pueden tener tamaños que van desde partículas casi invisibles hasta pedazos de roca. Junto con el
agua y el cemento, conforman el trío de ingredientes necesarios para la fabricación de concreto
Aunque hay varias formas de clasificar a los agregados, uno de los más comunes es el que los
separa en agregados gruesos y finos, dependiendo del diámetro medio de sus partículas. Si se usa
una malla del número 4 (4.75 milímetros), lo que se queda retenido en la malla son agregados
gruesos; lo que pasa esta malla (pero que es retenido en una malla del número 200, de 0.075
milímetros) son los agregados finos.
A los agregados gruesos se les llama gravas; a los finos, arenas. Sin embargo, en términos
generales hay más variedad de agregados: los hay pesados (como la barita), que ofrecen alta
densidad; ligeros (como la piedra pómez o la escoria volcánica) para concretos ligeros; y hay
también otras categorías de gravas y arenas trituradas.
Arena, masa desagregada e incoherente de materias minerales en estado granular fino, que
consta normalmente de cuarzo (sílice) con una pequeña proporción de mica, feldespato,
magnetita y otros minerales resistentes. Es el producto de la desintegración química y mecánica
de la rocas bajo meteorización y abrasión. Cuando las partículas acaban de formarse suelen ser
angulosas y puntiagudas, haciéndose más pequeñas y redondeadas por la fricción provocada por
el viento y el agua.
Los agregados finos o arenas consisten en arena natural extraída de los ríos, lagos, depósitos
volcánicos o arenas artificiales, esto es, que han sido triturados.
Los agregados gruesos o gravas, son materiales extraídos de rocas de cantera, triturados o
procesados, piedra bola o canto rodado, cuyas partículas comprenden tamaños desde unos 5
milímetros hasta 6 pulgadas para los fragmentos más grandes.
Por sus propiedades, es necesario que las gravas provengan de materiales duraderos, resistentes
y sólidos mecánicamente, sin contaminantes o partículas dañinas que afecten el fraguado del
concreto.
Por su tamaño, las gravas pueden ser desde muy pequeñas (de 3/6 a 3/8 de pulgada) hasta gravas
extragrandes (de 3 a 6 pulgadas).
Qué tanta grava se use en una mezcla depende de la solidez que se requiera al final. Un ejemplo: si
se usa grava de 1 1/2 pulgadas y se quiere concreto de alta resistencia (unos 300 kilos por
centímetro cuadrado, el triple de los morteros para pisos y muros), por cada saco de cemento se
usará un bote de agua, 2 1/3 botes de arena y 4 3/4 botes de grava.
Conclusion: Nosotros como ingenieros civiles debemos poner una gran atención a que los
materiales ocupados en nuestras obras sean de la calidad deseada y de acuerdo a lo requerido. De
esta forma tendremos una obra resistente y que preste el servicio deseado por un largo periodo
de tiempo.
Curva granulometrica
Para graficar la curva granulométrica, debemos tomar en cuenta que los porcentajes de
muestra que pasa cada uno de los tamices, se encuentran en el eje de las ordenadas y a una
escala aritmética, en cambio la ordenación de la abertura del tamiz se encuentra en el eje de
las abscisas y con una escala logarítmica; esto para facilitar la construcción de la curva
granulométrica. El propósito del análisis granulométrico, es determinar el tamaño de las
partículas o granos que constituyen un suelo y fijar en porcentaje de su peso total, la
cantidad de granos de distintos tamaños que el suelo contiene.
Los efectos que la granulometría puede tener sobre el suelo se ha estudiado extensamente
en la materia de materiales de construcción y mecánica de suelos.
El método más directo para separar un suelo en fracciones de distinto tamaño consiste en el
uso de tamices. Pero como la abertura de las mallas más fina que se fabrica corrientemente
es de 0.07 mm. El uso de tamices esta restringido al análisis de arenas limpias, de modo
que, si un suelo contiene partículas menores de dicho tamaño debe ser separado en dos
partes por lavado sobre aquel tamiz.
La parte de suelo retenido por el tamiz es sometida al tamizado y aquella demasiado fina
para ser retenida por tamices y que ha sido arrastrada por el agua, es analizada por medio de
métodos basados en la sedimentación.
Los métodos para efectuar análisis granulométricos por vía húmeda están basados en la ley
de Stokes, que fija la velocidad a que una partícula esférica de diámetro dado sedimenta en
líquido en reposo. En el método que se utiliza comúnmente en mecánica de suelos, de 20 a
40 gr. de suelos arcillosos o de 50 a 100 gr. de suelo arenoso, se mezclan con 1 lt. de agua,
se agitan y se vierten en un recipiente. A intervalos de tiempos dados se mide la densidad
de la suspensión por medio de un hidrómetro.
En este las abscisas representan el logaritmo del diámetro de las partículas, y las ordenadas
el porcentaje P en peso de los granos menores que el tamaño indicado por las abscisas.
Cuanto más uniforme es el tamaño de los granos, tanto más inclinada es la curva, la línea
vertical representa a un polvo perfectamente uniforme.
Para este análisis se utilizan dos procedimientos en forma combinada, las partículas
mayores se separan por medio de tamices con aberturas de malla estandarizadas, y luego se
pesan las cantidades que han sido retenidas en cada tamiz. Las partículas menores se
separan por el método hidrométrico.
Modulo de finura
No. 100. No. 50, No. 30, No. 16, No, 8, No. 4, ⅜”, ¾”, 1½”, 3” y de 6”
Por lo común el tamaño máximo de las partículas de agregado no debe pasar:1): Un quinto
de la dimensión mas pequeña del miembro de concreto.2): Tres cuartos del espaciamiento
libre entre barras de refuerzo.3): Un tercio del peralte de las losas.
Tamaño Máximo Nominal (Dn): Corresponde a la abertura del tamiz inmediatamente menor al Tamaño
Máximo Absoluto, cuando por dicho tamiz pasa el 90 % o más de la masa del árido. Cuando pasa menos del
90 % el Tamaño Máximo Nominal se considera igual al Tamaño Máximo Absoluto.