Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Artículos
de
reflexión
Revista Educación y Desarrollo Social
Bogotá, D.C., Colombia - Volumen 3 - No. 1
Enero - Junio de 2009 - ISSN 2011-5318
Págs. 160-172
Conocimiento, investigación
y liderazgo en educación
Yolanda M. Guerra G. Ph.D.* - yolanda.guerra@unimilitar.edu.co
La particularidad de la erística fue haberse pre- ella misma hizo merecedor al Sabio del honor
ocupado exclusivamente por refutar todo lo de morir envenenado con cicuta. Ahora bien,
que decía el adversario, sin tener en cuenta los como el conocimiento interior de cada ser
conceptos de verdadero o falso. Lo importante humano, era una labor que solamente podía
era triunfar aún a costa de la verdad. El fin de llevarse a cabo por cada uno de manera indi-
un discurso era el de convencer a los oyentes vidual, se concluye que el estudio de la verdad
inexorablemente, no se manejaba el concepto tiene que empezar por la reflexión en el propio
de valores absolutos sino meramente relativos. Yo. Pero no para quedarse en egoísmos estéri-
Con el tiempo esta escuela degeneró en lo que les sino para trascenderlo con el propósito de
hoy conocemos como el “sofisma” y sus prac- mejorar la sociedad. De esta manera llegamos
ticantes son los sofistas, quienes a sabiendas de al conocimiento de que el saber puro no es un
estar enunciando una falsedad, continuaban fin en sí mismo sino el medio que permitirá
con su discurso en pos de inducir finalmente al hombre actuar de conformidad con normas
al público al error y lograr generalmente un morales (Dharma en sánscrito) y así llegar a
triunfo político o un beneficio personal. Los una hipótesis básica del planteamiento de
planteamientos de los sofistas son solamente Sócrates, el cual es: la virtud es una ciencia y
lógicos en apariencia y tienden a distraer al como tal puede ser enseñada y aprendida.
escucha de lo que realmente es cierto o prio-
ritario. Acaso los programas de algunos de los El modelo de conocimiento
así llamados políticos de nuestro tiempo basen de Sócrates
su discurso en este método.
El método de enseñanza de Sócrates era el diá-
En este estado de cosas, los hombres se habían
logo, el cual buscaba que el individuo llegara
apartado del deseo de conocer la verdad; la
a su interior hasta que efectivamente se cono-
atención en el estudio de las preguntas verda-
ciera a sí mismo, para descubrir la verdad y el
deramente importantes había cedido a otros
bien. Partía de la base de que las doctrinas no
intereses banales. En estas circunstancias,
pueden ser impuestas desde afuera, el hombre
apareció el maestro Sócrates, quien dio a
rechaza lo que le es ajeno, por lo menos al
la filosofía, a la educación y a la vida de los
nivel del subconsciente. El diálogo permitía
hombres en general, un nuevo esquema de va-
lores centrado ya no en prebendas particulares al maestro entrar en contacto con el discípulo
sino en lo común, lo universal. Por ello para buscando una verdad incluso para el propio
conocer lo universal, es necesario estudiar el maestro. Adicionalmente al diálogo, Sócrates
interior del hombre. emplea dos métodos, conocidos universal-
mente y practicados con relativo éxito debido
particularmente al enorme grado de confianza
Sócrates
personal, sabiduría y destreza que demandan
“Conócete a ti mismo” parecía ser la simple del docente. Esos métodos eran la Ironía y
respuesta a todos los interrogantes de la exis- la Mayéutica. El punto de partida era el re-
tencia y sus alrededores. No obstante haber conocimiento de la ignorancia del discípulo,
sido aquella una teoría aparentemente sencilla, quien si se negaba a hacerlo con la habitual
Conocimiento, investigación y liderazgo en educación - Yolanda M. Guerra G. Ph.D
Revista Educación y Desarrollo Social - Bogotá, D.C., Colombia - Volumen 3- No. 1 - Enero - Junio de 2009 - ISSN 2011-5318 163
arrogancia del sabelotodo, simplemente en- ró enemigo del pueblo. Sus discursos de que
traba en un ritmo de preguntas y respuestas la verdad estaba en el interior de cada uno,
con su maestro hasta que se contradijera de eran un escándalo en su época (y tal vez ahora
tal modo que la audiencia entrara en hilaridad también lo sean para algunos). Se le acusó de
general. Siembra la duda para despertar el corruptor de la juventud y de cometer actos
deseo de pensar y de saber, decía Sócrates. Esta impíos al igualarse a los dioses y no respetarlos.
primera etapa de hacer que el interlocutor se Y se le condenó a beber la mortal cicuta.
convenciera de su propia ignorancia se conoce
como la Ironía. En su famoso discurso de defensa, La Apología
de Sócrates, el hijo de la comadrona solamente
La segunda etapa era la Mayéutica. El funda- argumentó que, si efectivamente mostrarle a
mento de esta fase radica en que todo hombre la juventud de lo que era capaz, de sus valores
posee la verdad en el fondo de su alma. Por internos y de su fuerza transformadora de
eso, la labor del maestro está en hacer por la sociedad, era corromper a los hombres,
medio de preguntas y respuestas, que el dis- entonces no solamente era culpable de ello,
cípulo se vuelva sobre sí mismo y haga brotar sino además de otros tantos delitos atroces
de su interior la verdad y los conceptos de las que igualmente propugnaban por hacer que
cosas. Sócrates incluso fingía ser ignorante en el hombre mirara dentro de su interior para
un determinado tema para poder interrogar encontrar la respuestas a las eternas preguntas
a su discípulo libremente, sin que aquel se sobre la verdad y el conocimiento. Por supues-
sintiera prevenido. Como dice Platón al citar to este discurso enardeció aún más las mentes
a su maestro, usualmente Sócrates decía: “Yo ignorantes de los juristas de la época que no
nada sé y soy estéril; pero te estoy sirviendo de alcanzaban a entender el verdadero propósito
instrumento y por eso hago encantamientos, de sus palabras y a la madrugada, sin que le
para que puedas dar a luz en tu mente”. temblara el pulso, Sócrates procedió a beber
la cicuta.
El secreto del conocimiento
en Sócrates
Modelos de conocimiento
Sócrates partía de la base de que sus discípu- postsocrático
los eran líderes, eran quienes en un futuro
mediato se convertirían en maestros de otros Después de Sócrates vinieron Platón, Aristóte-
discípulos que a su vez continuarían con la les y otros tantos. Cada cual tuvo un método
labor de hacer una mejor sociedad, un mejor de enseñanza de las ciencias diferentes entre
Estado, con el simple hecho de conocerse a sí, aunque en principio influidos por Sócrates,
sí mismos. La participación del alumno en el maestro directo de Platón. Estos filósofos
las clases era activa, era de hecho el centro de se apartaron del conocimiento interior como
atención, era el protagonista que encontraba respuesta a la verdad y se dedicaron a enseñar
en su interioridad las verdades ocultas sobre las ciencias con preguntas y respuestas, a las
cualquier aspecto de la vida y de la política en cuales, con el tiempo, se añadieron largas
general. Sin embargo, a Sócrates se le conside- caminatas a través del Liceo, dando con esto
Conocimiento, investigación y liderazgo en educación - Yolanda M. Guerra G. Ph.D
164 Revista Educación y Desarrollo Social - Bogotá, D.C., Colombia - Volumen 3 - No. 1 - Enero - Junio de 2009 - ISSN 2011-5318
nombre al nuevo método de enseñanza, el de la época acataron sus palabras como una
sistema peripatético. verdad incuestionable.
cuatro o cinco el número total de materias curso, existen los exámenes normales, los cuales
que se verán por semestre. Una vez ha hecho en su mayoría son estilo ICFES. Es decir, con
su elección, el estudiante se presenta al aula un cuadernillo que ya contiene las respuestas
de clase, en los casos en que la educación es de selección múltiple por lo general. El estu-
presencial, y procede a escuchar las palabras diante promedio sabe que tiene sus derechos,
del profesor por lo menos en la primera clase. conoce de antemano las limitaciones humanas
Sin duda, (el profesor) inexorablemente se del profesor y no espera que la verdad le sea
dirigirá a la clase para establecer la primera traída a sus manos ya sea en bandeja de plata
regla del juego: La verdad o el conocimiento o de plástico.
de la materia no es un dogma y el profesor
simplemente será el instrumento para facilitar El conocimiento en los países
la adquisición de información que brindará al de la periferia
estudiante suficientes bases para que él mismo
(el estudiante) saque sus propias conclusiones El profesor brasileño Paulo Freire también
y se aproxime a su verdad. Luego hace una trata el tema de la educación y el aprendizaje
sugerencia bastante amplia en cuanto a se- de las ciencias sociales en países que no han
lección de lecturas apropiadas y el estudiante sido vinculados con los procesos de desarrollo
procede a apersonarse de su propio proceso de y donde la aprehensión del conocimiento dista
‘educación’. mucho de las ópticas utilizadas en los países
mencionados en párrafos anteriores. En la
Según se va avanzando en la escala de conoci- obra, Pedagogía del Oprimido, el profesor Freire
mientos, es decir de un grado universitario a plantea cómo el llegar al conocimiento de la
un Ph.D., pasando por todas las especializa- verdad y, en particular al estudio de las ciencias
ciones y maestrías posibles, el proceso de edu- sociales, es por demás, una labor dispendiosa y
cación construccionista y de sacar sus propias frustrante. Especialmente porque el interesado
conclusiones se intensifica. Igualmente el rol en aprehender y manejar los conocimientos se
del maestro es activo, cambiante, obliga a la considera en posición inferior a la del docente
actualización constante, porque aunque sea y ello es un error gravísimo en el proceso y en
tomado como el instrumento, esta obligación el método del conocimiento. Sin embargo, ha
conlleva la más alta responsabilidad: sugeren- sido aceptado por generaciones y aún ahora se
cia de lecturas, análisis de conclusiones, guía viene practicando.
para encontrar los contenidos, manejos de
Básicamente, lo que ha sucedido en países
TICS, etc.
como México o Colombia y todos los que se
En culturas acostumbradas a la lectura diaria, encuentran en el medio, es que a la llegada de
esto no parece ser un problema inicialmente. los españoles se estableció en nosotros la cul-
El único bemol radicaría en que el estudiante tura del “despojo”, como la bautizó el profesor
debe ser lo suficientemente acucioso como Miguel Ángel Cornejo. Esta cultura se basa en
para encontrar su propia verdad de manera la hipótesis de que todo lo que yo me encuentre
idónea y que ella responda a los parámetros es mío y por consiguiente tengo mejor derecho
de objetividad deseados. Por supuesto, en cada que incluso el verdadero dueño, el cual ya sea
Conocimiento, investigación y liderazgo en educación - Yolanda M. Guerra G. Ph.D
Revista Educación y Desarrollo Social - Bogotá, D.C., Colombia - Volumen 3- No. 1 - Enero - Junio de 2009 - ISSN 2011-5318 167
por negligencia u otro factor, ha permitido años después, esa disposición a recibir todo lo
el acceso directo o indirecto de otros a sus que nos quieran dar como nos lo quieran dar
bienes. Esto tiene dos connotaciones que han (a veces nos dejan de dar eso mediocre si hay
marcado muchos aspectos de la vida diaria protesta), y al miedo a lo desconocido se suma
del ciudadano corriente, entre ellas y tal vez el miedo de expresarse y el miedo al rechazo
de las más graves: una connotación altamente del grupo.
negativa en el proceso de aprendizaje y otra en
el sentimiento de culpabilidad e inferioridad Consecuencias de la influencia
constante en el discípulo. española en los métodos de
Los sociólogos que se han dedicado al estu- aprendizaje
dio de las consecuencias de la conquista en el
En el fenómeno del conocimiento y de la
temperamento de los herederos de las gene-
educación, se ve reflejada ampliamente la
raciones conquistadas, han determinado que
los descendientes de los pueblos sometidos influencia española. El estudiante promedio
presentan características constantes y bastan- no “cree” en sí mismo y en sus capacidades,
te marcadas, siendo entre otras: el carácter pero lo que es peor: No lo sabe. El estudiante
doblegado y con tendencia al sometimiento, promedio en estos países, que el maestro Díaz
el escepticismo hacia el merecimiento de un Arenas llamaría de la “periferia”, está más que
futuro mejor, la falta de participación en las acostumbrado a que el profesor llegue y dicte
decisiones importantes de la comunidad, su clase, en el mejor de los casos para ellos y
carencia de identificación con una Patria y la para él también, o acaso en el mayor de los
falta ostensible de fe en sí mismo. Por consi- silencios.
guiente, la falta de autoestima es natural y la Sin embargo, la transmisión de información
tendencia al sentimiento de culpabilidad que de una fuente a un receptor no es la función
nos sembraron con la violencia desarraigó en primordial de la educación. Es claro qué
los descendientes de las víctimas directas de
es o qué satisface al estudiante promedio
la conquista la confianza y la seguridad en sus
y también al profesor promedio. Bien lo
capacidades y potencialidades.
dice Witker, citando a Marc Belth: “Si la
Como ya mencioné, la secuela de ser despo- educación tuviera como única obligación
jado abrupta y violentamente de lo nuestro, llevar a cabo la transferencia de información,
a manos de alguien que reclama un mejor y si el conocimiento fuera resumido de una
derecho, a través del tiempo y sobre todo manera completa y sencilla, la función de la
de la costumbre (que va directamente al enseñanza sería extremadamente simple y el
subconsciente), creó, en las mentes de los alumno se encontraría en una posición, que
habitantes de los países “descubiertos”, el de él mismo saberlo, sería desesperada”.
miedo y la tendencia a la sumisión, de la cual
no hemos podido despojarnos todavía. Esta La enseñanza en América Latina
tendencia a no revelar lo que nos disgusta
y lo que se considera injusto por miedo a Las ideas del brasileño Freire referente a la
castigos terribles, provocaría, aún quinientos educación en América Latina se sintetizan así:
Conocimiento, investigación y liderazgo en educación - Yolanda M. Guerra G. Ph.D
168 Revista Educación y Desarrollo Social - Bogotá, D.C., Colombia - Volumen 3 - No. 1 - Enero - Junio de 2009 - ISSN 2011-5318
vigentes. Realmente no les interesa para Por último, se encuentran los líderes. Aquellos
nada el país, el entorno, la familia, la patria, seres responsables de su propio destino que
los valores y en general hacer algo por el creen que países como el nuestro tienen espe-
planeta o cuando menos por sí mismo. Son ranza porque creen en sí mismos y, por supues-
rudos, creen que están rompiendo esquemas to, están dispuestos a actuar a costa incluso del
haciendo declaraciones silentes con su cabello rechazo del grupo, que como en épocas de Só-
despeinado y lleno de gel, su forma de vestir, crates podría propiciar la muerte del individuo.
de pintarse las uñas de negro por ejemplo, po- Cosa que todos creemos por demás abolida (la
nerse piercing en diferentes partes del cuerpo. muerte por las diferentes creencias).
Generalmente “cuestionan” con altanería y
arrogancia todos los esquemas, podrían tam- Son estudiantes que cuestionan al docente con
bién llamarse desadaptados, pero en realidad respeto y dentro de marcos de conocimiento y
no se identifican con la sociedad de la cual de manejo de tecnologías, respeto por los dere-
no quieren hacer parte. No reconocen, sino chos de autor y otras actitudes ejemplares que
una autoridad supranacional globalizada y buscan ir más allá. Son activos, responsables de
tecnificada en el celular, el IPod, blackberry, su propio aprendizaje y disfrutan de la libertad y
Internet, la música que escuchan –que en del esquema agradable y dialogado de las clases
realidad para algunos no es música, como la donde ambos (docente y estudiante) buscan
cultura rap-. Son irreverentes, irrespetuosos la verdad y la construyen juntos. No critican
con los profesores y con los “mayores”. Tal los sistemas, sino que buscan implementarlos
vez son producto de las primeras generaciones y mejorarlos a cada instante. Son milagros del
de madres que trabajaron y no estuvieron cielo que a veces no se encuentran en ninguna
presentes en el hogar acompañando el proceso Academia por más que busquemos. Sin embar-
de crianza, o tal vez sean producto de la nueva go, están allí, al menos eso es lo esperado.
sociedad del conocimiento y la tecnología en
donde el 10% de la capacidad del cerebro ya La función del docente
se perdió porque no se usa con la tecnología
actual. Desconocen la historia de su país y de En la época de la tecnología, es un pecado
sus líderes y no les importa más que su propio mortal –como dirían los católicos- que el
interés personal, su vida sexual incipiente y docente no sepa manejar con propiedad los
que manejan sin precaución, sus angustias y servicios que ofrece la Internet y la tecnología.
sus ambiciones personales. Es lamentable seguir con cátedras magistrales
que no se sirven de TICs. o de un video beam,
También manejan el esquema corriente donde un computador portátil, ayudas de punta e
el profesor da su cátedra magistral y desapare- investigación científica para ofrecer mejores
ce dejándoles fotocopias que luego no leerán, instrumentos de preparación y de conoci-
pues no leen tampoco –sin mencionar que miento al estudiante.
no respetan los derechos de autor tampoco-.
Los esquemas de liderazgo basado en méritos La función del docente, sobre todo en las cien-
propios les molestan –pues les toca trabajar cias sociales, es servir de instrumento para que
más duro de lo normal- y los invita a la indis- el estudiante se dé cuenta de que es un líder. Ya
ciplina. no son los tiempos de las cátedras magistrales
Conocimiento, investigación y liderazgo en educación - Yolanda M. Guerra G. Ph.D
170 Revista Educación y Desarrollo Social - Bogotá, D.C., Colombia - Volumen 3 - No. 1 - Enero - Junio de 2009 - ISSN 2011-5318
donde el profesor se dedica a estudiar un tema permitir el cambio participativo de las socie-
de la materia asignada y a recitarlo para que los dades. Al decir del maestro Confucio: “Desde
estudiantes tomen nota y se sientan felices al el hombre más noble hasta el más humilde,
final del semestre o del año académico porque todos tienen el deber de mejorar y corregir su
“aprendieron lo suficiente”. Hecho éste, que propio ser en pos de un mejor Estado. “Ser
medirán según el volumen de las notas que docentes en tiempos de precariedad es de las
tomaron, las cuales recitaraán a su vez. actividades más prístinas, nos permite, por
El docente debe ser maestro y permitir que el un instante, tener frente a nosotros todo el
estudiante se conozca a sí mismo a través de potencial de un futuro mejor reflejado en las
los diversos métodos de conocimiento posible. caras de los estudiantes a los que podemos
Particularmente la motivación positiva hacia hacer volar, si sabemos cómo permitirles ver
la investigación y el estudio independiente. El en su propio interior el potencial y la certeza
docente debe estar preparado para impartir de que puede hacerlo.
con éxito una clase para líderes de las que
reclaman nuestros países tercermundistas. Sin Conclusiones
embargo, a veces las razones por las cuales
Los estudiantes pueden empezar a creer en
algunas personas se dedican a la docencia no
ellos mismos, si les damos la oportunidad y
son claras y ello redunda en mediocridad. En
los instamos a lograrlo. Es pues, pertinente,
la docencia actual, no son necesarios las ame-
sembrar hábitos de lectura (aunque sea una
nazas, ni la violencia o el irrespeto. En un país
página cada noche antes de dormir), empe-
de miedos represados, necesitamos de amor
zando por el docente. Las clases deben ser
más que de látigo para crear futuro. Necesita-
participativas, retantes, novedosas. Se acabó el
mos inculcar el sano hábito de la lectura más
que del seguimiento a palabras difusas, para dogma y el temor reverencial. La libertad es
formar seres humanos capaces de cambiar el difícil de manejar si no se tiene la disciplina
destino de los pueblos. Necesitamos mostrar y la responsabilidad para manejarla. En la
a nuestros discípulos, que ellos son los líderes medida que como docentes sepamos brindarla,
que estamos esperando y por los que pedimos paralelamente podemos ayudar a que con la
cada mañana y cada noche. práctica el estudiante pueda actuar con liber-
tad, responsabilidad, entusiasmo y disciplina.
Es de la naturaleza humana que unos conduzcan
y otros sean conducidos. El líder es quien crea Todos tenemos tanto que aprender, parti-
el efecto voluntario del seguimiento, lo logra cularmente los educadores, sobre todo si
con su altruismo, su entrega desinteresada, su tomamos en cuenta que nuestra conducta es
valor y fe en sí mismo y en los demás. Todos ejemplo para los que nos rodean. Son tiempos
tenemos la semilla de ser líderes. Depende del de cambio, de adaptación a las tendencias
maestro encontrar semillas de futuro para un globalizantes, es menester buscar lo mejor en
país más satisfecho, en las generaciones nuevas. cada uno. En la medida que cada ser humano
El docente, debe asumir su papel de interme- reconozca que la verdad se encuentra en su
diario entre el conocimiento y el estudiante, y interior y que respete en los otros el mismo
Conocimiento, investigación y liderazgo en educación - Yolanda M. Guerra G. Ph.D
Revista Educación y Desarrollo Social - Bogotá, D.C., Colombia - Volumen 3- No. 1 - Enero - Junio de 2009 - ISSN 2011-5318 171
principio, los grandes males que aquejan a las y, así mismo, somos responsables de nuestros
sociedades modernas podrán desterrarse. procesos educativos. No conducirá a buen
puerto esperar pasivamente que las autorida-
Los estudiantes necesitan comenzar a apasio- des nos brinden condiciones dignas en índices
narse por la investigación. Es necesario darles de empleo y bienestar. Así no funcionan las
la oportunidad de manejo a las generaciones cosas, somos nosotros los hacedores de un
posteriores y para ello los esquemas de ense- mejor futuro ahora mismo. Esto lo ilustró
ñanza deben someterse a escrutinio del ojo mejor el presidente Kennedy cuando se dirigió
altruista que debe buscar en ellos fines de a una nación que, inconforme, le reclamaba
mejoramiento integral en el individuo. Este un futuro mejor: ¡“La pregunta correcta no
esquema, como docentes, nos hace mejores, es qué puede hacer este país por mí. La pre-
nos obliga a la búsqueda continua de la ex- gunta correcta es qué puedo yo hacer por este
celencia. Aristóteles decía que la excelencia país...”!
es un estado mental que se refleja en todas
nuestras actuaciones por pequeñas que sean y Referencias
que definitivamente NO se improvisa. Sócra-
tes nos llevaba con humildad y sabiduría por Cicourel , A. (1982), El método y la medición
un viaje misterioso y lleno de maravilla hacia en sociología, Madrid, Editorial Naciona.
el interior de nosotros mismos, donde el saber Gadamer, H. G. (1977), Verdad y método,
es ilimitado. En la filosofía hindú, hay un pre- Salamanca, Editorial Sígueme.
cepto que todos parecen conocer desde tiempo
García, J. F. (1994), “Biología del conoci-
inmemorial y que aplicó Gandhi con éxito en
miento, ciencias naturales y ciencias sociales”.
la liberación de la India como colonia inglesa.
En: Revista de Sociología No. 9, Facultad de
Quien pretenda someter a los hombres por la
Ciencias Sociales, Universidad de Chile.
fuerza de las armas no alcanzará la sumisión de
sus corazones- Por ello, la violencia nunca es -----------. “Acción humana y ley; crítica a la
suficiente para dominar a los hombres. Quien unidad metodológica de las ciencias”. En:
conquista a los hombres por la virtud y con el SCHUSTER, F. G. (comp.).
ejemplo, consigue que todos se sometan a él Habermas, J. (1990), “Teoría analítica de la
sin reservas y con corazón alegre... ciencia y dialéctica”. En: La lógica de las cien-
Necesitamos líderes y allí están. Solamente es cias sociales, Madrid, Ed. Taurus.
menester mirar a nuestro alrededor y darles la Hempel, C. (1981), “La explicación en la
oportunidad a los estudiantes. Fomentemos ciencia y en la historia”. En: Teoría de la histo-
la excelencia como hábito, desde la esquina ria, México, Editorial Terra Nova.
neutral del diario vivir donde nos escondemos
Lévi-Strauss, C. (1977), Antropología estructu-
de la vida. No es sano esperar con tristeza,
ral, Buenos Aires, EUDEBA.
mansedumbre y sobre todo el desarraigo de
que el Estado solucione los problemas o que Maturana, H; VARELA, F. (1984), El árbol
el docente sea el portador de la verdad y nos del conocimiento, Santiago, Editorial Univer-
la traiga. El Estado lo hacemos todos nosotros sitaria.
Conocimiento, investigación y liderazgo en educación - Yolanda M. Guerra G. Ph.D
172 Revista Educación y Desarrollo Social - Bogotá, D.C., Colombia - Volumen 3 - No. 1 - Enero - Junio de 2009 - ISSN 2011-5318