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Una pelea de gallos o riña de gallos es un combate que se lleva a cabo entre dos gallos de
un mismo género o raza de aves denominada "aves finas de combate", propiciados por el
ser humano para su disfrute.
Las peleas de gallos se remontan la época antes de Cristo. Sin embargo, antes de que se
convirtiera en un deporte, el gallo, era visto como un ave admirable, respetado por el
hombre. Parafrasearé: En la antigüedad los gallos de pelea era tema de adoración religiosa
en diversos países.
El origen de estas peleas está en Asia. En China ya se celebraban hace 2500 años y es
posible que mil años antes se hicieran en la India. En la Antigua Roma eran usadas para
adquirir valentía. Posteriormente, esta práctica fue llevada a América por los
conquistadores españoles.
Aunque estas peleas se iniciaron en el continente occidental, la mayoría de prácticas se
desarrollan aquí en América, y mayormente en países latinoamericanos y estados unidos.
En la mayoría de estos países, esto es un acto ilegal, prohibido por la sociedad protectora
de animales, ya que, según esta sociedad, esto es un deporte cruel e inhumano, y
consideran, debería ser sancionado por la ley cualquier persona encontrada practicando
el mismo.
Normalmente se lleva a cabo en un coliseo, donde el ave que demuestra mejores
cualidades en el combate se declara como ganadora, para ello debe dejar a su adversario
inhabilitado para seguir peleando.
Se realiza la pelea en tres rounds de 5 minutos cada uno, no existen reglas sobre los
golpes, pues los animales no las entenderían. El amo del gallo no puede entrar a la arena
por ninguna circunstancia, a menos que el gallo caiga, en ese caso, el entrenador entrara
a la arena para reanimarlo, para lo cual solo cuenta con 60 segundo, de lo contrario se
dará por terminada la pelea, y gana automáticamente el gallo de pie.
No existen características específicas para un gallo de pelea, pero algunos comentarios de
personas interesadas en este deporte dicen que los gallos solamente deben estar bien
entrenados, bien alimentados y deben ser resistentes ante una pelea.
DESARROLLO:
En el acto cruel de las peleas de gallos, dos pobres animales a quienes la naturaleza dotó
de unas espuelas, son acondicionados con otras postizas mucho más destructoras, las
cuales les colocan los manejadores para que hagan mayores estragos en los gallos
adversarios.
Estas formas de crueldad heredadas de nuestro ancestro europeo han tenido entonces el
espacio para desarrollarse a partir de nuestras jóvenes naciones.
Afortunadamente todo evoluciona, y a medida que los pueblos se van haciendo más
conscientes de sí mismos y de las consecuencias de sus actos, cada vez más este tipo de
actividades está siendo puesta en discusión, ya sea en su forma o en su esencia; pues
independientemente de los motivos que la justifiquen (negocio, diversión, deporte,
preservación de la especie, etc.), la tradición que la sustente, o la dedicación o cuidado
que se tenga; es un reflejo del valor que el ser humano le da a la vida, incluso aquella vida
que no tiene ninguna posibilidad de opinar o defenderse por sí misma frente a la
manipulación humana.
Asi van surgiendo variados espacios de reflexión, en muchos ámbitos de la relación de
los animales con un ser humano, capaz de alcanzar su libertad y plenitud sin pasar sobre
la vida de otros, incluso aquellos más débiles: los animales, pues finalmente, el respeto
del hombre hacia los animales es inseparable del respeto y tolerancia de los hombres entre
ellos mismos.
La Sociedad Protectora de Animales ha presentado un proyecto de ley para terminar con
la tolerancia hacia las peleas de gallo.
Las peleas de gallo, y las apuestas en el "deporte", son ilegales en California. Pero los
blandos castigos no disuaden a nadie. Hasta un cierto grado pueden ser corregidos por un
proyecto de ley del senador Nell Soto (demócrata de Pomona).
La medida, ahora en el Comité de Asignaciones del congreso, convertiría la violación
repetida de las leyes que prohíben las peleas de gallo en un delito que merece un castigo
como una falta menor o una falta grave, a discreción del juez. De momento, se lo trata
como un delito menor. Una condena por delito grave implica una sentencia de hasta un
año de cárcel y una multa de 25.000 dólares.
Sería incluso mejor convertir la primera falta en un delito grave, pero los Jueces por la
Justicia Penal de California dijeron que eso acarrearía el peligro de que los empresarios
de las peleas de gallo puedan ser condenados a cadena perpetua en virtud de la ley
californiana sobre la tercera reincidencia. Un análisis del staff del senado sobre el
proyecto de ley dice: "La oposición dice que las peleas de gallo están enraizadas
culturalmente en muchas comunidades de inmigrantes y no se dan cuenta de que es un
delito grave".
Los argumentos de los opositores son débiles. La Sociedad Protectora de Animales, que
presenta el proyecto, tiene razón al argumentar que los organizadores de peleas de gallo
están dispuestos a correr riesgos con las agencias policiales debido en gran parte a la
liviandad de las penas. Ciertamente la voz se difundiría rápidamente si las sentencias
fueran más severas.
A menudo se asocian las pelas de gallo con el tráfico de drogas, las armas ilegales e incuso
homicidios, dice la Sociedad Protectora de Animales, demostrando "los innegables costes
sociales de tolerar esta práctica en California". Para no mencionar el tratamiento
inhumano de los gallos de pelea, que son colocados en un círculo con cuchillas en sus
patas para pelear hasta que uno de ellos muere. Apostar por el resultado es difícilmente
un deporte.
Mi madre hasta hace unos años atrás criaba animales de corral como patos, pollos y pavos,
yo cuando era muy niño me encantaba ayudarle en el cuidado con estos animalitos me
fascinaba verlos como se desenvolvían porque estaban prácticamente libres en un buen
espacio de la casa en la parte de atrás.
Puedo decir sin ninguna duda que mis mascotas preferidas eran los pollos, y en realidad
yo sentía que los amaba, los cuidaba procuraba verlos felices, escarbando la tierra, les
ayudaba a encontrar algunas lombrices o les daba una yuca y todos comían de mi mano.
La decepción venía tiempo después cuando "debían ir a parar a la olla", mi madre en
realidad los prefería vender o regalar para evitar la pena, pues ella fue quien me inculcó
el amor hacia los animales, sin embargo no evitaba o no podía evitar estas muertes.
Ningún gallero me puede venir a decir a mí que los gallos de pelea nacen para pelear
hasta la muerte con su rival, yo he tenido gallos de pelea, he ido a los coliseos de gallos
cuando era niño, mi tío alguna rara vez nos llevó al coliseo de gallos para acompañar a
un primo mío amante de las peleas de gallos, entonces puedo decir sin ninguna duda.
Los gallos de pelea no luchan hasta la muerte, si uno de ellos se siente amenazado y se
ve perdido simplemente huye, ninguno de los 2 gallos sale herido de muerte. En cambio
en los malditos Coliseos los gallos son obligados a pelear hasta morir, y si un gallo intenta
huir simplemente se le obliga a regresar a la lucha, eso lo he visto yo con mis propios
ojos.
En la naturaleza y tal como lo he comprobado yo mismo en mi corral, los gallos no se
causan heridas graves que supongan su muerte, pues allí si existe un perdedor
sobreviviente. En cambio en los malditos coliseos de Gallos al gallo se le amarra una
navaja diseñada para matar al otro gallo no contento los galleros con las espuelas que la
naturaleza les brinda a estos animales.
Los Galleros utilizan a los gallos como simples objetos sobre los cuales apuestan grandes
cantidades de dinero. No tienen ningún aprecio por la vida de los gallos, no les importa
sino aquello que pueden obtener a través de ellos, ya sea dinero, renombre, fama, orgullo,
etc.
Según San Francisco de Asís nos afirma: "Si existen hombres que excluyen a cualquiera
de las criaturas de Dios del amparo de la compasión y la misericordia, existirán hombres
que tratarán a sus hermanos de la misma manera."
Según Mahatma Gandhi en una frase nos dice: “La grandeza de una nación y su progreso
pueden ser juzgados por el modo en el que se trata a sus animales.”
Según Thomas Edison nos afirma: "La no violencia conduce a la ética más alta, lo cual
es la meta de toda evolución. Hasta que dejemos de lastimar otros seres vivos, seguiremos
siendo salvajes"
CONCLUSIÓN:
Los detractores apuntan a diversos motivos para solicitar su prohibición. Según el
responsable de ADENA en Canarias, las peleas de gallos "causan graves problemas a los
animales, y se ha demostrado que sufren y mueren".
Las peleas de gallos son un deporte ilegal, además de cruel e inhumano que no debería
ser practicado o legalizado en ninguna parte del mundo. Los gallos sufren daños severos
y sus amos corren grandes riesgos, además requiere un gran gasto el mantener un gallo
de estos.