por Gilly:
Equipo 1
11/febrero/2019
Como una muy breve recapitulación de lo revisado en clase en el texto de Katz1,
recordemos que Francisco I. Madero en conjunto con algunos movimientos armados
lograron la victoria en Ciudad Juárez y con la firma de los Tratados del mismo nombre el
21 de mayo de 1911, se dictó el exilio de Porfirio Díaz y de la burguesía allegada a él.
Sin embargo, el documento también conservaba instituciones del régimen y no establecía
nada respecto a cambios sociales o reformas agrarias. Se vio este hecho como la
consumación de la revolución maderista, y por tal motivo se pidió a los movimientos que
abandonaran las armas.
Según Miguel Ángel Gallo T2, puede entenderse a estos tratados como una transacción
entre porfiristas y maderistas para evitar que el movimiento revolucionario se saliera de
control, hacia una revolución social contraria a los intereses burgueses.
Madero se habría reunido con Zapata el 7 y 8 de junio de 1911 para discutir su política
respecto a la cuestión campesina. Solicitaba, como menciona Katz:
1
Katz, Friedrich. “Orígenes, Estallido y Fase inicial de la Revolución de 1910”, en Lorenzo Meyer (compilador),
Revolución y Sistema. México 1910-1940, México, SEP, 1987, pp. 66-98.
2
Gallo T., Miguel Ángel, “Unidad I. Crisis del sistema y reconstrucción del Estado mexicano 1900-1940”, en México
1910-2010. Historia de México 2 por competencias, México, Ediciones Quinto Sol, 2014, pp. 39.
2
Paulino Martínez, periodista opositor, publicó a finales de octubre el Plan de Tacubaya,
donde declaraba nulas las elecciones que daban el triunfo a Madero y a Pino
Suárez, se declaraban disueltas las Cámaras de la Unión, llevaba a la presidencia
a Emilio Vázquez Gómez y abordaba el tema de la tierra mencionado que el
problema agrario era el causante de los males del país y la población y que debía
resolverse. Ninguno dio resultado, solo hubo algunas aprehensiones.
El acuerdo entre Madero y Zapata no fue respetado por el gobierno provisional, que envió
tropas federales e irrumpieron en el estado de Morelos. Es por esto por lo que justo
después del triunfo de Madero, Emiliano Zapata, escogido como representante del
movimiento agrario del sur, se levanta en su contra proclamando el Plan de Ayala el 28
de noviembre de 1911.
Declara a Madero traidor del Plan de San Luis, lo desconoce como jefe de la revolución
y como presidente de la República; nombra en su lugar a Pascual Orozco como jefe de
la revolución y en caso de no aceptar, al general Emiliano Zapata y llama a continuar el
movimiento revolucionario. Contiene 15 artículos que exponen los objetivos de la rebelión
agraria de los zapatistas:
3
Durante su gobierno se enfrentó en dos escenarios: contra aquellos porfiristas que
buscaban recuperar el poder, gestado por admitir en su gobierno a ex porfiristas,
reconocidos dentro del grupo de “los científicos”; y contra los movimientos campesinos
radicales que buscaban la reforma agraria, iniciando por el cumplimiento del artículo 3ero
del Plan de San Luis.
Su gobierno fue caracterizado por tolerar la libertad de prensa, recibiendo duras críticas
a su gobierno, pues la administración de El Imparcial, por ejemplo, seguía siendo
porfirista.
Buscó resolver los conflictos por la vía legal y pacífica, pues buscaba enseñar al pueblo
a ejercer sus libertades. Alentó la organización de los trabajadores a través de la
legalización del sindicato y la huelga, lo que resultó en una insurgencia obrera: la
presencia de una ola de huelgas de 1911 a 1912, teniendo impacto en las compañías
norteamericanas en México.
4
con su postura política moderada, creó su propio ejército, al que se unieron maderistas y
zapatistas inconformes. Fue financiado en armas por compañías norteamericanas y
apoyado por terratenientes conservadores de Chihuahua, que esperaban aprovechar el
movimiento revolucionario para desestabilizar al gobierno existente y obtener ventaja a
sus intereses. En el Manifiesto del 25 de marzo expusieron las razones de su lucha y las
demandas agrarias norteñas, basadas en la experiencia agraria de Chihuahua, donde la
tierra no se poseía colectivamente.
Vale la pena esbozar la relación del gobierno maderista con Estados Unidos para
idealizar el panorama precedente a los violentos hechos ocurridos en el intempestivo fin
de su gobierno.
5
Esto aunado a expresiones antinorteamericanas que habían hallado cabida en la libre
prensa y a la “incompetencia o falta de deseo” de Madero por mitigar la insurrección en
el campo, gestó desde marzo de 1912 una relación áspera que revelaba la postura de
oposición por parte de Estados Unidos: la prensa del país lo presentaba como incapaz
de poner ley y orden en México, otorgó armamento a sus connacionales en México y
apoyo a los intentos de golpe contra el gobierno maderista, como ya se mencionó
anteriormente, sentando de esta forma las bases para una invasión norteamericana en
algún momento determinado.
Así, el embajador Henry Lane Wilson participó en la conspiración contra Madero, donde
participaron Rodolfo Reyes, hijo del general Bernardo, Manuel Mondragón y otros
militares.
3
Bolívar, Rosendo, “El ascenso al poder: La decena trágica”, en La presidencia interina de Victoriano Huerta,
México, Instituto Politécnico Nacional, 1999, pp. 37, 47.
6
Se produjeron movimientos simultáneos a favor de los maderistas por parte de los
alumnos de la escuela militar y de algunas personas que a pesar de no ir armadas, se
unieron con todo sentido de pertenencia al maderismo. Estos movimientos se situaron en
Tlalpan y Tacubaya.
Por el actuar de Huerta, el general Ángeles comentaría “Huerta estaba conduciendo las
operaciones de manera tan disparatada, que su conducta parecía más que sospechosa.”4
Madero es alertado de tal conspiración en su contra, más se muestra incrédulo.
1. Manifiesto a la nación firmado por él y por Félix Díaz que anunciaba que el ejército
asumía la autoridad para garantizar la salvación de la patria.
2. Telegramas a los gobernadores de los estados y jefes políticos anunciando que
autorizado, falsamente, por el Senado asumía el Poder Ejecutivo.
3. Nota oficial al presidente de la Cámara de Diputados con dicho informe y
solicitando convocar al Congreso de la Unión.
Ese mismo día, se reunieron en la embajada norteamericana Henry Lane Wilson, Félix
Díaz, Huerta y otros conspiradores, acordando derrocar a Madero para que Huerta en un
4
La traición de Huerta y la muerte de Madero, en el Museo de la Revolución Mexicana, visitado el 27 de enero de
2019.
7
gobierno provisional convocara a elecciones favorables a Félix Díaz. Este acuerdo es
conocido como El Pacto de la Embajada.
Ese mismo día, Huerta recibe telegramas de los gobernadores estatales y jefes militares
aceptando su gobierno, excepto de Sonora, Chihuahua y Coahuila, estados que tenían a
sus órdenes fuertes núcleos armados.
El 22 de febrero de 1913, no les concede el exilio y Madero y Pino Suárez son asesinados
cuando eran trasladados a la penitenciaría de Lecumberri, dando fin a La Decena Trágica.
Victoriano Huerta.5”
5
Ibid, p. 48.
8
¿Quién fue Victoriano Huerta?
José Victoriano Huerta Márquez.
De familia humilde, con raíces indígenas, militar y político. Nacido en Colotlán, Jalisco,
en el año de 1845. Su carrera como militar comenzó cuando ingresó al Colegio Militar de
Guadalajara, ascendiendo por el escalafón del ejército. Fue empleado como “secretario”
del general Donato Guerra, gracias a ello, logró tener lazos con Bernardo Reyes.
A pesar de que Huerta no tuvo “la mejor” educación o los mejores recursos para obtener
un buen reconocimiento en la escuela militar, obtuvo graduarse con el primer lugar junto
con honores, en el colegio militar.
Consideraciones finales:
6
Bolivar, Rosendo. “Introducción y conclusiones”, en La presidencia interina de Victoriano Huerta, México, Instituto
politécnico nacional, 1999, pp 9, 10, 11 y 91.
7
Salmerón, Pedro. 29. ¿Quién fue Victoriano Huerta?, en Cien preguntas sobre la Revolución Mexicana, México,
Rosa Luxemburg Stiftung y Para Leer en Libertad A.C., 2014, p. 62.
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Referencias.
Gallo T., Miguel Ángel, “Unidad I. Crisis del sistema y reconstrucción del Estado
mexicano 1900-1940”, en México 1910-2010. Historia de México 2 por competencias,
México, Ediciones Quinto Sol, 2014, pp. 39.
11