Cap.

El lamento del campo

En él año de 1965 en el campo se encontraba una familia con formada por

Manuel Montero un niño de 14 años, su padre Jorge Montero, su madre luz
Fernanda Correa y pequeña hermana Luciana, la familia se encontraba muy
alegre ya que estaban celebrando el cumpleaños número 10 de Luciana, la
familia tuvo su rato de felicidad ya alegría, sin embargo en ese tiempo se
presentaban problemas en el país los cuales habían provocado la creación de
grupos armados, uno de ellos era conocido como las FARC “fuerzas armadas
revolucionarias de Colombia”, este grupo en esos momentos se encontraban
rondando por esas zonas reclutando jóvenes y llevándoselos a los montes para
obligarlos a portar armas.

Una noche cerca del pueblo comenzaron a escucharse tiroteos y gritos en las
afueras de este, todo el pueblo se encontraba en silencio escuchando los
horroroso sonidos que venían de afuera, sin embargo esa noche nadie salió
haber lo ocurrido, luego de que todo ese tormento paso, la familia montero logro
conciliar el sueño, al día siguiente en el pueblo vecino se encontraban cadáveres
regados por todo el lugar, la señora luz se dirigió a la casa de su hermano José
Correa que se encontraba cerca de allí, al llegar se encontró con él, su esposa e
hijo envueltos en miedo por lo ocurrido la noche pasada, su hermana trato de
calmarlos durante un largo tiempo, hasta que después de unas horas logro
conseguirlo, luz les ofreció que se quedaran en la casa de ella por si los militares
volvían, pero ellos se negaron pensando que solo ocurriría en esa ocasión, ya
que creyeron que habían logrado su cometido, la señora luz después de insistir
varias veces, acepto el no como respuesta de su hermano y familia, ella regreso
a su hogar pero con el mal augurio de que les pueda pasar algo a la familia de
su hermano y a él.

Esa misma noche después de haber cenado y haber hecho su oración, Manuel y
su familia se dirigieron a sus camas a dormir, desgraciada mente esa noche de
igual forma que la anterior también se comenzaron a escuchar disparos y gritos
que venían de fuera, la familia nuevamente no pudo dormir hasta que el alboroto
se calmara.
El día siguiente a la madrugada, justo antes de que el madre de Manuel fuera a
trabajar, llego el hermano de luz con una herida en el abdomen provocada por
un arma de fuego y envuelto en llanto, luz y Jorge lo atendieron y lo ayudaron
en lo que más pudieron para curar sus heridas, sus padres le pidieron a Manuel
y su hermanita que por favor salieran de la casa y que fueran a jugar a otra parte,
ellos al principio se negaron, pero la madre le replicó que lo hiciera subiendo el
volumen de su voz, manuel y su hermana salieron de la casa, sin embargo ellos
nos pudieron quedarse con la intriga de lo que había ocurrido con su tío y
ocultos detrás de la ventana empezaron a escuchar lo sucedido, al parecer, los
militares volvieron la noche anterior e intentaron llevarse a su hijo, José y su
esposa hicieron lo posible para evitar que esto ocurriera a jose el propiciaron un
disparo en el abdomen y un golpe en la cabeza que lo dejo inconsciente y al día
siguiente cuando despertó lo único que encontró fue el cadáver de su esposa e
hijo en un lago de sangre.

Luz le pidió a José que se quedara en la casa de ella, el al principio se negaba

pero al ver que no podía moverse mucho por la gravedad de sus heridas decidió
quedarse, de ahora en adelante su tío viviría con ellos.

Pasaron varias semana de lo ocurrido con José y desde ese día no se han vuelto
a escuchar ni disparos ni gritos, la familia estuvo viviendo tranquila durante un
periodo de tiempo, pero las cosas buenas no duran para siempre, una de las
noches cuando ya se encontraban dormidos, los ruidos olieron a hacerse
presentes, pero con la diferencia de que no se escuchaban a lo lejos del pueblo,
si no que más bien se oían en el pueblo, la familia montero paso una noche muy
desagradable con el miedo de que en cualquier momento pudieran pasar por la
puerta y cortar su vida.

Milagrosamente la noche paso y no ocurrió ningún evento en la casa de los

montero, pero al salir por las calles del pueblo con lo único que se encontraron
fue con cadáveres de sus vecinos y sus familiares llorando sus pérdidas, la
familia lo único que podía esperar es no ser el próximo, lamentablemente, las
cosas no se dieron como se esperaba, esa misma noche los militares volvieron
y como si hubiera sido una predicción, entraron por la puerta de los montero y
de la mima forma en que hicieron en la casa del tío José, intentaron llevarse el
joven Manuel, los padres y tío pusieron resistencia de la misma forma en la que
lo hizo José, pero desgraciadamente fue en vano ya que en el intento le
propiciaron una herida al padre de Manuel en una el estómago y a su tío los
asesinaron con una balazo en la cabeza, Manuel pierde el conocimiento en ese
momento debido a un golpe provocado por un arma que sostenía uno de los
militares que había entrado a su casa.

Cap. 2

El diario de un campesino

Manuel despertó con un horrible dolor de cabeza producido por el golpe que
le habían provocado, él se sentía desorientado porque no sabía en donde se
encontraba, de un momento a otro un hombre se le acercó y le dio un plato de
comida y le pregunto su nombre y su edad, Manuel no quiso contestar pero de
igual forma recibió la comida, el hombre estuvo tratando de interactuar con el
sin ningún efecto, minutos después, otro hombre que cargaba con él una
pistola se acercó al lugar en donde estaba Manuel y le pidió que se levantara y
lo acompañara, Manuel al principio de negó, pero al ver la actitud con la que
el hombre le estaba hablando, le produjo bastante miedo y obedeció la orden,
él fue llevado a un campo en el que se encontraban más niños de su edad, en
este lugar a Manuel y los demás infantes presentes se le dio una charla sobre
la razón por la cual estaban en ese lugar , las ordenes que debían cumplir y lo
que debían y no debían hacer para mantenerse con vida.

Después de toda esa charla que recibió se sentía más asustado que antes y
pensaba en cómo se podría escapar de ese lugar, hizo varios intentos y se
esforzó mucho para conseguirlo pero para des fortuna suya no pudo lograrlo,
con forme pasaba el tiempo Manuel se estaba acostumbrando a los mandatos
que se establecían en ese lugar pero aun así el seguía con el pensamiento de
salir de ahí, y cada día pensaba en un nuevo plan, pero de alguna u otra forma
estos nunca le resultaban y siempre volvía a fracasar, después de un tiempo
Manuel ya se había acatado a las normas de aquel lugar, e incluso ya había
perdido toda esperanza de poder escaparse de allí hasta que un día hubo un
ataque sorpresa y el al reaccionar lo que primero pensó fue:

(ESTA ES MI OPORTUNIDAD PARA IRME DE AQUÍ)

Así que sin siquiera pensarlo él se levantó de su lugar para dormir y empezó a
escabullirse en medio del ataque que se había presentado, y cuando ya casi
está llegando a la salida, uno de los hombres para los que él trabajaba lo
alcanzo a ver y empezó a dispararle, así que él se levantó y empezó a correr
hacia los adentros del bosque, ya que sabía que en esa zona ellos no se
adentraban y menos en la noche, después de un largo trayecto corriendo paro
un momento a descansar y a verificar que ya no estuviera en riesgo de ser
capturado nuevamente, después de un rato se dio cuenta que estaba muy lejos
de aquel lugar, decidió pasar hay la noche ya que sabía que estaba a salvo y
seguro de que no iba a ser capturado de nuevo.

Al despertar sentía como si lo estuvieran vigilando, así que salió de ese lugar
lo más pronto posible, después de mucho caminar decidió sentarse a la orilla
de un rio a beber agua, cuando de repente empezó a escuchar disparos que se
acercaban cada vez más al lugar en el que él estaba, sin pensarlo comenzó a
correr lo más rápido que pudo sin mirar hacia atrás, encontró unas cuevas y
decidió esconderse hay para poder descansar un momento, después de un rato
no escuchaba nada así que decidió salir a verificar que no hubiera nadie, pero
al salir de esa cuerva alcanzo a ver un grupo de hombres armados y a lo lejos
reconoció uno de ellos, eran los hombres que lo tenían cautivo, sabía que si
Salía a correr por esos lados seria capturado nuevamente, tenía que pensar una
forma de salir de ese lugar sin ser visto por esos hombres

Manuel no hallaba que hacer y escucho unos pasos que se adentraban en la

cueva donde le se refugiaba, se asomó ligeramente sobre una de las rocas y
vio que eran ellos, se puso muy nervioso y lo único que quería hacer era salir
de ahí lo más pronto posible