inferiores y la tierra. En el principio, Kane moraba en la oscuridad. Luego se creó la luz y Ku, dios de los antepasados, ayudó a Kane lo mismo que Lono, dios de los cielos, a crear la tierra y a ocupar su superficie con seres vivos. Posteriormente, estos dioses crearon la primera pareja humana, pero Kane la condenó a la muerte porque muy pronto mostró una gran independencia. Luego el dios abandonó la tierra y se retiró a los cielos superiores. Los hawaianos recuerdan la intención original de Kane de vivir en la tierra en el nombre tradicional que dan al mundo, Ka-honua-nui- a-Kane (la gran tierra de Kane). Sin embargo, hicieron muy pocas imágenes del dios, tal vez a causa de su lejanía. Por otro lado, tal vez los hawaianos pensaron que no debían hacer nada más que pudiera desatar las iras del dios, ya que el gran poder de Kane queda de manifiesto en sus t´tulos, Kane-hekili (tonante) y Ka-uila-nui-maka-keha’i-i-ka-lani (relámpagos que parpadean en los cielos).