Está en la página 1de 5

En la mañana del 26 de abril de 1986, una

sobretensión de poder causó la explosión de


un reactor en la planta nuclear de Chernobyl,
cuando hacía parte de la República Socialista
Soviética de Ucrania de la Unión Soviética. La
explosión arrojó un nivel de radiación cien
veces mayor que el encontrado en Hiroshima
y Nagasaki, dejando como resultado una
nube pútrida de contaminación gigantesca
que llegó hasta Irlanda.

La radiación infectó el aire, el suelo y a los


residentes, causando defectos de nacimiento,
cáncer de tiroides en los niños y afectando a
las generaciones futuras con grotescas
mutaciones. Treinta años después, Chernobyl
se ha convertido en una atracción turística
mórbida, una lección frente a la arrogancia
de un gobierno, y el hogar de unas 140
personas.

a pesar de la advertencia que les hizo el


gobierno ucraniano. Otros se asentaron por
pura desesperación, escondidos ilegalmente
en los miles de estructuras y edificaciones
abandonadas, sobreviviendo de cultivos
sembrados en tierra contaminada.
Las víctimas de Chernobyl sufrieron una
terrible discriminación por parte de la
población general en los años siguientes al
desastre. Los habitantes, por lo general, se
devolvían a la Zona d e Exclusión a pie,
enfrentándose a un recorrido de 130
kilómetros desde Kiev. Era entendible que
necesitaran descansar durante el trayecto,
pero les era difícil encontrar dónde dormir
porque a la gente le daba miedo infectarse de

la radiacion

.
Los trabajos presentados mostraron que
en la actualidad la zona de exclusión
alberga una gran biodiversidad. Además,
confirmaron la ausencia general de
efectos negativos de la radiación sobre
las poblaciones de animales y plantas de
Chernóbil. Todos los grupos estudiados
mantienen poblaciones abundantes y
perfectamente funcionales en el área.

En 2016 la parte ucraniana de la zona de


exclusión fue declarada Reserva
Radiológica de la Biosfera por el Gobierno
de Ucrania. Contra los pronósticos
iniciales, el área sirve ahora de refugio a
numerosas especies amenazadas a
escala Europea o nacional. Entre ellas
destacan el oso pardo, el bisonte
europeo, el caballo de Przewaslki, la
cigüeña negra y el águila pomerana.

También podría gustarte