Como consecuencia del pecado original, nuestra vida en la tierra
termina con la muerte. Adán pecó y entró el pecado en el mundo, y por el pecado la muerte.
Pero no todo termina con la muerte. El alma, que es inmortal,
se separa del cuerpo, pero sigue viviendo y recibe de Dios el premio o castigo merecido por sus obras hechas durante su vida terrena. Al fin del mundo resucitarán nuestros propios cuerpos y se unirán a sus almas. Entonces nuestro Señor Jesucristo vendrá con gloria y majestad a juzgar a todos los hombres, unidas ya las almas a sus propios cuerpos, para nunca más morir.
¿Qué es la muerte?
La muerte es la separación del alma y del cuerpo.
¿Qué quiere decir resurrección de la carne?
Resurrección de la carne quiere decir que, como Cristo resucitó,
así también nosotros resucitaremos al fin del mundo, volviendo a unirse nuestras almas con nuestros propios cuerpos, para nunca más morir.
¿Para qué resucitará nuestro cuerpo?
Nuestro cuerpo resucitará para ser juzgado juntamente con
nuestra alma y recibir el premio o castigo eterno según hayan sido las obras que hiciera el hombre con su cuerpo y su alma. Jesús Vuelve Con la segunda venida de Jesucristo se instalará definitivamente el Reino de Dios y será vencido para siempre el poder del mal y del demonio.
No sabemos el tiempo de la segunda venida de Jesucristo; Dios
no ha querido revelarlo. Quiere que estemos siempre bien preparados para ese encuentro con El.
Con el retorno del Señor Jesús están relacionados: el fin del
mundo presente, la resurrección de los cuerpos y el juicio universal. Jesucristo será el justo Juez que dará a cada uno según sus obras.
¿Volverá el Señor a aparecer visiblemente en la tierra?
Sí, el Señor Jesús volverá a aparecer visiblemente en la tierra al
fin del mundo, cuando venga a juzgar a los vivos y a los muertos.
¿Sabemos cuándo será el fin del mundo?
No sabemos cuándo será el fin del mundo; en consecuencia,
siempre debemos estar preparados.
¿Qué entendemos al decir que vendrá a juzgar a los vivos
y a los muertos?
Al decir que vendrá a juzgar a los vivos y a los muertos
entendemos que el Señor Jesús al fin del mundo juzgará a todos los hombres y dará a cada uno el premio o castigo que hubiere merecido. El Espíritu Santo El Espíritu Santo es la tercera persona de la Santísima Trinidad, que procede del Padre y del Hijo.
Jesucristo prometió a los apóstoles que les enviaría el Espíritu
Santo, el cual les recordaría y les ayudaría a entender todo lo que Él le había dicho.
El día de Pentecostés, estaban todos los Apóstoles reunidos en
un mismo lugar, y de repente se produjo un ruido del cielo, como de un viento impetuoso que llenó toda la casa donde residían. Aparecieron lenguas de fuego como divididas que se posaron sobre cada uno de ellos.
La acción del Espíritu Santo en los Apóstoles los hizo fuertes,
audaces y santos para anunciar el Evangelio con fidelidad a todo el mundo.
La Iglesia quedó constituida en templo del Espíritu Santo; Él la
santifica y hace que los bautizados se unan a la Santísima Trinidad.
¿Quién es el Espíritu Santo?
El Espíritu Santo es la tercera persona de la Santísima Trinidad,
que procede del Padre y del Hijo, quienes lo enviaron al mundo para vivificar y santificar a los hombres.
¿Cuándo envió Jesús el Espíritu Santo a su Iglesia?
Jesús envió el Espíritu Santo su Iglesia el día de Pentecostés, en
forma de lenguas de fuego, sobre los Apóstoles y María Santísima.
¿Qué indicaban las lenguas de fuego?
Las lenguas de fuego indicaban que el Espíritu Santo venía a
santificarnos por medio de la luz de la verdad y el calor del amor.
¿Cómo nos santifica el Espíritu Santo?
El Espíritu Santo nos santifica por medio de la gracia, de las virtudes y de sus dones.
¿Qué son los dones del Espíritu Santo?
Los dones del Espíritu Santo son disposiciones permanentes,
infundidas por Dios, que hacen al hombre dócil, para seguir los impulsos del Espíritu Santo.
¿Cuáles son los dones del Espíritu Santo?
Los dones del Espíritu Santo son: Sabiduría, entendimiento,
Consejo, Fortaleza, Ciencia, Piedad y Temor de Dios.