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Lowle

ellos Y unir ejemplos partitulnres en un grupo de hechos similares. Finalmente


hay caracteristicas domintlntcs de la cultura, como Ja inercia cultura] o ln raci;
nalización secundaria de hábitos adquiridos irtacionilmc:nte por los m.iembros de
un grupo, que sirven como principios inte-rpretativos liberales en la historia de Ja
civilización.
En resumeni como en otras ciencias. en la ctnologht hay hecho$ irreducibles y
fundamentales, relaciones funcionales especiales. y principios de amplio alcane.e
que nos guian a través del caótico Juberinto del detaUe. Como el ingeniero acude
al fisico para un wnocin1ien10 de leyes mecánicas. cl constructor sociaJ del íuturo
que busca rcmodelar la cultura de su tiempo y aumentar sus va.lores culturales
buscará guia en la etnología. la ciencia de la cultura, que según el juicio de Tylor
Edward Sapir
es 'esencialmente una cicnci11 de rcforn1ador'.
1884-1939
Refere ncias

Boas, F..: _TI~ .'+1úul t>/ l1rirni11re. New York, 1911.


Ciclanowski. Jan: •<Objektivt" Kritcrien in der Eahoolo¡ic». K()rr~S¡,ónden:b/011 der /Ñu1.1·
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Tylor, E. B.; Prü11i1ivt C11fflue. Ncw York, 18:89a. Edward Sapir nació en Alemania. Su familia e-migtó 11 América, cuando CI ~en.ta 5
~on a Me1hod of lnvestigating the OeYclopme-nt of lnuitutions; Applicd to thc La*S 11ños. El prituer trabajo de su p;i.drc (uc como cantante en Riehmond. Virginia.
o( Marñage and IX$ceo1~. Jo"'""' oj 1/tr 1lrultrt1(XJloxical lns1i111tt, 18: 24.S.272. 1889b. cuando Edwatd cm~ la escuela, pero su fumilla pronto st 1rasladó a Nuc...-et
Wiss1er. C.: ~~1a1criaf Culturts oí 1he North Amcrk-:an lndianP.. AnH"ri<'an A,u/,r()p<>/f}gisl. York y se estableció en Lowe:r Eas1 Side. Saplr (ue criado .:n la c:;tricta lhld~ió.n deJ
16: 4n.sos. 1914. judaísmo or1odoito. Cuando creció desechó k> quie cre[a _que eran las rcst~teetones
•Aboriginal ~1aize Cultun: as a Typical Cuhurc--Complex ... A,,ttriron Journol o/Socio~ de la ortodoiti.a. pero retuvo 1nuch~ de S\1$ puntoi de vtsta durante .su vida..
logy. 656-661 , 1916. Aunque: su ramilia cnt muy pobre. lle las arregló para continuar su educ;::ic-ión.
gan.ó uoa ~ para cs1ud1ar en la escuela Hornee Mann y deq>0és otra Puti1zer
paro Colun1bia.
Después de su gradu.ición en 1904, rtalizó durante un ar\ o un curso de postgr~ ·
d11ado sobre lenguas genni1n.cus y semi1icas en Columbia. Su intcrCs pOr el lenguaJC
ae hizo conocx.r a F~ni Boas,. quien le hizo perder su interés por la$ lenguas no
escrilas para e:x1end6Nelo al resto de la Antropología. Desde ese mon'ICl'lto su
trabajo más importante íue sobre de In anlf(tpologín ling.úistica.
llabtcnd-o tcnnin~do su M.A ~n IQCK, S:\)'llr. con el B.pO)'O de Boas. se fue a la
pnne más baja dcJ rio Columbi:a p:utt estudiar el wis.hra~, El año si~ujente crabajó
en una gramática sobre el lenguaje 1ak.elma de Orcg6n. Ei.ta gramAuca ru_e preKn-
tada como su tesis doctoral en 1907 y pubUcada en 1912. Sw c:s1ud1os .sobre:
v.ishram hablan sido publicad~ ell 1900.
Sapir pasó el •00 aeadémioo 1907-1908 oomo b«:ario Ín'o'CJtig;ador en el nuc'o
dep:1e1an1ento de antropologia de: la universidad de California, en Bcrkek:~. Ya. que
la Univcrsiditd etA inc:ipai de darle un tr:abajo pennanen1e. :;e Cue a la universidad

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- 140 -s.
'"
de Pt:~t.lv1nJ1.; donde permaneció durante dos aftots. primero oomo colaborador y comparatha. .obre rodo con bl lenguas tndi:u~ 1meric1naJ, panic:ul1rmentc el
d~cs como tn1tr1.1C1or. Aunq"c un1 pequeña parte de su trabajo sobre el lenau* naV8,JO. yana. n00tl:a1 tlingil. S3rcce. ku1ehc:. chioook )'el palu1c sureño. Tan1~n IC le
pai.utc de la ramlha shoshoncan fue pubUcado antes de 1930. lu parte mis Importan.. ro,..-uttda por una serie Oc aniliih intrincados de las primeras fa.ses del indoc:uropt0.
1c de c)tc x pubbcó dun.nie etlc pctiodo en filadclfta. &ce e:s.tuclio vcriíl06 u. En 19)1, Sopt iactptó una dtcdro en Yak y, con la ll)'ucbt de un jovrn llamado
leOfía de la llmilia de '°'8UIJC' uto-tzlC!Ca. Gc<l<ll' PelCt Munlodt. que babb lldo "°""..SO <0m0 colaborado< kmponlmcnte

• Sapii pronto ~blec:ib su "'""1Ultdad. 1\1$ intcraa. que tnchúu puqu..1ri, en d dc¡>ortamcnto de oooolotpa. lundi> allí d cleponamm10 de antropoloco1 Conu-
l'Á"O'Otla. ooaolopa, ttoologia. folclor< J rdigión. Lcb mucho y recordaba ....,,. nuó ocupo.- por su.....,u de los problemas~ fundando un onmnano
brosame:ntc podia rttOtda.r gran cantidad de información cuando noca1taba d1r anual para estudw d impacco de 11 cukura en la penonahdad. cstablcamdo un
un cjempto o recordar una teoría. comitt sobre personalKlad y cuhuna para el COJ\Sl(jo de· invc:s:tlgación nllclonal y
E11 1910 410 casó y ~fue a Ouawa oonlo je.re do In m:ien1emen1e csuablcekla c...cribicndo aníeulos .sobre •Lo 1n1ropotogia cul1urt.1 y la psiqujatria>t (l932) y uln
divbión de an1ropoaoata de in,·e.1igación ~ógit.a de O..nadá. Este trabajo le conuibución de la ps:iqui:uria paf.l comprenstón de la c:onduc:tu (1937~
ra.cilit6
. buenas OJ>Ot:tUni<bdes par:1 el trabajo en su campo. Allí,. eo sus pnmcros Sapir hJ70 algo mis C:OR et kn1uajit que SÓIO e$UKhark>. Era poC'lll y, durante
anos., hao UA.l sucaión de dftOll1llt1t ~pbl1ll 'I múmmcs de grandes compcn.. muchos aao.. sus poemas a~rucroa regularmente en 1lw' ,vrw R1publlr. T1tr
- de datoo - dcmos1raoona de los pnoapoos ••b)"lC<ftlCS. ialcs romo d .a .varfM. l'«try y ca oc.ras rt:\-U:IU "tuuu,·o uN CIOO'tSp()ndenci& prohkra con
"'PnmKOÓn to<UI de bs '""""de la OOtta oestco (1915) ~ •Pmpectiva lcm¡I0'1ll Rulh Bcocd.ct (qu;cn wnbtcn acr1bLI pocsia 'I en al)"I anlf'OPOkllÍI tuvo un papt"I
en la cuhura ammca.na abonaen. un ct:1udio con mCtodo• (1916~ A un anJculo decisivo) en la que mostró \cncr una pcn:picaria. a.gudl en un mundo en el que los
csai10 como rcsputs1a a Ja rcformutactón de Krocbcr del concepco de supcror¡int· demás p¡areclan hallarse muy lejos del univcno 1ócnioo del análisis lin.gülsoco.
co de Spc:ncc:r. se k: lla':'ó ~N«eslutmos un supcrorgánioo.,.,. C1917) y íuc 1.a prit1ll.'-r11 S11pir. en 19J7, sufrió variot 111aqucs Cárdi:u..-os y, dc~pués de una larga cnícnnc·
de las muchaJ afirmact0nes en l;n que: Saptr enfath:ó la unpon11ncia del ind1\liduo dad. murió tempranamente en 1939 Su muc:rtt truncó vario.a proyecios. incluyc-ndo
en d n:tudio de la c.'\dtura. En 1921 , publ..có $U únKX> libro. ~g,. d a.niltSH de una gran cantidad dt d:atOll etnogrtfiCOS y utudios e.xtc-nsos so1wc lm
Si• cmtmgo. Sapir se Jint16 toto en Octavfa. SUI intereses 1ntdcctua.~ .te ............ 1nd-Onirop<os J Kmho<OO.
centraron cada va más co los probkmas psicolópcos de ta cultura - •n 1ntC"ttJ no
compartido i - nooguoo de "'' cole¡»-. Su mu¡cr m•nl> después de """ .. , .. brtroclucclón
enfermedad. dqándole con 1ru hJJot. Cwndo x le ptdÑ> que se unic:ra al dcpJn1-
mcn10 de antropologia de ChtcaJO en 19'2S. areptó en seguida.. Edward Sap1r, aunque sobre Lodo un antrop61ogo de rnolde boasiano. ruc unu de
En Chkli&@, donde el dePQrt(lmtnto habia sido (onnndo h"cla poc.i> tíempo por los (undadoreJ de la ciencia hn¡Ub1ica Sus contribuciones 4 la lingü.iscK.-a. que '°º
Fay-COOpe:r Cole. Sapir pudo prc:-S)lmr a los- estuchan tes que oseaban intucsud~ en may0t1tanamen1e lknicas. JOA de una natun.lcz:a bi.Jtc. y pcnna.nc-n1c Como
la teoria y prktica de la lingübt.ca, y por primera va hiio uio de su gran hablhdad mlXl'lot de sus oontempóf'lineot fe,cepco Krocbcr. que babia atado mucho mh
como ptOÍQOf'. También • bao muy popular fuera de \a u:no't'rStdad y 1r: te pcd1:a prtpondo p<K<Jlópcamcnte que runsuno de dlosl S.pir tenla uiieris en d lupr del
su cobbonaón. &u"\'O mu) ocupado ce Chtcag« lit l'Of'1ó a Cllar. r:mntu"o un iDdiv1duo en ta cuhun. r de esca forma en los cstuc.bos de ta cuhora y 1a pe:rsonah-
programa de clucs •prttado. y kt hllO • b \'Cl que cuud11ba un k:n&.\QJC afnc:ano a dad. Su u1lcrCJ por el indh iduo parece. sin embl.rgo. haber tenido un enfoque de la
lrl\Ú de un jo"cn inmigrante que conoció., que traba}lb4 en una bolera, mente humana más cogn0$Cit1vo que emocional.
Continuaban creciendo su1 interc:Jes en los probk:ma.s de la pcrsonahd.ad y l:a Sapir llegó hi1sta la lingüis11c. Antropológica desde ht filología uk 1n11na Su
cultura lnet'lfpQraba ideas de libros como P.tyrJwiOJ(i<'u.I Ty¡w-1 de Jung y A/t<,111~ mayor oporu1ción :1 la :1n1ropolog11t y a la lingüi!ltea fue 1u insistencia. ~fa!i5 a la
o/ ~leunl1t, de: Oaden y RIC'hards en un curso que impartiO en Cclumbi:.i el vcnano i.mporuu~ia de la cultura y a la analogia del len¡uaJC y dt 11 cuhura V1"tÓ CU;tndo
IJ1lcrior del que ÍUC 1 Ch.ca.JO. 'Y d que rallzó mis plena.mente~ b u.nivc:nad.ad ck locla.~la eta necesario dL'iC'Uttr que el tipo de kft&~ quie unti person.iJ o un
Chic~ En~ momento. cmpaó a 1nlereA.r1't m;b pior la scm.in1ica. kt que k indi~Mluo habl:iba. no tema uda q~ ver con b raz:a. ) , qUit H.amar a c:u;1Jquter
llevó a un atudio intenso cid lenguiijc tftll& y de la comunación. knguaJC pn"utho. es mallntcrprctar que iodos b knaua.P están COMp1ctamcn·tc
Para S.pr. 1os enfoques~ cru o palC'n1es o amenazaban b autonomb. desarroll1dos dentro de"" propia) metas cuhunüc:s.
dd yo. Continuammtc in.sisti.a en 11 imponanci.a de la paM>na. Estaba en oon1r1 de Suplr 1rgu1nc:nt11b:t que no hay una unión ca.su~ enlre un lenguaje y una cul1ura
las afirm~doncs convencionales clnogrlftC"J.J, yn que er11n iru.docuadas pQrque cNin Consklcrnba como cu11ura lo que hoce y pien~ un grupo IOC;al. y consideritbo rl len·
íonnulacionc11 acneralcs qüt dedan poco aoerca de 11 vari.lción. el con11.c10. 1111 guaje como una manera de pcn~ar, También consideraba el lenguaje como la -teauia
ncpdón Y la emoción. La solución • atta. cst:tba cu el UIO de las Lknicu de 111 .simbólica haaa b cultura.». Es1e tnt'OQ.ue del atngua;c le Ot\Ó. :t tra\ls del 1ra~o de
ptic ·~11 ._ lnd~-.iduo. p;u1 ...ua..1u1<tttc &il psicotttapia. l.a antropologia. wuti;a. su rolaborador Bcnjamift Lec Whorf. al <losarrollo ele 11 h~ S.pir-Wborf. que
ataba mtcra:Mll en 1a$ ~jul¡u entn: bt: pcnonas. propone una rdacióo muy aU«h1 entre lis catcpta.I athurald ) rl kftl\g.jc..
El lnlboJO mis impomnte de Sapr. por contra. fUe •otmp,. d kngu>JC l.m Sapir.j1o1.n10 oon Boas. fue uno de I~ primeros esludlOiOI de la lingükuca que \lO
articuJos que acnbi6 sobre culluna )' personahdad fueron a menudo respueslat a la d1ferencal, cn1rc: IOS ll$ptCIOS un1vco;aJcs y particuLtrct de.l leng.uajc. Su J'ormulacion
pelicloDC$ o ramilíacioncs de •u• estudiov tingüi!Jlioos. Junto 1 Leonard Uloom· de los aspcc10t universales del lenaua,JC. le cXU'I\ irt10 en uno de los pn1neros en la
í~ld.. era. con~ldef"Qdo el fundador de In lingiHstic.1 dese:ripciva formal y el 1:né1odo r
1cocía $1ntropológica llngui11k:n que hizo hincapie en l1J escnicturas prorunda! del
d.istn buovo que la caradcri?;iba., Tambfén traOOjó en la lingüística hisi6rica ) kttguajc. lo que h.1c¡o liC coovirteó m una base iniport1nte del c:struciunlilfno rr-~
142 EO.vatd Si.plt
143

8. El estatus de la lingüística ta operación de tales tendencias confli<:tivas.como prés_1amo de otras lenguas. la


mezcla dialoctaL y Jas diferenciaciones rocudes del discurso . .Cu!.º'.º mA.~ ~~$
como ciencia* dedicamos al estudio comparativo de las lenguas de un stock. hnguasu~o pnm.1~1 ..
vo, más claramente nos damos cuenta de que Ja ley íonéu~ Y Ja 1guaJac1on
analógica son la única llave satis~tcloria para e.I dC$Coma!añam1e-n10 d~I d~arro-
11 de Jos dialectos y los lenguajes desde una base cornun. Las cxper•cnc1as del
p;ofe.sor Leonurd Bloomficld con el algonkiano central y las mias propias c~n el
Se puede decir que Ja lingüística ha empe?.ado su carrera cientifica con el estl.ld.io athabascan oo dcjun nada que dcsc.-r a este respecto y son ~1na respuesta sat~~fhc..
comparativo y Ja rccon~trucción de los lenguajes indoeuropeos. A lo largo de sus toria para aquellos que encuentran dific.iJ aceptar la regulandad de la operac1~n a
minuciosas in\ttstigaciones. los Ungüi:stas indoeuropeos han desarrollado gra.. larga escala de todas esas ru~rzas Ungüistica.s in~n.~itntes qu~ en _su lotahdad
d uah:neote una técnica que está probabkmenre más cerca de la peñeccióo que Ja nos aportan un c-dmbio íonéuco regular y ~ ~Juste r_norfol6g100 .~bre la base
de cualquier otra ciencia relacionada con Jas instituciones del hombre. Muchas de este cambio. No es sólo 1eóricamen1e posible prtdecu la oorreccoon de formas
de las form ulaciones de Ja lingüisrica indoeuropea compar.uiva tienen una clari- especificas cnlre los pueblos analfabetos pariiendo d~ I_• base ~e tales l~yes
dad y rcgularidad que recuerdan a las fórmulas o a las así llamadas ky<-s, de la roni:tjcas como han sido elaboradas por ellos; tak:s pred1CC1oncs cstan ya archiva-
ciencia natural. La Hgüistica his16rica y comparativa ha sido mayoritariamente das eo gran nUmero. No hay ninguna dud:t de que los métodos des.arrollados
construida sobre la base hipolética de que los cambios fonéticos son regulares y primero en el campo de la 1.ingüistica indoeuropea. están desrinados a dcsentpeiíar
que la mayoria de los reajustes moñológicos en el lenguaje evolucionan oomo un papc1 importante oonsc1entemen1e en el cstu~10 de todos los. ? tros grupos de
productos aparte en el despertar de estos desarrollos fonéticos regulares. Muchos Jenau.ajes. y que es a través de eJlos y a 1mves de su extens1on gradua~ que
podrían escar dispt1cs1os a negar la necesidad psicológica de: Ja regularidad del esperamos llegar a las referenci:ts históricas significnnres ~rno u las reJ~CJone:s:
cambio fonético, pero es verdad, es un hceho de. Ja experiencia lingüis1ica concre .. remotas cnl re los grupos. de lenguajes que muestran pocos signos superlic1ales de
ra, que Ja c.reencia en •al regularidad ha sido el enfoque de más Cxüo a los tener un origen común. . . .
problemas históricos del lenguaje. El por qué tales regularidades se forman y p<>r El propósito mas in1porLante de este trabajo, sin embargo. no es 1nstsllr en lo
qué es necesario asumir la regularidad dcl cambio fon~tico. son preguntas que el que ha hecho ya Ja lingüis.tica, sino más bien scñaJar algunas de las conexion~
lingüista avezado es incapaz. de responder satisfacroriamcncc. Pero el siguiente encrc la lingülstieo y las otras disciplinas lingüí!uicas y, sobre todo. plantear la
paso no es que espere mejorar sus métodos al dese.arcar las hipótesis comproba .. pregunta de en qué sentido Ja lingüistiea puede ser llamada «~icncia». El valor de
das y al dejar el campo abierto a lo<la clase de explicaciones psicológicas y la ling_üística para la antropología y la historia cuhuraJ hn sido dur.tnte. mucho
sociológicas. que no concuerden inmediatamente con lo que conocemos verdade.. tiempo reconocido. Cuando se ha hecho investjgación Jingüistica, se ha v~slo que
ramente acerca del comportamiento histórico del lenguaje. Una interpre-1:.ción el lenguaje es una hcrrarnicnla útil en las ciencias del hombre y que el. m1s.mo ha
psicológica y sociológica como Ja de la regularidad en el cambio lingüistico, oon requerido y obtenido una gran cantidad de lu-t del res10 ~~ estas ciencias. Es
Ja que Jos estudiosos del lenguaje hao estado mucho 1iempo familiarizados., es sin dificil para un lingüisla moderno confinarse a su le!"a 1rad1c1onal. A no ser que
lugar a dudas deseable e incluso n~saria. Pero ni la sociología ni la psioología no tenga nada de imaginación. sólo puede comparur. alguno~ o '?<iºS los 1n1cre~
están en la posicióo de decirle a la lingüis1ica qué clases de formulaciones ses mutuos que unen la lingüis1ic-41 con la antropolog1a y la h1s1ona cultu.ral, con
históricas tiene que hacer el lingüista. En el mejor de los c3sos, es.tus discipUnas Ja sociología. la psicología. la filosolia. y, más remo1amente, con la fis1ca y la
pueden lncítar al lingüista a que se preocupe de manera más vitaJ que 11otcs del fisiología. . . .
problema de observar la historia lingüistíca en lu gran c:s1ructura de Ja conducta El lenguaje se es1A volviendo mas valioso, como guia para el estud1.o cienuíico
humana en el individuo y la sociedad. de cualquier cultura. En cierto sen1ido. los modelos cuhurales rcu~~l~res. de
Los rnetodos desarrollados por los indoeuropcis1as se hilo apUcado con uo una civilización están señalados en el lenguaje que expresa esa c1vthzac1ón.
gran é~üo a otros gruJ>QS de k:n.guajes. Es1á muy claro que lo •1pUcan tan Es una ilusión pensar que podemos enlender los con1ornos signifi~ativ°:5 dc-
rigurosamente a los fcnguajcs primi1ivos no escritos de Africa y América como a una cullura a 1ravés de la observación absoluta. y sin la guia del SLmb~hsmo
ln11 íonnas mfis conoc:idas lle ditKi.trso de los pueblos más sofisticados. Es proba· ling\lístico q"c lnu..-.: .:slos '-''On1ornos slgnlfiCi.:"llivos e in1etigi~Je~ para ~a SOCtednd~
blemcntc en las Jengua.s de esos pueblos más culturizados que la regularidad Algún día~ eJ inlento de ser un experto en untt cultura pnm1uva sin la ayuda
fundamen1al de los procesos lingüis1icos se ha vis10 más a menudo allerada por del lenguaje de su sociedad, p:-arccer:S tan de aficionndos c-01no la. l_a~r. ~e
un his1oriador que no puede manejar los documentos originales de la c1vdiznc.ioo
que esttl describiendo.
• Impreso de Útlr.Jlllfl8' J, a\rm. 4, pág¡. 207·214. diciembre, 1929. con ~I pénQ!O(I de l..an,i:ui!lt•C El lenguaje c:s una guío p.'tm la «realidad SOl":iab>. Aunque norrrual!11entc no se
Socacty of Amtnc.a.
piensa en el lenguaje como ~Ligo de in1erés eseOOaJ ptlru los estudiosos de las
144 145

ciencias sociales. este coodkiona poderosa.mente todo nuestro ruooam_9mto de pm11ic:al. Modas P"nkulares de pronunciación. giros caractcrishoos de los
los p<0blemu y procaos sociales. Los seres bWIW>Ol no viven en d muodo sm11gmu. formu coloquiales dd discurso, terminol<>slas proiesoooalcs de lodas
objetivo solos. 01 solos en d mundo de la actfridad soc.aJ. como .. cn1Jcodc las ca"""erisuco estos son algunos de los muchos s1mbolos en los que: la
ord1nariamcn1e, sino que están a la mcrood del lenguaje panicular que .. ha sociedad 1t d"1nbuye y son de crucial imponanaa para la comprens>Óo del
conttnldo en d medio de expraiOo de su sociedad. Es c:u1 una ilusión W.- desarrollo de las act11udes soaalcs e individuales. No seri posible p<1ra un
¡inar que uno ,. a¡usta a la rcali<bd cscocialmcnie si.o el uso del lenguaje. y cstudiooo de lo social cvalu>r tales fenómenos, a no SCT que 1cnp muy cbr.u las
que el lenguaje es meramenlc un medio incidenllll de resolver los problemas oocionct del ao1cudente lingüisti<o oon las que los simbolismos SOClalcs de tipo
especíílCO!I de comun1c:a01óo o reflexión. El bc<:bo es que el •mundo rca!Jt cslá lingü¡stico han de ser esumados.
en gran pane conmuido sobre los habitos lingüiS1icos del grupo. Nunca dos Anima mucho el que d psicólogo haya ido in1ercsándoso m/IJ y más en los
lenguas son suficic.ntcmcnle simiJarcs como para ser considcr1das rcprcscn1an· datos lingüislicos. Incluso no se sabe si él ha sido capaz. de contribuir bas1i•ntc a
tes de la mi~ma realidad social. Los mundos en que viven las diferentes socie- la comprensión de la conducta del lenguaje. má.s allñ de lo que el mismo lingüisin
dades son mundos distintoo,. no es simplemente el mismo mundo con ctiqucta9 ha sido c.upaz de formular partiendo de sus dalos. Pero se está obscrvondo
difcrcn1~ ritpidan-.cnte y accrtudnmentc. que las cx.plic-acione$ psicológicos de los mismos
l!I en1endcr un simple poema. por ejemplo, oo solttmen10 comporia la com- lingüistas necesitan ser replanteadas eo tCnninos más generales.: asl que. hechos
prensión de las pula.brns en su significado oormal. sino una comprensión comp)e.. puramente lingülsücos. pueden ser vistos como formas espccialiiodns de la con-
ta de la vida encera de la comunidad. de la misma manera en que se ve rcncjada ducta simbólica. Quizá Jos ps;cólog"" se hon preocupado dem11i1do de la¡ bases
en las palabras. o como se sugjerc por sus alusiones.. Comparativamente. incluso psioológlcas simples del discurso. y no bao profundizado mucho en el csludio de
actos Slmples de percepción están mucho más a la merced de los modelos sociales su naluralcza simbólica. Es10 probablemente se debo a que en general los psioó-
Uamados palabnu de lo que podemos suponer. Si alguien dibu¡a unas cuan1as logos. 1ieoon poca conciencia de la imponancia fundamcnlal dd oimbolismo en la
lineas. por ejemplo. de difcren1os u1.malio$, se perciben dMSJblc$ en cote¡orias conducta. Parece probable que precisamente en d cimpo del SJ.mbolismo. las
tales como «tCC'IO•. •torcido•. ccurvo•. «Zigzaguean1 ... por la wbjclnidad c:lasi- formas y procesos lin¡üisticos contribuirán más al cnnq.-micn10 de la psioolo-
íJCati.-a de los mismos 1trmioos hngüistioos. Vemos y oimos. y a la 'ª
cxpcri- ¡ia.
mcnlamos lo que bacan<>s porque los hábi1os del len¡uaje de nuoslra comunidad Se deben considerar 1odas las actividades como ddini1hamcn1e runciotlalcs
predisponen a cicna> dccaones de in1erpretación. en el sen11do mmcdiaio, o como simbólicas. o como una mc'LCla de ambas. Si yo
Para los problemas mis fundamcn1alos de un esludioso de lo cuhura humana. empuJO una puena para entrar en una casa. d si¡niricado dd acto se es1ablcce
por consi¡uicnlc, se¡uro que se conviene en algo mh y más imponanle d proci;amenle en que esla me pennile en1rar fácilmcn1e. Pero si yo •llamo a la
conocimiento de los mecanismos lingüísticos y los acontecim;en1os hj116ricos. a puerta». una ~ueii.'1 rcnc.xión me muestr3 que el golpe por si mismo no me abre
la vez que nucs1ro :inAlisis de Ja conducta social se vuelve mAs refinado. Desde la pucna. Este sirve meramente como un signo parJ que alauien 1.'cnaa a abrirme.
este punto de vista, poclriamos pensar en el lengu11je como Ja g11ia J/111b,j/ica huela la. llamar a la puerta es un sustituto de) acto más pri1nitivo de empujarla por
la r11/1tno. También, &parle, la lingüistiett es de gran ayudo en el esludio de los propia deci3ión. Tenemos aqui IOI rudimen1os de lo que podrh1 ser llamado
fcnómcnOI cuhuralcs. Se han difundido muchos objelos cuhurulcs e ideas en lenguaje. Un grnn nUmcro de nclos son actos del lenguaje en este sentido elcmen·
cone:io6n con su terminologia; así que un estudio de la di1tribuc:,ióo de ténninos 1at &to quiere decir que no son imponantes p;ira no5olros por el trabajo que
significantes cuhuralmcntc, arroja a menudo una lu:z inesperado co la historia de inmediatamente hacen. sino p0rquc sirven de signos mediadores de otros sign<»
las in\'enciones e ideas. Este tipo de in\estig.ación. que ya tiene tx1to en la historia mis imponanccs.. Un signo primitivo tiene alguna semejanza objetiva con lo que
de la cuhura europea y asiática. eslá destinado a ser de ¡ran ayuda en la toma su lugar o señala. Así. llamar a Ja puerca tiene una relación definitiva con la
rcconsrruo:16n de las culturas pñmitivas. acción intencionada bccha en la puerta. 1\lgunos signos se convierten en formas
El valor de la lin¡übtica para la sociología en el scnudo más cs1nc10 de la abreviadas de actividades funcion.alos que se pueden usar como rcfercocia. Así.
pal~bra. es 1ambién cieno para d 1córico antropoló¡ioo. Los socióloaos cs1án enscr\arle d puño a una pertooa. es una forma •brc•iada y menos daruna que
lógicamcn1c 1n1ereados en la técnica de la comunicación cnlre los seres huma- pegarte. Si tal cesto te coovicnc en uno to suftcicntcmc:ntc CJ:Prcil'º para la
~ .~· ••e P"'~'º de vista. ta, facilidades > barrc:r1iJ del kn¡u•JC MHl de: i. sociedad. eotno para eonttituir de alguaa manera el equivaknte ck un a.bu~ o
muuna 1mpor1anaa 1 deben de ser estudiadas en su 1n1tracaón con muchos amenaza. btc"' verá como un símbolo en d sen1ido propio de I• palab<L
otros foc:tores que con1nbuycn a la facilidad o dificultad de la muismisión de Los slmbolos de esta clase son primario< en el scn1ido de que la 1tmeja0Zll del
ideas y modelos de conducta. Aun más. el sociólogo es1á nec:rs.1ri•mcn1e on1eresa- simbolo con lo que es1e estable«'eS lodavla bas1an1e evidcn1e. Con el paso dd
do en el sign1fado simbólico. en un se:n1ido social, de las diícrcncias lin1üis1icas tiempo, los símbo1os cambian tanto ronnalmcnte que, incluso, pierden toda
que apare«n en cualquier aran comunid.ad. La correcdón del d1~urso. o Jo que conexión exterior con Jo que eUO$ representan. Así, no hoy semejan.a entre un
Je podría llamar •estilo social:. en el discurso. es más estético que de interés trozo de ropa coloreado de rojo, blanco y azul. con la baudcra de Estados
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Unidos de America ~n 1i miuna una noción compleja y no íácíl de definir . La recursos cons1antcs pura las acoclas sociales. Pero es poco probable que la
bandera debe a.si ser vista corno un 5Ímbolo KCundario o rC:ÍC'rcncinl. La forma de: experiencia acumulada de la 1n\estigación lingüística pudicia proveer má.s de una
cntcn~e,r el knguajc psicológicamence, parece, es verlo como cJ ejemplo m6s pista válida para el cs1ubtcdmicnto de Jos prob1cma.s de la invcs1igaci6n c:n la
comphcndo de un ¡rupo de slmbolos secundario o referencial que In sociedad hu mi~ma acúst ica y fi.siologia.
c.volucionado. Podria ser que originalmente. los primeros grilos u otro tipo de En resumen. csc6 claro que el interés en el lenguujc ha estado. en estos Ultimoli
s1mbolos desarrolladot por el hombre. tuvieran alguna conexión con cicrt•s ar.os. transcendiendo a t..írculos cstric-tamcnte lingüísticos. Es10 es inevilablc. ya
emociones. acú,·idadcs o nociones. Pero no se puede trazar una oonexión dircct.1· que, para la compr<nsi6n de lo• mecanismos del lco¡¡uajc. es necc<ario el estudio
monte ~tre_~_palabras. o combinaciones de polabru, con lo que hattn rcfueocia. de los problemas h1>t6ncos ) los de la conducta humana. Sólo podem05 esperar
. La_ hn~IStJCa e! )"11 WIO de loo más diíocilcs 1 fundllmeotales campos de que Sos hngüistas sean cada \C'Z. más conscientes de la importancia de 1u materia
1nvm1ga~ Es proba~c que exista en el ruturo una integración \'c rdadcra- en el campo general de la ác-ncia y no pucdc:n e5tar distanciados dclráJ de una
mc~tc ~u~iícra ~ los ~ludios lingüísticos y psicológicos. Podriamos pensar que tradic.ión que amena1..--. en convertirse en o.colástica cuando no tstá v1u1h.uida
ha hngur$t~a csln ~csunada a tener un vnlor muy especial paro In psicología por los intereses que cstdn detrás del interés formal del mismo lenguaje.
configurauvn (la p<toologln Gcstal1~ yu que para 1odn• las formas de cultura. ¿Dónde, linolmcnle, "" sítúa la lin¡üistica como ciencia? ¿Pertenece a las
pa~ que es el lenguaje el que desarrolla s us 1nodclos fundamcnlalcs con. ctcncias naturales. junto a Ja btologia. o a la.s ciencias sociaJcs1 Parece que hay
rclotivamcntc. la má• completa separación de otros tipos de modelo cultural. dos factores que son 105 rc•ponsable5 de la tendencia persistente en obscr• or los
En1ooces..~a 6ngüis1ica podria esperar con•enirse. a la larga. en una ¡uia para la datos lingüisllCOI desde un punto de vis1a btol6gico. En primer lupr, está el
compl'CMIOO de la """°'raf11 psic:ol6gicu de la cultura. En la 'ida to1id1ana. 10$ hecho ob<io de que la t6cnica actual de la conducta del lenguaje conlle\i ajunes
51mboli.mos bísicos de la conducta están densamente sobrepues1os por modelos muy especifJCOS de upo íotiológi«>- En segundo lupr. la regulancbd y upiCldad
funcionales cru.zados que tienen una desconcertante variedad. Esto sucede por- de los p1ocesos hnguisticos :se basan en un sen1imiento casi rominlico del con·
que cada acto único de la conducta humana es ti punto de encuentro de muchas tnutc ron la conduc1n aparentemente libre e indeterminada de los .seres humanos.
cc)n~guracioncs dístinlal, y es muy dificil para la mayorla de nosotros, lleaur a la estudiados desde el pun10 de vista de la cultura. Pero la regularidad del cambio
~oo.~n ~· 1~ conducia de forma contextual y no contextual. Podria par""<r que la fonético es sólo supcríicíalmcntc ~n&loga n un aulornatismo biológico. E.seo es
hn,gu1st1ca he.ne un \&lor »lUY pccuhar para lcx cs1udios oonrigurativos porqi>e la prcci.samcnlt' porque el lenguaje está tan c'1rictamcntc socializado a un t1po de
formación del lenguaje e<. hasta ciena ex1ens.ión, autosuítcie.nte y no sign1ftea1iva. conducta humana como todo lo demás en Ja culturo y 1odavia demuestra en sus
mcn1< a la merced de los modelos entr=uzad0$ de tipo no lingüi.iico. c¡q1>Cmas y tendencias tales irregulari®dct como sólo el cientlflCO natural llene
& nota bit el hecho de que, en pocos años, la !ilosolia se haya pr«>CUpado de el hibito de formular. que la lingüística .. de importancia estratégica para la
105 probltmas del lengua,. como no lo babia heello anl<$. Ha palado la época en CtCocia social. Dctnit de la aparente ine>istcnaa de leYe! de los kn6menos
que: las formas Y procesos ¡ramaucalcs pcxhan ..,. facilmentc traducidas por los sociales.. hay una rcgularidlld de configuración y tcndcnci.a que es ran real como
filósofo• en cona:plos m<lafisicos. Los filósofos necesitan en1ender el lenguaje la regularidad de 103 procesos ftStcos en el mundo mecánico. aunque es una
pnra pro1cgc.rse de $UJ p~opi os hábitos lingiiís1te0s, y así. no es sorprendente que regularidad de ínlinita1ncntc menor rigidez aparente y de 01rn íorma de nprchcn-
ha filosolia, 1n1entundo liberar la lógica de las 1rabtts de la gramática, y paro sl6n p0r nuestra p~1r1e. El lenguaje es prinu1ria1ncn1c un producto •ocial o
entender c-1 conocimiento 'i signiíJCado del simbolasn10. debe de haocr una critica cultural y debe ser entendido como tal. Su regularidad y desarrollo formal
pn:liminar del mlimO pr<><:.uo lingüis.tjco. Los hnguast:as estarían en una posición descansan sobre consideraciones de naturaleza biológia y psicológica. Pero nt•
<.loelcn1e para ayudar en el proceso de esclarecernos las implicaciones de nues· regularidad y nuestra inconoaencia subyaaonte de SU5 forlllll5 típicas. no hace de
Iros t<rminos y procedimicnt05 hngüist>COS. De todos 10$ estudiosos de b con- la hngui:stica un simple adjunto de la bioio&la o la psicolosia- Mejor que cual-
ducta humana. el lin¡üis1u debe de ser. por la naturalc2a de su materia. el máJ qu"" 01ra dcna¡i social, la lingüística 00> enseña con sus datos ) métodos.
relativasta en el sentimiento. k>5 últimos en ~r cauh\·ados por las rormas de su ncc=riamente mh f;\cilmcntc de.íonid05 que los datos y métodos de cualquier
propio discurso. otro tipo de disciphna que tenga que ver con la conducta socializada. la posibili-
Una palabra respecto u la relación entre la linaüis1ica y las ciencias na1urales. dad de un estudio cicntilico consciente de la sociedad que no imiu1 los m6todos ni
f,,..Ofl .estudiosos dc,'n l~gCUan¡cu han estado 1nueho tiempo en deuda por su equipo intcn1a ndop1nr. sin rcvi:u1r los oonceptos de las ciencias naturales. l!s particular·
tCCl~1co con las aenc1~s naturales. particularmente la física y la fisiologla. La mente importanic que los lingüistas. que son a menudo acusados. y justumcntc:.
~oncuc..'l, un. pre-requtsno ncce~rio para lodo 1rabaJO exacto en la lincüisttca. es de no mirar mis alla de los agradable$ modelos de su materia. dcbcrian dar""
·~posible sm •l1P1nos conocimientos acúsucos l fisiolóaicos de 10$ órpnos del cuenta de lo que su ac:naa puede ;ignifoc:ar para la interpretación de la conducta
d15a1rso, Son pa11tculannen1c estos esrndl050S del lcn,..a}O quienes 01lln más humana en ienenL Tonto SI les gusta c:omo si no. deben de preocuparse cada •cz
~nt~rcsados en los dctaUcs rcahstas de la conducta dcf d1SC'Urso concreto en el más de los muchoo problemas antropoklgJCos. sooo16&icos y psicol6gJCOS que
1nd1vaduo. que t.n •~ modelos soaalizados del k!naulJC. quienes deberían tener ln-.den el campo del lcnau•JO.
Benjamin Lee Whorf
1897-1941

Antecedentes

8c1tjamin 1..tt Whotf nació en una antigua familia de Nueva lngJ1term. cuyos
1ntccc1ores $C hablan c~t11blccido en Provincc:to\l,·n pooo detpuCs de lll llegada de
lot peregrinos. Su padn:, HGrr)' Church Whorf. fue un arti11.a oomtrclal (cuyo
Ltabajo rnch.1yó el diseño <kl lavabo para d O ld D utch Cleantet) y un hombre c;on
muchos intereses -la fotoarana. el dasci\o de csccnanQ5. escribir obras de te11ro y
dir.aJr.
Btftja.min y su¡ dos hmnaM')) pcqucftos (ambos llepf'Otl a liCt í.amotol John.
un arusta famoso por ws ecu.arc:lu. 1 Richard. un actor y din:it10f de tulro y
ane--) cuxieaoo en una atm6dcn Ucm. del d~ tibrm., dibuJO&, mu"8ClltOJ.
qulrruca. y equipo fototráflOO. Sin lvpr 1 dudu, muchos de leo .,..,_.que le
llc:TIUoo a la lin.güiscica, re dcu.rrollaroo aaar.ido era un nu\o Leyó ) rtk)i>
Co'"lflUI of ft'ftAÍCO de PfCICOU; IU pedrt rnJJJÓ diseños de ~narios plft\ Ul\J
ubr• QUC &npnaiu 11<1~<1c:~1itu111\.CU.lt de \11\'5 prin«A m•)'• 1Hf 1n..,..t1pción Sr
llevó a la arqueologia maya. l..a botAnica. la astrolocía. las cifr11J y o6djgo.. fueron
UtmbiCn sus grandes intereses. Euaba especialmente iotrigado por lu quimJca y la
rotogr11Ja. y. en 1914, marckó al initituto de tecnología de Ma¡s,ac:hu.$CtU para
cstudlar in¡enicria químicll..
Después de graduanc: c:n el int t11u10 de ingeniería de MaS5KhukltS, liC eon\ irtió
en un capen.o en la lf'latnicrb de ta ptc\'cnctón dd fuego )'.en 1919. te uoJ6 11 la

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Durante C$1a época se cnrrentaba a un.á e-nfennedad larga y prolongada. a la que


rompaTUa de seguros Hartford, donde se le valoró por su tuabilidad por propiciar
los nc¡ocios. asl como por su habíHdad récnica. Se le nombró agente especial en sucumbió el 26 de julio de 194 1. Cullndo tenia 44 años.
1928 y fue cltgido subsecretario de La Compahia en 1940. Pa-maneció como cm·
plndo de esta Compañln dumnlo el reno de su vida. avoque. a veec1 su valía
profesional era igual a la de los profesores inwcstigadottL Rehusó muchas ofertas lntroducc:l6n
de 1ralxljot académkos. alegando que su situación en los lll:"gocios le ofrcc:ía u na
forma de vivir más cómoda y una oparcunidad rM.s amplia de desarrollar a su Whorf causó un profundo impacto en ta antrop0lo(lia cuh ural y la lingüi&lica
rnantra sus intereses intelectuale.i. oon un g.rupo muy simple de ideas: el 5ignifiC'ado es esencial. proclam300, para el
Después de establecerse en Hanford. escribió un •hbro de lilosofla religiosa en estudio de Ja lingüi,i¡tica. y las ca1egorias del si&nií.cado cambian de una tradición
forma de l)Ovelu. foe rechazado por cada uno de los editores que lo vio. Al mismo Q11tu rnl a ocra.
tiempo, terminó un manurucrito má.s oorto t(Porqué he rehusado la evolución•. Sus Los pun1os de vis1a de Whorf se exponen de un.a manera que se considera sin
conclusiones fueron que la cla\'e a Jai contradiocioocs de las oosmologi.as bibUca y cs:tiJo. hoy en dia. porque proclamaba que el Scnguujc refleja y oonstriñi: «.el pcnsa·
científica estaba en la interpre1ación lingüís1ica del A.ntiguo Tct1ameoto. En 1924, mitnt~. Por lo menos podemos estar de acuerdo e,n que c:f lenguaje que se aprende.
empezó a estudiar hebreo. Recibió una lnRuencia muy importante, la dd trabajo de necesariamente constriñe y estru<:turn lo que uno dioc. Presu1uiblcmcntc. se «J)icn.
un dramfllur¡o francCs. filólogo y mistico de los primeros ai'los del siglo XIX. s:l.• tambiC-n en lo,, términos del lenguaje propio. Por esto razón. las catc¡orioas del
Antoine Fabrt d'Olivet, especialmente LA f11.11gtw M/Jr(J[que r~11l111lt (1815·1816). penso.miento son las C3tc¡orins de una cultura partkulat. Los ejempl<>S de \Vhoñ
que intentaba mostrar el significado oculto de la Biblia a tta\-é~ de un análisis de Ja están cjcmpli.l'icados: las dimensiones temporales del len¡uaje hopi son. proclamaba.
estructuro de la raíz trilitera bebrc;.'l. difercn1es de las del inglés. Oc esta fonna. la cultura hopl y la americana estilo
Estinu.iJado de esta manera. Wborf le-)'Ó mñs sobre la Lingüística. En el procc,o, opuestas en p0r lo menos una d imensión i1npor1antc de ta pcrro-pción.
hi1.o uso de las oole<:cioncs de la Biblioteca Watkinson,. cuya rolcoción de etnología. La tesis de \Vhotf ha sido 11nmad a •rehali'fiS-1no lingüístico•, un tér·mino muy
folclore y k::nguaje indio americ:i.no, ~.~nivO su interés anterior en kts antigüedades iníldecu~do que contiene lodos los aspcctot desagra.dnbJes d el relativismo cul1u·
mexicanas. En 1926. empezó estudiando seriamente el azteca, en 1928. el maya. m.l. sil1 sus verdades simples. al mismo tiempo que permite a algunos in~erpret3f
Whorf em~ó una nuida correspondencia con A. M.Tor.zer de Han·ard. q uien le a Whotf como un de:1t:rmini$la lingiiill'1iCO, lo que. scguramcnt~. es mahntcrprc·
ani1nó a 1raduclr una p:l¡ina de una copia de un anti¡uo manusc:nlo. que es1aba en tarlo.
el Mtt\CO Peabody. ~to IU \'O como resultado el ensayo que le)Ó an1cs del 2J El problema subyac:tnte de \Vh orf íue c:I de e1\COntrar los a~pcclos ocuJtos de las
Congreso fntern.ack>na1 de Americanislas en 1928. y ~ue. más larde. fue publicado auegorlas lingüística~ Uno de sus ejempios ravoritO!I (:aunqor no c::itá publicado)
oomo ccRclación tliteca del período del decli\'e 101tcca•. era set\alar los dos plurales del ingl(s para hablar de difercnlcs clnscs de pescado
Al final de l928. su trabajo sobre Ja, relaciones ramiliarcs entre el tepcca_no. el ~a plural •S y e:I plural cero-. La diferencia cnlre ambos sólo se puede eneonlr>lr
piman y el azteca. había progrc$ndo basta tal punto que pidiO uníl beca de invc:sti· en el hábito cultural. Si lo comemos, llevn el plural ocro (at(n\, arenque. perta): s1 no.
gnclón del Comejo de ln\'CSligación de la Ctencia Social, para pc:rmitinc un tr:abaj o Ue'Yn el plural ..s (tiburones, vcn1osas. etc). Hay excepciones (la anguila. no estamos
más in1eoso. En los años siguientes. vis.1ó la dudad de ~1éx1co y publicó una seguro:i acerca de su plural y de su comestibiJidad). pero ta regla se suc.le mantener
ex1ensa serie de 1raba,os oonoernien1cs a los ~ro&Jificos mayas. en muchos caSO$. \Vhorf man tí~ne que debe de haber muchas de cslns «reglas
En 1931. Whoñ St inscribió en el cvrso de Edward Sapir sobre L.ingíiistica gramaticaks» que est<in ntarcadas ~¡ por la cultura. L" co.11umbtc cultural hace
Amerlcana·lndia en Vale; foe su inidación en la t1ngíiistica.. Su expcrienckt en Vale cambiar, y ;ul paret.-e que c:I ejemplo de Whorf de los dos plur.iles en ing.1és para
lt pu.w en contacto con un grupo de cs1udiosos de primera c:lasc -~4 orris Swt't· diferentes dases de J>C$Clldo es vtrdad. Cui.ndo cscnbió este articulo en 1939. no se
dc.sb, Gtorgc Trager. Carl Voeglin. ~tary tia.as y William Oy1c- y tcmptó su ool\Sideraba que Jos tiburones se pudieran co1uer. Sin embargo «el tiburón» se ha
c.nt~ia!mo por b$ teori1;1s li1\güisttcas cx1raü;1s. En 1937-1938 fue profesor de C!'tado comiendo en las !\rea¡¡ CO-Steras de California y On:gón d~e más o menos
an1ropologin en YaJc. 1970 Ha de$.aparccido la «S».
Sapir le innuyó, dándole 3nim°' para que estudiara el hopt. lcjanamente rclacto· C1enan1entc es.tamos enfrent3ndonos oon c:t hecho de que d ing.I~ no Ctenc un
nado con d azteca. U1ihnndo los m61odos in\'CSligadorcs aprendidos de Sapír, pro non1bre singular de tc:Jce,.J pcnona, sea suje10 u objc10. que no codifica por el
trabajó mucho con un 1nforman1e hopi que vavla en Nueva York. En 1935. habia se.xo: y. de hecho. el ingl é~ no ticoc un nombre común paro muchl.\l especies (pe"º·
preparado una gran1ática y dicaonario proYisionalcs.. pero ex()tpcuando un breve \ata. hombre) que no codifique por d sexo. " 'horf cstab;1 compromeudo en la
CiQUetna de 11 gra1nática hopt en UnJ{lllstlr St111c111re o/ i'Vatin• A1nl'rkl1 de Harry bU$<1ucda de t"\U" palabras para la per$0tln que o<.'Up~ la pres1dcll(...i a. . .
lioijcr y dos itrdculos tOenicos.. estas in\•estig11ciol)Cj no fueron nuncta publicad~1~ UO$ oo,_tS le sucedieron a Wborf Por' unu pane. a ~u ubnl )e 1.1 11•.tno ~tntX1cn
La aportactÓn m.ás. import3i.nte de: Whorf a la anuopologla es su tr.ibajo :JObrc la tia•. Por 01rn p:anc íuc:" mol 1n1erpretado y :e lt calificó de dttenn1n1sta. Sin
relación enln- cl lenguaje y el pcnsarnicnto. «An American lndjan Model ol 1hc embargo, dcN: rm>rda~ t¡U< \Vhorf era un hombre ingenuo J)l'rO e>.pcrlo•.firme
Univer$t)) (probablemente ncrilo en 1936.. pero no publicado hajlQ 1950) exploró pero d1sciphnado. con \JO..l t.Qla)!Jnaaon cultural <"nviJtabk. En nlle$tnl op1n1on. se
las imphcacsones: del Sl.Slema vcrbaJ hopL 1en1endo en cuen ta l<l roncepciOn hop1 del debe le~r a Whorf po1 :,.us i\kJ) ¡i()Crc.t de la 1,;ulturol, t\o runto por la lingüisttca .Y
CSp¡tcio '1 et 1.empo. Tamblen entOneés publti.--0 ¡u articulo mils conocido 4<Th<: e't-ocación como por lu.t t'C$Ultados. f'ocJ.S vtc:t:S alguien ha titerno uiut ;uuropoh>fja
Rdation$ of Habitual Thoug.h1 ::tLld Beha\'ior 10 l..'\nguage•. en 1939. 1an dcl\eiosa1nente e1ci1an t~
'"
llama «camiones vados de gasolina.. tenderi a ser dúere,n te -sin andado. con
9. La relación del pensamiento poca pnoc;iución al fumar o tir4' colillas de cl¡amlkls- . Aunqu.: los camiones
«Vtlcios• son quizá lo• más peligrosos. ya que condenen V'Jpor explosivo.. Fis:ica-
y el comportamiento mcntc. In situación es peligrosa, pero el análisjs lingüistico. de acuerdo con la
analogía regular, debe de empicar la palabra «vocio». que inevitablemente sugiere
habituales con el lenguaje* falta de peligro. La palabra •vacio• so usa en dos modelos lingüí•ticos: (1) como
un JinÓl'.limO \irtual par• «D\llO, invaJidado. nc&atÍ\O. inene•. (2) aplk:ado al
análisis de situaciones físicas san ccner en cue:nua. por ejemplo. el vapor. '°5
vestigios del liquido o los dcsec:hos dejados en el conlcnedor. Se le pone nombre
Probablemente, estar.In todos de acuerdo con q11C un modelo aoeptado del ...., a la situación en un modelo (2), y el nombtt es .ausada>t o en el (1), •cumplid.,.;
de las palab....._ es a mcml(Jo prioritario en ciertas vertientes dd pensamiento y s;icDdo cs:ra una íórmula gcncraJ para el rond1ciooamacnto Hngüisuco de la con-
formu de conducta. pero quien esta de acuerdo eon esta exposición no ve más ducta paru las situaciones pc:ligrosns.
que. por una parle, un rcconocimicn10 trivial del poder hipnót.ico de ta cermíno-. En una plan1a de d()tilo.d6n, el me1al aún se at~laba con una composid6n
lo&la filosófoca do lemas y slógana y. por otra, una unión de griros. Ver sólo esro. preparada de piedra cali:w y llamaban a la planln «piedra caliza hilada•. No se
es perder~ punto de una de las interconexiones imponantcs que Sapir vio en1rc hí1..o oingian esfuerzo paro proteger esta cobertura del calor excesivo o del contac-
d lensuaJC. la culrura y la psicología. y sudnramenre lo e>p""'ó .,, la cha ro con las llamas. Después de 5er utilizado duranle algún tiempo. el fllC&O que
introductoria (a este ensayo~ No es ranro tn esros usos espccWes del lcnaua¡e estaba debajo de uno de los alambiques. llegó hasia la «:piodn caliza». q11C, coo Ja
como en su forma constanre de orpnizar los datos y sus análisis de cada dia de sorpresa de rodos. se quemó muy rápidamente. La osposición a los vapora del
los fenómenos que n«esHamos para ruonocer la influencia que rient en otras liado a~tico. q11C 5'11ia de los alambiques. habla con•·crtido parte de I• piedra
aelivldades. culturales y personalcL c:aliza (carbonato de calcio) en acetato de calctO. Es.te. cuando .5c: caliento. por el
fuego. se descompone. ror,mando acetona inn.lmttblc. La conducta que pcrn1itió
que el fuego cstu'licra cerca de Ja oobcrtura. estuvo inducida por In u1Hiuci6n de
lo palabra «piedra calit... que por estar eompucs1a de la palabra «plcdra•.
El nombre de l a situación cuando afecta al comportamiento implica ineombu11ibilidod.
Se ,fo q"" una aran oll• de acero que eonrcnla ~hirviendo. se csraba
Obsen'é un. aspecto de C<ta situación antes de q11C estudaara bajo las órdenes del eobrec:alcn<ando, y que llepba a estar cerca de la lomperatura en que ardia. El
doelor Sapor. y en un campo usualmente considerado ajeno para la lin¡üiJ<ica. operario la quuó del rueso. rransporúndob sobtt sus ruedas. una cierta dt>tan-
Fue durante mí trabajo para una compaaia de seguros de prevención de incen- cia, pero no la cubnó. Al cabo de un m1nu10. más o mc:nos. d bami% ardió. Aqui.
dios. en et que ini~ la rarea de analizar varios cenrcnan:> de informes sobre las la influencia lingüi,.ica es más compleja; se debe• la objetivación metafórica (la
circunstancias que rodean el inicio de los Incendios. y en algunos c.'l~os, de la-' más tardía) de la f•c:ausa» como conu1c10 o a la yu1taposición espacial de las
cxplo5iones. Mi an31isis ~taba dirigido hacia las condiciones puramente nJicn,s., ~tCOSllS»: nn.aliz.ar In s:ituución «sobren en oposiei6n a <d'ucra» del ruego. En
eomo una fallida insralación clearica, la presencia o ausencia de espacios ,cntila· realidad, había pasado el momento en que el fuego exterior era el fsc1or principal:
d0$ entre los rubos mcrilicos y el enmaderado, etc. y los rcsuhados se prcocnra- cJ sobrocalcntamtcnto era ahora ua proceso 1n1cmo de convección en el barniz.
ban de esti ma.nera. Sin lupr • dudas. esto fue cscriro sin pcnur q11C olros provocado por la olla que había sido calcnrada intensamon1e. y todavia conti-
rcsuhados serian ~ _podrian ser revelados. Pero en su curso.. K hizo evidente que nuaba <$le proocso cuando estaba ofuclllJI del fuego.
no '610 una Sltuaaon rmca como tal sino el significado de esta situación para la El indicador de un calentador cléc:trioo, inJlalado sobre la pared, era usado
gente. era algunas "cc:es un íaclor. por b conducta de 111 gente. pa.ra que cmpcm· poco. y para un irabajador. adquirió el scn1ído de una buena percha. Un
rae! f~&º; Y cs:1e factor signífica.ti''º eslilba más claro cuando tenia un 1f~nffic¡,. vi¡jJantc cn1ró por la noche y observó un centelleo, que luego de1C1ib16 como
tlo llnguút.'"'· que se ~wt;>? en el nombre o en Ja dejcripci6n lingüística comun· encender una lui.•. No vío ninguna luz dcspué:s y pensó que lm bombilla .se
men1e aph~Aia ,. 1~ s11unc1on. Así, alrededor de un alnui.c~namjenlo de lo que tiC habla fundido. N o podla ver el indicador del calentador, po rque lll chaque1a
llama ~im1oncs de gnsolin!V~, tendremos un cierto tipo de conducta, es decir. 4IC estaba colgada de ~l. En seguida el culcnl.ndor encendió la chnquc1a, que
lcndni más cuidado; micntrb que alrededor de un almacenamiento de Jo que se inc:ondíó todo el cdíncio.
Agua residual sin u1íliz.ar de una curtiduria. contenía materia 11n1mal en un
bureño que estaba inJ<alado eil d csterior. CStando parcialmente ta pecio con una
madera y parcialmcnlc abierto. Esti situación se podrla •-.:rbalizar como •pozo
de aaua>t. Por casu1lidttd. un trabajador eno:ndJÓ un soplete por alli ocrca. y tiró
154 155

la cerilla en este agua. Pero Jos residuos en d(:jcomposición estaban acumulando ~varias». Pero la dificultad de apreciar tal influencia de Largo alcance es grande.
gas bajo la cubierta de múdcra, asi que La situación era la coorraria a «acuosa». por s u caractcr referencial, P?r. la dificultad de ~nntcnerse aparee de nuestro
lns1an~án~D?entc, un fulg~r ~e llamas encendió cJ enmaderado y el fuego se propio h:nguaj~ que es un habito y un non rst 1/1spu1a11du'n cultural, y poder
extendió rap1damentc al ed1fic10 oontiguo. escrutinizarlo objetjvnmentc. Y si tomnmos un lenguaje muy diferenlc. este
Se preparó una habitación para el secado de pieles, con un fueUc en un lenguaje se convierte en p'1rtc de la naturalC2a, e incluso le hacemo_s lo que !e
ex1rcmo. para que hiciera corriente de aire u lo largo de la hnbitucióo y llegara hemos hecho a Ja naturaleza. Tendemos a pensar e n nuestro propio lenguaje
hasta ~J exterior 11 través de ~n agujero que estaba en el otro extremo. El fuego para analizar un lenguaje diferente. O nos encontramos con que la tarea de
empezo desde un sopone cal.tente del fucile. que Uev6 las llamas directamcotc a desenmarañar las oomplejidades puramente morfológicas es lan grande que
las pieles Y lo extendió a través de la habitación, destruyendo todas las reservas. parece ab$orbcr a todo lo det~tis. AUn.~i. el proble~a, a pesar de I~ di~cultad.
Es(a. sir.un~?ª. peligrosa fue la consecuencia del término «f'uclfe» que tiene cquiva. se puede solucionar: y lu mCJOr soluc100 es a tra\'es de un lenguaje d1íercnte.
leneu1 hngu1s uca con «aquello que sopla», implicando que s u función necesaria· ya que para su estudio nos salimos fuera, de grado o por fuerza> de nuestra
~ente es la de soplar. También s u función está verbaJizada con10 Ja de «Soplar rutina. Ento nces nos cncontran1os con q ue el lenguaje diferente es un espejo
a1re para scatr», Stn tener en cucnra que puede s.oplar a otras cosas. por ejemplo. del nuest ro.
a las llamas y chispas. En realidad, un ruclle simple1nenle hace una eorrlenle de Mi estudio del lenguaje hopi. lo que ahora \'CO como una oportunidad paru
aire Y pued e vncittr a la vez que soplar. Debería haber sido instalado en el agujero trabajar sobre este problema, a l principio se abalanzó sobre mi antes de que
deJ. otro extremo, para expulsar el aire alrededor de las pieles. entonces por lo fuera claramente consciente del problcn1a. Lu aparcntcmc-n tc inacabable tarea
peligroso (su propiu cubierta y soporte) y después fuera. de describir la moñologia. finalmente acabó. AUn asi. era C\•idente. especial·
Al Indo de un crisol de carbón quemado que se usaba para el aprO>'CChamien· mente después de escuchar las clases de Sapir sobre el nnv(Ljo, que la descrip-
to de cables.. se descargó un montón de C(cables de deshecho» - una verbalización ción del le11guafe estaba muy lejos de ser completa. Sé. por ejemplo. la íorma·
engañosa. ya que eran hojas de cable de condensadores "iejos de radios que ción morfológica de los plurales, pero no c6n10 usarlos. Er.i c\'idente que la
todavía tenlan papeles de parafina entre ellos-. Al cabo de poco ticmi:.,, Ja categoria del plural en el hopi no era la misma q ue la del inglés. francés o
parafina se incendió y prendió ruego a l tejado, quemándose la mitad. alemán. Algunas cosas que eran plurales en estos lenguajes. eran singulares en
T ules ejemplos. que pueden mulliplicarse varias \feCCs. serán sulicicnies para el hopi. La fase de investig:_lción que empezó a par1ir de esce momento. consu·
mostra,r cómo se da a menudo eJ indicio a una cierta linea de condt1cta. por los mió casi dos años mñs.
analogaas d~ las fórmulas lingüinicas, en las que se habla de la situación, y por la El trabajo cmpcz6 :l asumir el carácter de una comparación entre e1 hopi y
que hasra cterto grado se analiza, se clasifica, y se asigna su lugar en este mundo las lenguas europeas occidentales. También se hizo evidente que. incluso la
que está «en g.ran parte construido inconsciente.m ente sobre los hábitos del gramática del hopi. estaba en relaciOn con la. cultura hopi, y la gramática de
lenguaje de grupo». Y nosotros siempre asumimos que el análisis lingjs tic-0 hecbo las lengua-$ e uropeas con nues tra propia cultura t<OCcidental~ o «curopea>t. Y
por nuestro grupo, refleja la realidad mejor de lo que lo hace. parecía que esta interrelación les trajo grandes divisiones de la experiencia
gracias al lenguaje. como lo son nuestros ti:rm¡nos «tiempo», «cspncio». ~(SUS·
tancia» )' tonatcria». Yn que co las caractcristica.s comparadas, hay poca
Modelos g ramaticales como Interpretaciones diícrcncia entre el inglés. el francés. el a.lc-m ón, u o tros lenguujcs europeos con
de la experiencia la posible (pero dudosu) c•ccpción del báltico-cslnvo y e l lenguaje no indocu·
ropto; he agrupado estas lenguas en un grupo llamado E.DE, o (ccuropeo de
dominio estándar».
EJ material lingüistico de los ejemplos anteriores está li1nitado a palabras La parte de toda la invcstigaci6n que se va a \'::xplicar aquí podri-u rC$umirse
nislad?s, ~intagmas y modelos de rango Hmitado. No se puede estudiar dicho en doo preguntas: ( 1) ¡,Se lcS da o todos los hombres nuestros propios conceptos
ma ten nl s1.n pensar que hay una íueru de mayor alcance proveniente de la gran de ({lientpo». «espacio» y «ma1eria,,, sustancialmc::ntc. de la 1nlsma forma por_h•
acala de modelos de catcgorias gramaticales. t.afcs como la pluralidad. el eitperiencia. o est<in en parte condicionados p0r la ~tructur.t de los lenguaJCS
género y <:la.sificaciones parecida$ (animado, inanimado. etc._). t iempos. v0e<s y particulares? (2) ¡,Hay afinidades trazables en1rc a} Norn1:lS culturales)' de co11·
Otra.s formas v~rbales. clasificaciones del tipo «partes del diálogo»; y el dilema, ducta y b) ~1odchlS lingUis•icos de l;1rga escala? (Yo sería el úllinlo en prc:tc?der
de st una experiencia dada es indicada por un morfema, una palabra nexionada que hay algo tan definido como "una correlación>> entre cultura y lenguaJC. Y
o una combinación sintitctica. Una c.ategoria tal como la del número (singular especialnlente entre 1:1s rUbricas etnológicas tales co1no ((<!gricullura», «c:az.a»,
1
cornp~ra~o co.n plural) es una in1erprctación intencionada de rodo tipo de e1c.. y olra~ hng:liisllcas con1<> «Tte,.ionado». «sin1ético". o uaislador.it.) Cuando
cxpencoc-1as, vi_rtualmcnte del mundo o de la naturaleza; intenta decir cómo se enl¡».."'i a estudiar el problcn1a. de ninguna manera es1aba 1.an clarJmentc íorrnu·
debe de segmentar la experiencia. a qué experiencia se le llama t.l"Unon y a cual lado y casi no lenia idea de que las respuestas pudieran surgir como lo bicieroo.
156 '*""- l.ff -
157

Plunolldad y numeración en EDE y el hopl goo lin¡übdcamente inccn1ivada de los datos ~ la ~~encia. o lo que l~a­
OIOS .iicmpo>1, d icnguaje hopi no ha establecido rungun patrón que pudaora
_..brir d hecho subjeti\o de oque sea más tarde». y que es la cscnoa dd
En nuestro icn¡ua¡e. que es EDE, la pluralidad y los números catdlnales se nanpo.
aplican de dos maneras: a los plurales n:slcs y a los imaginanos. O, más exacta-
mente. aunque DO más cooc:iso: agregados per<>cpUbles cspo1C11llmente o •CRP-
dos mcttfonc:oL Decimos «diez homb<es» y también • diez diUll. Los diez hom- Loe nombres de la cantidad física en EDE y en el hopl
bres o son o podrían ocr objetiY3mcotc perabidos como dic._ diez en un grupo de
pc;rc:cpdón 1 -diez hombres en una esquina, por ejemplo-. Pero los •diez días• Conocemos dos clases de su.stanti\·Os que denotan cosas fi~~ los sustanti.\los
oo pueden ser expcrimenl4do• objetivamente. Experimentamos sOlo un día, hoy, contables y los inron1ablcs; por ejemplo. agua. leche. granito. ~ren•. hanna,
Jos 01ro1 nueve (o incluso todos los diez) son evocados dC8dc la memoria o la ca.roe. t...os sustan1ivos contables indican cuerpos con caractcrlsucas d~fin~as:
imaginación. Si los •(diez díH» se consideran como un grupo, debe de ser con:sidt· árt>o~ palo, hombre. colina. Los sustao1i~os. incontables deno1an con~mu~~·~
rado como un grupo •(imaginario». construido por In mente. ¿De donde proviene homogénea. sin implicar los limites. La dis11n01ón se marca por lo forma. hngua.u-
este modelo mental? Como en el caso de los crrorc1 que causaro n el fuego, del ca; por ejemplo, los nombres incontables no 1ienen plural ': en ingl~ ¡n~rd~n los
hecho de que nuestro lcngunje coníuode dos situaciones d iferentes. es decir, 1icne art1culos. y en francés tienen el articulo partitivo du. lk '''· d,J, Esta d1st1nc16n es
un sólo modelo para ambal. Cuando hablamos de dar die• pasos hacia delan1e. más evidente en el lenguaje que en la aparienCl.3 externa de las cosas.. Pocos
d.icz golpes a una camp:ana. o cualquier otra secuencia ctclica descrita similar· succ:sos noturaJe:s se prcscn1an como una extensión sin limucs: el aire.. por supues-
mente. es decir. «l:M \COCS» de cualquier claJC. dtam0$ haciendo lo miimo que to, y a menudo el agua, la lluvia, la nieve, La a rena. la roca. la suciedad. el ctsped.
con •los dillSJ'. Lo <ciclioo• nos trae la respuesta de los piuraics lmaginanos. No nos cocon1r1m0j la mantequiUa, la carne. la ropa.. el acero. el cnstal o
Pero la !Cmtjanza de lo cíclico coa los •8J1'pdos. oo es1! sin lupr a dudas doda mt.Kbos «matcrialeP como hemos dicho antes. sino en rmpicntcs pcqueilos o
por una expcnencia anterior al lenguaje. o se eocontnuia en todos los icngua.JCS, grandes con fimitcs dcf1J1idos. La distanció• es1á, de al¡una manera. fonada por
1 eso DO es cieno. nueJt"' descripción de los bccbos con 1.111 modelo tnev11able del icngua¡c. Esto
Nuestra ,_w,,,.ID del tiempo y de lo dcbco conhcnc afac> inmediato ) implica tal 1ncon\ttiie:ocia en muchos casos, que: ncca1tamos 1nd1vtdualu.ar, de
subjcto•'O -d scn1ido basico de «que sea más y mb tarde• -. Pero en nues110 alguna manera. Jos nombres incontables con más tramas hngüísi.cas. E•to ya se
penumtenlo habt1ual la pie EDE. esto cs1á bajo algo bast1n1e diferente, que ha bocho con los nombres de tipos de los cuupos: palo de madera. re1al de ropa,
aunque es menlal DO podría llamarse subjeth'o. Yo lo llamo obfeti<'Odo, o am~gi· llmlna de cri11aL pa>tilla de jabón; también, • incluso mh, al 1n1roduar los
nario. porque escoge su modelo del mundo exttrior. Es10 es lo que rcllcja nuestro nombres de l<H continentes. aunque sus contenidos ¡¡c:10 lo que importa rea)~
uso hngüís1ico, Nucs1ra lengua no distingue entre contar números de candd.ades meolc: vaso de agua. taw de café, plalo de comida, bolso de harina. boiell~ de
discretas y los números Que simplemente se C$tdn o.utoc;ontando. El pensamicn10 cerveza. Estas íórmula.s de continentes usuales. en lns que la palabra t<dC* ucne
habitual entonces 111s-umc que en el úhimo cuo, los núnx:ro11 se cucnUtn partjcndo un ~i¡nificudo ob\'io vis\Utlmcnte perceptible (~contenjdos»). iníluencio nuestro
1

de la base do nl¡o, como en el primer ca.so. Es10 es la objc1ivaci6n. Los concep1os seodmicnto de las í6rmulas menos Ob\'ias de tipos de cuerpos: palo de madera.
del tiempo pierden contacto con la experiencia subjetiva de ·'~' n1ás tardt y son pedazo de n11.\sa,etc. Las íórmulas son n1uy similares: sustantivo contable más u~
objetivados como ra111idatks contad.u. especialmente como lon¡itudcs. rormadas rela1or similar (el inglés •de•t En un caso obvio. este rcl•lor deno1u los contcna·
de unidades. como una lon¡i1ud puede ser dividida eo pulgJldas. Una duración o dos. En el caso que no es obvio, sugiere los contenidos. Asl los 1roLOS. pcd~
lonsitud del tiempo puede vislumbrarse como una Kric de unidades simílare:s. bloques. piua.s. etc.. parece que contengan al¡o. •COW», -.sustancia~. ttmate~
como una hilera de bo1<llas. que ,...ponda al a¡ua. calC o harina que están en las fórmulas del con1enedor. Asi,
En el hopi uis1e una si1uación lingüística dilen:n1e. Los plurales y los eardi- para la gcnle EDE. la «Sustanci:lit y oma1criait son tambttn "!""$ &<•uanas;. se
oales se u1ílizan sólo para enlkladcs que forman o pueden formar un grupo ICICptan 1nst1ntlancamente. <SOn de scnudo comulll'. Sucede "" pot hábito lin·
objetno. No hay plurales ímagioarios. sino que los ordinales se US1n con los gíibuco. A menudo. nues1ros modelos m el icn¡ua)C nos 1laecn nombrar algo
sin¡ulan:s. Una upmión como la de «diez dias•. DO se uu. La o.-presión liiÍCo con un banomM> que d1vtdc la reíerenaa en u.n punto sin cktcrm1nar mas
equl\'&lcnte es la operacional quc llega lwta un dia. después de con1artc de una rorma.
manera adecvada. ..eJlos estuvieron dtei clias». se convierte en •cUos estuvieron El hopa ... lam~n •quL dirennlc. Tae"" una dasc de sustaOll\OS rormlll-
hasta d oncca•o día• o .ellos se rueron después del dCcimo dla• . • Diez días soa mcntc drstinta. Pero esta da.se no contiene nJnguna subcla'IC rormal de sus:lanu-
más que nue\e dia.s» .se con,·iertc en «el decimo dia es m6.s carde que cJ noveno•. vos incon1ables. Todos los sus1i"ntivos tienen un sent1do contable Y 1ambien las
Nuestra • duración del 1jcmpo• no se considera como una lon¡ilud. sino como formas san.guiar y plural. Los sustanrivos que se podriun cquiparor m~s a n~­
una relación enlre dos situaciones oon retraso. Al contrario de nuestra objetiva- tros su51nn1ivos incontables, se refieren a contcnKlos va."Oi o a eJtcnstones dch-
- 158 t. rdtd6tt del peiwww•*"*> ., ~ 1 e ..... con el~ 159

mitadas vapmc:nrc. Implican imprccui6n. pero no defecto, de trato y tam.alio. En eJ hop1, 1in cmbarao. iodos los Lérminos de rases. como el \'Crano, la
En algunas frases especificas ua¡u:.u' sig.niíi<:a una cierta mllSl'I o cantidod de mañana. etc.. no son susLa n1ivos. ~lno una clase de ;1dvcrbios. para u1i.l ltar 13
agua. ~ro no es lo que llamamos «lo 1us1ancia agua•. El sentido general de una analosia m:ls similar al EDE. Por si <0los. son una f)Jlrtc formal del di>cu"'°·
(rase ''tenc.exprc:sado por el verbo o el predicado. no por el sustantivo. Ya que dlstintos de los nombres. '""bos. e incluso de otros «ad•erbtOS» hopi. Tal palabra
bl s~.stanlJ\·os son contables. no ¡e 1nd1vidualizan na por el tipo de los materia. 00 es una rorma de un caso o modelo locatho. como «des Abend,,. o •por la
les n1 !'O! 10$ nombres de 10$ contenedores, si no hay alguna .,..,,.idad ..pccuir rnañaña•. No conttene oing:Un morfema como •en la casa,. o •eo el árbol• •.
de enfalWlr el tamafto o el contenedor. El mismo nombre impli<:a un tipo de Significa •cu.ando es por la mataana• o •mientras la rase de la ma.~ana esta
material o un con1cncdor adecuado. Se dioe, no • un 'aso de agua». sino oc ti un sucedtendo>t. E5tos «temporales» no se usan como SUJCIO!l u objetos. o de n1nauna
agua». no «un estanque de agua» sino a'. no «un plato de hañoa de mulv. sino manera,, como sus1on1ivos. No dt.-cimos •(este es un verano caluroso» o ~el vcrnno
~ «una (cantidad) de harina de mnlw, no .cun trozo de ca.roe» sino « «una no lo es»; el verano no es caluroso. el \ttrano es .sólo nu1ndo las cond1cion~ son
carne>'. _El lenguaje nunca lo ha necesitado ni h:i tenido a nalogía$ sobre la.J que aJurosas. cuandlJ h:wc calor. No decimos MSI~ verano);, sino (tahora en "'crano,.
~nstr~1r el concepto de la cxistenaa como una duttlidad de un punto y forma 0 «en d verano antcrlon.. No e,&Ste ninguna objdivmón, como en una rea>ón.
1mprec1sos. Se enírcn1a con 1a 1mprttuióo a tra"-és de otros símbolos q11e no una mcnsJÓn. una cantidad. dd sentimiento de la duración subjetiva. ad.a se
son nombres. sugjcrc acer<:a del tt<.mpo. excepto el perpetuo •que s<a más tarde>t. As1 quo no
hay ninguna ba~e para formar un punto impreaso que conteste a nuestro
.aiempo».
Las fase.s de los ciclos en EDE y el hopl

T~rminos taJes como "'rraoo.. in..-icmo. ~pttcmbre. mal\ana.. atardecer. puesta de


Formas temporales de los verbos
!IOf. sen pan nosotJO$ nombres ) t1Cncn poca dikn:nda formal linguisua con
otros nombres. Pueden ser wjctos u objetos. y dcamos ...,. la puesta de sel o en EDE y en el hopl
ttcn1t ''c:rano. como decimos en una esquina o en un huerto'. Es:tin pfuraJu.adOJ y
numera.dos como nombres de ObJCtOS Osic.os. como hemos observado. Nuestra El sisten1a de tres 1iempos verbales de Jos verbos EDE. matiz.a todo nuestro
manera de J)Cln.sor uccrcu de los rcícrcn1es de tales palabras. aqui esta objctivodo. pcru.amicnto acerca del tiempo. i:... . tc si:stcnH1 cstú a1no.l¡umado con ese esquema
Sin la objctlvaclón. serla una experiencia subjcciva del tiempo real por ejemplo, mis amplio de objetivación de la experiencia de duración subjc1iva. ya ob>Cr>oda
de la consciencia de «que sea mis y m<i• lllrde» -s1mplcmcn1< una fase ddia en otr0$ modc:los en fa !órmul.l binomial aplicable a IO< SW1tantiv0$ en general
similat a oua anterior en esa duración de que Siempre sea mas tank-, Sólo en J3 ea los su.stanti>O$ temporales. en I• pluralidad y la numeraaóo-. Esta objctl\l·
imagioocióa puede tal fase dclica ser fl'ICSta una al lado de la otra como una ción nos permite tiponcr unidades temporales en un.a htlcra• en la im.aginaaon.
configuración espacial (por ejemplo. percibida vi•ualmcnte~ Pero tal es el poder La imag1MC1Ón del tiempo como una hilera annoni1a con el sastcma de ttti
de la analogía hn¡ül<t i<:a. que obJetivamo• lo progresión cidica. Lo hacemo.> tiempos ,erbak:s: aunque el Slstcma de 1lo1. uno antcnor y otro po~tcnor. pareo:
incluso aJ decir tCUO'I Íase~ y <dilSCS» Cll \!CZ de, por ejemplo, '«progtt.!llÓJU>. Y el corresponder mejor ~t cómo se cxpcruncnta cJ sentimiento de dur;.lCión. Ya que s1
1nodelo de I~ su~tan11vos conlab~ e incontabks. con In fórmula bioomu1I ini;-pecdonam04' la consciencia. no enconu·amos: ni pa'ado, n1 presente. n1 ruturo.
resuhantc de un punto impreciso m~' la íorma. es tan 1Cnerul qur está 1mr1tcuo Slno una unidad que conUev• complcJ1dad. Todo ..tA en la conscieneta. Y todo <'l
en todos 104> SW)tantoO\. y de aquí nunrros puntos imprm'°' mu) ~r.alizad<x en b ooruamaa, y esta junto Hay <n ella algo !Cfl•UJI y algo no·~n\u31
como .csuStaoaa•. •1T1a1erw.. con k>s que podemos llenar los binomios con una Podernos llamar a lo sc:nsu:al lo que \-Cmos. ounos. 1ocam0i.- el •p~ntc•.
e'(tcnst<>n enormemente ampba de 1us1an11,·os. Pero trkJuso estos no est.1n lo m1en1ras que a lo no-.scnsua~ se le ''ª :1 llamar al vas10 mundo de la memon.1. •el
suficicntemcn1c acntralizados para incluir nuestros .!IU)lan11"0~ que dCSC'nbt:n la pasado•. y ni otro reino de la creencia. intuición e 1nccr11dumbre. «el ru1.uro>t;
ra~ Así. para lo~ ~US-tllnli\'OS que describen la fa.M:. hc1nos hecho un punto aunque la scn&nción. la memoria. I" previsión, 1oJo C1t{1JUOlO en la con,.c1cncia
imp~~f.O, «el 1H:mpo1) Lo hemos hcchu 411 usar «un 1ic:1npo1t, por ejemplo. tll'•' uno no es «lodavía serb ni 01ro • una vez, pero nunQ más» . Don.de el
ocas1on o una faJe. í.:On el modelo de un -sustanti"o 1nct>nt.abk. como h.1~mo) Je hemr-o r~I v m l!l lrri:.1i'7tti, M. 'Iº" 1n.:tn ""'" HI U. cnn{o(i~nci:t ..e WQrroll.1 más
.. un 'c-1ano•, •"cr.&no•, con el mudelo de un ll.u.;t•nli"o 1ncontabk AtiJ. Cl)O tan:lcit, cambiando acrta.s rclaooM:S de una rroncra 1rre\crsibie. En este •hace~
nues1ra fórmula b1n<-m1,al podan°' dcc.:1r v pensar •un momerno en d ocmrc,... m.U tard0t o •duración•. me p.irccc que hay un con1ra11c muy tmportante entre
fl(Un .ioqundo en el ttiempo..t. «Un ai\o <'n cl oempoJt. Se ckbe <tt ..eñalar n1t.1 \i!/ el mas reciente. el ultimo instanlc del rocus de alcoaon y el resto lo antcnor
que el módelo es umplemcote aquel de 1•u1u bo1ell.i de leche• o "º" 1rp10 dr Los dos lcn~uajcs que se están Obset\>ündo se dcs;i.rrollnn bien con las rorm.~~ de
queso» A~1. ~10 ayudu u imaginar Que "'un "crono~ \>t•tdn<ltn:1nlC:n1e ront1cnt n los dos tiempos verbales. rc:i.pond1c1,do {t. cstn n:lttc16n 11uporu1nce de po!lcnor n
co1nicne l~ll y cual cantidad de •Ucn1pu,.., anterior. Podemos. por supuCllO. t't»1struir ) cu1111•n1p/11r "" ti fH'"sal""'"'º un
160 161

sistema del pasado, presente. futuro. en la configuración objetivada de unos girar. coger. a prox.iniar. ir. volver. subir. cuc.r, parar. suave, uniforme. rápida,
puntos sobre una linea. Esto es lo que la tcndc.ocia general de objetivación nos leo1a. y así hasta hacer una lista casi inagotable de rneLáJoras. que nosotros casi
Ueva a hacer y Jo que nuestro sis.tema de tiempo verbal, coofirma. no reconocemos como tales. ya que son virtualmente los únicos medios ling\iís1j.
En inglés, el tiempo verbal presente parroc el que está menos en armonía con c:os accesibles. ~ 1Crminos no metafóricos de este campo. como temprano.
la relación temporal más importante. Como si estuviera presionado por deberes tarde. pronto. duradero, intenso. mucho. tendcote. son en realidad uo puñado.
variados y no del todo congruentes. Uno de sus deberes es el de pcnnancccr bastante inadecuado. para las necesidades.
como termino medio objetivado entre el pasado objetiva do y el futuro objetiva· Queda daro cómo esta condición ((SC adapta». Forma parte de todo nuestro
do, en la narraci6n, la discusión. el argumento, la 16gica. la filoso6a. Otro es el de esquema de ob}ttlvación -cspacialiuir con la imaginación cualidades y potencia-
denotar la inclusión en el eampo sensual: lo veo. Otto es el nómico. por ejemplo. les que son no-espaciales (hasta lo q~ cualquiera de los sentidos espacialmente
frases~ válidas aoosturnbradamcntc o generalmente: «Venios con nuestros ojos». perceptivos pueda indicarnos}-. El signir.cado de Jos sustantivos (para nosotros).
Estos usos variados. conUc\•an eonfusiones de pensamiento de las que. en su procede desde de cuerpos fisicos hasta de referentes de otro tipo. Ya que los
mayoria. somos inconscientes. cuerpos fisioos y sus perfiles t n ti espacio. se indican con los tCrminos de tamai\o
El hopi. como podríamos esperar. tambien es diferente en este aspecto. Los y fo rma y se calculan por I~ números cardinales y plurales. e.st~ modelos de
verbos no tienen «tiempos)) como los nuestro~ sino que tienen formas de validez denotación y cálculo se extienden hasta los simbol~ de significados no espaciales
(..scrcione.,,). aspectos. y formas de unión de cláusulas (modos1 que producen y para sugerir un espacio inraginorlo. Las formas lisiC'JS se mueven. se paran. se
incluso una mayor precisión en el discurso. Las fonnas de validez denotan que el levantan. se hunden, se a proximan, etc., en el espacio pe,rcibtdo: ¿,por qué no lo
hablante (no el sujeto1 cuenta la situaci6n (respondiendo a nuestro pasado y hacen estos otros referentes en su espacio imaginario? Es10 ha Llegado hasta tan
presente) o que espera que suceda (resp<>ndicndo a nueslro futuro) '. o hace una lejos, que casi no nos podemos referir a la más simple situación no espacial sin el
Of'dci6n nómica (res.p<>ndicndo a nuestro presente nómico~ .t.os aspec.t.os denotan recurso const¡lnte de las me1ciforas fisicas. Yo «cojo» el «hilo» del argumento de
grados diferentes de duración y diferentes tipos de 1endencias ((durante la dura· otra persona. pero si su «nivel» está «sobre mi cabeza», mi a tención puede
ción». Así, todavia no hemos apuntado nada para indicar si un suceso ocurre «vugar» y «perder el contacto>t con su «significado)), asl que cuando el «llega» a
antes o después que otro cuando ambos se tuen1un. Pero no hay necesidad de este «punto». diferimos «ampliamente>>~ nuestr"ds «miras» están sin lugar a dudas
hacer esto hasta que le.nemos dos verb~ p<>r ejemplo. dos cláusuJas. En ese caso, «tao lejanas,,? que Las «cosas» que él dice "lparecen» •<mucho» más arbitrarias, o
los <<lllodos» denotan las relaciones que hay entre las cláusulas, incluyendo las incluso ¡unu «to ta~> tontcri11!
relaciones de después o antes y de simultaneidad. Asi, hay muchas palabras La ausencia de tal metáfora en el discurso hopi es impresionante. La utiliza·
independientes que expresan relaciones similareSt suplementando los modos y los ci6n de tCrrninos espaciales cuando no hay ningún espacio envuelto no aparee~
ílSpectos. Los deberes de nuestro sistema de tres rie1npos verbales y su «tiempo» o/li -como si sobre él se hubiera puesto el tabú completo-. La razón de esto
tripartitot lineal y objetivado, están distribuidos catre \'arias categorías verbales, está c_lara cuando ubcmos que el hopi tiene abundantes fonnas eonjugacionalcs
todas diferentes de nuestros tiempos verbales; y no hay más bases para un tiempo y léxicas de expresar duración. intensidad y tendencia, d irectamente como to.Jcs, )'
objetivado en Jos verbos bopi que lo puede haber en otros modelos hopi: aunque que Jos modelos grama1icales más importantes no. como nos sucede a nosotros,
esto no entorpece en lo roUs minimo las formas de los verbos y tampoco otros ~s dan analogías para un espacio imaginario. Los «aspectos.» de muohos verbos
modelos.. de estar muy ajustados a las realidades pertinentes de las situaciones expresan duración y Lendencia de manifestaciones.. mientras que algunas de las
concretas. «VOCCS» expresan intensidad. tendencia y duración de las causas o fuerzas que
producen las manifestaciones. Asi. una parte especial del discurso. los «tensores»,
una amplia clase de palabras. denota s61o intensidad. tendencia, duración Y
Duración, Intensidad y t endencia secuencia. La función de los tensores es la de expresar intensidades. tsfi1~r¡cs. Y
cómo continúan o varían. su 1n1ensidad de cambio; así que el amplio concepto de
en EDE y en el hopl íntensidad, cuando se considera como que necesariamente varia y/o continúa.
incluye 1ambiCn tendencia y duración. Los tensores expresan distinciones de
Para adaptar e,I discurso a las diferentes situaciones concretas. todos los lenJlUQies grado. proporción. constancia. repetición. increnlento y disminución de la intensi-
necesitan expresar hi$ duraciones. intensidades y tendencias. Es carac-teristico de dad, secuencia ínmcdiata., in1ern1pción o secuencia después de un in1ervalo. ecc.~
EDE Y quizá de muchos tipos de lenguaje. el expresarlos metafóricamente. Las también «las coalidade») de los esfuerzos, como las que expresariamos metafóñ-
metf1Joras son fas de extensión espacial; por ejemplo, de tamaño. número (plurali· camente como $uave. uniforme, duro. áspero. Una de sus carac:tcristicas sorprtn·
dad}, posición. fonna y movimien10. Expresamos la duración con larga, cona. dentes, es su falla de 5Cmejan2.3Con los términos de espacio real y movimiento.
grande. mucha. rápida~ lenta, etc.; la intensidad con gran.de, enorme. mucha. que para nosotros «significan lo misnlO». No hay mas que un indicio de la
intensa. ligera, lenta, marcada, vaga. etc.; la tendencia con m::\1, elevar. crecer. aparente derivación de Jos: tCrminos espaci31esª. Asi que, mien1ras el hopi en sus
162 Bcnja.mln Lee Wbotf 163

sustandvos parece n1uy concreto. en los tensores $C oonvier1e en abstracto. inclu- Característica s del comportamiento habitual
so más a llá de lo que podemos entender.
en la cu ltura hopl

Pensamiento habltual en EDE y en el hopi Observamos q ue nue.\tro comportamiento. como el de los ho~i•. e.stlÍ coordinado
de muchas maneras con el microcosmos lingüísticamente cond.aonado. Como se
La comparación q ue se va a hacer entre los mundos del pcnsrimicnto h11bi1ual de ve en mi Jibro de notas acerca de los ca.sos de incendios. In gente actúa en las
los hablantes EDE y bopi cs. por supuesto, incompleta. Sólo es posible ob>ervar situaciones de la misma manera q ue hablan sobre ellas. Una caracteris1ica de
ciertos contrastes dontinances que parecen destacar de las diferencias lingüísticas Jos hopi es su énfasis eo la prepal"c1Ci6n. Esto. incluye et anunciar y .e slar
ya notadas. Por ((pensamiento habitual>> y t<mundo del pcnsamicnt0.>> quiero preparado para los acontecimientos antes de ucmpo. elabo~ar. ~~auc1ones
decir n1ás que lenguaje simplement~ por ejcmpJo. que los mismos modelos para asegurar la persistencia de las condicione$ deseadas. e 1nc1s1on .sobre la
língüistieos. Incluyo todos los valores analógicos y sugestivos de los modelos buena volun1ad. como preparadora de los buenos resultados. Cons1dere1nos
(por ejemplo. nuestro ~espacio imaginariO>t y sus implicaciones de distancia) y sólo las an.aloglas del sistema de contar los dias. El tiempO se calculn princi·
todo el ir y venir entre el lenguaje y la cultura como un todo, que es una gran palmen1e «por dla» (~. - tala) o «por noche» (tok~ c~yas palabras no son
cantidad q ue, :.tuoquc no es lingüística. nos muestra Ja in.Ouencia delimitadora sustanli\•os. sino tensores. la primera formada sobre la ra.1z ({luz. dia». la segun·
del lenguaje. En n:su1nen. es1e «mundo del pensamicntO;t es el microcosmos que da sobre la raiz •tdormir». Se cuentan con orlli11a/tJ'. Esu: no es el modelo que se
cada hombre lleva consigo, con el que míde }' entiende lo q ue puede del usa para contar un número de hombres o cosas direrentcs. a unque aparez.c-.un
macrocosmos. sucesivamente, porque incluso entonces se podrian agrupar en un bloque. Este
El microcosmos del EDE ha analizado 1;i realidad eincnsamen1e en términos es el modelo que se ut·iliza para contar las reapariciones sucesivas del 1tti.t111tJ
que llama «cosas» (cuerpos y casi~uerp0s~ más 'los modos de la existencia hombre o cosa. incapaces de formar un bloque. La analogía no es la .de
CXlCnSÍOnal, pero QUC nO tie nen Íorma. que llama ~sustancias).> O t<materÍa». oompor1arse con la ciclicidad de los días como con varios ho1nbres (((varios
Tiende a ver la existencia a tl"'dvés de una fórmu la binomial que expresa cualquier días»~ que~ Jo que tenemos tendencia :l hacer, sino en comportarse como con
existente como una íorma espacial. m:is una cantidad imprecisa. espacial rclacio· las visitas succsi\•llS del n1is1110 hou1br~. No se cambian varios hombres para
nada con Ja rorma. como eJ contenido esta relacionado con los contornos de su trabajar sólo con uno. sino se puede preparar y así allerar las ú.himas visitas del
contenedor. Los existenles nc.><spaciales esl3n espacializados en la imaginación, y mismo hombre. intentando a he rar la visita que hace a hora. As1 se enfrentan los
contienen implicaciones similares de forma y cantidad. hopi con el futuro - trabajando con una situación pre~n~e. que~ es~ra que
El microcos-mos hopi parece haber analizado la realidad extensamen1e en tenga consecuencias. obvia.s y ocuhus, para. un ~contCClm1ento de 1nr~res fu!u -
cérminos de los acontecimientos (o mejor f<de lo que acontece»). coo1ado de dos ro--. Se debería decir que In sociedad hop1 enuende nuestro proverbio: «Bien
maneras, objetiva y subjetiva. Objetivamente, y sólo si se percibe expcrienc1u empezado es 1nedio hecho», pero no: ((~iañana será otro dia.». Esto podría
fisica. los ac-0ntccimientos están expresados en su mayoría como contornos.. explicar mucho del carácter hopi. , , . ..
colores. movimientoi, y o tros hechos perceptibles. Subjeti vamente. para la ex- Esl.a conducu.t de preparación de Jos bopi. podr1a ser mas o menos d1v1d1da en
periencia lisic:i. y no fisica. los acontccimienlos están considerados como la a nunciar. la preparación exlerior, In prc-paración interior. la particip:ición en~·
expresión de Jos ractori.."S de intensidad invisibles, de los que depende su C$1abili.. biena y Ja persl~tcncia. Anunciar, o lo publici~ad prc~rativa. es un~ f~noon
d11d y persistencia. o su fugacidad y dca1dcocia. Implica que Jos existentes no impor•ante que está en las manos de un oíicu.11 CSJ>CClal. el ~e.re C~ll.on. Ln
«Se hacen cada vez mñs tardcit de la 1nisma manera: sino que a lgunos lo hacen preparación exterior es una preparación que conllevn mucha acu,·1dad ~1s1ble, no
al crecer, como las plantas. algunos a l difundirse y desvanecerse. algunos por un toda nece:s.aria y d irectamente í.uil. según nuestro entendirniento. Esto 1ncl~ye lú
proceso de metamorfosis. algunos al permanecer de una forma hasta que se \•en práctica normal, ensayar. estar preparado. Las íormalidades intr~ductonas. el
aíectados por fuerzns repctinas. En la naturaleza de cada exis tente que es capaz preparar comidas especiales, etc. (todo esto hasta uo gtado que podna parecemos
de n1anifestarsc como un iodo definido, está el poder de su propio modo de muy elaborado). actividad muscular con1inua. e intensiva. como correr, hacer
dur:'lción: su crecimiento. declive, estabilidad, c:-icHcidad, o c-rc•Uividn.d. Todo \:aITTras. b;.iílar. que: K ie1·«:; que incrcmen1a la intensidad d4'1 dcsarr<>Uo dr los
está así. ya <<preparado» por ras.es anteriores para que sea de la manera en que sucesos (como el desarrollo de las cosechas). la mimética y olr!:L~ magias. pre.para·
se manifiesta ahora. y para lo que será n1ás 1arde. de que en parie ya ha sido. y clones basadas en la teoría csolCrica. que: incluye quizá inslruJncntos ocull?s.
en parte está ahora siendo ((preparado». Un énfasis e importancia rec"Jen en como bastones. plumas y comida sagradas. y íinalmen1e. las g.randes o:remon1as
esta. prcpar.sción o en el aspee-to de es1ar preparado del mundo que correspon ~ y bailes dclicos que tie.nen el signilicado de preparar la lluvia Y las coscc?a.s· De
dcrla par.1 los hopi a aquella «cualidad de la realidad» que «la materia» o uno de los verbos que significa «preparar». se deriva el nombre de «s1cgtu> Y
«CO!la» tiene para noso1ros. <(cosecha•: n1l'1wani «·el preparado)> <> el «en preparació n.»".
UM 165

La preparación Interior se utiliza para rezar y pua la meditación. y con ocsperar amablemente.. El poder del pensamiento es la fuerza que cstA detrás de
menos inrensidad, para los buenos deseos y la buena intención. para unos las cercmoniaJ, loo palos aagrados. el fumar ritual etc. La pipa sairada se
resultados deseados a mAs largo alc~nce. Las acthudcs de los hopi enfali:tan el con.sidera como una ayuda. para <~oonetnt rarsc» (asi me lo dijo mi iníormador).
poder del deseo y el pensamiento. Con su «ntic:rocosrnOS». es muy natural que Su oombre, na'twanpi, significa «instrumen10 de preparación*.
lo hagan. El deseo y el pensamiento son los primeros. y asl el más importa nte. el La participación encubierta, es la oola boración mental de la ¡¡ente que no
mAs critico y crucial del período de preparación. Más aún. para los hop1, los 1oma parte en el suocso conc-rc10. ya sea un 1rabajo, ca.u. carrera o ceremonia,,
de<cos y pensamientos de cada uoo, inll..,ncian no sólo sus propias acaoncs. pero que dirigen tus pensamiento y bue:na voluntad hacia el éJÍIO del suceso.
seno toda la naturaku. Esro es también complctamaue natural La consdcn· Los anu.ncios buscan a menudo tener d sopone de los ayudantes mentales. así
aa.. por si misma. es consacnte del 1raba)o. del sen1imie1no de esfuerzo y como de los participantes c.1tcriora, y conucnen c.1honacioncs d1n1Klas a la
energla. en el deseo y en el pensamiento. La experiencia. mas bisica que el acntc para que ayuden con su buena voluntad 10• Una s.imiJi1ud «>n nuestros
lenguaje. nos dice que si se esparce energía, se producen erectos. Tendemos a conceptos de una audieocia ravoroble o la sección anim3doro del íütbol, no
creer que nuestros cuerpos pueden parar estn cncrgia. prevenir que nícctc n dcbcria oscurecer el hecho de que no es principalmente la simpat1u o el dar
01r1s cosas hasta que llevemos nuestros cuerpos hacia la acción exterior. Pero á nimos lo que se espera de los participanlC! encubiertos. E.n efocto, es1os:
cs10 sOlo ocurre p0rque nosotros tenemos nuei.1ra propia base lingüíst ica para últimos entran en su más absoluto trabajo antes, ¡no durance el juc¡ol Una
una teoría en la que los puntos imprecisos como •materia.• . son cosas por si consecuencia del poder del pensamiento es el poder del pensamiento malo para
aolas. maleable! sólo por COA• similar<$, por más matena. y así aisladas de los la maldad; ya que un propósito de la parllcipación cncu~na es obtener la
poderes de I• vida y del pensamiento. No es mh an11n11ural pensar que los mayor ru.crza de muchos con buena voluntad para evitar r.l pcns.am1en10
pensamientos lo contactan todo y se e.xtiendm por el universo. que pcns.ar. a.sí dañino de Jos que de~an el mal. Tales actitudes. favorecen mucho la coopera·
como hacer~ que la luz enccodida fuera lo hace~ Y no es antinat·ural suponer ci6n y el espiritu comunicarlo. No que.remos decir que Ja comu.nid11d hopi no
que el pensamiento, como cualquier otr3 fuerzn. dCJU por todas panes rastros esté llena de rivalidades e intereses encontrados. En contra de 111 rcndcnc111 a la
de cícc:to. Ahora, cuando pcn.s.a.mos en un rosal concreto, no suponemos que dcsin1cg.ración social en es te grupo pcqueflo y a islado. Ja tcorla de t(prcp:arar·
nuestro pcns.amic1110 vn hasla e.se rosal concreto. y se une con CI, como un se» con el poder del pensamiento. lógicamente da paso a l gran poder del
rcnector que cslá sobre 61. (,Con qué suponemos que nuestra consciencia está pensamiento combinado. intensificado y armonizado de la comunidud por
Ira bajando cuando pensamos en ese rosal? Probablemente, pensamos que cs18 entero: esto ayuda mucho para el elevado irado de cooperación que. a pesar
trabajando con una «1ma.ac-n mental», que no es el rosal. sino un s:u11itu10 de las disputas pnv1das. la ciudad hopi transmite en todas las act1\'1dadcs
mental de este. Pero. ¿por qut seria natural pensar que nuestro pen.um1eoto cu 11 u rales.
tr•baja con un sustituto y no con d rosal real? PO$iblcmcn~ porque somos lo Las acti<idades •de preparación• de los hop>. nos muestran de n""vo el
sufíc1cntementc conscientes de que tenemos todo un espacio imaginario en resultado de sus antecedentes del pensamiento lingüístico en e1 énfasis sobre la
nosotros. lleno de sustilutos mentaJes. Para nosotros. los sustitutos menta.le~ pcrsi$tcncia y Ja repetición insistentemcn1c constante. El sentido del valor acu-
$0n unos viajeros familiurcs. Junto con las imá genes del espacio imaginario. mulado de innumerables pcqucilos momcnto.s está entorpecido por un punto de
que qui•á sepamos secre1amcn1e que sólo son lma¡inarias, metemos el pcns•· vista objetivado. espacioliudo. como lo es el nuestro, exalcado por una manera
miento del concreto y existente rosal. que podria ser otra cosa. quid. sólo de pensar muy cercana a la consciencia subjetiva de la duración del 1nago1ablc
porque tenemos es1e ttlua.ar• muy con,·cn1cnte para CI. El mundo del pcnu· t(l.Cr más tarde• de los succJOs. Para notolros. para quienes el uempo es un
mtento bopi no tiene espaao imaginario. La consccumc11 a esto es que no se movimienlo en un espacio. la repetición invanable parece perder su fucru con
puede localizar el pens1m1ento ocupado en el espaao reaJ. e:o níngün lugar una serie de unidades de ese espacio. y desg¡as1anc. Para los hopo, para los que
excepto en d espacio real. n1 aislar el espacio real de los e rectos del pen.sa· d ticrnpo no es un mo-..imicnlo. sino un 4<Ser cada. '\CZ mis tarde» de todo to que
m1co10. Un hopi supondria naturalmente que su pensamiento (o ti mismo). h~ sido hecho. Ja ~pc1icióo invariable no se des¡as1n, sino q"" se acumula. Se
está trabajando con el verdadero rosal -o mejor. con la planta del ma1l- va acumulando una carga invisible que recae sobre acontecimientos más tar-
con la que él está pcnsnndo. El pensamiento entonces deberla dejar alguna díos' 1. Como hemos visto. es algo asi co1no ¡i el rc1omo del dia, se sin1iera
huella en la planea. en el campo. Si es un buen pen1amlcn10. :1Ct"n.:a IJ ~ h1 ~a lud c:on10 •I volviera In mismo pcrsoná. un poco mA11 mayor, ~rn con todas h1$
y el crccimico101 es bueno para la planta; si es un pensamiento malo. lo impresiones de ayer. no como ~las de un nuevo di~. por ejonplo. como una
contrario. persona completamente d1íerente. Este principio. unido con el del poder del
El bopí enfatiza el foctor mlenSificador dd pensamiento. El pcn¡amienlo, pensamiento y con )0$ an1ecq)en1es de la cuhura general Pueblo. esté expresa·
pa,. ser mis eíccthro. deberla es.tac vivo en la comctcnc:ia. dcfmid0-. fiJO., sosten .. do en la tooria de la danu ce~monial hopi para propioiar la lluvia Y las
do. carpdo con buenas intenciones. futttm1tntc: xn1Kbt.. lnrcrpretan la Idea en cosechas. así como sUJ pasos conos. como p.11oncs.. repctidM cicn10J de "eccs..
inglés como .oonccntranC>t, ~tenerlo en 1u corazón.-, tq>Oner tu mcnle en ello». hora tras hora.
166 167

Algunas impresiones del hábito Ungüístlco dudas. ha ayudado con nuestro trato lingú11ttc0 del ucmpo. ya que el trato
en la clvlllzadón occidental linaüistico ha a:u1ado tas utiliiac1ones de la cscntura. A tra\is de este dar y ooger
entre el lenguaje y toda la cultura tenemos. por ejemplo;:
t. Regístros. diarios. lcneduria de libros. contabilidad, las mntcmó.ticas esti·
Es muy di_fici~ ~accr justicia con pocas palabra.t a las carac1erist.ic11 lin,güisti·
muladas por la contabilidad.
e.amente cond!°onadas de nucs1ra propia ouhura, que lo es en d auo dcJ hopi. 2. lntcrC:s en scc::ucnaa.s exactas. rochas. calendarios. crono1ogia. rclOJCS. saJa.
por d •asio ambt10 de ambos y la dificuhad de la objetividad -por nUCilro rios. gráficas del licmpo. el tiempo que se ut~iza en la fisica.
fam1handad profundamente arraigada con bs aaiu.ldcs que van a ser anaJ&a. 3. Anales. hiSIC)(1as. w actitud his1órica. <I 1n1crés en el pas:ado. arqucolopa.
das- ~en~e '!_~-.ero esquematizar cienas características adapcadu a nua1ro a<1ilud., de 1n1royección con los periodo. dd pasado. pO< •JCmplo. d
b1nom1aJ1smo h.ngu!~ltCO de íorma. mi.s un punto impreciso 0 «:sustanau. 1
clasicismo. el romanticismo.
nuestra mecafonzaaon., nues1ro espacio imog,nar10. y nuestro tiempo objetivado.
Estos, como hemos obscr,•ado. son lingüísticos. A.si como concebimos nuestro tiempo objetivado. como extendiéndose en el
L.os. puntos de visu1 lilosóficos trodicionaln1entc más c.araetcristioos del .:inun- futuro como se extiende en el pasado, asi establc<..'Cmos nuestra..~ cstim11doncs
do ooc1dental», han dado un gran ªt">Yº a Ja dicotomia forma má.s sustancia. ;obre el ru1uro de lo misma ronna que nuesiros recuerdos del pasado. creando
Aqu1 pertenece eJ materialismo. el paralelismo psico-.fisico. la física - por lo programas. horarios. presupUCSIOS. La i¡ualdad íormal de las unidades •imllarcs
menos ro su forma 1radict0naJ ncwaoniana- y los puntos de vi5:11 duaUsta.s deJ al espado con las que medimos y conccbimoii el espacio. nos llc\B a considerar
unn('f"SO en gcoc"!1 Sin lugar• dudu. a.qui pcncnccc casi todo Jo que es e<Sedltdo «Ci puDIO impreas<>» O «la ~ustaoci&», homo¡énca )'CD proporción con el nUmc-
comun seguro. praallCC)». Los puntos de v.s1a de la tta.lidad monistico. hoh~ttcO. ro de unidadci. Una ,..,, hecha nuenra colocaaón propon:ionalm<nlc del •llk>r
) relau'o ª!raen a los filósoros ,Y a algunos científicos.. pero est.áo en d~vcnt&J3 en el t1crnpo. esto Uc'a a construir Ulld. estructura comcrclal basada en Yalot'Cl de
paru recurnr. aJ •.§(nudo comun• del hombre medio occidental. Esto no es tiempo proporáonalmcntc: s:alanos (el UcmpO de trabajo supera con~antcmcntc
porque la m1sm~ nu1umlcia les rechaza (si lo hubiera hecho, los filclsoíO'< lo al de la pieza~ renta. crild110, interés. cara<>'< de depreciación y primas de 1<»
hub1cr~n descub1cr10). •lno porque se les debe hablar como si se 1ra1ara de un seguros. Sin lugur a dud~s.. C'SlC gran sis1ema. una \'Cl construido. podria conti·
Jcngua1c ouc,·o. «El scnddo común». oomo su nombre nos indica. y «la ract1bill· nuar funcionando bajo cualquH!r tipo de cratumlcnto lingüístico del ticrnpo: el
dad•. como su nombre no indica. son en gran panc ma1erias de diáJoso. para que hecho de haberse cons1ruido. alcanzando la mag1111ud y forma parlleular qu•
uno pueda ser entendido Algunas ''CCCS. se da por sentado que d «paC>O tiene en el mundo ocadcntal. está dtcididamcncc en consonancia con k>' modelos
~tonta.no. el tiempo y la matcna. Jos notan iodos 1ntu1t1\'3menlc. con Jo cual se d• los lenguajes EDI:. Si una a"11i2ación como ta nuestra fuese pO>lbk con una
ala a ~ rc•d~d como mUCitra de cómo los anlllis,. maicmallCOS pocdcn probar cst1uccura del tJC.mpo muy dtkn:ntc.. oons111u)C un planteamiento cltcn.w -<n
,uc: la. 1n1ute1on ts ral~ btot aparte de no hacer JUSIK:ia con Ja inru.ct6n. Cj un nuestra civilización. nuestros modelos hngu1suco~ ) la adecuación de nuestra
1n1cn10 de "':'pondera uno prcgunla improv1Sada (1) que ya se ci1ó al pnncipio coMucta al ore.len temporal son lo que son. y actuian en c<>nsonanc1a. Por
d.e este trabajo. que era el rt5ponder al porqu~ de esto investigación. La presentaª supuesto. cs1amos cstintulados a usar calcndurios, rclojCS, e in1entar medir el
c16n de las respuestas nos acerca al finaJ. y creo que. Ja respuesta está clara. La 1lempo cada \ e.t con nu\s precisión: este ayuda a la e.encía. y la ciencia. u lliU vCL.
pnn1cra ~pues1a, en la que te nx:aía Ja culpa a la intuición. por nuestra lentitud siguiendo estas bien aprendidas rutinas, le devuelve 11 La cultura una imparable
en dcscubnr los m1stenos del cosmos. 1.alcs como la relatividad, es-taba cqui\roca• provisión de aplicaciones. hábi1os. y valores.. con los que la cuhura de nue"o
da La respucs1a cornaa era: el csp;K:io newton&ano, el ltempo y la m:itma no dmJC ta aenc:ta. Pero••qué hay fuera de c'3 cspiral1 La ciencia cs1á •mpczando a
son 1n1u1ooncs. ~ reabon de la cultum y el lcn1u•JC- Oc ahí los cogió Nc,.1on. descubrir que hO) alao en d cosmo. que no csi.i de ª"""rdo con tos conceptos
~uestro punto de YISla objch~O del tiempo CS. Sin embargo. (avontblc a b que: DOS hemos Íonnado al organiz.ar la ~ptntl . Ütá intcnl4ndo COMINlf V.O
~1stor1C1d~d Y a 1od? Jo conectado.°'?º guardar rcJ!Jtros. micntr.is d pun10 de lm.gua,Je 1'tweo con ti que: adapcarsc a un unl\Cl"$0 ma)or.
1stia hop1 es con1runo u cs10. Este uJumo es demasiado sutil complcJO y s1cn1prc: Está claro cómo d énía.s1:s sobre el •ahorrar ucmpo». que cnlaz..a con codo lo
en de5Urrollo. nu~ca da ninguno mpuesta ya prepara.da a la pregunla de cu{1ndo '1nter1or y es una objc:tivac16n muy Ob\ria del 11cmpo. nos Uc\';l J un.l gran
•t11n» !li:llflt'~ fi:°alwt y •01ro» empieza. Cu.ando O..'llA implit ilo que todo lo que hri vn1orac16n de In «veloc:ld11d~. Jo que se obscrvn en grJu íonnn en nuc)tro oom·
pnsado. loda,1a P:rmoncce. pero que es1á en una fonna diícrentc de to que la portamicnlo.
mcmona o el ttgJslro nos dK:C. hay mcno!I. incentivo para cs1udiar el pa33do. Otro efecto del comportan1icnlO es el caraacr de monotonía y rcg:ul11rid;id que
R.,pcao al ~ole. d •n«nli•o podria ser no <I rc1is1rarlo. sillo 1ro1arlo como atá en nuestra 1map del 11empo como una anta sin limjte cscaldda untforme-
tren prcpar8CIOO». Pero nw11ro tiempo obJc:ll~'O pone an1e la imag.jnactón 1110 rncntc, 110S persuade a comportamos como ss ta monotonía atu,iera más prc:scntc
como una ania o rollo de papel marcado con .,paaos en blanco i¡uaks. que c:n los acontecimten1m de lo que está. Es dcctr. 1) udot a hacer de la utilinaooo una
su¡Jctc:n que cada uno debe de marcarse con un rc-¡a)tto. La escritura. sin fulJr a Ntlna. Tendemos a ~lecaonar > fa,orectt lo que confirma esce punto de '1Jta. a
, .. ~u.- 169

«.ldulant los a+pectot nuinarios de la c1istencia. Una do las ra.es de esto, es el wmo nos demuestra el hopl. La upcnenaa no espacial tiene un sentido bien
hecho de que la woducl4 dcmue<u-e UJ1 falso sentido de seguridad o la supos1C16n :Sanizado, el o/do - ya que el olfato y el austo estén poco organizadot-. 1..a
de que tod~ irá siempre bien. ~ una falta de prcvi1ión del futuro y de protegernos naciencia 00 cspac.ial a un campo roayorhariumcnle del pcnsamicnlo. ~nb·
de los pchgros. Nucstru 1Ccn1cn para aprovechar la encrgia accüa bien en el :cnto y !tonido. La consciencia espacial es un cumpo de la lu.z, el color. la \1Lsi6n
funclonumien10 rutinario, y es junto con las líncus rutinarias que oos esforzamos y el tacto y prescnrn formas y dimensiones. Nuestro sístema metafórico. al
en m~jorarlo -cstamot, por ejemplo, relativamente desinteresad<>$ en que la nombrar experiencias no espaciales después de L's espaciales. atribu)e a loo
energ13 se. pare para que no cause más accidentes, ruecas y explosiones. lo que -idos. olott0, g11st.ns. emociones y pensamientos. cualtdades como el color,
esté sucethe~ consl4ntemcnte y a gntA escala- . Tal indiferencia a lo ine$pora. lununosidadcs. íon:na.. ingulOS. tUlW1U y mov1mítntOS de U~ CSl)'1aal.
do de la vÑla. serla un desastre para una socícd.td tan pcqudla. aulada y y huta cierto alcance. sucede la uanskn:naa conuana: dcspucs de mudlo
pm:anamcnte preparada, como es la sociedad hopi. o mú bien. una ,.,. lo fue. hablar de los tonos como alto. bajo. brusco. tosco. pesado. bnllante. lento. el
Ali. nuestro mundo del pensamiento lin¡üiscicamcntc determinado, no sólo hablonte encuentra íócil pensar en algunos factores de la cxpcncncia espacial
colabora con nuestros idolos e ideales. sino que enlaza nuestras reaccK>nes in· wmo fac.tores de tono. A•l, hablamos de «tonosio de color, un gris «monótono»,
oonsdentcs persona~ en sus modelos )' le da ciertas caractcri.sticas tipicas. Tal una corbata «escandulostH>, un «gusto» en el vestir. 1odas metáforas espaciales al
cosa, como hemos visto. es el descuido. como en la conducción sin culckulo o el revés. Ahora, el arte europeo se distingue por la manera en que busca jugar con la
tirar colillas de cigarrillos en la 1)'1pekra. Otra cosa de diferente tipo es el harrr ti,nestcsia de.libcradamcntc. La música in1cnta sugerir cscenas. color. mov1mtento.
gmDI cuando hablamos. 111 uchos de los cestos que hacen los ansJoparlantcs, por diseño geométrico: la pintura y la escultura cst!n a menudo ~uiad~ ooruc1CD1e·
lo m<D<>I. y probablemente tocios los hablantes EDE. sirven para ilustrar, COft un lllCftte por las analogías del ntmo de la mú.,a; los colores estan oon¡untados COft
movimiento cu el espaao. no una r<fercncia espacial rcaL sino una de las refemi. d senúmicnto para la analogia wn las conoordanaas y las disoordanaas. El
ciu no espaciales que nuestro lenguaje maneja con las metáforas o el espacio teatro europeo y la ópera buscan la sintcsa de muchas anes. Puede ser que de
imaginario. Es decir, estamos mlls capacitado. para hacer un gesto como el de esta manera nuestro tcnguajc metafórico. que es en cierta manera una eonfustOn
coger algo cuando hablumos de coger una idea evasiva, que cuando hablamos de del pensamiento; esté produciendo, a tr.1vé5 del nrtc. u~ resultado de ~nlor ~
coger un pomo de una puerta. El gesto buscn hacer una referencia m.etuíóricn y larao alean~ un sentido cslétjoo intenso que \ID hacia "?ª aprchcti."16n mas
qu1.t.á confusa. más clarJ. Ptro si el lenguaje ae refiere a lo no espacial. sin directa de la unidad subyacente que cstú dc1n\s del fenomcno narrado Hln
implicar una aoaJoaPa espacial. no se hace la. referencia más clara con un galo. variadamcntc por los canales de nuestros sentidos.
Lot hopi gesticulan muy poco, quizá en absoluto. en lo que 0050tros cntcndtmos
por un gesto.
PaRCe como 51 la anc:s1esaa. o la sensación dd mo' imicoro muscular. aunque Implicaciones hlatórlcu
haya aparecido antes que d lenguaje, deberla hacc'1C mio wnscicnte por el uso
línaühti<x> del espacio ímaglnario y las imágenes mclaíóricas del movimiento. La ¿Cómo aparece históricamente tal red de lcn¡uaje. cuhura y conducta? /,Qué
qulll(:llesia esta marcada por dos facetas de lu cuhura europea: el arte y el apareció primero. los modelos de lengua,ie o 1., normas culturales? En ¡¡eneral.
depone. La e..;cultura europea. un arte en el que Europa sobres.ale. es in1ensn- han crecido juntas. inOuench\ndosc una a la otru constantemente. Pero en esta
mcn1e quincslética, compor1ando un gran sentido de los movimientos del cuerpo. asociación. la naturale1.J1 del lenguaje es el factor que limita la libre plastk:idad Y
lo mismo sucede con la pintura europea.. EJ baUc en nuestra cultura expresa los canales riaidos del desarrollo, de la mancr.1 mJb autocratica. Esto es porque
deld1e en cJ movimiento más que simbolismo o a:remonial. y nuc.stra mú~ eni un lcng11aje es un sistema. no sólo una reuníón de normas. tu grandes noo~ncs
muy influenciada por las ronnu de nuestro ba.ile. Nuesiros deportes esrin muy mléma.s pueden cambiar a algo realmente nuc\o sók> muy lentamen1c. mten-
empopados con el demento de «la poesía del mo>inuento•. tu camm y ¡ucJOS tm que otras inno•aaones culturales se bacm COft rdah~ rapidu. . Asl el
hopi parecen enfatizar mio las virtudes de la permanencia y de la intensidad lmg118jc rcprcscnl4 la mente de la masa: esti arectado por los mvcntos e 1nno•a·
prolongada. El baile hopi es muy simbólico y SIC desarrolla con gran intensidad y cioncs. pero p0e0 afectado. y lentamen1c. mientras que para los 1nvcntorc~ e
form1lidad, pero no 1icnc mucho movimiento u osc1laci6n. innovadores. se legisla con el decreto má.s próximo. .
Ln sinestesia. o la sugestión por las recepciones en cier10 sentido de caractc· F.I crecimiento rt~I t'.nmrlejo de lenguaje )' cultura en EDE. dato. desde tttm·
~ucas que pcrtet)ect:n a otro sentido. como la lu.z y el color por los sonidos y pos remotos.. La grun panc de su refcrcocl::I mctaf6rica de lo no cspac~al a lo
vteeversa, se haría mis consciente con un ~stema hn¡üistico metafórico que ac espacial. apa.rcáa yo. en laJ lcn¡uu antiguas. y m.\s npc:Clalrnenre en el Jaun. Esta
rcíte:rc a .las c.xpcñcnaa.J no espaciales con témunos uulizados para las c:spxiak's. es una caractcrbtica 1ipica. del latín: si lo comparamos. p0ngamos con el het>Ro.
aunque mdudabkmcnte erro le llega desde una fuente mú proCuoda. Probable- obsen·all'IO$ que micntntt el hebreo ha.ce alguna alusión del no cspaac> eomo
mente. al principio, la mctiíora proviene de la sinestesia y oo al oontrano. espacio. el b1in hace mas. L05 ténninos laonos para los no .espa~ks. como
aunque la mctafora no necesita estar fi.rmemencc enraizada en el modelo hngüisu- t'ÓllC'o, r~ligio, prút('1p11J. rompr~ndo, son normalmente refettna;tS fis.cas mctar~
170 ~Leo- 171

nzad.is; c:onduc:ido. at.ado, etc. &to no sucede con codos los knaua..,its - no de analizar y contar la e•pcricoeia que se ha con.-M.ido en reja en el kng~je.
sucalc: m el hopt. El hecho de que en d latin. la d1ra:ci6n de la C\olución como •W modas en el lenguaje• inte¡radas, y que ~ a .un ~ las clasiíica-
aconteció dcadc lo csp>ci¡al hacia lo no espacial (en pene por la cstimulación cioocs ¡ramaticalcs tlpicas. así que una «modv pu«Je inclut~ el lhico, la morfo·
tnd1TCCta al pcns:amic:nto abstracto. al cooootrane los rom.anos 1ntdcctualmtnte losia. la untaxis. y también significados muy di\'CrtOS. coorduiados en una cspo.
inmaduros, frente a la cultura griegai y que 1a$ lenguas postenorcs cslaban muy cie de estructura de conformidad. Nucstr0 propio •tJempo• d10ere marcadamente
c:s:timuladu para im11ar el latín. parece una razón lógica para una creenaa que de la «duración• hopi. Se concibe como un ..paáo de duncnsiones e.trictammte
1od3via es mantenida por los lingüistas.. que esta es la direcaón natural dd timitada.s, o algunas veces como un movimiento sobre el espacio y utilizado como
cambio scmánuco en todos los lenguajes. y por la creencia que permanece en una hcmmw:nta intelectual. en consecuencia. «La duracibn:it hopi parece !ICr
todos los clrculoa cultos occidentales (conirastando mucho con los oricniales). ¡pconocbib~ en 1énninos de espacio o movimicnlo, siendo el modo en el que la
que la c.xpericnci1 objc1iva es anterior a La subjcti\a. Las filosoflas aportan vida difiere de la forma. y la consciencia en su tolalidad, de los elementos
muchas pruc~a.s de lo contrario. y cicrtamen1e. la dirección de la evolución ..pacialcs de la consciencia. Ciertas ideas que han nacido de nuestro propio
demuestro lo con1raño. Asi, la palabra hopi para «cor.azón)t. puede demostrarse concepto de t iempo, IRI como la do la absolu~a simulla~cidod. P?'l~a ~r también
que fue uon ror1noci6n tardía del hopi que provcnia de una ralz que ¡lgniíicaba muy difteiJ o imposible de expresar, y cstano desprov111.a de s1¡n1ficado•. con la
pcmar o recordar. O consideremo• lo que le ha pasado a la palabra «radio•, en concepción hopi, y podría ser reemplazada por l~s conceptos operacionales.
una frase como «El compró una radio nueva». comp;arándola con su significado Nuestro «materia.• es el subtipo l'isico de la ~smtancJa» o •ccosa». que se contibe
primjtho de «ciencia de tclcíonia sin hilOS». oomo el punto imprccíso e-xteosionaJ que se debe unjr con la rorma antes de que
En la [dad Media. los modelos ya íormados por el latin. cmpcz:iron a te cree la uistcncia real En el hopi, parece que no hay nada que corresponda a
t:nlrceruz:urac con el crec~nte: desarrollo mecánico. la 1odustna. d comercio y el esto: oo hay puntos imprecisos c.xreruionales; la ui.s1cnaa puede o no tener
pensam1Ct1to cscol:lstico ) acntiíico. La necesidad de norm>< en la ind1mn:i y el
comcn:io. las tícndu y la masa de «<>bjelOSJo en oont.-lorcs •·onados. los tipos
ronna. pero lo que tiene. con o sin '°"""-..
u tensionalcs. lo que es en el rondo lo mismo.
intensidad y duración. que son no

de r<apicntcs en k» que se pus>eron los d1íerentes ob)CtOS. d cst1ncbrizar ... Pero. ¡qu~ hay de nuestro cotMXplO de -~·. que ta~bién estaba incluí:
vnidadcs de medida ) p<so. la 1n•cnción de los rdojes y d control del • tícmpo•: do en nuestra primera preiunta? No hay una difctmcia tan c•identc entre el hopi
d manten1micnto de los registros, contabilidades. aónicaJ. h1Stonas; el dc:surollo y d EOE. acerca del espacio. como la hay acerca del !ícmpo, y probablement~ la
de las m>tctnitieas y la colaboraaón de las materrníticas y la ~ocia. todo •PfChcnsióo del espacio te da sustancialmente de la mu~ rorm• con la e•~nen­
cooperó a tnc1m1nar n~1ro mundo del pens.am1enro y el lenguaje. a sv rorma cia que no 1ícnc en consideración al lengua)C. Los upcnmcntos de los psicologos
presente. de la Gestalt con la peroepci6n visual. parecen establecer esto como un ~bo.
En la hi~lonn hopi, como podemos leer. cncontraríwnos una clase diíercn1c Pero el ronrtpto M tspoclo variará algo en el tenauajc. porque como herramienta
de knguajc y un COnJun10 de •nflucncias culturales y ambicntatcs que 1rabajan in1ek:c1uul 1 2, csrá tan unído con el empico concomitante de otru herram~nlas
j untas. Una sociedad agricoln tranquila. aislada por •us carac1crls1icas gco¡ráfi· inlclectuales. del tipo de «lícmpo» y •materia>>, que e!tén condicion•das lingüisli·
cas y sus enemigos nómadas. en uno lf.crra de lluvia escasa. una agricultura árido camcntc. Vemos cosas con los ojos con las mismas formas cs~acinlcs que los
que sólo podrla tener éxito con la más árdua perseverancia (de aqul el valor de la hopi, pero nuoma ide-J del espacio tiene tambíé~ la propi~nd de actuar como ~·
pcrs1stcncia y la rcpe11ci6n~ la necesidad para la colaboración (de nqul el enfosis sustituto de las rormas no esp.•ciales, como el tiempo, la tntensidad. la 1cndcncia,
en I• psícologio del trabajo en equipo y en los factores mentales en aeneral~ el y romo un vacio que ha de llenarse con puntos ima¡.inarios imprecisos. uno d~
maíz y la Uuv1a como cntcrios prlmarios de valor. la necesidad de pr,purari<H1t's ellos podria llamarse incluso ... paáo•. El espucio como sentido para los hop•.
árd""" y precauciones pura asecurnr las cosechas en el suelo pobre y el dima podría no estar concc11do mentalmente con tales sLUlitutos. pero podria ser
prcca.no. la coooenzuda comprensión de Ja depcndcna.a dt la na1uralcza. favorc· c:ompnraüvamcnte «puro». no estar mezc::lado con ooaones t:JUnthas..
ci<ndo el rao ) uno actitud religiosa hacia las fuerias de la naturalta. .. peaal- Acerca de nucstni tegunda pnogunta: Hay conuioncs, pero no corre~ o
mcote los rezos ) la religión dmgidos hacia la Siempre nc«:s1tada bendiacin de la correspondencias de diagnósti<o entre las normas culturales y los '!'*los
bn-
Du,,ia a1os í•ct0tts actúan reciproc:amenrt con Jos modelos hn:au1sucos hop güistioos. Aunque íueta imposible inferir la existencia de los Jefes Chillones de la
,._,.. moldearlos. pi'fil. 5Cf moklc.11d0$ por clkh t.k nuc'v y asl. poco a poco. darle ausencia de tiempos verbales en d bop1. o VK>CVtt5a, hay una reladOn enm: d
forma al punto de "SI• del mundo hopi. lenguaje y el resto de la cultura de la sociedad que lo utiliza. Hay CIU05 en que las
Rcsum.c:Ddo cJ probkma. se contesta así a nuestra pnmen pn:gun1a: los «modas del lcnauajc• e.stán muy integrad.u en la cuhur. cn1~ra en ~nttal. sea o
~no:ptos de •tiempo• y «:ma1ena» no aparecen de la misma rorma en la upe· no b;ta uni,crsalmcnte la ver<bd...y hay coocxioocs en cs11 integración. entre la
ncnaa. de todos los hombrtS, sino que dependen de la naturaJca del lenguaje o ctax de análisis língüjst.icos empleados y las dikrcnlCJ reacciones condu~tas. Y
leogua,JC.s. Por cuyo uso se han desarrollado. No dependen 1anto ik urt ·"""'"ª tambitn con las formas tomadas por varios desarrollos cuhuralcs. Asi, la .1mp0r·
(por cjcmpJo. 1Jc1npo \'trbal. o sus1an1ivos) en la gramática como en laJ maneras taoeia de los Jefes Chillones tiene una ooocxi6n,. no con hi ausencia de ue:mpos
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hacer u,n botqucjo ck cuán diilll\'O es d mis1érlo dd tJCmpo real. y wln a:rt.&mJ..
verbales. sino con un SÍltcma de pcruamicnto en d que lu dikttrlles aitegoriu mente 0 c'prcsado pc:H° una rclte1ón lineal de pa~do-prctento-íuhlf'O.
de nuestros liempos verbalcl 10n naturalcs.. Estas conexiones se 1icncn que '"'Cf no 8. Tal vcsti1io ~ que el tensor 111de l.:.rga duración• , 1ic:ndo basu.ntc: diferente del
sólo al enfocar la a tenci6n en las rubricas tipicas de la lingillstica, la etnoarafia o adjetivo «ara~ rercndo al espaao~ p:uuc co•ucner la miam:i raiz que el iadjdi•o
la d~ripcióo sociológn sino tarob~ aJ <Alminar la cultura y el len¡ua¡e . . . , - rdcndo al - Otro es que - aJ¡ún lup"' cid e s - . ....io ...,
(siempre y cuando las dos hayan estado ¡untas hisl6ricamcnte durante un tiempo acrtos temores. """nea -::11 algun taempo 1ndd'irudo•. Po¡:1~tc. 11n embar¡o.
a>nsidcra.ble), como un todo~ d que las concatenaciones que cruzan estas lineas este no es el caso, 'I tol1mente es el ten.sor d qut nos da el clemento dd ttempo; •.d
deparce.men1alcs, podriam0$ esperar que existieran. y si existen. ser dcscubierta.'l que: «co 1ll¡ún lugar•, toda\•ia te" re.íic:rc al C1Jpat..io y que. bujo e:«a~ condiciones. el
aJ¡unas \'eCCS mediante c:I estudio. cspliCio indd'inido JM¡rufa :tpltcaa6n gcnerkl. simplemc:nlc Jin kner en c:uall d
tiempo o c<pO<IO Otro .....;¡.. rs que. en lo ttmponil tpolabta cidica~ ... 1&nle», d
demento que s.gnif.ca ~ardett mi dtnvado del \'C'fbo QtparaD. Hay Ofl'OI vta..igiot
parecid05. pc:(O son pocos y excepcionales y obviamente oo son como nucrtro
mctaforiDr n:kñdo al espacio.
9. Los verbal hopi de p«pa.racióo oatural no conc:spotMkn COftlpkumtntc con nlCS·
tro cpreparant. a.si que ru'twani podria también ser praentado como d<>brc lo que
l. Tenemos muchas cvidc:naas de que are no ad cuo. Comider1re:m0t ll>lo el hopi y ae praccica,., •do que • in1enta_,. y asi.
~• utc, junios con lcoguajeJ: que. en el nnoel maniOc110 morfológico y lé.lico, son tan 10. Véase. por ejemplo, llo111 on H"pl f "<'tNromk' Uf'· de Emc1t Bc:-gk.bole (publieacio«ltl
Ntnilatts ro1no.. digamos. el inglés y el alemiA. La tdea de ..-orrdaa6n- entre d de la Un.,CT..iad de Yak .. Antropolop.. núm. 1S, 1937~ a¡xculmmte b rácrca·
1<..,..jc y b cuhura. .,, d ,..tido ..-.i-ie OO<¡>Uldo ele corrdaciOft. a ama- caa al anunao de una caoaia de c:ont:)Otrt. y en la pigan1 JO. ll dnc:npaón de 1111
mnue crrbneo actividades en c:oncAión con la lln1p1e.ta de Torcva Spnna -anunciiiindolo, v.aooc
2. Como dcdmcx. •die1; a 11 misma 1'C.":», nos mucssra que en nuestro knauaaje y prtparundo i.c1jvid11dC!I y linalmcntc. pr~p:uando la contlnuld.1.d de los buenos rcs:ul·
pcnsa.mjcnto st vueh·--e a repetir el hecho de i... pct~pc:ióa. del grupo del concq.Xo de tados ya obttnida&. 1 ti aDuit continuo de la prtm.J.vca
"1.te:mpo.it. d pn componcn1c bngill1oco que apareec en d C'uno dt a1c: trab¡.jo. t I Elu .--00 ele alma«11ar poder, q11< por= unpi.cada poc gran pan e d< la ooodua.
l. No es una ooqx:iócl a.-. rqla de lo ausenaa d< la forma piure~ que •• oomb« hops. tttne un-a anatop t:n 11 fi1ica. la acdcn1aón Orebt dCCll"IC que k» antecalcn&cl
ulCOntablc pueda algunu vcocs coincld1r en d kllema con un nombre tndivKlt.J.21, que lingüisocos de las c:os:as del hopl. lo equiparan a rt<X>noccr n:uurtln1en1e que l~•
por t upUC$10 tiene plumt «picdrv (sin pluraJ) con t<una piedra,. (pL pk<tras). La íuet'la .te man1fteSta no como mo't1mliento o velocidad. »ino como una acumulaaón
lonna plural qYC dmo1a va.riedades. por ejemplo. •Yi1'IOS». a por supuesto un.s daw ck la :acc:knaón. Nuc::HrM antececktUcs lln1uiiltOOiS timdcn a obs.tacuJanumos el
d1ltttnte de la cid pl...J ...-dldeto: CS UI raultado curioso ele loo nombm lftCOl>t.. mismo roooaocimtcnto.. por haber oonoc::bido kcitimámcntc que la fue-n.a es b que
bles EDE. dando puo tod.a~a a otra ctuc de agregado U'l'lagi.oariu, que se debe produce el cambio: c111onccs pcn.M1n1os en el cambio con nucs1ro aná.10&0 lingüi5000
omitir de C1IC trabajo. ,,wtafórko. el mo'f-im1cn10, en vez de eo un concepto sin movi.m.ieruo ni cambio. por
/11()10 ik Ja ttudueroru· Se csli h.abb.ndo de ejcmpJos m ln¡lts. que por •upuc:sto. ótmplo. la acu.mulaaón o aodcncii>a. Asi. ato Btp a nue11ro dcsptc\~ido tcalJ~
no siempre bcnC'8 cquivaknoa con ~ cjempk)s en Hpai\ol No obstante, he prden· mtento como un stK>ct al obten" ar Por los c:a:pcnmcnlOI Íl!IOOs q\K no es po11b'e
do tnid\ICÍrloa. IJ'ltcs que dejarlos en tu fonnJ onpnal. definir la íl.lcrza por el mo\Ím1Cnto, que el mo,imtento y la '"Cload.ad. 1si c:oino
4. El hoi:M httlc dos palabna1 pa.ro. las cantidades 6e .a,gua: l:.e-yi y pa-hc. La difertntta también +:citftr en dcsc1nso•. son oon1pleta1nentc relativos. 'I que la ruen..1 puede sólo
que hay e:ntrc ambas ca 11 que hay entre •:picdrtJt y fU'OCQ)lj en incJCs. pa-he imphc:a "' medida por b occleniaón.
un 1amaik> artnde y -.safVJp; d ftu1r dd ¡¡gua. 1t11 o no fuera o en la mtunkn. d 12. Aquí pmtntte d apcaao •nttrrtoniano. y ~. etc.
pa-lle. asl a •humedad• P<ro. al contrario ele «p<dru 1 ""'""" ta difcttncia es
no pertenece a un margen connotativo y las dos pucdtn ter pocas \-OC'C!
'"9tnci.al;
intercambiablc1.
S. Sc¡ura.mrntc h•y pocu difi:rcocia.s mlnimas con otros S'*-'lanuvos, en tn~ por
ejemplo. en la ub!izaciOo d< loo anlculoo.
6.. «Ab y oe:nas oombuuie:iones de .._~con el nombre de un1 cstaaón. r1ramen1c
!Jl61o nombRS de ffiaaoncs; pueden aparecer con el morfema locativo «11», pero C$IO
es etoepcioo1I. Aparece como un detrito de un modelo anterior dik«nte. o C.00')0 d
~O de .. aAÜC>pa 11\¡k.M. O <Oruú 4Hlbu.
7. Lu ascraona c.x:poct.i\a 1 rcpon.i"* cont:ra.sta.n de ~o con la «rtl1iCJón m:it
Importante•. t.. expecti\'I expresa la anticipacl6n existente tmrt1 del hecho objc:li\O,
Ycoincide oon el hecho objetivo dapués que el t tatus quo del hablante. este status
quo. ind\lyc todas las catci.o"u dtl ~do. que se apman por el ttpOttivo.
Nuestra nod6n 4'uturo- p1n:ce rcpramtar a 11 \ a lo anterior (antJa~) y lo
posterior (dc$pub. kt que IUCCde:rii como nos mue1,-. el hop. Eaca par11doja podri1

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