FLOTACION

Elementos tecnológicos del proceso:

El mineral crudo o cabeza, proveniente de la mina, entra en una planta de trituración en

seco en dos o tres etapas hasta tener trozos de mas o menos 10 mm. Estos trozos, en
seguida, se entregan a una planta de molienda, donde en dos circuitos húmedos de
molienda fina el mineral se reduce de tamaño hasta 50-100 micrones, dependiendo de su
diseminación. (Sutulov 1979).

El mineral preparado se acondiciona con distintos reactivos:

Los modificadores, que preparan las superficies de los minerales para la adsorción de los
reactivos.

Los colectores, que aumentan las propiedades hidrofóbicas de los minerales.

Los espumantes, que facilitan la formación de una espuma pareja y estable.

Las pulpas acondicionadas con los reactivos se introducen en seguida en maquinas de

flotación, donde el producto noble, normalmente se separa en el concentrado y la parte
estéril se descarga como relave.

Posteriormente los productos de concentración pasan a etapas como sedimentación,

filtración, y si es necesario secado. Los relaves se llevan a un deposito donde se desaguan
generalmente por decantación.

Cuando el mineral consta de varios componentes útiles, la separación de minerales se

hace mas complicada. En primer termino, en la flotación inicial, se puede optar por una
flotación colectiva para separar las especies útiles en conjunto o se puede flotar un
componente tras otro de forma selectiva (flotación diferencial).

Primera flotación espumosa:

El proceso Potter – Delprat consistía en lo siguiente:

El mineral crudo se introducía en una mezcla, el cual se acondicionaba con la cantidad

necesaria de cal o dolomita. Durante esta operación se agregaba una pequeña cantidad
de aceite proveniente de las operaciones mineras. Por medio de dos tubos se introducía
acido sulfúrico de concentración desde 1% hasta 10%. Al reaccionar el ácido con los
carbonatos se producía la gasificación y agitación de la pulpa densa.
El uso industrial de la flotación permitía el beneficio de minerales de baja ley, se podía
recuperar con gran eficiencia los valores que se encontraban en las lamas.