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EL CONEJO Y EL ESPECTRO DEL PANTANO

Erase una vez un conejo que vivía en un bosque muy lejano. Un día el
conejo estaba muy aburrido porque todo el tiempo estaba solo, no tenía
amigos con quienes jugar ni compartir momentos de alegría, así que
decidió irse a las profundidades del bosque en busca de la felicidad; el
conejo caminó y caminó por horas hasta que al fin llegó a un pantano, allí
se detuvo a tomar un poco de agua. Mientras estaba tomando agua, de
repente se apareció un espectro en el agua, era una especie de venado
pero solo era su reflejo.
El conejo se asustó y le preguntó: “¿ Quién eres?”, el espectro del agua
respondió: “Soy Annie, (una venado que se ahogó en el pantano dos otoños
antes) pero no te asustes yo solo quiero ser amigable”. El conejo al
sentirse tan solo decidió quedarse y hacerse amigo de Annie.
Pasó el tiempo y el conejo se encariñó tanto con Annie que sus
sentimientos eran muy confusos, él creía que estaba enamorado pero Annie
solo era un espectro, es decir, no estaba viva, ellos solo podían verse en la
orilla del pantano. El conejo envejeció y aún seguía enamorado de su
amiga Annie, el conejo decidió expresarle su amor a Annie en una noche de
luna llena y el le dijo que lo único que le pedía a la luna era que pudieran
estar juntos por siempre.
Esa noche el conejo murió y al día siguiente en el pantano se escuchaban
dos risas diferentes a la orilla del pantano, eran el conejo y Annie que
estaban juntos como el conejo se lo había pedido a la luna.
No importan las diferencias, si en realidad amamos algo y lo deseamos con
todo nuestro corazón se pueden cumplir.

Jhan Carlos Tamayo Carrascal


ISER

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