2018

Carlos Alberto Gutiérrez Rondón

Universidad Autónoma del Caribe
Ingeniería de Sistemas
Tecnología de Sistemas II
24/11/2018
 PROTOCOLO DE INTERNET VERSIÓN 6

Al utilizar internet para cualquier actividad, correo electrónico, navegación web, descarga

de ficheros o cualquier otro servicio o aplicación, se utiliza un protocolo denominado

Protocolo de Internet (IP). En los últimos años la versión más comercial ha sido el IPv4

(versión 4); sin embargo, el agotamiento de las direcciones IPv4 ha impulsado la transición

a IPv6 cuyas direcciones están formadas por 128 bits, en comparación con los 32 bits del

IPv4, admitiendo cerca de 670 mil billones de direcciones por cada milímetro cuadrado de

la superficie de la Tierra. En vez, de cuatro conjuntos de números de uno a tres dígitos que

utiliza IPv4, IPv6 usa ocho grupos de cuatro dígitos hexadecimales separados por dos

puntos.

El Grupo de Trabajo de Ingeniería de Internet en 1998 creó IPv6, sin embargo, hasta 2002

se podría decir que desplegó, pues ya se podía considerar estandarizado en los aspectos

básicos. Los proveedores de contenidos iniciaron sus primeros pasos en el año 2006,

anticipándose Google, Facebook, Netflix, Yahoo, CNN, entre otros.

El IPv6 trajo consigo características benéficas como nuevo formato de encabezado, espacio

de direcciones más grandes, infraestructura de direcciones y enrutamiento eficaz y

jerárquica, configuración de direcciones con o sin estado, seguridad integrada, mejora de la

compatibilidad para la calidad de servicio, nuevo protocolo para la interacción de nodos

vecinos, y capacidad de ampliación.

En IPv6 existen varios tipos de direcciones, categorizándolas, principalmente, como

Unicast, designar una interfaz única en IPv6 y subdividiéndose en Globales y Locales de

Enlace ; Multicast, identificador para un grupo de interfaces (normalmente en diferentes

nodos); y Anycast, dirección asignada a más de un interface (que normalmente pertenecen a

diferentes nodos).

La escabilidad es otro punto de diferencia y mejora entre IPv4 e IPv6, puesto que las

direcciones más largas (como las de IPv6) permiten una entrega jerárquica, sistemática, y

eficiente agregación de rutas. Con IPv6, cambiando el prefijo anunciado por unos pocos

routers es posible en principio reasignar la numeración de toda la red, ya que los

identificadores de nodos (los 64 bits menos significativos de la dirección) pueden ser

autoconfigurados independientemente por un nodo. Una dirección IPv6 tiene tres niveles

jerárquicos, topología pública (48 bits), identifica a los proveedores de la conexión a int.;

topología de la organización (16 bits), identifica a la organización a la que pertenece el

nodo IP; e identificador de la interfície (64 bits), que identifica inequívocamente a un nodo,

se utiliza para autoconfiguración.

Otras de las ventajas de IPv6, además de las abundantes direcciones IP asignables, para als

empresas supone reducción de gastos de operación de red y la TI, la aparición de

propuestas de productos más sofisticados, protección de inversión, la autoconfiguración

facilita la gestión y reduce gastos, flexibilidad y simplicidad, capacidad de extensión,

seguridad intrínseca por los mismos protocolo es de seguridad, la optimización de la

eficiencia en la externalización y la globalización continua. Otro tema importante de hablar

es el internet de las cosas, una de las proposiciones de valor más importantes de IPv6 es que

abre las puertas a la emergencia de la “Internet de las cosas”, una red que interconecta

objetos comunes equipados con módulos de inteligencia miniaturizados. El enorme espacio

de direcciones IPv6 permitirá conectar los electrodomésticos inteligentes, los dispositivos

móviles y los servicios que conformarán esta Internet de las cosas. Los futuristas han

especulado que la “Internet de las cosas” podría resultar en una de las transformaciones más

radicales de la historia de la civilización desde la Revolución industrial. Además, IPv6

disminuye drásticamente el coste del desarrollo de aplicaciones, tanto por el hecho de no

utilizarse NAT, como por otras características como la autoconfiguración y la

extensibilidad del protocolo.

Y por si esto no fuera suficiente, el despliegue de IPv6 genera nuevos puestos de trabajo,

dado que se requieren más ingenieros cualificados e indirectamente programadores con la

capacidad de crear nuevas aplicaciones y servicios en la red, que también conllevan nuevos

puestos de trabajo y el crecimiento económico.