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Una vida llena de opciones

Nuestra vida está llena de momentos a escoger, no siempre será lo mejor


pero lo hacemos, cada día debemos de ser valientes para poder seguir
adelante, tomando decisiones, una y otra vez cada día.

En el libro de Lucas encontramos una gran enseñanza respecto a esto y


leemos Lucas 10:38-42 “Aconteció que yendo de camino, entró en una aldea;
y una mujer llamada Marta le recibió en su casa. Esta tenía una hermana que
se llamaba María, la cual, sentándose a los pies de Jesús, oía su palabra.
Pero Marta se preocupaba con muchos quehaceres, y acercándose, dijo:
Señor, ¿no te da cuidado que mi hermana me deje servir sola? Dile, pues, que
me ayude. Respondiendo Jesús, le dijo: Marta, Marta, afanada y turbada
estás con muchas cosas. Pero sólo una cosa es necesaria; y María ha escogido
la buena parte, la cual no le será quitada.”

Jesús hace una buena observación, María escogió la mejor parte.

Hay ocasiones que corremos el riesgo de convertir nuestro servicio a Dios


como un simple ajetreo diario, sin dar una verdadera entrega de lo que
hacemos, lo hacemos como por inercia, como algo que tan sencillo estamos
acostumbrados a hacer y “debemos hacer”, porque así lo dicta “mi”
conciencia.

Y definitivamente las cosas que se ven más sencillas y hasta insignificantes


son las que causan más relevancia en nuestro diario vivir.

-o-o-o-o-o-o-o

Para los que somos adultos nos ha tocado tomar grandes decisiones, que han
sido cruciales para nuestra vida completa, una de ellas sería
1.- Qué voy a estudiar, que carrera tomar a que me dedicare el resto de los
días, obviamente queremos dentro de ello la seguridad económica personal y
la de la gente que nos rodea, en este caso la familia y definitivamente el
reconocimientos social procuramos que venga haciendo compañía.
2.- ¿Con quién me he de casar, será este el adecuado, o que tal aquel
(aquella)?? Esta es una decisión verdaderamente importante porque es con
quien comenzaremos nuestra propia familia y pasaremos el resto de nuestras
vidas.
Aunque al día de hoy el casarse ya no tiene mucha importancia y da menos
compromiso
3.- Y una más y la más importante, la decisión de aceptar a Cristo, la opción
de pasar una vida eterna con Dios en los cielos o en otra parte.

En qué orden aparezcan estas grandes decisiones no es lo importante, pero


para la mayoría de los que estamos aquí ya se nos han presentado y para los
más jóvenes dos de ellas aun estar por llegar.

Y no con esto creemos que es lo único difícil que debemos de afrontar en un


momento determinado, nos estaremos encontrando con opciones día con
día.
Bueno hasta el que ponernos muchas veces resulta una difícil decisión.

Sin embargo algo si es muy seguro, muchas ocasiones perderemos el tiempo o


nos “perderemos” la mejor parte a consecuencia de una decisión
equivocada.

Y me vine a la memoria cuando llegó el momento de decidir para donde ir,


cuando Abraham le dice a Lot que es tiempo de separarse, Abraham le dejo
escoger y Lot decidió lo que a su vista parecía la mejor opción.
¿Consecuencias? Ya las conocemos.

Así nos dejamos nosotros lleva para tomar decisiones, por lo que
aparentemente será lo mejor y pensamos y analizamos y le damos mil y un
vueltas en la mente y decidimos a nuestro parecer lo mejor, y pregunto ¿le
preguntaron a Dios?

No nos compliquemos mucho, todo lo que rodea nuestro caminar diario, sea
el trabajo, la escuela, la familia y hasta la televisión, si no está relacionado
de alguna manera con las normas que Dios a puesto para nosotros sus hijos, si
no está caminando conforme Dios busca de sus hijos que están guardados en
Santidad, ponga atención y retome el camino de nuevo.

NO SE AFANE

Deje de hacer lo que estaba haciendo, no se distraiga como Marta, tome su


tiempo y siéntese a los pies del maestro y aprenda, déjese amar y consolar
por Él.

Deje la lavada de trastes para otro momento, cada cosa tiene su tiempo,
María sabía que era el momento de quedarse quieta, de aprender de
disfrutar de las enseñanzas de Cristo, que a diferencia de Marta realmente
estaba perdiendo el tiempo, ese momento había que aprovecharlo.

Los quehaceres de la casa y el atender gente lo tendrían en su caminar de


cada día, pero estar a los pies del Maestro aprendiendo se podría decir que
era una oportunidad casi única.

Me quiero imaginar a Marta al quejarse con Jesús Lucas 10:40 “Pero Marta se
preocupaba con muchos quehaceres, y acercándose, dijo: Señor, ¿no te da
cuidado que mi hermana me deje servir sola? Dile, pues, que me ayude.”

Su expresión y su tono de voz, ¡!!¡Mira yo estoy aquí apurada, sufriendo por


atenderlos a todos y ella está bien cómoda sentada nada mas sin hacer
nada!!!!

Creo yo que tal vez estaba esperando apoyo de Jesús para activar a su
hermana, ¡sorpresa, sorpresa! Que contestación tan diferente. ¡María ha
escogido la mejor parte, la cual no le será quitada!. NOTESE ¡No te va a
ayudar, tú deberías de estar aquí!

A nosotros, Cristianos se supone que debería de será fácil tener que escoger
o tomar una decisión cuando llega el momento, los valores y principios
aprendidos nos facilitan la vida ¿¿??...........

Si a usted le dieran a escoger el día de hoy si quiere partir ya con el Señor o


prefiere quedarse a ejercer su ministerio ya que falta mucha gente que
alcanzar para Cristo, ¿Qué contestaría usted? ¿Que decidiría?

Lo fácil sería ¡¡Señor me voy contigo ahoritita mismo!! y no arriesgo mi


salvación, o bien ¿me condolería por aquellos que no han entregado su vida y
me quedo más tiempo?

Suena difícil ¿verdad?

Aquí es donde puedo entender al apóstol Pablo cuando escribe en Filipenses


1:21 “Porque para mí el vivir es Cristo, y el morir es ganancia.”

Como quien dice, si estoy aquí para que desperdicio el tiempo y proclamo a
Cristo.

Tenemos la escritura inundada de testimonios, ejemplos, historias y demás,


por gente que tuvo que tomar decisiones, y en algunas de ellas por la presión
de sentir que se encontraban solos o que dieron por hecho las cosas y la
decisión fue equivocada.

Hace unos días vía una película del Rey David y leí un poco acerca del primer
Rey de Israel, Saúl, lo favorecido que había sido por Dios, el respaldo
constante que vivió y vio del Señor y una decisión equivocada le salió muy
caro porque entonces su reino no durara mucho, como lo relata en 1 Samuel
13:8-14.

Tenga cuidado que nosotros no estamos exentos de sentir que Dios se tarda
en contestar y cometer un grave error al escoger y que al igual que Saúl
podemos dar algunas excusas para justificar la equivocación y tratando de
espiritualizar nuestras acciones y hacernos hasta los sufridos.

A Saúl le costó el reino y no solo a él, sino que ni aún su descendencia lo


substituiría, por lo consiguiente a su descendencia, Dios le quito de raíz.

Que difícil sería que por una mala decisión nos pasara lo que las 5 vírgenes
que decidieron muy tarde comprar el aceite, ¿Cómo les dice el novio? No las
conozco (Mateo 25:12 “Mas él, respondiendo, dijo: De cierto os digo, que no
os conozco”)

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Y recuerdan el relato de la reina, Ester, la decisión que tomo afecto


positivamente a toda una Nación, convoco a Ayuno y oración y
posteriormente se presento ante su esposo el rey Asuero, resultado; lo
conocemos también.

Tiene usted idea como a alcanzado a personas espiritualmente en su decisión


de interceder por ellas en una noche en que se siente fatigado, aburrido,
estresado y harto del día, pero usted decidió bien, hay gente que necesito de
su oración ese día precisamente, esa noche en especial.

Nuestra vida está llena de decisiones es bueno, el problema es cuando se nos


hace un habito tomarlas equivocadamente, pareciera que no aprendemos,
que nos gusta pasarla mal.

La siguiente vez que tenga que tomar una decisión, sea grande o pequeña,
pregunte a Dios cual es la más adecuada, que le guíe a no equivocarse, y si
se equivoca, aprenda de ello para que la siguiente vez sea positivo.

Ahora bien, nunca olvide que Dios nos habla de tantas maneras, pero que
desafortunadamente estamos esperando a que caigan rayos o tiemble la
tierra para reconocer que Él nos está hablando.

Aprenda a escuchar hasta lo más sencillo, en ello Dios se manifiesta.

Ante todo su decisión debe de ser seguir a Dios, serle obediente y fiel hasta
que Él le llame
Leemos en Deuteronomio 30:19-20 “escoge, pues, la vida, para que vivas tú y
tu descendencia; amando a Jehová tu Dios, atendiendo a su voz, y
siguiéndole a él; porque él es vida para ti, y prolongación de tus días; a fin
de que habites sobre la tierra que juró Jehová a tus padres, Abraham, Isaac y
Jacob, que les había de dar.”

Esta es una parte de cuando Moisés esta recapitulando un poco para el


pueblo de Israel poco antes de entrar a la tierra prometida, el viaje había
terminado en el desierto y Moisés estaba a punto de morir, no entraría con el
pueblo a la tierra prometida y su exhortación hasta el final fue seguir en
fidelidad y obediencia, que en ello hay recompensa.

Misma recompensa esta para nosotros hoy cuando tomamos la decisión de


seguir a Dios hasta el final.

Que hay que librar batallas y brincar piedritas y rodear montes, es innegable
pero nunca olvide que no va solo.

AMEN

Rosamaría Segura
Pastor

Fecha del servicio:


04/21/2013

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