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vProblemas en el aula

13 de agosto de 2010 Publicado por Hilda Fingermann

En el aula se produce una intensa interacción social y es lógico y natural que surjan
problemas: alumnos que no prestan atención, otros que molestan al profesor y/o a los
compañeros, y hasta algunos que exceden de lo que se entiende como de normal tolerancia
(insultos o agresiones físicas) donde ya hablamos de violencia escolar.

Estos problemas exigen la activa intervención del docente y en muchos casos del personal
directivo y del gabinete escolar. Otros problemas afectan directamente el aprendizaje: los
alumnos están distraídos, tienen poca capacidad de escucha activa, las estrategias de
motivación resultan insuficientes, su comprensión lectora es muy escasa, parecen siempre
abstraídos en sus propios pensamientos, etcétera.

Sin embargo, estos problemas de conocimiento no son ajenos a los problemas de conducta, ni
a la conformación del grupo escolar. Aulas repletas de niños ruidosos impiden al docente el
éxito de su tarea. No se puede enseñar en el caos, ni exigir en ese ámbito, concentración. En
un ambiente de calma puede dedicarse más tiempo para ayudar a los alumnos con menos
conocimientos previos o con dificultades de aprendizaje, en medio del bullicio eso es
imposible, pues se debe destinar el tiempo a recomponer la calma.

En ciertos casos, los problemas de conducta en realidad son insignificancias que conviene no
maximizar y tratar de atraer la atención de los alumnos con alguna motivación especial. En
algunas ocasiones los niños molestan solo para llamar la atención. Si el maestro los ignora es
muy probable que cesen en su actitud, ya que no obtuvieron el resultado esperado.

La actitud preventiva del maestro es muy importante. Se deben planificar tareas para todo el
tiempo de clases, los momentos libres son propicios para los disturbios. Enseñar el valor de la
palabra y las consecuencias negativas de los actos de violencia, no es perder el tiempo.
Dedicar una o más clases a ello es sumamente productivo, en una sociedad donde la violencia
verbal y física se encuentra instalada en todos los ámbitos y sectores sociales.
La estrategia de resolución de problemas, importa hablar hasta llegar a un entendimiento o
acuerdo, e implica un gran costo en esfuerzo temporal y de paciencia, pero sus efectos son
mucho más perdurables. En los casos en que el problema sea serio conviene no interrumpir la
clase y hablarlo en el recreo, en privado con los involucrados.

No hay estrategias infalibles, cada individuo y cada grupo humano responde a distintas
características y así como no hay enfermedades sino enfermos, ni recetas médicas infalibles
para todos, los problemas escolares deben ser tratados con distintos caminos de solución
hasta encontrar el adecuado.

Dentro de las estrategias se recomienda dar órdenes en tono respetuoso, sin elevar la voz,
donde las instrucciones aparezcan claras. Cuando es la seguridad la que resulte amenazada
no hay tiempo para conversar el problema, hay que intimar a que cese el peligro. Las órdenes
deben contener la consecuencia de su desobediencia, para crear la responsabilidad sobre los
actos humanos libres. Un maestro debe estar abierto al diálogo, pero también debe tener la
presencia suficiente para ser reconocido como autoridad, capaz de imponerles límites, de
manera responsable y eficaz.
Los grandes problemas para el docente

1. Falta de atención
Dar una clase difiere mucho de estar en el cine o en el teatro, en ambos casos la
atención de los asistentes está puesta en la pantalla o en el escenario según sea el
caso. Pero, cuando estás en una clase y particularmente en el aula, mantener la
visibilidad es un gran reto. A tu alrededor hay mapas, ventanas y otros alumnos que
distraen la atención del educando.

Los especialistas recomiendan que, con la finalidad de mitigar la falta de atención,


estés de pie y en movimiento constante para que los alumnos fijen su atención en ti.
Cuando te desplazas inteligentemente por el espacio del aula, el alumno se fija en ti
y no en otros elementos.

Cuando estás sentado lo más seguro es que tanto tú como tus alumnos acaben por
tener sueño, de esta forma sería un aula invisible.

Además, al estar de pie es más fácil explicar temas de forma horizontal y vertical,
tanto en la pizarra como entre los pasillos del aula. El hecho de estar parado aumenta
el lenguaje no verbal tanto para que tú y tus alumnos lo aprendan. En esa forma de
lenguaje hay una transmisión de conocimiento significativa.

Además, al estar de pie puedes incrementar el control sobre el aula pues tienes más
visión y pones orden de manera sencilla ante cualquier distractor o conducta
disruptiva.

2. Escuchar con atención


La enseñanza popular dice que no es lo mismo oír que escuchar. Cuando oyes a un
alumno lo único que estás haciendo es saber que está ahí, pero sin saber qué es lo
que dice. La escucha consiste en conocer de forma activa el mensaje que tu alumno
quiere darte. Se trata de transmitirles que lo que te están diciendo es importante para
ti.

Lo otro es que muchas veces los propios alumnos no te escuchan ¿les has mostrado
esta distinción? Lo que ambos tienen que decir en este juego del aula es igual de
importante por lo que le tienes que dar lugar a la escucha. De otra forma la clase será
habladuría, poca atención y mucha deserción.

La escucha se trata también de desarrollar empatía pues, es una realidad que en todo
momento tus alumnos quieren atención, por eso, a medida que sea posible,
escúchalos como ellos te escuchan a ti. No construyas una relación distante ni
negativa, más bien muéstrales que te preocupas por ellos, por sus intereses e
inquietudes.

3. Prometer y no cumplir
Como profesor, lo más probable es que constantemente tus alumnos te pidan cosas
que tú prometes. Recuerda que hay miles de cosas que les convienen y a la hora de
exigirlas lo ideal es que se las cumplas, si lo hiciste como una promesa. Tus alumnos
tienen una excelente memoria para cosas como esa.

No obstante, tienes que ser escrupuloso con aquello que prometes pues, si de
antemano sabes que no lo vas a cumplir, por qué mentir. No sólo en el aula sino en
la vida entera, una promesa incumplida puede volverse en tu contra. Cuando
incumples una promesa lo único que te ganas es el desprecio de la gente, por cruel
que esto pueda sonar.

El profesor que desecha una promesa, no hace más que ganarse la falta de respeto de
parte de sus alumnos. Así que, si no puedes cumplir, mejor no prometas.

4. No cumplir plazos
Otro de los grandes problemas para los profesores es el incumplimiento de plazos
adecuados. Es común que ante un grupo tremendamente grande sea difícil revisar y
calificar todos los trabajos, exámenes y además, entregar reportes a la coordinación
escolar pero, el incumplimiento de los plazos puede acarrear problemas.

No obstante, en un buen profesor debe caber el esfuerzo por entregar correcciones a


tiempo y con la mayor brevedad posible. Los alumnos valoran mucho que sus
trabajos estén corregidos de manera puntual y con eso puedes ganarte su respeto. Si
entregas los trabajos o exámenes con observaciones a tiempo, tus alumnos se
sentirán importantes.

Pero, además, debes tener un control claro de qué han entregado tus alumnos, qué no
y qué más falta para concluir el año escolar de manera exitosa. Esta también es una
parte importante de tu trabajo como docente, y de no cumplirla, podrían tacharte del
maestro “barco” o irresponsable.

5. Mezclar la vida privada con el trabajo


En la actualidad las redes sociales son una parte importante de nuestra vida. A ellas
recurrimos para estar cerca de nuestros seres queridos y para estar al tanto de lo que
ocurre en materia de noticias nacionales e internacionales. No obstante, las redes son
también la puerta de entrada a nuestra vida privada.

Con el surgimiento de las redes sociales se ha quedado atrás la idea de que los
profesores bajan del cielo todos los días para compartir el conocimiento con
nosotros, y se han vuelto cada vez más humanos. Pero, ¿es esto prudente?

La recomendación es que todas las clases deben concentrarse en lo educativo y no


en lo personal. Claro que puedes compartir experiencias personales con ellos, al
final esto es una enseñanza de vida para ellos, pero de eso a hacer de tus alumnos tus
amigos en Facebook hay una gran línea.

Aunque tus alumnos te hagan más y más preguntas de tu vida privada o te envíen
solicitudes de amistad lo mejor será simplemente ignorarlos a fin de mantener una
relación estrictamente profesional.

Por último, recuerda que aunque no es fácil ser un gran profesor tampoco es
imposible. Aprovecha tu conocimiento y explótalo. Recuerda que como maestro
tienes derechos y obligaciones que tienes que cumplir, y siéntete con la libertad
de mejorar tus condiciones de vida. No tienes cualquier profesión, sino una de las
más admirables de todas.

Los conflictos implican situaciones en las que dos o más personas tienen un desacuerdo o se
encuentran en oposición porque sus intereses o intenciones resultan incompatibles. En el aula,
pueden darse conflictos entre el profesor y los alumnos o entre los propios alumnos, y tanto unos como
otros pueden generar un clima que dificulte el desarrollo de las clases y tu labor como docente. Sin
embargo, si se afrontan de manera adecuada, pueden contribuir a mejorar la relación entre las personas
enfrentadas y en el grupo donde se integran, abriendo nuevos caminos y posibilidades de avanzar. Te
damos diez consejos que puedes poner en práctica para gestionar y resolver los conflictos en el aula.

DIEZ CLAVES PARA AFRONTAR EL CONFLICTO


1. Trabaja en la prevención. Un buen ambiente en el aula y una adecuada disciplina pueden ayudarte a evitar el
inicio de conflictos. Actúa de manera individual con los alumnos que puedan presentar problemas o dificultades,
practica el refuerzo positivo, educa en valores y favorece el desarrollo de habilidades emocionales y de
competencia social en tus estudiantes a través de actividades grupales. Puedes establecer unas normas básicas
de convivencia como estas y llevar a cabo actividades para mejorar el diálogo y la convivencia en el aula. Esta
guía de normas de aula y proactividad, Bientratando, incluida en la campaña para la mejora de la convivencia
en las aulas navarras, también puede servirte de ayuda.
2. Fomenta y cuida la comunicación. Tanto la comunicación verbal como la no verbal marcan las relaciones en
el aula. Debes trabajar las habilidades comunicativas de tus alumnos pero también las tuyas, porque de ellas
depende en buena medida que en el aula haya un clima de tranquilidad o de crispación. Cuando el conflicto ya
se ha desarrollado, la comunicación también puede ser la llave para afrontarlo con calma, mediante el diálogo
y la escucha activa de las partes implicadas. Aquí tienes algunas ideas sobre la importancia de la comunicación
en los conflictos.
3. Mantén el control del aula. Aunque el diálogo y la colaboración entre alumnos y docentes son importantes,
como profesor te corresponde marcar el ritmo y el desarrollo de la clase. Es importante que, ante problemas de
conducta o faltas de disciplina, puedas mantener ese control sin alterarte, evites el enfrentamiento directo o la
discusión y te mantengas firme. Responde con calma y rotundidad y, si lo consideras necesario y el conflicto
se repite, habla con el alumno o alumnos implicados de manera individual, fuera de clase, donde los estudiantes
conflictivos no se sienten tan protegidos y será más fácil reconducir su conducta.
4. Prepara a tus alumnos en la gestión de conflictos. Si tus estudiantes están preparados para analizar, afrontar
y resolver los problemas que les surjan conseguirás que muchos conflictos se zanjen antes de agravarse.
Este cuaderno de actividades sobre mediación y resolución de conflictos tiene ideas interesantes para Primaria
y en este documento o este encontrarás reflexiones y propuestas de trabajo para Secundaria.
5. Analiza la naturaleza, gravedad y persistencia del conflicto. En el aula pueden darse diversos tipos de
conflictos (curriculares, sociales, culturales o relacionales) y en distintos grados de intensidad. Es importante
que identifiques el origen del conflicto, el problema concreto, quién está implicado y cuáles son las necesidades
e intereses de todas las partes del conflicto. Por ejemplo, en pequeños problemas diarios, o con alumnos que
solo quieren llamar la atención, la solución puede estar en mantenerte firme, conservar la calma y, simplemente,
seguir con el desarrollo de la clase. Pero si el conflicto se repite o se agrava, tendrás que recurrir a estrategias
de intervención: consenso, mediación, conciliación, arbitraje, arreglo normativo etc.
6. Pon en práctica distintas dinámicas de resolución de conflictos. Según el tipo de conflicto al que te enfrentes
o la edad de los alumnos, las medidas para solucionarlo pueden variar. Tras analizar la situación, opta por la
dinámica o actividad que consideres más adecuada. Este artículo te explica las principales dinámicas de
resolución de conflictos en el aula y en este documento encontrarás un manual de actividades para la resolución
creativa de conflictos.
7. Busca soluciones concretas, constructivas y duraderas al problema. En vez de enfocar el conflicto desde
las posturas de quienes lo protagonizan, analiza los intereses y necesidades de cada uno y, en un ambiente de
negociación, ayuda a cada uno a reflexionar sobre la situación y armonizar sus posiciones. Debes profundizar
en las causas del conflicto y no solucionarlo de manera superficial o temporal ni limitarte a dar la razón a una
de las partes, sino encontrar las claves para atajarlo y resolverlo a largo plazo.
8. Recurre a la mediación. Cuando las partes implicadas en un conflicto no consiguen resolverlo por sí mismas,
se puede poner en práctica esta herramienta, muy útil para los enfrentamientos entre alumnos donde el docente
ejerce de mediador. Tu papel en este caso es favorecer el proceso y ayudar así a las partes a tomar decisiones y
llegar a un acuerdo: reúne a los implicados en el conflicto, escucha sus opiniones y su versión, promueve el
diálogo entre los implicados e invítales a buscar soluciones. También puedes poner en práctica la mediación
entre iguales, donde el mediador es otro alumno no implicado en el conflicto. En cualquiera de los casos, se
trata de una técnica muy interesante porque se basa en la comunicación, la autonomía y la igualdad y, por lo
tanto, es una buena alternativa a los castigos y sanciones. Además, al aceptar los protagonistas sus propias
resoluciones, es más probable que sean justas y equitativas y los actores se comprometan con ellas y las
cumplan. Esta guía repasa los enfrentamientos que pueden surgir en el ámbito educativo y explica las claves de
la mediación.
9. Actúa de manera coordinada. Cuando hay un alumno o un grupo o clase que genera conflictos es importante
diseñar una estrategia compartida con el resto de profesores, de modo que el problema se afronte de manera
transversal y coordinada. Así, unos y otros docentes compartirán los mismos criterios, avanzarán en la misma
dirección y contribuirán a reforzar la resolución del conflicto. En los casos más graves o cuando así lo decida
el equipo docente, puede ser necesario involucrar también en este plan coordinado a la familia, como parte
esencial de la educación del niño.
10. Haz un seguimiento. Los actos de violencia y otros conflictos requieren cierto seguimiento. No descuides la
situación una vez resuelta, presta atención a cómo evoluciona y, ante cualquier indicio de que el conflicto
resurge, actúa para atajarlo y refuerza las normas o las soluciones consensuadas.
Más información:
PROBLEMÁTICA EDUCATIVA
En el presente trabajo se desarrollaran puntos de importancia sobre la educación
con el propósito de presentar información en grandes rasgos, es importante recalcar
el concepto de educación ya que es de aquí donde tiene partida el desarrollo
de cualquier aspecto en el ámbito escolar.

Se describirá y desarrollará el concepto de educación así como la educación


formal y la educación informal, estos aspectos se plasmarán claros y precisos con
la finalidad de que el tema desarrollado sea apropiadamente explicado.

Se mencionarán las principales problemáticas que hay en la actualidad en


el contexto educativo, a estas problemáticas es importante darles
resultado para que no vayan incrementando, y así la educación no vaya
en una declinación y con esto tengamos resultados negativos y a causa
de esto el rezago vaya acrecentando en los alumnos.

En el desarrollo se inclinará a la problemática de la escasez de conocimientos en


los niños a causa de que el docente no cuenta con los conocimientos aptos, y es
pro ello que no utiliza estrategias, técnicas y dinámicas adecuadas para que el
alumno adquiera y desarrolle sus conocimientos.

Esta problemática en la actualidad tiene el mayor porcentaje según pruebas


realizadas, esto va en incremento es por ello que es urgente darle una respuesta,
para que así se paralice o se elimine por completo, esto depende del docente ya
que es el que se debe de entregar al 100% en todos los aspectos a su trabajo y en
realidad ser un profesional es su área laboral.

Hablar de educación es entrar a un tema de controversia muy amplio en la


actualidad, ya que el ámbito educativo involucra a toda la sociedad, el hombre por
naturaleza depende totalmente de ella ya que necesita adquirir, aprender y
desarrollar conocimientos los cuales son empleados en la vida cotidiana.

“La educación es un proceso bidireccional el cual modifica las formas de conducta


humana ya que se transmiten nuevos conocimientos, valores, costumbres y formas
de actuar, la finalidad o el objetivo de la educación surgen de la filosofía que orienta
la vida dentro de una cultura. Representa los atributos que la sociedad espera y
necesita encontrar en sus miembros” (Dalilla C. Sperb).

Desde muchos años atrás la educación ha sido y seguirá siendo un factor necesario
e indispensable para la sociedad ya que todo hombre necesita adquirir nuevos
conocimientos, aprenderlos de manera facilitada, para después estos mismos
desarrollarlos y así dar respuesta a las necesidades y problemáticas del
contexto. La educación se divide en educación formal y en educación informal,
estos tipos de educación permiten al individuo adquirir así como enriquecer
conocimientos y habilidades mediante las experiencias cotidianas.

La educación informal son actividades cotidianas, las cuales son llevadas a cabo
sin ninguna organización y sin ningún marco oficial, desde pequeños la ejercemos
sin duda alguna y en alguna de las veces no la tomamos en cuenta ya que se nos
facilita o familiariza.

La educación formal es la que se lleva a cabo en las instituciones educativas, las


cuales son empresas organizadas por recursos humanos, así como funcionales
bajo la autoridad del director el cual es el responsable, su objetivo primordial es
impartir educación a individuos que desean superarse, estas instituciones cada día
crecen en todos los aspectos , por eso es importante e indispensable que la mayoría
de las escuelas ya sean de cualquier nivel educativo, cumplan con los
requisitos adecuados para que la institución sea de calidad .

La educación formal básica en México esta conformada por la educación preescolar,


primaria y secundaria, por lo que se considera importante mostrar algunas
características, de cada uno de estos peldaños.

Ruiz (2007) menciona que la educación preescolar constituye el primer peldaño de


la formación escolarizada del niño. En este nivel se atiende a niños de 3 a 6 años
de edad, sin duda alguna es una etapa decisiva en el desarrollo del ser humano, ya
que en ella se forma el cimiento de la personalidad y la base de una continuidad en
la escuela primaria.

El jardín de niños, representa el primer nivel del Sistema Educativo Nacional (SEN),
se inicia una vida social inspirada en los valores de identidad nacional, democracia,
justicia e independencia. Entre sus principios se considera el respeto a las
necesidades e intereses de los niños, así como su capacidad de expresión y juego,
favoreciendo su proceso de socialización. Sitúa al niño como centro del proceso
educativo y al docente como parte importante del mismo, ya que conoce los
aspectos más relevantes que le permiten entender cómo se desarrolla el niño y
cómo aprende.

Para Pinto (2007) la educación primaria es la posterior al nivel preescolar y viene a


ser el eslabón que antecede al nivel de educación media (secundaria). Consta de
tres ciclos escolares: el primero que abarca los grados de 1º y 2º; el segundo 3º y
4º y el tercero 5º y 6º grados. Su universo de atención está dirigido a los menores
de entre 6 y 14 años de edad.

El nuevo plan de estudios en este nivel tiene como propósito organizar la enseñanza
y el aprendizaje de contenidos básicos para asegurar que los niños:
1). Adquieran y desarrollen las habilidades intelectuales (lectura y escritura, la
expresión oral, la búsqueda y selección de información, la aplicación de las
matemáticas a la realidad) que les permitan aprender permanentemente y con
independencia, así como actuar con eficacia e iniciativa en las cuestiones prácticas
de la vida cotidiana.
2). Adquieran los conocimientos fundamentales para comprender los fenómenos
naturales.
3). Se formen éticamente mediante el conocimiento de sus derechos y sus deberes
y la práctica de valores en su vida personal, en sus relaciones con los demás y como
integrantes de la comunidad nacional.
4). Desarrollen actitudes propicias para el aprecio y el disfrute de las artes y del
ejercicio físico y deportivo. Pinto (2007 Párr. 1)

Los principios filosóficos de la educación básica se fundamentan en el artículo 3º


de la Constitución Federal de los Estados Unidos Mexicanos que postula una
educación laica, obligatoria y gratuita. Según la SEP (2006), La educación
secundaria es declarada como un componente esencial, como etapa de cierre de
la educación básica obligatoria, es a través de ella que se pretende brindar a todos
los individuos oportunidades formales que el permitan adquirir y desarrollar
conocimientos, valores, habilidades y competencias necesarias, para enfrentar los
retos que la cambiante sociedad demanda.

Sustentado en el artículo tercero constitucional y en la Ley General de Educación,


la SEP (2006), en el Programa Nacional de Educación 2001-2006 impulsa la
reforma de la educación secundaria, la cual no sólo pretendía cambiar los planes y
programas de estudio, sino que también el compromiso de un apoyo constante a la
profesionalización de los directivos y maestros de este nivel, un mejoramiento a la
infraestructura y del equipo de la escuela y el promover nuevas formas de
organización y gestión para fortalecer a la escuela.

Para que una institución educativa se pueda desempeñar es necesario que posea
directivos y docentes los cuales son las personas más indicadas para organizar,
dirigir, administrar y transmitir conocimientos aptos y adecuados dependiendo el
nivel de escolaridad en el que se encuentre el alumno, para poder desarrollar un
tema indicado es necesario contar con una formación educativa y un
profesionalismo, así como la vocación para que lo transmitido tenga una
fundamentaciòn en que basarse.
El lugar indicado para trasmitir los conocimientos de un docente es en aulas de
instituciones, cuando se desarrolla una sesión de clases dentro de un aula se realiza
con el objetivo que el alumno adquiera conocimientos nuevos, valores, actitudes ,
aptitudes, desarrolle sus habilidades, interactué con sus compañeros para que se
vaya desenvolviendo con la sociedad, etc. sin embargo no siempre se cumplen los
objetivos ya que hay una variedad de factores que influyen para que el niño no
obtenga lo antes mencionado.

Los factores que influyen en el desempeño del niño pueden ser personales, esto es
cuando el niño tiene baja autoestima, cuenta con diferentes capacidades, no le
gusta la escuela, es de carácter vulnerable, entre otros. Los factores familiares son
cuando hay problemas en el matrimonio como el divorcio, padres alcohólicos,
drogadictos, cuando hay violencia física o psicológica, así como UN nivel económico
bajo, alimentación mínima, infraestructura del hogar en malas condiciones,
ubicación de este mismo retirada de la institución, etc.; los factores sociales es
cuando no es aceptado por sus compañeros e incluso por el profesor y por supuesto
otros de los factores que influyen son los escolares en el cual entra la infraestructura
de la institución, la indisciplina, el cumplimiento de las tareas, trabajos en clase, la
asistencia al aula, participación, la ética del profesor, desacuerdos con el directivo,
cumplimiento de asistencia y el desarrollo inadecuado del plan de trabajo, entre
otros.

Estos factores y muchos mas influyen en la educación de los niños, estas


problemáticas en su mayor porcentaje son resultas por completo o por lo contrario
incrementar dando resultados negativos o solamente se pacifican por un
determinado tiempo con el propósito de no incrementar su complejidad.

Las problemáticas se ven cada día mas en las instituciones educativas, estas se
desarrollan dependiendo del contexto en el que se este llevando a cabo, es urgente
que se detenga o descarte inmediatamente todos los factores que puedan afectar
de alguna manera a la educación.

De las problemáticas anteriormente mencionadas, se retomara y enfocara una


problemática común en las escuelas, la cual es la preparación de estudios y
el desempeño de los docentes dentro del aula, ya que según investigaciones, cada
día se va declinando la labor del docente, por que el maestro no cuenta con los
conocimientos previos, no hay estímulos por parte de sus subordinados o
simplemente por que no tienen la vocación para ello.

Ser docente no significa solamente impartir una clase, esta vocación va mas haya
ya que el docente debe ser una herramienta de ayuda en todos los aspectos, debe
ser mediador, psicólogo, padre de familia y sobre todo amigo en el cual el niño
pueda confiar en el para que así haya mas interacción y el docente este al tanto de
las problemáticas que puedan afectar en algún momento en el desempeño y
aprendizaje del alumno.

Sean generado resultados negativos por que el docente no desarrolla su labor como
debe de ser, no es solo el alumno es el responsable de adquirir y desarrollar
nuevos conocimiento, todo aprendizaje obtenido por parte de los educandos en los
niveles escolares obligatorios depende un porcentaje mayor del profesor.

Es por ello que en la actualidad se les esta obligando a los docentes a prepararse y
utilizar las diferentes estrategias que existen con el propósito de que el alumno no
solamente asista a la escuela por obligación sino que tengan una participación
generando resultados positivos y significativos.

Según Marzano el alumno la mayoría de las veces asiste a clases por compromiso,
por diversión y su último interés es el aprendizaje, es por ello que como docentes
se tiene la obligación de que el alumno asista a clases motivado y con ganas de
adquirir e enriquecer su aprendizaje la enseñanza debe ser por medio de
estrategias, técnicas y dinámicas las cuales ayudaran a desarrollar más fácilmente
el proceso de enseñanza-aprendizaje y sobre todo que este sea significativo en el
educando, aquí entra la profesionalización del profesor.
Primeramente antes de impartir una clase el docente debe de realizar una
planeación con el objetivo de obtener resultados satisfactorios ,la planeación es un
formato donde se desarrollan todas las actividades que se llevarán a cabo
durante la sesión de clase, en ella también se plasman las estrategias que usarán,
así como el tiempo y la especificación de los materiales que se utilizarán, entre
otros puntos los cuales son importantes para que el docente desarrolle su tema
adecuadamente y así el alumno conciba o enriquezca sus conocimientos.

EJEMPLO DE UNA PLANEACION:

Tema : Duración:
Objetivo:

Actividad Estrategias Técnicas Materia- Dura- Evalua-


enseñanza aprendizaje les ción ción

Además de la planeación es importante que al finalizar de cada sesión el docente


realice un diario de campo el cual le servirá como apoyo para ver sus dificultades,
sus defectos, así como puntos de vista efectivos los cuales podrá seguir utilizando
para que el niño tenga un aprendizaje positivo.

EJEMPLO DE DIARIO DE CAMPO:

FECHA: DIA/ MES /AÑO

ACTIVIDADES:

RESULTADOS POSTIVOS:
RESULTADOS NEGATIVOS:

Una de las respuestas para que una clase sea efectiva y productiva comenta
Ferreiro es la utilización de los diferentes momentos, los fundamentales y
primordiales son siete los cuales resumen las actividades necesarias para que los
alumnos construyan su conocimiento, el modelo de Ferreiro brinda beneficios
positivos para el docente y el educando, los momentos son los siguientes:

Momento A: Creación de ambientes favorables para aprender y de activación


Significa hacer que los alumnos se sientan bien.
Reúne toda una serie de condiciones físicas favorables, considerando la ventilación,
iluminación, limpieza, orden e incluso el olor, Implica captar la atención de quien
aprende y movilizar sus procesos y operaciones mentales con una intención
educativa previamente planteada que lo moverá hacia acciones concretas en
dirección de una meta de aprendizaje.
ESTRATEGIAS:
Lluvia de ideas.
Conversación Formal.
Frase Mural.
Lámina/ foto mural.
Frases incompletas.
Concordar/ discordar.

Momento O: La orientación de la atención de los alumnos.


Tiene la finalidad de llamar la atención de los escolares sobre lo que se aprende,
como se aprende y los resultados logrados o por alcanzar, para conseguir que cada
uno se estructure el conocimiento. La atención es un proceso psicológico básico
que consiste en enfocar aspectos de la realidad por lo llamativo o importante que
estos resultan para la satisfacción de necesidades y expectativas. Las estrategias
didácticas de la orientación promueven, el compromiso de los alumnos en su
aprendizaje, en la medida en que estos hacen suyo el objetivo.
ESTRATEGIAS:
Mini-lección.
Sistema de señales.
Periféricos.
Dar instrucciones breves y concisas.
Se recuerda lo que se quiere lograr con el estudio del tema.
Se expone brevemente el tema.

Momento P: El procesamiento de la información.


Consiste en la secuencia de acciones interrumpidas que permite al sujeto captar y
seleccionar estímulos de diferentes tipos, procesar según las necesidades e
intereses, para dar respuesta a los mismos.
Los alumnos, guiados por el maestro y empleando determinadas estrategias
procesan de forma activa independiente y creadora, un contenido de enseñanza.
ESTRATEGIAS:
Tomar apuntes.
Resumir.
Confeccionar fichas de trabajo.
Las cinco felices comadres.
Hacer osos.
Mapas.
Música en el aula.

Momento R: La recapitulación o repaso de lo que se aprende.


Consiste en exponer de forma sintética, sumatoria y ordenada, lo que se ha
expresado con anterioridad. La recapitulación es la función didáctica que activa los
procesos psicológicos superiores que posibilita el paso de lo ya visto,
enriqueciéndolo y ampliándolo, lo que favorece su integración a la estructura
cognoscitivista del sujeto. El aprendizaje cooperativo estipula que, más que el
maestro, el que debe recapitular es el alumno.
La recapitulación puede ser individual o por equipo, en cualquier modalidad o bien
en un primer momento puede ser individual y en otro posterior colectivo.
ESTRATEGIAS:
Elaborar textos de un correo electrónico.
Uso de resúmenes.
Completar frases.
Realizar un Chat presencial.
Inventario de lo aprendido.

Momento E: La Evaluación de los Aprendizajes.


La evaluación es recuperación de los aprendizajes y a su vez un momento de
aprendizaje por si mismos. Es la valoración que se realiza con el fin de determinar
que aprendizajes se logran, como se obtuvieron, que favoreció su logro y cuales no
se consiguieron y porque. El aprendizaje es un proceso y no una actividad final, es
una serie de acciones del ser humano orientada hacia determinadas metas que
involucra a la totalidad de la persona, Además estimula su desarrollo y
autorrealización. Desde la perspectiva del aprendizaje cooperativo, la evaluación
cuenta con dos dimensiones, la primera es una predominante académica e
individual y la segunda es social y grupal.
ESTRATEGIAS:
El portafolio.
Diario de equipo.
Calificación compartida.
Reflexión grupal.
Normas sociales.

Momento I: La interdependencia social positiva.


Desde el punto de vista del grado de relaciones de las personas entre si para
resolver una tarea, tomar una decisión, acometer un proyecto, son tres las posibles
decisiones:
Dependencia: El alumno necesita siempre y en todo momento de otra persona para
efectuar la tarea y si no recibe ayuda no es capaz de realizarla.
Independencia: El alumno tiene el nivel de desarrollo de los procesos cognoscitivos
y volitivos que le permite afrontar por si mismo y con éxito la tarea asignada.
Interdependencia: Es la relación que se establece entre los alumnos de un grupo
para compartir procesos y resultados de su actividad escolar.
ESTRATEGIAS:
Consenso.
Cuchicheo.
Enseñanza reciproca.
Plenaria.
Galería.
Asesoría académica entre alumnos

Momento SSMT: La Reflexión sobre Procesos y Resultados de la Actividad


de Aprendizaje.
En la psicología existen tres categorías vinculadas con la reflexión que son:
**Sentido y significado (SS), **Metacognición (M) y **Transferencia (T)
El momento SSMT es una clase de aprendizaje cooperativo que esta dedicado a la
toma de conciencia para aprender.
Para que se de un conocimiento personal y de los que nos rodean, se requiere una
reflexión, mediante ejercicios que promueven un pensamiento que hagan posible
que la información y el tipo de respuesta que se obtiene, pasen por una reflexión
personal y colectiva.
La reflexión equivale a detenerse a pensar, en tomar conciencia sobre algo de la
realidad que nos circunda, pero también de nuestra propia realidad.
La reflexión se da en tres tiempos: el antes, el ahora y el después.
ESTRATEGIAS:
**Sentido y Significado:
Precisar que se esta aprendiendo.
Motivar e interesar en la realización de la actividad.
Involucrarnos en la realización de la tarea.
**Metacognición:
Parafrasear.
Recapitular lo hecho.
Proyectar el pensamiento.
Inventariar.
**Transferencia:
Carta mental
PNI
Plan de acción.

Investigaciones realizadas mediante el método de observación han demostrado que


se repiten ciertos momentos en las clases en donde se aplican los principios del
aprendizaje cooperativo. Se tratan de periodos que se ocupan en actividades de la
misma naturaleza y con idéntica intención y que suceden durante tiempo que dura
la lección, para en su totalidad hacer de esta una actividad de aprendizaje activa,
participativa, de cooperación y vivencial

La reilación momento-actividad de una clase es dialéctica lo que significa entre otras


cosas que es vínculo dinámico que provoca el desarrollo de una secuencia en
función siempre de lo que se quiere lograr. No es una estructura lineal rígida, si no
todo lo contrario: los momentos se suceden en forma diferente en distintas clases;
mas aun su duración depende del objetivo de aprendizaje.

El orden y el tiempo de los momentos mencionados dependen de factores tales


como el contenido de la enseñanza, el objetivo por logar, las condiciones físicas y
recursos disponibles entre otros.

La preparación para ser docente es un reto, el cual se debe de afrontar siempre y


debe darse respuesta. Para concluir con el desarrollo de esta problemática es
importante sin duda alguna que el docente se interese más por su trabajo, ya que
gracias a ellos el alumno pude sobresalir, puede obtener más conocimientos, así
como habilidades, destrezas, valores, etc.

Por ello es importante que toda persona que se prepare para ser maestro, sea una
persona que tenga vocación para poderse desempeñar, que sea una persona
responsable, disciplinada, con valores, los cuales hacen que se distingue de otro
ser, el maestro deberá adquirir los conocimientos adecuados, así como utilizar sus
estrategias de aprendizaje en el aula y estas emplearlas de manera precisa, en el
tiempo, contexto y nivel educativo pertinente, para que así se den resultados
positivos y sobre todos significativos, los cuales pueda emplear el educando para
dar respuesta a sus propias necesidades y del contexto en general.
ausas de las dificultades de aprendizajes en niños
No es posible saber (en un primer momento) si el problema de aprendizaje se debe a una
cuestión física u orgánica: por ejemplo si el niño tiene algún problema visual o auditivo y
su problema en el aprendizaje se relacione con esto; o bien si se trata de algo emocional:
factores psicológicos, emocionales y/o ambientales por situaciones concretas que afecten el
desempeño escolar del niño. Por tanto, en una primera instancia no debemos descartar
ninguna posibilidad.

Una recomendación para los padres con niños con problemas de aprendizaje

Es importante aclara que, ante estos cuadros, los padres suelen asustarse mucho pero, por el
contrario queremos transmitir tranquilidad y certeza de que, en de la mano de un
profesional adecuado (dependiendo del problema real que socave al niño), éste puede (en
muchos casos) recuperar su vida tal y como la llevaba hasta el momento previo de
presentar problemas de aprendizaje.

¿Cómo corregir problemas de aprendizaje en los


niños?
Para poder dar respuesta a esto primero debemos hallar o detectar la verdadera razón de
su fracaso escolar. Es decir, puede ser que el problema del niño esté en relación con el
entorno escolar (compañero y un posible bullying por solo dar un ejemplo); problemas
físicos (dolores o disminución (auditiva, visual, etc); problemas psicológicos que aquejen al
niño (como la autoestima baja), etc.

Los niños con problemas de aprendizaje comparten algunas características similares


entre sí que es posible distinguir.
Características de un niño con problemas de aprendizaje
 Baja autoestima. El fracaso escolar trae consigo, mayoritariamente, niños con una autoestima
disminuida.
 Lentitud en la finalización de los deberes. Sean estos en actividades planteadas en hora de clase o
bien como deberes escolares.
 Distracción. Muchos niños, al no comprender aquello que explica la docente, se distraen con
facilidad. Esto lo pueden hacer de forma solitaria y aislada o bien generando un bullicio en el salón
y en complicidad con otros niños.
 Escritura y lectura. Tienen niveles de lectura mucho más lentos que otros niños de su misma edad
y muchas veces leen letra por letra. En cuanto a la escritura, tienen una letra muchas veces poco
legible. A menudo pueden evitar letras o bien invertir unas por otras.
 Matemáticas. En el área de las matemáticas, muchos niños presentan dificultades, aunque si el niño
tienen un problema en el área de matemática, no quiere decir que también lo tenga en otras áreas.

¿Qué pueden hacer los padres y los docentes para corregir los trastornos específicos
del aprendizaje?
15 Soluciones a los problemas de aprendizaje
en niños

1. Los niños requieren sentirse amados, comprendidos y respetados para que el proceso de
aprendizaje pueda SER más sencillo.
2. Debéis darle cariño, afecto y cercanía física, esta última los abastece de auto confianza y les
ayuda a liberar la mente de sus dudas en cuanto a sus capacidades.
3. Debéis enseñarles por medio del juego y actividades prácticas.
4. Debéis incentivarlo a jugar y estudiar en compañía.
5. Animarlo a usar su imaginación le ayudara a adquirir auto confianza.
6. Darle la libertad para que cometa errores y hacer cuantas preguntas sea necesario para que algo
quede claro.
7. Debéis tratar a los niños con justicia y con consideración.
8. Debéis fijarle límites y reglas pero que cuando se incumplan no debéis tratarlo con ira, ni
humillaciones sino con afecto.
9. Debéis enseñarle a enfrentarse a sus emociones.
10. Enseñarle a afrontar la frustración y el miedo.
11. Debéis exponerlo a situaciones difíciles para que pierda el miedo.
12. Debéis permitirle llorar y desahogar sus sentimientos.
13. Debéis darle y demostrarle vuestra confianza.
14. Debéis alentarlo cuando haga bien las cosas, felicitarlo e incentivarlo a seguir progresando.
15. Cuando falle animarle, debéis decirle que eso es parte de la vida y que la perseverancia es la clave
para el éxito.

⇒ En resumen ante las dificultades de aprendizaje debemos:

1. Buscar un profesional que cuente con las técnicas y las herramientas adecuadas, asegurará la
relación del problema de aprendizaje con algún aspecto o con algo concreto.

2. Es indispensable que padres y docentes les den su apoyo y contención.

3. Ayudar a que los compañeros no se burlen o critiquen al niño. Esto favorecerá mucho la autoestima
del niño.

4. Presentar el material de estudio en el área que el niño tiene dificultad de un modo entretenido; por
ejemplo en forma de juego.

Todos estos consejos facilitarán desarrollo sano y minimizarán los posibles dificultades
específicas de aprendizaje en niños

¿Te ha quedado claro cómo hacer frente a los problemas de aprendizaje en niños?
Me gustaría que me dejaras un comentario diciéndome si te ha
15 estrategias didácticas para
ayudar a estudiantes con
dificultades
24 de octubre de 2018 6

Si trabajas con niños, es muy probable que algunos sean muy inquietos o
presenten dificultades para lidiar con ciertas áreas. ¡Conoce estas tácticas
sencillas para facilitar su aprendizaje!

Resalta la información más importante en el material, así ayudarás a los estudiantes a recordarla más
fácilmente | Fuente: Shutterstock
224

 Ser profesor de niños pequeños puede ser difícil cuando estos tienen
dificultades para aprender.

 Ayuda a tus alumnos a asimilar mejor la información con estos trucos.

 Fomentar el lenguaje oral o utilizar materiales creativos ayudarán a los más


pequeños a asimilar los conceptos.
¿Eres docente a nivel escolar o preescolar? Posiblemente debas lidiar con
distintas dificultades o desafíos día a día. Ya sea porque algún niño es muy
inquieto, a otro le cueste concentrarse o uno de los alumnos no es muy amigo de
los números o las letras, existen diversas maneras de apoyar a los estudiantes en
su aprendizaje y hacer la experiencia escolar más amena para todos.
El blog educativo We Are Teachers generó una serie de tácticas sencillas que
pueden ayudar a los docentes a enfrentarse a estos desafíos. ¡Descúbrelas a
continuación!
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1. Comienza por el final


Para algunos niños puede ser complicado visualizar el producto final de ciertas
tareas. Al momento de asignarles un proyecto específico, enséñales, si es posible,
un ejemplo realizado por alumnos de años anteriores.

2. Forma parejas
Juntar a los alumnos en binas para realizar trabajos o proyectos puede ser muy
útil para ambas partes, ya que entre los dos pueden ayudarse a copiar las tareas,
tomar apuntes o leer el material en voz alta para entender mejor la propuesta.

3. Fomenta la oralidad
Si plantear las respuestas por escrito es una gran dificultad para algunos
estudiantes, puedes considerar permitirles expresarlas de forma oral para ciertas
tareas o pruebas. En algunos casos, también podrías brindar la posibilidad
de grabar las respuestas de sus tareas domiciliarias.

4. Aplica las pruebas a la mañana


Si los exámenes o pruebas son a última hora, es probable que esto reduzca
la capacidad de concentración de los alumnos. Intenta planificar estas
instancias de evaluación para las primeras horas del día.

5. Canta
Expresar la información de forma melódica puede ayudar a los estudiantes a
recordarla. Si no encuentras una canción en internet que refiera a lo que quieres
enseñarles, ¡invéntala!

6. Emplea recursos mnemotécnicos


Rimas, asociaciones de palabras con imágenes y otros trucos –como el de
colocar los números en orden y al revés para aprender la tabla del nueve– son
recursos divertidos y efectivos para enseñarle a tus alumnos y ayudarles a
recordar.

7. Destaca lo importante
Resalta, ya sea con un color flúor, con cursivas o con negrita, la información más
importante en el material. De esta manera, ayudarás a los estudiantes a recordarla
más fácilmente. Más adelante, ellos mismos podrán resaltar sus propios textos.

8. Emplea papel cuadriculado


A algunos niños les cuesta mantener los números alineados al
realizar operaciones matemáticas. Muéstrales cómo usar papel cuadriculado
para mantener los números organizados en las columnas correspondientes.

9. Realiza listas
Al momento de plantearles una tarea que requiera seguir múltiples pasos, intenta
hacerlo mediante una lista que enumere claramente cada paso a seguir. Entrégale
una lista a cada estudiante para que puedan ir tachando a medida que completen
los pasos.
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10. Déjalos moverse


Para algunos niños, pasar mucho tiempo sentados y concentrados es
sencillamente imposible. Deja que tus alumnos más inquietos se paren mientras
trabajan, pídeles que te alcancen algún objeto o lo que sea que les permita estar
en movimiento. Si tienes acceso a una bola de equilibrio, puedes dejar que se
sienten en ella para poder gastar energía y aprender al mismo tiempo.

11. Realiza una pausa


Darle un descanso al cerebro de vez en cuando es necesario y recomendable
para que los alumnos puedan mantener la concentración. Realiza una actividad
física con ellos durante cinco minutos, ya sea con unos breves movimientos de
yoga o estiramiento, para que luego vuelvan a su trabajo con más energía.

12. Emplea audiolibros


Si la lectura es una dificultad para algunos niños, emplear audiolibros puede ser
una excelente manera de asegurar que no pierdan el interés ni la motivación por
la literatura.

13. Escribe en colores


Permite que los niños utilicen papeles o lapiceras de distintos colores según el
tipo de información con la que estén trabajando. Esto les puede ayudar a
organizar el material, por ejemplo, si emplean rojo para escribir la idea principal
y otros colores para diferenciar los distintos detalles.

14. Quédate cerca


Si uno de tus alumnos presenta dificultades para seguir las instrucciones del
trabajo, quédate cerca de él al momento de explicarlas. Esta proximidad ayudará
a que el estudiante absorba mejor la información.

15. Genera “flashcards”


Las “flashcards” son las tarjetas que incluyen, de forma visual y resumida, la
definición o respuesta de determinados conceptos, palabras o preguntas. Su uso,
acompañado de gráficas y dibujos, es especialmente útil para aprender
matemáticas y ciencia. Además, pueden convertirse en un divertido juego.
Home » Biblioteca Docente » Educación Especial » Consejos para el trabajo en
aula con niños con dificultades para aprender al ritmo de sus pares: evidencia de
los colegios entrevistados e investigaciones recientes

Consejos para el trabajo en aula con niños con dificultades para


aprender al ritmo de sus pares: evidencia de los colegios
entrevistados
211
e investigaciones recientes
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 El Trabajo Cooperativo como Metodología para la Escuela Inclusiva

El siguiente documento busca responder con metodologías probadas y usadas por otros a
una problemática presente y discutida en los establecimientos. Tiene como objetivo
entregar consejos para trabajar con niños que presentan dificultades para mantener el
mismo ritmo de aprendizaje que sus compañeros en la sala. Contiene consejos generales y
específicos, principalmente para responder a dificultades de lenguaje, atención,
socioafectivas y, problemas específicos de lenguaje y matemática»

Consejos generales de trabajo en el aula.


Estos consejos facilitan el aprendizaje de todos los alumnos de su clase, especialmente, de
aquellos con dificultades de aprendizaje. Estas sugerencias no requiere sacarlos de la sala
de clases ni tiempo adicional.

 Establezca reglas de comportamiento y rutinas desde el comienzo del año escolar. Es


importante que los niños conozcan los procedimientos dentro del aula y las consecuencias
que implican no cumplirlos, así como las del quebrantamiento de reglas. Sea claro y
explícito, así como consecuente en sus indicaciones.
 Comience las clases a partir de un contenido conocido, en un estilo de repaso de lo
aprendido para luego ir poco a poco introduciendo nuevos (Condemarín, 1999). Al inicio
de cada lección los contenidos y habilidades aprendidas en la lección anterior y comente
cómo se relacionan con la lección de hoy. De esta manera, las relaciones entre diferentes
contenidos serán más evidentes, lo que facilita su retención.
 Escriba en el pizarrón un plan con los puntos más importantes que se tratarán durante la
clase. (Chadwick en Luccinni, 2002). Si los niños son pequeños, hay que leerlos en voz alta
guiando la lectura del pizarrón con un puntero. Recuerde que estructurar la clase permite
les permite a los niños anticipar lo que ocurrirá y, por lo mismo, facilita la comprensión.
 Ajuste la dificultad las actividades a las competencias de los niños manteniendo un nivel
de desafío constante, para así aumentar su sensación de eficacia y con ello mejorar su
motivación (Valmaseda en Coll, Marchessi & Palacios 2002). Una tarea demasiado fácil es
poco motivadora, lo que puede resultar en pérdida del interés e interrupciones. Una
demasiado difícil resulta frustrante. El trabajo debe ser desafiante, que requiera
concentración. Para apoyar a los menos hábiles, recorra la sala para monitorear el trabajo
y ofrecer ayuda.
 Entregue instrucciones claras y precisas para las actividades. Antes de dar una instrucción,
solicítele a los niños que presten atención, que dejen de hacer lo que estaban haciendo y
que lo miren y escuchen atentamente. Puede usar estrategias como cruzar los brazos
sobre el banco, referir la atención a una lámina de normalización (conozca carteles de
normalización en: Programa Kinder – Colegio San Joaquín www.educandojuntos.cl ), etc.

Antes de dar una instrucción elicite las habilidades y contenidos que los niños necesitarán
para realizar la actividad. Luego de una instrucción precisa respecto a lo que espera que los
niños hagan, secuenciando las acciones y nombrando los materiales y objetos que utilizarán
(por ejemplo: si quiere que unan con una línea recta 2 objetos que comiencen con la misma
letra, dígales: “Vean esta página, aquí tenemos varios objetos, animales y frutas que están
en dos columnas (indíquelas). Vamos a poner atención a cuáles comienzan con el mismo
sonido (nombre cada uno) ¿alguien me puede decir cuál de ellos comienza igual que árbol?,
muy bien, ahora con el lápiz grafito vamos a unir con una línea recta (dibújela) el árbol con
la ardilla, el ahora Uds. Lo van a hacer con todas las otras palabras”). Por último, consulte
si alguien tiene una duda.

 Refuerce los éxitos. Muy a menudo, los niños con dificultades reciben una información
clara con respecto a sus fracasos. Por el contrario, pocas veces son reforzados por aquello
que son capaces de realizar (Valmaseda en op. cit).
 Entregue a los alumnos una imagen de sus competencias, estimulando y reconociendo las
actividades que realiza de manera exitosa o en las que obtiene avances que, aunque
pequeños, sean significativos. Esto les ayudará en el desarrollo de su autoestima y
seguridad personal, y a conocer sus fortalezas, lo que a su vez influirá en su manera de
afrontar sus propios déficit.
 Estos refuerzos debe realizarlos cuando la situación lo amerite y de inmediato: cuando el
niño obtenga avances en su proceso de aprendizaje. El refuerzo indiscriminado o
desfasado en el tiempo se vuelve inefectivo (los niños no saben qué es lo que se refuerza)
e incluso contraproducente (pueden asociarlo azarosamente a otra conducta).
 Mantenga una relación cercana y amable con los niños Su valorización positiva y
reconocimiento motivarán al niño a seguir instrucciones y acatar normas. Por el contrario,
si el niño se siente rechazado hará todo para merecer ese rechazo.
 Trátelos como personas grandes exigiendo comportamientos apropiados con firmeza,
pero sin incomodarlos o humillarlos en frente del grupo. Escúchelos con paciencia y
pregúntele su opinión, pues ellos responden bien a los tratos amables (Haeussler en
Lucchinni, 2002).
 Mantenga contacto visual al hablarles y redirija su atención cada vez que sea necesario
con una señal, tocándolos en el hombro, un chasquido de dedos. Estos pequeños gestos
ayudan a centrarlos en la tarea. A principios de año necesitará hacer esto varias veces.
 Respecto a las evaluaciones, corrija los ítemes más difíciles con toda la clase. Muestre
cómo se resuelven y aclare los malentendidos (Chadwick en Luchinni, 2002). De esta
forma, se alivia la ansiedad que genera equivocarse y se muestran los pasos para realizarlo
correctamente. Esto es aún más útil para estos niños si considera que tienen baja
tolerancia a la frustración, ya que no obtienen buenas notas y les cuesta mucho
superarlas.
 Obsérvelos constantemente. Monitorée los avances del niño constantemente para
asegurarse que el nivel de dificultad de la actividad es el adecuado y que esté realizando y
avanzando en las actividades. Pase por su puesto y pregúntele si comprendió la
instrucción, si tiene alguna pregunta o si puede verbalizar lo que está haciendo y cómo lo
está realizando. Así podrá tomar decisiones en momentos más adecuados y precisos.
 Otorgue corrección adicional en su cuaderno y tareas. La corrección de cuaderno es una
estrategia que permite pesquisar lo errores más comunes que los niños están cometiendo,
los contenidos atrasados, dificultades en la escritura, entre otros. y definir estrategias
remediales como la copia de otro cuaderno par completar, corrección de errores,
reedición e, incluso, derivación a profesionales especializados.

Consejos específicos para el trabajo con niños con


problemas de aprendizaje.
Dificultades de lenguaje.

Para lenguaje en general:


• Ayude a los niños con apoyos visuales que representen el tema del que se habla: gráficos,
dibujos, objetos, organizadores gráficos (conozca ejemplos de organizadores gráficos en:
Programa de Lenguaje – kinder – Colegio San Joaquín www.educandojuntos.cl)
(Valmaseda en Coll, Marchessi y Palacios, 2002). Tenga en cuenta que los niños con
dificultades de lenguaje pueden sentirse inseguros en situaciones en las que haya un gran
componente de discusión oral o de escritura. En esas ocasiones conviene tener un punteo de
los temas a tratar que se vaya siguiendo. Esto les da una pauta para organizar lo que
escuchan. Estas estrategias son aún más relevantes en los primeros años de educación, pues
a los niños se les facilita el aprendizaje mediante el apoyo concreto.

Para Lenguaje comprensivo y expresivo


• Corrija las producciones verbales erróneas o incompletas, modelando la expresión
correcta. Repita correctamente las producciones de los niños lo más luego posible. Sobre
todo, realice expansiones de lo dicho por el niño; tanto de tipo gramatical como semántico
(Valmaseda en op cit). Por ejemplo, si el niño dice que los “murciégalos” chupan sangre,
lo óptimo es que el profesor diga, “claro hay murciélagos que chupan sangre y otros que
comen frutas”. Por el contrario, lo contraproducente es decirle, “no se dice murciégalo, está
mal dicho” ”repita, murciélago””. Esta última conducta puede hacer que el niño se sienta
fracasado inhibiendo sus iniciativas comunicativas.

• Plantee preguntas abiertas de manera progresiva: esto favor·ecerá, con el tiempo, una
comunicación más completa. Así comience con preguntas cerradas, para que luego Ud.
como profesor construya un relato a partir de lo dicho por el niño. De esta manera, Ud.
modela la forma de contestar preguntas abiertas que puede plantearle al niño después. Por
ejemplo, le puede preguntar ¿qué hiciste en el recreo?, “Jugué”, ¿Con quién jugaste? “Con
Pedro y Camila” ¿A qué jugaron? “A las pilladas” “Ah, entonces en el recreo jugaste con
Pedro y Camila a las pilladas, y ahora ¿Qué vas a hacer?”.

Para estimular el lenguaje expresivo:


• Aproveche las situaciones de juego, especialmente en el caso de niños pequeños, pues
proporciona un contexto muy rico para el uso del lenguaje. Amplíe el lenguaje otorgando
modelos de respuesta (Valmaseda en op cit). Por ejemplo, cuando el niño esté jugando
pregúntele qué está haciendo. Lo más probable es que el niño responda “esto”, a lo que
usted debe contribuir diciendo “claro, estás construyendo una torre con cubos verdes, rojos
y azules”.

• Anime el uso del lenguaje para distintas funciones como describir experiencias,
acontecimientos y objetos (es bueno utilizar apoyo concreto como láminas), expresar
sentimientos, realizar juicios y predicciones, contar cuentos, actividades donde deban
categorizar, etc. (Pesse en Lucchinni, 2002)

• Otorgue el tiempo necesario para que pueda expresarse (Pesse en Lucchinni, 2002).

Muchas veces estos niños demoran en contestar, haciendo sentir que el ritmo de la clase se
pierde. Para evitar esto, luego de un tiempo puede ayudar al niño preguntándole ¿en qué
estás pensando? (con el fin de ayudarlo y no de presionarlo), antes de pasar a otro. Otra
estrategia es avisar con tiempo lo que se le va a preguntar. Por ejemplo, puede decir
Camila, le voy a hacer una pregunta, escuche bien. Mientras Camila piensa, comente que
necesitamos tiempo para pensar y buscar la respuesta correcta. Luego pida que conteste.

Este par de segundos le da un tiempo para organizar su respuesta. Cuando corresponda,


modele este “tiempo de pensar”. Diga “lo voy a pensar” y demore algunos segundos antes
de contestar una pregunta.

• Para estimular el lenguaje comprensivo es bueno que inste a los niños a responder
preguntas simples y vaya complejizándolas progresivamente. Por ejemplo a través de la
lectura de cuentos, primero puede plantear preguntas cerradas como ¿Estaba el gato con las
botas puestas? (respuestas si /no), y luego puede invitarlos a hacer descripciones verbales,
pedir que cuenten el final de la historia, etc. ¿Cuál era la labor del gato con botas?¿En qué
termina la historia?¿Qué otro final se les ocurre?.

• Otra manera de preguntar acerca de los cuentos es hacer preguntas siguiendo la secuencia
de la historia (qué pasó primero, qué después) Esto ayuda a crear una estrategia para
recordar e ir integrando los acontecimientos del cuento para luego contestar preguntas
abiertas de interpretación que se basan en ellos. También se les puede pedir identificar
frases absurdas (palabras inadecuadas en el contexto), encontrar opuestos, descifrar
incógnitas, resolver adivinanzas, juegos de nominación, etc (Pesse en Luchinni, 2002).

Para Lenguaje articulatorio:


• Solicite a los niños que al pronunciar las palabras alarguen los sonidos de las sílabas
(<bbbbbrrrrrrraaaaaaa>) que observen las sensaciones que acompañan ese alargamiento
(cosquilleo en los labios, cosquilleo en el paladar, abrir la boca) incluso que den un nombre
a la sensación (hormigueo, cosquilleo…). Realice esta actividad frente a un espejo, que
puede estar ubicado detrás de la puerta o en el rincón de lenguaje, para que vean cómo se
mueve su boca al decir ciertas palabras. Este trabajo ayudará a los niños a obtener mayor
conciencia de los movimientos articulatorios que tienen lugar al pronunciar y de la
estructura sónica de las palabras (cómo están compuestas por distintas sílabas y sonidos)
(Sánchez en Coll, Marchessi & Palacios, 2002). Este trabajo lo puede hacer antes de salir a
recreo con uno o dos niños, es muy efectivo.

Dificultades de atención.

• Siente al niño cerca del profesor, lejos de estímulos distractores como ventanas, diario
mural, puerta, etc. y entre niños tranquilos. El niño debe tener sólo los materiales
que requiera para realizar la actividad (Menéndez, 2005). Recuerde que los niños con
problemas de atención tienden a distraerse fácilmente ante cualquier estímulo.

• De órdenes muy simples, breves, y secuenciales (Menéndez, 2005). Por ejemplo:


“Sebastián, saque su cuaderno, ábralo, tome el lápiz, copie la instrucción de la pizarra”,
“muy bien”, “cuando termines me llamas”. Esto le entregará una estructura externa al niño
para realizar actividades que lo focalizará en la realización de una actividad. Para los más
pequeños ayuda tenercarteles con dibujos que indiquen la secuencia de actividades a
realizar. Por ejemplo, pegue en orden los carteles de pintar, recortar, pegar para que
recuerde cuál es la secuencia de una actividad larga (conozca ejemplos de carteles en:
Programa de Lenguaje- kinder- Colegio San Joaquín www.educandojuntos.cl ).

• Asegúrese de mantener un contacto visual con el niño. éste lo debe estar mirando cuando
le da la instrucción. Dígale “ Francisco, mire aquí”. Pídale que fije su atención en lo que
usted hace o muestra. (Menéndez, 2005). A medida que transcurra el año, podrá
simplemente llamarlo por su nombre y él sabrá que tiene que mirarlo.

• Defina los objetivos mínimos que el niño debe alcanzar en la clase, para que pueda
participar al ritmo de ésta (metas cortas y sencillas) (Haeussler en Luchinni, 2002).
Recuerde que generalmente ocurre que los niños con dificultades de atención son o más
lentos que sus pares o terminan las actividades muy rápidamente.

• Espere que finalice una actividad antes de encargarle una nueva, no permita que deje las
cosas a medio hacer (Menéndez, 2005). Por lo mismo, secuencie (parcele) y gradúe las
tareas para que vayan de lo más simple a lo más complejo y refuerce cada uno de los pasos
que debe cumplir. Por ejemplo, si termina la tarea, se le felicita por hacerlo, luego pídale
que lo intente con buena letra y valore su realización, más tarde espere que el contenido
también esté correcto y felicítelo. Pedirle todo a la vez, le desmotivará porque no puede
realizarlo (Menéndez, 2005).

• Alterne el trabajo de pupitre con otras actividades que le permitan levantarse y moverse
un poco. Como por ejemplo, hacerlo repartir las guías a los compañeros, borrar el pizarrón,
etc (Menéndez, 2005). Esto es aún más importante cuando los niños tienen hiperactividad
asociada, pues les resulta muy difícil quedarse sentados toda una jornada.
• Refuerce a los niños en sus logros académicos y conductuales, concentración y control de
impulso, como por ejemplo, dándole ánimos continuamente, una palmada en el hombro,
una sonrisa ante cualquier esfuerzo que presenta (por pequeño que sea), levantar la mano en
clase, intentar buena letra, o contestar sin equivocarse, etc. También es bueno el
reconocimiento o halago público: comentarios positivos en alto, notas para casa destacando
aspectos positivos, una felicitación de la clase, un trabajo en el diario mural, etc
(Menéndez, 2005).

• Otórguele atención positiva antes que limitarse a hacerlo callar y reprenderlo, cuando
quiere llamar su atención o la de sus compañeros interrumpiendo o preguntando cosas poco
atingentes. Acoja la pregunta del niño, pero inmediatamente, diríjalo hacia un tema de
interés para todo el curso o pídale que solucione un problema, indicándole qué debe hacer.
Por ejemplo, si el niño dice “Hace calor”, puede contestar “Sí, hacer calor, ¿Quieres abrir la
ventana?”. De esta manera, la atención del niño se focaliza hacia la resolución de un
problema. Más vale invertir el tiempo en estos niños y dárselo en acciones beneficiosas
para todo el grupo, que malgastar tiempo en retos, discursos y castigos (Haeussler en
Luchinni, 2002).

• Establezca límites claros y sin excepciones, puesto que estos niños necesitan de reglas y
una rutina predecible. Así, por ejemplo no conviene decirle “Sólo por esta vez te repetiré la
prueba”, porque no se esforzará en estudiar más y pensará “Si lo hizo la otra vez… ¿Por
qué ahora no?” (Haeussler, en Luchinni, 2002). Por lo mismo, es recomendable definir con
anticipación cuáles son las reglas, así como las pautas de trabajo de cómo se ocupan los
cuadernos, dónde se guardan los materiales, rutina diaria, etc. (conozca pauta uso cuaderno,
pauta rutina diaria en: Programa de Lenguaje- kinder- Colegio San
Joaquín www.educandojuntos.cl )

• Atienda las necesidades del niño en forma oportuna. La postergación de la satisfacción de


las necesidades lo lleva a ser más impaciente, irritable y con menos capacidad para esperar.
Sin embargo, también es necesario que aprenda a esperar un rato corto, antes de atenderlo,
pues la idea es que ésta sea oportuna y no inmediata. Tampoco es bueno prestarle atención
cuando lo interrumpa o no lo deje conversar con otra persona. Exprésele que lo atenderá en
un momento más (Haeussler en Luchinni, 2002). Es de ayuda ir modelando la espera. Al
comienzo ayuda tocarle el hombro mientras se termina la conversación, así se siente
atendido y considerado, luego bastará con señalarlo y posteriormente con sólo decirle.

• Desarrolle la paciencia y la perseverancia en los niños, motivándolos a realizar


actividades que involucren destrezas motoras y relaciones grupales como armar puzzles,
pasarse una hoja uno a uno con trabas de ropa, trasvasijar, caminar sobre una línea o sobre
un rectángulo dibujado en el suelo sin caerse, etc.

• Fomente la concentración en los niños utilizando material de apoyo concreto, ya que


permite que se concentren más que en las actividades donde prima lo auditivo. Existen
diversos materiales de apoyo como juegos y actividades que promuevan una mayor
concentración en la tarea porque requiere una observación acuciosa o elaboración
minuciosa. Intente, por ejemplo, buscar un personaje en una foto, encontrar lo que falta en
un dibujo, separar mazos de cartas en colores o por número, armar cadenas de clip para
realizar operaciones matemáticas, etc. (Haeussler, en Lucchinni, 2002).

• Reconozca y respete la fatiga de los niños con déficit atencional, realizando varias
actividades, pero cortas. Si bien el niño puede parecer físicamente inagotable, su capacidad
de concentración ya está exhausta (Haeussler en Lucchinni, 2002). Piense de antemano qué
actividad puede hacer el niño si termina antes o si está muy fatigado para seguir ( leer un
cuento, repartir materiales, comentar lo que hizo con un compañero más hábil, etc).

• Sea un modelo para el niño. Es importante que el profesor dé el ejemplo. Si usted actúa de
manera impulsiva será muy difícil que sus alumnos sean pacientes. Así también, es
importante ser consecuente entre lo que dice y lo que hace. (Haeussler en Luchinni, 2002).
Recuerde modelar cómo pensar diciendo en voz alta “voy a pensar”, espere unos minutos y
luego conteste.

Dificultades socioafectivas.

Para trabajar con niños socialmente rechazados, que tienen dificultades para relacionarse
con sus compañeros:

• Otorgue una guía especial explicando la forma en que deben acercarse a otros tanto física
como psicológicamente. Es frecuente que estos niños no reconozcan las claves sociales que
regulan los juegos y las interacciones con sus compañeros. Les cuesta identificar los
sentimientos de los demás y los momentos apropiados para manifestar cada conducta. Por
ello pueden ser bruscos y parecer insensibles ante las necesidades de los demás. Intente
juegos, como el juego de las expresiones faciales que muestren emociones. Se les puede
pedir que trabajen en parejas o en grupos adivinando las expresiones que actúa un
compañero. Esto puede ayudar al niño a reconocer la ira, el dolor, la tristeza, entre otras
claves sociales que muestren sus pares (Marzano, 2003).

• Modele a través del ejemplo comportamientos como la entonación de la voz y el volumen


adecuado que deben utilizar las personas para comunicarse entre sí (Marzano, 2003).

• En el caso que un niño sea rechazado por sus compañeros por tener malos hábitos de
higiene, averigüe en profundidad las razones que tiene a la base (por ejemplo no tener
servicios sanitarios en el hogar) e incluir a los padres en la solución de este problema
(Marzano, 2003). Muchas veces el colegio se encuentra equipado con duchas que pueden
ser utilizadas por los alumnos en el caso que lo necesiten.

Para trabajar con niños agresivos:


• Describa la conducta del niño claramente junto a él “Le estás pegando a Manuel y le
duele”. Luego es posible establecer un contrato para recompensar las conductas adecuadas
y otorgar consecuencias por el comportamiento inadecuado. Todas estas decisiones son
tomadas en conjunto. Muchas veces las sanciones y los premios las proponen los mismo
niños. Es necesario ser consistente y otorgar recompensa o consecuencias inmediatas a las
acciones. Por ejemplo, si en el contrato se acordó que dar golpes a un compañero iba a ser
castigado con limpiar la sala durante los recreos por una semana completa, el profesor debe
encargarse de que cumpla el acuerdo. De lo contrario se pierden los límites establecidos
con el niño y la valiosa coherencia entre palabras y actos (Marzano, 2003). Si el contrato se
rompe en variadas ocasiones es importante reelaborarlo, pues ya no tiene un significado
para el niño.

• Mantenga un vínculo amable con el niño en todo momento pero sea riguroso y firme en
los acuerdos y decisiones (Marzano, 2003).

• Dé responsabilidad a los estudiantes para ayudar a la profesora u otros compañeros en la


sala. Esto les permite a los niños probar experiencias exitosas y refuerza la mejora de su
comportamiento (Marzano, 2003).

• Reconozca y fomente su participación en actividades extracurriculares al interior y al


exterior del colegio (Marzano, 2003). Las actividades extracurriculares tienen
repercusiones en la conducta en el aula, pues los niños aprenden habilidades tales como el
trabajo en equipo, respeto de turnos, entre otros, que les permiten regular su conducta. En
nuestro curso de diseño de adaptaciones curriculares para alumnos con necesidades
educativas especiales abarcamos como crear estrategias en función de la diversidad que
existe en el aula.

• Establezca reglas claras de convivencia a nivel de colegio. Se ha visto que una de las
características de los colegios efectivos es la existencia de normas claras, compartidas por
los alumnos, apoderados, directivos y profesores, y que son comunicadas a éstos por
distintos medios. Uno de los temas más importantes de enfatizar es el trato entre alumnos.

Por ejemplo: en el colegio San Joaquín existe una guía del buen trato, que ayuda a tener
parámetros comunes en todo el colegio acerca de lo que se espera de los alumnos respecto a
su conducta y convivencia, y la cual es conversada en cada sala de clases. Los niños que
presentan conductas agresivas son llamados por la directora quien comenta el incidente,
luego les pasa una guía para que la lean esa nochey al día siguiente se conversa sobre ella.
Los niños parecen tomar conciencia de sus actos y comentan las consecuencias negativas
para los demás (conozca guía “Tratémonos bien” en: Programa de Formación – Colegio
San Joaquín www.educandojuntos.cl).

Para trabajar con niños que le temen al fracaso (baja tolerancia a la frustración):
• Comunique que equivocarse es parte importante de aprender, así los niños podrán cometer
errores sin sentir angustia por esto. Cuando los niños se muestran muy perfeccionistas, al
punto de evitar hacer una tarea por temor al fracaso, adopte una postura que les permita
liberarse de la angustia que les provoca una mala calificación (Marzano, 2003). Acepte los
errores, instaure la posibilidad de corrección, el uso de goma de borrar, corrija errores
comunes frente a todo el curso, sin tomar como ejemplo a un niño en particular (por
ejemplo, cuando un niño conteste mal, en vez de decir “no” “mal” “se equivoco” dirija la
atención hacia el problema y generalícelo como una problemática del curso “varios están
teniendo problemas para solucionar este ejercicio” y soluciónelo con todo el
grupo), comente lo que será más difícil en una lección, etc.
• Proponga el trabajo con un alumno tutor que tenga la capacidad de ser contraparte y
disminuir la autocrítica excesiva en su compañero (Marzano, 2003). En ocasiones los niños
trabajan mejor con pares, pues pueden ayudarse a través de lenguajes más similares.
También es bueno poner a estos niños como tutores de otros compañeros en las áreas en
que se destacan.

Para trabajar con niños pasivos:


• No permita que los compañeros se burlen de ellos o que destaquen sus características más
deficitarias. Recuerde que en general estos niños no se defienden ante la burla y crítica de
otros, y lamentablemente, los daños en la autoestima los inmovilizan aún más.

• Estimule y reconozca las actividades en las que el niño es bueno, realiza de manera
exitosa u obtiene avances que aunque son pequeños son significativos. Es importante
señalar que estos refuerzos deben realizarse cuando la situación lo amerite y de inmediato,
es decir, cuando el niño obtengan avances en su proceso de aprendizaje. De lo contrario, el
refuerzo indiscriminado o desfasado en el tiempo se vuelve inefectivo e incluso
contraproducente.

• Evite la crítica, como por ejemplo, “¿Aún no terminas la tarea?” “Otra vez no hiciste la
tarea” “Siempre atrasado”, etc. Por el contrario, las frases deben alentar al niño a realizar de
la mejor manera que pueda la actividad emprendida, como por ejemplo “Vamos terminando
la tarea” “¿Por qué no has hecho tus tareas, cuéntame?” “¿Qué podemos hacer para que
llegues más temprano?”.

Problemas de aprendizaje específicos.

Indicaciones generales:
• Acostumbre a los niños a una estructura definida de clase que incluya: presentación
deltema; desarrollo con apoyo de material concreto, utilización de vivencias personales;
retroalimentación de preguntas para evaluar el dominio y comprensión de los alumnos. Por
último, haga un cierre de la clase pidiendo a los alumnos que resuman lo más interesante o
con qué idea o principio se quedan (Chadwick en Luchinni, 2002).

• Identifique las fortalezas de estos niños para potenciarlas (Chadwick en Luchinni, 2002).
Por ejemplo, si el niño tiene habilidades para dibujar pídale que haga un dibujo sobre el
tema que están tratando y que lo exponga a los compañeros. En ocasiones, el reforzar una
habilidad repercute en el desempeño del niño en las otras áreas, pues el autoestima del niño
se ve fortalecida junto con su sensación de eficacia personal.

• Enfatice enfoques y prácticas orales (Chadwick en Luchinni, 2002). Tales como lectura de
cuentos, juegos de rol, exposiciones, etc., estableciéndolos en lo posible como una práctica
diaria.

• Siente a los niños frente al profesor, minimice la necesidad de copiar del pizarrón y
promueva la lectura en voz alta designando con anterioridad quienes leerán (así puede
predecir el momento de la lectura y prepararse) (Chadwick en Luchinni, 2002).
• Proporcione alabanzas y mantenga un alto nivel de expectativas (Chadwick en Luchinni,
2002). Es decir, felicite al niño en sus logros y avances, siempre pensando y señalándole
que se confía en sus capacidades.

Dificultades en lectura:
• Realice actividades donde los niños tengan que reconocer sonidos finales, sonidos
iniciales, análisis y síntesis de palabras, etc. Estos niños requieren de más práctica y
estrategias que favorezcan el análisis fónico y estructural de la decodificación de palabras
para llegar a leer (Chadwik en Luccini, 2002).

• Utilice una estrategia de enseñanza continua y sistematizada: primero vocales, luego


consonantes en sílabas directas, luego en sílabas complejas, etc. Recuerde que los niños con
estas dificultades no aprenden a leer por descubrimiento, por lo que requieren de la
mediación de un profesor apoyado por un especialista (Chadwick en Luchinni, 2002).

• Háblele al niño de frente, mirándole a los ojos, con una modalidad lenta, rítmica y bien
articulada. Esto fomentará un desarrollo lingüístico adecuado (Chadwick en Luchinni,
2002).

• Desarrolle en los niños la capacidad de escuchar (Chadwick en Luchinni, 2002). El


profesor es el encargado de modelar esta capacidad en el diálogo diario, es decir, debe
hacerle saber al niño que lo escucha cuando este habla y al mismo tiempo solicitarle que
éste lo escuche cuando se dirige a él “te estoy escuchando” “Sebastián, escucha lo que te
digo” “Niños, escuchen a Diego”. Se debe enfatizar en que la escucha atenta requiere de
silencio de parte de los demás.

• Planifique en la escuela un tiempo de lectura donde ésta sea una actividad placentera.

Recuerde que para superar los problemas de lectura hay que leer y mientras más se lee, más
se mejora la calidad de la lectura. Para practicar la lectura incluya, dentro de la hora de
lenguaje y de otras asignaturas, una actividad de lectura que esté en concordancia con los
objetivos de la clase o unidad. Para esto puede utilizar materiales diversos como reglas que
norman actividades, invitaciones, agradecimientos, comunicaciones, afiches, letreros,
registros experienciales, revistas, textos de asignaturas, etc. (Chadwick en Luchinni, 2002).
Por lo mismo, la selección de los textos debe ser la adecuada al nivel del niño con un
vocabulario adecuado, frases cortas y una diagramación poco recargada, letras grandes y
claras. Destine al menos semanalmente un tiempo determinado para esta actividad, ya sea a
través de visitas a la biblioteca, lectura silenciosa diaria, trabajo en rincones, etc.

• Existen técnicas para desarrollar la lectura oral en niños con lectura deficiente (Chadwick
en Luchinni, 2002):

• Lectura oral simultánea: El profesor y el niño leen juntos un texto donde el profesor guía
con su dedo la lectura esperando lograr fluidez. Esto se puede realizar con toda la clase,
escribiendo el texto en la pizarra, ocupando un cartel o transparencia, así todos los niños
pueden ir siguiendo el mismo texto de lectura.
• Lectura eco: Primero lee en voz alta el profesor y luego lee el niño la misma frase
mostrando con su dedo las palabras leídas.

• Lectura con apoyo: Primero lee el profesor en voz alta siguiendo con su dedo las palabras
leídas y el niño las repite. Luego el profesor lee en voz alta y omite las palabras que el niño
puede leer. Finalmente, el niño lee en forma independiente la mayor parte del texto donde
el profesor lo apoya en aquellas palabras necesarias para que el niño lea con fluidez.

• Lectura repetida: El alumno lee en voz alta y relee hasta que disminuyan los errores y
aumente la velocidad. Entonces el profesor le señala otro párrafo.

• Apoye la comprensión lectora mediante preguntas referidas al texto. De este modo,


previamente o durante la lectura anime a los niños a predecir o hipotetizar sobre la historia,
basándose en la información que tienen: ilustraciones, la forma de los párrafos, el autor, el
título, etc. Una vez finalizada la lectura plantee preguntas en distintos niveles de
complejidad donde la información se pueda buscar, interpretar y deducir, en una oración, en
un párrafo o en el texto completo y/o en las que reflexionan respecto al impacto que les
produce en términos de gusto y de valores.

Dificultades con la escritura manuscrita:


• Utilice el método cursivo porque favorece la continuidad y la flexibilidad del movimiento,
facilita la soltura y el dinamismo en la escritura; permite la percepción de la palabra como
un todo y tiende a ser resistente al olvido en la memoria (Chadwick en Luchinni, 2002).

• Controle las actividades que los niños realizan sobre la mesa de trabajo en relación a una
postura adecuada:

• Sentarse en forma cómoda, con el dorso apoyado en el respaldo, los pies apoyados en el
suelo, los brazos descansando sobre la mesa.

• Tomar el lápiz sosteniéndolo entre el índice y el pulgar.

• La muñeca se apoya sobre el papel y determina una continuidad entre el antebrazo y la


mano.

Para esto, se puede apoyar con carteles ilustrativos (conozca carteles de normalización en:
Programa Kinder – Colegio San Joaquín www.educandojuntos.cl )

• Estimule a los niños a verbalizar sus acciones motoras mediante explicaciones


y descripciones (Chadwick en Luchinni, 2002) . Esto en ocasiones se conoce como
verbalización de la escritura (conozca escritura matte en: Programa de Lenguaje – kinder y
1° básico – Colegio San Joaquín www.educandojuntos.cl)

• Favorezca la distensión motriz a través de pintura libre, arabescos de gran tamaño, trazo
de letras en sémola (Chadwick en Luchinni, 2002)
Dificultades en matemática:
• Integre en la resolución de problemas y ejercicios escritos, el uso de la hoja borrador,
lápiz mina, goma de borrar y de la hoja de respuesta.

• Introduzca la matemática en contextos recreativos (Chadwick en Luchinni, 2002). En un


contexto lúdico, se pueden automatizar y reforzar conocimientos básicos de la matemática.

Es importante utilizar apoyo concreto en las primeras instancias.

• Asegúrese de que los alumnos comprendan las actividades (Chadwick en Luchinni, 2002).
Por ejemplo, se les puede pedir que lean la pregunta, que expliquen los que la pregunta les
pide que hagan, cómo van a hallar la solución y lo que hacen mientras trabajan.

Bibliografía:
>

Estrategias para acompañar a niños con dificultades en el


aprendizaje

Hay algunas estrategias generales que sirven para paliar los efectos negativos que la inatención, la
inquietud, la impulsividad y otras características pueden ocasionar en el alumno. El objetivo de estas
estrategias es evitar o retrasar en la medida de lo posible la aparición de problemas académicos y de
comportamiento, y ayudarlos a ir compensando sus dificultades para avanzar en su desarrollo con una
buena autoestima.

Algunas de estas estrategias son:

 Situar al alumno, teniendo en cuenta el entorno físico, los compañeros, el profesor y el


entorno temporal.

Colocar de preferencia al alumno en la primera fila, al centro, así se reducen las distracciones, permite
supervisarle con mayor frecuencia y uno se puede dirigir a él de forma más discreta.

En un salón con niños que tienden a la distracción e inquietud, sería importante quitar todos los carteles,
mapas, posters, etc. que no sean relevantes, o en todo caso ponerlos en las paredes de los lados o de
atrás. Incluiría también objetos atractivos que pudiera haber en la mesa del profesor.

Otra recomendación sería rodear al niño de compañeros tranquilos, trabajadores y pacientes con los que
tenga buena relación. Tener presente el irlos rotando por lo que estos niños suelen distraer a sus
compañeros también.

El profesor tiene un papel importante en la educación escolar del alumno. Para niños con notables
tendencias a la distracción, inquietud motriz e impulsividad, ciertas características del profesor pueden
resultar beneficiosas:

- Organización: Las cosas bien preparadas y avisadas con tiempo ayudan al alumno a organizar su
trabajo. Evitemos improvisaciones y sorpresas. Los alumnos necesitan predictibilidad, para lo cual será
necesario la anticipación al comienzo del día y de cada clase o de cada cambio que pudiera darse. De
preferencia anotando a un lado de la pizarra y se puede ir borrando en la medida que se va haciendo.

- Flexibilidad: Una exigencia rígida de buenos resultados o del seguimiento de muchas normas puede
acabar desembocando en un conflicto con el alumno o que se sienta incapaz. Sería más conveniente
que el profesor distinga lo fundamental de lo accesorio, tanto en los objetivos y contenidos del programa
como en las normas de comportamiento y que sepa dar prioridad a los aspectos que está trabajando,
ignorando otros.
- Interés: Es importante que el profesor considere que él puede hacer algo para conseguir mejoras en
el alumno y que esté dispuesto a poner los medios necesarios

- Perseverancia: Los problemas de este tipo no se solucionan rápidamente, de modo que el profesor
tendrá que ser capaz de mantener la aplicación de medidas durante algún tiempo antes de considerar
que no han funcionado y estar dispuesto a ir solucionando pequeños problemas, uno tras otro, sin
obtener resultados espectaculares.

- Respetemos sus ritmos, suelen ir a un ritmo más lento y los aspectos temporales influyen en ellos
como en todos los alumnos, sólo que con mayor intensidad.

 Enseñar al alumno (aprovechar la clase)

Muchas veces las estrategias que usamos con los demás niños no funcionan con ellos, resultan
insuficientes y es preciso añadir nuevas estrategias, más adecuadas a sus características
personales. Tengamos presente:

- La organización del profesor: Uno de los motivos por los que puede fracasar una intervención en el
aula es el incumplimiento de los pasos necesarios para desarrollarla por parte del profesor o su rápido
abandono cuando dejan de ser algo novedoso y se requiere un esfuerzo de voluntad para
mantenerlos. Para evitar esto es bueno tomar medidas preventivas, incluyendo el desarrollo de las
intervenciones individualizadas con los alumnos en el desarrollo normal de la clase. Dos buenas
costumbres:

1. Para los niños con un programa personal de trabajo u organización, hacer las revisiones oportunas
antes de empezar la sesión o en un momento de trabajo personal.

2. Dedicar los últimos minutos de la clase a asegurarse de que si se lleva algún autoregistro, sea
revisado y valorado, si se ha aprendido algo nuevo, el alumno ha comprendido lo fundamental, si se ha
mandado trabajo a casa, lo hayan entendido y apuntado correctamente.

5 minutos al inicio a revisar con el alumno su programa personal y 5 minutos al final del día para
organizar el trabajo en casa y 1 minuto después de cada sesión para comprobar que ha aprendido son
de mucha utilidad.

- La dosificación del esfuerzo:

Acabemos la sesión con una actividad especialmente atractiva para los alumnos. Un requisito para
participar en ella será haber cumplido unos objetivos de trabajo.

Introducir variedad en las actividades y en la forma de realizarlas.

- Control de la atención:

Dar dos veces las instrucciones: una general para toda la clase y otra en particular para los alumnos con
problemas, más explícita.

Durante las explicaciones utilizar técnicas activas para atraer la atención de los alumnos, aunque
pensemos que es responsabilidad de cada uno y que si no lo hacen es desinterés: Puede tener
dificultades reales para estar atento, para cualquiera es agradable tener una clase
entretenida. Tratemos que los ejercicios no sean monótonos.

- Control del comportamiento:

Este aspecto puede crear mucha ansiedad al profesor. El mal comportamiento del alumno estorba el
desarrollo de la clase, puede crear un clima adverso al aprendizaje y sitúa al profesor en una situación
incómoda en la que puede ser enjuiciado como incompetente por los padres de otros alumnos. La
tendencia suele ser buscar una solución contundente que elimine rápidamente el problema. Con estos
niños lo habitual es que no aparezcan resultados o que se desvanezcan rápidamente o que generan
tensión dificultando además el aprendizaje.

El mal comportamiento puede darse por el mero aburrimiento del alumno ante explicaciones que ha
dejado de entender. La estrategia es que cuanto más tiempo dedique el profesor a preparar la actividad
de enseñanza, a personalizarlas y a hacerlas interesantes para los alumnos, menos tiempo tendrá que
dedicar a resolver problemas de disciplina. Procuremos que el alumno se sienta reforzado por su
trabajo y por su comportamiento (el límite a partir del que se considera que algo está bien no tiene por
qué ser el mismo para todos). El alumno tiene que recibir más comentarios positivos, elogios y premios
que negativos y regaños. Centrarse en los aspectos de comportamiento que se han elegido para el plan
personal del alumno (PPA) e ignorar otros problemas de comportamiento. (salvo que sobrepase ciertos
límites de respeto)

Dar órdenes claras y firmes

Hay que evitar enviar al alumno fuera de clase, salvo que la situación sea realmente insostenible.

- Facilitación del aprendizaje

Dejar claro los puntos principales de lo que los alumnos tienen que aprender. Si es posible, hacerlo por
escrito con apoyos visuales y repasarlos personalmente con el alumno.

Si el alumno no ha aprendido correctamente algo fundamental, que le va a impedir aprendizajes


posteriores, ayudarle a seguir repasándolo y si es posible, retrasar la introducción de nuevos
contenidos. Ayudémonos de formas visuales.

Procurar que la corrección de ejercicios que realizan los alumnos sea lo más rápida posible, que se
corrijan unos a los otros o que usen plantillas de autocorrección.

 Evaluar al alumno

Cuando un profesor recibe a un alumno con notables dificultades para concentrarse, inquieto o muy
impulsivo, y las conclusiones de las sucesivas evaluaciones son que el alumno se distrae con mucha
facilidad, que no para quieto y que es muy precipitado, sólo esta diciendo con otras palabras lo mismo
que sabía desde del principio. La evaluación tiene 3 funciones:
1. Medir los aprendizajes realizados en un momento determinado para compararlos con los realizados
por el alumno en un momento anterior (progreso), con los aprendizajes realizados por otros alumnos o
con una serie de criterios establecidos.

2. Detectar los puntos fuertes y débiles del alumno para identificar áreas y vías de mejora

3. Obtener datos sobre la eficacia de la enseñanza que han recibido los alumnos.

En general, se debe tratar de adaptaciones para garantizar la validez de la evaluación. Es decir, es


válido si mide lo que dice medir. Por ejemplo, si voy a medir cálculo mental, donde los alumnos tendrán
que anotar el resultado de las operaciones que se les dicta, y un alumno con grave deficiencia auditiva
no acierta ninguna operación, no estaría bien deducir que tiene problemas con el cálculo mental. Hay
casos más dudosos como el del alumno con serias dificultades de aprendizaje de la lectura a la hora de
realizar un examen escrito: ¿se deben sus fallos a la falta de conocimientos o a errores en la lectura de
las preguntas?

En el caso de alumnos con problemas de atención o excesiva impulsividad hay que tener en cuenta que
habrá características de la evaluación que favorezcan un mejor rendimiento y otras que lo dificulten. El
mejor sistema para evaluar a estos alumnos será el que tenga en cuenta sus dificultades prácticas para
demostrar lo que han aprendido. Las dificultades que más frecuentemente van a aparecer son la menor
capacidad de concentración, la dificultad para trabajar de forma concentrada durante un período
prolongado, la enorme vulnerabilidad ante las distracciones, la impulsividad y la escasez de lenguaje
interno que hace que afronte las pruebas de evaluación de una forma poco estratégica, sin autodirigirse
y sin utilizar “trucos” o alternativas de solución que les permitan salir adelante en los aspectos más
problemáticos.

Como resultado de estas dificultades, los alumnos pueden tener los siguientes problemas, sobre todo en
las evaluaciones escritas:

 Tardan más en comenzar una prueba escrita de evaluación.

 Se quedan bloqueados, sin saber qué hacer, durante excesivo tiempo en preguntas que no saben
responder.

 No acaban las pruebas de evaluación. Responden sólo a las primeras preguntas.

 Responden cosas que no les han preguntado, por mala comprensión de las preguntas.

 Si el profesor da una explicación o hace una aclaración durante la realización de la prueba, no la


tienen en cuenta.

 Dejan ejercicios y preguntas incompletas

 Realizan ejercicios del mismo tipo de forma inconsistente: unos bien otros mal.
 La mala presentación (letra irregular, borrones, tachones, mala organización) llega a dificultar al
propio alumno el desarrollo de una prueba.

 En muchas ocasiones, la presencia de dificultades de aprendizaje de lectura y escritura, supone una


dificultad añadida, no sólo por el problema adicional que supone para el estudio, sino también por los
errores y la menor eficacia que supone a la hora de leer preguntas y escribir respuestas en una
evaluación.

Ante estos problemas, seria conveniente introducir ciertas modificaciones en la forma de evaluar, de
modo que la evaluación del aprendizaje del alumno no se convierta, una vez tras otra, en una evaluación
de su capacidad de concentración, organización, autodirección y perseverancia.

Entonces, se debe dar prioridad a aquellas formas de evaluación que no supongan la realización de un
examen escrito, fundamentalmente, la observación del trabajo del alumno y pruebas orales.

Si a lo largo de una unidad didáctica el alumno resuelve correctamente ciertos ejercicios, debería
suponerse que es capaz de resolverlos, aunque no siempre lo haga. Puede faltar automatización,
seguridad o incluso interés por hacerlos, pero no puede decirse que no sepa hacerlos. Por ejemplo,
puede suceder que el alumno resuelva correctamente cálculos en una prueba de problemas pero no
aprueba una prueba de cálculo con operaciones de parecida dificultad (a veces pasa por el mero hecho
de que en la prueba de problemas tienen más tiempo). ¿ Debería considerarse que su nivel de cálculo es
insuficiente? Si el alumno aprueba un control de verbos, pero en el examen general del tema se incluye
una pregunta de verbos y falla, ¿se debe considerar que conoce los verbos estudiados o no?

Entonces…

- Debemos tener claro lo que se evalúa y cómo se califica.

- Priorizar la evaluación de los procedimientos: en cierto modo, saber aplicar los conocimientos significa
que el niño dispone de esos conocimientos aunque tenga dificultad para reproducirlos. La evaluación
centrada en procedimientos tiene sentido cuando se utilizan técnicas de observación del trabajo del
alumno.

- Elegir la forma de examen (oral o escrito) en la que mejor rinda el alumno. Si es necesario realizar
los exámenes en un ambiente controlado en el que haya menos distracciones y se pueda controlar mejor
lo que realiza el alumno.

- Adaptar la forma de los exámenes escritos para facilitar el trabajo del alumno.

- Dar tiempo necesario para que el alumno realice las pruebas de evaluación, alargando la sesión, o
mejor, repartiendo el trabajo entre varias sesiones.

Tareas escolares
Respecto a las tareas para casa debemos considerar que los niños con características de TDAH suelen
tener 3 factores adversos:

1. Por sus propias características, cualquier trabajo que requiera cierta organización y esfuerzo
intelectual les va a costar más tiempo que a otros compañeros.

2. El momento de realizar la tarea es después de la jornada escolar, momento en el que todos los niños
acumulan bastante cansancio, aunque en este caso, se trata de niños con menos resistencia a la fatiga.

3. Si siguen un tratamiento médico, en este momento ya suele haber concluido el efecto del
medicamento.

En cualquier caso, como las tareas son una realidad y estarán presentes en lo cotidiano, conviene tomar
algunas precauciones para conseguir la mayor eficacia:

1. Cuidar la organización: es fundamental el compromiso de padres y profesores para garantizar que el


niño tiene claro cuáles son las tareas que tiene que realizar. Para esto la estrategia más utilizada es la
agenda y su control diario.

2. Valorar la tarea en su justa medida: Parece justo que las tareas supongan un 20% de la
calificación. Hay que cuidar es que el alumno que no las realiza adecuada mente obtenga una valoración
negativa por no realizar adecuadamente las tareas, ya que puede ocurrir que reciba dos valoraciones
negativas: por no realizar adecuadamente las tareas y por mala actitud.

3. Individualizar: adaptar la tarea en contenido, cantidad y exigencia de la realización a las


características y necesidades de cada alumno.

Motivación del alumno:

Por lo general las prácticas motivacionales formuladas se plantean en forma muy general y poco
operativa, hay múltiples maneras de concretarlas en el trabajo de clase, por ejemplo:

 Relevancia:

- Si el alumno no ha aprendido bien un tema, no pasar a otro que requiera conocimientos del tema que
aún no domina (no podemos comenzar a estudia el volumen, si el alumno no ha aprendido a calcular la
superficie)

- Relacionemos los contenidos de aprendizaje con aspectos de la vida cotidiana: Temas de actualidad,
experiencias de los alumnos).

- Mencionar la utilidad de los conocimientos que se están trabajando. Intentar dar una aplicación
práctica al trabajo de los alumnos. Las expresiones escritas pueden ser más interesantes si van a formar
parte de un periódico escolar, que si sólo serán leídas y corregidas por el profesor.

 Elección:
- Aunque el profesor proponga unos objetivos de aprendizaje los alumnos podrían realizar elecciones
sobre algunos contenidos concretos, la forma de aprender, los trabajos a realizar o la forma de
demostrar que han aprendido.

 Éxito:

- Las medidas que mejor pueden conducir al éxito personal serán refuerzo, apoyo, adaptaciones en el
contenido, respeto de ritmos y tiempos y en la forma de evaluar.

 Colaboración:

- No podemos dar por hecho que los alumnos saben trabajar en grupo, necesitan supervisión y
orientación por parte del profesor.

- Realizar ejercicios en parejas.

Los chicos con características como problemas de atención, inquietud e impulsividad, entre otras, la
motivación para el trabajo escolar no es su punto fuerte:

La motivación intrínseca: incluso cuando tienen iniciativa para trabajar les resulta difícil perseverar. Una
de los síntomas del TDAH es evitar aquellas tarea que supongan un esfuerzo mental sostenido.

Percepción de autonomía: necesitan un seguimiento frecuente y cercano.

Autoeficacia: suelen tener mal rendimiento escolar

Colaboración: muchas veces son poco apreciados por sus compañeros

Objetivos de dominio: necesitan obtener resultados inmediatos y eso resulta más fácil planteándoles los
objetivos de las tarea.

Para evitar prácticas inconsistentes, conviene observar que en ningún momento se plantea la motivación
como tratar de convencer al alumno de que el curso es importante para su vida o que es muy
interesante, o apelar al “tu puedes, tu eres capaz”. Tampoco parecen adecuadas las estrategias basadas
en la “mano dura”, que crean un clima insatisfactorio para el alumno, en el que resuota más habitual
recibir regañinas y castigos que reconocimiento y felicitaciones acelerando la aparición de conductas de
evitación del trabajo escolar.

Promover el autocontrol:

En teoría, la enseñanza del autocontrol es muy sencilla, se trata simplemente de enseñar a los alumnos
a:

- Ser conscientes de lo que hacen


- Proponerse objetivos

- Considerar distintas alternativas para alcanzar esos objetivos

- Elegir una o varias posibilidades y hacer un plan con ellas

- Seguir el plan y supervisar su cumplimiento

- Valorar el logro o no logro de los objetivos

En la práctica, el aprendizaje del autocontrol es una difícil tarea para toda la vida, así que sólo se puede
esperar conseguir con los alumnos algunos aspectos de este aprendizaje. Para ellos considero
importante:

- Organizar las intervenciones de forma que vaya siendo cada vez menos necesaria la supervisión de
los adultos. Para esto , las intervenciones están organizadas según niveles.

- Enseñar al alumno a utilizar autorregistros para conocer y valorar su actuación.

- Extinguir progresivamente las recompensas materiales: hacerlas cada vez más espaciadas, o
vinculadas a un programa de fichas, Eliminarlas cuando un comportamiento esté suficientemente
establecido, y procurar que los comportamientos se mantengan mediante recompe3nsas sociales
(elogios y reconocimiento) y mediante la sensación de autodominio que produce el hacer bien las cosas.

- Es importante involucrar al alumno, que él mismo tome consciencia de la necesidad de poderse


controlar, aprender a respirar, tomarse un tiempo para sentirse mejor y que estando tranquilo nuestro
desempeño será mejor que cuando se descontrolan en todos los aspectos.

Al fin y al cabo la idea no es paliar las consecuencias de los problemas del alumno, sino que se pretende
educarle en la responsabilidad y a autodirección.

Marisa Defago

) Cómo ayudarle a adquirir los conceptos de las operaciones básicas.


Prepara un pequeño cartel en el que escribirás:
Sumar: juntar, poner cosas. → Nº más grande
Restar: quitar, buscar la diferencia → Nº más pequeño
Multiplicar: sumar varias veces → Nº más grande
Dividir: repartir, hacer partes → Nº más pequeño
He encontrado más ideas en el siguiente pdf de la Xunta de Galicia Discalculia
e) Qué hacer si no consigue aprender las tablas de multiplicar.
 Escribe las tablas de multiplicar en cartulinas o folios.
 Un folio para cada una.
 Pégalas en la pared de la habitación donde estudia, de modo que pueda verlas
cuando lo necesite.

De esta forma las memorizará fácilmente.

 Prepara un juego de tablero con las tablas de multiplicar. Necesitarás fichas y


dados.
 En cada casilla habrá indicada una multiplicación sin el resultado.
 Se jugará de forma parecida al parchís. Se tira el dado y se avanza el nº de
casillas que indique.
 Al llegar a la casilla, el jugador deberá resolver la multiplicación.
 Déjale utilizar las tablas que habéis hecho para ver los resultado. Le ayudará a
aprendérselas.

Hoy terminamos aquí. ¿Te ha resultado útil la estrategia?.


Si tu hijo tiene dificultades de aprendizaje en matemáticas y deseas un plan que tenga
en cuenta sus características
no dudes en contactar conmigo.
Te ayudaré a preparar una estrategia adaptada a sus necesidades. ¿Te animas?

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