¿Qué es una escuela para padres?

Tienen como propósito ayudar, proporcionar ideas sobre la actuación en algunos eventos
que se salgan de la mano a los padres hacia los hijos pero sobre todo es un refugio de
enseñanzas, de experiencias y de crecimiento tanto individual como de pareja.

Al recibir una de estas invitaciones en casa por primera vez dirigida a mí, reflexionaba
sobre el peso de las palabras que componen a este evento, es decir, el significado del
término «Escuela para padres», se trata de un lugar donde aprenderás a ser padre, un
lugar donde te enseñarán la tarea más difícil, pero es esa misma tarea donde la
recompensa no tiene límites establecidos, y donde el pago siempre conlleva a una dosis
de amor de un ser que está a tu cargo. Por tal motivo, luego de tener una idea sobre lo
que es, ¿se convierte en una invitación para no asistir?

El reto de Ser Padre

Ser padre implica grandes hazañas, momentos de felicidad se conservan por prolongados
espacios de tiempo,

No es de ocultar que la evolución del mundo también ha hecho posible este mismo
proceso en los niños de este tiempo, trayendo consigo un cambio constante en la manera
de crianza que es totalmente diferente a como ocurrió cuando éramos pequeños.
Los niños de esta época son energéticos, rompen cualquier esquema que se establezca
entorno a su desarrollo, pero sobre todo la constante manera de expresarse y de dirigirse
a los adultos, es lo que cada vez nos sorprende más, y en algunos padres causa cierto
temor al momento de dirigirse hacia ellos.

El objetivo de las Escuelas para Padres.

El objetivo principal de las escuelas para padres es la ayuda en el fortalecimiento de las
debilidades que pudiesen estar ocurriendo dentro del hogar, proporcionando técnicas y
soluciones que facilitan la vida de los padres.

Temas posibles en los encuentros de Escuela para Padres

La dirección de temas como: valores, el perdón, la necesidad de padres en familias, el
recurrente gesto de decir «te amo», la necesidad de ofrecer herramientas para forjar un
futuro y entre muchos temas más que de algún modo se espera dejar un pequeño o largo
consejo y además crear satisfacción que al ser padres todo puede ser y estar mejor
cumpliendo con tu deber.
La mayoría de las veces el pensar en los motivos para ser felices a los niños de esta época
son dirigidos a miradas que no favorecen su educación, la tecnología, marca un
precedente para encontrarnos, pues en esta etapa es la distancia, la encargada de jugar
un papel protagónico, ya sea de metros por estar rodeados como padres de diversas
ocupaciones que absorben el tiempo día a día o también por kilómetros, al encontrarse
fuera de los límites geográficos donde hijos se han quedado.

Necesidad de las escuelas para padres en la Venezuela de hoy

La situación actual de nuestro país, ha hecho más evidente la necesidad de comunicación
entre padres e hijos, está situación, acompleja el sistema de vida de ambos.

Escuchaba de un sacerdote en una escuela para padres reflexionar sobre el trance que
muchas familias están atravesando ahora, y él sostenía a lo largo de su charla la siguiente
frase: «estamos en un tiempo de necesidad de padres y madres» explicaba que de por sí
la distancia breve de unos días afecta el comportamiento, la distancia por años es peor,
una cicatriz que será difícil de cerrar.
Además invitaba de manera masiva a regalar un abrazo o un beso en la frente si está a
nuestro alcance a esos niños y jóvenes cuyos padres estén fuera, asegura que nada cuesta
pero vale tanto para esta personita.

Mi experiencia en las escuelas para padres

Desde mi propia experiencia puedo afirmar que es muy positiva la asistencia a las escuelas
para padres.

Te invito a compartir tus experiencias en los comentarios de este post sobre la labor de
ser padres, entre todos podemos aportar a crecer juntos, seamos escuela de padres en
todo momento y lugar, no nacimos con la experiencia, la obtenemos en el camino, estás
escuelas son realizadas con cariño hacia nosotros los padres. Nunca olvides que ese es un
espacio de tiempo para aprender, ser felices y lo más importante, mejores padres para los niños y
jóvenes de ahora ¿Tú estás de acuerdo con la afirmación: » la felicidad de los hijos no tiene
precio»? ¿Cómo podemos contribuir con esa tarea de proporcionar felicidad?
Los principales y primeros educadores de los hijos son sus padres, no importa si sus papás están
separados. El colegio apoya y orienta a los padres en esa tarea, pero no los sustituye.

Hoy lo que veo es que la sociedad demanda a la escuela permanentemente que cumpla
la función social de servir como «guardería» donde nuestros hijos permanezcan el mayor
tiempo posible.

Como conclusión parece oportuno recordar que no hay universidades que generen
especialistas en la carrera de ser padres porque la educación es un proceso continuo y
sólo conjugando el papel formativo de las escuelas, con las responsabilidades de las
familias, es posible garantizar a todos una buena educación.

La orientación que brindemos a sus hijos se ha de corresponder con su propia actuación,

aprendizajes, valores y principios; pero esto es cosa de todos, porque en esto reside el
éxito de la escuela: padres y docentes tras un bien común, nuestros hijos, porque
docentes y papás siempre estamos educando.

«Para educar a un niño hace falta la tribu entera».