AVENGERS: INFINITY WAR

Un chasquido. Y mis héroes se hicieron ceniza.

La pantalla se hizo negrura. Contuve la respiración, como si la esperanza se me

pudiera escapar en un suspiro. ¿Cuánto duró aquella pausa? ¿Cuánto tiempo me
mantuve aferrada a mi propia ilusión, haciendo presa de aquel hálito de optimismo
en la jaula de mis pulmones?

De repente, el aliento me fue arrebatado por las letras que marcaban, cual verdugos,
el tan temido final. Contemplé los créditos desplegarse sobre la pantalla en
perplejidad absoluta. Por un momento pensé que era la única en tal estado, pero
pronto me percaté del imperante e inquebrantable silencio. Un silencio como el que
nunca había atestiguado al finalizar una película de superhéroes. La inmediata
verborrea era la usanza. Esta vez nadie hablaba.

Una chica en la fila de enfrente volteó a ver a uno de sus amigos. Abrió la boca
como queriendo decir algo, pero la cerró inmediatamente. Se encogió de hombros
y sus labios formaron algo parecido a una sonrisa, pero sus ojos evidenciaron su
incredulidad. En respuesta, su amigo se llevó una mano a la cabeza, recorrió su
cabello con los dedos, pero de su boca tampoco salió nada.

A mi lado escuché unos ruiditos que se escondían tímidamente bajo el volumen de

la banda sonora. Tardé un poco en darme cuenta de que eran sollozos. Mi asombro
me hizo girar el rostro hacia el asiento a mi derecha. Ahí, una mujer, acompañada
de su hija, lloraba silenciosamente. Su llanto era casi imperceptible. No es que
pretendiera reprimirlo, más bien hacía sonarlo respetuoso. Si alguien hubiera
presenciado la escena sin el contexto que brindaba la sala de cine, podría haber
jurado que aquello era un funeral.

De alguna forma lo era. ¿Estábamos de luto? Me pregunté a mí misma, negada a

creer en los estragos de aquel chasquido. Sí, todo aquello había sucedido.
Realmente había tenido lugar. Un instante pasó en el que mi propio llanto amenazó
con secuestrar mis sentidos, pero fue ahuyentado por un sentimiento inesperado:
rabia.

Esperamos 10 años de un evento que pocos sabían que ocurriría. Esperamos 10

años de películas mixtas de calidad, de una saga altibaja de Iron Man, de la mejor
trilogía con Capitán América, de un proyecto frustrado en solitario de Hulk, de un
nuevo Spider-Man, de un mixto Thor, de unos divertidos e irreverentes Guardianes
De La Galaxia, de unos sencillos y complicados personajes de Ant-Man y Black
Panther y de un cambio de personalidad de mi personaje favorito Dr. Strange. De
varios cambios de uno de los creadores del Universo de Marvel, Stan Lee.

Esperamos 10 años para ver el inicio del fin, el comienzo de una guerra infinita que
tendrá vencedores y perdedores. Esperamos años para que por fin todos los héroes
del Universo Cinematográfico De Marvel llegasen a un culmen extraordinario. La
espera se ha cristalizado desde que supimos que Avengers: Infinity War sería la
historia que desembocaría en un magno evento, además, dividida en dos partes.
Después sabríamos que la 3ra y 4ta película de los Vengadores serían diferentes (o
al menos no continuas), pero eso no aminoró el ansia por saber qué pasaría en
ellas.

Ahora, viene lo bueno, conocer y analizar (dentro de lo que sabemos hacer) la

película The Avengers: Infinity War, después de haberla disfrutado en el estreno
de medianoche en aquí en Villahermosa, Tab.

Hemos sido bien recompensados por vivir en una época en que los productos, si
bien es cierto que no tiene la calidad de antes en cuanto a narrativa y a profundidad
del tema, si hay cantidad y excelentes efectos visuales (algo debería tener de malo,
¿no?). Desde los 2000 comenzó una era de fantasía en el cine, de ficción adaptada
y de originales que iban más allá de nuestra imaginación.

Algunos quieren encontrarle 3 pies al gato y analizar todo como obras de arte (que
se puede, pero no fueron hechas para eso), por ello terminando, dando malas
críticas a la película. Quizá algunos lo hagan con la presente producción (y repito,
no está mal), pero les recuerdo: sólo es entretenimiento.
Así que, sin más preámbulo, comenzamos a entrar en materia.

• SINOPSIS OFICIAL

Un viaje cinematográfico sin precedentes realizado durante los últimos 10 años

y que abarca todo el Universo Cinematográfico de Marvel (MCU). "Vengadores:
Infinity War", de Marvel Studios, lleva a la gran pantalla el enfrentamiento
definitivo y más sangriento de todos los tiempos. Los Vengadores y sus aliados
superheroicos deben estar dispuestos a sacrificar todo lo que tienen para intentar
derrotar al todopoderoso Thanos antes de que su plan de devastación ponga fin
a todo el universo conocido.

Es fantástico haber seguido durante 10 años a esta pandilla de humanos, medio

humanos y extraterrestres que se hacen llamar guardianes y héroes. No hace falta
ser un conocedor de los cómics para entender el hilo argumental de las 19 películas
que han salido, ya que han mezclado tantos arcos argumentales como sean
posibles, y como ajeno a ellos, puedo hablar sólo de la película.

Después de haber leído la sinopsis, puedo decir que no habla, para nada, de lo que
sucede en toda la película. Desde el comienzo nos atacan con muy buenos efectos
visuales (como sólo las películas fantásticas pueden hacerlo), y escenas que nos
desconciertan. Las muertes llegan temprano y con ellas los momentos de asombro
y de silencio entre el público.

La película se divide en dos dependiendo desde donde se vea. Si lo tomamos desde

el ataque y la búsqueda de las gemas, se ubica fuera y dentro de la Tierra (más
específico, en Wakanda). Si nos vamos a la película en sí, la primera hora es la
unión de todos los héroes lleno de historia, y la segunda hora en que se definen las
batallas y los enfrentamientos para sobrevivir. Por supuesto, la segunda es la mejor.

La primera parte, donde se van encontrando los Vengadores y los Guardianes está
llena de momentos épicos. Esperamos ver más la química entre Rocket y Thor, o
Strange y Iron Man. A pesar de ello, nos quedamos con las ganas de volver a ver
juntos a Tony y a Steve. La segunda parte, el enfrentamiento entre algunos héroes
y Thanos, son buenas (aunque creo que muy rápidas. Hemos visto en otras
películas fascinantes batallas entre héroes y villanos, y aquí faltó un poco de ello.
Sabemos que no hay mucho por hacer frente a un portador de las 6 gemas, pero un
poco más no hacía daño.

Por cierto, por fin sabemos el motivo de la ausencia de Hawkeye y Scott Lang, la
localización de la Gema Alma, nos da una pequeña descripción de cómo obtuvo
la Gema Poder, por supuesto, vemos cómo obtiene las demás. En cuanto a la
recolección, es muy bueno el recorrido. Thanos es un villano confuso, pero a la vez
claro en sus ideales, tanto que tiene que hacer un sacrificio por obtener lo que
busca. Con el flashback de cómo se lleva a Gamora y algunas escenas más, vemos
su lado sentimental, pero en otras ocasiones nos damos cuenta de que su filosofía
por «mejorar» el universo es más fuerte que su amor por su hija. Me recuerda a los
inicios de Loki, aunque claro, más poderoso y menos mentiroso. Thanos no necesita
mentir, todo lo que dice se cumple.

La Orden Negra, como villanos secundarios, quedan perfecto. Son los que más
llaman la atención a pesar de su final debido a que son enviados por Thanos para
conseguir las gemas, pero por alguna razón siempre terminan fallando. No es que
sean malos en su trabajo, es que enfrente tienen a un grupo de fantásticos héroes
que no se amilanan por nada.

Esto me hace hablar sobre ellos. Ya los conocemos, pero cada uno se comporta
diferente debido al ataque del titán. Por ejemplo, Iron Man, que sabe sobre su
poderío, que está esperando ese momento desde el ataque de NY, que vive
atormentado por la espera, y que, aunque no se vea, protege a Peter, quizá sea el
más afectado. Sólo hace falta ver el final (que tocaremos en un momento). Strange,
al ver las posibilidades que hay al enfrentarlo, también comienza a tener aquella
responsabilidad de elección al darle la gema. Los que están en la Tierra sólo tienen
un breve contacto con el gran titán, así que el elemento es el miedo, el asombro y
la defensa frente a la Orden Negra. Terminamos con Thor, que se supondría, ya
debería haber aprendido que su poder no viene de ningún objeto, pero que está
obsesionado con ello. Al no conseguir un martillo como el Mjölnir, consigue un hacha
y, ya sea por la seguridad que le da, o por el verdadero poder de la herramienta,
vemos quizá al héroe más poderoso de todos (al menos en esta película), y eso
sorprende.

El final, o la última media hora, es un buen final, incomprendido por varios,

sorprendente para otros, majestuoso para otros más. No sabemos si se trata de la
decisión de Thanos, si las gemas le juegan una mala pasada, u otra cosa.

Un ensamble maravilloso en donde cada uno de los personajes continúan con su

personalidad, el desarrollo de tanta historia y de la mezcla de los personajes no
hace que ninguno deje de ser como es. Permite una excelente combinación de
universos.

A pesar de tener todo lo que ya hemos mencionado, queda por debajo de ser una
historia perfecta. No sé si aún sigo con el impacto o si aún no la digiero bien, pero
me ha quedado un vacío de «algo» que no-sé-qué-es, pero que debería estar.

Sin duda, es una película que se debe ver en el cine, porque merece verse en una
gran pantalla y disfrutara así. Entretenimiento puro.