Valle de Lambayeque

Complejo Arqueológico Huaca Rajada – Sipán

Fig.1 Chero, L. (2015) Vista aérea del sector monumental del Complejo Arqueológico Sipán.
Recuperado de Nuevos Aportes en la Investigación Arqueológica de Sipán

El complejo arqueológico Huaca Rajada – Sipán, se encuentra ubicado en el valle medio

del rio Lambayeque, políticamente bajo la jurisdicción del distrito de Zaña, provincia de
Chiclayo, región Lambayeque.

El sector monumental establecido en un área de 29.5 hectáreas, está conformada por 3

estructuras arquitectónicas de gran magnitud denominadas por Alva (1994) Pirámide
Político-Administrativa, Pirámide Ceremonial y Plataforma Funeraria. (Fig.1)

La primera estructura es de planta cuadrangular; tiene 140 m. por lado y una altura
aproximada de 25 m. La Pirámide Ceremonial, también de planta rectangular, tiene una
base aproximada de 80 m. de largo por 66 m. de ancho y una altura de 30 m. Finalmente,
la Plataforma Funeraria posee 110 m. de largo por 60 m. de ancho y una altura aproximada
de 10 m (Chero, 2015).

El complejo arqueológico se encuentra actualmente dividido en 4 sectores, de los cuales

el sector I, conocido también como Sector Monumental, es en donde se han realizados
los más grandes hallazgos.
Sipán salió a la luz en el mundo de la arqueología debido a los increíbles hallazgos
realizados por Walter Alva en 1987, siendo el más importante el descubrimiento de la
cámara funeraria, el ajuar y los restos de un personaje de la elite mochica, siendo al hasta
el momento de su descubrimiento el primer contexto funerario de un gobernante
prehispánico hallado in situ en el territorio peruano.

- Investigaciones.

En 1987, debido al gran saqueo intensivo que estaba sufriendo el complejo arqueológico
comienzan los primeros trabajos en Sipán, pero en forma de proyecto de rescate
arqueológico, bajo la dirección de Walter Alva.

Los mas importantes hallazgos en el sitio de Sipán provienen de la denominada

Plataforma Funeraria, en la cual se han registrado hasta la fecha 16 contextos funerarios
conteniendo los restos mortales de los hombres más importantes de la élite mochica de
Sipán, entre ellos, gobernantes, sacerdotes, jefes guerreros y nobles, además de los
individuos sacrificados al momento de la muerte de los personajes principales. Este
monumento funerario representaría el mausoleo real reservado exclusivamente para la
élite mochica (Chero, 2015).

Alva en 1987 una serie de métodos para la preservación del sitio, durante estos trabajos
de limpieza se descubrió la Tumba Saqueada, un contexto funerario que yacía destruido
por acto del huaqueo y del cual se pudieron registrar pocos objetos de filiación cultural
Moche. El mas resaltante de ellos un bastón o cetro de cobre de 1 metro de longitud, con
una representación de una estructura arquitectónica en la parte superior (Fig.2).
Fig.2: Chero, L. (2015) Cetro asociado al personaje de la Tumba Saqueada y reconstrucción de
la estructura arquitectónica que decora dicho objeto. Recuperado de Nuevos Aportes en la
Investigación Arqueológica de Sipán

Luego de los reconocimientos y limpieza, Alva establece unidades de excavación en el

sector superior y central de la Plataforma Funeraria.

La presencia de un relleno de tierra de 5 x 3 metros, en una capa conformada por adobes

homogéneos unidos por argamasa fueron los primeros indicios de una posible cámara
funeraria intacta.

Los arqueólogos excavaron una cámara funeraria con los restos del señor de Sipán situado
en un ataúd de madera, envuelto en un impresionante conjunto de ornamentos, emblemas
y atuendos de oro, plata, cobre y cobre dorado, textiles y otros elementos que constituían
sus símbolos de rango y atuendos rituales. Alrededor lo acompañaban restos de hasta
ocho personajes de su entorno inmediato y algunos animales: un jefe militar, tres mujeres
jóvenes, un porta-estandarte y un niño, así como los restos de dos llamas y un perro que
fueron los primeros animales en ser sacrificados. Sobre el techo del recinto estaban los
restos de un vigía y un soldado con los pies amputados que simbólicamente cuidaba la
tumba. En cinco nichos u hornacinas se encontraron más de doscientas vasijas de ofrenda
representando prisioneros, guerreros y personajes en actitud orante que, cuidadosamente
dispuestos, formaban una especie de escenografía funeraria.

Entre los ornamentos de su ajuar resaltan la corona semilunar de oro, decorada en la base
con el personaje de Ai-apaec (Fig.3). Tres pares de orejeras de oro y turquesa
representando un ave sagrada, los venados vinculados al culto de los ancestros. El más
asombroso de estos ornamentos realizados con una increíble técnica para trabajar el metal,
representa en una imagen miniaturista de oro, al mismo señor flanqueado por dos
guerreros (Fig.4). En su mano derecha reposaba un cetro metálico rematado en una
pirámide invertida de oro con relieves de la escena de imposición militar sobre prisioneros
(Fig 5). Un collar representando veinte frutos de maní, confeccionados la mitad en oro y
la mitad en plata (Fig.6).

Fig. 3 Chero, L. (2015) Corona semilunar de oro

asociadas a la tumba del Señor de Sipán.
Recuperada de Nuevo Aportes en la Investigación
Arqueológica de Sipán

Fig. 4 Chero, L. (2015) Orejeras de oro y turquesa asociadas a la

tumba del Señor de Sipán. Recuperada de Nuevo Aportes en la
Investigación Arqueológica de Sipán
 Fig. 5 Chero, L. (2015) Cetro asociado en la tumba
del Seño de Sipan. Recuperada de Nuevo Aportes
en la Investigación Arqueológica de Sipán

Fig. 6 Chero, L. (2015) Collar bimetálico

asociadas a la tumba del Señor de Sipán.
Recuperada de Nuevo Aportes en la
Investigación Arqueológica de Sipán

Luego del descubrimiento del Señor de Sipán, el complejo tuvo distintas temporadas de
excavaciones e investigaciones las cuales ayudan a entender más el ámbito político y
social moche en el valle de Lambayeque

Luis Chero realiza excavaciones nuevamente en la Plataforma Funeraria en 2007,

encontrando a más personajes de elite y nobles de Sipán, de entre las cuales resaltan las
tumbas 14 (Sacerdote Guerrero), 15 (Noble Guerrero) y 16 (Señor Guerrero).
La más sobresaliente de las tres tumbas anteriormente mencionadas seria la denominada
Tumba 14 (Sacerdote guerrero) que fue hallada en su cámara funeraria acompañada de
una mujer y un camélido, dentro del ataúd, el esqueleto se encontró en posición de cúbito
dorsal, con la cabeza orientada al sur, las extremidades superiores extendidas a ambos
lados del cuerpo, y las extremidades inferiores también extendidas juntándose a la altura
de los pies. Se encontró un complejo ajuar de objetos de metal al interior del ataúd, debajo
y sobre el cuerpo del personaje. Gran parte estaban fragmentados y algunos en mal estado
de conservación (Chero, 2015).

En su ajuar funerario resaltan piezas como un collar de cabezas felínicas de cobre dorado
(Fig.7). Una diadema con volutas de cobre en forma de tentáculos de un pulpo con
decoración central de un felino antropomorfo (Fig.8). Dos copas con pedestal de cobre
dorado (Fig.9). Y una escultura de cobre macizo representando a un hombre búho
(Fig.10).

Fig. 7 Chero, L. (2015) Collar de

cabezas felinicas asociadas a la
tumba 14. Recuperada de Nuevo
Aportes en la Investigación
Arqueológica de Sipán

Fig. 8 Chero, L. (2015) Diadema

con volutas asociadas a la tumba
14. Recuperada de Nuevo Aportes
en la Investigación Arqueológica
de Sipán
 Fig. 8 Chero, L. (2015) Copas de
cobre asociadas a la tumba 14.
Recuperada de Nuevo Aportes en la
Investigación Arqueológica de Sipán

Fig. 9 Chero, L. (2015) Escultura de

cobre de hombre buho asociadas a
la tumba 14. Recuperada de Nuevo
Aportes en la Investigación
Arqueológica de Sipán

Con sus nuevos aportes, realiza una secuencia arquitectónica asociada a los diversos
personajes encontrados en la plataforma.
A partir de análisis de radiocarbono, Chero (2015) establece fechados a algunos de los
mas importantes personajes en Sipán. Indica que la tumba del Viejo Señor de Sipán
correspondería al inicio de la Fase Mochica Medio (siglo IV), asociada a la fase
constructiva 2 del edificio 2. El gobierno de este jerarca se habría dado una o dos
generaciones antes del Señor Guerrero (T 16), fechado mediante carbono 14 a 2 sigmas
en 390–540 años d.C. La tumba del Sacerdote Guerrero (T 14) que, estratigráfica y
cronológicamente, es posterior a la T 16 ha sido fechada en 430–640 años d.C., según los
resultados del carbono 14 a 2 sigmas. En este sentido, la tumba del Señor de Sipán
localizada en la última fase constructiva del edificio 1 sería posterior en el tiempo y
representaría el fin de la Fase Mochica Medio en Sipán, probablemente hacia el siglo VII,
tiempo en el cual ya se estarían produciendo periodos de lluvias a lo largo de la costa
norte del Perú (Chero, 2015).
Bibliografía
Alva, W. (1994). Sipán. Descubrimiento e Investigacion. Lima: Backus y Johhnston S.A.

Chero, L. (2015). Nuevos Aportes en la Investigación Arqueológica de Sipán. Chiclayo:

GRAPHICOMP IMPRESIONES E. I. R. L.