Está en la página 1de 5
‘Psicologia General’ de E. Ribes: una reseia “Psicologia General’ by E. Ribes: a review Claudio Carpio Universidad Nacional Aut6noma de México-tacala Hablar de psicologia y de lo psicol6gico es, siempre, hablar desde un punto de vista te6rico que, tética o explicitamente, define los crilerios de demar- cacién analitica, formulacién y solucién dc los problemas diciphinasios Scria imposible considerar que los problemas “estén alli” inde- pendicntemente del marco tedrico a partir del cual sc les abords. En cien- cia todo problema, desde su definicién hasta su solucién, esté permeado por cl conjunto de supuestos que definen su pertinencia en la geogratia empirica y conceptual de cada diciplina. (Kantor, 1924-29, 1958; Ryle, 1949; Kuhn, 1962; Hanson, 1985). Por esta razén, el esclarccimiento de ta- les supucstos constituye un aspecto de primordial impactancia en cl mo- mento de proponer alguna solucién a los problemas vigentes en un rca de conocimiento, particularmente porque de esta manera sc hacen cvidentes las soluciones aceptables dentro de la tradici6n 0 comunidad cientifica a la que se pertenece y desde la cual se claboran las propuestas de solucién (Kuhn, 1962), Debe considerarse, sin embargo, que no siempre los problemas que se protende solucionar constituyen problemas legftimos para los cuales existe una solucién apropiada. La legitimidad de los problemas en ciencia no es una cucstiGn que pueda ser formulada en abstracto, como si los problemas fucran importantes en sf mismos, sino que dicha importancia es otorgada con base en los criterias generales que dan significado a los “hechos” en un dominio cientifico particular. Tales eriterios de significacién se concre- tan y representan a los ejemplares como prototipos de la dupla problema- solucién (Kuhn, 1962). En otras palabras, los cjemplares © paradigmas ilustran las reglas para el reconocimiento de un evento como “hecho” cien- ficamente relevante y. al mismo tiempo, para su abordaje y tratamiento te6rico y metodol6gico. Adicionalmente, esta labor de reconocimiento y esclarecimiento de Jos supuestos paradigméticos permite identificar aquellas situaciones en las que la formulacién de los problemas descansa en una confusién en cl uso ae PSICOLOGIA GENERAL Naim. 1 y 2, Vol. 18 de los términos en lo que s¢ formula el problema. es decir, cuando en la formulacién se transgreden las reglas de operacién prescritas por el para- digma. De esta manera, el anilisis conceptual de los supuestos paradigmé- ticos representa en buena medida una labor de desmitificaci6n en Ia que més que negar hechos se les reubica adecuadamente de acuerdo con su ‘geografia l6gica (Ryle, 1949; Turbayne, 1983) para eliminar problemas ile- gitimos 0 seudoproblemas. Desafortunadamente, esta tarea cuya importancia para el avance de la psicologta es cuando menos comparable a la que actualmente se otorga al Tefinamiento de disefios experimentales o de los sistemas de recoleccién, andlisis y representacidn de datos, se encuentra lamentablemente desc dada en la Psicologia contempordnea. Con algunas excepciones notables (Kantor, 1963, 1969; Ryle, 1949; Schoenfeld, 1972, 1983), los psicSlogos poco nos hemos preocupado por una revisitacién critica de los supuestos en los que se fundamentan nuestras précticas cientificas, asi como por eva- luar la correspondencia y congruencia entre tales practicas y dichos su- puestos. De manera particularmente sorprendente, estamos siendo testigos de un retorno a los viejos problemas y a las viejas soluciones en el trabajo de los analistas de la conducta, experimentales y aplicados, sin una refle- xi6n profunda de sus razones y sus implicaciones para la construccién de una psicologia cientifica. Debido a lo anterior, el libro de Emilio Ribes Psicologia General cons- tituye un esfuerzo de excepcional valia e importancia. En esta obra, carac- terizada por el propio Ribes como una “anti-psicologie”, se ofrece un ejemplo de anélisis conceptual que pretende una reubicaci6n de los sempi- ternos problemas de practicamente todas las teorias psicol6gicas (el len- guaje, el pensamiento, la percepeién, la memoria, la motivacién, la imaginaci6n, los sucfios, cl aprendizaje, la personalidad y la inteligencia) demostcando su cardcter ilegitimo o de seudoproblema ta! como se les ha fomutado hasta ahora. Desde luego, la tarea emprendida en esta obra no ‘es meramente destructiva, sino que en el examen de cada uno de los pro- blemas que se discuten se ofrece una formula alternativa para abordar los eventos psicol6gicos @ los que, en distintos contextos y circunstancias, se les ha referido con los términos examinados. El proceder analitico de Ribes en esta obra tiene una doble dimen- si6n: una hist6rica y otra conceptual. En el primer sentido, se reconoce en su trabajo el anélisis histérico de los problemas como un componente in- dispensable para identificar el origen de Ias confusiones presentes en la formulacién de muchos de los problemas contempordneos de la psicologi ‘Su anélisis hist6sico no es una mera cronologia de hechos y acontecimien- tos, sino la explicitacién del carécter soci 1092 canPIo 168 colégicos en tanto “hechos” supuestos paradigmaticos. En la tradicién kuhniana, Ribes examina criticamente logica conceptual empleada en la formulacién de los problemas y su cont nuidad como recurrencia transformada de tas formas conceptuales y como ersistencia de la légica tedriea, demostrando que hechos y canceptos son elementos inseparables en el proceder cientifico. Por ello, més que demos- trar a la historia de la psicologia como un proceso de acumulacién de co- nocimiento, la exhibe como un “repertorio de paradigmas” en el que las confusiones son féciles y frecuentemente inadvertidas. Debido precisamente a esa inadvertencia de las confusiones en los If- mites l6gicos de los criterios paradigméticos, Ja segunda dimensi6n del ané- lisis de Ribes cobra particular importancia, es decir, el andlisis de la I6gica conceptual en cuyos términos se formulan los problemas que conforman nuestro panorama, disciplinario contemporéneo. En este terreno, | Aluencia de Ryle (1949) y de Wittgenstein (1953) es evidente y reconocida por el propio Ries. Las nociones de “error categorial”, “geografia légica” y “juego de lenguaje” son la piedra angular del anélisis conceptual realiza- do. En el texto se desarrolla un particular modo de andlisis que parte de una clasificacién tentativa de las dimensiones I6gicas del uso de los térmi- nos, proponiéndolo como un instrumento desmitificador necesario en la reordenaci6n de espacio conceptual de la psicologia. ‘Con estos principios, en Psicologia General se imprime coherencia a los. intos capitulos, cada uno de los cuales esté consagrado a un t6pico dist to. Ast, en el primer capitulo, Historia de la psicologta épara qué?, se explici- tan los instrumentos metodolégicos para el anilisis hist6rico de los problemas que han configurado el cuerpo conceptual y empftico contempo- rénco de la Psicologfa. En el segundo capitulo, Acerca de la percepcién, fa imaginaci6n, la memoria y los suefos; algunos malentendidos psicoldgicos, se examina la manera en que la mitologfa de la mente desarrollada por Descat tes favoreci6 un proceso de transmutaci6n de los términos del lenguaje ordi- nario en términos pretendidamente técnicas de la Psicologia, y con ello una serie de confusiones y errores categoriales en la formulacién de problemas psicoldgicos irresolubles. Aunque en este capitulo se analiza de manera pat- ticular los tépicos mencionados en su titulo, se hace extensiva la px de tratar con la misma metodologia otros problemas no considerados en él. En el tercer capitulo, La evolucién de las teortas del aprendizaje: un andlisis hist6rico-conceptual, se hace wa tastreo hist6rico del concepto de aprendiza- je para analizar su estatuto Igico como término central en maltiples teorias sicoldgicas. En este capitulo, Ribes hace una demostracién del carécter 16- Bicamente inconsistente del uso del concepto de aprendizaje como concepio de proceso, proponiendo su identificacién como un concepto de logro que

También podría gustarte