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Sobre la Magia

GRIMORIUM
Apuntes de un Estudiante de Magia
lunes, 19 de noviembre de 2012
Sobre la Magia IV: Los Espíritus Elementales.
Como ya sabes, todo en la Naturaleza está formado por diferentes
proporciones de los Elementos. Sin embargo, las fuerzas y principios activos
que conforman cada uno de dichos elementos se componen exclusivamente
de un solo elemento. Estos son los «Espíritus Elementales». Así se denomina a
las entidades espirituales que habitan y se nutren del elemento al cual
pertenecen. En las ciencias ocultas se enseña que son las fuerzas y principios
activos presentes en cada elemento, y que permiten su desarrollo y operación.
En Magia, se enseña que, cuando Dios-Uno dio paso a la Creación, envió a sus
“arquitectos” (o Elohim, en terminología Qabbalística) (para darles una
denominación comprensible) y que éstos, antes de retirarse, crearon formas
de pensamiento o pequeños servidores para que se encargaran de una
actividad específica dentro de la reciente Creación. Así cada elemento tendría
quienes se encargarían de distribuir y dar forma a la energía de cada
elemento, dentro de su propia naturaleza.

De esta forma, los Gnomos, espíritus de la Tierra, se encargarían de que los


árboles mudaran sus hojas acorde a las estaciones, o que las flores abrieran
sus pétalos en el momento adecuado. Los Silfos, espíritus del aire, se ocupan
de que los vientos soplen, y las corrientes de aire se distribuyan
adecuadamente. Las Ondinas, espíritus del agua, regulan las mareas, acorde
las ciclos lunares y distribuyen las olas. Las Salamandras, los espíritus del
fuego, encienden y animan las llamas.

Ahora bien, estas mismas entidades trabajan entre sí, para llevar a cabo las
tareas combinadas de los elementos. Por ejemplo, en el “Ciclo del Agua”, las
Ondinas llevan las cargas de agua que, posteriormente, los Silfos convertirán
en nubes que volverán en forma de lluvia.

Parecieran ser cuentos de hadas, pero, independiente de eso, son símbolos


muy bien elegidos. Hay quienes consideran estas palabras literalmente, otros,
como analogías de los procesos que se llevan a cabo dentro de la naturaleza.
Lo cierto es que como símbolos funcionan, y dentro del trabajo operativo, son
de gran ayuda para quien sepa trabajar con ellos y solicitar su ayuda.

Desde una perspectiva más psicológica, son excelentes analogías de


fenómenos internos, además de constituir efectivos símbolos que permiten
armonizar los desequilibrios elementales dentro de un individuo..

Ahora bien, se dice también que cada elemento sigue bajo la custodia de
entidades espirituales. A cada elemento le corresponde un Nombre Divino, es
decir, la forma en que se puede llamar a Dios dentro de la esfera de acción de
aquel elemento. Así también, cada elemento tiene un Arcángel, que regula y
administra todo lo relacionado con el elemento, al igual que un Ángel, que es
el encargado de distribuir la energía en movimiento. Cada grupo de espíritus
elementales tiene un Rey, que es un espíritu elemental iluminado por el
Espíritu Divino. Al trabajar con cada elemento, con fines mágico o espirituales,
podremos siempre recurrir al Arcángel, que es la fuerza de mayor autoridad
en lo referente al elemento. Cuando se requiera de un trabajo más bien
“mundano” podremos recurrir al Rey elemental, con quien, de alguna forma,
podremos "razonar".

Nunca seas tan soberbio como para imponer tu voluntad de forma grosera con
cualquier entidad elemental con la que trabajes, desde el Rey de los espíritus
elementales hasta el Arcángel, pues cada uno tiene su dignidad y merece
respeto. Si bien los espíritus elementales pertenecen a una etapa de evolución
inferior a la nuestra, son entidades vivas que cumplen su parte en la evolución
del universo. Además, su trabajo es vital para nuestra existencia, y cualquier
abuso ingrato que ejerzas sobre ellos, en su momento retornará a ti, con las
desagradables consecuencias que conlleva. Siempre que te dirijas al Rey de los
espíritus elementales, hazlo con la dignidad que se merece un rey, pero no te
expongas como inferior a él. Habla firme, claro, pero respetuosamente.
Lo que mencioné anteriormente en función de la escala evolutiva de los
espíritus elementales, por favor no se malinterprete. Con ello no quiero decir
que los humanos seamos "mejores"; solamente aclaro que, entendiendo la
evolución como grado de Conciencia Divina, el ser humano está compuesto de
los Cinco Elementos, es decir, su conciencia de la existencia puede llegar a ser
mucho más completa que la de un espíritu elemental que solo goza de una
parte de esa existencia.

Si bien existen técnicas y procedimientos que permiten el contacto y/o


acercamiento hacia los espíritus elementales, es más cierto aún que para
entablar una verdadera relación mágica con ellos es preciso "trabajar con
ellos", relacionándonos con ellos en los espacios en los cuales habitan.

Ennuna futura entrada trataremos en más detalle algunas técnicas de


acercamiento y trabajo con Espíritus elementales.
Publicado por Grimorium del Mago en 15:13 1 comentario:
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Etiquetas: Chamanismo, Magia Elemental, Teoría de la Magia

jueves, 20 de septiembre de 2012


Sobre la Magia III: Los Cuatro Verbos del Mago
Saber, Osar, Querer, Callar. Estos Cuatro Verbos representan las bases para el
trabajo y desarrollo en la Magia. Corresponden con los Cuatro Elementos más
conocidos y con cuatro actitudes que todo buen mago debe poseer. Son
mencionadas tanto por Agrippa en su Filosofìa Oculta como por Levi en
el Dogma y Ritual de la Alta Magia, y son consideradas como Cuatro Pilares que
sostienen el Templo del Mago tanto en su estudio comoo en su pràctica.

Saber se refiere a que el Mago debe tener una mente despierta y ávida de saber
y conocimientos. Dicha avidez de conocimiento puede llevar al mago a
acumular una gran cantidad de material teórico, idealmente contrastado con
los resultados que apoorte la ezperimentación. El mago busca "saber",
comprender las realidades ocultas de la Naturaleza, del Universo, de si mismo,
poe lo cual no basta con sólo limitarse a leer, escuchar, covnersar o discutir.
No busca supersticiones, busca Conocimiento. Se relaciona con el elemento
Aire, el elemento del intelecto.

Osar se refiere a que el mago debe contar con el valor y la voluntad


necesarios para llevar a cabo su trabajo. El Mago posee el valor del Fuego.
Nada consigue quien se queda sentadoo, contemplando el mundo o pensando
acerca de "la inmortaldiad del cangrejo". Uno debe "ensuciarse las manos",
atreverse a encender las velas, recitar las invocaciones, trazar los símbolos,
llamar a los àngeles, elementales o cualquier entidad con la que se desee
trabajar. Atreverse es otra forma de llamar a este Verbo, pues, asì como el
mago debe rechazar las supersticiones, la mejor forma de ponerlas a prueba
es "atreverse" a ponerla a prueba. Se relaciona, pues, al Fuego, el elemento
del valor, del coraje, de la voluntad.
Querer se refiere a que, junto con atreverse a hacer, el Mago debe querer
hacer, es decir, estar emocionalmente comprometido y dispuesto a llevar a
cabo su trabajo. Es necesario, además, despertar las emociones relacionadas
con el objetivo (sin dejar invadirnos por ellas) de manera que neustra
energìa personal, unida a la energùa aportada por elementos o entidades
externas, pueda trabajar en conjunto en pos de aquello que buscamos.
Despertaremos la mayor compasión popsible en experiencias orientadas a la
uniòn con la divinidad, o el mayor odio en trabajos orientados a las
maldiciones y trabajoos de destruccón. Se relaciona al Agua, el elemento de
la emoción.

Callar se refiere a que, pase lo que pase, un Mago no habla de su desarrollo o


de sus trabajos con los “profanos”, quienes no son capaces de comprender su
Camino. Antiguamente se prohibía a los aprendices hablar de sus secretos o
de sus condiciones. Comentar un determinado experimento podría provocar
que, nuestro interlocutor, quizás inconscientemente, pueda proyectar
energías qure podrúan resultar contraproducentes para nuestros objetivoos,
sin mencionar que, de los cuatro, es uno de loos ñás importantes para varios
autores. Se relaciona con la Tierra, el elemento del Silencio.

Adicionalmente, Agrippa combina estos Cuatro Verbos, creando pares que


llaman la atención por llegar a ser complementarios de cada uno de estos
verbos. Puestos estos conceptos en una tabla y combinados en pares,
tenemos diez y seis combinaciones del tipo:

Saber saber; saber osar; saber querer; saber callar.


Osar saber; osar osar; osar querer; osar callar.
Querer saber; querer osar; querer querer; querer callar.
Callar saber; callar osar; callar querer; callar callar.

Cada una de estas combinaciones indica una virtud combinada. Así, «Saber
saber» implica saber, pero teniendo conciencia de lo que se sabe, de cómo se
sabe y de aquellos que no se sabe. «Saber osar» se refiere a tener claro con
qué empresas es correcto arriesgarse y con cuales no; una cosa es ser
valiente, otra, estúpido. «Saber querer» significa tener las cosas claras en
relación a nuestras verdaderas intenciones al obrar, sabiendo que
actuamos porque queremos actuar, siendo sinceros con nuestras propias
intenciones.

A medida que fui avanzando en mis estudios fui comprendiendoo otras


aplicaciones para los Verbos, tanto en mi propiio desarrollo como en los
"consejos" que algunas veces me pidiieron amigos que comenzaron a
recorrer sus propios caminos.
Publicado por Grimorium del Mago en 16:59 No hay comentarios:
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Etiquetas: Magia, Magia Elemental, Reflexiones, Teoría de la Magia

sábado, 15 de septiembre de 2012


Sobre la Magia II: Los Elementos.
Uno de los aspectos más fundamentales en el estudio de la Magia, planteado
por renombrados exponentes del Arte como Agrippa, Levi y Crowley, entre
otros, es el estudio y comprensión de los Elementos. Aunque popularmente se
considere que dichos Elementos son cuatro, lo cierto, desde la perspectiva
ocultista, es que son cinco.

Los nombres con los que en el Oeste se conoce a los elementos son: Fuego,
Aire, Agua, Tierra y Éter o Espíritu. Sin embargo, debe entenderse que al
referirnos a “Agua” no es exclusivamente al compuesto (H2O); o al hablar de
la tierra no sólo se habla de “tierra de plantas y hojas”. Los Elementos
representan los principios a partir de los cuales se forma y configura el
universo, visible o invisiblemente. Si bien la ciencia profana nos expone una
Tabla Periódica en la cual encotnramos los elementos que componen nuestro
mundo desde un punto de vista "químico", estos Cinco Elementos Mágicos
hacen referencia a los estados en que se encuentran las diferentes objetos y
substancias dentro del universo. Así, al hablar del Elemento Tierra nos
fererimos a todos los principios “sólidos”, estables, consolidados, firmes o
coagulantes, tanto en niveles físicos, emocionales, mentales o espirituales. El
Elemento Agua a todos los principios “acuosos o líquidos”, fluidos, fluyentes,
adaptables e, incluso, solventes. El Elemento Aire se refiere a todos los
principios “gaseosos”, informes, expandibles, sutiles y volátiles. Al referirnos
al Fuego entendemos con él a todos los principios “ígneos y energéticos”,
tales como la electricidad, por ejemplo; el fuego también representa la
expansión, la energía, la vitalidad, el furor y la vitalidad. El Quinto Elemento,
Éter, Espíritu, Akasha o Lux, es el principio y raíz de todos los otros
elementos, además de ser el Principio que les permite “coexistir”, pues,
dentro de los cuatro elementos más conocidos, se presentan pares
antagónicos que es preciso mantener presente. De esta forma, en el universo,
todo lo que existe está compuesto por difeentes proporciones de estos
elementos o “estados”, pero no deben confundirse con los elementos
químicos ya mencionados.
En la tradición oriental, a estos principios se los conoce como Tattwas, y
junto con tener características de la misma naturaleza antes mencionada,
tienen símbolos que los representan.

Ahora, mayor extensión sobre cada elemento/tattwa:

ESPÍRITU: Éter; Lux.


Tattwa: Akash o Akasha.
Es el Principio Primero, a partir del cual nacen todos los otros elementos y, a
partir de ellos, la formación de todo el universo. Si bien no tiene una
manifestación propia en la naturaleza, es el principio vivo y activo presente
en cada uno de los elementos. Es la energía con la que cada elemento actúa
en su propia esfera de actividad; y es gracias a su participación que en Magia
o cualquier otra ciencia oculta es posible operar con los otros elementos. La
forma del Tattwa: un óvalo negro cuya parte más delgada mira hacia abajo.

FUEGO:
Tattwa: Tejas.
La forma del Tatwa: un triángulo equilátero de color rojo.
Es el principio activo-eléctrico. Es la fuerza máxima de expansión y
vitalización. Es el elemento de la transmutación, pues nada que haya sido
tocado por el Fuego vuelve a ser lo mismo. Como herramienta mágica, puede
trabajarse con fuego en distintos colores, para representar el cambio u
operación que se desea que éste realice. Es el elemento opuesto al Agua, por
naturaleza, y salvo que el aire esté presente, no podrán trabajar juntos, pues
mutuamente se anularían. Es el elemento “más puro”, pero no por ello el más
sagrado. En este sentido se debe aclarar que todos los elementos, sin
importar su naturaleza, son sagrados, y sirven a la Creación como
formadores y sustentadores.

Es el elemento de la vitalización, de la expansión, de la vitalidad, del poder,


de la fuerza y de la pasión. Da vida y calor. Es un elemento protector,
aportador de luz y claridad; aleja las tinieblas, en todos los sentidos
imaginables. En su aspecto negativo, es crueldad, despotismo, avasallador,
consumidor. Para explicar su efecto negativo, piénsese en las consecuencias
cuando el fuego se “sale de control”.
En los mitos, los dioses del Fuego, los Dioses de los Templos o los Dioses que
trabajan el metal son afines a este elemento, junto con los dioses y Diosas
que gobiernan sobre la pasión y el erotismo. En la tradición occidental, este
elemento es representado con el color rojo, y su complementario, el verde.
El Arcángel que lo rige es Miguel (Mikael).
El Àngel es Aral.
El Regente es Seraph.
El Rey Elemental es Djin.
Los espíritus elementales que habitan en este elemento son las
Salamandras.
El Arma Elemental: la Vara, símbolo de la Voluntad, recta, firme e
inquebrantable, y siempre fija en un solo objetivo.

AGUA:
Tattwa: Apas.
La forma del Tatwwa: una luna creciente recostada, de color plata o gris.
Es el principio pasivo-magnético. Es el elemento que sustenta la “vida
orgánica”, además de ser un elemento femenino por excelencia. La vida nace
del agua. A diferencia del fuego, es un elemento pasivo, armonioso,
tranquilizador, receptivo, magnético y sanador. Es el elemento de la paz, del
amor, de los sueños, de las emociones, del inconsciente y, por extraño que
parezca, el elemento de la vida y de la muerte. Como ya se dijo, la vida viene
del agua. En las antiguas tradiciones, se decía que el alma de los que parten
se encaminaba hacia el oeste, para “cruzar el río”. Además, al ser el agua el
elemento de la paz, no extrañe que la “última paz” sea por él regida. En su
aspecto negativo, el agua es oscuridad, posesión, depresión, pesadillas,
rencor. Como la sabiduría más antigua dice: “nunca dejes que el Agua se
estanque”.

En los mitos, el agua es el elemento afín a las Diosas del amor y el erotismo, a
los dioses de la muerte y a los Dioses y espíritus de las fuentes y manantiales,
relacionados con la vida, la salud y la juventud. En la tradición occidental, el
color de este elemento es el azul, y su complementario, el naranja.
El Arcángel que custodia al elemento agua es Gabriel, el Arcángel de la Luna,
que vela los sueños, la germinación y la maternidad.
El Àngel es Taliahad.
El Regente es Tharsis.
El Rey Elemental es Nicksa o Neksa.
Los elementales del agua son las Ondinas.
Arma Elemental: la Copa o Cáliz, símbolo de la quietud de las emociones,
necesaria para alcanzar los objetivos, sin dejarse llevar por los
desbordamientos emocionales.

Tanto la Vara como el Cáliz son los símbolos de lo masculino y lo femenino,


respectivamente, y son las herramientas simbólicas empleadas en las
ceremonias más elevadas en Magia, en la cual, la vara es el símbolo del
Espíritu Divino, que penetra en el ser humano, representado por el Cáliz.

AIRE:
Tattwa: Vayu o Vayú.
La forma del Tatwa: un círculo azul. Es el principio “equilibrador”, pues
permite la integración de Fuego y Agua, naturalmente opuestos. Representa
expansión, libertad. Tiene asociaciones con el sonido, la palabra y, por ende,
con el conocimiento y la sabiduría. Es el elemento de los oráculos y los
profetas, los que “escuchan a Dios”. No es extraño, bajo este prisma, que en
los mitos, los mensajeros de los Dioses siempre cuenten con elementos
aéreos como alas, gran velocidad o la capacidad de volar mediante mantos
mágicos hechos con plumas de aves. Es el elemento que rige la originalidad,
la extravagancia, la infancia, el ansia de expansión y libertad; la
comunicación, el conocimiento, los medios de información. En su aspecto
negativo, sin embargo, es inmadurez, locura, extravagancia llegando al
ridículo, dispersión, desconcentración.

En los mitos, los Dioses y espíritus intelectuales le son afín, así como aquellos
encargados del clima del invierno. El color de este elemento, en la tradición
occidental, es Amarillo, y su color complementario, el violeta.
Su Arcángel de regencia: Raphael, el “Sanador de Dios” y su punto cardinal:
Este, por donde nace el sol. Ambos son símbolos de la vida y el conocimiento
que entrega este elemento.
El Àngel es Chassan.
El Regente es Ariel.
El Rey Elemental es Paralda
Los espíritus elementales del aire, son los Silfos o Sílfides.
Arma Elemental: la Daga, símbolo de la agudeza de la mente y la
maniabilidad de ésta. Representa, al mismo tiempo, el doble filo que es una
mente no entrenada o no controlada.
TIERRA:
Tttwa: Prithivi o Pritiví.
La forma del tattwa: un cuadrado amarillo.
Es la fuerza estabilizadora, sustentadora. Si bien cada elemento puede actuar
de forma independiente, lo cierto es que ninguno puede manifestarse si no es
por medio de la Tierra, pues este elemento aporta las bases materiales para
cualquier manifestación. Es lo sólido, lo concreto, tanto en sentido simbólico
como literal. El agua es palpable a nosotros porque “cuenta con la tierra
suficiente” para hacerse manifiesta. Es, además, el elemento opuesto al aire,
por lo cual cuesta que trabajen juntos. Mientras que el aire es dispersión y
falta de concreción, la tierra es aterrizada, productiva.

Sin embargo, al igual que en el caso del fuego y el agua, ambos necesitan del
otro para evolucionar y funcionar operativamente. La tierra necesita de la
versatilidad del aire para poder adoptar nuevas formas y no estancarse o
permanecer indefinidamente en una determinada forma. Por otra parte, el
aire necesita de la densidad de la tierra para poder aterrizarse y manifestar
una idea, de lo contrario, sería demasiado volátil como para realizar
cualquier acción de valor. Así como el fuego necesita del agua para
apaciguarse y no devorarlo todo, el agua necesita del fuego para salir de su
estado de pasividad y entrar en acción. La Tierra es el elemento
estabilizador, concretor, asentador y quien otorga su forma final a cualquier
manifestación. En su aspecto negativo, se vuelve rigidez, obstinación; se
añeja, se envejece y no es capaz de adecuarse a las nuevas situaciones que se
le presentan.
En los mitos, a este elemento le son afines las Dioas y espíritus de la
naturaleza, de los bosques; Dioses y espíritus de la Tierra, del cultivo y los
sembrados. En occidente, a este elemento se le atribuye el color verde, y su
complementario, el marrón.
Su Arcángel de regencia, Uriel, el Guardián de las Cavernas Secretas.
Su Àngel es Phorlak.
Su Regente es Kerub.
El Rey Elemental es Ghob o Gob.
Los elementales de la tierra: los Gnomos.
Arma Elemental: el Pentáculo, representando la solidez y el soporte para las
otras herramientas. Es sobre el Pentáculo que se llevan a cabo las
consagraciones y las ofrendas.

Publicado por Grimorium del Mago en 14:52 No hay comentarios:


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Etiquetas: Magia Elemental, Teoría de la Magia

miércoles, 12 de septiembre de 2012


El Encantamiento del Viajero
"Un viaje de miles de leguas, comienza con un pequeño paso".

Con esas palabras de Lao Tze les presento uno de los primeros aportes prácticos a este blog.
Se trata de un encantamiento especialmente diseñado para protegernos antes de iniciar
cualquier experiencia en la cual nuestra conciencia vaya a "realizar un viaje". Lo podemos
emplear antes de practicar viajes astrales, viajes mentales, desdoblamientos, sueños lúcidos,
trabajo de trance o cuando vayamos en el bus camino al trabajo de regreso a casa.

Se trata de un Galdor, es decir, un encantamiento, una fórmula vervalizada, recomendada por


Diana Paxson antes de realizar los trabajos de trance, aunque a mi me ha servido para
protegerme durante la mayoría de los viajes, generando en mi esa sensación de estar
amparado frente a todo peligro.
Runa Sieg, Sòl, Sowilo, Sigel..

Tan sólo precisamos de un mínimo de concentración, visualización y conocer la Runa Sig, Sieg
o Sowilo, que será el signo invocado para montar guardia mientras nuestra mente despega. Si
dispones ya de una Vara, Daga o athame, también será útil, aunque también podremos trazar
los símbolos con la ayuda de los dedos índice y mayor de nuestra mano proyectiva (aquella
con la que escribimos), o dibujarlos mentalmente en caso de que estemos con más personas..

Inhala profundamente algunas veces, relajando tu cuerpo. Entonces, entona:

With this sphere I gird me round


(traza un círculo a tu alrededor en sentido horario con la vara, daga o con los dedos)
By God's grace may I be bound,
(puedes sustituir por "Diosa" o la deidad de tu preferencia)
Against sore stitch, against sore bite,
Against all horrors that haunt the night;
'Gainst dread that folk fear everywhere,
And loathly things that here would fare,
Sig-galdor I chant, Sig-rod is my stay,
(dibuja una runa Sieg en todas las direcciones)
Word-sig and work-sig ward today.
Not nightmare do my spirit harm,
No foe oppress, no fear alarm.
Nor wight, nor weather threaten me,
From danger defended I will be.
I bid the good God victory give,
Guarded so, save shall I live.

Esta es la versión original del encantamiento y, desde luego, adapté una versión en español
para mi y para aquellos a los que se las recomendé en su momento:

Con esta esfera que a mi alrededor ciño,


(traza un círculo a tu alrededor en sentido horario con la vara, daga o con los dedos)
en la gracia de los Dioses estoy contenido.
Contra el dolor que punza, contra el dolor que muerde,
Contra todos los horrores que la noche contuviese.
Contra el miedo la que la gente teme en todas partes,
y el veneno que naciera contra mí de malas artes.
Sig-galdor yo canto, el Sol yo dibujo,
(dibuja una runa Sieg en todas las direcciones)
en la Fuerza del Sol me rodeo y me escudo.
Malos sueños a mi espíritu ya no vuelven a dañar,
ni oprimiir los enemigos, ni los miedos alarmar.
No me dañan ni los hombres, ni tampoco tempestades,
frente al mal, frente al peligro, protegido de sus males.
Y a los Dioses poderosos, yo les pido la victoria
amparado, protegido, donde sea, a toda hora.

Una vez rodeado de la poderosa fuerza del sol, realiza la experiencia que desees, tranquili y
protegido.

er, querer, osar y callar.

↜ale ˢˢʲ07/23/17
⇘⇘⇙⇙
⇒ NECESITAS LEER EL BLOG, BIENVENID@⇐
⇗⇗⇖⇖
Ya e hablado sobre la frase "Saber, querer, osar y callar" y
sobre las enseñanzas de la esfinge en el ocultismo pero
encontré la siguiente información en internet y no podía
quedarme sin compartirselas. Puede parecer un blog largo
pero empieza a leerlo veras que al terminar no notaras lo
largo que fue y entenderás cosas nuevas.
≫ ──── ≪•◦ ❈ ◦•≫ ──── ≪
Dentro del estudio de las frases ocultas y los simbolismos en la masonería,
tenemos que el antiguo axioma ¨Nar Traba Hasui Ma¨, que se traduce del
hebreo en ¨Saber, Querer, Osar, Callar" tiene diferentes significados los cuales
muchos se pierden en la noche de los tiempos.
Se han efectuado diversos debates en torno a este tema y diferentes
estudiosos, ocultistas, herméticos, teósofos y demás miembros de diversas
escuelas iniciáticas, no se han puesto de acuerdo para llegar a una opinión
unánime.
Como toda cuestión en donde están involucrados los simbolismos y los
axiomas, debemos tomar lo mejor y lo que al final nos brinde alguna enseñanza
que nos sirva para proyectarnos en la vida y ser cada día mejores.
Veremos lo que antiguos estudiosos pensaban y lo que refieren algunos textos.
Dando mi opinión en algunos puntos para que la tomen a consideración.
Se dice que ¨Los iniciados son el Profeta y por lo que es prudente, ver es
saber, para saber está la voluntad, a la voluntad es atreverse, pero para
atreverse con éxito, debemos querer y saber ser silenciosos

¨ El destino no es una cosa inmutable, porque si no habría responsabilidad, por


eso es necesario SABER que los designios son impenetrables, pero que
tenemos una libertad para obrar en uno u otro sentido.
Nos es necesario QUERER el alimento espiritual a cualquier precio, nos es
necesario OSAR en el esfuerzo con pleno conocimiento del sendero difícil que
es preciso recorrer para alcanzar la iniciación, y por último es necesario
CALLAR acerca de las enseñanzas y meditar indispensablemente antes de las
decisiones¨.
Las antiguas Escuelas Teosóficas se refieren, como ya dije
anteriormente, a este tema.
Existen grandes e iluminadas personalidades que se han dedicado a tratar de
explicar el sentido de la vida, de donde surgió, hacia donde va, como es la
naturaleza que nos rodea y el Universo que nos circunda así como también
debería ser nuestra correcta conducta .
Tenemos a la figura de Alice Bailey, quién explicaba, desde su punto de vista, a
cada palabra por separado y al final como un todo.

Explicaba que ¨QUERER: esta palabra se relaciona con la última realización,


cuando por un acto de voluntad del alma, combinada con la del hombre inferior,
se produce la unificación y la comprensión.
Implica el centro en la base de la columna vertebral.
SABER: Esta palabra concierne al centro ¨Ajna¨, el centro entre las cejas. Hay
una insinuación en la frase ¨Que la Madre conozca al Padre¨. Se relaciona con
la boda en los cielos (Adán y Eva. N del A).

OSAR: Esta palabra da la clave de la subordinación de la personalidad y tiene


una intima relación con el plexo solar. El Gran Centro de distribución del Deseo
y de las fuerzas Astrales y el principal centro del trabajo de Transmutación.
CALLAR: Esta palabra contiene la transmutación de la energía inferior
creadora.
El centro sacro debe permanecer en silencio.
Debe recordarse que QUERER es la prerrogativa del espíritu, SABER es la
función del Alma, OSAR es el deber de la personalidad y CALLAR es el
¨Dharma¨ final o destino del aspecto de la materia, la naturaleza animal en su
interacción con el Alma¨.
¨El querer es el poder masculino del yo volitivo, y la ¨creencia razonada¨ es la
energía femenina de los sentimientos.
Para querer inteligentemente, hay que unir la palabra QUERER con el resto de
las palabras que forman el ¨Acróstico de los magos¨, esto es SABER,
QUERER, OSAR y CALLAR; con las cuales se pueden formar las siguientes
combinaciones:

SABER QUERER, QUERER SABER, OSAR SABER, SABER OSAR, QUERER


OSAR, OSAR QUERER, SABER CALLAR, QUERER CALLAR, OSAR
CALLAR, SABER SABER, QUERER QUERER, OSAR OSAR ¨
Como podemos observar, estas palabras tienen la cualidad de explicarse por sí
mismas y cada combinación nos devela una grandes enseñanzas.
¨La audacia unida a la inteligencia es la madre de todos los éxitos de este
mundo. Para emprender hace falta saber, para cumplir hace falta querer, y para
querer verdaderamente hace falta osar, de manera que, para recibir finalmente
en paz los frutos de la audacia, hace falta callar.
Saber querer osar y callar, son como hemos mencionado ya, los cuatro verbos
Cabalísticos que corresponden a las cuatro letras del TETRAGRAMA y a las
cuatro formas jeroglíficas de la ESFINGE.
El saber es la cabeza humana, osar se representa por las garras del León;
querer está indicado en los flancos laboriosos del Toro, y callar, en las místicas
alas del Águila.
El único que sabe mantenerse por encima de demás hombres, es aquel que no
prostituye a sus comentarios y a sus bromas los secretos de su inteligencia¨.
¨La ESFINGE, es un animal mitológico de las tradiciones de Egipto, Caldea y
Grecia. Tallado y esculpido en un solo bloque de granito rosado o en caliza
como las ESFINGES que provienen del serapeo de Memphis, a la cual se le
denominaba ¨El Gran Arcano¨.
La ESFINGE egipcia es la que se relacionaba con la Masonería, entre los
egipcios, se colocaban a la entrada de los templos con el fin de proteger los
misterios pues con su presencia advertían a los que penetraban en ella, que
debían ocultar sus conocimientos de los que no habían sido iniciados.
Se asocia todo esto con la palabra hebrea TSABHAN que significa: OCULTAR
(…).
El cuerpo del buey, las garras de león, las alas del águila y la cabeza del
hombre, representan los cuatro elementos que conforman el Microcosmos y el
Macrocosmos, que son El Agua, El Aire, La Tierra y el Fuego.
Nos recuerdan los cuatro viajes denominados ¨Iniciáticos¨ con algunas
pruebas.
Nos recuerda que es necesario que el candidato sea consecuente y comprenda
que el acto externo debe ser vivido en su interior.
En conclusión el simbolismo de la ESFINGE, significa:
SABER: Lo que se debe hacer
QUERER: Lo exacto
OSAR: En lo que se debe
CALLAR: Con discernimiento¨.
¨El adepto era llevado delante de la ESFINGE, conocía muy bien los tres
signos zodiacales (Aguador, Toro y León), pero en vano que trataba de
reconocer el cuarto signo fijo de la Astrología tradicional.
Solamente aquellos que estaban suficientemente iniciados en ¨Astrología
Esotérica¨ podían responder que el misterioso signo del Escorpión, estaba
representado por su octava mayor, el Águila, y según la explicación de esta
transformación, era entonces cuando se le autorizaba a entrar por la puerta
colocada en medio de las patas del animal de piedra e ir a la cámara de
meditación (situada en la cabeza), donde los grandes ojos se fijaban en el
nuevo discípulo.
Los ojos de la ESFINGE son vacios al exterior y miran al interior de la cabeza:
misterio de la introspección.
Estas cuatros grandes constelaciones, representadas en la ESFINGE denotan
todo el valor de la síntesis simbólica:
Aguador (Ciencia-Filosofía), Aire (Nar), Saber (La verdad del misterio)
Toro (Paciencia), Tierra (Trab), Querer (La justicia por el sacrificio)
León (Amor Nobleza), Fuego (Hasui), Osar (En razón de la fe)
Escorpión (Transmutación), Agua (Ma), callar (Sobre la realidad del dogma)¨
Algunos autores de textos de Masonería refieren, sobre el tema, sus
impresiones pero sin desvincularse totalmente de estos estudios esotéricos,
cabalísticos, herméticos etc.
¨EL PRIMER VIAJE. Para efectuar el reconocimiento del mundo interno o para
entrar en la Tumba de Hiram, el Maestro debe realizar su primer viaje, que esta
entrada simboliza.
En este viaje, examina los cuatro ángulos del Templo, donde se ven cuatro
columnas que sostienen las estatuas de las cuatro Divinidades; Minerva y
Apolo, en el Oriente; Hércules y Venus, en el Occidente.
Estas cuatro Divinidades simbolizan: la SABIDURÍA, la ILUMINACIÓN, el
PODER y la BELLEZA. También simbolizan los cuatro verbos del Mago:
SABER, OSAR, QUERER y CALLAR.
Minerva es la Diosa de la Sabiduría, primera condición del Maestro Secreto;
Apolo es el Padre de la Luz, que ilumina al Maestro para SABER OSAR;
Hércules es el Poder del sabio iluminado, que triunfa sobre sus debilidades
humanas; y Venus es la Belleza y el Amor Divino, en el Maestro Secreto, que
trabaja silenciosamente.
Así tenemos, por ejemplo, lo que citaba el Dr. Serge Raynaud de la Ferriere
(…)
¨De la misma manera que las tres caras de la Pirámide, (de base triangular N
del A.), reposan sobre una base común, el axioma reposa así:
La palabra Saber corresponde al Aprendiz con sus pruebas físicas.
La palabra Querer corresponde al Compañero con sus pruebas morales.
La palabra Osar corresponde al Maestro con sus pruebas intelectuales.
Y las tres tienen un deber común: Callar¨.
¨ el célebre axioma simbolizado por los cuatro signos fijos del zodíaco: El
Aguador, El Toro, El León y El Escorpión.
Estos cuatro signos son los puntos importantes del cielo, pues ellos marcan la
posición de las cuatro estrellas regias: Aldebarán (Ojo del Toro), Régulos
(Corazón de León), Antares (Corazón de Escorpión) y Fomalhaut (Boca del
Pez Austral).
Pero el simbolismo va más lejos.
El gran monumento esotérico de la meseta de Gizet no es, en manera alguna,
una arquitectura cualquiera.
Esta ESFINGE es una combinación de las iniciaciones egipcias, razón por la
cual ostenta una cabeza humana (EL Aguador), un cuerpo de Toro, patas y
cola de León. Este animal fabuloso tiene alas, además, para representar la
transmutación del Escorpión en Águila¨.
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Lo anterior es la gran recopilación que encontré en internet
sobre este axioma , la información es el punto de vista de
distintos autores estudiosos del ocultismo por ello se repiten
ideas vistas desde diferentes mentes, todas ellas llegando a
la conclusión de que estas enseñanzas tenían como fin la
iluminación. Hay un sin fin de autores que hablan sobre esto
a detalle mas ahora en nuestra era donde la información esta
a un solo clic pero mencionar a todos estos grandes
ocultistas haría el blog interminable.
El redactor de la pagina de internet termina con este texto
con el cual yo simpatizo mucho en sus ideas.
(...) ***Yo pienso que TODOS tenemos el DERECHO de CONOCER, de hecho,
gracias a la infinita sabiduría.
Poseemos las herramientas necesarias, en un comienzo, para comenzar el
viaje hacia lo insospechado y lo desconocido que culminará con la Gran
Transición.
QUEREMOS ese conocimiento (aunque no todos) y LUCHAMOS con todas
nuestras fuerzas para alcanzarlo.
Los agraciados que llegan a comprender parte de esa Sabiduría, deben
honrarla con el debido SILENCIO que merece ese caudal que a todos no nos
es dado.
Me sumo a las palabras de ese gran ocultista, filósofo y sacerdote Alphonse
Luis Constantino (Eliphas Levi) el cual citó:
¨El Ser es lo que Es y no se perfecciona más que siguiendo las leyes reales del
Ser. Observemos, no prejuzguemos; ejercitemos nuestras facultades, no la
falseemos; ensanchemos el dominio de la vida; ¡veamos la verdad en la
verdad! Todo es posible a aquel que quiere solamente lo que es verdadero.
¡Permaneced en la naturaleza, estudiad, sabed y después osad; osad querer y
callaos!¨ ***
La serpiente siempre gana.
El talento no se puede imitar.

TEMPERAMENTO NERVIOSO
Manos: Frías, secas, tirando a huesudas.
Dedos: Lisos, largos, ahuesados o cónicos.
Líneas: Finas, bastante numerosas y no claras.
Quienes poseen estas características, son personas
con una imaginacion desbordante, creativas,
brillantes, meticulosas, escesivamente detallistas,
pero sin facultad de realización y tienden a exagerar
en sus impresiones.
TEMPERAMENTO BILIOSO
Manos: Secas, calientes y duras.
Dedos: Largos, lisos, gruesos, cónicos o de
espátula.
Lineas: Profundas, numerosas, bien dibujadas y
largas.
Personas autoritarias, ambiciosas, muy susceptibles
y de voluntad fuerte. Bastante nobles y su forma de
actuar es lenta y metódica.

TEMPERAMENTO LINFÁTICO
Manos: Húmedas, frías, mas bien blandas.
Dedos: Cortos, nudosos, cuadrados o de espátula.
Lineas: Largas o cortas, escasas.
Son coléricos, pero se saben controlar, glotones y
sensuales. Tienen pocos proyectos, son apáticos,
indiferentes. Muy calmosos.

TEMPERAMENTO SANGUÍNEO
Manos: Calientes y húmeda, duras o elásticas.
Dedos: Cortos, nudosos, cuadrados o ahuesados.
Lineas: Fuertes, bien dibujadas, poco numerosas.
Son personas paternalistas, protectores, muy
cambiantes en sus impresiones, de ideas obsesivas,
rápidos de acción, vitales y resistentes

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