Para realizar este procedimiento se requerirá de la ayuda de dos Beaker de
250 mL y dos termómetros. Primero se agregó en cada uno de los Beaker 100 mL de agua y 100mL de leche respectivamente; se debe de revisar que no se pase esta medida, si no estarían en diferentes medidas las dos sustancias. Al tener listas cada una, se debía de poner en la estufa e ir midiendo el tiempo en la cual cada sustancia comenzaba el proceso de ebullición. Cuando comenzara se tomaría la temperatura de cada una y se anotaría los resultados. Resultados B- Calor específico (punto de ebullición) Detalles del proceso de ebullición agua leche Tiempo temperatura Tiempo temperatura 92°C 96°C
¿Por qué uno hierve más rápido que el otro?
Hay una propiedad que se denomina ascenso ebulloscópico y significa que si agregas cualquier soluto a un solvente puro, el punto de esa disolución aumenta. El agua pura hierve a 100°C, pero la leche es agua con solutos compuestos disueltos (azúcares, proteínas, lípidos), entonces estos solutos hacen que el punto de ebullición aumente en la leche, pero en lo que concierne al calor especifico que es “la capacidad de calor que se debe suministrar a la sustancia sistema termodinámico para elevar su temperatura en una unidad”, el agua tiene un mayor nivel de este, por lo cual requerirá más tiempo para que pueda comenzar a ebullir. ¿Por qué la leche hace espuma y el agua no?
Los tensoactivos son compuestos que estabilizan dispersiones de grasas en
agua y, además, también estabilizan la formación de burbujas de aire en agua. Y este es el punto clave. Al hervir la leche se forman burbujas de vapor de agua que se estabilizan debido a la presencia de esos tensoactivos. Esas burbujas tardan mucho en romperse y, por tanto, a medida que la leche hierve van formándose más y más burbujas, aumentando el volumen de la espuma formada hasta que, finalmente, rebosa el recipiente. En el caso del agua, las burbujas de vapor de agua se rompen inmediatamente después de formarse, y no se produce esa espuma.