Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
En 1821 escribió El sistema industrial (Du système industriel), y en 1825 su libro más
importante, Nuevo cristianismo (Nouveau Christianisme). Arruinado por segunda vez,
intentó suicidarse de un pistoletazo, pero falló el tiro y perdió un ojo. Ayudado por uno de
sus discípulos, Henri de Saint-Simon planificó la creación de un nuevo periódico, Le
Producteur, pero falleció antes de su aparición.
A su parecer, el primer objetivo político del Estado tenía que ser el desarrollo de la
producción, por lo que su gobierno debía estar constituido por industriales de toda índole,
obreros, campesinos y propietarios. Además, propuso que los científicos ocuparan el lugar
de los clérigos en el orden social; la función de la religión sería guiar a las clases más bajas
de la sociedad en su lucha para mejorar sus condiciones de vida. También proclamaba la
abolición de los derechos hereditarios y la formación de una asociación cuya función fuera
impedir la guerra.
Augusto Comte
Karl Marx
Karl Marx procedía de una familia judía de clase media; su padre era
un abogado convertido recientemente al luteranismo. Estudió en las
universidades de Bonn, Berlín y Jena, doctorándose en filosofía por
esta última en 1841. Desde esa época el pensamiento de Marx quedaría asentado sobre la
dialéctica de Hegel, si bien sustituyó el idealismo hegeliano por una concepción
materialista, según la cual las fuerzas económicas constituyen la infraestructura subyacente
que determina, en última instancia, fenómenos «superestructurales» como el orden social,
político y cultural.
En 1843 se casó con Jenny von Westphalen, cuyo padre inició a Marx en el interés por las
doctrinas racionalistas de la Revolución francesa y por los primeros pensadores socialistas.
Convertido en un demócrata radical, Marx trabajó algún tiempo como profesor y periodista;
pero sus ideas políticas le obligaron a dejar Alemania e instalarse en París (1843).
Por entonces estableció una duradera amistad con Friedrich Engels, que se plasmaría en la
estrecha colaboración intelectual y política de ambos. Fue expulsado de Francia en 1845 y
se refugió en Bruselas; por fin, tras una breve estancia en Colonia para apoyar las
tendencias radicales presentes en la Revolución alemana de 1848, pasó a llevar una vida
más estable en Londres, en donde desarrolló desde 1849 la mayor parte de su obra escrita.
Su dedicación a la causa del socialismo le hizo sufrir grandes dificultades materiales,
superadas gracias a la ayuda económica de Engels.
Marx partió de la crítica a los socialistas anteriores, a los que calificó de «utópicos», si bien
tomó de ellos muchos elementos de su pensamiento (particularmente, de autores como
Saint-Simon, Robert Owen o Charles Fourier). Tales pensadores se habían limitado a
imaginar cómo podría ser la sociedad perfecta del futuro y a esperar que su implantación
resultara del convencimiento general y del ejemplo de unas pocas comunidades modélicas.
Por el contrario, Marx y Engels pretendían hacer un «socialismo científico», basado en la
crítica sistemática del orden establecido y el descubrimiento de las leyes objetivas que
conducirían a su superación; la fuerza de la revolución (y no el convencimiento pacífico ni
las reformas graduales) sería la forma de acabar con la civilización burguesa. En 1848, a
petición de una liga revolucionaria clandestina formada por emigrantes alemanes, Marx y
Engels plasmaron tales ideas en el Manifiesto Comunista, un panfleto de retórica
incendiaria situado en el contexto de las revoluciones europeas de 1848.
Herbert Spencer
Situado entre el metodismo de su madre y las simpatías de su padre hacia los cuáqueros, se
manifestó independiente; y así, permaneció ajeno a vínculos políticos y profesionales, y ni
tan sólo quiso doblegarse al del matrimonio. Llegó incluso a considerar la cultura como
posible limitación de la libertad; a causa de ello no leyó mucho, ni siquiera textos
filosóficos (no parece haber conocido muy profundamente a Kant). No por esto era
misántropo, antes al contrario: amó la conversación, frecuentó las tertulias y el teatro y tuvo
muchos amigos, entre los cuales figuraron John Stuart Mill, Thomas Henry Huxley, John
Tyndall y George Eliot.
Émile Durkheim
Desde Alemania envió a diversas revistas francesas algunos artículos sobre filosofía y
ciencias positivas; gracias a estas colaboraciones fue nombrado profesor encargado de la
asignatura de ciencia social y pedagogía de la Universidad de Burdeos (1887). En 1896 se
le otorgó la cátedra de filosofía social y fundó la revista L'année sociologique. En 1902 fue
nombrado profesor de la cátedra de ciencias de la educación de la Universidad de París,
donde ejercería la docencia hasta su fallecimiento. En el ámbito de sus investigaciones,
Durkheim pasó de un interés inicial por la pedagogía a una mayor amplitud de miras que lo
llevó al campo de la sociología, por aquel entonces en sus comienzos tras la primera
formulación positivista de Augusto Comte. El primer trabajo importante de Émile
Durkheim fue su tesis doctoral, Sobre la división del trabajo social (1893). Tras examinar la
excesiva especialización y deshumanización del trabajo, tendencia en progresión
ascendente desde la Revolución Industrial, Durkheim subrayaba en este estudio los graves
riesgos que tal evolución suponía para el bienestar y el interés común de la sociedad.
Dos años después publicó su obra fundamental, Las reglas del método sociológico (1895),
que constituye un verdadero breviario de sociología; en ella acotó Durkheim el campo de la
nueva ciencia y propuso la metodología que había de seguir. El objeto de estudio de la
sociología no puede ser una suma de individuos (pues en la misma configuración del
individuo intervienen fuerzas sociales que operan sobre él), sino el fenómeno o hecho
social, una de cuyas principales características es precisamente la coerción que ejerce sobre
el individuo. El hecho social es, además, exterior al indiviudo (existe antes de su
nacimiento) y producto de una colectividad. Las "representaciones colectivas" y las
estructuras de la sociedad imponen al individuo las normas de pensamiento, las reglas de
conducta, el canon de una existencia normal, y también sus aspiraciones más elevadas, sin
que todo ello excluya cierto margen de autonomía del individuo en el ámbito de la
colectividad.
Para Durkheim, el fenómeno religioso conlleva siempre una tajante división de la realidad
en dos ámbitos: lo sagrado y lo profano. El conjunto de todas las cosas reales o ideales
pertenece a una de estas dos esferas, las cuales, a su vez, se excluyen radicalmente. Pese a
la rígida separación establecida entre lo sagrado y lo profano, el mismo Durkheim reconoce
que esta distancia no puede ser tan grande que impida toda comunicación entre las dos
esferas, puesto que lo sagrado no serviría de nada si no pudiera entrar en relación con lo
profano.
Georg Simmel
Vilfredo Pareto
Sus esfuerzos por analizar la vida política prescindiendo de las apariencias ideológicas para
profundizar en la realidad descarnada de la lucha por el poder hacen que se le considere,
junto con Gaetano Mosca, uno de los iniciadores de la «ciencia política»; en todo caso, su
análisis refleja una nostalgia por el mundo liberal europeo en crisis frente a los avances de
la política de masas. En sus escritos criticó y ridiculizó las ideas de progreso, democracia,
igualdad y socialismo, poniendo en primer plano el componente de fuerza y de engaño que
existe en la historia de la humanidad.
Max Weber
Weber propuso el método de los tipos ideales, categorías subjetivas que describen la
intencionalidad de los agentes sociales mediante casos extremos, puros y exentos de
ambigüedad, aunque tales casos no se hayan dado nunca en la realidad; de este modo
estableció los fundamentos del método de trabajo de la sociología moderna (y de todas las
ciencias sociales), a base de construir modelos teóricos que centraban el análisis y la
discusión sobre conceptos rigurosos. El primer fruto de la aplicación de este método fue La
ética protestante y el espíritu del capitalismo (1905). Trabajando sobre los tipos ideales del
«burgués», la «ética protestante» y el «capitalismo industrial», Weber estudió la moral que
proponían algunas sectas calvinistas de los siglos XVI y XVII para mostrar que la reforma
protestante habría creado, en algunos países occidentales, una cultura social más favorable
al desarrollo económico capitalista que la predominante en los países católicos.
Junto a Robert King Merton, Talcott Parsons fue el más influyente representante del
funcionalismo sociológico. Encuadrado inicialmente dentro de la teoría de la acción social,
adoptó el funcionalismo desarrollando una teoría sistemática del comportamiento humano
basado en el principio de la voluntariedad. En este contexto, Parsons propició la psicología
dinámica moderna y la profundización del análisis comparativo de las estructuras sociales
de Émile Durkheim y Bronislaw Malinowski, y el método para el estudio comparativo de
instituciones sociales de Max Weber.
En sus trabajos posteriores hizo mayor hincapié en el impacto de la estructura social sobre
los actores, con la adopción de un nuevo concepto: el "status-rol", o posición que ocupa un
actor en el entramado de interacciones sociales. Su teoría ha sido criticada por autores
como C. Wright Mills, para quien Parsons sólo hace referencia a los rasgos constantes de la
sociedad y obvia factores históricos evidentes en muchas sociedades contemporáneas,
como el peso coercitivo del Estado, la manipulación ideológica o la influencia religiosa.
Ferdinand Tönnies
Su trabajo fue interrumpido cuando los nazis lo expulsaron en 1933 debido a las críticas
que les había hecho en sus primeras obras. A pesar de ello, Tönnies fue un científico social
entregado a la creación de conocimiento y publicó más de 900 trabajos que contribuyeron
en la sociología y la filosofía. Muchos de sus trabajos sobre teorías sociológicas fueron
precursoras de la Sociología Moderna: Gemeinschaft und Gesellschaft (1887). Aportó
también al estudio del cambio social. Tenía un gran interés en la estadística y la
investigación sociológica, de ahí surgió la técnica de la asociación estadística.
Los economistas liberales como Vilfredo Pareto o Max Weber introdujeron la noción de
acción social como la unidad de observación de los estudios sociales. Tönnies, Durkheim y
Freud estudiaron dicha noción en tiempos distintos. Debemos mencionar que ellos se
sustentaron en los postulados modernos positivistas. Y sin embargo todos ellos aceptaron la
subjetividad como elemento esencial para elaborar sus teorías.
Tönnies es responsable de la existencia de una nueva ciencia que estudia las nuevas
manifestaciones de la convivencia humana en la modernidad. Esta surgió en una época de
dominio del positivismo y del historicismo. Ahora bien, desarrollo un individualismo
metodológico sustentando en Hobbes, este le dio las herramientas para discernir que la
realidad social se origina en actos de afirmación querida y consciente. Actualmente hay
varios estudios en donde se destaca la importancia de este sociólogo en el campo de la
opinión pública, la sociología urbana o la sociología del orden.
Marianne Weber
Cuando estalló la Primera Guerra Mundial (1914-1916), Max Weber trabajó como
organizador de hospitales militares, como asesor en la negociación de la paz y para la
oficina de la recién nacida República de Weimar. En 1920, la hermana de Max, Lili se
suicida, Max y Marianne a adoptarán a sus cuatro hijos, y ese mismo año Max Weber
muere de neumonía, el 14 de junio, entrando Marianne en una etapa de fuerte depresión, lo
que supuso alejarse de manera provisional de su trabajo intelectual y político. En 1921
Marianne Weber volvió a Heidelberg y empezó a publicar algunos ensayos de su marido
fallecido, y comenzó un trabajo biográfico: "Max Weber, una biografía" (publicado en
1926). Luego de obtener su título de doctorado en 1924, comenzó su carrera de
conferenciante, llegando a reunir en alguna conferencia a más de cinco mil personas. Está
carrera se acabó cuando Adolf Hitler disolvió la Federación Alemana de la Organización de
las Mujeres, aunque Marianne Weber siguió escribiendo y publicó en 1935 su libro "Las
mujeres y el amor" (Frauen und die Liebe ) y en 1942 "La vida plena" (Erfülltes Leben).
Murió en Heidelberg el 12 de marzo de 1954.
Entre sus libros, Human Nature and the Social Order (1902), Social Organization (1909),
Social Process (1918), Life and the Student (1927) y Sociological Theory and Social
Research (póstuma, 1930). Son especialmente relevantes sus contribuciones acerca del
concepto de grupo primario y la socialización del individuo o la dimensión social del yo
(looking-glass self), el carácter social de la personalidad y la naturaleza psicológica de la
sociedad. En Social Organization (1909) dedica una gran importancia a la comunicación,
pero no sólo en el plano interpersonal, sino la comunicación masiva de los medios y su
papel en los procesos de socialización y vertebración de la naturaleza social.
En la obra de Cooley son especialmente relevantes sus contribuciones acerca del concepto
de grupo primario y la socialización del individuo o la dimensión social del yo (looking-
glass self), el carácter social de la personalidad y la naturaleza psicológica de la sociedad.
En su trabajo ‘Personal Competition’ (v. textos), aparecido en 1894, alerta acerca del
peligro que conlleva la industrialización y la sociedad urbana en Estados Unidos: el
individualismo y la ruptura de los grupos e instancias que vertebran la naturaleza social.
Aspectos en los que centrará sus posteriores trabajos, que analizan la esencia de la vida
social, la formación de la opinión, etc-.
Su obra tuvo una gran influencia sobre el pensamiento sociológico y en figuras coetáneas
como la de George H. Mead y la teoría del interaccionismo simbólico. Cooley es uno de los
primeros académicos que aborda el papel de los medios de comunicación masivos -la
interlocución imaginaria- en la configuración de la opinión pública y en la naturaleza social
de la vida contemporánea.
Marcel Mauss
Sobrino, discípulo y colaborador de Émile Durkheim, Mauss fue sociólogo y socialista (no
marxista), y su participación política se inició con el caso Dreyfus, manteniéndose a lo
largo de su vida (padeció, por ello, una doble persecución durante la ocupación alemana).
En sus estudios colaboró con Henri Hubert y otros autores reunidos alrededor de la revista
L'Année Sociologique, aunque mantuvo una posición bastante independiente respecto a
ella. En 1925 fundó el Instituto de Etnología.
Mauss, al contrario de lo que sucede, por ejemplo con Malinowski, llevó a cabo pocos
estudios de terreno (sólo fue en una misión a Marruecos). Por contraste, trató de abarcar las
realidades en su totalidad, en especial por medio de su famosa expresión de «hecho social
total». Así, en su opinión, un hecho social implica siempre dimensiones económicas,
religiosas o jurídicas y no puede reducirse a uno solo de esos aspectos. Mauss también
escoge aprehender al ser humano en su realidad concreta, es decir, bajo el triple punto de
vista fisiológico, psicológico y sociológico.
Se interesó por el significado social del don en las sociedades tribales, así como por el
fenómeno religioso, al considerar la magia como un fenómeno social, y al recurrir y
explicitar el término de mana.
Con su famoso Ensayo sobre el don, fue el inspirador de toda una parte de la reflexión
sobre la antropología económica, al mostrar que el don es agonista, ya que el vínculo no
mercantil (cambios no remunerados ni trocados), a la vez que crea un vínculo social
«obliga» a quien lo recibe, que sólo se puede liberar por medio de un «contradon». Para
Mauss, el don es esencial en la sociedad humana.
Mauss acuñó el término técnicas del cuerpo a principios del siglo XX.1 2 para referirse a
las formas, actitudes y posturas, establecidas por tradición, mediante las cuales los seres
humanos, utilizan sus cuerpos para llevar a cabo un sin número de actividades cotidianas y
expresar y comunicar sus sentimientos.
Obras
Essai sur la nature et la fonction du sacrifice 1898 (con Henri Hubert) .
La sociologie: objet et méthode, 1901 (con Paul Fauconnet).
De quelques formes primitives de classification, 1902 (con Durkheim).
Esquisse d'une théorie générale de la magie, 1902 (con Henri Hubert).
Florian Znaniecki
Nacido en Swietniki, Polonia, estudió en Ginebra, Zurich y París, donde
fue discípulo de Durkheim, doctorándose en la Universidad Jagellónica
de Cracovia. En 1914, se trasladó a Estados Unidos, invitado por
William I. Thomas, uno de los fundadores de la 'escuela de Chicago',
para colaborar con él en el estudio del campesinado polaco y la
emigración a Estados Unidos. En la Universidad de Chicago conoce,
entre otros, a George H. Mead, que le influye en las ideas generativas
del interaccionismo simbólico. Su obra The Polish Peasant in Europe
and America. Monograph of an immigrant group, en 5 volúmenes
(1918-20), escrita con Thomas, alcanzó gran relevancia en Estados
Unidos y fue traducida a numerosas lenguas, al tiempo que fue
considerada como trabajo seminal de la sociología empírica del siglo XX. En 1919, publicó
Cultural reality, otras de sus obras de referencia acerca de la cultura en la modelación
social. En 1920, obtuvo la primera cátedra de sociología en la Universidad de Poznan,
donde instituyó los estudios universitarios de sociología en Polonia. Creador del Polish
Polski Instytut Socjologii y de la revista académica Polish Polski Przeglad Socjologiczny.
Profesor visitante de la Universidad de Columbia en Nueva York, se trasladó a Estados
Unidos tras la invasión alemana de Polonia, ejerciendo la docencia en la Universidad de
Illinois. Fue presidente de la American Sociological Association (1954).
Su obra es monumental y en ella, además de las obras de referencia citadas, caben destacar,
entre otros: The method of sociology (New York, 1934), Social actions (Nueva York,
1936), The social role of the man of knowledge (Nuena York, 1940), Cultural sciences.
Their origin and development (Urbana, Ill., 1952), Modern nationalities. A sociological
study (Urbana, Ill., 1952).
Entre otras obras, han sido traducidas: El papel social del intelectual, FCE, México, 1944;
Las sociedades de cultura nacional y sus relaciones, Colegio de México, México, 1944; El
campesino polaco en Europa y América, con William I. Thomas, Centro de Investigaciones
Sociológicas y Boletín Oficial del Estado, Madrid, 2004.
En la obra de Znaniecki se distingue entre los valores objetivos de la vida social (los
sedimentos culturales) y los subjetivos, que aparecen en los individuos a través de sus
actitudes. Estas actitudes las percibe en el estudio de los comportamientos de los
inmigrantes polacos en Estados Unidos. La matriz cultural de la vida social que plantea
Znaniecki desarrolla una tercera vía 'culturalista' en la sociología, distinta a las matrices
filosóficas realistas e idealistas, presentes en los estudios previos de la realidad social. El
mundo humano se distingue del mundo natural por la cultura. Por ejemplo, valora la
posición del individuo en el análisis, de modo que las experiencias de éste y su posición en
el sistema social determinan su actitud e interlocución, interpretación en la que se adivina la
realidad social a través de la complejidad y de las circunstancias del individuo (la
experiencia activa, el 'coeficiente humanístico'). Sin embargo, su posición no puede
calificarse de individualista, al describir como primer plano del orden social la
supraindividualidad. El pensamiento de Znaniecki ha tenido una amplia influencia en el
desarrollo de la sociología moderna y en autores como Herbert Blumer.
Jane Addams