disputa
por los
_ mereados-
: TLC
_y. sector «
agropecuario
COORDINADORES:
‘ALEJANDRO ENCINAS, JUAN DE LA FUENTE
~¥ HORACIO MACKINLAY.
HUGO ANDRES ARAUJO, EMILIO CABALLERO,
BEATRIZ CAMARENA,
. HUBERT CARTON DE GRAMMONT,
LUCIANO CONCHEIRO, GONZALO CHAPELA,
MAGDA FRITSCHER, DENNIS GIBSON, .
MARGARITA GONZALEZ, MARIA LUISA JIMENEZ,
EMILIO LOPEZ, FEDERICO MANCHON,
ELVIRA MASCORRO, LUIS-MENESES,
MANRUBIO MUNOZ, HECTOR OLEA,
‘ALEJANDRO PEREZ, SALOMON SALCEDO,
NELSON SALINAS, VICTOR SANCHEZ,
SERGIO SANDOVAL, HORACIO SANTOYO,
KENNETH SHWEDEL. ¥ FELIPE ZERMENO.CAPITULO VIII
EL TRATADO DE LIBRE COMERCIO
Y LOS PRODUCTORES RURALES
EN MEXICO*
Hugo Andrés Araujo **
Alejandro Pérez Pascual ***
Lo primero que quisiéramos expresar es que, actualmente, el debate
esta centrado en el problema del Tratado de Libre Comercio (Tuc).
Sin embargo, desde nuestro punto de vista, debemos aclarar que
de tiempo atrés insistimos que el debate deberfa girar, sobre todo,
en torno ala situacién del campo mexicano, pues no se debe ocultar
Ia situacién por la que atraviesa y colocar en primer término el pro-
blema del Tic. La agricultura y los campesinos mexicanos tienen
problemas muy serios. Estos son el centro de un debate que hoy
se ve permeado por la firma de un posible Tic.
* Ponencia presentada en el Primer Seminario sobre EI sector agropecuatio frente a la apertura
comercial organizado por la UaM, 2 de julio de 1991,
* Actualmente Secretario General de la Confedleracién Nacional Campesina (Gye) y
Diputado Federal de la LV Legislatura, Presidente de la Comisién de Reforma Agraria de
a Camara de Diputados. Cuando se presenté esta ponencia ocupaba el cargo de Secretario
de Organizacién de la Cc.
+ Facultad de Economia, UNAM.
ul112 La disputa por los mercados
El campo esta sumamente descapitalizado por un proceso de di-
ferenciacién de precios entre el campo y la ciudad que data de
veinticinco, treinta o mas afios. Se trata de un problema que est abi
y va a seguir estando con o sin TLC. El campo mexicano esté muy
parcelado: el minifundio afianza su presencia, lo que representa un
fenémeno que ha generado bajfsimos niveles de productividad, tan-
to en el sector social como en el privado. Existe, ademas, un sistema
de comercializacién que extrae, de manera constante, el excedente
del campo, lo dirige hacia toda la cadena de intermediacién y va
en menoscabo de los niveles de vida de los campesinos y de la
apropiacin de su propio excedente.
En general, existe un grave problema de productividad. Partien-
do de este hecho, debemos pugnar por una politica gubernamental
y un proyecto de los productores rurales que busque modificar las
condiciones en las que se encuentra la agricultura mexicana, inde-
pendientemente de la firma del Tic. Dirfamos que esa es una con-
dicién sine qua non para el desarrollo rural de México, y es en ese
marco donde deberiamos establecer cémo se inserta el problema
del Tratado, y no centrar el anilisis en las repercusiones de éste.
‘Tampoco debemos olvidar que tenemos que generar alternativas y
proyectos que permitan el fortalecimiento del campo mexicano y de
sus productores, con o sin TL.
Antes de tratar el andlisis de las repercusiones que podrfa tener
el Tic en el campo mexicano, deberfamos ubicar el papel que la
agricultura, el campo y los campesinos desempefiaran én el desa-
rrollo econémico futuro de México. El pafs cuenta con una forma
de crecimiento econémico basada en la sustitucin de importacio-
nes, mediante una industrializacién que duré mas de cuarenta afios,
en la que el campo mexicano tuvo primero un papel protagénico
como generador de divisas, pero que produjo, al final, una grave
crisis en el medio rural, la que se materializ en descapitalizacion,
bajos niveles de vida y de productividad en muchas de las areas del
medio rural. En el transcurso de esta forma de crecimiento econd-
mico el campo mexicano desempeiié un papel definido y determi-
nado, subordinado a la industrializacién, dando resultados negati-
vos para la produccién agropecuaria.
Ante la nueva forma de crecimiento econémico que se plantea
en nnestro pais, orientada en términos de que el sector exportador
sea el pivote fundamental, una de las interrogantes que hay que
responder es écudl ser el papel que el campo mexicano y los cam-
pesinos deberin desempefiar? En nuestra opinién debemos pugnar,
precisamente, por que los grandes desequilibrios y la gran desigual-
dad existentes puedan revertirse en una mieva forma de crecimiento