“Descubrieron la idiotez del pueblo, y en lugar de tratar de remediarla, de ella
se aprovecharon” …. Se entiende por populismo al sistema político alternativo que rechaza a los partidos tradicionales y sus gobiernos, recurre al pueblo para construir su poder y adopta unos ideales en función de dónde se desarrolla; En los países ricos suele ser racista, xenófobo, nacionalista, de derechas; en cambio en los países pobres es revolucionario y altermundista, lo que conocemos como de izquierdas. Juegan «con la necesidad de los pueblos para imponer una dictadura, anulando la dignidad de las personas, la ignorancia y de mantener a los pueblos sometidos bajo la ilusión de que solo los bienes materiales son los que importan a la hora de votar». (Este es el discurso que pronunció Gloria Álvarez. Una politóloga, y escritora guatemalteca en su intervención en el Parlamento Iberoamericano de la Juventud 2014). Se puede decir entonces que el populismo nace en una sociedad gracias a la “ineptitud” de los gobiernos en cumplir con su única función de cargo. Manejar los bienes públicos de manera limpia y transparente para permitirle igualdad y beneficios al pueblo en general haciendo “huecos” desfavorables que afectan el patrimonio de unos y la liberta de participación de otros. “El buen pueblo es feliz con el populismo”. Las castas, las elites siempre serán los nombres dados por los “libertadores del buen pueblo” a aquellos que se aprovechan de las necesidades de estas oprimidas almas. ¡Es legítimo este modelo político Impuesto por las elites para joder al buen pueblo? (más bien masoquista, ignorante y dado al mejor postor) pues NO LO ES! Es necesario destruirlo todo y hacerlo de nuevo. Es necesario darle la palabra al pueblo. A VOSOTROS. Son palabras dulces que siempre utilizan estos supuestos veladores del pueblo dándose a conocer como hombres amantes del sentido fervor del deber que los compromete a trabajar a favor de pisoteados por las elites (derechas e izquierdas) para traer soluciones radicales identificando a los culpables como la plaga que acabo con la democracia y la paz. El populismo basado en mentiras que aparenta ser la solución de todo, de raíz y sin tanto proceso tienta, adula, engaña, divide y enfrenta, despierta odio y resentimiento y es alimentado día a día con el “discurso glorioso y libertador ” de su líder y como en este sistema el pueblo habla por medio de su líder, cualquiera que contradiga al líder contradice al pueblo y esto no se puede hacer, quien lo hace es su enemigo (los malos de paseo) y por consiguiente deben cambiar su postura y apoyar al sistema del pueblo o serán eliminados de una u otra forma, dándose como jueces juzgadores de lo bueno y de lo malo por lo que conviene al pueblo y firmando sentencias con su esfero de propio ODIO. De forma absolutamente sarcástica dan a entender que verdadero problema de la sociedad esta coincidencialmente en el otro bando (derecha o izquierda) donde apretando al sistema opresor sin marcha atrás se elimina el gran problema que había, y hay que reconocerlo, ¡no suena nada mal! Estas ideas populistas son vacías, sin fundamento, ilusorias, magnificas y agradables al oído de los incautos por lo cual son peligrosas porque a pesar de que no ofrecen nada real enamoran perdidamente, bien advirtió el maestro Popper de estos peligros. Esto es lo que aprovechan estos dioses de populismo escudados en la idea de ser nada más la voz del pueblo revolucionario, encarnado en ellos los cuales actúan cuando y como el pueblo se los pide;” El pueblo se mueve con pasiones, no con razones” buscando enemigos exteriores o inventándoseles desde el interior (burgueses conspiradores, guerrilleros, traidores de la patria, etcétera)