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Hoy en nuestra sección de artes marciales os sugerimos cómo identificar auténticas espadas

japonesas, bien sea para vuestra práctica marcial, bien para su incorporación al kamiza de un
dojo o por el simple placer de coleccionarlas, si vuestros ingresos os lo permiten. Pues, ante
todo, recordamos que una espada japonesa, Nihonto, es un objeto de Arte puro, consideración
que le corresponde por derecho propio pues su fabricación es un proceso de enorme
especialización en el que intervienen un gran número de artistas considerados maestros en sus
disciplinas. https://www.facebook.com/EmbajadaJaponEspana/videos/1837895989632238/

Es conveniente tener presente esta premisa a la hora de iniciarse en el coleccionismo o si se


valora la adquisición de una de estas piezas para la práctica de artes marciales relacionadas
con el sable, pues la cantidad de material falso y sucedáneos que circulan, no son comparables
en absoluto a una genuina pieza japonesa. Deben tenerse en cuenta múltiples factores y
analizar con minuciosidad cadauno, a la hora de determinar la originalidad y legitimidad de
una auténtica espada japonesa con respecto a la de la ingente cantidad de réplicas,
falsificaciones y subproductos que se presentan como katanas, o mejor dicho "con aspecto de
katana", y que a la postre se acaban ofreciendo al potencial comprador como objetos
originales de calidad museística, por cuantiosas cantidades de dinero como si de un genuino
nihonto se tratase.

Actualmente, en internet, RSS y determinados portales, se anuncian piezas que por su


descripción parecen proceder del mismo tesoro imperial, haber pertenecido a los más bravos
samurái o ser dignas de ocupar los mejores espacios en los más prestigiosos museos, avaladas
en ocasiones incluso por determinadas asociaciones que no son más que un invento del
vendedor que está detrás y que carecen de cualquier tipo de credencial. Piezas que en el mejor
de los casos, aún siendo japonesas, poseen calidades deficientes y
presentan multitud de graves defectos o han sido equipadas con monturas koshirae no
japonesas de pobres acabados, con piezas del kodogu, por ejemplo
las tsuba (guardas), alteradas o modificadas en talleres para conferirles una historia y un valor
del cual carecen por completo y por supuesto no realizadas en los materiales tradicionales y
las técnicas ortodoxas que dicen presentar, siendo en muchas ocasiones un producto
directamente falso.

Al igual que se dijo en referencia a las falsas escuelas de artes marciales, no debe cundir el
pánico, pues existen algunas pautas a seguir para descubrir a estos vendedores de crecepelo
milagroso y detectar la gran mayoría de falsificaciones, al menos las más flagrantes y
deficientes tanto en su acero como en su montura koshirae.

1- Documentarse.
Es complicado encontrar bibliografía en español y también es comprensible que alguien que
quiera comenzar a coleccionar por afición, no tenga todo el tiempo del mundo para estudiar
en profundidad un tema tan complejo como el del nihonto, pero bien es cierto que siempre se
puede acudir a alguna fuente escrita de cabecera que permita al menos esbozar una idea
básica. En cuanto a internet es muy complicado delimitar cómo establecer un patrón de
referencia dada la ingente cantidad de información existente, pero siempre hay
webs y foros de referencia consolidados y perfectamente fiables donde encontrar textos de
calidad. A parte de esto y por la escasa información existente en español, se puede preguntar a
instituciones o agencias gubernamentales tal es el caso de la Embajada de Japón o Fundación
Japón, o la Asociación española para la preservación de la espada y tradiciones antiguas
(SNTKK), en las cuales conocen a algunos de los pocos especialistas que hay en España y
pueden orientar al respecto.

2- Observa.
En un nihonto cada pieza está fabricada por un maestro formado y especializado en una
disciplina durante años, lo que a la postre deriva en unos acabados con unas cotas de calidad
suprema y una destreza formidable en el
trabajo de materiales tradicionales que requieren una dedicación vitalicia. Por ello tan
importante es la originalidad y calidad de las piezas, como la manufactura y ensamblaje de
todo el conjunto, hoja y montura koshirae. Esto es algo que ha definido el carácter y las señas
de identidad de estos objetos desde hace cientos de años hasta la actualidad, siendo el
momento presente una época de grandes maestros y estando la espada moderna shinsakuto
muy valorada y por tanto falsificada.
Por ello es importante observar en detalle, analizar si los acabados están a la altura del precio
que se pide, buscar indicios que delaten un trabajo pobre, malas terminaciones y acabados en
los lacados generalmente realizados con sucedáneos de la laca tradicional urushi o
directamente con pintura para coches, piezas alteradas como tsuba con añadidos de aspecto y
temática sospechosa, marcas de ácido en las hojas o malas geometrías y deficientes
proporciones.

3- Pregunta y vuelve a preguntar.


Una vez se ha seguido este camino, es muy posible que se sigan teniendo muchas dudas dada
la complejidad del tema, pues lo que para un no iniciado puede parecer perfectamente
legítimo, un experto rápidamente puede
detectarlo como una falsificación o un subproducto de calidad deficiente con materiales de
segunda y acabados inadmisibles . Por eso, siempre se puede preguntar y una vez se ha hecho,
volver a hacerlo en todas y cada una de las dudas que puedan surgir, tanto de la pieza en su
conjunto como de cada una de las partes por separado que la conforman, pues no es extraño
encontrar híbridos que usan hojas replicadas a las que añaden monturas fuera de Japón en las
que incluyen algunas partes japonesas para confundir y hacer más difícil la identificación del
engaño.

Aparte de todo esto, es muy concluyente el lenguaje técnico utilizado y el grado de


profundización en la información aportada. Hay quien se limita a utilizar descripciones
estándar para prácticamente definir todas las piezas de su catálogo, utilizando siempre
coletillas similares del tipo, “pieza de museo”, “pieza rara”, o “restauración de calidad de
maestro japonés”, cuando la
realidad es bien distinta y en la información importante no aportan apenas datos, muchos son
incorrectos o directamente no saben interpretar un papel adjudicando documentos a piezas
que corresponden a otras.

Como conclusión, apelar a la cautela y dar pasos en firme basados en la documentación y la


información comparada y revisada, la compra de un nihonto de calidad conlleva un
considerable desembolso económico y merece la pena perder algo de tiempo en investigar y
pedir información a expertos y organismos de confianza, antes de creer ciegamente en lo
primero que nos puedan decir o hacer creer como bueno y terminar adquiriendo un pedazo de
hierro inservible como algo magnífico por una elevada suma.

Incluimos una serie de fotos explicativas sobre armas originales japonesas. Las fotos y
esquemas son obra del profesor Antonio Clemente Ferrero, uno de las mayores autoridades de
España en el Arte del Nihonto.

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