligio la candela del centro y comenzó a jugar con su llama
cuando en eso, ante los ojos desorbitados de todos, la llama desapareció y con el resplandor de las otra
dos candelas se miraba como penetraba a ritmo candente en aquel ano, todos quedaron impactados,
fue escuchar aquel gemido de placer de la Octavia al sacarse la candela, que los hombres volvieron en
sí y la gritería, silvadera y aplausos reventaron, resulta que alguien no se aguanto de la emoción y
tendió la mano creyendo que estaba con su mujer, le agarro la portañuela a otro hombre y le pego un
buen apretón de perinola, huevos y para rematar se la guiño, aquel hombre se levanta con un grito.
- Haaay, Hijo de Puta cochón.
Lo empuja cayendo este sobre tres mesas contiguas y el desorden se hizo, inmediatamente
encendieron los faroles de kerosén y se dejo caer de un solo tajo, un silencio sorprendente, todos
miraban la cara de la Octavia y volvían a ver a don Ricardo Bustamante, quien saco una pistola y en lo
que le iba a disparar alguien le golpeo la mano hacia arriba y el primer disparo lo fallo.
La Octavia con agilidad de Gacela salto a la parte trasera del Tambo, Ricardo Bustamante también
corrió apartando cualquier obstáculo y disparando contra la Octavia, los dos se perdieron en el monte
oscuro en dirección al Lago y solamente se escuchaban los disparos, Rosita Alemán cuando se percato
se estaba riendo y al no poder aguantarse, se fue a reír al otro galerón, las mujeres que la
acompañaban abrieron sus ojos a la totalidad, solo se quedaron viendo, apretaron sus labios y de reojo
miraban también a la Chompipona, que les dijo.

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 - Eso sí que fue fuerte.
Todas se taparon la boca apretándola para poder sonreír por lo menos.
Capitulo XIX
Con el regreso de don Fernando, doña Domitila María se comenzó a relacionar con gente
de León casados o casadas con Granadinos, eran por lo general gente muy simpática y agradable que
para con ella habían sido muy respetuosas, se habían ganado cariños mutuos, con menos prejuicios
sociales por sus diferencias ideológicas, entonces las esposas o esposos Leoneses no fueron admitidos
en los círculos Conservadores, mientras que los Leoneses asimilaron de buena manera ese tipo de
unión. En esas condiciones la única y una primer protección que encontraron fue doña Domitila María,
con relación en comprarles o venderles sus producciones agrícolas y ganaderas, esto le dio muy buena
cancha a ella en todos los sentidos, las puertas de León se le abrían.
En ese tiempo en el que ella fue entrando en los círculos Liberales, en tal sentido los
Liberales también fueron más abiertos que los Conservadores en aceptarla tal y como era, con algunos
negocios y algunos asuntos mal vistos. Entonces aprovecho e inicio a comercializar con los Leoneses,
pero a través de testaferros de Masaya, Carazo y Managua, bajo el control de comerciantes de la Isla de
Ometepe, que para entonces en sociedad con doña Domitila María ya tenían mercado de sus
productos en Managua. De esta forma y secretamente ella se fue haciendo de buenas propiedades en
León y Chinandega. Entre sus abogados y testigos eran personas que gozaban de mucho respeto en
esos tiempos, entre ellos estaban apellidos como los Chavarría, Pobedas, Vivas, López, familias que
adquirían cualquier propiedad y pagaban a buen precio, igualmente mataban por adquirir una
propiedad, era tan así el respeto por esos apellidos, que fue hasta después de la muerte de doña
Domitila María, que en León y Granada, se dieron cuenta de que ella tuvo sus tentáculos muy
extendidos en el occidente de Nicaragua. Los Generales liberales, se enteraron del asunto después de
haber tomado el poder y control del País. Con ese asunto dieron accidentalmente, cuando
descubrieron que la forma de saludarse la gente de doña Domitila Maria, era un golpecito de puño con
puños serrados. Al popularizarse el saludo para esos agentes de ella, dejo de tener sentido, si ya todos
se conocían, mientras los Liberales lo consideraron un tipo moderno de saludo Europeo entre jóvenes.
Los Liberales discretamente comenzaron a indagar, por la sencilla razón de que dicho saludo se inicio
entre estas familias Leonesas de Abogados y sus clientes de Oriente, siguiendo el hilo conforme a
documentos oficiales notariados, fue que llegaron a la conclusión que en sus manos tenían los bienes
de doña Domitila María en occidente, para entonces era demasiado tarde para poder actuar en contra
de ella en León o Granada además de ser inadecuado en ese momento.
El General Zelaya ordeno guardar prudencia y con frecuencia se comunicaba con el
General Juan Bodan en Granada para estudiar en el propio terreno, que tipo de espécimen era en
realidad esa mujer que tanto dio que hacer a Conservadores y Liberales en la guerra. El general Bodan
buscando en la ruta lógica de indagarse de fuentes fidedignas y confiables para el General Zelaya, tuvo
que recurrir a aquellos matrimonios y uno que otro Liberal que vivían en Granada y tuviera sus tierras
muy bien posicionadas, fue encontrándose como primer repuesta de que el dinero para la compra de
propiedades, había salido de los bolsillos de los mismos Leoneses, producto de la comercialización,
agrícolas, ganaderas y otra materia prima, que de contrabando traía de Costa Rica, Panamá, Islas del
Caribe, Colombia y los Estados Unidos, o sea que una gran parte de lo que se consumía en el Occidente
del País, lo obtenían por la línea comercial de doña Domitila María. En cuanto recibió la información el
General Zelaya y conoció de la red que se encontraba tendida para abastecer esa zona aun en los
momentos más críticos de la guerra y que esta red constituía una fortuna les dijo a sus amigos.
- Jodido, en donde buscamos y donde le busquemos nos sale esa mujer jodida, pareciera
que tiene los cachos y la cola del Diablo. Puta que mujercita esa para joder y no hay huevos para
joderla de una sola vez, además que estamos maniatados.
Nadie lo sabía y por esa razón el General Zelaya, ordeno guardar con rigurosidad el asunto
y esperar a ver que provecho se le podría sacar, en especial con ella y oriento al General Bodan
acercarse prudentemente a la fiera sin levantar polvo.
Fue cuando doña Domitila Maria comenzó a nadar en las dos aguas, sin temor
absolutamente a nada, en todo caso en sus adentros, muchos cambios que estaban haciendo los

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Liberales le parecían justos, necesarios y correctos, por lo menos en áreas en donde los pobres salían un
poco beneficiados en esos momentos.
‘’Tal vez más adelante las ideas Liberales y Conservadoras se junten para el bien de la gente
pobre’’.
Se decía engañosamente ella.
Las indagaciones del General Bodan ya habían levantado polvo cerca de de ella, por boca
de sus amistades Libero - Conservadoras. No para alarmarla, si no, más bien les parecía a esos
matrimonios que ya era hora de que el comercio entre León y Granada, sea abierto sin peligro, ni
temores, esto les traería beneficios a las dos zonas y su gente. El argumento era alentador por los
recursos económicos que significarían para sus futuras inversiones, por ser la punta del mercado entre
las dos ciudades, pero el compartir no le llamaba la atención, por la sencilla razón de que en ese tipo de
sociedad los que entrarían al juego era gente desalmada y peligrosa, que al final resultaron ser mas
confiables que algunos que la rodeaban como don Carlos Pasos Arellano.
Su debilidad en León, radicaba en sus abogados que con un poco mas de dinero y con el
ofrecimiento que les podría hacer el Gobierno Liberal y sus garantías, sería lo suficiente como para que
se mataran entre ellos mismos a como en realidad sucedió después de su muerte. No constaba con la
fidelidad que el negocio le exigía, todo era bofe, la fidelidad era para el que ofreciera más dinero. La
tranquilidad alcanzada tenia mayor valor, en todo caso ella no perdía por que había recuperado su
inversión, saco buenas ganancias y además pretendía hacer muy buenas adquisiciones de propiedades
en Carazo y el Volcán Mombacho, Nandaime y Rivas, que eran territorios que ofrecían lo mismo o mas y
al alcance de la mano, sin peligro. Estudiaría la manera de salir de León, sin que le debieran y sin
deberles. Siempre guardando la prudencia y depositando confianza al mismo tiempo en sus amistades,
a ellos les solicito que con oportunidades casuales le acercaren al General Juan Bodan, de tal manera
que no se crea que estaba ‘’tirando los guantes con el polvo de los caites’’, como Corral ante Walker.
Aquellas amistades comprendieron, que era una decisión sensata, honesta y de buena voluntad por
parte de ella, para dejar que las aguas vuelvan a su curso, por lo que le fueron fieles en no dar ningún
tipo de información que indispusiera al General y que los encuentros casuales y en público fuesen
encausándose en una reunión formal y poder discutir cualquier inquietud que tuviese el Gobierno.
Las acciones militares en la Costa Atlántica, encabezadas por el General Rigoberto Cabezas,
significaron un fuerte retroceso de los planes del General Zelaya, en cuanto a mejorar la economía y la
situación en general en que se encontraba el País. El Gobierno Liberal no tenía para entonces los
recursos requeridos en esa nueva guerra, habían quedado en malas condiciones económicas y lo que
encontraron por parte del gobierno Conservador eran ruinas, a tal grado que el general Zelaya en una
ocasión dijo.
- Ni donde cagar dejaron, esos Conservadores Mierdas…
Esto le daba cartas para tener debajo de la manga a doña Domitila María. La Isla de Ometepe y
las riveras del rio San Juan, eran entonces zonas productivamente activas, una buena parte de esa
producción la tenia ella en sus manos y para controlarla o restringir su salida al mercado, se requeriría
de cinco ejércitos como el que tenían los Liberales en la Costa Atlántica o en el País.
A como dicen los galleros, cuando su gallito peligra perder.
‘’Mi Gallo todavía bebe Sopa’’.
Los Conservadores aunque se les podría considerar derrotados, tenían en sus manos un arma
esencial para negociar. ‘’La Comida’’.
Sin ella, los Liberales tendrían sus días contados, un levantamiento popular era la primera
opción a la que apostaron los Conservadores con el Departamento de Estado y al igual que cuando
Walker,
‘’Los vencidos parecían ser los vencedores’’.
Por el simple hachote tener carta libre por los Estados Unidos.
Manejando perfectamente esa situación ventajosa para cualquier cosa, doña Domitila María
como desventaja tenia de que ese motivo no le permitiría salir de León tan pronto como ella lo
deseaba, ya que los Generales desearan sus tajadas de ese negocio y mantenerse limpios, por tanto
tendría que mantenerse en alerta y en pie de guerra, unos por una revancha y era de esperar que
salieran con taradas de última hora. Nadie en las condiciones de los Conservadores tiene
oportunidades como estas, pero a como dice el dicho.
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 Por muy aristócratas y Generales que fuesen, la desesperación los mataba.

La información que recibía por parte de los Conservadores, sobre el conflicto de la Costa Atlántica

era que a través de Leyes Internacionales tendría solución y arreglos. El reconocimiento de Inglaterra

sobre los derechos soberanos de Nicaragua de los territorios de la Costa Atlántica, muy pronto sería un

hecho.

La cierta simpatía de doña Domitila Maria con el Gobierno Liberal, se inclinaban a beneficios de
su política para con los pobres, el acceso a la educación, la atención medica por parte de la patronal a
sus trabajadores, la adquisición de tierras en el Pacifico del País sin prejuicios de condición social e
igualmente en la región del Atlántico, en donde con toda seguridad sus riquezas atraería a muchos, las
Libertades personales y colectivas, aunque mínimas, pero ya eran un hecho en el ámbito social y
político, los logros económico, con la creación de las conexiones que conformarían la red del Ferrocarril
del Pacifico, que sería de gran impulso comercial y laboral, el auge industrial y comercial, entre otros
aspectos de la vida política, económica y social, que por lógica habrían que sentarles las bases, para que
se proyectaran y consolidaran. Los arreglos políticos estaban en veremos, los Ingleses con los Estados
Unidos y sus intereses no se quedarían con los brazos cruzados, en ningún momento permitirían perder
su hegemonía en un País tan importante para la región como Nicaragua. En fin el nuevo orden que
gradualmente daría el pase libre al gran desarrollo y progreso para todos era todavía una ilusión, en
todo coso para ella, no habría problemas de aumentar sus riquezas con nuevo orden o en desorden,
confiando siempre que podría aun desenredar cualquier situación.
Toda esas marañas políticas a doña Domitila Maria le parecían de gran beneficio para los pobres
que en realidad no miraban luz al final del túnel, que sus trabajos eran su único y gran capital, así que
para donde cogiera, sería lo mismo. Ya con educación, con transporte ágil, la libertad de escoger en la
gran demanda laboral que exigía el País para salir adelante, significaba un logro bastante alto, en otros
lugares, ser calificados en un oficio ya les da una posición, saldrían del anonimato, al que el pobre y
luchador a estado relegado. En esta Nación al nativo nunca se le ha considerado parte integral de las
bellezas de el País, simplemente cuando a él se refieren es sobre su mano de obra barata, su fortaleza
de animal como las Domitila Miranda y arrecho a ser utilizado en la guerra como carne de cañón, ya
que en los libros de Historia tiene más valor registrar el estilo de vida de los ricos extranjeros, con sus
grandes casas coloniales. Nadie escribe ni hablar de los dueños del País y si lo hacen, será con un
maquillaje que lo distancia de sus raíces y su riqueza ancestral.
A doña Domitila María le parecía que el Gobierno Liberal podría significar el primer empuje de
que los pobres reciban su verdadero lugar, pero su complicidad y ambiciones, harán en ella ver lo lejos
que estaba esa necesidad en hacerse realidad con los Liberales y Conservadores. Es por eso que don
Fernando, que no se metía en política, cuando doña Domitila María tocaba ese tema con, le contestaba.

- No te engañes Domitila María, la sangre ajena hasta los pobres que son los que la ponen, la olvidan,
por eso se aprovechan y se burlan de ellos, decime de un Historiador que anteponga las costumbres, al
estilos de vida nuestro y no se haya olvidado de sus raíces, al contrario ellos nutren las fabulas de los
ricos, hay algunos que se atreven a colocar al poderoso como víctima por su sacrificio en estas tierra y
los pobres son los victimarios con su ignorancia y violencia. Con esas mentiras ocultan la verdadera
Historia y mienten como Walker con verdades manejadas a sus intereses, pregúntele al profesor Avilés,
que si los Liberales hubieran gobernado estas tres últimas décadas del siglo, se contara la misma
Historia que conocemos ahora, no se engañe mi amiga.
- Yo sé don Fernando pero si al fondo del túnel hay una luz, claro está que en este momento
no se mira, pero por lo menos párese que ya están los pobres en el túnel, que ni eso les han permitido,
ya hay logros.
Le contesto doña Domitila María y en eso tuvo razón, la verdadera Institucionalidad de la
República estaba naciendo, aunque tarde unos quinientos años en establecerse por culpa de estos

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nativos violentos, dirán algunos Historiadores al servicio de los futuros explotadores. En las partes de la
Historia de la conquista ella era tajante en su repudio por lo que esta represento en nuestra raza, no
participaba en Develaciones de Placas conmemorativas, en donde figuraban representantes de los
nuevos explotadores o ceremonias de remodelaciones de las reliquias que ya se les han olvidado lo
brebajes para hacer milagros para los Pobres y los sustituyen por imágenes modernas, que su
vestimenta se identificas con los pobres Españoles, Portugueses e Italianos y en nada con nuestra
cultura y están autorizadas a imponen las mismas penitencias del sometimiento, para con los nuevos
victimarios. Igualmente ella rechazaba toda ínfula de grandeza por parte de gente oportunista y más
aquellos que por ser estudiados, se presentaban como representantes del habla popular, de su cultura y
su herencia ancestral, ganando dinero por ese cinismo y optando las culturas de los conquistadores
como propias y la colocan por encima de la nuestra.
Muchas de todos esos razonamientos la topaban principalmente los negocios de León, la
estaba absorbiendo mucho y su preocupación era que no podría desamparar a todos los testaferros
que le sirvieron y no solamente eso, también fueron parte activa de la ejecución de muchas personas,
del chantaje para la compra de tierras, casa y objetos de valor, por actividades ilícitas comerciales, como
el contrabando de Honduras a Nicaragua, por los puntos fronterizos de Somotillo y Cinco Pino, con sus
rutas de penetración para Chinandega, León y Estelí. Le ayudaron también en los chantajes sexuales a
terratenientes, con concubinas y homosexuales, asesinatos y violaciones a mujeres del campo a niñas o
niños, principalmente por eso no podía dejar abandonados a esa gente que fue fiel con ella y no sería
justo dejarlos en manos de asesinos sedientos.
En todos estas reflexiones que hacía, hasta donde le podía llegar su razonamiento y
preparación, sucedía que terminaba agotada, como indicándole el tiempo que limpiara la casa, para
pasar menos agitada y mas despreocupada los últimos años de su vida, aunque ella lo sentía y lo sabía,
siempre se decía que le faltaban asuntos por desenredar.
En uno de esos días llegaron Rosita Alemán y Marta Joyilla, con barios cazuelas de comida
y le dijeron que llegaban a invitarla a comer para subir los ánimos, que la miraban decaída y que
también se estaba olvidando mucho de la comidita de monte, por comiendo con gente rica, a lo que
ella les contesto.
- Solo babosadas son ustedes.
Acomodaron todo sobre la mesa con mantel frente a su habitación y comenzaron a
servirse mientras hablaban, sin perder el hilo de la conversación a comer se dijeron.
- Vean Domitila Maria y Marta Joyilla, si yo tuviera unos años menos, les digo, aquí en
Granada, reinara la felicidad, yo la llenaría de placeres, lástima que pasa el tiempo y cuando lo tuve lo
perdí…
Las dos comían y se volvían a ver, como diciéndose que ya sabían con que iba a salir.
… En mis tiempos de vaca brava, solo viejos pendejos venían a Granada…
Se volvían a ver nuevamente y se sonreían.
… Estoy viniendo de donde Poropo de dejarle el guaro de la semana y miren, estaban
cuatro cueritos extranjeros, pero de las cosa bellas…
Las otras dos ya riéndose.
… Que si fuera algo joven me los hecho a los cuatro juntos.
- Lo haces, contas y no te creería Rosita, sabes yo te creería de que te cogiste a los cuatro
cueritos juntos.
- Ya vas.
Le dijo Rosita Alemán, doña Domitila Maria solo miraba las poses retadoras de ella.
- Yo te juro que te lo creería, solamente que me lo contara tu hermano Carlos Alberto.
Doña Domitila Maria y Marta Joyilla rieron. Para ese tiempo era un fisgón profesional y
reportero pornográfico que su placer era contar los actos sexuales que espiaba.
- No jodas, si ese come mierda con solo mire que a uno se la meten, ya anda diciendo que
hasta lagrimas le sacaron o que a uno le dio pedorrera, anda come mierda vos también, como yo fui
mejor culo, aun a mi edad, me tenes envidia, no babosa si estoy entera todavía.
Doña Domitila Maria y Marta Joyilla, no se aguantaban de la risa de ver la reacción de
Rosita Alemán, en eso doña Domitila Maria le tiro la bala de gracia.

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 - Mira Rosita, déjate también de pendejeras, ni por muy chavala que estuvieras no le
aguantas a esos cuatro cueritos que vistes, nosotras nos criamos juntas, si te hubieran agarrado esas
cosa bellas que decís cuando chavala, te aseguro que estuvieras cagando en batella todavía…
Se sueltan en carcajada las tres mujeres, sin dejar de comer.
… Si de buenos culos hablas en nuestros tiempos, vos no eras mejor que la Coneja.
– Ni me hables de esa Hija de P… si quieres seguir siendo mi amiga.
Dijo inmediatamente Rosita Alemán, Marta Joyilla y doña Domitila Maria se reían, pero ella
se hizo la seria.
- Entonces, cántanos porque la odias tanto si eran uña y carne.
Le pregunto doña Domitila Maria.
- Miren lo que me hizo esa Hija de P… de la Coneja, me manda a llamar con urgencia, yo fui
por no dejar
– No seas babosa…
Interrumpió Marta Joyilla.
… Si se echaban, con cuantos hombres podían acostarse en una noche.
- No seas chocha déjame contar la babosada, el caso es que yo fui, en ese tiempo yo
caminaba a todo tiro lo que saliera era carne, no le puse cuidado, llegue y me contó, que la noche
anterior había estado con dos hombres que eran hermanos y que querían probar con otra mujer, estos
eran hacendados ricos de Chontales que iban rumbo a la Isla a cobrar un ganado que ya habían
entregado, que si quería me los podía coger y que me arreglara con ellos. En efecto ya en la tardecita
llego el primero y no fuimos a la costa buscando adentro del camino a Malacatoya, en fin todo salió
bien con la paga, pero ese jodido, yo no sé cómo puede ser casado.
- Que era muy exagerado o te pego tu cachimbazo para que te menearas.
Le dijo Marta Joyilla, poniéndose las dos a reír.
- Deja de joder o no cuento nada. Que va, pero si ni en la boca se podía acomodar esa
chochadita, si era así…
Arrugando la cara les mostró la puntita del mango de la cuchara y les dijo.
… Esto todavía es grueso para esa pollita, no me le reí, tuve miedo que me pegara mi buen
cachimbazo en la trompa, bueno el hombre termino y me pago bien, regrese a la casa de esa jodida y le
conté, entonces la muy Hija de la Gran P. me dijo.
- Y sabes una cosa, a ese le dicen Turca de León.
– No joda y como le decían al otro.
Pregunto doña Domitila Maria.
- Pues al otro lo apodaban Turca de Oro.
– Pero por lo menos pagaron bien.
Pregunto Marta Joyilla.
- Si, para que pagaron muy bien, hasta le di reales a la desgraciada de la Coneja, llego el
segundo hermano y nos fuimos a los potreros que están cerca de donde ella, como a esa hora llevan al
ganado a la playa, pues nos fuimos, yo me acuesto con el gancho abierto y ya mas vergüenza me
estaba dando a mí que a ellos y que va hermanas, se me encaja y siento una chocada, que hasta
escalofrió me da con solo acordarme, yo pujo y me agarro con fuerza al lomo del jodido, me está
volando merengue cuando el Hijo de P… me dice que le meta el dedo en el culo.
Se vuelven a carcajear y doña Domitila Maria entre risas le dice.
- Vos tenes suerte, te sale con buena tranca y gallo-gallina, que mas quieres.
Se continuaron riéndose.
- El deacachimba a vergas me agarro la mano y se la puso en el culo, pero yo la tenia
serrada con huevo, pues se canso y se metió el dedo el mismo, para que quise mas hermanitas, se lo
mete y me deja ir el resto de esa verga, que yo si sentí que me estaba partiendo en dos o como si estaba
pariendo de nuevo, yo me agarre con fuerza de su lomo, pensando que en cuanto me la sacara, se me
iba a salir todas la tripas por el bicho, no se algo sucedió pero yo solo sentí como un aire caliente y lo
escucho…
- Haaay, que rico…
… Me la saca, yo sentí un gran alivio, pero como si me quitaron un barco de encima, se la
vuelvo a ver y miro una chocada, mejor toco madera…
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 Golpeo varias veces la mesa y repetía.
… Toco maderas Machala, Machala.
Las otras dos no se aguantaban de tanto reír.
… y todavía aquel animal Hijo de la grandísima P… me dice.
- Estas socadita todavía Amor en la próxima nos podemos casar.
- Me quede acostada no se cuanto tiempo, cuando regrese casi arrastra donde la Coneja, la
voy encontrando en carcajadas, riéndose de mí la muy Puta y me dice.
- Como te fue Rosita, siéntate.
- Yo la quedaba viendo con fuego en mis ojos, hasta la silla me tenia lista, no jodas le dije y
ella me contesto.
- No te fijaste babosa que yo no puedo ni caminar todavía.
Aquellas tres mujeres hasta hicieron temblar la casa de la carcajada que se pegaron.

Capitulo XX
Don Carlos Pasos Arellano regreso tres años después de los sucedido a los muertitos
Conservadores y Liberales, regreso con toda su familia y se alojaron en su casa en la calle La Calzada,
doña Francisca cumplió en traer a su prima, una mujer joven y muy simpática, hermosa y alegre de
nombre Valeria, igualmente les acompañaba el Conde D´Ibarra y la hija mayor de Rosita Alemán, de
nombre Rosalía Alemán, siendo aun una niña de 10 años de edad, él Conde con el consentimiento de
la Madre de la niña, doña Domitila Maria y el conocimiento del padre Rodrigo, se la llevo a España de
niñera de un recién nacido que tenia él, con el compromiso de cuidar de la educación de la niña, a lo
que él hizo honor a su palabra. Rosalía regresaba siendo una mujer próxima a ser Doctora en leyes. La
otra sorpresa para doña Domitila Maria, fue el estado de degradamiento físico de don Carlos, a
diferencia de doña Francisca que parecía una mujer entera, aunque en realidad ella era menor que don
Carlos unos 25 años.
Los tres hijos de don Carlos con la difunta doña Marlene ya eran personas mayores, pero de
los tres el hijo mayor Carlos Joaquín, que era uno y medio año menor que doña Domitila Maria era el
único soltero. Fernando José, se había casado, con una mulata Portuguesa de nombre Paola Luna y su
hija Mercedes Maria igualmente se caso con un distinguido doctor don Bayardo Arguello.
Todos ellos vivirían inicialmente en la casa familiar mientras construyan las suyas propias, pero en
la realidad el único que quedo fue Carlos Joaquín, a don Bayardo Arguello, no le gusto Granada, para
ejercer su profesión y antes de un año de haber regresado se fueron a vivir a Managua con doña
Mercedes Maria Pasos Echeverría, al poco tiempo don Fernando José Pasos Echaverria se traslado a
León en cuanto asumió el Gobierno los Liberales, con su esposa doña Paola Luna de Pasos, bien
recomendados con los familiares de los matrimonios Libero – Conservadoras y estos fueron bien
acogidos, en todo caso el mando y administración de los bienes de la familia Pasos Echeverría
quedarían en manos de Carlos Joaquín, hijo mayor.
Por parte de la familia Pasos Sacaza, eran mujer y varón, eran unos niños aun, de ellos lo que
sobresalía era la belleza y gracia de la niñita Ángela María, con toda claridad se miraba que iba a ser
una mujer muy bella, el niño Álvaro Manuel tenía al corte de los Pasos, ellos, estarían un corto tiempo y
regresarían a España, los dos ellos no comulgaban con Carlos Joaquín por sus prepotencias e
imposiciones humillantes para con ellos, doña Francisca se refería de él con cierto desprecio y no
ocultaba su antipatía, ella decía.
- Domitila María mire parece un cochón peleando con mis hijos. Como si no se diera cuenta que es
un huevonaso.
Sus hijos regresarían a España acompañados del conde D´Ibarra y Rosalía Alemán. Regresaron a
Nicaragua en el año de 1908. Fue un acontecimiento en la ciudad el ver la belleza inigualable de
aquella joven, su cara, cuerpo, piernas, brazos, porte, hasta las viejas se salían a la puerta para verla
pasar, definitivamente superaba cualquier manifestación física de belleza entre las mujeres Pasos, su
estilo de caminar con todo su conjunto eran propios para una princesa. Rosalía les acompaño en su
viaje de regreso ya que el Conde se encontraba en mal estado de salud y según la hija de Rosita
Alemán, la muerte lo rondaba.

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 En un inicio doña Domitila María no puso tanto reparo en aquellos hijos de don Carlos, pero el
tiempo y el trato con ellos rápidamente la balanza se inclinaría por el hijo y la hija de doña Francisca.
Según supo doña Domitila Maria, el trabajo encomendado a don Carlos en España y Estados
Unidos, fueron de un rotundo éxito, al extremo que aun bajo el Gobierno Liberal el optimismo era
igual, de que había que esperar un poco.
Mese después que tomaron el mando del País los Liberales, don Carlos recayó en cama y hasta ese
momento su vida pública llega a su fin, aunque su influencia política siempre la mantuvo activa y la
asesoría a su hijo mayor con relación de los negocios de la familia.
Don Carlos en ningún momento fue partidario de involucrar a Carlos Joaquín en los asuntos de la
política, pero el traía una mala espina sin razón alguna o por haber sido separado de la casa Paterna y
tener que crecer sin Padre ni Madre, teniendo vivo a uno de ellos, se le miraba el rencor en contra de su
propia familia y mas por aquellos que posiblemente los culpa de ese abandono. Don Carlos le decía.
- La política en este País es un campo amplio, peligroso, una persona carente de información y de
conocimientos de la actividad que está ejerciendo, no tiene futuro alguno y si lo encuentra seria la
muerte.
Posiblemente ese era el peligro que miraba don Carlos, al no quererlo involucrar en política.
Cuando el llamo a doña Domitila Maria, tuvo que tragarse todo su orgullo y bajo las advertencias
de doña Francisca, que para entonces ya conocía lo suficiente como para opinar al respecto y le dijo.
- Lo que tramaron los líderes Conservadores en contra de Domitila María fue una traición sucia y
malévola, no te alteres si ella en algún momento te recuerda algo sobre aquello, que de haber actuado
ella como pensaban, fuera historia y no solamente eso, si no un simple recuerdo de una criada que
quiso jugar Póker con sus patrones y tú fuiste el que Sembró la Semilla.
Doña Domitila María llego a la casa de los Pasos a la hora indicada y fue recibida por doña
Francisca y su prima Valeria, la convidaron con un refresco de Naranja con panecillos y mermelada, con
la excusa de que don Carlos se encontraba aun desayunando, aprovecharon y conversaron algunas
cosas vagas, llego el momento de ir donde don Carlos, que se encontraba en el segundo piso.
Después de unos cortos saludos y echadas de flores, se sentaron doña Francisca y doña Domitila
Maria, que no le pasaba el asombro a lo que había sido reducido don Carlos Pasos.
- Una sola regla, vamos a conversar a calzón quitado.
Con sonrisas las dos hicieron gestos aprobatorios.
- Domitila Maria quiero que me digas desde tu punto de vista como vez en realidad la situación en
que se encuentra el País, que movimientos hay en contra y a favor del Gobierno, que espera la gente y
para donde crees que vamos con un Gobierno Liberal.
- Don Carlos, usted puso una regla antes de comenzar esta conversación, está en su derecho es su
casa, aprobamos lo que diga y así evitaremos rodeos, pero si vamos a calzón quitado yo pongo la
segunda regla, es mi derecho como invitada…
Igualmente dieron su aprobación.
… Con el mínimo gesto que yo mire de que el rumbo de la conversación, no le es buena para su
salud, yo me paro y me retiro, estamos…
Ellos aprobaron y agradecieron su consideración, prosiguió.
… Lo que yo le informe a usted ya lo sabe, a calzón quitado que es lo que quiere saber o sobre
quiénes.
- Mira Domitila Maria, Carlos te pregunta por eso para saber cuál es tu posición en relación con el
Gobierno, para poder tener una mejor visión de cómo abordarte con la pregunta o el asunto por el que
te mando a llamar.
Dijo doña Francisca.
- Eso que dice Francisca así es pero el asunto es de que mi hijo Carlos Joaquín, me ha dado una
serie de información, aclaro que no se las he pedido, con relación a un movimiento político joven que
se está formando, con el apoyo de viejos Conservadores, para enfrentar el Gobierno y que una persona
de su confianza le dijo, que a Domitila Maria se le iba a pedir que encabezara ese movimiento, muchas
cosas con relación a tu persona, cosas que nosotros en ningún momento le hemos hablado y mucho
menos ahora me las ha contado sin tener idea de lo que en realidad sucedió, la verdad es de que ese
asunto me ha tenido intrigado, yo le insisto que deje la política a otra gente y que viva lo suyo, que se

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dedique al trabajo productivo que hoy por hoy, es la única arma con la que contamos los
Conservadores, tenemos riquezas y por eso nos van a tomar en cuenta.
- Don Carlos, para comenzar y usted haga sus propias valoraciones, le voy a contar a usted una
historia que estoy segura que ni usted, ni doña Francisca, la saben ni se la imaginan que se haya dado
algún día, si usted me entiende daré por contestadas sus preguntas.
- Esta Domitila Maria, no cambia, siempre sacando historias debieras de volverte Cronista.
Interrumpiendo doña Francisca.
- Si doña Francisca esta es parte de la Crónica de la familia Pasos Arellano. Ustedes saben del por
qué don Fernando desde que vino, se rehusó rotundamente a meterse en asuntos políticos y
matrimoniales.
– Eso lo trajo de España, el siempre se aparto y prefirió la vida bohemia é incluso Ángela María
quiso en algún momento de involucrarlo con movimientos Intelectual en España.
Dijo don Carlos.
- No don Carlos, eso ya lo sabía por boca de la niña Ángela María y yo en ese tiempo no podía
contarle esto por ser muy jovencita para hablar de otra persona con autoridad, mucho menos de don
Fernando que ni lo conocía. El salió así de aquí, específicamente de la hacienda Panaloya…
Doña Francisca volvió a ver a don Carlos para estudiar sus gestos y se acomodo como de
costumbre cuando escuchaba algo novedoso.
… Cuando en la segunda reunión, en donde participarían don Joaquín con sus amigos y socios
Conservadores, con la parte Conservadora que apoyaban el contratar tropas extranjeras encabezados
por el general Corral, ya el negocio con los extranjeros estaba serrado y con la bendición del clero, fue
entonces que ejecutaron sus planes de precaución para proteger a sus familias y sus bienes. Hasta este
punto estamos claros, ustedes ya lo conocían.
- Por ese lado vamos bien, pero Fernando que tiene que ver si era muy joven aun, continúa por
favor Domitila María.
Pregunto don Carlos, cediéndole a la vez la palabra a ella.
- Bien, lo que no saben ustedes es de que antes de la famosa recepción con los líderes
Conservadores, el General Corral se presento a esta casa con Byron Colé, desde ese momento don
Joaquín queda claro de lo que venía y para formar la alianza con los Conservadores de las costas de el
lago, Chontales y Boaco, don Joaquín se traslado a distintas haciendas para elaborar sus planes, en ese
viaje fue acompañado por el entonces joven Fernando…
Don Carlos hasta cambio de color, era algo que realmente nunca se lo hubiera imaginado y venir
a darse cuenta casi cuarenta años después
- Se siente bien don Carlos.
Pregunto doña Domitila Maria, a lo que respondió que estaba bien, algo sorprendido, doña
Francisca se limito solamente escuchar.
- En todo camino hay piedras que estorban y hasta son peligrosas, don Fernando miro, como se
iba a limpiar el camino y no solamente eso, comió, platico, abrazo y les dio las manos a esas personas
que les estorbaban a este grupo de don Joaquín, en una ocasión en estado de ebriedad, yo le conté
esto mismo a don Fernando, es lo que yo sé, recuerden que para entonces yo no había ni nacido,
entonces con lagrimas en sus ojos y a recostado en este hombro, me contó que por muchos años el
miraba a esa gente que saludo, con los que comió y fueron asesinados, me dijo.
‘’Por eso desde que vine, no quiero meterme en política, ni me Caso, en este País, hasta casarse es
Política. Pobre País, por sus Políticos Cochinos, traidores y sus Guerras malditas, hieden a la mismísima
mierda del Diablo, todos ellos’’.
El silencio se apodero de todos. En su pensamiento don Carlos se decía. Si Domitila Maria hasta
ahora me lo cuenta, esto huele a mucho peligro.
- Continúo…
Don Carlos le contesto.
- Si.
… Entonces don Carlos, la repuesta a su pregunta debe de buscarla usted, que hay
verdaderamente en los sentimientos de Carlos Joaquín, por lo que yo se, ese movimiento es totalmente
insipiente, sus objetivos son otros, lo quieren mezclar con la política por apariencias, por lo que quieren
ocultar, verdaderos movimientos son los que realiza, por mencionar una persona, el General José
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Mercedes Gómez con el que he tenido el placer de conversar y hasta de ayudarle, aunque dice que el
General Emiliano Chamorro lo nombro General, cuando lo ascendió le dijo que no le dijera a nadie que
era General.
Los tres rieron de lo ocurrente de aquel acto de ascenso militar y don Carlos agrego.
- Y Generales así hay muchos en las filas Conservadoras y no creas hasta en los Liberales.
Continuaron riendo y doña Domitila María prosiguió.
- Yo si me preocuparía por Carlos Joaquín, lo que miro peligroso son las personas que están
incitándolos y la principal línea de ellos es la venganza y con odió sin tener motivo, pero no por política,
quieren que la gente de este País los acepte con sus instintos, eso en la cabeza de gente rencorosa ,
pendenciera y cobarde ha como es su hijo, es peligroso, un amor a otras cosas que ni usted, mucho
menos nosotras podemos entender, esa gente termina mal, a calzón quitado eso huele a Flores,
espelma e incienso o sea a muerte y le voy a repetir, no es por política.
Don Carlos estuvo por unos momentos recapacitando y finalmente dijo.
- Aceme un favor Domitila Maria, me vas a disculpar pero te quiero pedir que nos miremos
mañana para que continuemos esta conversación, tengo que ordenar muchas cosas en mi cabeza, a tal
grado que hasta me olvide de que en realidad para llegar al fondo de estos asuntos, hay que ser sincero
con uno mismo primero, te agradezco mucho que te hayas molestado en venir y te ruego no me faltes
mañana, voy a morir envidiándote por tu memoria y saber utilizarla.
- Carlos, si te sentís mal decímelo, si quieres estar solo, saldría con Domitila Maria y Valeria a agarrar
un poco de aire, se puede.
- Anda y no te preocupes, da instrucciones a la Negro e Ismael de que estén pendientes de la
campanilla, si van a casa de Domitila Maria, cuida que no agarre vuelo Valeria, mira que anda de veme
y no me toques, no es por nada Domitila Maria, pero esa muchacha ya esta hasta para dar clases, si van
me saludas a Rosita Alemán y Marta Joyilla, esas te van a hacer reír también.
Cuando bajaron convencieron al Doctor Arguello y a Fernando Manuel de que dejaran a sus
esposas acompañarlas y aun que no hablaron mucho se divirtieron y la pasaron bien, entre mujeres y
libres
Salieron las cinco en uno de los coches de la familia Pasos Sacaza, en dirección de la casa de doña
Domitila María, era la primera vez que ellas salían solas y entrarían en contacto directo con Nicaragua,
gente sin prejuicios de lo que son, alegres de espíritu y libres de escoger el camino que deseasen sin
temores a los obstáculos de la vidas, ni a las penitencias de la Iglesia Católica.
En cuanto llegaron a la casa envió a traer al padre Valentín para presentarle a sus paisanas y al
mismo tiempo aprovechar para que almorzara con ellas.
En casa de doña Domitila María tenía como huésped al Conde D´Ibarra y a la Rosalía Alemán que
ya estaba pronto a salir de regreso a España en compañía de los menores Pasos Sacaza. La ocasión fue
muy oportuna para que ella entrara en contacto con las personas más cercanas a doña Domitila María.
- Miren amigas, no quise llevarlas a ningún otro lugar, para que no pensaran que mande a
preparar las casas y aparentar, las traje directamente para que miraran en la realidad como es la vida,
durante el día en mi casa y en mi calle El Desenredo.
Las cuatro rieron por el nombre curioso de la calle.
Ya para entonces la calle El Desenredo en su totalidad había cambiado, El Mesón Granadino y El
Pueblon, estaban en una casa de la calle El Arsenal, de dos que había adquirido, la otra casa era una
cuartería, apropiada para alquiler familiar, aunque siempre compartían baños y escusados, por lo tanto
eran para alquilar por varios meses y hasta años, de esa misma modalidad también estaban dos casa en
la calle El Enredo, de tal manera que las cuatro casa colindaban en sus fondos y por el costado este, con
las casas de doña Domitila María, Marta Joyilla y Rosita Alemán y otras cuarterías, la calle El Desenredo
tenía la diferencia de que, dos casas eran pensiones para alquiler temporal, con un mínimo de tiempo
de una hora.
El Mesón Granadino y El Pueblon, estaban en una sola casa, al frente la comideria, seguida de diez
habitaciones de alquiler por pocos días y al fondo El Pueblon idéntico al original, con mayor capacidad
de huéspedes o sea eran hileras de pilotes y la casa ponía las hamacas, con su techado y el resto al aire
libre, del El Mesón, al Pueblon no daba la visibilidad.
Las cuartearías de las Putas, eran igualmente en el fondo de las casa de El Desenredo, con acceso
a la calle El Ganado, con mejoras de condiciones, estaban desahogadas, algunas Putas que ya habían
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echado raíces, habían construido sus propias mejoras y ampliaciones, con ayuda y consentimiento de la
dueña. De las únicas tres casas privadas, ella a la única que entraron fue la de doña Domitila María.
La sala al frente con una habitación cerradas a cada costado para Huéspedes, que en ese
momento una la ocupaba el Conde D´Ibarra y la otra Rosalía Alemán, la sala se separaba por una
media pared decorada y pilares que daban a un corredor paralelo del frente de la casa, este seguido al
costado derecho, el comedor, cocina, lavandero y un baño para visitas, frente a ellos, costado izquierdo
un patio interno con flores y rosas de patio, continuaba el dormitorio principal, con su baño interno y
de frente un rancho con una mesa para cuatro personas, ya en el patio, media propiedad con todo tipo
de árboles frutales y variedades de diferentes temporadas, de tal manera que siempre una parte de ellos
se cargaban de sus frutos, en el centro del patio un rancho con una mesa redondo con catorce sillas y
debajo de algunos árboles bastante frondosos, habían sillas de madera con espaldares inclinado hacia
atrás, con cojines y almohadones.
- Esta es la croaca de Domitila Maria…
Dijo doña Francisca.
… Se van a sorprender, después de tantos años de conocernos es la primera vez que yo entro a
esta casa, es mas en esta calle nunca me había apeado del coche y ya ven es la casa de la mujer más
rica de Nicaragua, cualquiera de nosotras ya hubiera comprado media ciudad.
- Lo que sucede doña Francisca que para gustos existen los colores, como voy a preferir vivir en un
inmenso cajón como casa, mientras que aquí todas estas casa son mías, yo me salgo a cualquier hora,
entro por donde yo quiera y salgo igual, usted mira solamente este reducto, pero mi casa en la realidad
es todo y los que en ella viven son mi familia.
Las invitadas aplaudieron.
- Me gusta, me gusta mucho.
Dijo doña Francisca.
En ese momento llegaron Rosita Alemán, Marta Joyilla y el cura Valentín, preguntando por
Rosalía, doña Domitila la excusó.
Después de abrazos, besos de mejías, apretones de mano y bendiciones, se dirigieron a sentarse
debajo de un enorme árbol de Tamarindo, que de antemano Marta Joyilla había mandado a
acondicionar con sillas, mesa con mantel floreado, como de fiesta de pueblo y refrescos, reposterías y
frutas frescas, Marta Joyilla, se disculpo para ir a dar las instrucciones sobre lo que prepararían para el
almuerzo y señalándole con un dedo al padre Valentín, no se preocupara por la carnita de Cusuco y de
Garrobo que abundaba.
- Lo que te iba a decir, con relación a tu estilo de vida…
Dijo doña Francisca.
… Esto que me enseñas, es bastante similar al sistema de vida en mi Sicilia, verdad Valeria…
Ella asistió con una sonrisa y movimiento de cabeza de que estaba en lo cierto.
… Claro que en mi tierra es más grande, es un pueblo. Mira Domitila Maria el jefe de la familia vive
en la casona grande, que está en la parte alta y bajando queda el pueblo, que todos somos familiares,
por lo general el jefe de la familia camina por las calles dos o tres veces a la semana y por donde el ande
es de alegría, bailes, comilonas y hasta se sierran compromisos matrimoniales, por que aprovechan la
visita de él para pedirle su autorización para ese matrimonio, verdad que así es padre…
El curita sonrió asistiendo igual que Valeria.
… Esas son rutinas igualmente de sus hijos buscando esposa, las jodidas son las esposas que esas
están condenadas a no salir de la casa sin el hombre. Como yo.
- Pero no le cuenta mi prima, que cuando hay guerras de Clanes…
Dijo Valeria.
… Solo los hombres salen, a las mujeres hasta las compras de la comida les llevan y como en toda
guerra a veces salen por la mañana y ya no regresan nunca, entonces le ponen un lazo negro en la
puerta de la viuda y hasta que ella lo quite, seguirá siendo esposa del difunto.
- Aquí no…
Dijo Rosita Alemán.
… En este País se dice.
‘’El muerto al hoyo y el vivo al bollo’’.
Todos rieron.
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 - Yo lo que estoy comenzando a entender Valeria, es de que por tu casa no hay calles para que pase
el jefe de la familia y que le pidan su consentimiento para casarte…
El padre Valentín, Rosita Alemán y doña Francisca, esperaban que concluyera para reírse.
… ó el jefe de la familia es tu Padre y nadie se atreve a pedirle su consentimiento…
No había terminado cuando ya se reían, incluyendo Valeria.
… Tan lindas y que esos bicheros no se atrevan.
Termino a duras penas por la risa.
- Valeria aquí por lo menos, en este bendito País…
Doña Francisca inmediatamente volvió a ver a doña Domitila María, a lo que le respondió
levantando la palma de la mano como para calmarla, al igual que las otras se sorprendió.
… No hay ese problema…
Dijo el padre Valentín, a manera de continuar con la broma del casamiento Siciliano.
… Principalmente, aquí el que da el consentimiento soy yo y con migo, no vas a tener ningún
atraso, de tal manera que ese mismo día podes comenzar a merendar marido.
Todos se lanzaron la carcajada y doña Francisca estaba sorprendida de la picardía del curita doña
Domitila María noto el sonrojo en las mejías de ella.
Marta Joyilla y Rosalía se integraron al grupo, reclamando que la parte buena la dejaron para
cuando ellas no estuviera, que eso no era justo, doña Domitila María presento a Rosalía con sus amigas
y el padre Valentín, se acomodo tranquilamente. Hicieron un recorrido en la conversación
preguntándose por los hijos, las hijas, entre otros detalles menores y siempre metiendo en las preguntas
y las repuestas un doble sentido gracioso.
El padre Valentín mostraba un interés especial en Rosalía con la vista, cosa que notaron doña
Domitila María y doña Francisca.
- Honestamente a mi me hubiera gustado haber nacido en un País como este.
– Aquí es un lugar muy pobre.
Le dijo Rosita Alemán a Valeria.
- Yo sé a lo que se refiere Valeria, pero aquí se respira algo especial que no se respira en Europa,
tiene un atractivo tal, que sin la pobreza, fuera un paraíso. El caso es de que en aquellos lugares el clima
es completamente diferente, aquí es puro fuego y pasión.
Dijo la doctora Rosalía Alemán, su Madre en ese momento se sintió orgullosa de cómo hablaba,
igual a su Abuela.
- Pero mire Valeria, me voy a dirigir a usted de Rosalía, aun que se fue siendo una niña a España,
ella es nativa de Nicaragua y eso no se pierde por que se lleva en la sangre...
Aclaro doña Domitila María y prosiguió.
… Usted tiene muy poco tiempo de vivir aquí, igual que doña Paola, doña Mercedes no la incluyo
por que también es Nicaragüense, todavía lo estarán viendo desde afuera, no le voy a hablar de la
pobreza, porque hieda si usted quiere, le daré un ejemplo propio, mire cuantos años tenemos de
conocernos con doña Francisca y esta es la primera vez que ella viene a mi casa, sola y con el
consentimiento de su marido, ahora, pregúntele a doña Francisca, como en realidad se siente, si ya
quiere irse a su casa, ella es su sangre. Cuando vino el padre Valentín, a Granada…
Menos las otra tres invitadas se percataron de que el turno le tocaba al curita, que hasta se agarro
la frente con los dedos y tocio como pidiendo consideración.
… Parecía un perro comprado…
Todas rieron.
… Fíjese que cuando el difunto padre Rodrigo lo trajo a presentar, daba pesar. En ese tiempo
trabajaban para mi unas jovencitas que estaban de chuparse los dedos y aquellas malvadas, no perdían
un momentito de descuido del padre Rodrigo para rozarle los hombros con sus pechos, redonditos y
duritos como un Melón, le tocaban la mano y el la apartaba como si estuviera tocando un perol
caliente…
Se reían y el pobre cura que ya estaba curtido para ese tipo de comentarios, hasta se ponía
colorado.
… Me contó el padre Rodrigo, que después de esa visita el padre Valentín no salió de la Iglesia por
quince días, el por joder lo mandaba a dejarme recados y le metía unas excusas que en una ocasión
hasta le mintió, diciéndole de que en la calle El Enredo unos picados lo amenazaron de pegarle una
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buena vergueada y que después se lo iban a moler, porque solo llegaba a quererles molerles a sus
mujeres…
Las mujeres hasta se retorcían de la risa y el curita no hallaba en donde esconderse, al percatarse,
de que esa mentira se la había dicho al padre Rodrigo fuera del secreto de confesión.
… Por eso mis nuevas amigas es que digo, que las cosas las estás viendo desde afuera y tienen muy
poco de estar aquí, toma las cosas al suave Valeria, ahora tú crees que esas mujeres, por muy jóvenes
que fuesen, le van a rozar las chichas al padre, bien…
Nuevamente comprendieron todas de que al padre le venía igualmente el tiro de gracia, hasta las
otras se acomodo como su doña Francisca.
… En una ocasión me dijo una muchacha nueva, que el padre Valentín le ayudo a poner un
cuadro en la pared, pero ella quedo arrinconada entre el padre y la pared, me dijo que cuadro el curita
se le pego al cuerpo, ella sintió algo y me dice toda asustada.
‘’Doña Domitila Maria, en cuanto se me pego y me arrincono a la pared, yo sentí algo largo, duro y
caliente, que hasta miedo me dio.
Eso fue como una bomba en la mesa, un ataque colectivo de risas, que el padre no se movió por
vergüenza y no le quedo más remedio que unirse a la risa.
De esa forma Almorzaron y prefirieron seguir en la jodedera a tener regresar a casa y hacer
siesta, contaron historias variadas y todas terminaban en risas. Lo único que inquietaba a doña Domitila
María era la atención que le presta el padre Valentín a Rosalía, observo de igual manera que doña
Francisca se quedaba intrigada por la forma en que el padre miraba a la hija de Rosita Alemán, era una
observación de celos de una mujer casada por otro hombre, le puso una mirada a Rosita Alemán como
previniéndola de algo. Ya por ultimo doña Domitila María serró esa parte diciéndoles.
- Este es mi mundo y así son mis amistades que las quiero tanto sin importarme absolutamente
nada de ellos o ellas, le voy a contar como es mi gente de pura y lo cuento lo mire con estos ojos que se
comerán los gusanos y me enorgulleció, en una ocasión un Español legitimo me llevo a enseñar su
propiedad que la vendería y me interesaba para unirla con otra de mi propiedad, fuimos caminando el,
su capataz y yo, ellos llevaban machete en mano, cuando en eso el Español clavo su machete en el
lomo de un árbol frutal y el capataz le dijo.
- Que buenos días le dio al árbol patrón, el nada le estaba haciendo.
- Miren amigas, aquel Español se puso colorado que no hallaba en donde meterse de la
vergüenza, de que el Indio jodido tenia la razón y le diera esa clase sin importarle que lo corriera del
trabajó. Así somos los nicaragüenses que realmente amamos nuestra tierra y todo lo que Dios puso en
ella. Aquí hay Putas iguales a ese capataz, que nos pueden dar clases de esa altura de las que muchos
podemos aprender y nadie las toma en cuenta por lo que son y yo digo que esa gente que piensa así,
no son los verdaderos Nicaragüenses, nosotros somos pobres pero arrechos y con huevos.
Todos aplaudieron y se abrazaron mutuamente dándose bromas al mismo tiempo.
Capitulo XXI
Con motivo de la celebración de la integración de la Costa Atlántica, siendo este declarado
territorio Soberano de Nicaragua, los Liberal brindaron una recepción en la ciudad de Granada. Al no
poder asistir a dicho evento el Presidente José Santos Zelaya, este delego a sus Generales Rigoberto
Cabezas y Juan Bodan acompañados de altos dirigentes Liberales, los cuales fueron recibidos por sus
correligionarios con mucha euforia y entre los invitados, aparte de los líderes Conservadores y sus
Momias, estaba doña Domitila María.
A ella le daba lo mismo ir a no ir, pero teniendo en su cabeza la necesidad de salir de León sin
ofender a nadie, ni dejar cuentas pendientes y en especial proteger a aquellas personas que tan
fielmente le habían servido de testaferros y otras actividades ilícitas, miro la oportunidad de acercarse
propiamente a ‘’la rama en donde canta el Gallo’’, con la información que tenia y las ocasiones que
accidentalmente se había encontrado al General Bodan, este era el momento oportuno y su presa
estaría al alcance de su mano, entonces se dispuso a ir.
Le costó pero logro al final. Recordándole cierto interés, en una morena que vivía en Managua y
que por lo descarados que son los Liberales, el amante de ella era capaz de llevarla como su compañía,
eso fue suficiente para que don Fernando Pasos Arellano no lo pensara dos veces, además le dijo.

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 - Mire don Fernando que esta oportunidad es apropiada para limar las asperezas con don Carlos
ahora que se encuentra a las buenas de Dios.
Ahora convencer a don Carlos, de que delegara la representación de la familia Pasos Arellano, en
don Fernando y no en su hijo Carlos Joaquín, era algo más sencillo, dado que de esa forma según el le
cortaría sus aspiraciones políticas y por ley jerárquica, la representación le correspondía a don
Fernando.
Doña Domitila Maria por otro lado le recomendó a doña Francisca, no llevar a Valeria a tal evento,
igualmente que a don Fernando, tuvo que argumentarle a doña Francisca, que ante políticos cochinos
como los que participarían en el convivió, uno nunca debe de enseñar, ni flaqueza, ni dureza, si lo
quieren descubrir que les cueste y su prima serian su punto débil, en todo caso no necesitaba compañía
ella iba en representación de su esposo don Carlos Pasos Arellano y con solo eso está demostrando
fortaleza y carácter, aunque lo que le interesaba a ella era no tener que andar atajando a ninguna
persona ya era suficiente en marcar bien el comportamiento de Carlos Joaquín. Acordaron reunirse los
tres en la casa de don Carlos y de ese punto salir. Estando reunidos lograron las dos mujeres convencer
a don Fernando, subir a saludar a su hermano mayor.
Al quedar solas doña Domitila María le dio algunas recomendaciones a doña Francisca, la principal
era que en cuanto se sirviera algo de tomar el vaso no se lo despegara para nada y que no permitiera
que le sirvieran, sin que ella mirara que del mismo recipiente le han servido a Liberales, aquella mujer
alarmada por esa recomendación pregunto.
- Porque de tal cosa Domitila María.
Ella le explico que en círculos que ella conoce muy bien le han dicho.
- El General Zelaya es famoso de usar cochinadas para dominar o deshacerse de alguna persona,
esto aprendió mucho en las Islas del Caribe y en la Masonería, confié en mí, que no le voy a decir
babosadas que no fueran, en todo caso era una precaución y lo otro es doña Francisca que sin levantar
sospechas se fije en los movimiento de Carlos Joaquín, para saber lo que trama, recuerde que sus hijos
están por regresar de España.
En realidad lo que le interesaba era involucrar a doña Francisca y tenerla inicialmente como
soplona, disfrazada de conspiradora, cuando regreso don Fernando, doña Francisca subió a despedirse
de don Carlos y preguntarle si deseaba que hablara con alguien en especial, a lo que el respondió que
no y agrego.
- No te dejes impresionar por esa gente, ni te dejes llevar por lo que hablan, visten o llevan, ásele
caso a la Domitila María, que con ella estarás segura y ella no creas, también sabe que tu presencia le da
seguridad, Fernando a nadie le interesa.
En cuanto estuvieron solos doña Domitila María y don Fernando, ella le pregunto.
- Se preparo como le había aconsejado.
El respondió.
- Si.
Señalándose los pies.
Resulta que hay cosas, que entre los pobres causan risas, aunque algunos de ellos también caen
en la trampa, pero para los ricos causan terror y en ocasiones por sugestión hasta la muerte. Doña
Domitila Maria le había instruido a don Fernando tener cuidado con esa mujer Costeña, por que
acostumbran pintar a los hombres, eso consiste que mientras estén con ellas, todo va bien, pero si el
hombre las deja o quiere dejarla, le salen manchas en la piel y se van haciendo manchas feas cuando
les da el sol, entonces le recomendó que se amarrara un cintillo azul en el tobillo derecho para
contrarrestar cualquier cochinada que trate ella de usar o cualquier trabajo que le quieran hacer y
también que las prendas interiores o medias que usara se las pusiera al revés y si el General Cabezas la
llegase a llevar y en determinado momento el tuviese que actuar rápido, se amarrara un cintillo rojo en
el tobillo izquierdo, que eso le calmaba la calentura a cualquier mujer embramada que se anduviera
quemando por dentro, hasta le dijo, que era tan efectivo como el diente de ajo, que ella recordaba que
su mamita Domitila cuando le daba calentura, por muy fuerte que fuera, le metía en el ano un diente
de ajo y al momento se le salía la fiebre.
- Así nos sacaban la calentura cuando niñas, las rodajas de papas eran para lo ojos resfriados por el
calor del fogonero y exponerse al viento fresco, se ponían negras por el calor que absorben, por eso el
cintillo rojo, para sacarles el calor de la brama y sirve hasta para los animalitos de Dios, a las perritas
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para que no se en lunes les amarras tiras rojas en las patas, así usted con el cintillo rojo le va a sacar el
calor, ahora, a mi me aseguraron que a la perinola no se le saca el calor de esa forma.
A don Fernando lo dejo asustado, además que la persona que se lo decía llevaba un cementerio
adelante, no había por donde perderse.
- Lo hice todo a como usted me dijo Domitila Maria, pero quiero que sepa una cosa, no me vuelva
a hablar de esa mierda y para terminar este asunto…
Don Fernando, con toda seriedad le dijo.
… No me joda, que forma de agradecerme que la acompañe, ya ni voy a gozar con esa Jodida, me
a salir voy a Cagando, como la Chepa Cagona, al verla desnuda.
A la hora que escogieron llegar fue adecuada para ellos, estaban en ese momento haciendo la
presentación de la representación del Gobierno, por lo que de esa forma se evitaron ese saludo, por el
momento, del Gobierno Liberal tomo la palabra, el General Juan Bodan, hombre de baja estatura,
blanco y gordo, de ojos claros, su familia originaria de Camuapa, el cual muy elocuentemente inicio
dedicando grandes elogios al General José Santos Zelaya, recordando los sacrificios humanos que
había costado la lucha, para lograr un Gobierno que permitiera que juntos Liberales y Conservadores
pudiesen celebrar unidos un acontecimiento histórico, el hecho de que nuestro País recobrara su
Soberanía Nacional sobre el territorio de la Costa Atlántica Nicaragüense y que con esa misma
Dignidad Nacional estaban resolviendo el asunto del canal Inter.-Oceánico con los Estados Unidos y
concluyo diciendo, que al reincorporar la Costa Atlántica, la Unidad Nacional quedaba sellada, desde
Occidente a Oriente y desde el Pacifico al Atlántico, como una sola familia y olímpicamente grito sin
reparo alguno.
- Viva Zelaya, Jodido…
Los Conservadores, por asuntos protocolarios y eso por estar a la vista, tuvieron que aplaudir
aquellos viva, los mas aglomerados se abstuvieron por no estar a la vista y que los Liberales presentes
hacían una gran algarabílla en la que no importaban unos aplausos menos, ni útiles para sus
humillantes vivas a Zelaya.
La banda de doña Domitila Maria, discretamente observaban a sus presas, pero el mas inquieto y
hasta estaba poniendo nerviosa a las dos mujeres era don Fernando, quien no hallaba la hora de poder
lanzársele encima a aquella morena, que de largo ya le había hecho varias miradas coquetas, las cosas
sucedieron con toda normalidad para don Fernando, dado que la concurrencia que deseaba abordar al
General Cabezas como héroe viviente de tal evento, le permitía hacer intercambios de miradas con la
morena y esta se mostraba atrevida, acompañando los intercambios con muestra de sofocación, como
si estuviera sentada en un caldero de Nacatamal y sus nalgas hermosas, repingadas y redonditas
estuvieran ya doraditas, listas y jugosas para ser servidas.
Doña Domitila María no se perdía de ningún detalle en esa conversación entre miradas y poder
darle a don Fernando el empuje y abrirle la puerta de algo directo, le comento al oído que ella no tenía
idea de cuánto tiempo podría el General soltarla, pero se diera el que fuera que lo aprovechara.
Poco a poco se fueron acercando en donde se encontraban los Generales, que a la vez ellos
también se abrían campo para ese encuentro en donde, al igual que don Fernando y la Putita del
General, solo requerían de unos minutos con doña Domitila María para oficializar y justificar, cualquier
encuentro social con ella, sin necesidad de ocultar sus reuniones, ni levantar sospechas de sus platicas.
Ha como ellos mismos sin saber lo concibieron, el encuentro se dio, los Liberales y Conservadoras
concurrentes no despegaron la vista de los Generales y doña Domitila María, un acontecimiento que se
regaría por todo el País, en ese momento fue entonces que doña Francisca entendió las palabras de
don Carlos al referirse, que para esa gente su hermano no valía nada. Se saludaron y conversaron por
un momento asuntos generales, como por ejemplo, el estado de salud de don Carlos, los negocios, etc.,
con inteligencia el general Bodas empato la conversación a su esposa con doña Francisca y ya el libre
de su esposa, se dirigían directamente a doña Domitila María.
Los acalenturados aprovecharon para conversar entre ellos, al notar doña Domitila María que
doña Francisca había logrado separar completamente de la conversación y con la mirada en otra
dirección a la esposa de Bodan, ella hizo lo suyo con los Generales, dejando a sus anchas al del cintillo
rojo, quien disimuladamente y haciendo señales falsas, como si estuviera dando una clase de
Arquitectura Colonial o Astrología, hasta tenerla en una posición que la dejaba fuera de vista pública. Al
mismo tiempo bajo supuesto control del hombre de ella, con mañas de cazador audaz, logro acariciarle
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las nalgas en varias ocasiones y ella reía como si lo hiciera de un buen chiste, en otras ocasiones lograba
decirle cochinadas al oído, que le ponían la piel de gallina, el punto de la conversación requerido por el
Genera Bodan llego, discretamente el General Cabezas, con un solo movimiento se dirigió a su mujer y
no encontró mejor manera de entrar en la conversación que preguntar.
- De que hablaban, que se oye tan chistosa.
A lo que La Negra Culo Caliente, le respondió.
- Dice don Fernando Pasos…
Al General le producía escalofrió y repudio a la vez ese apellido, por ser de los pocos Liberales
conocedores de la misión de don Carlos Pasos por los Estados Unidos.
… Que el granadino que no ha comido Vigoron con Chingue o Chicha de Maíz, no es un buen
granadino, me párese algo tonto eso.
Los tres se pusieron a reír, pero don Fernando se impresiono al ver con que agilidad mental salió al
paso la Negra Culo Caliente.
De esa forma y con mucha rapidez, la negra logro lo suyo, girando la conversación a los gustos
culinarios tradicionales de distintas regiones del País, tema en el que don Fernando se pudo desarrollar
plenamente, por su estilo de vida y de comer cualquier cochinada en los distintos lugares que visitaba y
cantinas en las que se emborrachaba. El General Bodan igualmente viro su conversación y hasta cierto
grado su tono.
- Ya que abordamos el tema de las propiedades privadas, el cual le agradezco el voto de confianza
que usted me ha manifestado, para con las medidas de nuestro Gobierno, con usted me gustaría en
alguna ocasión tratar un asunto relacionado con la adquisición de unas propiedades en León, por parte
suya.
- En cuanto usted lo desee General, pero le quisiera refrescar un poco la memoria, que no son
unas, son grandes extensiones de tierras que yo adquirí, casas y otros bienes, con legitimo derecho y si
use terceras personas fue por seguridad de mi persona y mis negocios, con mucho gusto me gustaría
tratar ese asunto y usted, su Gobierno y yo, saldríamos muy bien favorecidos, si nos ponemos de
acuerdo.
- Pero hasta donde sus correligionarios tendrían participación en estas conversaciones, cuál o
cuáles de ellos compartirían ese favorecimiento del que usted habla.
- General, usted es hombre serio en sus asuntos militares, políticos, económicos y hasta
extramatrimoniales…
Inmediatamente Bodan entendió, pero no comprendió al momento el por que la referencia a ese
asunto.
… Y sociales, por lo que no creo que su pregunta se refiera estrictamente a sus palabras, yo no
tengo correligionarios, no tengo que rendirle cuentas a nadie de mis negocios, mientras sean legales,
ahora, si usted o ustedes creen que hacer público mis actividades económicas en occidente, me obligue
a ceder o dar participación a unos u otros, se equivocaron de persona.
- No lo tome así Domitila María, entre usted y nosotros…
Refiriéndose al Clan de Generales.
… Las diferencias son muy menores, de las que usted se puede imaginar, Tampoco vamos a
remover asuntos que acarrearían altos costos políticos, pero ese no es nuestro asunto…
Doña Domitila Maria estaba comprendiendo, que la similitud de sus problemas era o estaban
relacionados con ella.
… El asunto es que si usted o nosotros rompemos, no volveríamos a la guerra en ningún momento,
algo peor, occidente se mancharía de sangre, peor que en una o dos guerras, ahora me entiende el por
qué de antemano saber con quienes se debe tratar un asunto de esas magnitudes…
El secreto que ella necesitaba para salir y dejar cuentas claras en León, quedaba claro y era tan
necesario para ellos.
… El asunto no es de ocultar amoríos.
Serró como devolviéndole la moneda.
- Hay un refrán que dice, Una mentira para sacar verdades, en estos asuntos soy persona seria y
creo yo, ser alguien en quien fiar, yo no me refería a sus asuntos extramatrimoniales como un objeto de
darle a conocer un secreto suyo, en ningún momento, era para presionarlo de que sacara lo que yo ya
sospechaba, que ustedes guardarían ese secreto para usarlo en el momento preciso, si yo no hubiera
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presionado o si usted no hubiese puesto mayor interés, sencillamente le sacaría otros, hasta saber cuál
era su interés en este asunto…
Al sentir que le devolvía la moneda igualmente, el General Bodan, miro en ella a otra mujer,
diferente a la que imaginaban, la miraba mas aventada, peligrosa y adelantada en ideas de acción, pero
también, con un respeto indoblegable a su palabra, esas cuatro cualidades eran dignas de respeto.
….Yo no acostumbro sacar verdades con mentiras, hay algo que los hombres recios como usted,
no valoran de las mujeres y no quisiera echar a perder estos negocios que podemos realizar, por
simples sub. Valoración de uno o del otro…
Le dijo.
‘’Las Gallinas somos las únicas que ponemos Huevos sin necesidad del Gallo’’.
El General sintió que las palabras eran fuertes, las dejo pasar para mantener la impresión que
prefería dejar en ese primer contacto directo.
La esposa de Bodan con solo voltearse y dar un paso reagrupo a sus acompañantes,
interrumpiendo la conversación entre doña Domitila María y Bodan, sin darse cuenta salvando a don
Fernando de una conversación estéril, aburrida y cansadora, todos se incorporaron en una sola
conversación, que rápidamente fue interrumpida por otros correligionarios Liberales, doña Domitila
María se sonreía pensando que en la conversación con el General Juan Bodan, tal vez fue la única en
donde no se menciono el nombre del General Zelaya y en la que realmente se le guardaran sus
intereses.
Por el contrario Bodan quedaba satisfecho, por la imagen que sentía que había causado en ella,
por mucho que se resistiera lo tenía que haber tomado como una persona extremadamente educada
como para agredir una mujer, un hombre recio de carácter, aun que sus últimas palabras fueran un
tanto amenazadoras, el hizo que ella se sintiera dueña de la conversación y había dejado al descubierto
su estilo y principalmente la urgente necesidad de salir de León, que significaba la ala fuerte de ellos,
política y militarmente hablando y ella no estaba en condiciones de continuar negociando, con
criminales de la calaña de las familias de sus abogados y testigos falsos que le ayudaron en la
adquisición de esas tierras de Occidente, la ley estaba a su favor pero sus aliados habían aprendido con
ella a comer bien y no dejarían esa costumbre por amistad, ni mucho menos por fidelidad.
En la realidad doña Domitila María por varias semanas así lo estuvo creyendo, hasta que en una
ocasión don Carlos, le advirtió de no fiar en nadie, ni en sus propios sentimientos y razonamiento, que
las cosas eran completamente diferentes, que en el pasado no depositara toda su confianza, a lo que
no puso oído y le dio por primera vez un signo de la misión cumplida en los Estados Unidos diciéndole.
- Yo estoy vivo aun, no por el pasado de mi Familia, mas bien por el futuro del País, por ser la
garantía viviente. Penza en una sola cosa, que te resulta menos costoso, un charco de sangre o dar tu
brazo a torcer, las dos cosas duelen, ahora tenes que escoger entre uno u otro, por mi parte yo me iría
por la segunda. Los Liberales hoy tienen el poder, mañana pueden amanecer a como entraron con una
mano adelante y otra atrás, tal vez yo ya no lo mire, pero su arrogancia militar será su caída. Con
paciencia llegas hasta donde vos querrás y más aún.
‘’Solo salirte a la puerta de tu casa y miraras pasar los féretros de tus Enemigos’’.
Capitulo XXII
En todos los ámbitos de la vida económica, política y social del País, los Conservadores al
recuperar el poder con ayuda de los Estados Unidos. Le aseguraban a ese último, una subordinación
absoluta, estando en la Presidencia don Juan José Estrada, sellan esta subordinación en el tratado
Chamorro-Bryan, considerada la segunda intervención Norteamericana, negociada y ahora con
garantías gubernamentales.
El general Zelaya, como caudillo Liberal, siempre se jacto al comparase con el general Chamorro,
de que no era hombre que se cobijo en la sombra de destacados familiares en la Historia, a como lo era
Chamorro, que era un soldado de carrera y probado en el campo de batalla, aun teniendo la razón esa
prepotencia fue la causante de su caída del poder.
Los Conservadores con el Departamento de Estado lanzaron a dos chivos expiatorios
Norteamericanos, para atentar en contra del Vapor Nicaragua en el río San Juan, estos fueron
capturados y condenados a fusilamiento por un consejo Militar, ante tal veredicto las autoridades de
Estados Unidos pidieron clemencia para con sus ciudadanos y la decisión del general Zelaya fue

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inflexible contra tal acto y los fusilo. De esta forma se sierran las páginas de la Revolución Liberal del
General José Santos Zelaya en 1909.
La situación dejada por el gobiernos anteriores era relativamente favorable, sumándole el apoyo
Estadounidense, pero su popularidad en la población no era bien vista y fue ese momento en que doña
Domitila Maria, saco a relucir años antes de morir, al estilo de sus mejores tiempos el asunto de la
homosexualidad en las altas esferas sociales y Gubernamentales, que llego a empañar la moralidad de
muchas familias Granadinas y sus allegados.
Después de la caída de los Liberales, el asumir el mando los Conservadores y la presencia
Estadounidense en el País, el juego en la política domestica había cambiado drásticamente. Para que los
opositores al Gobierno, por repuestas a represiones, repudios y acciones de ejecutar a una persona, se
tendría que involucrar a este con su victimario y así aparentar venganzas de negocios sucios, amoríos y
complicidad en crímenes probados de la participación activa de la víctima y ocultar la acción política.
Reprimir los asuntos políticos es normalmente facultad meramente de los militares al servicio del
Gobierno. La moralidad que profesaba el Gobierno, la usaron para atacar a los Liberales, por la
desmoralización del País, con locales de libertinajes sexual, de juegos de azar y de promover todo
aquello que fuese en contra de la Iglesia y la fe Cristiana, con practica Masonas. Se lanzaron
directamente en contra de esos centros en Corinto, Chinandega, El Realejo, León, Puerto Momotombo
y otros poblados de occidente, Puertos, estaciones de trenes y la vasta red de doña Domitila Maria.
El Gobierno, en su momento le explico a ella, que eran disposiciones dirigidas a golpear a los
reductos Liberales fanáticos y que reconociendo los manejos de ella durante la guerra contra Zelaya le
permitirían continuar con esos negocios. Se entendieron en secreto sobre las actividades comerciales
que serian afectadas por las medidas Gubernamentales, este trato implicaba que si ella los podía
mantener a un cierto nivel de privacidad, las autoridades civiles y militares no intervendrían en sus
asuntos, pero que tendría que tener cuidado en no alterar el orden, sabiendo seleccionar a su personal
y clientes. A doña Domitila Maria, estas medidas en nada le afectaban, en todo caso de continuar
solamente le correspondería modificar su manera de operar y para eso constaba con casa, propiedades
suficientes y hasta más apropiadas para esas actividades.
Cuando existen odios fuera de control, el problema se resuelve entregándole la dirección de la
solución a personas imparciales y se agrava al dejar a la libre voluntad de solucionar el asunto, por parte
del o los afectados, para ellos se debe de resolver a su manera y en el momento en que ellos creen el
oportuno, por su aberración e inseguridad. Pensando así el Gobierno, en contubernio con el alto clero,
que a su vez aprovecharía para atacar a las Iglesias Cristianas no Católicas, las dos partes
acostumbrados a las manipulaciones y traiciones de su clase y sin meter sus manos directamente por
temor a que esto provocara un levantamiento general en la población, dejo la pauta abierta de actuar
en contra de la inmoralidad y proteger a toda costa a la Iglesia Católica y al Cristianismo. Los políticos
tenían su salida de baño limpia en cuanto a no inmiscuirse en asuntos eminentemente religioso, la
Iglesia Católica reforzó con sacerdotes adiestrados, principalmente en aquellas Parroquias que podrían
presentar problemas a la hora de decidir por cual bando se inclinarían los párrocos, como una de las
tantas precauciones que tomaron y preparaban. Por parte Gubernamental no tuvo conciencia de las
magnitudes que pueden causar los conflictos religiosos o no tuvieron fortaleza moral de frenarlos por
ser parte de ellos.
Los primeros en ser golpeados fueron las denominaciones Cristianas Evangélicas y protestantes,
inicialmente fueron atacadas verbalmente y no se dejaron esperar acciones violentas en contra de sus
fieles y sus recintos o Templos Religiosos. El párroco de la Iglesia la Merced en León, era un sacerdote
que gozaba de mucho aprecio y respeto por todos los sectores sociales. En una ocasión un Templo
Protestante fue violentamente atacado con piedras, excrementos humanos y otro tipo de cochinadas,
días después, los lideres de esa Iglesia Cristiana decidieron manifestarse en las calles en contra de estos
hechos delincuenciales y demandar de las autoridades civiles y eclesiástica hacer un llamado a sus
feligresía a respetar el culto que ellos profesan, resulta que al paso de esta manifestación por el frente
de la Iglesia la Merced, el sacristán irrespetuosamente comenzó a sonar las campanas, como un gesto
de repudio a la manifestación. En cuanto el padre supo de lo ocurrido regaño fuertemente al sacristán,
por la falta de respeto a los Protestantes y principalmente a la propia Iglesia, la casa de Dios no es un
objeto para manipularlo en protestas o repudios personales, ni intereses políticos y económicos, ni es
propiedad de ninguna persona mas que de la Santa Iglesia Católica.
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 Esa misma tarde se le miro al párroco dirigirse al Templo Protestante a pedirle disculpas al pastor
de la Iglesia, como un gesto de humildad y responsabilidad, al final terminaron haciéndose amigos y no
era algo extraño ver a uno o al otro dirigirse de visita, hasta quedarse a cenar y entablar interesantes
conversaciones Teológicas, que al regarse la relación de estos religiosos no tardaron en solicitarles en
participar en su cenas, personas de distintas denominaciones cristianas e incluso hasta invitarlos a sus
casas. Estas posiciones de cordura fueron muy comunes en distintos lugares del País, pero en otros el
control de los atacantes y los resultados fueron hasta sangrientos. El Gobierno escudándose en estos
hecho aprovecho la excusa para ejecutar su redada sobre burdeles, casa de juegos y restringir con
mayores impuestos los pereques populares, principalmente en las fiestas patronales de cada ciudad y
pueblo.
Para concordar con su trato secreto con los funcionarios del Gobierno, doña Domitila Maria
dispuso de realizar un cambio total, de aquellas casas viejas y que solamente recibían pequeñas
reparaciones, por lo que con ese pretexto serró la atención, aunque secretamente se brindaba el
servicio con previa solicitud y clientes selectos, desde entonces la casa de Rosita Alemán fue llamada.
‘’La Casa de Citas’.
Dejando a cargo de las labores del trabajo en la calle El Desenredo a Rosita Alemán, Doña
Domitila Maria y Marta Joyilla realizaron una visita a los principales locales por ciudades y puertos para
igualmente realizar los cambios necesarios.
Ocurre entonces en Granada, que agrupados en torno a las mujeres que aun reclamaban ser
aristócratas, un grupo de Conservadores bastante influyentes en el ámbito económico y social de la
ciudad, entre ellos Carlos Joaquín Pasos, organizaron una revuelta frente a un templo Evangélico,
cercano a la calle El Desenredo, con el fin de que al calor de la agresión estos tomaran represalias
contra los burdeles de doña Domitila Maria. Los hechos fueron tan precipitados que no dio tiempo a
desocupar las cuarterías, las cuales les prendieron llamas y en el incendio perecieron 17 personas entre
niños, ancianos y hombres que ayudaban a sacar personas atrapadas en el siniestro. La noticia cayó
como agua hirviendo sobre los instigadores, organizadores, el Clero Católico y el Gobierno. La Iglesia
Católica Nicaragüense inmediatamente se fracturo en dos bandos, la población en general estaba
dispuesta a un levantamiento general y aun que las Iglesias Evangélicas y Protestantes, llamaron a la
cordura y a la obediencia de las Leyes de Dios, internamente no dejaron de instigar a la defensa de sus
creencias Cristianas. Inmediatamente doña Domitila Maria regreso a Granada, los llantos y lamentos la
siguieron desde el muelle hasta su casa, desde la esquina miro los estragos materiales y le ordeno a
Marta Joyilla.
- Pone a serrar inmediatamente con madera el área que incendiaron…
Era un frente de media cuadra en la calle El Ganado.
… Y deja cuatro hombres vigilando que nadie entre a esa área y que si alguien entra sin permiso o
patee por lo menos las tablas que lo maten, que el muerto lo cargo yo.
Esa orden quedo como silbido de bala en los oídos de las autoridades que no perdían el contacto
con Managua, en especial pidiéndole refuerzos en la guarnición de la Pólvora por cualquier
levantamiento, a lo que el Gobierno lo negó, por parecerles muy peligroso y mas agitador la presencia
de un mayor numero de militares y se inclinaba por buscar una solución negociada con la afectada, el
peligro era palpable y los temores agudos, no por doña Domitila Maria, sino el hecho que esas acciones
los ponía frente a una Nación punitiva, no sabrían de donde ni como les viene el castigo de esa
barbarie y principalmente esto desataba las manos de los Liberales, el Gobierno opto por el silencio en
espera de una reacción. La alta sociedad Granadina no ponían un solo pies en la calle y hasta perdieron
la costumbre por buenos años de sentarse en la anchas aceras, los sacerdotes cómplices de ellas,
llegaban hasta sus casas a darles la comunión sin necesidad de haber confesado sus pecados,
solamente los matrimonios Libero-Conservadores gozaban del privilegió de transitar tranquilamente
por la ciudad, asistir normalmente a sus misas Dominicales y sentarse en las aceras al atardecer a como
siempre lo hacían, doña Domitila Maria se iba tranquilamente a pies a la casa de los Pasos a tener sus
acostumbradas conversaciones con don Carlos, quien para entonces había recibido grandes honores
del Gobierno, por los acuerdos llegados con el Gobierno de los Estados Unidos durante la guerra
contra Zelaya, que solo esperarían poner en el camino de Zelaya a uno o dos chivos expiatorios y
pegarle el golpe final, un arreglo muy bien calculado y manejado en un circulo serrado de
Conservadores. Las cosas poco a poco regresaban a su curso normal y eso a cada día les hacía a la alta
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sociedad la vida tensa y de mayor zozobra. Con las experiencias pasadas con esa mujer la espera si se
hacían desesperantes, al extremo que hasta llegaron a desear que de una vez por toda mandara a
asesinar a los que fuera y ya quedar en paz.
Manuel Enríquez, era el cochero de don Oscar Montenegro hijo, un alto líder del Partido
Conservador, que visitaba a Leonel Duarte quien vivía de las artes de su mano haciendo retratos para
esa gente rica, don Oscar tenia por precaución de chismes y habladurías de hacer pasar a la casa con él
a Manuel Enríquez y dejaban el coche al cuido de un peón que los acompañaba. En la casa en que vivía
el pintor Leonel, vivían su hermana y su esposo, ya que la casa era de la familia Duarte. El esposo de su
hermana era un matarife del rastro Municipal, de nombre Rafael Ortega, empedernido tomador de
guaro en las cantinas de la calle El Enredo.
En una ocasión estando en sus labores Rafael, se retraso el ganado de destace para la tarde, cosa
que sucedía con frecuencia y por la espera sacaron una pichinga de Guarito Pelón, comenzaron a
tomar con ritmo acelerado, cuando en el calor de los tragos uno de ellos le dijo delante de todos a
Ortega.
- Rafael nosotros somos viejos amigos y antiguos de trabajar en este rastro, pero desde hace rato
te he querido decir una cosa…
Todos atentos al comentario y la pichinga rotando para el trago de cada quien.
… Pero mira, yo al comienzo no lo creía, pero tu mujer te la pega con don Oscar Montenegro…
Aquel pobre hombre pega el brinco y se encrespa como un gato de monte.
… No te pongas arrecho con migo, pero a estas hora debe de esta acostada con él, si quieres te
acompaño y si es falso turquiame.
Todos los rodearon para evitar una tragedia con tan exagerado aseveración y algunos se
ofrecieron acompañarlos.
- Vamos…
Dijo Rafael, guardándose a la vez dos cuchillos para destazar y le dijo al sujeto.
… Si es cierto yo la mato a ella y a ese Hijo de la Gran P… o me corto un huevo, pero si es mentira
fueron tus últimos tragos de guaro y no te mato en este momento porque ya he escuchado rumores,
de las extrañas visitas de ese maldito a mi casa, cuando no estoy.
Todos salieron con sus cuchillos enfundados por si era o no cierto, posiblemente Rafael necesitaría
ayuda y si es mentira, dejar que le corte la lengua y los huevos al tapudo. Una mujer minutos antes que
ellos llegaran a su casa, había llegado a llamar a la esposa de Rafael con urgencia de donde una prima y
con su mujer se fueron acudiendo al llamado. Ortega al visualizar el coche de don Oscar, este se
apuro, al entrar a su casa y preguntar por ella, Manuel Henríquez no podía decir nada mas que la
verdad y era que había salido, aquel hombre dudando de la palabra del trabajador del maldito se
metió, reviso que su habitación estaba abierta y entro estrepitosamente al cuarto de trabajo de Leonel y
ciego de la arrechura mira, sin identificar a nadie a un hombre sobre otra persona penetrándola
sexualmente, le da la primer puñalada en las costillas y con una rapidez increíble de retorno le da el
filazo mortal en la yugular, cuál fue su espanto el ver que al que había asesinado era a su cuñado y la
otra persona que era al que estaba penetrando Leonel, era don Oscar Montenegro, inmediatamente
interceden sus amigos pero era demasiado tarde para Leonel Duarte.
El caso fue de gran impacto para las altas esferas del partido Conservador y el chisme abarco a
otras personas que eran clientes de Leonel Duarte. Entre los objetos descomisados por las autoridades
estaban retratos de desnudos masculinos y femeninos, actos amorosos en poses de penetraciones
incomodas con peones conocidos en las vecindades de la ciudad, las obras de arte erótico eran dignas
de reconocimiento artístico en cualquier galería del mundo. La población en general se volvió a
encandecer, con el bochorno vergonzoso de que los protectores de la moral Cristiana, eran unos atajos
de degenerados, aprovechados de los pobres, para saciar sus instintos sexuales de animales y
comenzaron a salir a luz pública nombres de altos funcionarios del Gobierno y del Partido Conservador
en todo Nicaragua, el Ministro de Hacienda… El Ministro tal y cual… Los escándalos iban y venían a cada
momento, cualquier paso en falso nadie lo dudaba en sacarlos desnudos a las calles para que la gente
de su propia clase les conociera y dejaran de ocultarse en las sotanas de los curas.
Doña Domitila Maria a todo mundo les aseguro que nada tenía que ver en esos asuntos de
cochoneria, que su negocio era de Puteríos, pero aun que nadie le creyó, tampoco pudieron atar un
solo cabo que lo demostrara.
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 - Me visito el señor obispo y me contó que llegaste a la casa del Obispado, a solicitarle que no
cambiara al padre Valentin.
Pregunto don Carlos, Doña Francisca se puso colorada del susto de aquel movimiento y ella
ignorando, doña Domitila María rápidamente la volvió a ver y para llamar la atención de don Carlos,
contesto.
- Si don Carlos y consideró que la conversación dio buenos frutos, lo que no se si él lo mira de la
misma manera.
Devolviéndole la pregunta para escudriñar el contenido de esa conversación.
- Eso creo yo, pero me gustaría, si se puede saber, como lograses que un hombre como el Obispo
cambie con tanta facilidad una decisión de ese tipo.
Pregunto don Carlos, doña Francisca estaba impresionada de la conversación que escuchaba y a
la vez se admiraba de ver con que serenidad doña Domitila María se aprestaba a llevarla hasta el final.
- Claro que si don Carlos, ellos pretendían nombrar como párroco a un sacerdote que estuviera del
lado de las Españolas, el me dijo que no había manera de cambiar la orden, yo le dije que en cuanto
saliera el padre de la Iglesia, le pondría en el pulpito las tres hijas que él tiene en Potosí, Rivas…
Los corazones de don Carlos y doña Francisca dieron un salto y se le aceleró su ritmo, ella abrió la
boca y se la tapo con la mano, esas no eran las únicas novedades y continúo.
… Igualmente daría a conocer los nombres de los curas que mantienen amoríos con las señoras de
sociedad que tan puras y limpias las consideran, comenzando con los de Catedral, que en la parte
trasera de la Iglesia tienen un cuarto en donde no hay absolutamente nada, un crucifijo en una pared y
nada mas una sala puerta de acceso y sin ventanas y es utilizado para las confesiones de las damas de
sociedad y la Iglesia la Merced, igualmente los que mantienes relaciones sexuales con hombres, jóvenes
y niños, después de eso no respondía por aquellos hombres y Padres de familia que se sientan
agredidos y esa decisión también no habría manera de cambiarla.
- Tenes pruebas de eso Domitila María,
Pregunto don Carlos, recordando que el dio la contribución para construir ese cuarto que sería
utilizado como bodega, en un tono apesarado por sentir que la repuesta sería un ‘’si’’, doña Francisca
no salía de las asombrosas novedades. Doña Domitila María contesto.
- Que pruebas quiere de que al padre Valentín no lo van a mover, le puedo contar muchas
historias de ese tipo con otras personas aristócratas. Le voy a contar dos Historias que lo hará creerme,
se acuerda de su amigo don Porfirio García…
– Si.
Le contesto don Carlos.
… Pues don Porfirio era homosexual y no solo le gustaba que lo penetraran, sino que también
lo que le excitaba era que durante el acto penetraran a menores de edad frente a él, de lo contrario no
terminaba y se volvía loco, ya viejo, antes de que entrara a la ciudad Walker, en una ocasión metió a su
casa un niño de 12 años y a la fuerza el joven para entonces por don Leonardo Pereira, muy amigo
suyo, violo al niño y posteriormente lo asesinaron y enterraron en el piso de una de las habitaciones
que estaban en construcción y que cuando la familia Cardenal compro esa propiedad y la destruyeron
para construir la nueva casa, encontraron los huesitos o ya no se acuerda…
Don Carlos se quedo sorprendido, de manera serrada la familia Cardenal le había hecho los
comentarios, con la explicación que les dio don Porfirio, les contó que esos restos eran de un muchacho
que desapareció durante la ocupación de los extranjeros y que seguramente lo mataron y lo enterraron
en ese lugar. Por lo tanto la versión de doña Domitila Maria podría ser aceptable.
…Yo me di cuenta por un homosexual que me trabajo cuando inicie el negocio aquel, es mas
cuando no conseguían niños, lo mandaban a llamar y con el hacían todo tipo de perversidad que usted
se podría imaginar y eran de su agrado. Hace cuanto que yo sé de eso y nunca hable al respecto. La
otra Historia es sobre una criada en Panaloya.
El asombro de don Carlos y doña Francisca les causaba una fuerte presión en el pecho, ella nunca
se imaginaría, que su amiga fuera tan terrible.
- En la última ocasión que visite a doña Francisca, antes de salir rumbo a España me recibió la hija
de Socorrito Caldera, esa muchachita que linda que es, muy bonita y finita, mejor que muchas
Españolas de Granada, la pude ver bien, lo que me llamo la atención fue su color blanco, siendo hija de
dos personas negras como el carbón y sus respectivas familias igual, no hay una blanco en ellos,
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solamente ella y otra hermanita, ellas viven en el Cocal y le llaman así porque la familia de ella bien se
confundes con cualquier costeño del Atlántico y en el callejón donde queda su casa le dicen el infierno
por su marido que lo apodan Satanás, resulta don Carlos…
- Eso es lo que me gusta de Domitila María, mantiene un clima de tención cuando esta relatando
una de sus Historias.
Interrumpió doña Francisca e igualmente opto su estilo de acomodarse en la mecedora como
muestra de interés y asombro, doña Domitila María continua.
… Que en cuanto instalaron el altar nuevo que trajeron de España para la Iglesia La Merced, me
dijeron que era bellísimo y me fui a verlo, llevándole al cura una ofrenda para la Iglesia, cuando voy
entrando la muchachita viene saliendo con el padre párroco, no necesitaba ninguna pista para saber
de quién es hija esa muchacha, pero el Diablo maldito además de eso me puso frente a una fotografía
del padre con su Mamá, que tiene en la sacristía, don Carlos, doña Francisca que parecido mas idéntico
de la joven con la señora, haga su juicio. Pero para convencerlo a usted no es ese el caso, lo mío, es
venganza por traición y eso se lo aseguro que aun muerta lo van a estar pagando y yo, ya no puedo
pararlo…
Don Carlos se quedo un buen rato pensativo.
…Le voy a decir una cosa don Carlos y quiero que en esta ocasión no dude de la fidelidad con que
fui educada por mi mamita Domitila y la niña Ángela Maria, que en paz descansen. Usted me dice que
no confié en el pasado y yo no puedo por que las estaría defraudado a ellas, yo valgo por ellas y soy
esto por dos razones, la primera porque ellas así me protegieron y me hicieron para proteger a todo
aquel que este indefenso y la otra fue el odio que las Españolas han descargado en mi y en mi sangre
despertaron rencores de antaño y un despreció que es superior si usted quiere, al que ella me tienen,
me tocaron en el peor momento, cuando estaba dolida por no ser Madre y desde los 21 años me lo han
recordado, se lo dije un día yo no olvido, hay tantos crímenes sin justificación por parte de su clase don
Carlos, que considero que jamás podrán dormir tranquilos como duerme el más pobre de sus
trabajadores. En una ocasión mi niña Ángela Maria me dijo.
‘’Escúchame bien Domitila Maria, tu mamita Domitila y yo algún día tendremos que morir, es parte
de la vida y voluntad de nuestro Dios Padre, pero siempre ella y yo con ayuda de tu Mamá, tus abuelas
y con la de mis Padres, te estaremos cuidando, por eso no descuides encomendarte a nuestra Madre la
Virgen María y nunca nos olvides.
Porque en ti está Sembrada Nuestra Semilla’’.
Al escuchar eso don Carlos y doña Francisca, empalidecieron y en ellos se reflejo una vejes
amargada y dura, sus ojos eran dos huecos infinitamente oscuros y la piel extremadamente arrugada
temblorosa como si cayeran en esa oscuridad, fue algo que doña Domitila Maria no miro en ese
momento ella sintió un aire fresco en su cara que la transporto a un estado de paz y tranquilidad. Por
unos minutos el silencio se apodero de la habitación.
- Y nuestro asunto.
Logro preguntar don Carlos, sin importarle la repuesta, aquella última frase En ti Esta Sembrada
Nuestra Semilla, le oprimía el pecho, sentía escalofríos y se repetía esta era la voluntad de mi padre al
insistir en asegurarle un mejor futuro a aquella niña, involucrándolo a el por su bien y seguridad. Doña
Domitila María con ese aire que le encendió el carácter respondió.
- Nuestro asunto no es don Carlos, es suyo, se lo cante con tiempo, el destino su propio hijo lo tiro
a la suerte.
Doña Francisca y doña Domitila Maria bajaron y en el camino a una de las mesas del corredor se
toparon con Carlos Joaquín y le dijo a doña Francisca de forma burlesca.
- Ten cuidado con tu hija e hijo, en una de estas forman parte de algún escándalo sexual, lo digo
por el tipo de amistades que tiene, verdad Domitila Maria.
Doña Domitila Maria ni espero la reacción de doña Francisca y le respondió.
- No seas atrevido conmigo, viejo malcriado, no te han enseñado tus hombres a respetar…
Carlos Joaquín se reía hasta cuando escucho.
… Ría bichero lo que pueda mientras tenga fuerzas, hoy en la vela de tu hombre, cinco queridas
como voz te van acompañar en el llanto del muerto.
Se puso pálido como nunca y dijo.
- Con el no te metas asesina de mierda, que si le haces algo el que te mata soy yo.
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 En eso un cochero entro a preguntarle a doña Francisca si iba a salir para alistar el coche a lo que
ella respondió que no y se marcho.
- Corre si quieres encontrar alguna gota de sangre, su verdadera mujer lo acaba de matar con un
macho de verdad encima y te vas a dar cuenta de que en la realidad hasta como cochón sos una pila
llena de mierda.
Aquel salió rápidamente.
- Que sucede Domitila Maria.
Pregunto sofocada mente doña Francisca.
- Cuando venía para acá mire tumultos en la casa del hombre de él, me baje y le dije al cochero
que se indagara lo sucedido, me dio el recado y por impulsos por el tono que uso se me escapo, la
mujer los mato al esposo maricon y a su hombre. Considero que usted, sus hijos y su prima se deberán
de trasladar a mi casa a vivir, en esta casa no están seguros y de ser necesario tendrán que abandonar
el País, ahora si usted prefiere el riesgo es cosa suya.
Doña Francisca se le alteró los nervios y le reclamo.
- Yo nunca hubiera pensado que usted, que es mi amiga, involucrara a mis hijos en sus venganzas
personales.
- No los estoy involucrando en nada, con o sin motivos el terminara haciendo algo en contra de
ustedes y finalmente terminaría con su padre y con cualquiera de sus hermanos que se interponga
entre él y la herencia. Descanse y piénselo bien, por lo menos lo tendré distraído y lejos de esta casa por
barios días, no ponga en dudas lo que le digo usted no sabe el amor que nos une.
A partir de esa despedida, la tragedia final de la Familia Pasos Arellano, no se haría esperar.
Capitulo XXIII
Cuando triunfaron los Liberales y tomaron el control de Managua, de ante mano ellos y los
Conservadores habían preparado un acuerdo, similar al optado después de la guerra contra los
extranjeros jefeados por Walker, en donde se perdonaría aquellos crímenes contra civiles, saqueos,
robos, desfalcos y cualquier tipo de delito cometidos durante la guerra y se mantendría en secreto de
que fue un acuerdo previo y lo daría a conocer como un gesto de Unidad Nacional por el bien de la
Patria, en aras de la paz, la estabilidad social, en otras palabras, una reconciliación entre parientes
disgustados de buen comer, vestir y vivir. En las clases medias y bajas se dio de una manera
espontánea, como muestra del agotamiento político de los dos partidos, las pocas orientaciones de los
lideres Liberales y Conservadores fueron palabras dichas al aire, de tal manera que al momento de la
derrota, para el País fue un susto de unas pocas semanas, en días la vida cotidiana regreso a su
normalidad, con los lógicos pequeños choques entre aquellos seguidores fanáticos.
Para cuando doña Domitila Maria tuvo su primer encuentro público, con el General Bodan, fue en
la casa Libero - Conservadora de la familia Sansón Chamorro, en donde estarían presentes como
invitado de honor, el General Juan Bodan y su esposa, así como doña Francisca de Pasos en
representación de su esposo don Carlos Pasos, la familia Mongalo Barrios, el padre Valentín, el cronista
Avilés y doña Domitila Maria, como amiga de la familia Sansón Chamorro.
Además de darle buenas explicaciones de reunirse con esas personas, en especial doña Domitila
Maria, su esposa se opuso, ya que esa visita no la miraba con buenos ojos, llegar a casa de los que ella
consideraba enemigos como eran marcadas las familias cruzadas con los Conservadores y menos fuese
aun de su agrado tener que compartir mesa con la causante de tantas muertes de amigos cercanos,
comenzando con los muertitos que fueron atrozmente asesinados. Aun con todas y justas negativas,
ella se tendría que tragar a esa mujer. El General Zelaya le dio instrucciones específicas de los acuerdos
que de manera urgente les interesarían a los Liberales en León. La recepción se lucio en elegancia y
derroches de toda índole, en un determinado momento la esposa del general Bodan, se centro en la
conversación de su anfitriona doña Esmeralda Chamorro de Sansón, doña Matilde Barrios de Mongalo
y doña Francisca Sacaza de Pasos y el padre Valentín, en todo caso se sentía un poco tranquila que su
esposo estuviera con dos liberales, por que serían tres contra esa fiera, ya que Avilés para ella era un
oyente y ella se bastaba sola para su tres rivales Conservadoras, aun teniendo al padre a favor, mientras
los hombres dieron riendas sueltas al asunto que les interesaba.
- Yo en lo personal…
Dijo doña Domitila Maria.

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 … Nunca tuve temerosa de lo que vendría con un gobierno Liberal, militarista y ‘’contrario a la
política de los Estados Unidos’’, por eso General me gustaría saber, por que teniendo la información de
mis propiedades en León en sus manos, se lo guardaron.
- Escuchen, en cuanto asumimos el control de Managua, nos dispusimos inmediatamente hacerle
honor a nuestra palabra de cero represalias, por cualquier tipo de delito, por algo lógico, de lo contrario
todos tendríamos que caer presos, esta guerra en determinado momento cayó en descontrol de las
tropas, eso nos restaba moral ante la población y los Países de Centro América, por nuestros bienes,
títulos y posición, era de obligatoriedad cumplir con esa obligación con los Conservadores, esta
modalidad no serán nada nuevas en este tipo de transiciones en Nicaragua, de lo contrario las guerras
no terminarían nunca, en el 57 del siglo pasado se dio, no es así doctor Avilés.
- Las guerras en el futuro terminaran de esa forma, mientras no se tenga la confianza del pueblo
que en estos casos si es determinante y no como en las elecciones por muchas mañas fraudulentas.
Dijo Avilés. Volviendo a ver a doña Domitila Maria, para los doctores Sansón y Mongalo fue un
buen inicio del General dando muestra de sinceridad y buena voluntad por parte del Gobierno. El
retomo la palabra.
- Es por eso que no se dio a conocer ese acuerdo secreto entre los dos partidos, en cuanto a usted,
nosotros dimos con esa información mucho después de haber asumido el Gobierno y por lo tanto ya
no era posible ninguna acción en contra suya, es mas ni lo pregunte, con solo una posibilidad que
hubiéramos tenido, con eso nos hubiéramos ido en contra de sus bienes en León…
Sonrieron los cuatro. Doña Domitila Maria le gusto esa forma directo que uso Bodan y se alerto
por la misma.
Al poco tiempo de iniciar la conversación entre las mujeres, doña Francisca se disculpo y le solicito
a doña Esmeralda que le permitiera recostarse en una de las hermosas hamacas que tenía en la terraza
contigua, que daba vista a los dos grupos de conversación que se habían armado.
- OH, fue una precaución por desconocer detalles de los arreglos de los Conservadores con el
Departamento de Estado. Nadie encuentra si no sabe en donde buscar General y los intereses se
cuidan con información, para saber en donde y cuando le quieren dar el golpe a uno, yo no me atengo
del respaldo de los Pasos, en la realidad se lo digo no son lo que lo que la gente común piensa y no
creo que ustedes lo miren de esa forma, yo sé el peligro que puedo representar para cualquier
Gobierno y clase social al ser asesinada, que mas traición la que me montaron y yo aquí estoy
conversando con ustedes y tenga la seguridad que lo hago de buena fe…
El se sonrió como adivinando hacia donde se dirigía la pregunta de doña Domitila Maria.
… En este caso, hay muestra de buenos cálculos, no era necesario esperan tanto para sacar a luz
esa información sobre mis propiedades y negocios en el occidente del País, golpear y salir ileso es
sencillo para ustedes, la guerra termino y lo digo con cierta seguridad, el golpe de los Conservador ellos
lo tienen bien guardado, a espera de un solo error y si me han guardado como un secreto de Estado,
eso General es porque esa papa caliente les quema las manos, le pregunto. Cual es en la realidad la
parte caliente de la Papa.
Los cuatro señores se miraron y entendieron que los tonos iban subiendo y se comenzarían a
presionar, Bodan respondió.
- La Papa caliente la tenemos desde que entramos al Gobierno, su amigo Carlos Pasos con Manuel
Chamorro, Adolfo Díaz y otros Conservadores acordaron un pacto secreto con el Departamento de
Estado, que se mantiene a pesar de cualquier resultado electoral en los Estados Unidos, por el interés
del Canal Inter.-Oceánico y los que estamos aquí sabemos lo estratégica que es la ubicación de
Nicaragua en Centro América principalmente, también tenemos el peligro de que la guerra se vuelva a
desatar, que sería el pretexto para intervenir militarmente en Nicaragua y es donde entran ustedes a
jugar, amigos…
Dirigiéndose a don Miguel Sansón y a don Roberto Mongalo. Doña Domitila María y el cronista
observaron las intenciones de Bodan de halar a los doctores a favor de su bando dejando las cosas a
media.
…Como dice se popularmente…
‘’La verdad, aun que duela’’.
… Nosotros le dimos seguimiento a todas sus acciones durante la guerra, supimos poco y mucho
de su manera de proceder, principalmente su serrada estructura, firmeza, alcance y fidelidad ciega de
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su personal, la habilidad de su gente de cómo entrar y salir dejando limpio el paso, también
conocemos de que para tocarla hay que pensarla dos veces, miramos alrededor y todo estaba limpio,
entonces decidimos buscar hasta donde era su alcance en León y fue de esa forma, de un lado a otro
que dimos con dos redes de usted, a como usted muy bien lo pregunta, que podíamos hacer, claro que
podíamos hacer muchas cosas y lo primero que hicimos fue evitar que esta información cayera en
poder de los Conservadores, es por eso que el General Zelaya, la aparto de la vista de todo mundo, con
esa información y con cierta madures o inteligencia, este País podría volver a la guerra o por lo menos
dar la chispa necesaria para una intervención y pensamos con mucha paciencia concluyendo que usted
también desearía deshacerse de esa Papa caliente que también le quema la mano.
- No crea General que para mi sea tan fastidioso esperar al mejor postor, si ustedes me atacan, sin
importar mi reacción, les estarían liberando las manos a los Conservadores y al Gobierno Liberal le
conviene mantenérselas atadas a ese pacto secreto entre ustedes.
En el ambiente se sentía un tanto tenso por el individualismo entre ellos, para con los otros tres
miembros que estaban presentes no había espacio de entrar y opinar, tampoco era fácil preguntar
durante un duelo ya abierto, que con una pregunta mal formulada por el desconocimiento de detalles
a los que se referían podría ser contraproducente, al notar ella que en las cabezas de don Miguel y don
Roberto y el profesor Avilés ya habían suficientes preguntas tomo la delantera, antes que ella
continuara el cronista se le adelanto para disculparse de tener que retirarse para acompañar a doña
Francisca, se retiro y ella agrego.
- Don Miguel y don Roberto, conocen muchas cosas, por su parte y otras por la mía, me párese
que en este punto de la conversación no la podrán entender, si no se es mas claro. El peligró señores
radica en que para yo entrar a León, requerí de los servicios de un pequeño ejército de abogados y
testigos para hacer todo de una manera legal, eso es de manejo suyos, pero esa gente mas que
abogados representan a distintas bandas de asesinos y delincuentes que estarían dispuestos de hasta
matarse entre ellos mismos, por las tierras que son mías, yo no necesito matar ni ofender a nadie para
que eso suceda, no es así General…
El asistió con la cabeza, serrando los ojos y apretando los labios, a la vez se percataba que le
estaban tomando la delantera en un detalle que el de antemano lo había preparado.
… Si con esa información manejándose inteligentemente los Conservadores, la chispa de la guerra
la regaría por todo el País, en cuestión de días y el Departamento de Estado ya tiene ordenes claras
para actuar. La pregunta es, que hacemos con esas bandas de criminales sin afectar al Gobierno Liberal,
ustedes me conocen que igualmente yo no puedo hacer nada sin asegurar a las personas que son de
estas regiones y que me sirvieron para todo este asunto, estamos Doctores de la magnitud del asunto,
no se trata de comprar o vender tierras…
Los tres hicieron gestos de estar claros, pero con esa explicación los anfitriones dejaban de ser
simples oyentes de la conversación de dos matarifes, pero ya que el asunto no era de venta-compra y
que se trataba de crímenes o ensangrentar el País, ellos optaron por callar, ante el primer susto que se
llevaron en esta y otra conversación más.
… Aunque para ser sincera, de todo esto no me sale de la cabeza que ustedes pretendan usar esto
como arma para tenerme maniatada y que al dejarme ir con el ruido de los caites pretender hacerme
caer y con solo eso salir limpios en este asunto.
Acción que en efecto estaba prevista, si no la ejecutaron fue por la salida de un día para otro del
Gobierno Liberal.
… Por dinero o por otras prebendas no me interesa salir de León, ya le dije General mi único
interés, sacar a mi gente limpia y sin deudas.
- Me agrada Domitila Maria, de que usted lo entendiera de esa manera y discúlpenme mis amigos
por no percatarme de sus escasez de esos detalles, no pretendía hablar con doble sentido para nada, ya
usted lo dijo con toda claridad, pero supongamos lo ultimo, quien ganaría ó perdería, lógicamente que
nosotros. Requeriríamos de tiempo para afianzarnos y reestructurar las relaciones con el Departamento
de Estado. Ahora, nosotros ya hemos ido adelantando un poco las cosas en el sentido de encubrir con
versiones diferentes los alcances suyos en el occidente del País y en nuestras versiones su imagen no
sale en absoluto, constamos con buenos cronistas para convertir lo negro, en rojo o blanco.
Doña Domitila María se sonrió recordando a sus amigos don Fernando y al cronista Avilés.

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 - Me gusta la idea, pero por lo menos díganles a sus cronistas que escriban de que tuve unos
buenos Putales…
Todos sonrieron levemente. En la terraza doña Francisca en compañía del cronista, solamente se
sonreía pensando en su triste final sin hombre, doña Domitila María prosiguió.
… Yo digo que en estos asuntos de venganza el éxito está en tener paciencia, nadie ni nada es
eterno, si en otro momento los Conservadores alcanzan nuevamente el poder, déjenles como herencia
esa Papa caliente mientras ganemos tiempo con mayor paciencia, serenidad y frialdad procederemos y
nadie saldrá dañado…
Nuevamente se pusieron a sonreír.
… Eso si General, en este juego no entra a negociación la seguridad de mi gente, mientras no la
toquen, con migo no habrá problemas por ningún motivo.
Puntualizaron detalles ya que el ambiente no permitía mayores libertades para continuar tratando
con mayor puntualidad y así el General Bodan poder trabajar una oferta con el General Zelaya.
Las esposas se acercaron al círculo y de manera rápida los hombres con doña Domitila María
concertaron tener una reunión privada y con mayores acuerdos para ser ejecutados de inmediato.
Graciosamente doña Esmeralda dijo.
- Ahora nosotras queremos reír, a ver, cual comienza con el primer chiste.
Los tres se volvieron a ver, pero en eso se disparo don Roberto que gozaba de la fama de ser un
compañero de mil chistes, entonces doña Esmeralda le dijo a doña Domitila Maria.
- Agarrase duro mi amiga que Roberto es terrible a los chistes.
Doña Francisca se aparto del grupo, por sentirse fuera de lugar en cuanto a los asuntos que se
podrían tomar con la esposa del General, que no eran de su interés, ni agrado, no tanto así se llenaba
de envidia de doña Domitila Maria, de su conversación y lo agradable de discutir asuntos propios de
hombres y con el valor que ella tenía para ser tomada en cuenta en esa conversación, se trasladaba a
su Sicilia, los gratos recuerdos de adolescencia y su juventud, menos rigurosa que en Nicaragua, a la
vista y seguridad por donde ella quisiera andar y se decía seguidamente después de esos gratos
recuerdos.
- Ahora hasta sin hombre quede.
Así debe de sufrir su prima Valeria, su hija Ángela Maria, teniendo al alcance de la mano, todo tipo
de caprichos, alegrías sin límites en fiestas que amanecían bailando, y volvía a decirse.
- Y tan jóvenes levantarse al día siguiente sin hombre por culpa de una disciplina injusta que
tendrán que romper y de esa forma disfrutar el momento, que más tarde les será difícil obtenerlo si no
hay un hombre a la par.
Al acercarse el cronista Avilés ella le planteó el tema de las libertades que deberían tener las
mujeres y ser así igual a doña Domitila María, con sus propias decisiones y participación tanto en lo
económico, como en lo político y social.
- Yo creo profesor que si las mujeres tuviésemos un mínimo del poder en nuestros hogares, así
como Domitila María, estos asuntos de política y de guerras no se dieran con tantos sacrificios
humanos, por nuestros hijos sacrificaríamos cualquier capricho o interés.
- Estoy de acuerdo con usted doña Francisca, pero si lo miramos desde otro Angulo y mirara a su
amiga con uno o varios hijos, su vida fuera esta misma y pusiera todo su empeño y tiempo en estos
asuntos que de una u otra forma deben de ser fastidiosos para ella. Estoy de acuerdo con usted en
cuanto a compartir y escuchar las opiniones de la mujer en el hogar, que también debiera de tener
mayor participación en otros asuntos que acaparamos los hombres, así piensa usted y muchas más y en
donde dejaríamos a las que no piensan como ustedes y son mayoría en estos tiempos.
EL cronista le contó que el siglo XX traería muchos cambios en esas ramas que se involucran en la
vida activa del ser humano y que en la actualidad ya se daban en distintas partes del mundo piquetes
de movimientos sociales que llevan en sus plataformas de principios esos puntos que ella le planteaba y
que todo estaba en ir creando las bases para una conciencia social que de paso a esas aspiraciones que
poco a poco se van generalizando.
Como un destello fugas ella recordó el día en que almorzaron con doña Domitila María es la
quintita del lago y se dijo ella misma.
- Ustedes los hombres solamente miran como bienestar el poder económico, no piensan en el ser
interior de cada persona y este tiene iguales necesidades, la educación a las mujeres no tiene ningún
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sentido su puesto es parir hijos y las labores de la casa, mi cuñada era una mujer culta y en sus tiempos
y en el nuestro, por mucho dinero que tuviese no era mas que una solterona, sin meritos mayores en la
vida.
Se acerco el padre Valentín y tomaron una media conversación de temas variados y sin interés en
eso doña Francisca se iba quedando dormida por u instante y despertó con fuertes movimientos que
hasta un dolor en la espalda le dio, arrechándose se levanto y se dijo en vos alta.
- Ahora sí que ya me jodi con este dolor, tendré que hacer algo y rápido de lo contrario voy a
recaer en esos achaques de vieja mal culiada…
Se percato de la presencia de padre Valentín e inmediatamente repuso.
- Perdón padre en un momento creí que estaba sola, discúlpenme los dos.
- No hay ningún problema. Cálmese esas cosas pasan.
Dijo el padre Valentín y el profesor Avilés meneo las palmas de las manos indicándole que no
había problema.
Se dirigieron al grupo que se estaba poniendo más animado, en realidad don Roberto tenía una
especie de rutina para contar chistes, de tal manera que de uno al otro iban subiendo de tono y doña
Matilde sin la posibilidad de frenarlo, por no quedar como aguafiestas ante todos
En el acuerdo que llegaron era que se volverían a reunir pero discretamente y sin la presencia de
las señoras y que por parte de doña Domitila Maria, se sentía conforme con la presencia de don Miguel
Sansón y don Roberto Mongalo en calidad de testigos, depositando así en ellos, no la falta de palabra
por parte de algunos de los dos partes, si no que serian testigos que pasarían a su custodia y que por lo
tanto absolutamente nada les tendría que pasar a ellos, de esa forma ella se aseguraba tener los
testigos a su favor, serian de su control, el General Bodan interpreto erróneamente esa medida como
un precaución, mas humanitaria que otra cosa, ya que esos testigos para el General Zelaya, no
representaban ningún valor, ni político o militar, por lo tanto era algo insignificante su petición
accediendo inmediatamente.
El General Bodan Cayo posteriormente a la cuenta que le habían dado Atole con el dedo, por la
sencilla razón, de que ese gesto humanista, ponía a favor de ella sus lealtades, de tal manera que ella
quedaría libre de romperlo y ponerlos a ellos con sus familias fuera del alcance de los Liberales en el
extranjero y ella dar el golpe con toda libertad, con protección de sus enemigos y de Gobiernos
extranjeros, por lo que el General tuvo que ocultar esa parte en el informe al General Zelaya y entre
sudores se dijo.
- Ahora resulta que esta mujer Hija de P… hasta traidor me quiere volver.
No lo era ni lo fue pero nunca olvidaría que doña Domitila María lo obligo como a un niño a
mentirle a su amigo y jefe, a quien le había Jurado Fidelidad, nada mas y nada menos, que al General
José Santos Zelaya. El Caudillo Liberal.
Capitulo XXIV
Permitiéndose acceso a la Capitanía del muelle de Granada, se presento don Fernando el Cabo
López, Mayordomo de la fiestas en homenaje a Nuestra Señora del Santo Rosario y el tradicional Atabal
con los miembros de la calle Santa Lucia, lo acompañaban copleros de Granada, Masaya, Masatepe y
Nandaime, esa fue la primera ocasión en que el Atabal salía a las calles de la ciudad, fuera del mes de
octubre, en la que se celebra la fiesta a su patrona la Virgen del Rosario y el Cabo puso a la orden ante
Rosita Alemán y Marta Joyilla, para acompañar las honras Fúnebres de doña Domitila María. Les explico
de que Santa Lucia es la Patrona de los navegantes, por ese motivo el Atabal se guarda y parte de esa
calle, ya que desde muchos años ante del incendió de la ciudad esta fue una zona de pescadores y
marineros, igualmente resulta que cuando los piratas ingleses se acercaban a Granada en un mes de
Octubre los pobladores comenzaron a sonar los tambores alarmando a la población sobre la presencia
de enemigos y es muy posible que las ratas de mar creyeran por ser de noche que era una repuesta de
cañones, se retiraron, así se inicio la tradición, en homenaje a la Virgen del Rosario, ya que se le atribuye
el salvar la ciudad de esos corsarios, esto sucedió en un mes de octubre y en agradecimiento se celebra
y el atabal sale a las calles de la ciudad.
El Cabo López les dijo.
- Por este motivo, el arrastre popular del bello gesto y dama doña Domitila Maria y por ser ella la
Mayordoma del Gran Lago de Nicaragua, el Atabal desea rendirle un tributo póstumo a tan distinguida

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personalidad de la ciudad de Granada y les adelanto que en ninguna ocasión hemos salido fuera del
mes de Octubre en que se celebra nuestra patrona la virgen del Rosario y nos ponemos a la orden
copleros y atabaleros.
Antes del incendió de la ciudad el muelle quedaba al norte de su ubicación actual a unos escaso
200 metros de la cabecera Este de la calle Santa Lucia, por tanto dicha calle era la puerta principal de la
ciudad. Un español al ver que era una comunidad de pescadores y marineros les recomendó ponerle
Santa Lucia, por la santa Patrona de los Marineros y por la ciudad Española de Santa Lucia. Las dos
amigas estuvieron de acuerdo con el Cabo, agradecieron y acordaron que irían al frente de la carroza
fúnebre y en cada esquina recitarían una copla dedicada a la difunta, frente a la carroza que la
trasladaba, hasta llegar al Cementerio. Rosita Alemán le indico a Manuel Ugarte que le entregara a los
miembros de la banda popular guaro y comida para la espera de la salida y durante el recorrido a la
morada final de su amiga.
Igualmente se les presentaron a la Capitanía otras personalidades populares de la ciudad, Liranza,
la Marucha, Tronco de Yuca entre otros, así como Intelectuales, doctores en Medicina y Leyes,
ingenieros y empresarios de renombre Nacional, prestigiosos extranjeros asentados en la ciudad, esa
tendría que ser la dinámica para presentar sus condolencias, ya que al salir el Cortejó Fúnebre no habría
tiempo ni espacio para recibir a ninguna persona. En otro recinto que se recibieron condolencias fue en
la Iglesia de Guadalupe, por la mañana, al medio día y por la tarde a la hora del Rosario en memoria de
la difunta, durante los siguientes nueve días. En los alrededores de la ciudad y en casas particulares
como la de la familia Pasos Sacaza y los Matrimonios Libero-Conservadores, de la misma forma se
realizaban los rezos, los misioneros lo realizaban en el campo con sus comunidades, durante esos días
las rezadoras de la ciudad tuvieron una agenda agitada...
El acceso masivo de la gente aglomerado en los alrededores de la ciudad, fue permitido por las
autoridades, ordenadamente los asentados al sur de Granada se fueron distribuyendo por todo lo largo
de la calle La Libertad, los que estaban por el costado norte buscaron la calle el Ganado y el Arsenal,
otra parte se fue distribuyendo a lo largo de las aceras del recorrido y una gran parte que no alcanzo
prefirió ir caminando el itinerario en media calle, a esperar a la difunta propiamente en el Cementerio,
en donde se apostaron frente a un altar sobre un tambo con entrepiso para alcanzar mayor altura,
construida en tiempo record por el Maestro Gabriel Cárcache, frente al camino de la Capilla de las
Animas, Otros bordearon el Cementerio para tener mejor vista del lugar en donde sería enterrada. Para
estas altura de la espera del entierro, la gente andaba un tanto sensible, resulta que un hombre que
llego del Volcán Mombacho con un niño, abriéndose paso entre la gente, no se fijo que estaba
pasando por un grupo de mujeres que la sofocación les tenía su sensibilidad a flor de piel y este le dijo
al niño.
- Tenga cuidado mí hijo y fíjese en no machucarle los cascos a la gente.
Un de las mujeres le clavo una mirada profunda y le dijo a gritos.
- Cascos tendrá tu madre Hijo de la Gran P…
Algunos hombres que se encontraban a la par de ese grupo de mujeres comenzaron a hacer
guasas de la repuesta que recibió aquel humilde con su hijo, se dieron un empujón similar a la ola que
causo la caída del féretro al lago y algunas personas cayeron al suelo entre hombres y mujeres,
mientras los vulgares aprovechando el alboroto le gritaban a la mujer que dio la repuesta.
- Cachimbea a ese jodido irrespetuoso, dele su vergajo.
El padre Valentín quien se encontraba en la Capilla de las Ánimas tuvo que salir y poner el orden
entre la concurrencia. Al momento que el padre se disponía a regresar a la Capilla, se presento otro
caso similar entre un hombre y varias mujeres.
- Doñita…
Le dijo un hombre a una mujer que se encontraba de espala a él.
… No se menee que anda un animal en el hombro…
Cuando el toco una pelota negra resulto ser un lunar de carne bonito y grande, pero el grosero
agrego.
… Parece ser una Garrapata de Vaca.
La mujer se voltea y le deja ir una cachetada e igualmente a gritos partidos le dice.
- Garrapatas tendrá tu Madre en el lomo Hijo de P...

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 Las otras mujeres le daban palmadas en la cabeza, esto armo otro alboroto, al que el padre
Valentín se tuvo que devolver para ir a calmar los ánimos, el comprendió que la espera ya estaba
entrando al límite de cualquier desesperación. Igualmente le indicaba que entre mas pronto fuese
depositado en la tierra el cuerpo de doña Domitila María, sería mejor para aquellos que se sienten
dolidos por su partida y para quienes en vida la odiaron tanto. Por eso tendría que mutilar la Misa para
hacerla más rápida y así calmar el dolor del populacho y amistades, como sacar el odio de la otra gente.
Después de los tres Rosarios cantados y la despedida de la calle El Desenredo por parte de la
Iglesia de Guadalupe replicando sus campanas como si estuvieran llamando a sus parroquianos a Misa
y dejaron de sonar hasta que el cortejo salió de la calle El Enredo, ya en marcha al Cementerio. A
medida que la carroza avanzaba la gente aglomerada en las aceras aplaudían, levantaban sus manos y
muchos de ellos agitaban trapos blancos, otros principalmente mujeres gritaban.
- Adiós doña Domitila María.
- Adiós Amiga.
Los aplausos se fueron entre la multitud aglomerada en las aceras y los que iban a píe, en cuanto
el sonido llego al cementerio estos lo regresaron, al encontrarse las dos ondas producidos por ese ruido
hicieron vibrar nuevamente las altas paredes, con la diferencia que en esta ocasión por surgir en la
propia ciudad, este se sintió hasta en el piso de los recintos en donde estaban sus enemigas.
Las mujeres de la aristocracia rancia y acabada, se mordían la lengua y se pellizcaban el ano al
sentir la presión que ejercía aquella multitud en la ciudad con sus presencias, ruidos y aplausos, La
marcha fúnebre iba por la calle el Palenque y en la calle el Desenredo se escuchaban los aplausos y el
bullicio que producía tanta gente hablando al mismo tiempo y ellas lo escuchaban con toda claridad.
Aun así estas mujeres aristócratas no se imaginarían lo que les vendría, esa despedida del
populacho era coquetería y que el dolor más grande que les causaría esa mujer estaba fraguado y bien
calculado y este no sería temporal ya que hasta en las imágenes de los Santos la recordarían y
posiblemente lo heredarían.
Claro de que su mejores amigas como Marta Joyilla y doña Francisca Sacaza desconocían sobre
ese secreto que les conmocionara, ahora esas pobres almas miserables que las consume la envidia y el
odio por un mujer que para el resto de la sociedad era una simple mortal que se limito a ayudar a sus
semejante y que para eso se les enfrento con fuerza y ellas no pudieron vencerla.
En cuanto salió la última oleada de gente de la calle el Desenredo, esta serró sus puertas y en ella
entro un luto riguroso que duraría nueve días. Desde ese momento no se escucharía música y los que
cantaran lo harían para ellos mismos, las risas no serán sonoras, por la calle hombres y mujeres tendrán
que circular calzados y no descalzos. Cero ventas de licor, servicios sexuales y el Rosario se rezara tres
veces al día. Este rigor durante nueve días se mantendrán entre esa gente.
Por su parte en la calle El Enredo el luto se guardaría pero con menor intensidad, se venderá licor
sin música, ni escándalos y quedara a criterio propio de sus pobladores la participación en las
actividades Religiosas en la Iglesia de Guadalupe y en la calle El Desenredo.
Sonaron las campanas de la Iglesia de Jalteva, indicando que el cadáver pasaba frente a ella. En el
Parque, la Plaza y el atrio de la Iglesia se aglomero desde temprano la gente adinerada del País, que
visitaban Granada con motivo del entierro. Quedaban impresionados de ver tanta gente pasar en
dirección del Cementerio, trabajadores de ellos le habían informado que la multitud que se encontraba
en el Campo Santo con mucha facilidad triplicaba al mar de personas que acompañaban el cortejo
fúnebre y que a esas alturas de Jalteva la cola de esa multitud estaba en la Plaza de la Independencia.
Con solo imaginarse eso estaban en presencia del funeral más concurrido visto en Centro América,
suficiente para soportar la espera en ese punto, que por su altura se podría apreciar la magnitud del
mismo, colocaron carretas en la Plaza a la par de los muros para lograr mayor altura, con toldos por el
sol, sus peones iban y venían de las casas en donde se hospedaron, con bocadillos, refresco y hasta licor
fino, en esas condiciones las mujeres se rehusaron a participar de esa espera que en algún momento les
pareció un tanto morbosa e injusta para con una amiga.
Lógicamente los adinerados asistentes al funeral habían tenido algún tipo de relación con la
difunta o compartían simpatía para con ella a través de amistades con familias Libero-Conservadoras
que vivían en la ciudad. Otros eran representantes de Gobiernos extranjeros atraídos por la curiosidad.
La representación del Presidente de la República se persono a la Capitanía para trasmitir las
condolencias del Presidente de la República, para posteriormente trasladarse a la Pólvora y en esa
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guarnición la guardia de honor de la Presidencia rendiría una parada militar a la difunta. Esto fue
debidamente informado a la multitud concurrente que caminaba en el funeral, a los apostados en el
Cementerio y a la población en general, para no crear un ambiente de zozobra.
A medida que las aristócratas conocían de este tipo de homenajes, lloraban por fuera y por dentro
y no les entraba en la cabeza, como era posible que esa mujer que venía del más bajo nivel social,
asesina, degenerada promovedora de la prostitución, de los juegos de azar e irrespetuosa de la Iglesia
Católica y su alta jerarquía difamándola, recibiera esos honores.
En la esquina frente a la Pólvora, la Carroza Fúnebre se detuvo, el Cabo López recito una copla
alusiva al amor que sienten los pobres de Nicaragua por ella, otro coplero posterior a la parada militar,
en cuanto los soldados iniciaron la ceremonia, la gente humilde se sorprendía de la pericias con que
meneaban sus fusiles y los movimientos que hacían, al terminar las maromas militares la multitud les
aplaudió, en ese momento se escucharon los estruendos de las descargas de la fusilería y volvieron a
aplaudirles. Cosas similares tampoco se habían visto en Granada, principalmente por los temblores que
causaban las ondas sonoras de tanta multitud aplaudiendo a la vez.
Al reiniciar el recorrido el Bachiller Vargas en completo estado de ebriedad, quiso lanzarse un
discurso y para detenerlo tuvieron que involucrase los militares, gritaba, pataleteaba y lloraba, presento
un cuadro lamentable, peor del que miro Carlos de su hermano Alejandro llorando sobre la caja de
Jesús Cochino. Se calmo y prometió repetir la escena en el Cementerio.
El Bachiller Vargas en sus años mozos logro coronar su Bachillerato en Ciencias y Letras en el
Colegio Centro América, aplicado, no tomaba licor, ni fumaba, mucho menos que bailara pegadito, su
vida estaba enfocada en los estudios. El día de su Graduación de Bachillerato y con honores, tomo unos
tragos de licor, para nunca dejarlo, desde ese momento quedo bautizado y reconocido en la ciudad
como el Bachiller Vargas.
Murió sin la campana del galillo de tanto guaro pelón, después de recitar un poema dedicado a su
único amor, que le llamaba Patricia, este decía.
‘’Ando sin rumbo y si fe, porque la Patricia se me fue’’.
El inició era lo único que se le entendía, el declamaba y a medidas que lo hacía la vos se le iba
enredando mas hasta quedarse dormido, en esta ocasión fue hasta quedar muerto.
Como lo hizo Moisés en el Mar Rojo, la multitud abrió paso a la Carroza Fúnebre, la estacionaron
en el camino a la Capilla de las Ánimas, para revisar la caja y trasladarla al Tambo en donde se
celebraría la Misa. Al estar en orden y no sentirse mal olor que saliera de la caja, procedieron a colocarla
en su puesto de honor en el tambo improvisado.
En cuanto ocupo su lugar iniciaron nuevamente los aplausos, estos se prolongaron al extremo que
el padre Valentín alzando la mano hizo señal de hacer silenció y así logro que se fueran calmando la
gente y poder dar inicio a la Misa.
El sol era picante, el cielo estaba limpio de nubes, un calor sofocante hacía, como el que los
cargadores del Muelle consideran su cobija cuando se dicen entre ellos mismo para darse aliento.
‘’La cobija del pobre es el Sol’’.
La gente hacia silencio y regresaban los aplausos cuando el padre Valentín decía alguna expresión
de elogio para la difunta, de tal manera que el tiempo en vez de reducirlo mutilando la Misa, se duplico
con la prolongación de las emociones de los concurrentes, para el padre era imposible dejar de hacerle
algunos halagos a la difunta, era su amiga, su cómplice en los amoríos con doña Francisca y los
participantes necesitaban de escucharlos para satisfacer sus esfuerzos en esa larga espera.
Al concluir la Misa ya al padre Valentín no le importo que a la gente se les quebraran las manos
aplaudiendo, a el solo le restaba el compromiso de acompañar a la difunta a su morada final y darle los
Santos Oleos. Para eso el marcharía al frente, lo seguiría la caja cargada por amigos y posteriormente
Rosita Alemán, Marta Joyilla y personas selectas de ellas. El Cementerio estaba rodeado por toda esa
gente al igual que lo estuvo la ciudad, desde el día anterior.
Llegaron al lugar de la Fosa, en el lugar hubo otro atraso, el capitán Flores tenía más de dos horas
de haber enviado por mecates para introducir la caja. Marta Joyilla tratando de evitar que Rosita
Alemán perdiera la cordura y la agarrara fuerte en contra del Flores, dijo.
- No perdamos el tiempo, ensanchen la Fosa y hagan unos escalones para bajar a mi amiga en
hombros y si viene el mecate antes, pues se hace con el mecate.

108 | P á g i n a
 La Rosita Alemán estaba por reventar al ver la frescura del Capitán, no concebía que unos mecates
impidieran el entierro, que hasta el momento había sido a la altura que se merecía doña Domitila María
y abrió la boca para decir.
- Y que no escucharon lo que dijo Marta Joyilla, pónganse a trabajar no me hagan hablar o
arrecharme, que mi hermana me perdone en la otra vida, yo ya suelto las tapas y pago para que los
jodan aquí y ya.
Las personas que estaban cerca comenzaron a gritar jochando a Rosita Alemán y los aplausos se
reiniciaron, hubieron algunos que gritaron que les dé la orden y ellos ya los cachimbiada sin necesidad
de paga y nuevamente se armo el desorden al que el padre Valentín paro levantando el brazo con la
palma de la mano abierta.
Aquellos hombres no la pensaron dos veces y se lanzaron en la Fosa como si esta estuviera llena
de agua y participarían en una competencia de nado y comenzaron a trabajar. Al comenzar a sacar
tierra llegaron los cuatro marineros que andaban en busca de los mecates, en completo estado de
ebriedad, esta cuenta sería guardada por Rosita Alemán, para ellos y el Capitán Flores.
Resulta que al llegar estos hombres el tiempo rápidamente se comenzó a descompones, se
oscureció y aun faltaba los últimos rituales religiosos para proceder con el entierro.
Concluyendo el padre Valentín procedieron y ya estando el Féretro en el fondo de la Fosa, la
precipitación de agua comenzó, se apuraron a echarle tierra pero el agua les ganaba y en el fondo se
formaba en lodo, lograron serrarla pero el área quedo aguada en lodo, el Panteonero llevo una carpa
de carreta y la colocaron encima de la tumba para que no se hiciera lodo.
Antes de eso resulta que uno de los paleadores igualmente borracho, al tirar la palada de tierra al
hoyo paso con todo y pala al fondo, para mayor remate el pendejo en su borrachera creyó que estaba
en su cama, no pujo de la caída y se acomodo para hacer su siesta, ahora era sacar al borracho jodido.
En eso de la multitud salió una voz fuerte de mujer que dijo.
- Déjenlo adentro a ese borracho jodido, ojala que la muerta lo agarre y se lo arte a ese Hijo de
Puta.
La gente sin importarle la lluvia inició la misma guasa y hacían bulla mayores que la precipitación
del agua, nuevamente se escucho otra voz pero de hombre.
- Déjenle una pichinga de guaro pelón para cuando se despierte busque como salirse y no se
muera de goma ese jodido.
Lograron sacar al hombre, el padre Valentín alzaba el brazo inútilmente, ya era imposible frenar
esa llave de escape. Quedaron de acuerdo con el encargado del Cementerio en que al día siguiente
levantarían la carpa y se la devolverían limpia y si el lo desea se la podrían comprar nueva.
La gente comenzó a retirarse apesarados con lo sucedido a última hora, nadie tenía la culpa pero
a Rosita Alemán no le pasaba el descuido de Santiago Flores, sabiendo como hombre de navegación y
viejo, que la lluvia podía regresar en cualquier momento, para ella fue un acto de irresponsabilidad
imperdonable. Por respeto al padre Valentín no se hizo ningún comentario al respecto.
Aquella multitud a como llego a Granada, regresaban a sus casas igual que cuando salieron,
debajo de la lluvia, con el único placer de haber acompañado a doña Domitila María a su última
morada. Les dolían las espaldas y la nuca por la tención, se sentían agotados y daban gracias a Dios de
que todo hubiese terminado sin mayor novedad, solamente con sustos como el hundimiento de la caja
en el lago.
La lluvia ceso minutos después de haber llenado de tierra la fosa, a eso de las 06.00 de la tarde
inició un torrencial que duro hasta la madrugada del día siguiente, la noche se repitió igual que cuando
recibieron la mala noticia por los ‘’Últimos Mensajeros de la Muerte que visitaron la calle El Desenredo’’,
la tristeza flotaba en el ambiente y los comentarios eran únicamente relacionados con la difunta, la
espera y el fabuloso entierro. Todavía les quedaban nudos en la garganta y la sensación de querer
llorar, las mayores de esta comunidad se refugiaron en sus camas y ellas solas la continuaron llorando.
Las aristócratas tuvieron material para reírse de doña Domitila Maria, todo lo sucedido lo
mantenían fresco y le daban gracias a Dios que esa mujer maldita terminara de esa forma, continuaban
sin imaginarse la gran sorpresa que se llevarían al regreso de España de doña Ángela María Pasos y se
leyera el testamento. Ella que en la realidad, pocos días después de la muerte pariría un niño hijo del
conde don Guillermo D´Ibarra hijo, con el que ya había contraído matrimonio y solo esperarían unos
meses para viajar a Granada y Bautizar a su hijo o hija en la Iglesia de Guadalupe.
109 | P á g i n a
 Capitulo XXV
Al día siguiente de la reunión con el General Juan Bodan, doña Domitila María inicio el
desmantelamiento del corredor comercial con León, para darles un voto de confianza y de su buena
voluntad de cumplir cualquier acuerdo secreto con ellos, todo coordinado y el consentimiento de los
Liberales desde Granada por los dos testigos don Miguel y don Roberto, así como la participación
directa de sus testaferros de oriente. Desde el primer contacto con los Doctores Libro – Conservadores,
Juan Bodan les oriento que con nadie podían hablar del asunto o cualquier requerimiento si no era
expresamente con el y para lo cual el mismo General Zelaya les había denominados, ‘’Los Enlaces’’, de
esa forma por lo menos tendría control directo del asunto, sin mencionar que era parte de un acuerdo
que no fue reportado. Esa precaución doña Domitila María se lo imagino, desde que el con algún
apresuramiento le acepto la idea, sin tomar en cuenta a los peligros que se exponía.
El peligro de Bodan al entregarle las riendas por descuido o subestimación, lo tendría en las manos
al solicitarle una reunión directa con el General José Santos Zelaya y que esté de un detalle tan bonito
como ese no estuviese al tanto, sería el fin de una carrera y la amistad, resumiendo se dijo ella misma.
- Ese General Gallito, me va a debe un favor, que tendré que saber cobrar.
Días después de ese encuentro, el General le estaba mandando a decir que la propuesta del
Presidente Zelaya, la tenía en sus manos, esa expresión en definitiva era un decir, por que no habría
ningún documento mayor a la palabra y los testigos, les propuso que se podrían reunir el siguiente fin
de semana a lo que ella dijo no poder y que le parecía mejor dejarlo para el próximo. Ella riéndose de
Bodan se dijo.
- Por ser General cree que trata con alguna babosa. Una reunión lo dejaría libre de cualquier
asunto pendiente conmigo y de esas formas saldría limpio, no sabe con que tipo de gallina de monte
está tratando.
Fueron días de consultas o de estira y encoje, hasta que ella accedió, los tormentos del General se
fueron apaciguando.
Doña Domitila María, envió a Marta Joyilla a preparar la casa del Cerro Posintepe a la oriás del
lago, con sumo cuidado y que nadie se diera cuenta del tipo de visita que recibiría, que el personal
fuera el más selecto en confianza, que se le pudiera sacar los ojos y no decir ni una sola palabra. Eso no
tenía la mayor complicación para Marta Joyilla, de tal manera que las exigencias de doña Domitila
María estaban cumplidas a toda cabalidad para la fecha estipulada. El General fue recibido con toda las
cordialidades que se merecía por el negoció y aun cuando había mentido y omitido información a su
jefe por culpa de ella. El llego acompañado de dos coroneles y el personal custodia inmediatamente
que ellos entraron a la casa playera se retiraron, dejando uno para el aviso de la hora de retirarse los
jefe, los coroneles fueron presentados como, el coronel Bernabé Somotillo, al que doña Domitila Maria,
no le puso cuidado por su curioso apellido y nunca supo que era, apellido o apodo como el de ella y al
coronel Ramón Fajardo, los dos estarían acantonados en la guarnición La Pólvora, el primero sería el
jefe Militar del Departamental y el segundo jefe de la Plaza de la Ciudad, en otras palabras el primero
sobre el segundo. Después de un recorrido de cortesía por la parte útil de la propiedad pasaron a la
terraza.
- Espero que podamos llevarnos bien y me tienen a la orden para lo que deseen…
Les dijo después de ser presentado sus respectivos cargos, a los militares.
… Espero mi estimado General…
Le trato de esa manera para no olvidarse ella misma de que estaba tratando con militares
traicioneros, a como trato don Joaquín al general Corral cuándo le reclamo el hecho de llevar a su casa
a Byron Colé.
… Que las decisiones o propuesta que trae sean de acuerdo a lo que hablamos en la ocasión
anterior y aunque no lo pongo en duda este usted representando al General don José santo Zelaya…
Le dijo de forma burlesca, Juan Bodan no le puso mayor interés por considerarlo algo vago y sin
importancia, pero a los coroneles les agrado la manera respetuosa de tratar a su jefe, cosa que nunca se
imaginaron escucharían de una mujer del calibre de ellos.
… Tenemos intereses mutuos. El retiro de mí corredor comercial, espero haber dado muestras de
buena voluntad al Gobierno Nacional.

110 | P á g i n a
 Los coroneles a partir de ese momento como si se les estuviera hablando en otro idioma no
entenderían nada, solamente sabían que esa mujer era más peligrosa que todo el Partido Conservador
junto.
- Estamos en lo que es nuestro deber…
Dijo él General, dándole a entender a ella y a los testigos que estaban de acuerdo en que no era
necesario entrar en detalles y poder hablar entre líneas.
… Mantendremos todo en el mismo lugar y bajo los mismos nombres en que están, cualquier
movimiento que usted desee hacer con sus trabajadores, lo facilitaremos legalmente, sin retrasos, ni
preguntas y mucho menos inspecciones de campo, les párese.
- Seré un poco clara en este punto…
Hasta que cambio de color el General Bodan al creer que doña Domitila Maria, seria directa en el
lenguaje o regresaría a los detalles, cosa que implicaría compartir el motín con los coroneles y no estaba
autorizado por el Presidente Zelaya para eso, ese es el problema de sonrojarse, eso revela muchas
debilidades y el ojo de doña Domitila María era apropiado para detectarlas.
… Usted sabe que cuentas claras conservan amistades, quien asumirá los gastos de esos
movimientos, yo no he perdido pero tampoco quiero perder, por la Patria se hacen muchas cosas
menos quedar pobre.
Por lo menos Bodan se sintió más aliviado.
- Eso no es ningún problema, los asume el Gobierno o el partido, no hay problema.
- No me ha entendido general, por mi parte no me interesa quien asume, lo que a mi me interesa
quien entregara el dinero para esos movimientos.
Nuevamente el General se sintió aliviado, aunque en esta ocasión ya comenzaba a sentir pulsadas
en la cabeza.
- Para eso estoy yo personalmente con los enlaces, lo que si debemos de coordinar es de que no
se tenga mucha prisa, por que el asunto de dinero es administrativo y en eso el general Zelaya es muy
cuidadoso…
Además de la fama de brujo, Zelaya tenia igualmente la de ‘’Pinché’’.
… Con un breve plazo de anticipación, será acorde a los avances sin atraso.
- Usted no desean hacer alguna adquisición, en todo caso eso les queda y así podríamos mermar
el peligro de que cualquier sujeto pretenda en algún momento quejarse, usted sabe que en algunos
casos es mejor quitarles las ganas por algo a alguien antes de que se enamore, es como a una mujer, su
hombre le debe quitar la brama a cualquier pretendiente antes que se enamore de ella, que en vez de
cachimbiarlo, va a tener que matarlo.
Los participantes se rieron de la comparación, hasta los coroneles, por ser el tipo de lenguaje de su
uso común, fue lo único que pudieron entender y así lo comprendieron ellos al volver a verlos.
- Eso lo podríamos dejar abierto, para en su momento verlo con usted, el camino es largo, no lo
conocemos en sus detalles y a medidas que avancemos veremos, en todo caso la información usted nos
la proporcionaría para poder canalizar el dinero, quedamos en eso.
Ella hizo un gesto aprobatorio y los testigos sellaron el acto.
… Ahora revisando el otro asunto, usted concluyendo el retiro de sus trabajadores en su totalidad,
la casa queda a nuestra disposición total.
-Eso esperamos, después de eso es tan de ustedes que pueden hasta destruirla y volver a construir,
de acuerdo a las partes que correspondan, eso no me importa, a como dicen.
‘’Quedamos en paz y jugando’’.
- Lo que restaría por establecer, seria que para nosotros, los enlaces son los idóneos ya que gozan
de la mutua confianza de ambos, le párese que así sea.
- De mi parte perfecto, pero ellos son los que decidieran…
En todo caso el humanismo para con ellos había ya cumplido su objetivo, desde ese momento en
adelante, no significaban nada para ninguno, el negoció estaba serrado.
… Pero déjeme recordarle que cuando tiren una piedra, procure que no les caiga a uno de ellos o a
mis trabajadores, se lo recuerdo no con mala intención, ni desconfianza, si no que a partir de este
momento, lo único frágil que nos queda es una fuga de información y eso nos desbarajustaría los
planes y tendremos que requerir de mayor trabajos por parte de sus cronistas, así que por mi parte y la
de ellos todo queda bajo tierra, recuerde.
111 | P á g i n a
 ‘’En boca serrada, no entran moscas’’.
Ellos sonrieron por el hecho de recordar por parte de ella que el General Bodan le había dicho que
tenían muy buenos cronista que lo negro lo podían convertir en Blanco o rojo, mientras los Coroneles
lo hacían por la cita del refrán popular.
- Así es Domitila María, todo queda en la palabra, que vale más que cualquier documento, yo soy
del criterio muy propia, que si firmo un documento de negoció, al momento de hacerlo me muero y no
gozare el fruto. Es por eso que yo acostumbro confiar más en la palabra o un pelo de la barba, de los
bigotes o de la cabeza, como en el tiempo de mis Abuelos.
Todos nuevamente rieron celebrando el buen humor del General Juan Bodan, que a la larga, años
después él tuvo la razón.
Cambiaron la plática dándoles entrada a los Coroneles, que habían quedado aturdidos de
escuchar una conversación en la que no habían entendido absolutamente nada, como si eran invisibles
y sordos, por su parte Bodan, se había quitado un gran peso de encima. Para el todo volvía a la
normalidad, el control en sus manos y manteniendo la fidelidad con quien había jurado serle fiel hasta
la muerte, mientras doña Domitila Maria, se reía por dentro de ver el cambio en el rostro del General y
diciéndose.
- Esta comenzando Papito, lo que te espera conmigo, el negocio aun es joven.
Para ese momento doña Domitila María tenía los ojos bien puestos en los cafetales y tierras de
Carazo, Volcán Mombacho y el General Bodan sería su facilitador para adquirirlas, por su cargo en
Granada. El como jefe político de Granada ejercía mando en los departamentos de Rivas, Carazo,
Masaya, Chontales, Boaco, San Carlos y el Río San Juan, la Guinea y la parte sur de la Costa Atlántica
Nicaragüense, desde Puerto Isabel hasta San Juan del Norte, prácticamente era una Catedral lo que
tenía en sus manos.
Por parte de los Enlaces, los Doctores no salían del asombro de cómo asuntos de honor, quedaban
por el suelo en un simple pacto de intereses personales, sin importar los muertos que dieron sus vidas
por ellos, ni amistades, ningún valor moral y ético por sus rangos, en determinado momento les dio
asco pero era demasiado tarde para echarse atrás, se sintieron sucios y traicionados, altos doctores,
terratenientes con apellidos de renombre, siendo utilizados por dos personas inferiores e incultos, para
ellos que se consideraban hombres de alto intelecto habían caídos tan fácilmente, para ser
manipulados por un Militar imbécil y una India patas rajadas, dos Hijos de P…
En cuanto los militares se marcharon, doña Domitila Maria, daría inició su trabajo con
aquellas pobres almas desamparadas por una mala pasada del destino, situación que ella entendió con
solo verlos, solamente les faltaba llorar como dos criaturas, con el corazón a reventar como una persona
enterrada viva tratando de salir de aquella caja, más duras que cualquier metal o un chanco colgado de
las patas para ser sacrificado, no se hallaban explicación de cómo pudieron caer tan bajo que hubieran
preferido barres todas las calles de la ciudad o usar batas de mujer a la vista del populacho y sus colegas
y amigos, por un mes. Al despedirse de los visitantes, todos acongojados se retiraron a la terraza y don
Roberto le dijo a don Miguel.
- Que honor y que ocho cuarto fuimos mierdas, como caímos tan bajo de ensuciar nuestro
honorabilidad y el de la familia en una traición cochina, sucia, baja, como si nos hubiera jugado la
Segua, que miserables fuimos, ni pistolas nos pusieron.
Hablaban sin volverse a ver, don Miguel le contesto.
- Eso es babosada, lo hecho nada lo menea, ni como quejarnos, lo que pienso es como puta
vamos a salir de esto, hay que ponerse a pensar con serenidad, porque si a uno de estos imbéciles se le
ocurre abrir la boca o traicionar uno al otro esto sale a luz y nosotros somos los cómplices, como voz
decís, los mierdas.
- Si la mujer me Cachimbea estoy bien vergueado, mi Padre que tanto cuido su apellido y yo
el mas adelantado de sus hijos en los estudios, el único en quien podía depositar sus fortuna y su
nombre, lo agarre y lo embadurné en el fondo de un escusado y me lo puse de corbata, para terminar
de revolcarlo en la calle delante de todo Granada y León, mi pobre mujer, cada vez que nos peleamos
le digo barbaridades, que es una ignorante, que mi prestigio profesional y empresarial fue la salvación
de su familia y que su apellido viene de ‘’Barriada’’.
En ese momento doña Domitila María se acerco a ellos, tomo asiento y con mucho tacto por
tener prevista esa situación les dijo.
112 | P á g i n a
 - Amigos yo no soy una persona insensible y se claramente lo que está pasando por sus mentes,
yo quiero que sepan que de este negoció, los beneficiados serán muchas familias pobres, el dinero que
vamos a percibir de los Liberales, los utilizaremos para ayudar a los pobres, en definitiva es de ellos, por
mi parte no tengo ni el mínimo interés en el ya que yo obtuve lo que invertí y lo triplique en ganancias
durante estos años.
- Domitila María no se trata de dinero, es un asunto de honor, honradez, uno puede jugar con sus
cosas, las ajenas son sagradas, el apellido no me pertenece y considero honestamente, que esta
deshonra la cargare el resto de mi vida.
Dijo don Miguel.
- No se me ponga así por favor, si yo supiera que existe algún mínimo riesgo, tengan la plena
seguridad que no los monto en este barco, primero que soy mujer y nosotras tenemos mejor olfato que
los hombres para este tipo de asunto, somos frías y segundo que yo he demostrado en mi vida que
tengo precisión en mis cálculos.
- Nosotros lo sabemos, supongamos que la desconfianza no es por usted, si los Liberales deciden
montarle una jugada, ‘’quienes son los chanchos de la fiesta’’.
Hablo nuevamente don Miguel a lo que doña Domitila María sonriendo le respondió.
- La jugada ellos la tienen lista, pero el General la vició, ustedes creen que le comunico a Zelaya de
que hay testigos en esta negociación o que le interese su apellido que la fidelidad a su General, con
solo el hecho de que le haya ocultado un elemento tan importante a su jefe, perdió. Piénsenlo solo voy
a llamar a la Marta Joyilla.
Se puso de pie y sin salir de vista llamo a Marta joyilla para pedirle que le mandara refrescos y
bocadillos. Se volvió a sentar y continuó.
- desde que el aceptó que ustedes fueran testigos y que estarían bajo mi custodia, el se mato solo y
le hecho a perder al Presidente Zelaya la jugada que piensan montarme, tengo tiempo para
obstaculizar cualquier cambió de planes por parte de ellos. Esos dos Coroneles ni cuenta se dieron de
que estábamos hablando y como ustedes tampoco hablaron ellos creerán, que también quedaron en el
aire, que informe podrán rendirle al General Zelaya si el se los pide.
El aspecto de los Doctores poco a poco fue tomando color y confianza al grado que dieron
opiniones favorables del sabor del refresco y los bocadillos, salieron uno que otro chiste, en una de esas
para terminar y disponerse a llegar a su casa tranquilamente don Miguel dijo
- Domitila María creo poder hablar en nombre de los dos, cuando le dije, supongamos que no
desconfiemos de usted, me refería a que nosotros teníamos que pensar muy bien cual iba a ser nuestra
posición ante tal acto de deshonra, yo por mi parte me siento mas tranquilo con lo que hemos hablado
y espero que esta no sea la primera vez que fallen sus cálculos, pero queremos pedirle que por favor,
nos saque de esto lo mas antes posible.
- Mis amigos no saben cuánto estoy endeuda con ustedes y con sus esposas, ustedes están fuera
de esto desde que fue concertada esta cita.
Aquellos hombres sintieron como si volvieran a nacer, doña Domitila María se acordó rápidamente
del alivio que sintió Rosita Alemán cuando el ganadero Turca de Oro se la saco y dijo que había sido
como si le quitaran un barco de encima,
- Recuerden que yo tengo gente metida en este asunto y no saldré hasta que ellos estén seguros,
la garantía para ellos la tendrán es tener pleno dominio de cómo se arreglo su salida y para eso tendrán
que continuar y ser mis enlaces, ahora, con las ganancias que percibirá el general Juan Bodan, hará en
poco tiempo que no recuerde si ustedes existen o algún día les llamo Enlaces, no se preocupen por
nada en absoluto, esta gente que ustedes ven aquí, primero les sacan los ojos y no dicen que ustedes
estuvieron aquí con esos militares.
- Gracias, creo que ahora si quedamos aliviados.
Dijeron los dos al mismo tiempo, ella continúo.
- hay dos cositas mas, como les dije yo pienso ocupar ese dinero para ayudar a gente necesitada, si
desean participar hay suficiente tiempo para pensarlo, voy a esperar que caiga el Gobierno Liberal para
hacerlo, don Carlos Pasos no sabe que ustedes me han estado ayudando en este asunto, pero si se da
cuenta por mí que estoy negociando con los Liberales, el me va a vender algunas haciendas para que
yo organice un grupo de personas acaudaladas y hagan el donativo, con la condición de que doña
Francisca estará al frente de ese grupo.
113 | P á g i n a
 - Claro que si podemos pero como usted dice hay tiempo aun, no hay que ser triunfalista.
Se despidieron con cordialidad y doña Domitila María les prometió que en cuanto hiciera
empanadas y pudines les enviaría como de costumbre.
Capitulo XXVI
Al retirarse doña Domitila Maria, doña Francisca subió a toda prisa e inmediatamente le contó a
don Carlos, el altercado de Carlos Joaquín con ella y sus temores, principalmente su amenazas contra
sus hijos y la noticia que le trasmitió, de lo sucedido con el hombre de Carlos Joaquín, don Carlos
agacho la cara y se estuvo un rato, todo apesarado, Hasta que por fin levanto la cara y doña Francisca
miro que la tenia húmedas de lagrimas, entonces el le dijo.
- Yo sabía que algo así iba a suceder, tarde o temprano, estoy completamente seguro que Domitila
Maria, no ha actuado por consideración para con nosotros, tal vez mejor le hubiera dejado las manos
sueltas a ella y así hubiera descartado de raíz el peligro que representa Carlos Joaquín. Recordas lo
último que me dijo, tenía razón y yo como mierda también eche a la suerte del destino a mi familia. Por
ahora no se van a mover de la casa y de hacerlo lo harán a otro lado y no donde Domitila Maria,
porque ni en ese lugar estarían seguros…
Ya con esas palabras doña Francisca, comprendió de que no era doña Domitila Maria la que los
ponía en peligro a ellos, si no su propio esposo y padre.
… No quiero que lleven una vida de fugitivos y bajo zozobra, me va a doler, pero si mi hijo sangre
quiere, la voy hacer correr a sus pies. En primer lugar, decile a la Negra que mande a subir a su esposo…
La Negra era una mujer de muy buen alto y hermosa, de cara fina, era morena del Pacifico, nacida
en Granada y había vivido en la Costa Atlántica por muchos años en donde aprendió el Ingles y uno
que otro dialecto de la región y era mujer de Ismael López, que era el capataz de construcción de don
Carlos.
… En segundo lugar quiero que acondicionen tres habitaciones en este piso en donde se alojaran
Ángela Maria, Alberto Manuel y Valeria, estas habitaciones áselas con la Negra y cualquier ayuda
entenderte con Ismael o ella que le diga lo que necesitara, no quiero comentarios, ni habladurías por
los rincones de la casa, por ultimo quiero que envíes por el señor obispo, con urgencia, pero de no
poder acudir de inmediato, que le digan que es urgente para mi verlo pronto, no perdas tiempo en eso,
después te explico.
Doña Francisca se obligo rápidamente de lo encomendado por don Carlos, en cuanto subió
Ismael López, don Carlos le dio las instrucciones del acondicionamiento de las tres habitaciones
también que colocara una persona fuerte en el pie de la escalera del segundo piso, con la orden de que
no deje subir a nadie, ni a su propio hijo, Carlos Joaquín y en caso de insistir con violencia, golpearlo si
es necesario y le dio la misma instrucción que a doña Francisca, de ser discreto, él y su mujer y el
personal que pongas a trabajar, Ismael López se retiro a cumplir las órdenes y desde el primer momento
puso a un custodio de la escalera.
Doña Francisca y la Negra subieron a las habitaciones con Ángela Maria y Valeria, para arreglar
sus nuevas habitaciones, de un momento a otro esa casa se puso en completo movimiento, el resto del
personal de servicio, extrañados solo observaban y preguntaban a los involucrados en los trabajos, que
sucedía y solo recibían como repuesta lo siguiente.
- Parecen pendejos, ya no saben que así son los ricos, A ellos no les gusta ver a un Indio
desgraciado acomodarse, como si estarnos jodiendo les produce cosquilleo en la barriga, por gusto
fregarnos hasta por pasar el tiempo.
Ya como contagiada por el estilo de doña Domitila Maria, de fijarse en todo para después
recordarlas a su manera, doña Francisca recordaba cuando la Negra le contó, como había conocido a
Ismael, se sonrió viéndola trabajar, cuando en eso la interrumpió Valeria, reclamándole que se
guardaba los cuentos buenos solo para ella, insistiéndole que le contara sobre lo que se estaba riendo.
- Metámonos en donde va a ser tu habitación.
Ellas caminaron en dirección a la habitación y le dejo indicado a la Negra de que saliera primero
del cuarto de Ángela Maria y que le subieran todas sus cosas, entraron a una habitación.
- No es nada, lo que sucede es de que mientras miraba a la Negra trabajar, me acorde de cómo
conoció a su hombre Ismael.
- Esta bonito el asunto, haber contame como fue esa historia de amor.

114 | P á g i n a
 Diciéndolo en tono burlesco.
- Ella es del lado de Posintepe…
Valeria hizo un gesto de no saber ni que era, ni donde quedaba.
… Es un Cerrito que queda en las faldas del Volcán, es muy bonito el lugar, vamos a ir alguna vez
con Domitila Maria, que tiene una casa Playera en ese lugar, esta mujer vivía sola con su Mamá y un
hermano, que no lo volvió a ver desde que se fue para León a buscar fortuna, resulta que bajaban
diario a la ciudad y se da la casualidad de que Ismael les trabajaba a los patrones de su Mamá, el
laboraba con un señor albañil llamado Eugenio Maltez, que vivió muy cerca de donde la Domitila
Maria, ya murió el, fue el constructor de los balcones de la casa de la familia Pellas, esa es una familia
que ahora vive en Managua, aun que tienen varias casa en Granada, dice nuestro tío abuelo Roberto
que esa es una de las familias más adineradas del País e igualmente de las pocas que no se meten en
asuntos políticos…
Doña Francisca por precaución volvió a revisar que la puerta del cuarto estuviera bien serrada.
… Ese señor Maltez era artista haciendo balcones con todo y sus decorados, los capiteles y
cualquier tipo de construcciones coloniales de la ciudad en fin era un maestro completo, Ismael era su
aprendiz-ayudante, con el es que aprendió, así resulta que la Negra quisiera o no diario lo tenía que ver
diario, a ella no le interesaba al inicio e incluso cuando el trataba de llegar a su casa en ese Cerrito, la
malvada esperaba que estuviera a medio camino para echarle los perros y aquel pobre jodido bajaba a
todo mierda cuesta abajo y la maldita se quedaba riendo.
Con el tiempo su Mamá y ella se tuvieron que trasladar a la ciudad, entonces trabajaban en la
parte trasera de la Iglesia de San Francisco, en una casa de aceras altas de la familia Prego, el baboso de
Ismael, pasaba horas esperando ver por lo menos a la Negra, pero esta jodida lo trataba igual, se fijaba
de que no hubieran otras personas, le habría las puertas a los perros y lo seguían al pobre diablo.
- Si no me lo contaras no lo creería…
Dijo Valeria, interrumpiendo el cuento y agrego.
…Que enamorador y pendejo era ese Ismael.
- Si, pero dicen que la Negra es sus años mozos se gastaba un buen culo, era una morena guapa y
si te fijas bien todavía tiene sus rasgos…
Se sonrieron.
… No era baboso, en un atardecer, ya oscureciendo, se asomo y lo miro que estaba en la esquina,
la calle estaba lóbrega, cuando en eso pasaron dos hombres altos como el y musculosos como
cargadores de sacos y uno le dijo al otro que lo cachimbiaran, ella se asusto al ver que esos dos
jodidotes lo iban a matar, pero resulta, que el tal Ismael, uno por uno los fue cachimbiandolos, los dos
hambrones se fueron bien vergueados…
Valeria se mostraba sorprendida.
… Ismael todo cansado y revolcado, se acerco al muro de San Francisco y se saco una coyunda
para orinar, que a la Negra la dejo impresionada…
Valeria se reía de buena gana imaginándose a la Negra viendo aquella verga.
… Dice ella que tardo como quince minutos achicando la vejiga, aquel sable que casi rozaba el
suelo y era un chorro de orín que se escuchaba como si estuviera abriendo un hoyo en el suelo.
Se reían las dos.
… Y eso es babosada, realmente solo miraba la chochada un poco mas de perfil y sombra, su
mayor susto fue cuando el tal Ismael se la agarra con las dos manos y se la comienza a sacudir, casi se
desmaya del susto de ver aquella zangoloteada que le pego.
Se lanzaron a la cama en una sola carcajada.
- Y que hizo entonces la Negra.
Pregunto Valeria en risas.
- Y que va a hacer niña…
Igual que la otra riéndose.
… Vos pareces babosa, no perdió tiempo y se metió con él, ya van once cipotes los que le va
sacando el Hijo de P… de Ismael.
Se rieron hasta saciarse, en eso alguien golpeo la puerta, y cuando Valeria abrió la puerta, estaban
la Negra e Ismael y le decía.
- Pareces pendeja, peores cosas me has aguantado.
115 | P á g i n a
 Aquellas mujeres explotaron en risa y salieron corriendo buscando refugio en el cuarto de Ángela
Maria.
- Esta gente jodida ya no se entiende…
Dijo inocentemente Ismael.
… En un momento están afligidas y en otro están como locas riéndose de quien sabe que
babosada o de algún mierda como yo.
Al atardecer las tres habitaciones ya estaban listas y los corredores con mubles y un comedor para
ocho personas, al informarle Ismael que los trabajos habían concluido, el notaba unas miradas todas
raras en doña Francisca y Valeria, acompañada de una sonrisita reprimida, que a el le incomodaba,
creyendo que andaba algo en la ropa que se miraba mal y disimuladamente se registraba de que no
anduviera roto el pantalón o que anduviera la portañuela abierta, don Carlos le dijo
- Si Carlos Joaquín, quisiera subir, lo acompañas y no te retires sin órdenes mías, instruye al
personal de la llegada del obispo y que lo hagan pasar de inmediato.
Ismael respetuosamente se despidió de él y las tres damas que se encontraban con don Carlos,
doña Francisca, Ángela Maria y Valeria, se marcho casi corriendo por la presión de aquellas miradas
sonrientes de esas dos malditas mujeres, en su mente se dijo.
- Hijas de la Gran P… mujeres, que se rían de su Madre.
Al salir de la casa con su respiración agitada por la advertencia de doña Domitila María, Carlos
Joaquín se dirigió directo a la casa de Raúl Ocón, quien vivía frente a la Iglesia de San Francisco, desde
que dio la vuelta a la esquina de su casa a dos cuadras de donde vivía, miro un gran tumulto de gente
en la esquina, en realidad estaba lleno de curiosos, había gente en la acera alta, en la calle y en el atrio
de la Iglesia, al preguntar lo sucedido, alguien le contesto.
- Párese que hubo un triple crimen, dicen que en la acera alta hay tres muertos desnudos…
A Carlos Joaquín, se le vino una gran flojera en el cuerpo y las piernas, que tuvo que apoyarse en
la persona que le respondió y el color de su cara era de un pálido azulado, de muerte, el desconocido
pidió ayuda.
… Ayúdenme que este hombre párese que va acompañar a los tres muertos…
Entre varios lo tomaron y lo colocaron en el piso de la acera opuesta.
…Yo ando sin comer y cargando a un rico que se está desmayando le dije que habían tres muertos
desnudos en la acera. Mejor me voy antes de que digan que yo lo mate para robarle a este Hijo de P…
- Tal vez es familiar, uno de los muertos y la muerta son ricos como este jodido…
Dijo otra persona que le acomodaba la cabeza en el suelo, Carlos Joaquín solo escuchaba, no
tenía fuerzas para menearse.
…Y que tal si hubiera visto a la ahorcada.
Carlos Joaquín apretó los parpados y se le comenzaron a salir las lágrimas.
La muerta era una mujer alta, recia, de piel blanca y muy hermosa, aun así con todo sus atributos
femeninos era despreciada, por la alta sociedad y la pobretería, era menos que nada para la gente que
la conocía, igual a su marido Raúl Ocón, el hombre de Carlos Joaquín.
Este hombre era comerciante de los fuertes de Granada y tenía buenas propiedades en
Malacatoya y en la ciudad varias casa céntricas que las arrendaba, ellos tenían dos hijas seguidas en
edad de 14 y 15 años cuando les sucedió la mayor desgracia en sus vidas provocadas, por su Padre y
amañadas por la Madre.
El repudio hacia esta mujer radicaba en que encontró a su marido violando a su hija mayor y al
confesar la joven, que no era la primera vez y que se lo hacía desde los trece años, ella la acuso de
querer quitarle al hombre y la hecho a la calle, la joven desamparada tuvo que emigrar a Managua,
nuca se supo de ella, se rumoro que por el porte similar al de su madre, termino en uno de los burdeles
de la Capital.
Paso un años y la historia se repitió, exactamente igual a la pasada, con las diferencias que la mujer
dijo que su hija se había metido con su marido para desquitarse, por lo sucedido a su hermana, la
corrió, esta joven fue encontrada en el camino de las diligencias violada y asesinada, la sociedad entera
le achaco este crimen al degenerado Padre violador.
El caso de ese día y el ahorcamiento, es que la mujer lo encontró en la cama con otro hombre,
siendo penetrado como cochón, ella al ver el cuadro los asesino a los dos con un revolver que había en

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la casa, con el ruido y la gente golpeando la puerta esta se desnudo se corto la piel múltiples veces con
una filosa navaja de barbear y se ahorco.
Ese fue el cuadro que encontraron las autoridades militares a la hora de entrar por la parte trasera
de la casa, eso descarto la presencia de una cuarta persona, ya que la familia del patio trasero estuvo en
el lugar desde que sonó el primer disparo de varios.
La policía saco los cuerpos a la acera y la gente ya aglomerada miraban con asombro los cuerpos
en especial el de la mujer, el hombre que estaba penetrando a Ocón, resulto ser el capataz del
hacendado Montenegro, el mismo cuando fue asesinado por su cuñado, Leonel Duarte.
Carlos Joaquín estuvo así casi una hora, hasta que alguien dijo que era el hijo de don Carlos Pasos,
el escucho y se incorporo rápidamente, camino en dirección a la calle Atravesada, a donde Gerardo
Mayorga Chamorro, otro homosexual que vivía sobre la extensión de la calle El Palenque, buscando la
calle Corral.
Su amiga Gerardo, como ellos acostumbraban tratarse, estaba al tanto de todos los detalles del
asunto, en cuanto llego Carlos Joaquín, Mayorga Chamorro, entre tragos le contó todo con lujos de
detalles.
Lloraba inconsolablemente Carlos Joaquín, repitiendo que el maldito lo traicionaba con ese sucio
capataz y el creyendo que era la única que tocaba, le juraba que a su mujer ni la volvía a ver y lo que
me duele le decía a Mayorga Chamorro.
- Yo creía que era un verdadero macho el que me penetraba, me acariciaba y hasta jugábamos a
ser violada por él, como a esas malditas de sus hijas, yo me escondía, para masturbarme y ver cuando se
las metía y después me golpeaba, yo terminaba llorándole de tantos placeres.
Esa última parte la repetía, se emborracho y se quedo dormido por el resto del día.
- Ay Dios mío, qué hago con esta alma destrozada por la viudez prematura.
Decía Mayorga Chamorro.
En la vela de Raúl Ocón, aun borracho en compañía de Mayorga, el gritaba a toda puerta los
amoríos con Ocón y se acercaba a reclamarle al muerto por su traición amorosa, habiendo entre ellos
un amor tan lindo y puro, no había manera de controlarlo.
El Capitán Flores siguiendo las instrucciones de doña Domitila María esperaba la primer
oportunidad para llevarse secuestrado a Carlos Joaquín y alejarlo de la casa de los Pasos Sacaza por
varios días, entonces se le adelanto Mayorga solicitando al jefe militar le prestara un par de soldados,
para llevarlo a su casa y así deshacerse de él, inmediatamente puso a disposición dos soldados, aun así
fue imposible llevarlo, al darse cuenta el militar, se dispuso llevarlo a la fuerza el mismo, de esa forma ya
era imposible no poder.
Llegaron a la casa y al entrar el quiso subir a la habitación de su padre, el cual López lo impidió
aduciendo que se encontraba con el señor obispo y obedecía órdenes, el paso de manera rápida a su
habitación y al ir saliendo los soldados con su jefe se escucho un disparo, los militares retrocedieron
desenfundando sus armas, escucharon pasos de que alguien subía y encontró al pie de la escalera el
cuerpo de López con un balazo en la cabeza, trato de subir rápidamente pera ya casi al llegar, entre
gritos de doña Francisca y voces de el señor obispo y don Carlos, escucho una voz, que le indicaba.
- Si da un paso los mato a los dos.
Refiriéndose a don Carlos y el señor obispo.
Entre voces que no se le entendían y su borrachera fuera de control, se le fue un tiro y mato a don
Carlos, intento con un reflejo desorbitado dispararle al jefe pero este ya estaba listo y lo mato.
Esa noche fue de duelo total en la ciudad y en el País entero, doña Domitila Maria no asistió a la
vela ni los funerales, pero envió a sus amigas Rosita Alemán y Marta Joyilla, enviándole una carta de
condolencia, en la que se leía.
Estimada amiga Mía.
Me embarga el dolor de tan sentida perdida, no pretendo ocultar las profundas diferencias que me separaban de
don Carlos, aun que ya muy tarde fuéramos comprendiéndonos más, le ruego sus disculpas en no acompañarla en tan
duro momento, pero en honor a la verdad, al igual que Usted, padezco del mal de con solo ver o escuchar a una persona,
reconozco su hipocresía y alrededor suyo sobraran los Hipócritas y Asesinos.
Le ruego su comprensión, quien la quiere a usted y a su familia.
Con mucho cariño
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 DOMITILA MARÍA.
En esa nota se le salió a doña Domitila María las consecuencias que deja el sabor de la sangre, la
adopción o influencia que iban cubriéndola y desplazando su escuela sin darse cuenta, los estilos
aristocráticos que repudiaba, para juzgar deliberadamente en contra de otras personas, los defectos
propios de ella no lo ponía a juicio por considerarlos justificados, porque para ellos, incluyéndola, el
resto de personas son ladrones, asesinos, violadores, cochones, ladrones, imbéciles e ignorantes, al
contrario de sus manos y sus lenguas que las mantienen limpias, características propias de
Conservadores de Crema y Nata. Al poco tiempo de haberse retirado sus amigas a la vela de don Carlos
portando la nota, que le mandaba a doña Francisca se arrepintió de haberla escrito y le dio vergüenza,
a tal grado por varios día después del entierro no le daba la vista directamente a ella, fue tanto el dolor
que sintió en el alma y el cuerpo y de corazón le pidió disculpas, a lo que doña Francisca le agradeció su
gesto y lo bueno que era eso para la amistad que existe entre ellas.
El Gobierno decreto, tres días de duelo Nacional, por la pérdida tan valiosa de uno de sus mejores
hijos, todo el Partido Conservador, se puso de luto, de todas las representaciones diplomáticas se
recibieron mensajes de condolencias, por parte de sus respectivos Gobiernos, la oposición en muestra
de respeto se quedo completamente en silencio, dejando así que sus enemigos, rindieran los honores
correspondientes a uno de sus Héroes, las estructuras principales del Estado se pusieron en función de
las honras Fúnebres en cuanto recibieron la noticia, para los militares no era hora para esperar ordenes,
si no para actuar, enviando inmediatamente su Guardia de honor y ordenar prepara la Banda
Filarmónica.
En todas las casas de los Conservadores hipócritamente se sintió la muerte del Héroe, con sus
respectivos comentarios de que fue el que negocio el triunfo de los Liberales y que por su palabra, esos
vándalos y delincuentes, todavía existían, por eso no habría que tratarlo tan así, con tantos honores, ese
papel lo hubiera realizado otro y de mejor forma.
El señor obispo, hombre de sangre fría, a como suelen ser esos hombres, que tienen aseguradas
sus actuaciones por ser intocables, de esas personas que están a favor del poder terrenal. Siempre se
recordara que cuando Gobernaban los Liberales en un sermón dijo.
- Con la Historia hay que ser honesto, de ella hay mucho que aprender y aun que duela, hay que
quedar claros de que el General Ponciano Corral fue un Traidor ante Dios y los Hombres, del Señor por
jurar ante las Sagradas Escrituras proteger el Gobierno Provisional de entonces y ante los hombres, por
incitar a otras Naciones Extranjeras a continuar con la Guerra.
Este sermón lo pronuncio durante una Misa de acción de Gracia a Benéfico para las labores de la
Iglesia Católica a favor de los pobres en Granada, con un jugoso financiamiento del Gobierno Liberal y
claro ante una concurrencia Liberal y la presencia de altos funcionarios del Gobierno.
Y estando en el poder los Conservadores, en otra Misa de acción de Gracia, similar a la celebrada
para los Liberales y con los mismos beneficios, se le olvido el sermón pronunciada en esa ocasión o lo
hizo a propósito, pero dijo.
- La Historia no miente, por que recoge los verdaderos hechos en donde el hombre participa
directamente, es por eso que no hay que juzgar precipitadamente las acciones de los humanos, sin
esperar el alcance que una acción tiene, cuánta sangre se tuvo que derramar para entender las
decisiones del General Ponciano Corral, de llamar a nuestros hermanos Centroamericanos, para
expulsar a los invasores, hay que estar claros que.
‘’Una traición contra traidores, es un acto de heroísmo’’.
La concurrencia Conservadora aplaudió la corrección hecha públicamente por el señor obispo.
Cuando le contaron sobre el Sermón a doña Domitila María dijo.
- No se juzga la autoridad de un obispo, se juzga al que le da uso atrevidamente ante Dios,
presentarse frente a los pobres en nombre de nuestro Señor y desampararlo ante los ricos a sabiendas
de todo lo que su clase y su inmoralidad representan, hay que juzga al hombre frió y calculador, que se
a cuerpea con esa distinción, la Iglesia la hacen la gente que ama y cree en su creador y nuestro Señor
Jesucristo, con Fe y fortaleza espiritual y la corrompen quienes endiosan por encima de Dios lo material.
El fue testigo ocular del alcance de sus ceguera espiritual y las coyundas negras que envió a las
distintas parroquial a lanzar leña al fuego, que hasta su vida estuvo en peligro, el escucho la confesión
de aquel corazón destrozado por la muerte de su amado, sintió el horror que igualmente sintieron

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aquellos niños y niñas quemadas en el incendio, a manos de delincuentes instigados por el mismo y sus
secuaces aristócratas pervertidos, con la diferencia, que ellos murieron terriblemente y el vivirá
terriblemente ese castigo.
En Granada, claro que no se vivieron en estas circunstancias los espantos del pasado, para nadie
era de interés aquellos muertos, que no ponían en peligro a nadie, no se sentía implicación en esos
asuntos, los muertos no eran de ellos, cada quien tendría que resolver sus problemas a como mejor le
pareciera, para la alta sociedad Granadina, no tenia mayor significado, un Héroe y un Cochón menos,
sin tomar conciencia que a partir de la presencia extranjera, se han proliferado los crímenes pasionales,
hombres, mujeres y hasta niñas, asesinadas y violadas impunemente. La bandera de la Moralidad, se
convirtió rápidamente, en una salida justificada para cualquier criminal, mientras algunos Cronistas le
llamaban la ley de la Selva, como si fueran la gente humilde y pueblo en general el que atrajo
nuevamente a los invasores, en la realidad era ley de los poderosos y cazadores puestos por el
Gobierno y la jerarquía Católica, en contra de los pobres, sin calcular siquiera que manoseaban una
bomba de escape, de los altos niveles de inmoralidad, que durante décadas, se habían reprimido ellos y
ante sus instintos criminales, esas eran los resultados, en donde al mejor estilo de Domitila Maria, el
Gobierno por primera vez tenia ante la ciudadanía las manos limpias y respetuoso del principió
Constitucional de un Estado Laico..
Capitulo XXVII
A pesar que un mayor numeró de gente se había retirado en dirección del Cementerio, aquel
ambiente seguía igual, esto impresiono mucho a Marta Joyilla al regresar a la Capitanía del muelle, con
las diligencias ya realizadas. Ella con Rosita Alemán se pusieron de acuerdo para las honras Fúnebres de
doña Domitila Maria, principalmente que la Carroza se aparcaría frente a la casa de la difunta en donde
se le rezarían tres Rosarios cantados. En función de esos preparativos Rosita Alemán se traslado a la
calle El Desenredo a organizarla, el paso del Coche Fúnebre y los rezos correspondientes era la
prioridad, para la entrega de su cuerpo a la tierra. Con quince mujeres dirigirían el rezo Josefa –chepa-
Rodríguez, las acompañarían un Coro preparados en la Iglesia de Guadalupe, este estaba compuesto
por los infantes que por las tardes recibían clases de catecismo y los cantos religiosos era parte de sus
aprendizajes.
La limpieza total de la calle, regarla con agua por el calor que dejaron las lluvias de los días
anteriores, colocación de flores en las puertas y que todas las casa de su propiedad estuvieran abiertas y
limpias. De la calle El Desenredo saldrían por la calle El Enredo, siguiendo la calle La Libertad hasta la
esquina norte de la calle El Palenque, tomar luego en dirección a salir a la calle Real Jalteva, girar hasta
La Pólvora en donde recibiría una parada militar y virar por la calle al Cementerio.
Al pasar Rosita Alemán por la Iglesia de Guadalupe le aviso al Padre Valentín sobre la salida
del Cortejo Fúnebre y de que todo estaba listo en el Cementerio, se llevo el Coro de niños y niñas
acompañados de tres Hermanas Religiosas, los infantes vestían Sotanas de color blanca y corbatín
negro, trajes que la difunta les había dado hacer en distintos colores, para diferentes ocasiones.
Nuevamente toda esa gente de las calles de El Desenredo y El Enredo se puso en función de preparar
su último adiós a doña Domitila Maria. Las mujeres barrían la calle mientras los hombres se encargaban
de acarrear agua de los pozos y regarlas al estar barridas, las viejas se alistaban con sus mejores trajes
de negro y las Putas adornaban con flores las puertas o al frente de la cuartería. Estos preparativos eran
prácticamente en la cabecera de entrada a las calles de la ciudad, excluyendo la calle La Calzada,
muchas puertas de casa Burguesas en la ciudad se lucieron con flores y rosas como un gesto de
despedida en especial la casa de la Familia Pasos Sacaza.
En cuanto la noticia de la muerte de doña Domitila Maria llego, doña Francisca decreto un luto
riguroso, como si estuviera velando a la difunta, el personal tendría que vestir uniformes de colores
celestes y cuellos blancos con un lazo negro en el pecho. Este gesto les gusto mucho a las amigas de
doña Domitila Maria y optaron para el día del entierro por ordenar igualmente el uso del uniforme de
color bajo, en unas casas eran de color blanco o amarillo e igualmente el lazo negro en el pecho y los
hombres lo usaban en el brazo derecho, acción que los empleados la portaron de buenas ganas. En
casa de los Pasos se presentaron de sorpresa los Arguello -Pasos y Pasos - Lunas, de esa misma manera
llegaban amistades de otros Departamentos para compartir con ellos este nuevo episodio que los
enlutaba por la cercanía de doña Domitila María con esa familia. Al igual que don Joaquín permitió que

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en el mismo cementerio Provisional en que fue enterrada su mujer doña Mercedes Arellano de Pasos
sembraran a la Mamá de doña Domitila María.
Para doña Francisca fue una jornada tan agotadora como la pasada cuando murió don Carlos,
con la diferencia en que para entonces la edad ya la sentía pesada y por prolongados momentos se
refugiaba en su habitación para llorar a su amiga. Fue en uno de esos momentos que se le vino el
recuerdo de la última conversación que tuvo con don Carlos. Ese día de su muerte, ya por cumplidas las
disposiciones, ella regreso al cuarto, lo encontró muy decaído y le dijo que se sentara.
- Ya está todo arreglado a cómo te dije Francisca.
- Si Carlos, todo bien lo único que resta es que suban una parte de pertenencias personales de cada
quien, pero ya les dije que por ahora no los quiero ver en el primer piso.
- Estoy muy preocupado con todo esto. Te quiero confesar algo que hasta el día de hoy me di
cuenta y que siempre lo tuve frente a mí. Yo siempre pensé que las preocupaciones de mi Padre con
relación a dejarle un mejor futuro a la nieta de Domitila eran chocheras de viejo, el siempre me insistía
que la abuela de Domitila Maria había sido una confidente de mi Madre y que ella lo guardo tan bien,
hasta que murió el se percato de eso y que mi Mamá la había preparado para cuando ella muriera,
como si presintiera de que ella moriría primero y las situaciones fueron tan bien calculadas que sin la
ayuda de Domitila las cosas para el hubieran sido difíciles de lo que fueron al morir ella.
- Pero a qué viene esto Carlos, estoy segura de que todo va a regresar a la normalidad, entre todos
nos vamos a ayudar y vas a ver que hasta el mismo Carlos Joaquín poco a poco cambiara su
agresividad para con sus hermanos y hermanas.
- Que no pudiera dar yo porque fuera así, no nos engañemos eso nunca va a suceder, mi entristece
que mis hijos no me vean como un Padre, ellos me miran como un Ogro, igual o peor que como
Fernando miraba a mi Padre. Todo lo que logre en esta vida sirvió para alejar a mis propios hijos, nunca
entendí cuando mi padre me dijo…
‘’Debes de tener mucho cuidado con la educación de tus hijos ser más constantes con ellos, no te
imaginas lo débil y frágil que es nuestra educación y formación’’.
… Mi Padre tenía razón, yo nunca debí haberme separado de ellos, ese fue el peor error que cometí,
por soñar en que mis dos hijos estudiaran en la Universidad de Salamanca y no tuvieran que pasar
guerras.
Aun en ese momento don Carlos Pasos no lograba entender en absoluto la realidad de lo que en
su vida tuvo frente, requería de algo fuerte para comprender, por mucho que le buscara solución a su
problema, solamente se trataba en salir del mundo ficticio que se creo, nunca existió liderazgo en el, era
hábil y astuto el ignorante de Rodimiro su capataz, tuvo fortaleza su difunta mujer al decirle, que si no le
dan la cara es porque algo grave ocultan y por último, que la mayor preocupación de don Joaquín
Pasos, la comenzó a tener cuando le demostró su incapacidad y cobardía al guardarse el consejo de
golpear con fuerza a Walker, dándose a conocer ante el lo que era realmente débil y cobarde como lo
fue el propio don Joaquín, durante aquella recepción, en donde al final prefirió ensangrentarse las
manos y atenerse a una salida traicionera a sus socios, amigos y al populacho
Doña Francisca recordaba con el pecho oprimido.
- Dejemos esta conversación para cuando estés calmado, no creo que te este haciendo nada bien y
no me gusta ver como tú mismo te torturas sin hacer una reflexión objetiva de lo que estamos viviendo,
te estás ocultando en un cascaron como lo hacen por naturaleza cualquier persona, pero eso no te
permitirá ver con claridad las cosas.
Le dijo doña Francisca.
- De lo que si estoy seguro es de que esto ya lo miraba venir y la pregunta que desde un inicio le
debí de haber hecho a Domitila Maria es hasta donde ella conoce a mi familia, así con su repuesta me
hubiera dado cuenta de muchas cosas que en ella nunca las vi, teniéndola tan cerca, bien hubiera
podido evitar todo este sufrimiento por el que están pasando mis seres queridos y del que no tengo
idea alguna de lo que les vendrá, ahora me da tanto miedo de que Domitila María me diga algo que le
contó su Mamita Domitila o mi hermana Ángela Maria, a la que toda una vida la considere una
mimada, enferma, resentida que se oculto en su soledad y que al venir acogió a la niñita Domitila Maria
para cubrir su frustración de no ser Madre.

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 - Carlos entender o te vas a encerrar solamente en tus ideas y caer nuevamente en el error del
pasado, ya todo quedo claro, ahora hay que ordenar todas la ideas y errores para enmendarlos, no
queda mas que seguir adelante…
Doña Francisca con lágrimas en los ojos igual como en el momento que vivió durante aquella
conversación.
…Por favor no te sigas quitando la vida con algo que no tiene retroceso, el remedio esta adelante,
te voy a decir algo que tu hermana le dijo a Domitila Maria y que al igual que vos hasta ahora lo
entiendo…
‘’No te pares por nada, ni por nadie, ni por dinero, por bienes, por amor por un hombre, se feliz y
así harás bien con los que te rodean y alcanzaras tu propia plenitud’’.
… Ese es el asunto, tener que pararse, ver o revisar algo que ya paso y te lo habían dicho, pero por
orgullo y prepotencia uno cae en la trampa de ser o sentirse superior a otras personas y actuar de la
forma más contraria, hay que seguir adelante y no pararse, mucho menos por algo que no tiene
retroceso…
Ella sentía que estaba frente a el y hasta sentía su respiración, se secaba la lagrimas, estas no
paraban de fluir de ella, respiro profundo y continuó con sus recuerdos.
… Carlos Tener que detenerte a revisar y tener que aceptar tus propios errores, es duro, pero no
tenes que pararte. Si sentís que no has hecho lo correcto, entonces debe de ser mas duro vivir con la
incertidumbre de que si es lo correcto o incorrecto lo que estás haciendo para enmendarlas, esa es la
razón de hacer un alto al camino y hasta donde Dios lo permita tratar de corregir esos errores. En ese
proceder no hay incertidumbre por que estas procediendo con seguridad y certeza, estas siendo
sincero con ti mismo y con los demás, está jugando con las cartas de la verdad. Ahora si todo sale mal
Dios sabrá que lo hiciste para bien y déjalo a su voluntad.
- Hay cosas que no son tan fáciles de olvidar. Sabias Francisca que mi hermana se vino de España
para olvidar un amor que tuvo con un escritor. Ella se entrego con plenitud y aquel hombre nunca la
quiso, el la valoró mucho y la respeto, al extremo de tener que romperle el corazón, sin temblarle la
mano le escribió…
“Yo diera cielo y tierra si estuvieran en mis manos por verte feliz, mí deseo choca en una muralla, por que tú
felicidad no están en esos lugares.
El día que el ser humano alcance tú facultad de desprenderse de todo y no ver nada, vestirá luz celestial.
Observar uno los movimientos de las personas y la naturaleza, sin escuchar absolutamente nada, ni oler sus
aromas y sin tocar sentir la pureza que hay en ellos, es para tu poesía.
Oler, saborear, tocar es para insensibles como yo que llegaremos a la conclusión, así somos e igualmente nos
miraran, tan común como lo que escribimos y engañados en ambiciones utópicas y literarias.
Eso es más doloroso y tormentoso, yo miro tu amor no lo que sos, toco tu cuerpo, labios, pechos y no te siento y me
avergüenzo de mi falsedad después de hacerte el amor, soy tu fraude.
Mi querida Ángela, con usted mire la poesía y tuve temor de cantarle a las formas sublimes de la existencia, la
pureza y la belleza de la verdad interna que no se puede tocar solo sentir.
Mi temor supero a la poesía, solo verla así como yo a usted, que triste, solo la miro y no logro entrar en su interior,
que tan bello debe de ser, la poesía se siente y solo personas como tú que se desprenden de todo y no necesitan ver nada,
las pueden sentir, oler y tocarla.
Adiós querida’’.
… Se pego un tiro en la cabeza y mi hermana siguió su vida, como si no le doliera nada por la
decisión fatal que tomo aquel hombre. Pero por dentro se murió lo que ella mas quería en la vida, la
poesía. Esto no lo estoy contando por el lamento en que estoy pasando, en la realidad no le di
importancia. Me lo contó el Conde D´Ibarra, ya sabes que era gran amigo de Fernando y se quedo
frecuentando Nicaragua y cuando viene se hospeda en la casa de Domitila María, siempre lo miro
conversando y tomando tragos con aquel cronista Avilés que da clases en el Colegio Centro América,
amigo de Domitila María y de mi hermano.
- Que crees de verdad sobre ese asunto de Ángela María. Yo le atribuyo su delicadeza a una
historia que me contaste que cuando nació nadie le daba posibilidades de vida y en realidad no
entiendo que tenga que ver con relación a nosotros. Lo único que podría relacionar es su aptitud de

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seguir su vida a como ella la llevaba y tu corregir la prepotencia para con las personas que de una u
otra forma te queremos, te digo, con la poesía nunca se divorció, siempre la sentía, Domitila María me
ha contado que ella busco la plenitud y en muchas ocasiones le noto en sus ojos un brillo especial, yo
digo me dijo que ella alcanzo la plenitud del gozo de su poesía. Para mi opinión es un asunto
meramente de sentimientos y si es de intelectos yo en eso no me meto, pero sé que en ninguna parte
del mundo una mujer sin hombre vale por sí sola, mucho menos por la poesía y las ciencias, para los
hombres es nada, ella logro mucho Domitila María me dijo.
‘’Mí niña Ángela María quiso materializar su poesía en el amor a un hombre y el fruto de esa
relación y me dijo que lo había logrado materializar con migo, sin esa tragedia no te hubiera conocido,
acariciándome la cara y sus ojos con un brillo especial, cuando ella me contó sobre su Primera
Comunión, vi en ella un gozo en su cara, eso me ilumino a mí también y me abrazo con fuerza como
muy pocas veces lo hizo, por eso creo que ella materializo su poesía’’.
- Francisca el caso para mi es saber ver las cosas a como son, se tiene se goza, lo pendes no hay
forma de recuperarlo, hablando de cosas de valor como son los sentimientos de las personas. En tu
caso te separarías de tus hijos a sabiendo de que lejos estarán mejor y no tendrán que ver para atrás o
sin el temor de algún reclamo o deuda que dejes pendiente.
En ese momento sonaron las campanas de la Iglesia de Guadalupe, anunciando que el cortejo
fúnebre salía de la casa de la difunta en dirección al Cementerio, las campanadas vibraban diferentes a
un funeral normal, el padre Valentín dio órdenes de que fuesen campanadas similares al llamado a
Misa, doña Francisca se sonrió con la ocurrencia del padre y lo bien que conocía a doña Domitila María,
que ella aseguraría que esa decisión no la consulto con Rosita Alemán, ni Marta Joyilla.
Sintió un gran placer el saber que el padre Valentín estaba a tono. Se sonrió levantándose de la
silla y se dirigía a la cama, se acostó con todo y ropa, miro al cielo rasó de la habitación y recordó el día
que por primera vez entro a la casa de doña Domitila Maria, fue cuando conocía también al padre
Valentín y se detuvo en la forma en que el miraba a la doctora Rosalía Alemán. Se volvió a sonreír y se
dijo internamente.
- Fue la primera vez que le fui infiel a Carlos, con la mente, pero es lo mismo, todo por las miradas
intrigantes que le hacía a Rosalía, esa Domitila María era terrible, fue la única que me cacho y yo que
creí ser lo discreta con mis celos inexplicables.
En la realidad fue una situación fuera de lo común, una joven nueva, hija de una Putona,
inexplicablemente educada en Europa y se dirigía a doña Domitila María con tanta confianza como si
tuviera a la misma altura, cosa que ni Marta Joyilla se atrevía hacer.
Fue algo fugas que la vista le permitió detecta aquel interés del padre, tal vez no le hubiera
importado que el mostrara un atraimiento por Valeria, joven, simpática, graciosa y con la que podía
entablar una conversación en su propia lengua, tuvo que insistir en ella.
Nunca se pudo percatar que la relación entre esa joven, doña Domitila María y un secreto de
confesión del padre Rodrigo al Padre Valentín, era de tales magnitudes que ni la propia Marta Joyilla
tuviese conocimiento y que al ser revelado provocaría el mayor de los asombros causados en la
sociedad Granadina por la difunta, la llegada de esta a su última morada no terminaría con la tierra
enlodada que la cubriría por varios días.
Cuando don Carlos recayó en cama y la enfermedad lo redujo a una silla doña Francisca gozaba
de una fortaleza sexual hirviente y no le gustaba en absoluto terminar su vida tan inútil como su
marido, al igual que cualquier mujer lo consideraba injusto tener que cargar la cruz de su esposo, las
leyes al contrario la obligaban a cumplir con su juramento de unión hasta la muerte. Estando ella a
solas ese pensamiento la torturaba y se vio obligada a recurrir con su amiga y cómplice doña Domitila
María y en una ocasión después de las conversaciones matinales con don Carlos ella le confesó.
- Domitila María quisiera hablar con usted un asunto de mujeres, puedo confiarle algo
extremadamente personal y delicado.
Doña Domitila María inmediatamente entendió que él asunto que agobiaba a su amiga tendría
que ser relacionado con su vida sexual por lo que le respondió.
- Donde y cuando usted quiera doña Francisca.
- Mire Domitila María, la vida se me está secando, tomemos asiento por favor…
La tomo de la mano y se sentaron en las sillas que estaban más cerca, doña Francisca agrego.

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 …aquí mismo podemos hablar y tenga la segurita de que nadie nos mira ni escucha, con esto le
quiero decir que estoy sola, mi hija Ángela María poco sale de su cuarto por estar leyendo los libros y
escritos de su tía, mi hijo y mi prima Valeria casi todo el tiempo se mantienen fuera de la casa y yo,
cargando la cruz de Carlos…
La situación era más difícil de lo que parecía por lo que doña Domitila María tendría que ser muy
delicada y usar un agudo tacto para socorrer a esa necesitada de hombre, sería para ella un reto mayor
que el de satisfacer las demandas masculinas, para eso tenía remedió para cualquier tipo de receta,
… Yo tengo mis deseos y fantasías, lo que encuentro es mas soledad que en Panaloya, se a fijado
usted de la ausencia en mis conversaciones de bailes, cantos y otras ocurrencias alegres, que son
necesarias para vivir, yo no soy de madera y tengo miedo.
Mientras le colocaba los dedos en la boca a doña Francisca, doña Domitila María le indicaba que
parara de hablar para ella decirle algo.
- Doña Francisca las dos somos mujeres y sabemos de lo delicado que es tomar este tema con toda
la seriedad posible, una mala interpretación es tan dañina como decirle a cualquier persona que usted
esta urgiendo de hombre, por eso yo quisiera que comencemos siéndonos sinceras y abiertas, para eso
considero que el mejor lugar que existe es mi casa…
Doña Francisca meneaba la cabeza a manera de entender y estar de acuerdo con el primer punto
que le indicaba ella, continuo.
… Le digo esto por lo que me párese que no es un tema para abordarse en casa, lo otro que le
quisiera recomendar es de que trate de alguna manera de involucrar a toda la familia en la atención a
don Carlos, eso le hará bien y usted, con eso no les está pidiendo mucho ni limitando su tiempo que ya
para nosotras es mas valioso que cualquier prenda de oro.
De esa forma doña Domitila María logro calmar un poco a doña Francisca con relación a buscarle
una solución sensata al problema. Se pusieron de acuerdo de cómo y en que momento su hija, hijo y
Valeria podrían cubrirle el tiempo que sea necesario para ausentarse de la casa y las distintas excusas
que utilizarían para que don Carlos estuviera tranquila y seguro.
Cuando doña Francisca se percato el tiempo había volado y se escuchaban las campanas de la
Iglesia de Jalteva, se incorporo y bajo a la primera planta en donde se encontraban la familia y
amistades, pidiendo disculpas se integro al grupo y saludar a las personas que habían llegado mientras
ella estuvo arriba. La conversación del hermoso circulo de la familia Pasos y las amistades eran de
velorio, el tema se centraba en la difunta, en las salas de los costados habían otras amistades y familiares
con sus propios temas.
- Continúen con la conversación que compartían yo me pongo a tono pronto.
Dijo doña Francisca. Doña Mercedes Pasos de Arguello continúo.
- Yo en lo personal no tengo mayores recursos para dar una opinión objetiva de Domitila María, mi
Papá nos hablo muy bien de ella, principalmente como siendo jovencita, pudo ella sola salir adelante y
crear un pequeño imperio, después nos fuimos dando cuenta de otras cosas increíbles, esta mujer no
aparentaba absolutamente nada y sobre lo que nos han dicho, habría que unir barias familias
adineradas del País, para aproximársele al poder económico que tenía en sus manos.
- Eso que dice Mercedes es cierto…
Dijo el doctor Arguello.
… Pero lo que me llamo la atención, fue de que cualquier chisme que hicieran sobre ella, bueno o
malo, la hacen con respeto, sin importar que el comentario que están haciendo tenga un final
sangriento, igual como si compraba una propiedad, a las mujeres de los hombres que trabajaban para
esa hacienda, las hacia socias de ella, en la actualidad si alguien hace eso lo tildan de comunista y ella lo
viene practicando desde el siglo pasado…
Los escucha miraban con agrado la opinión del doctor Arguello principalmente doña Francisca
dado que nunca había visto desde esa óptica a su amiga difunta, una mujer que le consiguió hombre a
ella y a su hija que para ese momento estaba embarazada del Conde D´Ibarra hijo. El Doctor Arguello
continúo.
… No pienso así, es que utilizaba un método muy práctico, si la peonada son socios míos ellos aran
hasta lo imposible por mejorar la producción y cuidar la propiedad, como peones asalariados les da lo
mismo estén bien o mal la situación de la hacienda.

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 Sonrieron por haber dado una cátedra de cómo se debe analizar las actuaciones de las personas
sin ofender, ni alagar aquella, que en este caso está ausente y de esa conversación no hay manera
alguna de írsela a soplar al oído. Doña Francisca con esas palabras comenzó nuevamente a recordar a
su difunto esposo, le llamo la atención de que teniéndola de frente a ella no la conociera o no tuviera
esa visión de doña Domitila María, así como ella no la había visto, nuevamente se disculpo excusándose
de tener que revisar como marchan los preparativos de un entre comida que había dado a preparar y
se retiro.
Hizo una mayor reflexión y se dijo ella misma.
- Tenía razón Carlos al decirme que siempre la tuvo frente a él y hasta ese momento se dio cuenta
de las insistencia de su Padre de darle a la nieta de Domitila un mejor futuro, como si el supiera de
antemano lo terrible que sería Domitila María y que en la preparación de ella también puso todo su
empeño su hermana Ángela María.
Recordó cuando su hija regreso con ella de una de sus haciendas en los pueblos de Carazo y de
sus brazos salió una joven faldera y doña Domitila María a los 15 días le devolvió una mujer con
carácter y personalidad propia o cuando ella le pidió ayuda para no morir seca sin hombre y fue
oportuna emparejarla con el padre Valentín a una edad en donde se alcanza el pleno gozo de una
relación sexual.
Se escucharon las descargas de la parada militar, antes de que el doctor Arguello preguntara
sobre otro asunto de la difunta, doña Francisca se reintegro al grupo.
- Que tan cierto es que en los tiempos de la revolución Liberal la participación de Domitila María
fue tan violenta que ninguno de los dos bandos se atrevió a tomar represalias contra ella.
- El que lo hubiese hecho aseguraba su derrota, los Conservadores la traicionaron asesinando a
sus amigos de infancia, para que ella lo considerara una represalia Liberal, pero no tomaron en cuenta
las cualidades de doña Domitila María y en ella lo fría y calculadora que era y el tiro les salió por la
culata…
Inició su comentario el cronista Avilés, agrego.
… Hágase una idea doctor, una joven de 25 años en 1880, planifica y ordena la ejecución de un
joven que nada tenía que ver con nadie y producto de eso se desata una matancina en Malpaisillo,
León, de Padre y Señor nuestro que puso al País en un hilito de la guerra civil.
- Yo escuche completa esa historia Doctor Avilés, lo que no me explico es el por que no hubo
repuesta de los dos bandos y de esa familia cuando ya se supo la verdad.
Pregunto el doctor Arguello. Doña Francisca se intrigo en la conversación ya que ella nunca tuvo
la curiosidad de preguntarle sobre esos asuntos y lo que conocía eran algunos aspectos que converso
con don Carlos. El cronista respondió.
- A los bandos en disputa no les interesaban los muertos y los usaron como campaña politiquera, a
la familia del joven muerto les importo mas el honor del la familia, por último el muerto e
inteligentemente no era el momento para iniciar la guerra, no estaban preparados. Yo le pregunte
sobre el asunto poco después de la caída de los Liberales y principalmente por que escoger de carnada
a un joven inocente y me comentó.
Yo también era una persona inocente y sola, Clotilde igual, pregúntese. ¿Por que nos escogieron a
nosotras?
A doña Francisca se le salieron las lágrimas.
- Discúlpeme doña Francisca.
Dijo el cronista Avilés. Secándose las lágrimas doña Francisca hizo un movimiento de mano y dijo.
- Continúe Profesor, ya paso. Fue solo una impresión, me gustan los recuerdos sobre mí amiga y de
usted no va a salir ninguna expresión grosera, ella misma se lo dijera la verdad es sagrada aun que
duela.
Doña Mercedes Pasos de Arguello se sentó a la par de su madrastra y le tomo la mano, las dos se
sonrieron. EL cronista retomo el tema y continúo con lo que doña Domitila María le comentó.
‘’Yo mande a investigar a León y ubicaron a los asesinos, lo reconfirme y desde León vine armando
la cadena de los que contrataron a los matones. No me tocaron por temor a una falla y no saber quien
o quienes estabas detrás de mí, posiblemente creyeron que los Pasos saldrían en auxilio mío, esa era mi
ventaja, lo maneje con mucho cuidado a Rosita Alemán y Chago se los dije, cuando la orden de
ejecución ya estaba dada, para ese entonces ese era el momento frágil del plan, muerto el joven lo que
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viniera, todo era ganancia, por mi parte no había ningún peligro por estar en mi territorio, así que no
había culebra que me mordiera’’.
Sonrieron, hasta doña Francisca y dijo.
- Así era Domitila María.
Con una sonrisa de orgullo acompañada de tristeza por la pérdida de su cómplice en amoríos con
el padre Valentín.
- Me gusta su estilo doctor, lo que yo me pregunto es de el por qué, en otras acciones como la de
los muertitos, que me contaron que se supo que fue ella la que las ordeno, teniendo incluso, después
de tomar el poder los Liberales nadie tomo represalias en contra de ella, yo recuerdo que cuando
venimos a Nicaragua Domitila María, visitaba esta casa y se venía a pie en compañía de una de sus
amigas, era presa fácil.
- Ah doctor, para cuando usted y su esposa la conocieron ya ella era un sello, fíjese que después de
lo sucedido en León, ella dejo de ser la joven y paso a ser Doña Domitila María, por eso a mí no me da
pena decirle aun muerta ‘’Doña’’, ella me dijo que a las aristócratas de ese tiempo no les dolieron los
muertos, ni las propiedades que incluían las haciendas de don Vicente Ulloa, mucho menos el dolor de
doña Pilar de Ulloa, lo que les dolió fue que desde ese momento a ella la trataban con respeto, cuando
ellas la consideraban baja, asesina, sucia y Puta, para entonces ya era la querida declarada de Santiago
Flores y el que tratara con ella lo hacía respetuosamente, le decía ‘’Doña’’, rango que para obtenerlo en
1880, la mujer tendría que estar casada y los esposos de estas aristócratas tenían que tratarla así a ella,
eso les dolió, ella reía cuando me lo contó.
Concluyo el cronista Avilés, Volvió a insistir el Doctor Arguello.
- Yo le entiendo con claridad, pero para matar a una persona no se necesita ir con pito y tambor
anunciando de parte de quien van a asesinar a alguien.
- Usted no vio la cantidad de gente que iba, recuerda que yo fui a ver pasar el funeral. A la hora
que yo vine a esta casa ahora temprano, Marta Joyilla había enviado a avisarle a la gente que se
trasladaran al Cementerio, en la entrada sería la Misa y yo estuve por la tarde en su casa y después de la
lluvia en el Parque Azul y hasta donde mire, eso era impresionante o no recuerda usted la samotana
que armo toda esa gente en la madrugada en cuanto apagaron las fogatas, antes que se sintiera el
penetrante olor a rosas y flores.
Esa fue la gota que derramo el vaso y se rieron con gusto, los que se encontraban en las dos salas
contiguas se asustaron de verlos reírse. Doña Francisca dijo.
- Mi amiga Domitila María era terrible, aun muerta sale con sus cosas impredecibles, uno en vida si
pensase en la muerte, sería lo normal, sus rezos, velorio, llantos, etc. Y no que van a suceder esas cosas.
- Entonces Doctor, me regrese después que tocaron las campanas de la Iglesia de Jalteva, yo sabía
de antemano que los Jesuitas iban hacerlo y la cola del funeral no había pasado la Plaza de la
Independencia y me dijeron amigos que eso no era ni un tercio de lo que había en el Cementerio. Ese
es el asunto, si la hubieran matado no quedaría piedra sobre piedra de la burguesía de este País,
igualmente nadie se hubiera tomado la molestia de preguntarse quién mando a matarla.
En ese momento comenzó a circular grupos de gente que regresaban del Cementerio, eso les
indicaba que ya había sido enterrada, lo raro fue que la lluvia que cayó solamente se sintió hasta la
altura de Jalteva. Doña Francisca y sus acompañantes salieron a la puerta por si miraban algún
conocido, pasaron unos estudiantes del Colegio Centro América y el cronista le pregunto cómo había
estado el entierro, ellos le contaron los pormenores y doña Francisca se tapaba la boca con las dos
manos por lo sucedido.
Capitulo XXVIII
En cuanto llego doña Domitila Maria, envió por Chago, al que le instruyo que personalmente se
encargara, de que Carlos Joaquín no regresara a su casa.
- Hace lo necesario por ultimo echarle otro Pato de todas forma esos juegan a los dos lados ó una
mujer, que tal vez así se vuelve macho, engáñalo con la Marta Jamela que le enderece el camino en la
vida y le enseñe que con mujeres se goza más y se sufre menos, que le meta el dedo como le dijo Turca
de León a Rosita Alemán, Jodido desgraciado, secuéstralo por último, pero quiero que lo retengas hasta
que yo te diga, échala toda Chago por favor.

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 Esa mañana cuando ella se dirigía a casa de don Carlos Pasos frente al lugar del doble asesinato y
suicidio, miro el tumulto de gente, apeándose le dijo al cochero.
- Me voy a pie, investígame que fue lo que sucedió, trata de apurarte para que me des esa
información antes de conversar con don Carlos, no olvides nombres.
Después de recordar esos momentos y que le avisaran de lo sucedido, ante las groserías de Carlos
Joaquín perdió la cordura y se precipitó, diciéndosela a la persona menos indicada, esto complicaba la
situación y con toda crudeza.
Se dispuso a descansar, Inicialmente el asunto de don Carlos con su hijo, no la dejaba conciliar el
sueño, le rondaba de un lugar a otro y siempre terminaba mirando a Carlos Joaquín, quiso pedir
consuelo a su Mamita Domitila y la niña Ángela Maria, pero no acudieron en el momento por ella, no
logro descansar ni un momento, en eso estaba cuando algo fuera de lo común le llamo la atención,
comenzó a oír una música, que nunca la había escuchado y que además su ritmo no correspondía a la
zona o al País, se quedo escuchándola, buscándole una explicación, cosa que no encontró, se salió a la
calle y pregunto que si había fiesta en algún lugar cercano, al que le iba preguntando le contestaba lo
mismo, que no había fiesta, termino cayendo a la cuenta, de que en efecto sería algo muy raro por ser
día Miércoles, el día mas pasmado de la semana.
Regreso a su habitación y aquella música había parado de sonar, volvió a tratar de descansar,
siempre con la esperanza de que sus Ángeles de la Guarda la visitaran, como una niña que llora para
que le cuenten una historieta infantil para poder dormir. Nada sucedía como si la vida perdiera su
encanto, teniendo tanto que recordar y no cuajaba el pasado, en ese estado se fue quedando dormida.
Se despertó agitada sin motivo, sudorosa y agotada.
- Son mis nervios.
Pensó.
Empuñaba sus manos y sentía un hormigueo, se levanto y se dirigió a la cocina para preparar un
cocimiento de Hojas de Naranjo Agrio con tres Hojas de Lechuga para relajarse, al estar lo endulzo con
Miel de Abeja y tomo barias hojas de papel con un lápiz, se sentó en el comedor frente a su habitación
con intenciones de escribir, pero solo la fecha logro poner, cuando se percato estaba doblando la hoja
de papel para armar un Barquito y comenzó a recordar mientras lo hacía, una historia graciosa que un
día escribió como tarea para la niña Ángela María.
En esa ocasión su tutora en letras le dijo que escribiera un cuento sobre la Alegría, ella tenía que
narrar un momento alegre y por que lo consideraba así y el cuento decía.
Había una vez una niña que jugaba sola en la calle de su casa, cuando en eso comenzó a llover y
la niña se tuvo que subir a la acera para no mojarse, en la calle se hicieron muchos charcos y cuando
paso la lluvia se sintió muy triste porque la calle quedo encharcada y no había en donde jugar, cuando
en eso paso una señorita y le pregunto.
- ¿Por qué estás tan triste niña?
Ella le contó a la señorita que la lluvia había dejado la calle con lodo y charcos, por eso ella estaba
triste, porque ya no podía seguir jugando. Entonces la señorita saco un papel de una bolsa y comenzó
a doblarla, cuando termino el papel se había convertido en un barquito, la señorita se bajo con la niña
a la calle, puso el barquito en un charco, con un palito lo meneaba hacia delante.
A la niña le gusto tanto que cuando llovía ella ya no se sentía triste y era tan feliz que lloviera para
jugar con su barquito de papel.
La niña Ángela María le pregunto por su cuento, ella le dijo.
- Ya lo hice, pero me da pena enseñárselo.
- Porque te va a dar pena, ése cuento es tuyo, si lo escribiste es porque te gusto, que importa que a
otros no les guste, de todas maneras ellos también escribirán sus cuentos, tú no te metas en la vida
ajena.
La niña Ángela María leyó el cuento en voz alta y cuando termino le aplaudió.
- ¿Mí niña Ángela María le gusto de verdad?
- ¡Claro que me gusto! Yo no acostumbro mentir, pero lo que me alegra es de que te gusto a ti
misma lo que hiciste, supiste expresar el por qué la niña de tú cuento se sentía feliz cuando llovía, me
encanto, ahora para que no creas que solo tu podes escribir cuentos te voy a contar…
La niña Domitila María se acomodo a la par de ella para escuchar el cuento.
…Cuando yo estudiaba en España narrativa porque a mi siempre me gusto escribir.
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 - ¿Por eso es que tiene una letra bonita niña Ángela María?
Pregunto Domitila María.
- ¡Puede ser! El caso es que en una ocasión la Hermana que nos impartía Literatura nos dio como
obligación escribir una Historia sobre cualquier tema, a que no adivinas como le puse de Titulo a la
Historia que escribí.
- Dígame como le puso.
- bueno, le puse, no te vayas a reír…
La niña se paso un dedo por su baca, indicándole que no reiría.
… El Titulo que le puse era ‘’El Molenillo’’
Las dos se pusieron a reír y Domitila Maria riendo aun le dijo.
- Cuéntemelo por favor niña Ángela María.
- Si te lo contare mi amor…
Ella le acaricio la cara y comenzó a contarle.
‘’Hace muchísimos años, pero bastantes, en un pueblo cercano a Masaya había un hombre que
tenía una mano prodigiosa para hacer estatuas de madera, piedras y barro, este hombre se llamaba
don Pedro Varga, en ese lugar no había ninguna casa en la que no estuviera una estatua hecha por él.
Hacia imágenes de Santos, Vírgenes, altares, platos, frutas en fin de todo tipo de representaciones,
hasta llego hacer un nacimiento con el niño Dios, su Madre la Santísima Virgen María, San José,
pastorcitos con sus ganados y animalitos de Dios alrededor adorando al niño.
El caso fue que don Pedro Varga tenía ya mucho tiempo de estar queriendo hacer un ángel, pero
este sería muy especial y le pondría de nombre Arcángel.
El trabajaba todo el día para poder mantener su familia. Por madera no tenía problemas, en el
patio de su casa habían muchos árboles, hasta habían algunos que tenían un olor rico, como a miel y a
sus flores. Por muy agotado que estuviera el siempre dejaba un tiempo para su ángel llamado Arcángel.
Cuando termino el se sintió muy orgulloso de su obra, pasaba horas contemplándola, hasta que
cometió el error de colocarlo en su taller para que todos sus clientes pudiesen verlo y así fue.
Cada persona que llegaba se detenía a ver la estatua y comenzaron a ‘’lloverle opiniones’’.
Solamente en una cosa concedían los críticos y era que el Arcángel era una verdadera obra maestra,
‘’pero’’.
- Si tiene alas es un Ángel, tendría que serlo, está equivocado usted maestro al ponerle ese
nombre.
Entonces don Pedro le corto las alas.
- Los pies se los debiera de ponérselos juntitos como muestra que viene del cielo.
Don Pedro le corto las piernas y se las labro juntitos en pintilla y solo sobresalían los taloncitos.
- Si el nos viene a proteger su cara tiene que ver para todos los lados, así el también se protegerá
del mismo Diablo.
Don Pedro le hizo una cabeza alargada y cilíndrica como un bolillo, con varias ranuras para hacer
sus caras y que pudiera ver en todas las direcciones y así poder protegernos y protegerse del mal,
Por último le corto los brazos por su impresión agresiva, que podría darles miedo a los niños…
La niña Domitila María se ponía a reír cada vez que don Pedro Varga mutilaba aquel pobre
Arcángel y la niña Ángela María en cada momento que la miraba reír se iba poniendo colorada, no de
enojo mas bien de la urgencia de terminar el cuento para ella también reírse.
… La alegría que sentía al ver su Arcángel se le fue opacando, aquella obra maestra había sido
reducida a una cabeza cilíndrica con muchas caras, un cuellito de bufón y largas pierna juntitas con el
taloncito sobresaliendo por los píes en puntilla como un bailarín de vale.
Igualmente la niña también se entristeció por lo sucedido al bello Arcángel.
… En una de esas en que había mucha gente en su taller llego un hombre que no era del lugar y
era nuevo de vivir en esa comunidad, buscando a don Pedro para encargarle de que le hiciera una
pieza. Cual fue el susto de la gente en cuanto le dijo las especificaciones de lo que deseaba, se parecía
al Arcángel, le urgía para probar si podía batir un Tiste que le quedaba espeso y con pelotas de masa,
con esa pieza a medida que le echara agua irle batiendo esas pelotitas…
Don Pedro se hacia el que no entendía hasta que escucho su mujer y tomando en sus manos al
Arcángel le pregunto.
- Doncito usted lo que busca es un Molenillo como este.
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 Aquel hombre lo reviso muy bien y hasta hizo pruebas en el aire y le respondió.
- Si, es precisamente lo que busco.
Saco una masa de Tiste de un sal beque y le pidió prestado un guacal con agua para probarlo, al
pasárselo este hecho el Tiste en el agua, lo comenzó a amasar con la cabeza del Arcángel, tomo sus
piernas bien juntitas, coloco las palmas de sus manos como si fuera a rezar sobre sus tobillos y el
taloncito le servía de tope al agitar las palmas de la mano, las comenzó a frotar haciéndolo girar de un
lado para otro, cual fue el susto de la gente que hasta espuma echaba el tiste y el hombre le dijo.
- Se lo compro señor, por cuanto me lo vende.
Aquel artista don Pedro tuvo que vender su Arcángel, en la realidad ya no le gustaba como había
quedado. Pero don Pedro al estar llegando la gente a comprarle Arcángeles o Molenillos se dio cuenta
de que sus manos habían sido utilizadas por un verdadero Arcángel para que en todas las casas de esa
comunidad y en el País entero existiera una obra maestra de él y así por todos partes compraban un
Molenillo para batir Tiste, Pinol o pinolillo y distintos refrescos de frutas…
- Que alegre,
Dijo la niña Domitila María.
… En muchas ocasiones le preguntaron que significaba la palabra Molenillo y nunca supo
responder, con los años fue perdiendo su nombre original de Arcángel y se quedo así, sencillamente
Molenillo.
Las dos se abrazaban y se reían de la historia.
Después la niña Ángela María le explico que uno debe de querer sus propias cosas sin importarle
lo bonitas o caras que son.
- Lo importante es el valor que uno les da y el sacrificio que has hecho por ella, nada en esta tierra
puede ser más bello como lo que es propio de uno y se entregue dándole vida y valor
Doña Domitila Maria inclino su frente y reposo sobre sus brazos por un buen rato hasta que se
percato que de sus ojos serrados salían lágrimas, estaba llorando y por su sudor sentía un aire fresco
como si estuviera saliendo de ella una amargura que cargaba durante muchos años.
En eso llego Marta Joyilla y cuando doña Domitila María levanto la cara, le miro las lágrimas que
brotaban de ella, se le acerco y abrazándola le pregunto.
- Que te posa hermana, porque estas llorando y te siento tan triste.
Doña Domitila María le contesto.
- Me hacen tanta falta,
- Nadie té tiene que hacer falta, aquí estamos juntas como no dejo nuestra mamita Domitila.
- Hermana yo te adoro, pero té oculto algo y me duele no poder decírtelo.
Marta Joyilla no entendió, entonces doña Domitila María agrego.
- Yo cuido mis recuerdos
- Como los que té contó ella, ya cálmate por favor, que me vas hacer llorar a mi también.
- Té quisiera contar sobre al que siempre tengo presente, no desconfió de vos, pero guardo
información para protegerte, té pido perdón por eso, cuando lo sepas me vas a entender y tal vez hasta
me puedas perdonar y aunque no lo hagas te suplico que no me odies.
- De que me estás hablando, en este mundo no existe ningún motivo por muy fuerte que sea para
que yo llegase a tal grado.
En el primer momento no entendió, ya en este se preocupo en no seguir comprendiendo que
sucedía.
- Mientras viva no podré revelártelo, pero quiero que me ayudes en algo que será de mucha
importancia para mí aun después de muerta.
- De lo que me hablas no entiendo en absoluto y hablar de muerte son chochadas tuyas por
los nervios, pero el de ayudarte no tenes que darme ni la mínima explicación, bien sabes que además
de la amistad y la fidelidad, té quiero como una hermana.
Dijo Marta Joyilla acariciándole la cara con un trapo para secarle las lágrimas, entonces doña
Domitila María le contesto.
- Gracias hermana, mi mamita Domitila cuando le pago las cuarterías de El Desenredo a don
Carlos me dijo…
‘’Guardaremos el secreto mientras vemos como nos va con el alquiler de cuartos. Por mi parte yo lo
compartiré con las hijas de las mejores amigas de tu Mamá, Rosita Alemán y Marta Joyilla, por
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agradecimiento, cariño y con ellas hemos sido como una familia y yo se que siempre estarán a tu lado
en las buenas y malas’’.
… El caso es el siguiente…
Ya bastante recuperada.
… Quiero casar a la joven Ángela María con el hijo del Conde D´Ibarra, para eso te voy a contar,
doña Francisca, tiene algún años de andar en amoríos con el padre Valentín…
Aquella otra mujer abrió la boca y se tapo la cara con sus manos, sus ojos cafés se abrieron en su
totalidad.
… Yo permito eso en mi cuarto, necesito un espacio para hablar con Ángela María, mientras
continuó con la complicidad con doña Francisca.
- Pero si de eso hablamos con Rosalía y quedamos claros de tus intenciones para estos jóvenes, es
mas ella estará haciendo lo suyo con él.
Interrumpiendo Marta Joyilla, doña Domitila María continuó diciendo.
- Yo necesito hablar por más tiempo con Ángela María, quiero estar segura de cuanto conoce de la
niña Ángela María. Eso es importante para mí. Cúbranme para lograr ese tiempo, después yo me
encargare que ella viaje con ustedes a España.
Con expresión de susto Marta Joyilla interrumpió
- ¡Nosotras a España y que vamos ir a hacer Domitila María!
- Ya te dije lo que quiero hacer y ustedes en España por un tiempo me van adelantar eso, un año
pienso que pueden estarse por esas tierras, además que les servirá como un descanso de tanto trabajo
que han cargado en la vida.
El plan inicial quedo acordado, solamente habría que afinar detalles y sin hacer comentarios
comenzar a preparase ellas y sus familias para el viaje, dejando en orden sus áreas de responsabilidad
de los negocios.
En una ocasión doña Domitila María le ofreció a doña Francisca pasar a solas con el padre
Valentín un Sábado todo el día en una isleta que ella tenía, en dicho lugar habían todas las condiciones,
casa amueblada y en ella vivían la hija de una amiga de ella de la isla de Ometepe, con una prima y su
esposo, dado que la habían violado y aun que la familia tomo venganza, la chavala quedo embarazada
y temen que algo le vallan hacer por represalias, ella estaba por parir y la traslado a su casa por
cualquier emergencia. La isleta se encontraba sola y el Capitán Flores los podría llevar e ir a traerlos sin
ningún peligro de ser observados, además que Santiago sería incapaz de abrir la boca.
Doña Francisca brincaba de alegría al estar de acuerdo el padre Valentín con aquella idea, por su
parte doña Domitila María se llevaría a Ángela María y Valeria a un día de campo a la casa de Posintepe
en donde la pasarían bien las tres y también invitarían al hombre de Valeria y Álvaro Manuel, que
incluso le buscaría una buena compañía para que sepa lo que es romper un cuero.
Ese día fue inolvidable para doña Francisca y el padre Valentín, sexo a la quinceañera, a esa edad
era imposible lograr los niveles de resistencia que alcanzaron, eran uno y al poco tiempo otro, así,
además de eso el padre Valentín le comunico a doña Francisca que se retiraría del sacerdocio, para
casarse con ella en Italia, donde pensaba terminar sus días y aun en condiciones de casados pensaba
serle fiel a la Iglesia Católica, Apostólica y Romana.
Doña Francisca nunca se arrepintió de haberse casado con don Carlos Pasos Arellano, que era
mucho mayor que ella, ni de haber jurado estar con él hasta la muerte, tampoco serle infiel durante su
enfermedad ya que en ese momento era una necesidad humana lo que le faltaba y por ningún motivo
ella lo abandonaría en las condiciones en que estaba, mucho menos se arrepentía de parirle, pero se
sentía feliz de terminar sus últimos días con aquel hombre.
Antes de regresar el padre Valentín le dijo a doña Francisca.
- En Cuanto deje de ser sacerdote te diré la única falta que cometeré contra la Iglesia y esta será
revelarte un secreto de confesión del padre Rodrigo, si antes de que ocurra eso se llegase a conocer, no
me lo reproches, por hoy solo eso te puedo prometer, lo que viene será para bien, si Dios así lo permite.
Se acurruco en su pecho frondoso y recio, le comento.
- Estas hablando como nuestra amiga Domitila María. Sabias que ella pretende que mi hija se case
con el hijo del conde D´Ibarra.
- Si lo sé y me párese, Rosalía Alemán nos contó que desde niños en España siempre fueron
unidos, con la adolescencia se enamoraron, que era la fecha e intercambian cartas, por haber sido su
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Nana le comenta todo sobre sus sentimientos, el Conde era excelente persona por lo tanto no dudo
que a su hijo le dio muy buena educación, ya ves que le dio educación a Rosalía, ahora si Domitila
María se empeña en algo así, por algo bueno debe de ser, yo conozco lo mucho que te quiere a ti y a
tu hija e hijo, ojala lo logre, por mi parte me gustaría ese cruce y un día sabrás por que.
Con estas palabras el padre Valentín avaló el casamiento de los jóvenes y principalmente su
consentimiento de que Ángela María viajara a España y con sus propios ojos sea ella quien valore a su
pretendiente y así poder decidir sobre su destino.
En los siguientes días doña Francisca anduvo un tanto inquieta con aquella conversación, sobre el
secreto de confesión del padre Rodrigo y la idea de doña Domitila María de casar a su hija con el hijo
del Conde, en la realidad la idea le parecía.
Ellos conocieron al hijo de don Guillermo cuando el era un niño, ahora debe de ser un hombre
simpático, inteligente y alegre, Ángela María compartió amistad con el durante mucho tiempo, hasta
que regreso ya siendo una señorita mayor de casi 28 años, si se enamoraron fue el primer amor de ellos
y si se siguen escribiendo es porque hubo una fuerte atracción. De esa forma analizaba lo que giraba
en torno a su hija, ya que no le había conocido una simpatía por un hombre y lo atribuía a temores por
la reacción de su Padre.
Un buen día doña Francisca sin previo aviso de su visita, se presento a la casa de doña Domitila
María, esta sorprendida por la visita recordó inmediatamente cuando llego don Carlos a lanzarla a una
guerra en donde ella perdería o sea a entregarla a sus enemigas, con la diferencia que en esta ocasión
solo sintió olor a flores.
Tomaron asiento y antes de comenzar a conversar doña Domitila María le pidió a Marta Joyilla de
que le llevaran desayuno de pobres para las cuatro y que mandara a llamar a Rosita Alemán. Este tipo
de desayuno en la casa de doña Domitila María significaba, Gallo Pinto, Carne Desmenuzada, Cuajada,
Tortilla y Café con Leche. Doña Francisca se asusto cuando Marta Joyilla con ayuda de una joven les
sirvieron las viandas con los alimentos del menú para auto servirse ya que ella estaba acostumbrada a
desayunar un vaso de refresco natural con galletas y mermelada.
- Le quiero decir delante de mi amiga, hermana y socia, que usted me ha hecho el mejor regalo
que puedo yo recibir, desayunar con las tres amigas que más quiero en esta tierra.
- Gracias amiga, soy honesta en decirle que no lo pensé de esa manera, yo vine a pedirle un favor.
Dijo doña Francisca, inmediatamente Marta Joyilla respondió por su amiga diciendo.
- Un favor con otro se paga doña Francisca. Verdad Domitila Maria.
- Claro que así es, sáquelo a orear para que no agarre moho.
En eso entro Rosita Alemán entre besos y abrazos, otra joven colocaba más viandas, doña Domitila
María con un aire especial de contenta le propuso.
- Creo que mejor nos trasladamos, aquella mesa es grande, estaremos más cómodas y en especial
hay cosas que doña Francisca querrá hablar y con la presencia de personal que no conoce lo va dejar
para otro día y las angustias que sales de la casa no deben de regresar, están da acuerdo.
Riendo aceptaron la moción.
- Rosita te haces cargo del traslado.
Se pusieron en movimiento, doña Domitila Maria les toma a cada una la mano y se dirigieron a la
otra mesa. Estando las cuatro mujeres ya sentadas dieron rienda suelta, dio inició doña Domitila María.
- Rosita Alemán, para que te pongas al tanto, este desayuno es un regalo de gran valor por hacerlo
con mis tres amigas, es también un acontecimiento histórico, doña Francisca Sacaza viuda de Pasos me
va pedir un favor…
Las cuatro reían y aplaudían, ella continúo.
… Haber amiga dígame lo que usted desee, no tema que de aquí no sale ni una palabra, somos
oídos.
Comenzaron a servirse, mientras lo hacía doña Francisca dijo.
- No es algo histórico Domitila María, lo que le vengo a solicitar si me presta su casa de la playa.
- No me diga que el padre Valentín va quemar su sotana.
Se rieron pero doña Francisca inmediatamente le devolvió la moneda con una repuesta más
contundente y picante.
- Valentín se conforma con las quemadas que da.
- Así se habla doña Francisca.
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 Dijo con voz alta Rosita Alemán, doña Domitila María se sonrojo con la sorpresiva repuesta, reían y
aplaudían, a su vez doña Francisca se puso colorada como un tomate, a medida que se calmaban de la
risa comenzaron a comer.
- Doña Francisca me gusta que sea así y me alegra, si yo tuviese una necesidad que no deseó
compartir con mis amigas…
Dirigiéndole la mirada a Rosita Alemán y Marta Joyilla.
… Tenga la plena seguridad que se lo pido, con la suficiente confianza de que si esta a su alcance
usted me tiende su mano y es mas ni me pediría explicaciones de ningún tipo, así mismo somos
nosotras, se lo voy a demostrar aquí no mas…
Hablaban y continuaban comiendo.
Doña Domitila María desde que dio la broma de la quemada de la sotana del padre supo que no
se trataba de ese asunto y era impropio abordar que uso le daría a la casa, sabiendo que en lo único
que la podría utilizar sería en pasar el día en ella con Ángela María a solas, entonces tendría que sacarle
sus angustias antes que se de ese día de campo y no desviara la atención de la joven para otro lado que
no sea el viaje a España.
- Tal vez no sea el tiempo adecuado para este comentario, yo cargo con un secreto desde hace
muchos años, esto son pocas las personas que la saben, algunos ya murieron, en esta mesa solo una
persona lo sabe y el hecho que se lo confié no quiere decir que sea mas amiga que otras.
Las mujeres sintieron un aire escalofriante que solo un Mensajero de la Muerte puede provocarlo,
en esas condiciones Rosita Alemán se convertía en una piedra, cara, manos, voz y forma de hablar
permanecían intactos, en Marta Joyilla era fácil deducir con quien compartió su secreto, para doña
Francisca era imposible precisar cuál de las dos.
- Disculpe Domitila María, yo no le he jurado fidelidad a nadie, ustedes mejor que nadie saben que
de alma y corazón le fui fiel a Carlos, con usted van dos personas que me hablan de un secreto, tu no lo
dices es tuyo y Valentín por ser secreto de confesión del padre Rodrigo. A sido publico que antes de
morir el padre Rodrigo se confesó con Valentín y su última voluntad fue que lo enterraran en Granada
pero no en la Iglesia ni en la parte trasera de ella por lo picados que cagan y orinan en el lugar.
- Así es doña Francisca, no es un pecado, es un secreto, en el que me juraron fidelidad de
guardarlo hasta cuando yo lo considere conveniente sea público. Cuando Chago se metió con la Petra
Culona, estaba aquí en Granada el Conde D´Ibarra y me metí con el, pero en cuerpo y alma yo era de
Chago, es la fecha y sigo con él, la niña Ángela María amo con toda su alma a un hombre, este se mato
y ella no se paró hasta ver materializada su poesía, por eso me decía que no me parara por nada ni por
nadie, yo no quiero que esto les pase a Ángela María y al joven D´Ibarra que frustren su amor y lo
tengan que materializar en otra persona como le paso a la niña Ángela María que lo tuvo que realizarlo
en mí.
Las mujeres quedaron aturdidas, nunca se imaginaron por donde iba a saltar la Liebre. Ahora lo
que les restaba era ponerse de acuerdo y preparar a la joven para que ella tenga la suficiente madures
mental para determinar si este hombre le conviene.
Capitulo XXIX
En el año de 1915 a la edad de 60 años doña Domitila María inicio el último y gran golpe que
daría en su vida, con el compensaría 37 años de dolor, zozobra y lucha por su profundo amor, su
plenitud y gozo que tanto le hablo la niña Ángela María se materializaría con mayor profundidad que la
poesía. Cargando aun el luto de don Carlos Pasos Arellano y este no tenía un año de muerto cuando su
hija se embarcaba rumbo a España, con el consentimiento de su Madre doña Francisca Sacaza viuda de
Pasos. Por su parte ella continuaba con su amorío con el padre Valentín. Manuel Alberto no quiso salir
del país, se hizo cargo de los negocios de la familia con el apoyo de sus hermanos Pasos Echaverria y al
igual pero sin faltas mayores se hizo de fama de conquistador empedernido como su tío don Fernando
Pasos.
La acompañaban Marta Joyilla y Rosita Alemán, las dos ellas llevaban a sus hijos e hijas con la
orientación de doña Domitila María de que Rosalía se hiciera cargo de las atenciones de ellos,
principalmente en lo educativo o técnico, en iguales condiciones iban seis jóvenes de ambos sexo hijos
de amigas de la Isla de Ometepe, entre ellos un joven de nombre Héctor, quien hasta el momento
ayudaba en la administración contable de los negocios y lo mandaba ella a prepararse en su ramo,

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desde la última visita del Conde D´Ibarra ella le había entregado suficiente dinero para comprar una
casa en España, aparte de otros negocios que tenía en sociedad con él y Rosalía los administraba. El
joven Héctor regresaría con la preparación adecuada para ejercer la administración de los bienes de
doña Domitila María, pero a su regreso encontraría la tristeza que la mujer que el amaba, por
desesperación provocada por la soledad, de tantos años de amaneceres sola y sin cobija, dejándose
llevar por comentarios mal intencionados, de que Héctor no volvería y si lo hacía sería con una
Española, decidió suicidarse lanzándose al vació desde el puente del cementerio. Así Amalia, la joven
que fuese la mujer del licenciado en administración de bienes ajenos murió desnucada.
Después de la muerte de don Carlos, doña Domitila María se empeño en acercarse a la joven
Ángela María y con la complicidad de sus dos amigas de infancia logro con toda comodidad sus
intenciones de conocer con precisión los sentimientos de la joven y palpar ella misma lo que conocía.
La joven Ángela María fue directa en su pregunta.
- Doña Domitila María yo sé lo que busca, hablemos de frente, somos de la misma escuela de mi tía
Ángela María
- Quítate los botines y caminemos descalzas.
Fue un espectáculo el ver sus pies, finos y hermosos, su limpieza daban muestra de aseo
impecable, acompañados con una presencia de autoridad, sus pantorrillas conjugaban con su color, se
tomaron de la mano de ceda como las de la niña Ángela María y caminaron sobre la costa, reían
cuando en ese momento doña Domitila María le dijo.
- Sentémonos en este árbol de Chilamate...
Se sentaron y a recostaron sus espaldas al árbol, unían sus hombros.
… Mírame esta marca detrás de la oreja, es difícil echarla de ver, aun si me cortara raso el pelo.
Nunca lo olvides, esa es la repuesta que té puedo dar, yo se lo que va a suceder y Dios me va ayudar, de
eso estoy segura, perdóname es mí forme de demostrarte el cariño y amor que siento por ti y tu familia,
la repuesta directa que tengo para no poner en riesgo el único, puro y profundo amor que tuve en la
vida.
La joven Ángela María no entendió, ella pregunto.
- Cuando yo leía los escritos de mí tía Ángela María, encontré la historia de esa marca, mi abuela se
la contó a ella, desde ese momento me di cuenta, lo que usted significo para esta familia y mi Padre
nunca lo quiso entender, igualmente ella se refirió a la prepotencia y orgullo de mi Papá, que no le
permitía ver la realidad de la vida basándose en teorías que en la realidad duraron poco tiempo para
ser invalidadas.
- Si y no me gusta que seas tan dura, ni aun así ella entendió lo que significaba eso, aun cuando
sabia sobre la marca, la niña Ángela María no conoció el consejo que le dio tu abuela doña Mercedes a
mi mamita Domitila cuando le dijo…
‘’Mira Domitila, para que salga de tu familia esa maldición que vos y tú Mamá me ha hablado que
existe, vas hacer esto.
Encomiéndatela a nuestra Señora la Virgencita María, Madre de nuestro Señor Jesucristo, veraz
como a este angelito de Dios le va a ir diferente, pero para bien.
Aceme un favor, a tu nieta pénele el nombre de Domitila María’’.
La joven se impresión por la historia del nombre, ya que esa parte no la pudo escribir su tía por no
saberla y prosiguió.
… Eso fue correcto me fue diferente a mis ancestral, mírame, yo tengo tanto dinero que no te
alcanzaría en tu imaginación, amigas y amigos que darían la vida por mi y ame a un hombre que no
pudo darme lo que quise en la vida, parirle un hijo o hija…
La joven Ángela María se conmovió y por el color de su piel fue fácil ver en ella como en un
parpadear se puso colorada desde sus pies descalzos hasta su cara y sus ojos llorosos, a doña Domitila
María los ojos negros y grandes le brillaron, agrego.
… Dios sabe lo que hace, tal vez a estas alturas ya me lo hubieran matado…
La impresión en la joven no cesaba, se sonrojaba como una luciérnaga y se miraba como su piel se
enrojecía intermitentemente.
… Por eso quiero que la mires bien, esto nadie lo conoce, ni mis amigas que bien sabes cuánto las
quiero. Eso té lo pido, mí mamita Domitila lo guardo como un secreto de familia y me imagino de que
forma se dio cuenta de eso tu abuela doña Mercedes.
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 Se tomaron de la mano y corrieron por la costa de una forma divertida de una vieja con una
jovencita, que ella pensaba casar con un hombre que vivía al otro lado del mundo y guardaba un
secreto que se conocería hasta después de su muerte. Un secreto cuidado exageradamente, que le
caería como una bofetada a la aristocracia Granadina y lo considerarían una humillación.
La joven Ángela María hizo gala de su belleza, juventud y alegría, todo fue diversión. En la joven le
quedaban dudas. En ella la pregunta no había sido respondida y esas historias de Doña Domitila María
pasaron a ser el tema prioritario en donde podría encontrar las explicaciones de muchos datos de las
memorias escritas por su tía Ángela María y comprendió de que se le había abierto la puerta que su
Padre minimizo dándose cuenta de eso hasta el día de su muerte. No insistió y prefirió pasar un buen
rato con doña Domitila María.
Marta Joyilla interrumpió por el hecho de que las confesiones de los pecados de doña Francisca
con el Padre Valentín estaban por terminar, habría que regresar a la Iglesia de Guadalupe. La joven se
limpiaba los pies y doña Domitila María se los miraba tratando de encontrar la vergüenza que había
sentido la niña Ángela María, cuando dio la comunión y se trasportaba al momento en que se lo contó
y a la edad que ella tenía.
Todo era tan perfecto que ella recordaba las distintas ocasiones que miro desnuda a su tutora. Era
como una reencarnación, su piel fina, figura delgada pero a la vez carnosa, sana y saludable, la miro
con tanta claridad como cuando la encontró masturbándose en su cama con tanto afán que no se
percato de la presencia de la adolescente Domitila María que hasta la escucho invocar su gran amor y
con una voz enronquecida.
- Si hubieras tenido valor aquí té tuviera con migo mi amor.
Similar al que sintió la Chompipona por aquel joven con el que se fugaría con ella el Miércoles de
su muerte y la desgracia de ella, dos vidas diferentes con una misma perdida, aptitudes apartes para
convivir con su pesado dolor, pero con igual intensidad de amor, una intelectual queriendo orientar a
una niña que no era de su clase ni de su sangre, la otra buscando hacer fortuna prostituyendo su
cuerpo para pagar el olvido, las dos con el mismo final, con miedo, secas, solas, la Chompipona
alcohólica y deseando ellas haber muerto el día en que nacieron.
Esto de la masturbación sucedió cuando en una ocasión la niña Ángela María fue a la bodega de
la casa, era un domingo y el resto de la familia había salido, al llegar escucho ruidos dentro de ella y
cuidadosamente entreabrió la puerta y miro a la hija de la cocinera una joven de 20 años que estaba
haciendo el amor con el nieto del capataz de la hacienda Panaloya. Inmediatamente la sangre le hirvió
y la excitación fue tan así que cuando los jóvenes consumaron el acto ella se toco con fuerza y se sintió
húmeda, en su mente automáticamente se le reflejo la imagen de su amado. Sin hacer ruido, ni
sacárselo de la mente, ella comino rápido a su habitación, en lo que ella entraba en el cuarto la
adolescente Domitila María llegaba a la casa. Tan desconcentrada que no reparo que la puerta la había
dejado sin seguro, rápidamente se quito la bata y sin ropa interior se lazo a la cama baca abajo, abrió
las piernas, levemente levanto sus caderas blancas, redonditas, sólidas y se introdujo dos de sus dedos,
que igual que su mano eran largos y hermosos, dio rienda sueltas a su fantasía. Gemía, suspiraba, sus
manos eran unas maquinas sexuales bajo ella, se acariciaba los pechos y mordía la almohada, como si
tuviera realmente a un hombre amado y deseado, su piel se le puso colorada que parecía que iba a
reventar, la adolescente Domitila María se asusto al entrar, por un corto tiempo se quedo viéndola, ella
igualmente se éxito, escucho lo que ella dijo y cuidadosamente serró la puerta, se sintió húmeda y se
puso a llorar creyendo que algo malo le sucedía, eso solo les daba a las jóvenes como ella y no a una
mujer tan bonita como la niña Ángela María.
Doña Domitila María la miraba con tanta intriga que Marta Joyilla sin entender lo que ella
buscaba en aquella joven, se interpuso entre ellas.
Todo regresa a su debido tiempo, años después Marta Joyilla recordaría este episodio cuando en
una ocasión estando en España ella miraría a esa mujer desnuda y le entraron fuertes intenciones de
tocarla, acariciarla, sentir su aroma, calor y de ser posible besarla. Tenía años de no sentir ese tipo de
sensación y deseos principalmente para con mujeres, se le vinieron recuerdos de su adolescencia y
juventud, cuando espiaba a Rosita Alemán haciendo el amor, igual que Carlos Alberto lo hacía con su
Mamá o la Lora Mena fisgoneando en el baño a sus tías, hermanas y Madre.
Con sumo cuidado Domitila María golpeo y suavemente abrió la puerta, del interior del cuarto se
escucho la voz de ella decir.
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 - Entra Domitila María, Serra la puerta que me estoy vistiendo.
Al entrar ya se había puesto una de sus faldas largas, la otra aun estaba en el suelo a la par de la
cama y estaba con sus pechos descubiertos secándose el sudor con un trapo humedecido con esencia
de hierbas aromáticas. Ella tenía un aura brillante de satisfacción sexual y en su cara se reflejaba algo
muy especial, los pechos y su porte en alto le daban una imagen femenina adorable, como las diosas
griegas que había visto en los dibujos de los libros.
Mientras ellas tenían esa rutina, Marta Joyilla y Rosita Alemán se encargaban de excusar a doña
Francisca con cualquier pretexto, de tal manera que sin levantar sospechas y buenas justificaciones ella
pudiera quedarse y así desahogar sus pecados con el padre Valentín.
Poco a poco los tiempos juntas se fueron alargando al extremo de que pasaban el día entero
juntas, la fisonomía de doña Domitila María se fue rejuveneciendo y la joven Ángela María dejo las
memorias escritas de su tía para consultas que corroboraran las historias que le contaba. En una
ocasión se fueron por 15 días a una de las haciendas que tenía en los pueblos de Carazo.
La Joven Ángela María la paso fascinada mirando la belleza de la meseta de los pueblos y
escuchando historias ancestrales, fabulas y leyendas que en esa zona, como en todo el País son
abundantes y su gente sabe contarlas con sabor y alegría.
Para ella era un festín el que estaba viviendo y no se perdía de nada, como también no perdía la
oportunidad de inducir a doña Domitila María con preguntas que la obligaran a revivir las historias que
a ella le interesaban, eran distintas temáticas y personas, así como conversaciones largas. En una
ocasión ella le pregunto.
– Doña Domitila María me disculpa si esta pregunta que le voy hacer sea un tanto molesta o
desagradable por ser algo muy personal suyo.
- No hay cuidado, pregunta lo que desees saber, cuando yo era niña no me aburría de estarles
haciendo preguntas a la niña Ángela María y mí mamita Domitila.
Interrumpió doña Domitila María y la joven continúo.
- Que tanta verdad hay sobre su vida de violencia y en donde quedaron la enseñanzas de mi tía y
su mamita Domitila.
- Recuerdas la conversación sobre la marca familiar de las Domitila Miranda, te dije que mi niña
Ángela María no lo entendió y que el consejo que tu abuela doña Mercedes que le dio a mi mamita
Domitila estaba en lo correcto…
Hizo una pausa y continuó.
… Me enseñaron a no hacerle daño a nadie, ni desearle mal, una me enseño a no pararme por
nada en la vida y ver hacia delante, la otra a regresar la vista al pasado, aprender de él para defenderme
y que nada en este mundo me sorprendiera. En una ocasión mi niña Ángela María me llamo a
sentarme a la par de ella y me dijo.
‘’Domitila María en la vida debes de ser feliz sin importarte los obstáculos, nunca te pares por nada,
ni por nadie, por riqueza, bienes, por amor a un hombre, detenté por un hijo pero no te pares y se feliz,
yo me pare por un hombre al que ame y aquí estoy sola e infeliz, pero logre lo que quería, materializar
mí poesía y lo logre contigo’’.
La joven se sonrojo violentamente que asta en la piel le dio picazón, al escuchar con esas mismas
palabras lo que había leído de los papeles de su tía y recordó que su tía ese escrito iba dedicado a doña
Domitila María, igualmente se le vino a la mente haber escuchado a su padre decirle a doña Francisca.
‘’Esa Domitila María tiene una memoria prodigiosa, todo lo recuerda con tanta claridad que da
envidia, yo me asusto con que frescura mantiene su mente’’.
Ella interrumpió y dijo.
- Disculpe doña Domitila María, en un momento recordé dos pasajes, eso yo lo leí entre los escritos
de mi tía y estaba dedicado para usted y mi padre decía que usted tenía una memoria privilegiada.
Ella le sonrió y le agradeció, le dijo.
- Te agradezco, es cierto así me decía don Carlos. Siguiendo Ángela María, antes de morir mi
mamita Domitila me dijo.
‘’Mire mi hija espero haberle enseñado a defenderse en la vida, nunca olvide el valor de lo
aprendido y que tanto le costó, de esa manera en esta tierra nada la sorprenderá, como le decía la niña
Ángela María. Sea feliz y no se pare por nada, parí tu hijo y se feliz, sea niño o niña no importa’’
Ángela María se volvió a sonrojar como un relámpago y le sonrió cariñosamente, ella agrego.
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 … Esa fue mi escuela, de dos mujeres que significaron tanto para mí, que para todo el recuerdo de
ellas me ha acompañado desde que yo tenía 21 años, en otra ocasión mi niña Ángela María me llamo
nuevamente a sentarme con ella y me dijo.
‘’Escúchame bien Domitila María, tu mamita Domitila y yo algún día tendremos que morir, es parte
de la vida y de la voluntad de Dios Padre, pero siempre ella y yo con ayuda de tu Mamá, tus Abuelas y
con la de mis Padres, te estaremos cuidando, pero no olvides encomendarte a nuestra Madre la
Virgencita María y nunca nos olvides, por que en ti está Sembrada Nuestra Semilla’’.
La conversación se había convertido en una revelación torturante para la joven, con ese último
comentario sin perder el sonrojado encendido en su piel de sus ojos comenzó a salirle lágrimas y en su
cara se dibujo una sonrisa que le enterneció el corazón a doña Domitila María, en ese momento ella
miro en ella el aura de la plenitud del entendimiento y al igual que le miro la niña Ángela María a ella,
también sintió gozo, la puso de pie y la abrazo para unir sus almas.
Con una voz temblorosa la joven dijo.
- Gracias tía Ángela María por ponerme en mi camino a doña Domitila María.
Al escucharla sintió que de su piel la joven transpiraba un aroma que en la naturaleza nunca lo
había sentido nadie, era algo muy especial, era la poesía de Ángela María Pasos Arellano
materializándose en la joven, que si era de su familia, doña Domitila María recordó el beso a su mamita
Domitila, con aquel sabor dulce que le quedo en el paladar y la abrazo con fuerza, no sintió miedo,
pero si el sentir sin ver, ni oler o tocar, repitió aquel abrazo por creer ella y así fue, sería el primer y
último que se darían. Ángela María nunca olvidaría aquel momento.
Se sentaron, doña Domitila María le acariciaba la cara secándole las lágrimas con sus dedos, la
joven dijo.
- Perdón por ser sentimentalista, yo no conocí a mi tía y cuando usted hablaba sentí que era ella la
que me estaba diciendo lo que en su tiempo le dijo y yo me trasporte a sus escritos, los recordé todos
como si los hubiera leído juntos.
Le tomo la cabeza y se la a recostó en su pecho, siguió acariciándole la cara y la besaba, la joven
con sus dos manos le tomo la que le quedaba libre a doña Domitila María, Así estuvieron por buen
tiempo, sin decir palabras era una conversación intima de caricias y transpiración aromática en la que se
transmitieron mas que con palabras ricas experiencias, estaban sellando un pacto de amor y unidad. La
joven conoció vivencia y sentimientos de Doña Domitila María, las tomo y en su cerebro los mezclo con
las memorias escritas de la niña Ángela María.
Cuando regresaron viajaron en tren a Granada pasaron directo a la casa de doña Domitila María,
en donde las esperaban lo mas selecto de sus amistades y familia, ya estaba acordado que al regreso
cenarían juntos en esa casa, como si ella supiera de antemano los que resultaría de ese viaje y el
resultado sería motivo de celebración.
Todo estaba listo, la primera en bajar fue Ángela María, al mostrar su cara doña Francisca, el padre
Valentín, Valeria y Manuel Alberto, quedaron impactado. Lo que regresaba no era la Ángela María que
salió de su vista, era otra tan diferente como madura, además que su belleza brillaba más, su pose era
imponente y le daba la imagen de una criatura perfecta tanto en lo físico como en lo espiritual, no
podía existir en las manos del ser humano un detalle para agregar. No pudieron pronunciar una sola
palabra hasta que ella los despertó saludándolos, alzo la mano derecha y dijo.
- Hola familia y amigos, ese lugar es maravilloso.
Cuando doña Domitila María bajo, el silencio fue total, la impresión fue colectiva ya que a ella los
presentes la conocían perfectamente, un rejuvenecimiento exquisito, después que doña Francisca
saludo con un abrazo fuerte y besos a su hija, rápidamente se lanzo sobre ella, la abraco basándole las
mejías y le dijo en voz alta.
- Que lindas que están la dos, Domitila María pareces una niña de 20 años, me gusta cómo te miro,
tienes que llevarme a ese lugar.
Frente a la casa fue un desborde de alegría que embullo la calle El Desenredo, después de
saludarlos con besos y abrazos, tomo de la mano a Valeria y Ángela María y les dijo a las amistades.
- Quiero pedirles nos disculpen por un momento, voy en compañía de mis dos amigas a saludar a
mi familia de la calle El Desenredo.
Se tomaron de la mano y fueron de cuartería en cuartería saludando a Putas, niños, niñas, jóvenes,
ancianos, hombres, al que se encantaban en la calle y lo conocía, fueron al comedor El Mesón
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Granadino, les enseño la Pensión El Pueblon y sus dos acompañantes gozaban de los comentarios y
chistes que hacían con doña Domitila María. La joven Ángela María comprendió que le estaba
enseñando qué en la vida esa gente para ella valían mas que las propiedades que ella había visto y que
la fortuna económica que gozaba, a la joven le gusto la lección, le causo una mayor admiración en la
promotora de su casamiento para que en la vida sea feliz y no se frustre como su tía, la Chompipona y
tantos seres desdichados en el amor. Aun que a la gente le gusto ver un bonito brillo en los ojos de
doña Domitila María, el comentario general lo centraban en la belleza de Ángela María principalmente,
también comentaban lo graciosa y bonita que era Valeria. Esa pobretería nunca en su vida se
imaginaron estrechar la mano de una mujer de ese calibre, la alegría que provoco ese paseo de doña
Domitila María con la dos jóvenes fue tanta que ese día fue de pereque en la calle El Desenredo.
Después de este acontecimiento el pacto que se sello fue ejecutado, Rosita Alemán regreso un año
después y Marta Joyilla duro tres años y medio en España, días después del casamiento de los jóvenes
que pasaban a constituir el tronco de la familia D´Ibarra Pasos. Al año don Guillermo embarazo a su
esposa doña Ángela María y nacería un hijo varón en el año de 1920, tres meses después de haber
muerto su abuela paterna doña Domitila María Miranda. Cuando el Capitán Santiago – Chago – Flores
supo el secreto que ella guardo por 37 años, se dijo.
- Aun muriendo esa era su urgencia de que la trasladara a Granada, no fueron suplicas de dolor
carnal, ni temor, eran de amor puro, con razón y yo creí en otra babosada.
Serró los ojos y le miro la cara de suplica que jamás había observado en esa mujer de hierro, que
después de tantos años de vivir con ella, nunca había visto ni el mínimo gesto de dolor…
Capitulo XXX
Al día siguiente del entierro, a las cinco y media de la mañana se abrieron las puertas de la Iglesia
de Guadalupe, para la celebración de la primera misa y a la vez se rezaría el Rosario de la novena por el
alma de doña Domitila María.
Después de la actividad religiosa Rosita Alemán y Marta Joyilla invitaron a desayunar al padre
Valentín y le explicaron que en el desayuno estarían, doña Francisca, don Bayardo Arguello con su
esposa doña Mercedes Paso, el profesor Avilés, don Roberto Mongalo con su esposa, don Miguel
Sansón y su esposa y Santiago Flores, el padre se comprometió a llegar, solo quedaría vacía la silla que
le correspondería a la anfitriona y el padre Rodrigo, por ausencias obligatorias no podrían asistir. Aun
agotadas de aquella jornada y con el dolor fresco, Marta joyilla dejo que Rosita Alemán organizara
aquel desayuno, su decaimiento no la dejaba ni pensar en aquella duda que doña Domitila María había
dejado con su secreto que ella savia que se lo confió a Rosita Alemán y no a ella. Su amiga la miraba
toda apesarada y la llamo, le dijo que se sentara, las dos tomaron asiento y le dijo.
- No estés triste, después del desayuno voy a revelar el secreto que cargo con dolor nuestra
hermana Domitila María, no te lo digo en privado porque me dijo que si ella moría primero se lo dijera a
las personas que hoy invitamos a desayunar y lo hizo por seguridad tuya
- No es eso Rosita Alemán y sabes perfectamente que yo adore a Domitila María, las tres nos
hemos querido como hermanas y en la realidad eso hemos sido.
Dijo Marta Joyilla.
- En pocos momentos te darás cuenta de cuánto te quiso ella y te alegraras mucho, sabrás que
descansa en la Paz del Señor.
Los invitados comenzaron a llegar fueron recibidos en la casa de la difunta por sus dos amigas, en
el patio habían preparado dos estancias una para estar y el comedor, había mucho movimiento de
personal en aquel lugar, las dos amigas se tuvieron que ayudar mutuamente para no dejar de atender a
los invitados y preparar la mesa, solamente faltaban el padre Valentín, una ficha importante de la
reunión y el Capitán Flores que sería al que le caería lava encima, aquello que le dijo Rosita Alemán en
el barco era un simple juego de niños para lo que iba a darse a conocer.
Después que doña Francisca les enseño la casa y les dio detalles e historias de ella, tomaron
asiento en el área de estar las esposas de los Liberales Sansón y Mongalo éscojirón con sus esposas
doña Francisca, el Doctor Arguello y su esposa iniciaron la conversación.
- Doctor Avilés usted que era un amigo estrecho de Domitila María, conoce algo sobre a quién le
quedara toda su fortuna, ya que ella no tenía familia, Rosita Alemán y Marta Joyilla no eran hermana de
ella y Chago legalmente no es su esposo, con confianza, usted conoce que en estos asuntos de

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herencias las leyes son muy rigurosas y no dudo que el Gobierno buscara como ponerle las manos
encima, como queda todo esto.
Pregunto el Doctor Arguello
El cronista volvió a ver a doña Francisca, ella le respondió con una mirada interrogativa, en la
realidad no sabía absolutamente nada, los otros dos Doctores le hicieron una leve sonrisa dejando la
pregunta en sus manos, insinuándole con la mirada y un leve apretón de labios, ‘’Es tu problema’’ y el
dijo.
- Lo que yo diga es lo que estoy autorizado a poder comentar, un día después de la muerte de
doña Domitila María, ella dejo un testamento que lo dicto en el año anterior, hace menos de un año.
Por eso fue que vino Rosalía Alemán de España con dos Notarios para que con el Doctor Sansón
elaboraran dicho documento, en este acto fuimos testigos don Miguel Mongalo, el padre Valentín,
aclara que como sacerdote no puede fungir como testigo, pero como el ya solicito su retiro de los
oficios sacerdotales las leyes de la Iglesia autoriza algunas actividades de ese tipo legal, mientras le
viniera orden de separación de sus Votos.
En eso interrumpió doña Mercedes de Arguello y dijo.
- Me alegra que Domitila María haya actuado con esa inteligencia y protegiera así a sus hermanas
digo yo.
- Así es doña Mercedes. Todas sus propiedades que tenía en sociedad con las mujeres de sus
trabajadores le quedan a sus socias, los bienes y medios que igualmente tenía con otros les deja ese
producto o bien, esta representaba un tercio de sus bienes, ella personalmente los entrego a sus nuevas
dueñas o sea esa parte ya no cuenta en el inventarió del testamento, a partir de esto ella especifico
nombres y apellidos, un tercio para Rosita Alemán y Marta Joyilla, el otro tercio a una persona de la que
no estoy autorizado a revelarlo y la ultima parte a doña Ángela María Pasos D´Ibarra aparte de eso se
anexo un sobre con otro testamento de otras propiedades de las que nadie se daba cuenta que están
una parte aquí en Nicaragua, otra en España, Costa Rica y otros Países, que es casi igual a la fortuna
que conocemos.
Las mujeres se tapaban la boca y abrían sus ojos hasta dar la impresión que se le iban a brotar de
sus orbitas, en especial doña Francisca al escuchar el nombre de su hija. Llegaron el padre Valentín y el
Capitán Santiago Flores, no se encontraron en el camino, el padre Valentín lo llego a traerlo a su
lancha, ya que Chago no pensaba asistir al desayuno, el padre le dijo.
- Yo me siento obligado a llevarte, no quiero que te refugies en vicios, quiero lo que tu mujer
quería que hicieras si ella moría primero y si así sucedió ahora te toca esta parte dura y tenes que
soportar, además de que no te encentras solo, nos tenes a nosotros, no quisiera tampoco que pienses
que te estoy engañando ya que en esa reunión te darás cuenta de sucesos muy dolorosos y ella
siempre confió en que los entenderías.
- Padre yo no quiero ir, voy a preparar mis cosas para salir fuera a navegar y no regresare hasta
que muera, eso es lo que quiero hacer.
- Con tu vida hace lo que quieras pero es mi obligación con tu difunta mujer es llevarte a
desayunar y después te voy a explicar lo que Domitila María me dijo que te contara.
Santiago se preparo adecuadamente y en compañía del padre se dirigieron a la casa de la difunta.
Estando todo servido y después que aquel medio padre Valentin pidió la bendición a esos alimentos, se
dispusieron a desayunar con conversaciones ligeras, seguido se trasladaron a la estancia en donde
Rosita Alemán les dijo
- Cuando Domitila María tenía 23 años, el odió que le tenían las señoras de la alta sociedad, de
asuntos de boca pasaron a ser de sangre y muerte, a esa edad en 1878 eras ser una criatura, ella eso
era y además era sola, solo nos tenía a nosotras dos, que éramos iguales, yo soy tres años mayor que las
dos…
Señalando a Marta Joyilla.
… Aquí en esta calle en venganza asesinaron a un terrateniente con su concubina, y su
custodia por una acción criminal que este ultimo cometió a la hora que tomo fuego una lancha, el
maldito tomo un tablón lo utilizo como flotador y toda aquella persona que se le acercaba el les daba
un garrotazo en la cabeza, no morían por ahogamiento. El terrateniente escondió al asesino y lo envió
lejos para que no lo mataran, a los dos años regreso y la gente de la Isla de Ometepe envió a tres
hombres a matarlos.
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 - Rosita esto que estas contando es real o quieres jugarnos una broma, discúlpame la pregunta, me
parece demasiado novelesco.
Interrumpió doña Francisca.
- Esto que les estoy contando solamente lo sabemos Santiago, Marta Joyilla, el profesor Avilés, el
padre Valentín yo en esta mesa, al profesor se lo contó su cuñado don Fernando y al padre el difunto
curita Rodrigo.
- Es cierto, después le pregunte a doña Domitila María y ella me contó los detalles, aclaro que ayer
les conté ese pasaje a doña Francisca, al Doctor y señora Arguello.
Con un gesto de asombro las damas se taparon las bacas con las palmas de la mano.
- Resulta que en esta casa estaba ubicado La Pensión El Pueblon, tres hombres de la Isla se
hospedaron, en cuanto el terrateniente Ulloa apareció los mataron a los tres con la diferencia que al
Mico el asesino le cortaron la cabeza, las damas de sociedad aprovecharon para atacar a Domitila María
y echarle la culpa, ella se defendió y probo que nada tenía que ver a el asunto y en realidad ella
presentía que un hecho de sangre se acecinaba, nada mas…
- De que se agarraron para acusarla.
Pregunto don Bayardo Arguello.
- De las influencias Doctor.
Contesto el cronista Avilés
- Jocharon a la viuda y esta tomo venganza, contrataron matones en un lugar llamado Malpaisillo
en León, y ellos, mataron a mi hermana Clotilde. Si Domitila María se quedaba con las manos cruzadas
seguirían con ella o con nosotras y ella vengo el asesinato de Clotilde, mando a matar a un joven del
Sauce de tal manera que la culpa les cayera a los asesinos de mi hermana, así sucedió, dos familias se
hicieron cargo de la venganza, ella estaba preparada para todo, bien formaba un pequeño ejército,
hubieron mujeres que mandaban a dormir a sus hijo a las aceras de la calle con la orden de protegerla,
nosotras les dábamos de comer a escondida, cuando se dio cuenta se arrecho y nos dijo cuatro
barbaridades.
- Pero Rosita cual fue el afán de seguir en ese mundo de violencia.
Pregunto el Doctor Miguel Sansón.
- Entre mas tenía Domitila María el odió de las Españolas fue creciendo, me disculpan que me
refiera así, pero aprendimos a tratarlas de esa manera a las damas de sociedad…
Las señoras presentes por su lado hicieron movimientos de sus manos dando a entender que
comprendían.
… Después de eso ya era imposible parar, Domitila se lanzo de cabeza a enriquecerse, ella decía
que entre más tuviéramos, tendríamos seguridad y respeto, según me dijo ella fue el mas gran error
que ella cometió. Nosotras éramos personas trabajadora, a las 5 de la mañana teníamos listo desayuno
para los que venían de San Carlos y la Isla de Ometepe, para eso no levantábamos a las 2 de la
madrugada, un día cada una estaba con los destazadores de cerdo desde las 11 de la noche y seguir
despierta el resto del día, no le hacíamos daño a nadie, yo nací con brazas en mí organismo, no lo niego
me eche hombres con y por gusto, cuando mire a mí hija Rosalía yo no cría que fuera mí hija, hasta que
fui a España supe que llevaba sangre de su abuela, mi Mamá…
Sonrieron y doña Francisco dijo.
- Como dice el dicho Rosita…
‘’De tal palo, tal astilla’’
… Hasta donde yo entiendo Marta Joyilla no goza de ese prestigió, ella fue siempre muy cuidadosa
en sus amoríos.
- Les voy a contar un comentario que me hizo don Fernando, escuchen doña Francisca, doña
Mercedes, cuñada y sobrina, estábamos en esta casa tomando tragos, el Conde D´Ibarra se disculpo
por tener que acompañar a las tres chavalas a ver una propiedad que don Carlos le ofreció vender a
ella, se marcharon y don Fernando me dijo.
‘’Avilés tú que trabajas con Historiadores y un buen día lo serás, registra esa picardía social de
1885 en Granada, Nicaragua.
Un Conde Español camina por las calles de la ciudad de Granada con dos Putas, una reprimida, la
otra liberada y una mujer que ordeno una matancina sangrienta en León que puso el País al borde de
la guerra civil.
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 Que se diera cuenta mí amigo, seguro que perdemos la amistad inmediatamente’’.
Todos rieron incluyendo ellas dos y el padre Valentín.
- Así era don Fernando, Domitila María mucho lo quiso, verdad Marta Joyilla.
- Si, a mí me decía que si no fuéramos como hermanas de Domitila María, alquilara una casa a ella
y nos aria chanchadales, que de esa samotana las dos saldríamos preñadas.
Dijo Marta Joyilla, reían y Rosita Alemán retomo el hilo de su narración.
- Fueron cuatro años de zozobra, pero lo que sobra en esta vida son los problemas, algunos los
cusamos pero otros nos los dan otras personas, con o sin malas intenciones, simplemente por no saber
valorar las consecuencias y tienen puntería para provocarlos cuando menos los necesita uno, resulta
que nuestro amigo Chago se embramo con una jodida y se le perdió a Domitila María, ella para darle
celos comenzó a simular que había soltado la perra y que se echaba a cualquier extranjero bonito que
pasara frente a ella, hasta después nos dimos cuenta que nunca llego a los oídos de Santiago, porque
Marta Joyilla daba órdenes de no comentarle nada a él.
- Es la fecha y que me perdone mi hermana que yo juraba que había soltado la perra, aquí
amanecían 2, 3 y hasta 4 extranjeros, y les decía a todos de que no hicieran ningún comentarios a
Santiago, la gente la quería y me hacían caso.
Dijo Marta Joyilla. Rosita Alemán continúo.
- Cuando yo Salí preñada la mamita Domitila nos dijo…
‘’Se fija mí hija, eso le pasa por andar jugando con fuego, aprendas ustedes dos’’.
… Y eso es muy cierto, resulta que en este juego de darle celos a Santiago termino acostándose
con el Conde, al mes y medió ya sentía los achaque de mujer preñada…
Para Santiago Flores fue suficiente, volvió a sentir que estaba a la deriva en medió lago y la
oscuridad se lo tragaba y no pudo contener las lágrimas que inmediatamente comenzaron a fluir de sus
ojos y con la cara inclinada continuó escuchando.
… Se refugió en la Isla de Solentiname, para ocultar su embarazo, desde un inició tenía terror, decía
que a su hija se la iban a matar, el padre Rodrigo, el Conde y yo, que no le dijimos, nadie la saco de
ocultar su embarazo y su fruto. Parió un Niño lindo, ese niño es el esposo de doña Ángela María.
Aquellas mujeres quedaron ciegas, no miraban nada, doña Francisca y Marta Joyilla sentían que
los músculos se le endurecían y apretaban la mandíbula con tal fuerza como el puño de un boxeador y
de sus ojos comenzaron a salir lagrimas, era un llanto mudo, el Capitán Santiago Flores quedo
petrificado, con el mismo dolor que cuando ella murió. Marta Joyilla se levanto y se dirigió a la mesa
donde desayunaron, Rosita la siguió y se sentaron tomándose las dos manos, doña Mercedes se le
acerco a doña Francisca inclinándole la cabeza se la a recostó al pecho, las otras damas miraban a sus
maridos como preguntándose, como no pudieron confiar en ellas y no hacerlas pasar lo que estaban
sintiendo, ocultarles que todo había sucedido por que una mujer que consideran aun estando muerta
su amiga igualmente, sacrifico su maternidad para proteger a su hijo, prácticamente le arrancaron a su
hijo de los brazos, que seguramente la propia clase de ellas lo matarían, se imaginaban como solo una
Madre lo puede ver y sentir el dolor de aquella mujer y aguantarlo por casi cuarenta años, una vida
completa.
El Capitán Flores marcho, el padre Valentín y el cronista Avilés, intentaron detenerlo pero el
rehusó y salió de la casa para nunca volver a entrar en ella, estando vivo, después de esa mañana solo
el padre Valentín tuvo contacto ya que el se preocupo por visitarlo diariamente, llevarle comida que le
enviaban sus amigas pero el padre se limitaba a decirle que el le llevaba y cuando lo encontraba
borracho se la dejaba con algún marinero.
En el último día de la novena doña Francisca invito a Desayunar en su casa a los mismos invitados
de aquella mañana en que fue revelado el secreto de doña Domitila María, quedaba claro del objetivo
de la reunión, el único que no asistiría sería el Capitán Santiago Flores, que para Rosita Alemán y Marta
Joyilla era doloroso darse cuenta en el estado en que había caído, le mandaban recado y les devolvía
ofensas acompañadas de amenazas.
Todos asistieron y como Valeria andaba con su nuevo hombre fuera de Granada y el hijo de doña
Francisca en la hacienda Panaloya, nadie más los acompañaría. Ellas sabían que les lloverían preguntas
pero iban preparadas, en días anteriores se habían estado reuniendo con el padre Valentín y el cronista
Avilés, pero la urgencia de ellas no era responder o contar como sucedieron las cosas, si no que en
poco tiempo llegarían a Nicaragua el matrimonio D´Ibarra Pasos y sus preocupaciones radicaban en
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que no tenían ni idea de la aptitud de la pareja, para con la novedad de que la difunta era la Madre del
Conde don Guillermo D´Ibarra Miranda.
En determinado momento de la conversación de temas generales y del mal estado anímico del
Capitán Flores, Rosita Alemán se adelanto a encauzar la reunión directamente al asunto que tratarían,
diciendo.
- La idea de Domitila María me parece como si ella presintiera que moriría primero que nosotras,
cuando yo vine de España, siguió la costumbre que tuvimos todo el tiempo, aunque fuese en una de las
comidas la asíamos con ella o sea alguna de nosotras la acompañaba a comer, conversábamos sobre
los negocios, familia, dificultades de alguna persona o algún proyecto para ayudar, como el
embarcadero de la Isla de Ometepe, nosotras tres lo platicamos durante almorzábamos y se hizo…
El ambiente y los ánimos no se habían encendido con preguntas, era el momento de sacar lo más
posible para tener control del círculo y así agilizar la salida de las dos de algo que corría el riesgo en caer
en un interés morboso sobre la vida de doña Domitila María.
… Cuando ella decía algo no lo olvidaba, en la última conversación que nosotras sostuvimos con
ella, nos dijo.
´´ Entregare las propiedades a sus dueños mis amigas y socias, ya firme el testamento hace un
año y no quiero que algo salga mal, yo prefiero perder y no salir con deuda, ustedes saben cuánto
sacrificio, desvelo y dolor me costó salir de León, casi pierdo hasta la amistad de gente que yo mucho
estimo, ustedes se estuvieran riendo aun de las caras que yo mire en los Doctores Sansón y Mongalo,
era algo deprimente, estaban por llorar, ya los había sacado del asunto y tuve que andarlos
enamorando para recuperar su confianza nuevamente, en ese negoció llegue al extremo que casi me
acuesto con el General Bodan para adquirir las tierras de Carazo y el Volcán Mombacho y salir de León,
si me lo hubiera pedido se lo doy, si me muero primero se van a dar cuenta lo que va a pasar, lo que ese
hombre armo en León es de padre y señor nuestro, me la jugué, Bodan sabía que estaba ganando
mucho mas, pero también no era baboso, las ganancias que el saco, hasta sus bisnietos le sacarían
provecho…
Con las miradas que cruzaron las parejas Libero-Conservador se quedaba claro que no era
solamente aquel secreto el que no les contaron, había más, doña Francisca reía por dentro y se decía.
- Realmente que mujer terrible fue Domitila María, aun muerta sigue dando guerra. Estas mujeres
ahora sí que se van arrechar, pobrecitos deben de estar deseando no haberla conocido nunca.
- Discúlpame Risita...
Interrumpió Marta Joyilla, doña Francisca no separaba los ojos de aquellas dos almas
desconsoladas que deseaban que nunca tuvieran que salir de esa casa y encontrarse a solas con sus
mujeres, ellos las habían visto llorar, cuando les reclamaron la falta de confianza, vieron el dolor que
sintieron por no haber sido solidaría con aquella mujer ahora difunta, sintieron las noches de desvelo
que han pasado producto a la revelación de ese secreto tan cruel para una mujer y sus repuesta era,
que todavía habían cosas ocultas. Eso no tenía perdón de Dios
… como si Domitila María presentía que estos encuentros se darían también después de su muerte
que yo tengo en mi casa tres baúles de oro que fueron los resultados de esas negociaciones con el
General Bodan, ella me dijo.
´´ Los doctores Sansón y Mongalo bien saben cómo fue esta negociación…
Doña Francisca se tuvo que tapar la cara con las palmas de la mano, meneo la cabeza simulando
dolores en la nuca y mil muecas más, todo para no tirarse al vivo suelo y reírse de aquellos
encubridores. De un momento a otro ella también se percato de que esas mujeres habían llegado con
el arma desenfundada igual que el ‘’compadre mala paga’’ y sintió temor que en medio de todo saliera
a relucir los amoríos con el padre Valentín y que con lujo de detalles contaran como la quemaba el
padre. Por otro lado ellas dos comprendieron que los ánimos se calentaban y tendrían que mantener la
delantera.
… Cuando ellos se reunieron con el General Bodan y los Coroneles en la casa de la playa…
Soportar tanta traición tenía que tener su límite, pero aun así esas dos esposas supieron guardar la
cordura y una de ellas le pidió a doña Francisca usar el servicio higiénico y la otra se ofreció
acompañarla. Los esposos encubridores y traidores de la ley del matrimonio, muy cortésmente le
ayudaron a levantase tomándolas del brazo y las encaminaron en dirección del local que usarían, de
regreso don Roberto Mongalo le dijo al otro.
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 - Y la Hija de la Gran P… nos juro que primero les sacaban los ojos y nadie sabría de que nos
reunimos con esos militares mierdas, ahora si nos matan a cachimbazos limpios.
- Cuando puse la mano en el brazo de Esmeralda sentí que su piel hervía, ya se cago en nosotros
esta jodida, riamos para disimular.
Dijo don Miguel Sansón.
Ese momento doña Francisca también lo aprovecho y dando una excusa corrió a su habitación se
tapo la boca con una almohada y comenzó a reírse con todo el gusto, nuevamente le salvo el no estar
muy maquillada, por lo que terminaría toda manchada de colorete y desgreñada como una cabaretera,
similar cuando doña Domitila María le contó la anécdota de Jesús Cochino. Cuando se reagruparon
Marta Joyilla prosiguió.
- Ellos son hombres honorable, honestos, honrados y aman a sus esposas, por eso si algo sale mal
quiero que estos tres cofres de oro se los entregues a doña Francisca y al padre Valentín en presencia
de ellos, para que si están de acuerdo le ayuden con sus esposas a impulsar obras que beneficien a
pobres que estén pasando alguna necesidad, lo que ellos 6 crean que sea necesario, casas, alimento,
herramientas de trabajo, lo que sea para salir adelante con sus familias ´´.
Al sentir Marta Joyilla que el ambiente se había descongestionado y las arrechuras interna de
aquellas esposas dolidas por la traición de sus maridos disminuyo al nivel de merecer simple reclamo,
dio por cumplido el encargo de doña Domitila María de recordarles ese pasaje de sus vidas delante de
sus mujeres, por haberle faltado el respeto de poner en dudas su palabra, cosa que ni Bodan hizo y eso
que el recordaría el resto de sus días como esa mujer jodida le hizo faltar al juramento de fidelidad dado
al General Zelaya por su parte.
- Resulta que todos pueden creer que Domitila María era una mujer dura, sin sentimientos, ni dolor
y cruel, eso luce a las personas que no la conocieron, también las que la conocimos nos hacemos la
idea de que fue perfecta, caritativa, noble y fiel a sus amistades, nosotras aprendimos a leer y escribir,
sumar, restar, multiplicar, por ella, cuando regresaba de esta casa nos daba clases, la niña Ángela María
le daba papel y lápiz para nosotras, no tuvimos mas familia que la mamita Domitila y ella, pero era
también una mujer frágil y delicada como cualquier otra. Lo último que hable con ella me hizo un
resumen de su vida y especialmente en el momento en que ella creyó que se paro, me dijo.
‘’Cuando murió mí mamita Domitila vivíamos tranquilas, trabajábamos y en lo posible le
ayudábamos al necesitado, no teníamos mayores ambiciones económicas y mira hasta donde hemos
llegado, pero soy infeliz. Te acordas que cuando miraba al terrateniente Ulloa, les decía que al verlo
sentía olor a flores, espelma e inciensa, pues eso que yo olía no eran de él, eran de mi que salía ese olor,
yo era la que se estaba muriendo.
Don Carlos tenía razón en decirme que no me confiara en el pasado, logramos sobrevivir pero
cuando vuelvo a ver hacia atrás hubiera preferido seguir siendo pobre, vendiendo comida y haciendo
postres para los ricos, pero ser feliz con mi hijo, así como lo fueron ustedes gracia a Dios’’
- Lo que yo no entiendo es que ella muy bien pudo estar visitando a su hijo, por parte de los dos
tenían suficiente recursos, no entiendo eso.
Opino el Doctor Arguello, a lo que Rosita Alemán respondió.
- Los aristócratas Granadinos tienen muchos ojos en España, me disculpa doña Francisca y doña
Mercedes, comenzando con don Carlos, que no hubiera hecho nada en contra de ella directamente,
pero con facilidad se le podría soltar la lengua, la clase se lleva en la sangre y nosotras no somos de la
clase de ustedes, por muy bien que me vista seguiré siendo hasta la muerte Puta o rufiana.
- Solo tonteras sos Rosita.
Dijo doña Francisca, todos sonrieron y Rosita continúo.
- Ella quiso ir como visitante cuando enfermo el Conde, en ese momento era más importante para
ella preparar a la futura esposa de su hijo a ir por un enfermo que la muerte lo cobijaba, siguiendo con
lo que ella me dijo…
‘’Todo lo que hice fue correcto, ustedes creían que estaba loca, pero revisando mi vida si por
venganza u odio me hubieran matado a mi hijo, fuera infeliz, tal vez existió otra alternativa, esa era la
segura y cual fue mí error, por ese miedo pararme y no supe aprender el consejo principal que me
heredaron mí mamita Domitila y la niña Ángela María, cuando ellas dos me dijeron cada una por su
lado, no te pares por nada, ni por nadie, ni por bienes, riqueza, hombre, mi mamita Domitila el día que
murió me dijo.
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 ´´ yo estoy de acuerdo con el consejo que te dio la niña Ángela María… mire mí hija parí tú hijo y
sea feliz no importa sea niña o niño Y no les hice caso y me pare, ahora que voy a ser abuela soy una
mujer infeliz.
.… Ella lloraba, yo me le acerque para abrazarla y secarle la cara, no lloraba como nosotras, tenía
un llanto reprimido, en ese momento llego el padre Valentín con Marta Joyilla quien inmediatamente
nos abrazó. Así estuvimos buen rato, ya un poco calmada nos enseño a los tres un secreto de familia,
este era una marca, un lunar de sombra detrás de la oreja izquierda, nos dijo
‘’No Quiero que olvide esta marca familiar de las Domitila Miranda, criadas de casa – hacienda
desde el siglo XVII’’.
- Solo chochadas sos Domitila María, nadie está muriendo para recordarla u olvidarla, te voy a
prepara un cocimiento de hojas de Naranjo Agrio con de Lechugas.
Ella estaba perturbada a punto de revelar su secreto, se percato de que estaban con nosotras
Marta Joyilla y el padre Valentín y tuvo que maniobrar diciendo,.
´´ Solo Dios sabe cuando le toca la hora a una persona, para eso hay que estar listo física y
espiritualmente, no dejar cuentas pendientes, ni malos sabores en las personas que mas quiso y como
buen cristiano ponerse en las manos de nuestro Señor Jesucristo ´´.
- Así se salió del atolladero, verdad padre.
- Si, así fue.
Contesto el padre Valentín.
- A como dice Marta Joyilla posiblemente ella presentía su final, el asunto es que ella trato de
prepararnos y se va a llevar una de nosotras dos porque ella decía.
‘’Ustedes tienen que mimarme, si yo muero primero tendría que escoger a cual me llevo, si doña
Mercedes se llevo a mí Mamá y mí niña Ángela María a mí mamita Domitila, la que mejor se porte me la
llevo’’.
- Después de eso nos dijo que había firmado un testamento, que si se moría ella nos dejaba
seguras a nosotras y familias para el resto de nuestros días, pero no advirtió y principalmente, delante
de ellos me dijo.
‘’Rosita yo entregue mi vida, por lo que amo…
Refiriéndose a su hijo.
… Si algún día me le sucede algo a Marta Joyilla, Dios no lo permita, me vas a ver aun estando
muerta te salgo y vengo a cachimbiarte, bien sabes que aparte de mí mayor amor, es para Marta Joyilla,
fue por eso que no quise que supiera mi secreto, en estos casos entre menos sepas estarás seguro,
nunca la quise involucrar en esos asuntos de muerte, yo no miento’’.
- Con relación al testamento nosotras lo que queda claro es esperar a su hijo y hasta donde yo
conozco, su nieto viene con ellos.
Capitulo XXXI
Eran las nueve de la mañana cuando el padre Valentín mando a llamar a Rosita Alemán y Marta Joyilla,
la noticia era lamentable, el Capitán Santiago Flores había muerto, en sus últimos días llevo una vida en
total abandono, le salió cierto lo de que el considero una chifleta.
‘’Se lo digo a Pedro para que lo entienda Juan’’
En el populacho se comentaba, que la difunta lo quiso tanto que fue al primero que jalo desde
abajo para llevárselo.
Aquel sacerdote casi en retiro llegaba todos los días a dejarle un porta viandas de alimentos
suficiente para cinco personas y una pichinga de guaro pelón, que le enviaban sus dos amigas, el las
excusaba diciéndole de que esa comida era preparada en la Iglesia, de lo contrarío no la recibiría, sobre
el guaro le inventaba que se lo enviaba algún amigos de la calle El Enredo. Sus recriminaciones de no
estar a la par de ella en el momento de una decisión tan difícil de su vida, solamente el licor podría
dejarlo dormir o desmayarlo y no pensar nada que fuera sobre ella y ese año en el que el sin percatarse
de las consecuencias le lanzaba su vida a la desnaturalización y un futuro vació sin su hijo. Una noche el
enrumbó su lancha a la anchura del medió lago, durmió, despertó y encontró auxilió en su pichinga de
guaro pelón, se lo amarro en la muñeca izquierda, aquellas palabras que dijo al dar la orden de fijar
bien la caja.
‘’Si se hunde la lancha, será con Domitila María y yo’’

142 | P á g i n a
 Le martillaba su alma, volvía a pensar en no poder preñarla, ponía en marcha la lancha sin darse
cuenta y reiniciaba su navegación, el sentía que estaba muy cerca de Granada, se volvía a quedar
dormido, dejando la lancha a la deriva, esperando encontrar lo que no había visto.
- Yo la ame y tanto que no me importa que alcanzara sus deseos sin mí.
- Ella te quiso y mucho, también sufrió por eso, ella quiso siempre parirte un hijo, ella lo quería de
ti, así fue el amor que sentía.
Le dijo el padre Valentín.
Encontraron su embarcación a la deriva y muerto con su pichinga de guaro amarrada de la
muñeca izquierda. Cuando llego Marta Joyilla y Rosita Alemán, esperaron que la lancha atracara,
mientras Marta Joyilla llamo a Manuel Ugarte y le indico.
- Decile al maestro Jacinto de que me prepare un buen funeral para mí amigo, sin reservas, ni
limite y que todo será en la calle El Desenredo a puertas abiertas, continuare las tradiciones que
Domitila María no haya guardado.
Así murió el capitán Flores, sus amigas le hicieron los honores que le correspondían, fue el hombre
que su amiga amo toda su vida y de eso no había dudas, ellas lo quisieron también y aun cuando ella
murió. Su vela fue en la casa de doña Domitila María, que a la vez era la herencia que ella le había
dejado, al mismo tiempo la difunta de esa manera se cobraba en llevarse al mejor portado para ella o tal
vez por el amor que sintió por su ‘’Querido Chago’’, el Capitán Santiago Flores.
En una ocasión le dijo al padre Valentín.
- Cuando yo me encabrone, siempre la recordaba, sabe usted padre que nuestro amor entre
palmadas y malos tratos se nos alimentaba y nos llenaba, éramos muy jóvenes, me las di de ‘’Gallito de
Patio’’ y eso la hizo sufrir, si ella me lo hubiera dicho, yo entendería y ahora es a mí al que le duele, con
solo pensar cuánto dolor le cause por no saber que era yo el que no podía preñarla.
- Pero hijo ese no era el caso, ella quiso todo el tiempo cuidar de que a su hijo no le hicieran algún
daño y el confesártelo serían de doble dolor para ti, te darías cuentas que esos niños no son tuyos y
segundo pondría en riesgo la vida del propio suyo, de lo contrarió su sacrificio por el no tendría ningún
sentido. Así lo entiendo yo, ten cuidado en esas valoraciones.
Seis meses después de la muerte de doña Domitila María, de una recaída en cama de tres días en
su casa murió Rosita Alemán, fueron dos golpes seguidos y el caso no era solamente eso, moría la
última testigo de que ese hombre era hijo de su amiga, de que otra forma se podría demostrar. Los
testigos de su testamento eran simplemente eso, ellos no aportar o ampliar mayores pruebas. El
Gobierno Conservador y sus ambiciones económica, en confabulación con miembros del clero
pensaron echar mano en la fortuna por carecer de heredero, sentían seguridad en incluirla en el
inventarió público y personal, por carecer de pruebas de que el conde D´Ibarra fuese hijo legitimo. Las
aristocráticas Granadinas iniciaban a vivir las mismas zozobras de Abuelas y Madres, se preguntaban
como aquella maldita podría ser Madre de un noble Español, lo de la Pasos era correcto, una mujer
preciosa y de clase social, pero que el conde sea hijo de esa hija de la tal por cual, eso si que sería la
mayor burla y vulgaridad que se podría dar en la ciudad.
En la realidad según comentarios que le hacían los Doctore Mongalo y Sansón, ellos con un buen
argumento, que de seguro lo tenían se podría anular el testamento y el mayor problema es de que el
sobre que dejo por aparte no se podría sacar por estar lacrado el sobre del testamento.
Nueve meses después de la muerte de doña Domitila María, días antes de que la familia D´Ibarra
Pasos llegara a Granada acompañados de Rosalía, sus hermanos y hermanas, los hijo e hijas de Marta
Joyilla y los notarios y el nuevo administrador Héctor de los bienes de las familias Alemán y Rosales.
Rosita Alemán repentinamente murió.
Con un fuerte dolor en el pecho y la espalda, esforzándose por respirar a tal grado que los labios y
las uñas tomaron color violetas, no quiso que el doctor Luís Sánchez la revisara y pudiera dar un
dictamen médico de la causa que le provocaba ese malestar, con toda seguridad el hubiera detectado
la magnitud de la afección cardiaca que estaba sufriendo. Fue velada durante dos días, dando así
chanceé que su familia la pudiera enterrar, no fue posible, de tal manera la llegada estaba recargada de
dolor y tristeza. Irónicamente aun cuando un gran número de los asistentes fueron en su mayoría de
Putas acompañadas de sus chivos, otra solas e independientes que bajaran de los poblados costeros,
poblados y ciudades cercanas y que su velorio duro dos noches especialmente, no se armo la
samotana por la noche como en la gran vela de doña Domitila María. Hubo apuestas referentes a lo
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que pasaría en su primera noche, solamente murmullos de las calles el Enredo y El Desenredo
provocados por tanta gente hablando al mismo tiempo, reunida durante toda la noche hasta el
amanecer. Al día siguiente las apuestas fueron dobladas, algo impresionante, mucho dinero corrió,
hasta que los apostadores cayeron a la cuenta de que la contra parte la pusieron todas las putas
reunidas en la ciudad. Una operación económica puntual y bien calculada todo fue coordinado por el
‘’Club de Putas Cueros’’, esa fue su venganza por aquel martirio que las dejo lisiadas ya que cuando se
los recuerdan les da dolores en sus vaginas, acompañados de corrientes de aire calientes y heladas en
el cuerpo, dolores en la nuca, peores que los hombres cuando escuchaban el nombre de Marta
Jamela. Hubo actividad sexual, muy discretas y ordenadas, la despedida de su jefa no podría ser
empañarse por falta de un gesto cálido, cariño y respeto.
Con buen tiempo y con comodidad la última noche de vela fue de gran concurrencia, no era para
menos, había muerto la mano derecha de doña Domitila María para los asuntos ilícitos, Putales,
cantinas, casas de juego y la fundadora de la prime ‘’Casa de citas’’ que se recuerda en la ciudad.
Recibió los honores correspondientes por su hermana de crianza y de vivencias Marta Joyilla, sus
amistades aristócratas públicas y las de los saludos de largo por ser las mismas pero de distintas clases,
como en tiempos de su Abuela y Mamá, pero con los iguales gustos, amistades de todo tipo y
subalternas de todas las edades y especialidades, muy especialmente de los pobladores de las calles El
Enredo y El Desenredo, incluyendo las aledañas y los infaltables borrachos jodidos.
Fue enterrada a la par de doña Domitila María, en donde para entonces el maestro Gabriel
Cárcache, por ordenes de ellas dos le habían construido una pequeña capillita preparada para tres
difuntas y en la entrada ya estando muertas la tres se leía.
Forastero
Si en la ciudad de Granada
Encuentras alegría.
Placeres y paz,
Quiere decir que hemos vuelto a nacer,
Te pedimos que riegues la voz.
Marta Joyilla Domitila María Rosita Alemán
1925 1920 1921
En cuanto recibieron la noticia en España de la muerte de doña Domitila María, fue guardado el
luto y celebrados los respectivos actos religiosos que corresponden. Sucedió que el Conde mostró cierta
tristeza a tal grado que doña Ángela María se alarmo.
- Porque lo noto a usted esposo algo distante y triste, siento como si algo en la vida no le es
conforme, sé que no es preocupación de mi embarazo, todo a partir que recibimos la mala noticia de la
muerte de mi amiga que le tuve tanto cariño, respeto y agradecimiento, por ser ella la que me dio el
empuje que me hacía falta para luchar por su amor.
- El dolor que ciento no es de ahora, me ha acompañado toda mi vida y hasta hoy me doy cuenta
que el perder a mí Madre me dolería tanto, con esta tristeza que me ahoga, eso me a hecho estar
cargando en este estado de ánimo, usted me a ayudado tanto como Rosalía, quien me acompaño y me
explicaba lo duro que ha sido para ella haberse separado de mi, siendo yo un recién nacido al cuido de
mi Padre y una niña de 10 años.
Doña Ángela María no entendía a que se refería, dado que ella tenía entendido que su suegra
había muerto, le abrazo con fuerza y como una iluminación recordó aquella repuesta que años atrás le
había dado doña Domitila María, le tomo la oreja izquierda y miró el lunar de sombra, se lo beso
pensando.
‘’Nunca lo olvides, esa es la única manera que yo sé responderte, para proteger mi mayor amor en
la vida’’.
Comenzó a llorar, su esposo entendió que ella había encontrado la repuesta de una pregunta que
seguramente se la había hecho a su Madre y esa revelación estaba detrás de la oreja izquierda, la tomó
con fuerza y lloraron juntos, en ese momento llego a casa Rosalía Alemán, ella se disculpo con doña
Ángela María por no haberle comentado ese secreto y comenzaron a conversar sobre la vida de doña
Domitila María.

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 - Yo tenía diez años cuando ella con mi Mamá y el padre Rodrigo mi dijeron que tendría que
acompañar al niño y cuidarlo, que nadie tenía que darse cuenta quien era su Mamá, solamente el
Conde tenía autorización de hablarle sobre su Madre, que también el me daría educación para que yo
le ayudara a educarlo y conociera las costumbres de nuestra tierra, a esa edad cualquier niña de mis
tiempos sabía hasta cocinar. Fue de esa forma que vine a parar en España.
- Como ella entendió nuestro amor.
Pregunto doña Ángela María.
- El conde siempre me respondió…
‘’No se pero ella se mantiene al tanto de lo que sucede alrededor de su hijo, en un baúl que
guarda muy celosamente en su habitación tiene cuadros dibujados, que para ser reconocidos por su
hijo me ha hecho firmarlos en la parte trasero y sellarlos, lo importante es de que tú has sido su ficha
principal, sin ti su dolor hubiera sido mayor, recuerdo cuando eras una niña de apenas diez años y
dijiste que ibas a cuidar al Pipito’’.
… Nosotras siempre la vimos como una Madre, la mía me decía que Domitila María era la única
persona que se podría considerar como algo especial, era un respeto sin lugar a dudas, represento mas
que una Mamá y obedecimos como hijos o hijas, no había diferencias, si no fuera sido de esa forma su
hijo tal vez ya estuviera muerto y por eso lo oculto, ese es amor, desprenderse de la maternidad para
proteger a su hijo, que sin derechos le digo mi niño.
- No Nana Rosalía, despreocúpese de eso, tu sabe que yo mucho te quiero, tal vez no como una
Madre pero si mas que una hermana mayor, eres algo especial, además que mi Padre nunca me
mantuvo en el engaño sobre este asunto y hace muchos años que estoy claro de eso, es mas en el
cuarto de mi Padre, que solo yo entraba hay un retrato pintado al óleo de ella, firmado por una pintora
Nicaragüense T. Bravo...
La misma estudiosa T. Bravo que graciosamente le puso de nombre a las vibraciones que
producían los aplausos y daban la impresión que a la ciudad entraba una inmensa ola y le llamo.
‘’Lagomoto’’, por su similitud con los Maremotos.
Eso agilizo el viaje y en cuanto doña Ángela María se sintió recuperada del parto, comenzaron los
preparativos para el traslado a Granada, Nicaragua. Enviaban de todo tipo de utensilios y muebles que
fuesen necesarios, de eso se hacía cargo Rosalía y con las escogencias la señora o Condesa.
Seis meses después del nacimiento del niño zarparon rumbo a Nicaragua, más por conocer el
mundo de doña Domitila María, que por la herencia, ya que Rosalía se hacía acompañar de los dos
notarios, con los documentos del testamento, debidamente registrados en España y con los soportes
legales de la Cancillería de ese País. La misión de ellos era de conocimiento de la pareja, no se
inmiscuyeron en el asunto, sus planes primarios eran otros y se lo llevaban bien guardado.
La llegada de ellos cinco días después de haber sido enterrada Rosita Alemán, fue de conmoción y
habría que revivir los momentos dolorosos de su muerte y enfrentarse nuevamente a la tristeza y el
dolor de seres tan queridos como lo eran sus hijos e hijas, cuando ellos entraron a su casa la calle entere
sintió pesar por aquella familia, que a su salida hacía España fue motivo de alegría en esa calle El
Desenredo, Marta Joyilla estando dentro de la casa les dijo.
- Ustedes saben cuánto he sufrido con las pérdidas de mis dos hermanas, pero quisiera decirles lo
que Rosita Alemán y Domitila María les hubieran dicho a mis hijos, vengan todos juntémonos en un
solo abrazo, fuerte, recordémoslas y digamos, en la calle El Desenredo todos somos familia.
Cuando ellos llegaron a Granada, la alta sociedad se maravillo con aquella pareja y su hijo, doña
Ángela María era más perfecto para sus vistas, su elegancia, porte y belleza eran sin igual.
- Hay mujeres que les asienta el parir, pero esta mujer sobrepasa lo natural, me la he topado en
varias ocasiones y cada vez que la miro, veo en ella mayor perfección, la he tenido cerca y le busco
defecto, no tiene ninguno, a mi parecer.
Dijo la hija mayor de doña Sulunga Ubau a las aristócratas en su nido de odio y envidia, ya que
ella había heredado de su Madre el ser directa y mal hablada, además de ser mayor que ellas.
- Cree usted doña Sulunga, que esa belleza de hombre sea hijo de aquella maldita que se esta
quemando en el infierno.
Pregunto una de ellas. El silenció era total esperando una repuesta negativa de ella y sembrando
esperanzas de que esos comentarios era una mentira para sembrar la zozobra en ellas y hacerlas pasar
ese mal momento.
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 - Les voy a decir algo, yo le miro a ese hombre un cierto parecido con aquella diabla, sus labios,
conocí con mi Mamá al Conde Padre de el por Fernando Pasos y el era de labios finos, los de este,
aunque son finos, a la vez los triplican, su voz es fuerte, su pelo y ojos completamente negros y lo de su
Papá eran castaño y ojos azules, si tuviera una marca con que probarlo yo diría, que en realidad es de
esa y si eso fuera así, hasta ahora entiendo el por qué a esa mujer no le daba pesar cualquier venganza
que ejecutara y denle gracias a Dios de que nunca las tomo en cuenta porque de haberlo hecho,
estuvieran muertas, arrancarle de los brazos un hijo a una mujer recién parida por temor a que se lo
maten, saber que está vivo y no poder abrazarlo, besarlo por protegerlo y con el poder económico que
tenía, era para volverle a pegar fuego a la ciudad con todas y nosotras en ella.
Aquellos corazones volvieron a acelerarse y las dudas aumentaron y mientras no se defina ese
asunto los fantasmas de doña Domitila María volverían a asustarles sus sueños de grandeza.
- Como podrían probar que una marca que tiene el es idéntica a de la maldita, si esa Hija de P… ya
se la hartaron los gusanos, eso lo miro como imposible, dicen que andan dos notarios Españoles con
ellos y que traen documentos que prueban que esa belleza es legitimo hijo de esa Puta desgraciada.
Dijo una de las presentes, abriéndose más su herida en el alma...
Ya se había regado el comentario que el Conde era hijo de doña Domitila María Miranda, no
podían ponerlo en dudas por el simple hecho de que el hacerlo significaba levantar un falso en contra
de una de las familias más respetadas de la ciudad y el País, los Pasos.
‘’Cuando el río suena, piedras trae’’.
Les decía Sulunga Ubau hija, en todo caso a ella le daba lo mismo sea o no.
Esa zozobra fue la dolorosa que ellas hubieran vivido, con solo pensar que fue Madre de un Conde
legitimo del linaje Española y Francesa, asustaba el espíritu de ellas, sin motivo como nunca lo tuvieron
contra ella, esperaban que con la muerte de Rosita Alemán el silenció llegaba y las aguas retomaran su
curso, que por derechos divinos les correspondían.
El señor obispo se persono antes de ser leído el Testamento de doña Domitila María, invitado por
el juez, igualmente estaban presente abogados del Gobierno, listos para solicitar la anulación del
documento y con derechos de ley prohibir la lectura del mismo.
Hacía cierto tiempo que el obispo había perdido contacto con el padre Valentín ya que este se le
escondía o siempre a igual como con el padre Rodrigo encontraba una excusa para no tener que
enfrentarse con él. La insistencia del obispo era que le entregara el libro que da Fe que algún recién
Nacido fue bautizada en esa fecha en la Iglesia de Guadalupe.
Sería leído el testamento en la casa de la Familia Pasos Arellano, estaban todos los involucrados en
el y los testigos, el juez ordeno presentar los documentos que acredite que son los custodios del
documento en cuestión.
Abogado y notarios las presentaron, prosiguieron a la documentación de inscripción del
testamento en donde se describe el sello de lacra que lo protege de no ser abierto y el sello lacrado de
ellos y de la Notaría de la República. Hasta ese momento todo estaba en completo orden, las
aristócratas y el populacho tenían en el lugar sus respectivos enlaces que los mantenían al tanto de
cómo se desarrollaba el proceso, eran ida y regreso de los mensajeros.
En las dos clases sociales se vivía una situación de extrema tensión, el populacho por su lado
estaban confiados de que la última voluntad de doña Domitila María sería respetada, mientras las altas
esferas sociales y el Gobierno, cruzaban los dedos, para que el asunto saliera a favor de ellos,
nuevamente sus ambiciones económicas imaginándose cayéndole encima a la vasta fortuna de la
difunta, igual cuando en 1854 -55, se imaginaron sus abuelos repartirse las propiedades de los
derrotados Liberales con fuerzas extranjeras fieles a ellos y ahora estos nuevos agentes de la traición y
el robo en la misma campaña sin tomar en cuenta las graves consecuencias que esto acarreo y en el
momento acarrearía al País por la reacción de la gente en contra de un robo tan descarado.
- Señor Juez, me permite hacer una pregunta.
- Si señor obispo, proceda.
Contesto el Juez.
- Yo en estos asuntos soy ignorante, pero si me invito a esta lectura me parece a mi es para dar fe
de que lo actuado fue lo legal y correcto, por eso quisiera saber que si la señora Domitila Maria hasta
donde yo entiendo no tenía familia por lo tanto no pueden existir herederos, corríjame si estoy
equivocado, disculpe mi desconocimiento en estos asuntos de ley.
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 Con esa pregunta se identifico las intenciones que tuvieron al invitar al obispo y eran sembrar la
duda sobre la valides del documento y abrirle el camino al abogado del Gobierno para solicitar la
anulación del mismo.
- Señor obispo para llegar a ese punto que usted considera por no conocer bien hay que acreditar
a los facultativos que solicitan la lectura y que lo escrito en el documento tome cuerpo legal para su
ejecución, integralmente como fue redactado y firmado por la difunta y satisfaga a sus testigos y
notariado correctamente.
- Señor Juez puede usted proceder a revisar los sellos por favor, para así continuar con el siguiente
paso de ley.
Mociono Rosalía como representante legal de una parte de los citados a la lectura del testamento,
con certificación del Estado de España para ejercer tal ejercicio.
El Juez le clavo una mirada como si deseara partirla en dos, se miro en la obligación de cumplir
con su deber y procedió a revisarlos los tres tenían dos sellos idénticos y dos de ellos con uno de mas
que correspondían a sus inscripciones en España. Procedieron abrir los tres sobres en su interior habían
dos sobres mas igualmente lacrados y enumerados, uno hoja suelta en donde se detallaba los nombres
de los abogados, notarios, testigos y los herederos que se encontraban en el testamento.
- Entre los presentes hay alguno que tenga alguna objeción de que estos sobres sean abiertos
para proceder a su lectura.
- Yo señor Juez y me opongo por no haber escuchado en la lista que usted leyó a ninguna
persona que en primer lugar sea familiar y en segundo lugar todos los nombres que usted menciono
corresponden a personas que se encontraron muy ligadas a la difunta, no hay ningún imparcial en esto
a excepción del conde.
Después de explicar que entre los presentes se encontraba el notario delegado del Gobierno.
- Alguien desea objetar lo que el señor obispo a dicho.
Dijo el juez, cuando en ese momento doña Ángela María, sin consultar con nadie dijo.
- Yo señor Juez…
Le paso su hijo a doña Francisca y se puso de píe. El obispo trago gordo, no se esperaba que
tuviera que enfrentarse con la menor de la familia Pasos, el había calculado debatir con los abogados
que por su rango se le hacía cómodo.
… Estoy segura de que los abogados vienen preparados para demostrar cualquier duda, dada la
insistencia del señor obispo, que no entiendo su interés en algo en donde nada tiene que ver. Solicito
que ese señor sacerdote acompañe a mis criados y le demostrare que hay linaje y más aun de que
también hay heredero legítimo, no quiero interrumpir las labores de los notarios y doctores que
custodian ese testamento…
Llamo a dos criados y les indico en voz alta para ser escuchada, que todos sus movimientos se
aseguraran de que el padre los estuviera viendo, no quería una falla en ese acto. Se estaba asegurando
de la confiabilidad por su marido, su fe en lo que mandaba a traer, el control de situaciones más difíciles
aun siendo contra el Obispo, se la estaba jugando así como doña Domitila María cuando ordeno
asesinar al joven Hernández del Sauce.
Sacaron un baúl, todo supervisado por el padre ayudante del Obispo, que por mal apodo el
populacho le decían, ‘’Coyunda Negra’’, por su color y declarado despreció a doña Domitila María y los
que la rodeaban, que eran ellos.
Claramente se miraba que el baúl que cargaban los criados con ‘’Coyunda Negra’’ a la par no
había sido abierto por varios años, lo abrieron y ella le indico al cura que sacara determinado folios y los
leyera, este con autorización del Obispo dio inició a la lectura.
‘’Ellas han tenido un marca que bien se puede simular a un herraje en la oreja izquierda, que
consiste en un lunar de sombra en la parte trasera de la oreja izquierda, me decía mi Mamá, que en la
realidad ella lo había vista en la Madre de Domitila, su hija y a la que ella cargo su nieta, yo se la mire a
Domitila María sin darse cuenta ella, que sería la bisnieta de la cocinera de mi Mamá, al inició ella no lo
creía pero al verlo en tres generaciones lo creyó y aun por ser ella portadora de un Lunar en la parte
inferior de la barbilla que la tenía mi Bisabuela, Abuela y Madre de ella sorprendiéndose que ella fue la
única de sus tres hermanas que lo saco y por ultimo yo su hija’’.
… mire que igualmente lo tengo que soy nieta de ella. Esto fue escrito por mi tía Ángela María
Pasos Arellano en el año de 1870, hace 50 años. Sepa una cosa señor obispo, revíseles las orejas a los
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dos y encontrara esa marca, pero lo que a mí me interesa en este momento es de que usted sepa que
yo guardo como un custodia la conversación que doña Domitila María tuvo con usted y me la sé de
memoria, así como también no se percataron usted y mi difunto Padre, que mi habitación era la
contigua al de mis Padres y de ella no salía por estar leyendo los escritos de mi tía y escuche con
claridad la última conversación que tuvo con usted antes de ser asesinado por mi hermano mayor,, no
voy a dudar en hacer cualquier cosa para defender a mí marido e hijo, no se vuelva atrever a
inmiscuirse en mí familia, le agradezco su visita y la buena voluntad que tuvo para dar fe que este acto
de lectura de la última voluntad de doña Domitila María sea cumplida pero el techo queda establecido
y limitado, no permitiré que hagan lo mismo que le hicieron a esta mujer con mi familia y sus amigas y
amigos..
El obispo todo sudoroso se mantuvo sentado y en silenció durante toda la lectura del testamento y
aun al final tuvo que certificar que el acto fue conforme a la ley y que debería de ser ejecutado según la
última voluntad de la difunta Doña Domitila María Miranda.
El mayor asombro de los concurrente fue la lectura del segundo sobre, en primer lugar se
encontraba la partida de nacimiento del conde, inscrita en España, igualmente la fe de bautismo en
donde el padre Rodrigo inscribe dicha acta de que él fue bautizado en la Iglesia de Guadalupe. El padre
Valentín inmediatamente le dijo a Rosalía que tenía a la orden ese libro, que lo ha cuidado como un
tesoro.
Después de la muerte de doña Domitila María, sus tres amigas tuvieron sensaciones de la
presencia de ella, carisias en las mejías durante dormían y besos en ellas, lo tomaban con alegría porque
para ellas significaba que descansaba en la paz de nuestro Señor Jesucristo. Antes de morir Rosita
Alemán les dijo.
- Me vinieron a visitar…
- Quienes.
Pregunto Marta Joyilla.
- Domitila María, con su Mamá, sus abuelas con nuestra mamita Domitila, sus suegros doña
Francisca y la niña Ángela María, mi Madre con Clotilde, Domitila María me dijo que todo termino y que
eras tú Marta Joyilla, por el amor que te tuvo, la única de las tres nosotras que conocerá y cargara en
sus brazos a sus nietos.
Le tomaron las manos y con los ojos llorosos las tres, Rosita Alemán los serró y murió.
Ya estando en Granada la pareja D´Ibarra Pasos con su hijo que casi cumplía el año de nacido,
constituyo la mayor alegría en medió de tres perdidas dolorosas.
Una de esas noches se dio una situación en su casa algo anormal. El niño comenzó a llorar
estando entrada la noche, ellos iluminaron, aunque ya había parado de llorar.
- Se detuvo en su llanto el pobrecito.
Dijo la Condesa.
Tomados de la mano al entrar miraron que la cuna mecedora se mecía, el niño jugueteaba con sus
manitos y píe sentadito reía como si alguien estuviera con él, los dos corazones brincaron, una escena
impresionante de amor o terror.
Con la cara enrojecida doña Ángela María dijo.
- Gracias doña Domitila María, nosotros cuidaremos de nuestro hijo, su nieto, usted descanse en la
paz del Señor Jesucristo.
Nunca más se volvió a sentir la presencia de doña Domitila María.

Fin.
Humberto René Cerrato Maltez
2013

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