En una sociedad que reprime tanto el deseo y la practica del sexo; hablar de temas
como la masturbación parecían un pecado de pensamientos impuros. Cuando una
persona que se rige en el pensamiento científico nota este fenómeno como un tema
de estudio; es obvio que la gente tratara de tener una resistencia.
Con respeto a la ética que se llevaban para poder investigar la sexualidad, por
medio de la entrevista en una historia de vida. La técnica parecía tener sentido pues
se llevaba a cabo bajo la estadística, en espacios óptimos, sin embargo, en ningún
momento se muestra alguna carta de consentimiento o bien no se procura que la
entrevista sea con personas que no tengan relaciones íntimas, sino que se conserve
el profesionalismo de la investigación.