SE NECESITA:
Mantequilla sin sal (de buena procedencia)
Olla de acero inoxidable o de vidrio
Cuchara de madera
Paño de algodón fino (para colar)
Frasco de vidrio de boca ancha, debidamente hervido/esterilizado.
PREPARACIÓN:
Se pone la mantequilla en la olla a fuego lento y se va removiendo para derretirla.
Durante todo el proceso se deberá ir removiendo constantemente y evitar que la
mantequilla se queme.
Al hervir, se va a empezar a formar una espuma blanca, retirar cuidadosamente la
espuma (residuo de grasa saturada). Mantener a fuego lento. La mantequilla se va
a ir haciendo más líquida y de un color más dorado y empezará a oler a galleta
horneada o nuez.
Una vez que ya no se forma la espuma (debe verse el fondo de la olla), se
comprueba que ya no tenga agua, para esto se ha de hace "la prueba del algodón";
se retira la olla del fuego y se toma un trocito de algodón o un bastón de algodón de
los oídos, se moja un poquito el algodón en el ghee y se comprueba directamente
en el fuego si chisporrotea. Si ya no chisporrotea es que ya no hay agua y está listo.
Todavía tibio y líquido, colar la preparación directamente al frasco de vidrio, con un
paño de algodón fino (en el colador van a quedar todos los restos de los sólidos
lácteos, proteína y demás residuos de la mantequilla).
Se deja enfriar sin tapar y a medida que se va enfriando tomará consistencia y se
solidificará (en verano quedará menos consistente y en invierno quedará un poco
más duro como la mantequilla, aunque la textura siempre será algo granulada).
Se puede conservar indefinidamente, por varios meses, desde que esté
adecuadamente almacenado.
Al igual que los vinos, cuanto más tiempo guardado intacto, más valioso y apreciado
se torna. Sin embargo, puede ser usado de inmediato y una vez en uso, no puede
ser contaminado con alimentos, agua o impurezas. Jamás se debe meter una
cuchara o cualquier utensilio mojado o sucio dentro del ghee, para evitar la perdida
de la calidad o generar el crecimiento de hongos.
El ghee puede ser usado como mantequilla, como aceite o como aliño sobre los
alimentos cocidos, además de ser un medicamento muy respetado en la medicina
Ayurvédica. No necesita refrigeración para conservarse.
Se utiliza tanto para cocinar, como para la piel y para fines médicos, ya que tiene
muchas propiedades y beneficios.