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Revista Latinoamericana de Metalurgia y Materiales, Vol.

3, N° 1, 1983

Relación entre Propiedades Mecánicas Microestructura y Morfología de Fractura en Acero


Hipoeutectoide 1045 con Diferentes Tratamientos Térmicós

Oswaldo A. Hilders y Alwilson Querales


Escuela.de Ingeniería Metalúrgica y Ciencia de los Materiales, Universidad Central de Venezuela. Apartado
51717, Caracas 1050, Venezuela.

El comportamiento mecánico en tensión y las relaciones morfología de fractura-microestructura, fueron investigadas en tres
series de tres especímenes cada una, de probetas de tracción de acero htpoeurectoíde 104" usando microscopía óptica y mi-
croscopfa electrónica de barrido. Los grupos de probetas fueron tratados de la siguiente manera: Un grupo fue calentado a
8300 e durante o., hry enfriado dentro del horno, el siguiente grupo fue calentado durante O., hr a 8300 e y templado en agua
fría y el último grupo fue calentado a 7500 e
durante 0.5 hr y templado en agua fría. La resistencia, dureza y ductibilidad, han
sido examinadas, demostrándose que la reducción de Ferrita Proeutectoide y el incremento de Martensita, producen un
aumento de la resistencia, pero reducen drásticamente la ductilidad y causan que el mecanismo de coalescencia de microporos
observado en la superficie de fractura de las muestras recocidas, cambie a un modo de fractura mixto en las muestras,templa-
das, las cuales presentan un aspecto general de cuasi-clivaje.

Relationship Between Mechanical Properties Microstructure and Fracture Topography in 1045


Hipoeutectoid Steel W ith Different Heat Treatments

The mechanical behavior in tension and the fracture topography-rnicrostructure correlations were invcstigated with three
series, of three specimens each, of 1045 hipoeutectoid steel tension samples, by optical microscopy and scanning eleci:ron mi-
croscopy (SEM). Theseries of samples were treated in the next form: One group was heated at830· e durtng ü.y hr and cooled
within the furnace; the next group was heated during 0.5 hr at 8 30· Can quenched in cold water and the final group was heated
at 7'00 e during 0.5 hr and quenched it;tcold water. The strength, hardness and ducríllry have been examined and it has been
demonstrated that the reduction of proeutecroid ferrite and the increasing of martensite, produce an increasing of the
strength, but dramatically reduce the ductility and cause that the microvoid coalescense mechanism observed on the fracture
surface of the annealing samples, change to a mixed fracture mode in th e quenched samples which shown a general quasi-
c1eavage aspecto

INTRODUCCION elección determinada de acuerdo a una necesidad


específica.
Los aceros ordinarios llamados de Medio Carbo- La comprensión de los mecanismos responsa-
no, son de uso extensivo en una gran variedad de apli- bles de la deformación plástica y la fractura han reci-
caciones comunes. Sistemáticas investigaciones han bido un impulso especial en los últimos años, pese a
sido hechas en relación a los factores que controlan la que la proposición de modelos y teorías explicativas
resistencia y la ductilidad en este tipo de acero; sin relativamente satisfactorias comenzó a hacerse alre-
embargo, el problema es muy complejo y las relacio- dedor de la década de los años cincuenta [9-10]. En
nes cuantitativas entre microestructura y propieda- particular, ha sido de gran utilidad el perfecciona-
. des mecánicas, deben tomar en cuenta un gran nú- miento de las técnicas de microscopía electrónica
mero de variables. En particular, el contenido de Per- (TEM, SEM).
lita juega un importante papel en la Resistencia a la La clasificación de ras superficies de fractura en
Tracción de estos aceros, pero solamente a expensas atención a las morfologías resultantes y a los meca-
de una disminución en la resistencia al impacto y en la nismos que operan durante los procesos de separa-
ductilidad promedio [1]. Pickering [2] ha desarro- ción, no ha sido aún claramente establecida.vencon-
llado expresiones para propiedades mecánicas tales tráridose en ocasiones, nuevas designaciones para
como el Esfuerzo de Fluencia y la Resistencia a la ciertas clases de aleación [11]. Ashby y orros [12-13],
Tracción, en función de la fracción volumétrica de han catalogado los mecanismos de fracrura observa-
Ferrita, su tamaño de grano promedio, el espaciado dos en diversos tipos de acero y orros materiales, para
interlaminar de la Perlita y el contenido de Silicio, diferentes condiciones de tensión, temperatura y
Manganeso y Nitrógeno. tiempo para fractura en las cuales cada uno es domi-
nante, presentando sus resultados en una serie de
Por otra parte, los diversos cambios microes-
"mapas" de mecanismos de fractura.
tructurales debidos a diversos tratamientos térmi-
cos, influyen decisivamente .en las propiedades me- En la presente investigación se pretende hacer
cánicas, lo cual ha sido objeto de constante atención un estudio de las características morfológicas de las
[3-8]. La complejidad de los Factores a analizar cons- superficies de fractura, obtenidas después de la apli-
tituye una dificultad en el análisis cuantitativo de las cación de ciertos tratamientos térmicos en un acero
propiedades mecánicas; las cuales han sido sistemáti- comercial hipoeutectoide 1045, y la debida correla-
camente tabuladas en función de composiciones quí- ción de las mismas con los aspectos microestructura-
fiÚcas,.tratamientos térmicos, etc., lo que facilita una les y propiedades mecánicas derivadas de dichos tra-

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, OS0T'"""--------- __ ---,
Trotamientol T.rmicol
T·C

ISO
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30min

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0.77 :

25~--_r--~~-~---x~'w
n2 n. n6 -------------------------------
%c-

Fig. 1. Esquema general Temperatura-Tiempo, de los tratamientos térmicos realizados y su relación con el diagrama metaestable
Fe-Fe3C.

tam ierrtos, tornando de la literatura los principios friarse lentamente en el horno. A continuación, las
clásicos de análisis ya establecidos, e incorporando a muestras fueron ensayadas en tracción mediante una
los resultados los comentarios y conclusiones deriva- máquina universal Instron, a una velocidad de alarga-
dos de las observaciones propias acerca de la influen- miento deO.2 cm/mino Delos ejemplares así fractura-
cia de las transformaciones de fase encontradas, en la do'), fueron elegidas tres muestras (una por cada tipo
fractografía general. de tratamiento) para la realización de los análisis frac-
tográficos y microestructurales, en tanto, que las
PROCEDIMIENTO EXPERIMENTAL
propiedades mecánicas correspondientes derivadas
El acero estudiado, cuya composición aparece de cada tipo de tratamiento en particular, fueron
enla TablaI, se obtuvo en forma debarra calibrada de deducidas de todas las probetas que lo sufrieron en
12/8" de diámetro, laminada en caliente. La mi- cada caso. Primeramente se hicieron observaciones
croestructura, formada por una mezcla de Ferrita y macroscópicas de las superficies de fractura, tomán-
Perlita, presentó un tamaño de grano ferrftico igual a dose macrografías representativas de las mismas al
8, medido de acuerdo al método ASTM [14]. Asimis- igual que observaciones a alta magníflcacíón, utili-
mo, la dureza encontrada fue de 14 Re, la mícrodu- zando el microscopio electrónico de barrido (SEM)
reza Vickers parala Ferrita fue de 25 7 Y de 321 parala operado a 20 Kv. Seguidamente se hizo un corte lon-
Perlita. Nueve probetas de tracción fueron maquina- gitudinal de las muestras mediante un plano perpen-
das a partir de la barra original de acuerdo a la norma dicular a la superficie 'de fractura, dividiendo a ·las
E8~69 ASTM [15], con una longitud entre puntos de mismas en dos partes iguales> una de las cuales fue
2.54 cm y un diámetro de 0.635 cm. Seguidamente, preparada metalográficamente para la determina-
las probetas fueron divididas entres grupos de a tres,' .ción de la micra estructura y la Dureza Rc. Antes de la
sufriendo cada uno un tratamiento térmico distinto realización de este corte, las superficies defractura
tal corno se señala en la Fig. 1. fueron convenientemente recubiertas con resina
epoxy, la cual se dejó endurecer de manera que, pos-
TABLA 1
teriormente,no sólo fue posible la observación de las
COMPOSICION QUIMICA DEL ACERO
microestructuras, sino también la de las trayectorias
ESTUDIADO (% en peso)
de fractura en cada caso. '
e Si Mn S P Fe TABLA II ,.
PROPIEDADES MECANICAS ESTUDIÁDAS
0.450 0.400 0.700 0.035 0.030 Balance j'

Tratamientos (JulJ (Jj


El primer tratamíen ro, al que llamaremos A, con- Térmicos Re (MPa) (MPa) %Al %Ra
sistió en un calentamiento a 8300 C, en la zona y
monofásica seguido por un mantenimiento de 1/2
A 6 550 445 28 47
hora a esa'temperatura. Posteriormente, las probetas
B 43 1400 1380 20 32
de este grupo fueron enfriadas lentamente en el hor-
no, hasta la temperatura ambiente. En el segundo tra-
C 58 1550 1550 = O = O
tamiento (B) se efectuó un calentamiento hasta la
RESUL T ADOS y DISCUSION
zona bifásica (a + y) a 750°C por 1/2 hora y poste-
riormente un temple brusco en agua fría agitada. El El conjunto de propiedades mecanicas eva-
tercer y último tratamiento (C) fue similar al primero luadas, aparece en la Tabla II,paracada uno de los tra-
en su primera etapa, pero el material fue brusca- tamientos térmicos realizados. Estas propiedades
mente templado en agua fría agitada en lugar de en- han sido correlacionadas en la Fig. 2, donde el por-

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~ ~ --. 50
1S00
El proceso de calentamiento inicial a ternpera-
tura de austenización, no fue realizado lentamente.
IL-
l;> O
I Sin embargo, puede considerarse que los 30 minutos
• I
I de austenización a 830 C, en las muestras con trata-
0

~
o
I
I miento térmico C, fueron suficientes para lograr la
IX: I 40
I hornogeneízacíón, de acuerdo a la consideración co-
~ 1200 •
o
.~
N
L

.
:J •
--"-,.,
A

..
nocida de austenizar una hora por cada pulgada de
diámetro [16-17]. Entonces, puede deducirse que la
falta de uniformidad en la microestructura de la Fig.
UJ ~
30
'"'.... 4-g, no 'Sedebe a la distribución heterogénea del car-
; ~ bono a altas temperaturas y por consiguiente a la
l;>
'i generación de. diferentes velocidades críticas de
e 3
800
~O
'o
••
:J
r+
temple, con la producción de una rnicro estructura no
o uniforme; sino más bien a la dificultad de alcanzar

L
.0
velocidades de temple tales, que en toda la masa del
f- 20
••
.•.• '"• material (homogéneo en composición), pueda inhi-
q

.!
~. birse lo suficiente la difusión del Carbono como para

,•
o 400
e
...•
10
B.
o'
:J
producir una estructura totalmente martensítica. En
algunas zonas hay una cierta difusión de carbono en
la Austenita FCC, la cual se torna muy inestable a
temperaturas inferiores a 727 C. Si el porcentaje de
I
0

carbono se ha reducido lo suficiente, la Austenita se


transformará en Ferrita BCC. Sin embargo, estos
o ~ ~ ~ ~ ~ ~ __ ~ o
islotes de Ferríta fueron realmente pocos, por 10 que
o 10 20 30 50 60 su influencia en la medición de la dureza Rc no fue
detectable.
Fig. 2. Variación de la Resistencia a la Tracción !Tu (.), Esfuerzo Resistencia. A menudo, los parámetros de resis-
de Ro tura o rf El},% Alargamiento (e) v% Estricción(O)
en función de la Dureza Re. para los tres tratamientos ten
tencia usados en la caracterización de las propiedades
micos realizados A, B, C. mecánicas de los aceros y otras aleaciones, son el
Esfuerzo de Fluencia y la Resistencia a la Tracción
centaje de reducción de área (%Ra) y el porcentaje de [18-21]. En esta investigación se utiliza a modo de
Alargamiento (%Al) por una parte y la Resistencia a la
Tracción (uuts) y el Esfuerzo de Rotura (Uf) por otra,
han sido graficadas en función de la Dureza Rc. Fun-
damen talrnent e, los cambios en las propiedades me-
cánicas han de deberse a las cantidades relativas de las
fases presentes y a la forma y distribución de di-
chas fases. ~ B
GI
Dureza. Esta propiedad mecanica está íntima- IC
mente asociada a la variación del comportamiento de ~ A
la Ferr ita, debido a la presencia de la Perlita o de la IC
Martensita, lo que significa que es una propiedad de
naturaleza interactiva. Las cantidades relativas de o
Ferrita obtenidas, fueron progresivamente menores,
•••• ..
-
t)
desde el acero con tratamiento A hasta el acero con :l
tratamiento C. En las Figs. 4-a, 4-d y 4-g puede obser- w•••
varse fácilmente esta progresión en el cambio de las
cantidades de ferrita, lo que se traduce en los diferen-
tes valores detectados en la Dureza Re; la cual arrojó
un valor máximo de 58 para el acero con tratamiento
C, y un valor mínimo de alrededor de 6, para el acero
con tratamiento A. Lógicamente, el enfriamiento
lento en el horno, en este último caso, permite la for-
mación de Perlita gruesa, lo que trae como conse-
cuencia una microestructura suave. En cuanto a la % Alargamiento
uniformidad en las medidas de dureza, debe decirse
que el valor reportado en cada caso, resulta confiable,
ya que los promedios obtenidos son el resultado de Fig. 3. Curvas de tracción Ingenieríl, mostrando la forma cuali-
alrededor de 20 mediciones con una dispersión tativa de la variación de! Esfuerzo con e! Alargamiento
muy pequeña. para los tres tipos de tratamientos realizados A, By C.

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Lati"Americo" JOllmrd u/ Ml'lIIlllIrgy IIml ,v!(¡fcrird" \'01. 3, N° 1, 1983

~ •.#l'·
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12 P

Ca] CbJ [e]

f ¡.:

hg, 4. (a),(b) y (e): Microestructura, Macr ograh.i dt: i:t s up c-rfir i e de lr ac t u ra \' Travectoria de la grieta principal de la muestra de acero
1045 con tratamiento tipo A; (d), (e), (f) v (g). (h), (i): FigULls correspondientes para los tratamientos B y e,
Ru·i\ta t.a r inoamcr ica na de Metalurgia v ,\larcrialc\. Vol. \. 0:" l. I l)S \

[6J (b]

(e] CdJ

[e] [FJ

Fig. 5. Fracrografías (SEM) mostrando la morfología superficial de la muestra con t r a r a rn icn to A; (e), (d) v( e) .(1): Fractografías correspon-
dientes para los r ra t amicnt
os B~.' C.

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las muestras templadas desde la zona austenítíca


referencia la Resistencia a la Tracción y se mide adí-
monofásica, es decir, dichas muestras se deformaron
cionalmente el Esfuerzo .de .Rotura, lo que resulta
plásticamente en un porcentaje muy pequeño antes
poco usual en la caracterización de las propiedades
de la fractura final, lo que sin embargo proporcionó
mecánicas. No obstante, en función de los estudios
el tiempo suficiente para el desarrollo de cavidades u
factográficos realizados, se consideró de importancia
hoyuelos, objeto de nuestra próxima discusión.
este valor, en conexión con las características morfo-
lógicas de las superficies de fractura obtenidas. La presencia de Ferrita en las muestras con los
tratamientos A y E, produce el efecto ya explicado
Los valores de la Resistencia a la Tracción y del
anteríormente en relación con el grado de dificultad
Esfuerzo de Rotura, guardan la correspondencia es-
en el deslizamiento, por lo que la reducción de área y
perada con los datos de dureza: valores progresiva-
el alargamiento a la fractura, alcanzan valores relati-
mente altos de resistencia corresponden a valores de
vamente altos.
dureza ascendentes, tal como se muestra en la Fíg. 2.
Las formas esquematizadas de las curvas de tracción Análisis Fractográfico. Las superficies de fractura
ingenieril obtenidas con cada tratamiento, son mos- se diferencian macroscópicamente entre sí, ya que la
tradas en la Fig. 3. Puede apreciarse la variación de la rugosidad mostrada a muy bajos aumentos permite
resistencia con el tipo de tratamiento en particular. identificar fácilmente el tipo de tratamiento sufrido
Las fases duras (Perlita o Martensita) causarán un por las muestras respectivas. Los ejemplares repre-
efecto de oposición al flujo de la Ferrita [22] con el sentativos pueden observarse en las figuras 4-b, 4-e y
consiguiente aumento de los parámetros de resisten- 4-h, al lado de las correspondientes microestructuras
cia. El análisis de las Figs. 4-a, 4-d y 4-g, muestra clara- ya nombradas.
mente la desaparición progresiva de la fase blanda o
En la Fig. 4-b aparece la porción de la "copa" de
Ferrita Proeutectoíde, lo que explica el aumento de
una superficie de fractura copa-cono estandard,
la dificultad al deslizamiento y con ello el aumento de
donde se señala la zona del borde o zona de cizalla-
la resistencia nombrado. En las muestras recocidas se miento caracterfstíca de la separaciónfinal en rup-
observó una microestructura de Ferrita y Perlita de
tura dúctil por tensión. Puede decirse que la sepa-
apariencia más o menos equiaxial; sin embargo, las ración final ocurre en una condición tal, que la coa-
secciones metalográficas{para todos los tratamien-
lescencia de cavidades se produce bajo la influencia,
tos) se realizaron paralelamente al eje de tensión en la combinada de deformación plástica uniforme en la
zona adyacente a la superficie de fractura, por lo que dirección de la tensión aplicada y deformación de
se evidencia una orientación preferencialde los gra- corte en un plano de máxirnaterisió n de corte [23].
nos en esa dirección. En la muestra templada desde la
región bifásica, la Austenita se transforma en Marten- La posibilidad de generar una superficie de frac-
sita, permaneciendo sin cambio alguno la Ferrita tura de este tipo, proviene de la ductilidad básica de la
Proeutectoide formada a 750 C. En este material se
0
aleación recocida, la cual, con un alto porcentaje de
experimentó un endurecimiento intermedio debido Ferrita Proeutectoide, es fácilmente deformable. La
precisamente a la presencia de estos agregados ferrí- porción central de la fractura sufre una ruptura nor-
ticos. Igualmente es posible aquí apreciar la orienta- mal al eje de la carga, de manera que la coalescencia
ción de los granos de Ferrita en la dirección de la ocurre bajo la influencia de deformación plástica uni-
tensión axiaL Finalmente se aprecia en la muestra forme. La Fig. 4-e muestra la superficie de fractura de
templada desde la zona austenítica, una estructura la probeta de tracción con el tratamiento B, la cual es
casi totalmente martensítica. Unicamente se hacen considerablemente más plana, mostrando sin em-
visibles ciertos "islotes" de Ferrita, los cuales se ha- bargo irregularidades macroscópicas tales como lar-
llan interconectados y orientados en la dirección gas hendeduras que atraviesan parcialmente a la
de tensión. muestra. Dichas hendeduras deben estar asociadas
con la inhomogeneidad de la deformación plástica y
Es interesante norar que la deformación se ve el proceso de fractura, en el sentido de qu elá separa-
claramente restringida a los agregados de Ferrita, los ción final ocurre por ruptura casi totalmente normal
cuales muestran una serie de cavidades alargadas al eje de tensión y la grieta principal responsable de la
e vínrerconecradas. En, algunos casos se observa separación atraviesa alterriativamente zonas ferríti-
(Fig. 4-g) cómo las inclusiones se asocian a la forma- cas y zonas martensíticas, siendo las hendeduras una
ción de dichas cavidades en los agregados ferríticos. manifestación macroscópica de la ruptura o separa-
Esta observación particular constituye un indicio ción de zonas frágiles en este caso de Martensita, las
claro del' aumento de la resistencia al díficultarse la cuales forman "capas" paralelas al eje de tensión
fluencia, debido a la presencia cada vez menor de (perpendiculares a la superficie de fractura o grieta
fase blanda. principal). Estas "capas" pueden distinguirse fácil-
Ductilidad. Los parámetros utilizados en la me- mente en la Fig. 4-d, donde se observa la fase oscura
dición de la habilidad del material para deformarse, (Martensita) orientada en el mismo sentido del eje de
fueron el porcentaje de reducción de área y el por- tensión. Por otra parte, una comparación de los perfi-
centaje de alargamiento a la fractura. Se observa en la les de fractura de las Figs. 4-c y 4-f, muestra que la
Tabla II, que ambos tienen un valor cercano a cero en naturaleza de las cavidades es muy diferente en

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ambos casos, ya que en la muestra recocida, las cavi- superficial. Sin embargo, a estos niveles de observa-
dades observadas .son muy numerosas y tienden a ción puede decirse que no hay presencia de una su-
coalescer entre sí para formar cavidades mayores. En perficiede fractura totalmente frágil, ya que no hay
la' muestra con tratamiento B, no se observan las manifestaciones importantes de ruptura por clivaje,
numerosas cavidades del caso anterior, sino más bien A lo sumo, puede hablarse en el caso de las muestras
pocas, distribuidas al azar y de una naturaleza dife- con tratamiento B o C, de pequeñas zonas clivadas
rente. En la Fig. 4-f la cavidad señalada está asociada entremezcladas con hoyuelos característicos de la
con la formación de una grieta paralela al eje de ten- fractura dúctil. En las muestras con tratamiento A, se
sión, la cual no llegó a desarrollarse totalmente, pero observa una superficie de ruptura de naturaleza to-
que sin embargo muestra la naturaleza frágil de la talmente dúctil, donde únicamente ha prevalecido la
generación de hendeduras, las cuales no son sino la coalescencia de microporos como mecanismo domi-
intersección de estas grietas paralelas al eje de ten- nante. La Fig. 5-b muestra a una mayor significación,
sión, con la superficie de fractura. Puede observarse detalles de la superficie de fractura de la muestra con
una inclusión asociada a la cavidad que aparece en la tratamiento A. Este tipo de superficie es típico delas
parte superior de la grieta. El efecto de las inclusiones fracturas desarrolladas mediante la coalescencia de
como sitios preferentes para la nucleación de cavida- cavidades o rnicroporos. Se observa una variedad de
des, ha sido extensivamente estudiado [24-28] y una tamaños, lo que confirma que la nucleación y el creci-
revisión relativamente reciente acerca de este punto, miento de las cavidades puede ocurrir de manera
ha sido hecha por Goods y Brown [29], sin embargo, simultánea: grandesdeformacionesen un cuello lo-
este problema no será tratado sino más bien de una calizado entre dos cavidades preexistentes, pueden
manera marginal en relación con las características nuclear otra cavidad central [30]. En este mismo
topográficas de las superficies de fractura. En la caso, resulta de importancia la consideración de la·'
muestra con tratamiento C, puede observarse (Fig. 4-h) aparición de las tensiones, hidrostáticas desarrolladas
la formación de una superficie de fractura totalmente en el cuello de las muestras, ya que dichas tensiones
plana, normal al eje de tensión y de aspecto brillante. constituyen la fuerza motriz para el desarrollo de los
Como ya ha sido dicho, esta muestra no sufrió estric- hoyuelos, que parecen haberse nucleado homogé-
cióri localizada, sino una muy pequeña deformación neamente en su mayoría (muy pocas inclusiones fue-
plástica uniforme. La presencia de una superficie de ron vistas alojadas en el interior de los mismos).
ruptura normal y la ausencia de estados de tensión Puede pensarse, de acuerdo a las ideas de Wilsdorf y
triaxiales, indica la naturaleza dura y frágil de la otros [31-32], que los gradientes de vacancías produ-
microestructura desarrollada, la cual se encuentra cidos en regiones de alta densidad de díslocacíones,
formada ensu mayor parte por Martensita. pueden generar un exceso de concentración de va-
cancias, las cuales al condensar forman cavidades. En
Como ya se ha dicho, la generación de cavidades las regiones de alta densidad de dislocación el mate-
en este caso, está totalmente restringida a las zonas rial habrá agotado su habilidad para endurecerse por
ferríticas, sin embargo, en las zonas adyacentes a las deformación, por lo que, cuando se alcanzan esfuer-
superficies de fractura, no aparecieron cavidades en zos triaxiales estas pequeñas cavidades servirán de
ninguna zona en particular,' corno puede apreciarse sumidero a una serie de dislocaciones, las cuales al
en la Fig. 4-i, lo que sugiere que sólo a distancias rela- "emerger" dentro, en la superficie libre de las mis-
tivamente grandes de la grieta principal, pueden ge- mas, harán que crezcan hasta alcanzar un tamaño
nerarse cavidades, en tanto que las mismas pare- estable. También se ha sugerido que las cavidades
"cieran no tener tiempo suficiente para desarrollarse podrían comenzar a formarse en los límites de grano
cerca de la superficie de fractura. Es razonable en este debido al apilamiento de dislocaciones [33]. La nu-
caso, suponer que la grieta principal se inicia en pun- cleación homogénea de cavidades en esta superficie
tos de alta concentración de esfuerzo de tensión y de fractura fibrosa podría ser explicada en términos
que no se requiere deformación adicional para la pro- de dichas suposiciones, sin embargo, no se haestable-
pagadón de la misma, lo que ocurre tan rápido, que cido un mecanismoque clarifique totalrnenreel fe-
las cavidades no pueden expandirse plásticamente. nómeno, en ninguna aleación en particular.
Además, debe reco rdarse que el crecimiento de las
cavidades depende de las tensiones transversales des-
"
French y Weinrich [34] han sugerido que en
materiales con pocas inclusiones, la ruptura dúctil
arrolladas 'en el cuello, cosa que aquí no debe ocurrir
por corte (fundamentalmente Cobre a) tiene lugar
debido precisamente a la ausencia de estricción
por mecanismos que tienen que ver con la genera-
localizada.
ción de bandas de corte que se incrementan Con la
Un análisis microscópico de las superficies de deformación. La superficie de fractura en su forma-
fractura, fue realizado con el ánimo de evidenciar las ción, debe moverse entre dichas bandas, formando
características superficiales responsables de los dife- por consiguiente, una serie de cavidades restringidas
rentes comportamientos observados. Mediante mi- únicamente a la superficie, no siendo por lo tanto las
croscopía electrónica de barrido, se hicieron prime- cavidades en sí mismas, las precursoras de la fractura.
ramente observaciones de tipo general, tales corno No es probable que dicho mecanismo, en su totali-
las que aparecen en las Figs. 5-a, 5-c y 5-e que mues- dad, pueda aplicarse a nuestro caso, pero es posible la
tran una progresiva tendencia hacia el aplanamiento formación de dichas bandas, ya que en el material

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recocido se encuentran presentes zonas ricas en Fe- 5. Las superficies de fractura de las muestras recoci-
rrita. Las Figs. 5-c y 5-d muestran la morfología par- das, presentan una morfología característica de
cialmente ya descrita de unas superficies que tienden ruptura dúctil, donde una gran cantidad de cavi-
a aplanarse y a exhibir características de cuasi-clivaje, dades tienden a unirse para formar cavidades
Se muestra una cavidad relativamente grande con mayores. En las muestras templadas desde
una pequeña inclusión en su interior. 8300 C, y desde 7500 e, se formaron superficies
más planas y regulares, donde hay una mezcla de
Puede verse que esta cavidad no es de la misma aspectos de clívaje con características de fractura
naturaleza de las anteriores, ya que no se ha "desa- dúctil.
rrollado" formando paredes que indiquen una direc-
ción de elongación, sino más bien pareciera ser el 6. Las superficies de fractura en las muestras recoci-
resultado de la anterior presencia de una inclusión de das, no presentaron cavidades asociadas a inclu-
ese mismo tamaño, que ha estado alojada allí hasta su siones, mientras que en las muestras templadas
eventual "extracción" mecánica de la superficie (si se observó, particularmente en las enfriadas
no se encontraba bien adherida a la misma en el desde 830 e, la presencia de inclusiones asocia-
0

momento de la fractura). En la Fig. 5-d se muestra en das a cavidades formadas en zonas exclusiva-
la parte inferior izquierda, una pequeña concavidad mente ferríticas.
que ha servido de asiento a alguna otra inclusión de la
misma naturaleza. Asimismo, se muestra una pe-
queña porción de una inclusión que ha permanecido
fija en la matriz y que bien pudiera ser un trozo de la
inclusión mayor alojada anteriormente en la cavidad.
REFERENCIAS
Finalmente las Figs. S-e y 5-f muestran características
similares, pudiendo notarse en este caso que la con-
centración de esfuerzos debido a la dureza y fragílí- 1. R. W. K.: Honeycombe, SteelsMicrostructureandProper·
dad de la matriz, produjo en ocasiones ruptura y ties, Arnold Pub., London (1981) p. 50.
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serie "A", donde no se requieren grandes tensiones ment and Properties of !ron and Steel, NBS Monograph
localizadas, ya que la energía para la formación de 88 (1966).
superficies, es tomada de las mismas dislocaciones 4. E. Hornbogen, in R. W. Cahn (ed.): Physical Metallurgy,
emergentes. Elsevier, New York (1977) p. 589:
5. N. P. Allen: ]. Iron Stee1 Inst., 174 (1953) 108.
CONCLUSIONES 6. J. H. Gross and R. D. Stout: Weld. J. Res. Supp.," 34
(1955) 1175.
1. Se observó una reducción progresiva de Ferrita
7. R. M. Brick and A. Ph íllíps: Structure and Properties of
Proeutectoide en las muestras templadas desde
Alloys, Mc Graw-Hill (1949) 235.
7500 C,y desde 8300 e respecto a la muestra re-
8. Y. Lakhtin: Engineering Physical Metallurgy, Mir Pub.,
cocida desde 830 e, lo que determinó un com-
0

Moscow (1977) p. 192.


portamiento a la tracción diferente para cada una
9. ]. Plateau; G. Henry and C. Crusard: Rev. deMét., 54(1957)
de las mismas. 200.
·2. La microestructura Ferrita-Perlita del acero 10. H. C. Rogers: Trans. Met. AIME, 218 (1960) 498.
1045, desarrollada en el enfriamiento lento 11. J. C. Chesnutt and R. A. Spurling: Metal!. Trans. 8A
desde 830 e, es sustituida por la microestruc-
0 (1977) 21(,
tura Ferrita-Martensita en las muestras templa- 12. M. F. Ashby; C. Gandhi and D. M. R. Taplin: Act. Metall., 27
das desde 750 e y por una estructura casi to-
0 (1979) 669 and 1565. .
talmente martensítica en las muestras templadas 13. R. J. Fields; T. Weerasooriya and M. F. Ashby:·· Metall.
desde 830 C.
0 Trans., 11A (1980) 333. .. '
14. Metals Handbook: Metallography, StrucJÚies and Phase
3. Valores progresivamente altos de resistencia, Diagrams, 8th Ed., ASM, 8 (1974) 42.
correspondieron a valores de Dureza Rc ascen- 15. Annual Book of ASTM Standards: ASTM, Philadelphia,
dentes, lo que se explica por la desaparición Parto 31 (1971) 205.
progresiva de Ferrita y la aparición cada vez 16. R. Colombier y J. Hochmann: Aceros Inoxidables, Aceros
mayor de Martensita. Refractarios, Ed. Urmo, Bilbao (1968) p. 95.
17. S. H. Avner: Introducción a la Metalurgia Física, Ed. de!
4. La ductilidad de las muestras templadas desde la Castillo, Madrid (1974) p. 226.
zona austenítica monofásica es muy pobre, por 18. T. Gladman; 1. D. Me Ivor and F. B. Pickering: J. Iron Steel
10 que los porcentajes de reducción de área y de Inst., 210 (1972) 916.
alargamiento, son cercanos a cero. Estos mismos 19. K. J. Albuit and S. Garber: J. Iro n Stee! Inst., 204 (1966)
parámetros, alcanzaron valores moderadamente 278.
altos en las muestras recocidas y en las muestras 20. K. J. Albult and S. Garber: J. Iron Steel Inst., 205 (1967)
templadas desde 750 C. 0
738.

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Revista Latinoamericana de Metalurgia y Materiales, Vol. 3, N° 1, 1983

21. Y. Lakhtin: Engineering .Physical Metallurgy, Mir Pub. 28. M.F. Ashby: Phil. M:'g., 14 (1966) 1157.
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22. A. S. Tetelman and A. J. Me Evily: Fracture of Struetural 30. P.Neumann: Mat.Sc.andEng.,25,(1976)217.
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