SÍNTESIS DE ESPIRITUALIDAD PROFÉTICA (II

PARTE)
La espiritualidad profética de la que se desarrolla en los siguientes puntos nos
muestra de una u otra manera los rasgos fundamentales por los que un profeta atraviesa y
los grandes desafíos que le corresponder enfrentar ante un pueblo que muchas veces se
vuelve reacio hacia Dios y el dolor que experimentan ante tal situación: Desprecio, mal
vistos, pero no dejan de ser hombres de fe, de vivencia y de sintonía con Dios. Asimismo,
la falsedad por los falsos profetas se convierte en un problema para el momento, la
intercesión de parte de los verdaderos profetas ante Dios es para evitar que ocurra lo
catastrófico hacia aquel pueblo en el que viven los profetas. Es difícil si no cambian su
corazón y sus malos hábitos.

1. EL PROFETA, HOMBRE DE LA VERDAD

1. Verdad y mentiras en Jeremías

 La verdad en la profecías de Jeremías (falsedad como cubierta-manto:

“Jer.13,25-27”)
 Es advertencia, exhortación
 Se muestra en medio de la incertidumbre
 Invitación a ver la historia
 Tener en cuenta la presencia de Dios en el mundo, en la historia del
mundo
 Es un medio de comunicación para volver a Dios
 Vinculo del profeta con la realidad y con Dios

b. La mentira en Jeremías ¿respecto a que cosa existe la mentira?

 Es una actividad de palabra recurrente

 Guarda relación con la función profética
 Se refiere a la interpretación de la realidad presente y futura
 Coincide con un juicio positivo de la realidad
 Encubre lo que realmente sucede
 Es denunciada por el profeta con las consecuencias que ello acarrea

2. CONFLICTO CON LOS FALSOS PROFETAS

  Complejidad en los criterios de distinción entre verdaderos y falsos
profetas (son limitados)
 El falso profeta es la concreción simbólica de la incertidumbre
 Los falsos profetas son numerosos, el profeta a menudo esta solo
 Los falsos profetas hablan de garantías para la salvación inmediata, el
profeta proclama la salvación a futuro a partir de la conversión
 El falso profeta manifiesta desconocimiento y/o disimulo voluntario.
 El falso profeta representa el sentir común, como que puede ser insidioso
y embaucador, anunciado por el autentico profeta.
 Visión positiva (falso profeta) y visión negativa (verdadero profeta)
 El verdadero profeta te confronta al denunciar.
 El conflicto con los falsos profetas demuestran precisamente la
existencia de un dialogo, de una discusión. No todo es pacifico.

3. EL PROFETA, HOMBRE DE DOLORES

 El profeta se enfrenta a: Desdén y oposición activa, rechazo y desprecio,

presunción y destierro, castigo de Dios.

 Se identifica con: La no salvación, el sufrimiento de su pueblo, un

posible fracaso real, aparición del pecado y sus consecuencias (la
muerte), responsabilidad colectiva en el mal, en el sufrimiento, en el
dolor. Todo mundo es responsable, aunque no sea consciente de ello.

4. EN FAVOR DEL PUEBLO: LA INTERSECCIÓN.

Según Hertzberg la intercesión es típica de todo hombre de Dios (sea o no

profeta).

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Ejemplo de intercesores: Lo Sacerdotal, lo político, lo profético

 Abrahán (Gn 18,23)

 Isaac (Gn 25,21)
 Samuel (1Sam 7,12)

Figuras de intercesión

 Moisés: Considerado en la tradición más como profeta que como

guía del pueblo. El papel que representa en Egipto hacia la tierra
prometida.
 Por lo tanto, un intercesor no es solo el que reza a Dios si no el que se dirige a Dios
a favor de alguien: Intervención profética- frente a la muerte real (amenazada o previsible.
Esto lo encontramos en los relatos de las plagas (Ex 8,9) y explicito en 10, 17: “Pero ahora
perdona también esta vez mi pecado y recen al señor su Dios para que aleje de mi esta
muerte”. En el relato de la serpiente de bronce (Núm. 21,4-9) La intercesión de Moisés
marca el paso de la muerte a la posibilidad de vivir, mientras que el cese de la intervención
de Amós significa el fin del pueblo (Am 7,1-9; 8,1-3).

En este sentido, la intersección manifiesta:

 El límite de una situación objetiva o a un punto al que ha llegado el

pueblo en su decisión de no escuchar (que lo conduce a la muerte).

 No es posible ir si Dios no interviene, si no pone fin a su ira debido a

la intervención del profeta (la intercesión es como la última
instancia).

 Es un aspecto muy particular de la relación profeta-Dios

 Manifiesta la tensión de la vida del profeta en su doble y constante

relación con Dios y con el pueblo (el que mejor expresa esta tensión
es Jeremías [Jer 7,16-20] Dios da órdenes de no interceder por su
pueblo)

 La orden de no interceder, si la unimos al versículo 17, toma un tono

de reproche: parece como si Jeremías quisiera interceder sin ver lo
que esta ocurriendo dentro del pueblo y sin tener en cuenta su
gravedad.

¿Cómo puede entonces interceder el profeta, en decir ponerse parte del pueblo,
cuando la actuación de ese pueblo es totalmente contraria a Dios, cuando la idolatría (Jer
7,17-18) manifiesta la falsedad de la actitud con el pueblo que se menciona en la primera
parte del capítulo?

 En la intercesión la solidaridad del profeta con el pueblo es el intento de

evitar que ocurra lo irreparable.
 La prohibición de interceder es la exigencia de romper esa solidaridad, de
tomar posición, de ponerse al lado de Dios.
 El profeta no se puede arriesgar a fomentar una situación de sordera a la
palabra de Dios, se le invita a aceptar la posibilidad de seguir hablando a
favor del pueblo (algo muy parecido Am 7, 1-9).
 El profeta no quiere el fin de Israel, pero frente a su negativa a escuchar no
puede hacer otra cosa más que constatar sus consecuenticas.
 En Ez 9,8-11, la intercesión de acerca a la lamentación:

 El profeta está profundamente solo

 Su soledad refleja la situación de una ciudad a la muerte debido a
las violencias que se cometen en ella
 La intercesión pasa a ser lamento y pregunta a Dios
 El profeta se entrega a su voluntad.
 Expresa su grito de Dolor (su participación en el drama que está a
punto de cumplirse).

Por último, la intercesión no es una pretensión, está abierta a la posibilidad de que

Dios no escucha La intercesión profética al final aparece vacía e inútil si no se da por parte
del pueblo una disponibilidad para cambiar (intervención de tendencia ). En donde existe
negación de la presencia de Dios de modo explicito (Ez 9,9) o implícito (manera de obrar), Dios
mismo no puede hacer otra cosa más que dar cumplimiento a su ira, dejando que llegue el final para
Israel.