AGENDA DEL TALLER: PERDON Y RECOCILIACION

Promover las competencias emocionales, las cuales son las habilidades necesarias para identificar y
responder de manera constructiva a las emociones personales y las de los demás.

ACTIVIDAD TIEMPO
Presentación y objetivo del taller 5 Min
Actividad I Acuerdos de convivencia 10 Min
Actividad II: Socialización conceptual de los elementos 15 Min
perdón y reconciliación.
Actividad III: Dinámica de las tendencias: “Nuestras 25 Min
opciones y nuestras decisiones”.
Actividad IV: Dinámica del valor y del principio. 25 Min
Cierre 10 Min

1. Actividad I inicial: Acuerdos de convivencia: 5 min.

• (Sensibilización de la importancia de las competencias emocionales, ya son habilidades
necesarias para la identificación y respuesta constructiva ante las emociones propias y las de
los demás. Por ejemplo, la capacidad para reconocer los propios sentimientos y tener empatía,
es decir, sentir lo que otros sienten, por ejemplo, su dolor o su rabia).

Escucho con atención y

respeto los argumentos Acepto que mis Expreso lo que
de mis compañeros, compañeros piensen pienso y siento sin
aunque no esté de diferente y sientan agredir a mis
acuerdo. diferente que yo. compañeros.

Me esfuerzo por ponerme

Rechazo la violencia y en el lugar del otro y
reconozco que mis actos Me dispongo a
evito hacer algún tipo
tienen consecuencias. participar activamente
de agresión verbal,
en el taller
gestual, o relacional
 2. Actividad II: Socialización conceptual de los elementos perdón y reconciliación:15
Min.
¿Qué es el Perdón?
El Perdón es un proceso de sanación (re-composición) de sí mismo, la reconciliación es un proceso
de sanación de la relación y de la confianza con el otro. Entender el Perdón como una decisión
significa abrirse a un proceso de liberación. El Perdón deber ser un proceso que permita reconstruir
el pasado y la relación que se establece con él, de tal forma que el pacto social roto por la agresión
se redefina permitiendo establecer nuevas narrativas acerca de la ofensa.
¿Por qué es importante perdonar? Porque el rencor y la rabia debilitan física y emocionalmente,
Perdonar permite escapara a la repetición constante de la imagen de la ofensa que nos fija en el
pasado, dificultando avanzar al porvenir.

Según Casarjian. R, (2009), el Perdón es un proceso que nos exige cambiar de percepciones a cada
instante, optando por una visión más profunda, amplia y abarcadora acerca de los otros. El Perdón,
como una forma de vida, nos transforma de víctimas de las circunstancias y de los otros, en co-
creadores de nuestra realidad.

La rabia y el rencor.
El motivo más obvio para perdonar es liberarnos de los efectos debilitadores de la rabia y el rencor
crónicos. Al parecer, estas dos emociones son las que más convierten el perdón en un desafío, a la
vez que en una grata posibilidad para quien desee una paz mayor. Como todos sabemos, la rabia y
el rencor son emociones muy fuertes que desgastan nuestra energía de muchas maneras. Cuando
vayas quitando las capas, probablemente descubrirás que esa rabia en realidades un sentimiento
superficial. No en el sentido de que sea trivial o falso, sino en el de que hay muchos otros
sentimientos y dinámicas por debajo de él. Cuando nos perdemos en la rabia nos volvemos sordos a
nuestros sentimientos más profundos. Hemos aprendido a escuchar sólo aquellos que saben gritar
más fuerte.
La rabia es una intensa reacción emocional temporal cuando uno se siente amenazado de alguna
manera. Cuando surge, puede expresarse abierta y directamente, o puede ocultarse debajo, donde
se expresa de un modo callado y persistente en forma de resentimiento crónico, que es esa
sensación constante de agravio o de mala voluntad que persiste aún mucho tiempo después de que
haya pasado la situación que provocó la rabia. Se ha comparado el resentimiento al acto de
aferrarse a una brasa encendida con la intención de lanzársela a otro quemándose uno la mano
mientras tanto. De hecho, la palabra resentimiento viene de resentir, es decir, volver a sentir
intensamente una y otra vez. Cuando estamos resentidos, sentimos con intensidad el dolor del
pasado una y otra vez. Esto, sin duda, no sólo tiene un efecto lamentable en nuestro bienestar
emocional, sino que también repercute negativamente en nuestro bienestar físico.

Los beneficios que obtenemos al aferrarnos

Para muchos de nosotros, dejar marchar la rabia y el resentimiento supone un gran riesgo, porque
nos parece que obtenemos algo al aferrarnos a ellos. Estos beneficios, llamados «ganancias
secundarias», suelen ser inconscientes y tienen mucho poder hasta que tomamos conciencia de
ellos y descubrimos formas de reaccionar más sanas.
Piensa si utilizas la rabia o el rencor de alguna de las siguientes maneras: ¿Permaneces enfadado
porque eso te da la sensación de tener más poder y dominio? Algunas personas creen que
enfadarse y aferrarse al rencor es señal de poder, energía, entrega y amor propio. Pero, en realidad,
la rabia y el rencor suelen encubrir sentimientos de impotencia, desilusión, inseguridad, aflicción o
miedo, y se usan con frecuencia en sustitución de los sentimientos de verdadero poder personal.
Si en tu infancia se te maltrató y tuviste que negar y reprimir la rabia para sobrevivir, parte de tu
curación incluye el hecho de darte permiso para hacer tuyos esos sentimientos ahora. La
recuperación de tu rabia puede capacitarte para defenderte y defender a tu niño interior herido que
no pudo hacerlo entonces. Si en esa época te fueron negados tus verdaderos sentimientos, sentir
rabia ahora puede darte el valor y el poder necesarios para defenderte, mientras aprendes que
tienes derecho a enfadarte y a hacerte valer. Si en tu infancia abusaron de ti física o sexualmente, el
hecho de sentir rabia puede ser una parte esencial en el proceso de reclamar y habitar tu cuerpo
como propio, de consolidar y hacer valer tus derechos y de establecer límites.
¿Qué significa Reconciliar?
La Reconciliación es un camino que se desarrolla a través del reencuentro con el otro con el ánimo
de restaurar la confianza y construir una nueva relación que permita el desarrollo de proyecto de
vida y sentido de la existencia; en esa medida es una ruta más que orienta la posibilidad de construir
paz, pues permite que las personas en divergencia, conozcan otras formas de tramitar los conflictos
y asuman posiciones menos tensas que favorezcan vías no violentas de encuentro y
reconocimiento.
El propósito de la Reconciliación es dotar de lenguaje y narrativas nuevas a ofensores y ofendidos.
Para ello será indispensable generar comunicación apreciativa, afectiva asertiva y efectiva. Es
ayudarles a superar la memoria ingrata causada por la ofensa y por el recuerdo de la ofensa.

La Reconciliación exige un proceso de limpieza interna que se denomina Perdón pero que puede
igualmente, manifestarse en acciones de sanación, catarsis, y sobre todo de práctica de la
compasión y de la bondad como virtudes políticas necesarias para la convivencia cotidiana de los
humanos.

La Reconciliación es un ejercicio de corresponsabilidad

El diálogo al que invita la Reconciliación y el encuentro con el otro, es también una invitación a
reconocer los actos que uno y otro cometieron y los efectos que se produjeron en la relación, de tal
forma que no se “culpabilice” a una u otra parte, sino que se reconozca el daño causado y se
acuerde un nuevo principio de relación. De igual forma, mencionar la corresponsabilidad supone la
suma de voluntades, de dos actores o de dos personas, quienes conscientemente se comprometen
a generar un cambio de pensamiento y actitud, que repercuta positivamente en la creación de un
nuevo horizonte.

3. Actividad III: Dinámica de las tendencias: “Nuestras opciones y nuestras decisiones”: 25

Min.
El siguiente ejercicio se propone para que el facilitador promueva la reflexión acerca de las diversas
opciones que las personas tienen como respuesta ante las ofensas recibidas. Tiene el propósito
reflexionar acerca de la libertad de elección y cómo a pesar de esto, muchos toman la misma
decisión. En el mundo existen tendencias que muestran las características sobre las cuales las
personas se inclinan en el momento de tomar decisiones. Es evidente que, en muchas situaciones
de la vida, las personas actúan y toman decisiones sin reflexionar y sencillamente obran por
“costumbre”.
Objetivo: Motivar la reflexión de los participantes sobre las opciones y decisiones que se toman ante
las ofensas recibidas. Con frecuencia las personas deciden mantener la rabia y el dolor generados y
el ejercicio planteado sugiere el Perdón como una opción válida.
Actividad: El facilitador dispondrá de cinco bolsas de papel y de 5 colores distintos (azul, amarillo,
rojo, verde y morado); que previamente habrá dispuesto con los siguientes contenidos una de las
bolsas tendrá un billete, la bolsa siguiente algo de comer, otra grande y pesada tendrá una piedra
(se sugiere que esta bolsa sea la de color rojo), otra tendrá papel arrugado, la bolsa que se coloca
en el centro es la más pequeña, debe ser de color verde y tendrá un papel en donde se encontrará
la siguiente frase: “en todo momento, tienes la oportunidad de optar por perdonar”
Desarrollo: Se pedirá colaboración a 5 participantes a quienes, con sólo ver las bolsas, se les pide
escoger una y explicar por qué hicieron esa elección. Luego se pedirá que vuelvan a elegir una, solo
tocándolas- todas- y de nuevo expliquen su elección, por último, se pedirá que vuelvan a elegir
ahora observando el contenido, de nuevo se pedirá que observen todas las bolsas, elijan
nuevamente y expliquen por qué.
Es importante que el facilitador, manifieste en cada uno de los momentos, que los participantes
pueden cambiar de elección. Siempre tenemos la opción de cambiar nuestras decisiones.
Una vez desarrollado el ejercicio, el facilitador dividirá el grupo en pequeños grupos.
Los pequeños grupos deberán de elegir de manera autónoma y libre en el momento en que se va
comenzar el ejercicio, Es un espacio de conversación confidencial en que no se promueven los
consejos o los juzgamientos, la confidencialidad es el carácter determinante del trabajo en el
pequeño grupo.
A continuación, el facilitador planteara las siguientes preguntas a los participantes. Primeros las
responderán en solitario y luego las compartirán en grupito.
Así como hay tendencia a la manera de “para donde va Vicente va la gente” cuando recibimos una
ofensa, ¿Qué hacemos generalmente? ¿Para qué sirve esa manera en que lo general nos
comportamos ante las ofensas? ¿Podrías imaginar otras maneras de reaccionar ante las ofensas?
Plenaria: Los participantes comparten sus apreciaciones acerca del ejercicio, El facilitador contará
con las siguientes preguntas para animar la plenaria:
¿Podemos tener otra comprensión de los acontecimientos pasados?
¿Tenemos la tendencia a continuar comportándonos de acuerdo con patrones establecidos de
manera inmodificable a lo largo de nuestras vidas?
Una vez se haya realizado el trabajo planteado en el grupo, se desarrolla una plenaria o puesta en
común del ejercicio.
Materiales: Bolsa de papel en colores, contenido de las bolsas, preguntas para los subgrupos.

4. Dinámica del valor y del principio: 2 5 Min.

Se requiere para este ejercicio el uso de palabras escritas en pequeños recortes de papel u otro
material según criterio del facilitador; estas palabras serán distribuidas entre los participantes para
que busquen a otra persona y dialoguen sobre el significado que de ellas cada quien tiene,
contestando a la siguiente pregunta: ¿es este un principio? ¿es un valor? ¿usted que piensa sobre
esta palabra?

Las palabras a usar son: solidaridad, respeto, cuidado, fraternidad, lealtad, tolerancia, justicia,
amistad, honestidad, entre otras en cartón.

Cada uno de los participantes deberá realizar por lo menos tres encuentros en quince minutos, Una
vez terminados estos encuentros los participantes se reunirán en grupos pequeños para compartir
las conversaciones que se desarrollaron en los encuentros, A la par de la conversación se desarrolla
la construcción de las ramas de un “árbol de principios”, que permitirá la construcción de un árbol
con los principios que son fundamentales para los participantes en el taller, identificando cuales son
las raíces, el tronco y las reamas del mismo.
Plenaria: Una vez los pequeños grupos se construyan los arboles de los principios se realizará el
encuentro grupal en el que se presentarán sus aportes.
Adicionalmente, el facilitador invitará a los participantes a contestar las siguientes preguntas:

 ¿Un principio es un valor? ¿Para qué sirven los valores? ¿a quién le sirven?
 Si comparamos los valores de los principios con valores materiales, ¿Qué enseñanza
podríamos concluir?

Materiales: una serie de palabras: solidaridad, respeto, cuidado, fraternidad, lealtad, tolerancia,
justicia, amistad.

Cierre: 10 Min.
Para finalizar se realiza realimentación de los elementos abordados durante la jornada y sobre la
importancia de tomar consciencia sobre el perdón y la reconciliación, así mismo se orienta el
ejercicio reflexivo de preguntarse: «¿Qué obtengo al aferrarme a la rabia y al resentimiento?».
Después completar las frases siguientes:
 Lo que obtengo al guardar rencor es .................................
 Lo que obtengo al guardar rencor es .................................
 Otra cosa que obtengo al guardar rencor es ......................
 Y otra cosa que obtengo al guardar rencor es ....................
Y se cierra entregando el Pensamiento para el día: “Hoy consideraré toda manifestación de rabia
(insensibilidad, irritabilidad, agresividad, comportamiento «estúpido»), como un grito que pide el otro
para obtener reconocimiento, respeto, ayuda y amor.