cosa que me importara en la vida: viajar. Hasta esa fecha solo había salido de España dos veces, pero necesitaba conocer mundo, fuera como fuera. Mi plan era terminar el bachillerato y conseguir una beca que me permitiera irme lejos a seguir estudiando. Pero para eso todavía faltaban dos años, tiempo que veía inconmensurable… Así que tenía que buscar una forma de poder viajar sin que me costara dinero (ya que no tenía un duro y las cosas en casa no estaban como para que yo me fuera por ahí de turismo). Y la encontré: me iría a trabajar de niñera a Inglaterra durante un verano. ¡Era el plan perfecto! Solo tenía que comprar los billetes de avión —los más baratos— y después me pasaría todo un verano en un país que recorrería de norte a sur gracias al dinero que me iban a pagar por cuidar de un niño.