El proyecto contemplado realiza un estudio en el marco de eficiencia
energética, a través de indicadores que permiten analizar su comportamiento. Para realizar la selección de los indicadores, se lleva a cabo un procedimiento que permite identificar cuáles de ellos generan más impacto frente al consumo de energía eléctrica, incremento en costos y emisiones de gases contaminantes, al hacer el análisis en el sector residencial. A continuación, se establece un caso de estudio identificando el estado actual de un conjunto residencial, y estableciendo escenarios de entrada de vehículos eléctricos e incluyendo un modelo probabilístico para el porcentaje de carga de las baterías. Tras este proceso, se identifican los problemas presentes en el conjunto residencial a partir de la evaluación de los indicadores, y se procede a elaborar un plan de acción en función del aumento de la eficiencia energética. ENSAYO La creciente preocupación por el uso de combustibles fósiles y el impacto negativo que estos generan en el medio ambiente, la dilapidación de energía y la seguridad del servicio, han forzado a los gobiernos, comunidades científicas y académicas, y demás organizaciones a generar nuevas estrategias para contrarrestar estos efectos . No es una opción seguir involucrando las centrales térmicas ya que producen gran cantidad de emisiones de CO2 tampoco las grandes centrales hidroeléctricas, debido al impacto social y ambiental que causan, ya que se involucra la desaparición de fauna, flora y grandes extensiones de los ecosistemas, además de desplazamiento de comunidades. En este sentido, como estrategias se propone la eficiencia energética ya que ésta presenta beneficios económicos y ambientales, además de la facilidad para disponer de ella y el uso intensivo de tecnología limpia, que es considerado uno de los mecanismos de gran importancia para la disminución de gases contaminantes que van a la atmosfera .
Uno de los sectores más influyentes para acrecentar esta preocupación es el
de transporte, debido al uso desmedido de recursos no renovables y al aumento de las emisiones de CO2. Según la Agencia internacional de Energía en 2014, las emisiones de los países que conforman la OECD, un total de 32 países, entre los que se encuentran los más desarrollados, determinaron que los gases de efecto invernadero (GEI) que se atribuyen al transporte alcanzaron el 29 % de las emisiones [5]. Bajo ésta tendencia, se pronostica que éstas lleguen al 40 % en el año 2035 [6]. Por tal motivo, es común escuchar acerca del cambio de motores de combustión por motores eléctricos y de alta eficiencia de los tipos IE2 e IE3 como parte de la solución Países como España Alemania, Países bajos, Suecia, Italia, entre otros han presentado grandes avances en la investigación y desarrollo de un nuevo modelo de energía en el que se involucran energías renovables, modelos para la carga de VE, gestión y eficiencia energética, con base en la mejora de los sistemas actuales e implementación de nuevas tecnologías . Todo con el fin de ayudar a disminuir los índices de emisiones contaminantes a la atmósfera y el consumo masivo de combustibles fósiles. En Colombia, se están promoviendo leyes que permiten la llegada de nuevas tecnologías de tipo no convencional, tanto para el sector de transporte como para la generación de energía eléctrica además de Programas para Uso Racional y Eficiente de la Energía que permiten el ingreso del concepto de eficiencia energética (EE) en el sector eléctrico nacional.
Colombia también ha sufrido los efectos del cambio climático; se han
presentado fenómenos cruciales que han desencadenado crisis energéticas: una de gran magnitud en el año 1992, la cual fue causada por el fenómeno del niño que ocasionó sequias en las hidroeléctricas del país. En dicha ocasión, el gobierno decidió como plan de contingencia implementar el racionamiento de energía. Así mismo, hacer cambios de los horarios laborales para cambiar los patrones de consumo y obtener un ahorro energético [16]. De otro lado, durante los años 2015 y 2016 se presentó de nuevo el fenómeno del niño, el cual ocasionó que en el año 2016 se crearan planes de acción como incentivos económicos en las facturas de energía y multas por consumo excesivo de energía, además de fuertes campañas educativas a través de medios de comunicación. Todo esto, con el fin de que los sectores residencial, comercial e industrial, alcanzaran una meta de ahorro energético nacional del 5%