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Dinámica: Trabajo personal

Podemos disponer sobre la mesa o el piso un montó n de fotos de distintas puertas.


Preparamos para cada uno, una hoja en blanco (o de papel madera) y muchos lá pices,
crayones, pinceles, pinturas, recortes de revistas, etc., e invitamos a los chicos a dibujar y
pintar su propia puerta... La puerta que ellos quieran dibujar -copiada, recordada o
inventada. Vamos a darles un tiempo tranquilos para que lo hagan (aproximadamente
10/15 ́). Ayuda mucho poner algo de mú sica entretenida de fondo

Compartida
Cuando terminan de dibujar las puertas, podemos invitar a los chicos a compartir en
grupos de 3, ¿qué es lo que má s les gusta de esas puertas? Y ¿de dó nde es la puerta?, es
decir, ¿a dó nde lleva?, ¿qué hay delante?, ¿qué hay detrá s?

Despué s de 5/10 ́ los convocamos a todos una ronda general. Invitamos a compartir:

- ¿Les gustó dibujar, pintar, crear sus propias puertas? ¿Qué sintieron mientras lo hacían?
- ¿Alguno quiere compartir qué es lo que le gusta de su puerta?

- ¿Alguno quiere compartir a dó nde lleva su puerta?

Vamos a pensar ahora que esa puerta que creó cada uno es la puerta de esta parroquia,
que siempre estará abierta para recibirlos a todos, tratarlos bien, compartir con otros
chicos y encontrar a Dios.

- Pegamos un cartelito en cada puerta que diga: “¡Abierto! - ¡Bienvenidos!”

Y ahora en un momento de oració n, vamos a conocer la puerta de alguien muy especial.

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