La preocupación por la contaminación del agua en el río Negro ha sumado en los últimos
meses debates, propuestas, gestiones, amparos y nuevos análisis pero pocas acciones
concretas de saneamiento. A la altura de la Isla Jordán en Cipolletti la presencia de la
bacteria Escherichia coli era alarmante, al igual que en Allen, donde no se habilitó el
balneario municipal en el verano. Otras localidades se encuentran al límite. Un panorama
ciudad por ciudad.
Igualmente, aunque los trabajos tomen impulso, probablemente Cipolletti seguirá sin un
balneario habilitado: el mal o escaso funcionamiento de las plantas del lado neuquino
impactan sobre los ríos Limay y Neuquén, que conforman el Negro. De noviembre del
2015 son últimos datos disponibles públicamente, e indicaban la presencia de escherichia
coli en el río. Los análisis en la margen sur arrojaron un promedio de 252 NMP/100 ml con
un máximo de 550 mientras que al norte fue de 540 NMP/100 ml con máximo de 1.200.
En Allen los altos niveles de bacterias se repitieron en todos los muestreos y la prohibición
para bañarse y realizar actividades recreativas en el agua se mantiene. La contaminación
que se registró tiene que ver con el vertido de líquidos cloacales, río arriba. Además,
actualmente arroja sus líquidos cloacales al río Negro y no ha podido relocalizar la planta
de tratamiento, que ha registrado problemas de funcionamiento y que quedó en medio de un
sector poblado. Se espera financiamiento del gobierno nacional para una obra millonaria
que le permitirá dejar de contaminar el río: el Plan Director de Agua.
En Roca puertas adentro del Municipio roquense se espera que la orden judicial indique la
realización de un nuevo muestreo en el punto del río en donde desemboca el desagüe
denominado P5, que es el canal en donde se arrojan los líquidos cloacales que vienen de la
Planta de Tratamiento de ARSA. Pero cuando llegue ese momento no sólo se analizará una
muestra del efluente, sino que también se extraerá sedimento para confirmar la hipótesis de
que la contaminación existe hace tiempo. “Hay contaminación bacteriológica”, indicó la
titular de Medio Ambiente, Laura Juárez, quien aclaró que los estudios están “abocados a la
planta, no al río en general, ya que la fuente de contaminación que detectamos es esa”. Los
estudios realizados indican que la presencia bacteriológica en el punto de descarga
superaban los parámetros establecidos en la Resolución Nº 885/16 del DPA, ya que el
análisis determina un valor de coliformes fecales de 2400 NMP/100ml, cuando el máximo
admitido para el vuelco en colectores pluviales es de 2000 NMP/100ml. A su vez, en la
descarga del PV al río el valor de coliformes fecales fue de 930 NMP/100ml, muy cercano
al límite admitido, que para vertido en el río es del 1000 NMP/100ml.
En Regina nada ha cambiado en cuanto a tratar de dar una solución a los efluentes
cloacales que son volcados con un mínimo tratamiento al río. Si bien la localidad se
encuentra prácticamente en la cola del Alto Valle y recibe los líquidos que son arrojados
aguas arriba; también en esta ciudad poco es lo que se ha hecho para colaborar con la
salubridad de las aguas: las piletas con las que se cuenta para el tratamiento de los efluentes
tienen casi 40 años de existencia y fueron proyectadas para una población menor. Y de las
cuatro solo dos están en funcionamiento, por lo que el tratamiento es parcial. Hugo Curzel
integrante del grupo Edesa, que trabaja sobre cuestiones ambientales, energéticas y de
alimentación, indicó que en las muestras tomadas en diciembre el nivel de contaminación
con escherichia coli estaba muy próximo a los niveles máximos para que no pueda ser
utilizada.
Choele Choel, cabecera del Valle Medio, es la única localidad de la zona que vuelca todo y
sin tratar. Se arrojan cantidad de residuos líquidos provenientes de las 2.800 conexiones del
sistema cloacal, más las 2.000 conexiones que se sumarían de los nuevos barrios. Sino que
también la única industria asentada en la ciudad que produce pasta y cubeteado de tomate, y
vuelca sus residuos al río. Fuentes de la empresa sostienen que se le hace un tratamiento
para no desecharla cruda, tras utilizarla en el proceso de producción. Este panorama
preocupante tiene un horizonte cercano de solución: del vertido total de líquidos se pasaría
a ser la primera ciudad de la provincia en tener vuelco cero (ver recuadro).
En Viedma y Patagones, la Justicia Federal que encargó una medición de las aguas a
Prefectura Naval aun no recibió de esa fuerza los resultados correspondientes en virtud de
que las muestras de agua fueron trasladadas a Buenos Aires. Al respecto, el superintendente
del DPA, Fernando Curetti insistió en la sanidad del río poniendo como ejemplo que el
intendente de Patagones, José Luis Zara, le mencionó que el hospital Pedro Ecay de la
ciudad maragata no registró casos de gastroenteritis, y que pudieron haber estado ligados a
problemas con el agua del río.
Arrojo en Cipolletti. Según el DPA, desde Roca hasta la desembocadura, todos los
balnearios están aptos para su uso.