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EDUCACION FINANCIERA EN COLOMBIA.

El dinero no es un fin en sí mismo sino un medio que nos permite alcanzar nuestros
objetivos de vida, muchos errores financieros se deben a que las personas no tienen
claro qué es lo que realmente quieren lograr en la vida, ni conocen sus prioridades;
lo que es verdaderamente importante, eso es lo que hace que confundamos las
cosas: deseos, necesidades y prioridades.
Hay personas que necesitan tener algo que en realidad desean. Sucede de manera
muy frecuente con los automóviles, es probable que sí necesitemos tener uno por
varias razones, pero no por ese lujo que queremos comprar y para el cual tendremos
que endeudarnos.
Cuando alcanzamos la edad en la que comenzamos a desarrollar actividades
Profesionales y empezamos a recibir nuestro primer sueldo empezamos a entender
mucho más la valoración de los recursos o bienes que poseemos, buscando
administrarlos de la mejor manera posible buscando generar un ahorro o inversión
que nos permita crecer y alcanzar a tener cada vez más cosas a nuestro nombre,
ganadas con el sudor de nuestra frente.
Es allí cuando comenzamos a adentrarnos en el mundo de las finanzas,
correspondiente a todo lo relativo a los movimientos de dinero, correspondiente no
solo a los estados sino también a las distintas operaciones que se realizan en cuanto
a los negocios y comercios, teniendo para ello la introducción del concepto de
capital, es decir, los recursos con los que se cuenta tanto a modo personal como
por parte de una Compañía.
El entorno financiero parece estar cambiando con rapidez. Los mercados alcistas y
bajistas, las tasas de interés en aumento y descenso, y la gran cantidad de artículos
publicados sobre temas financieros que presentan perspectivas conflictivas pueden
complicar la tarea de crear y seguir un camino financiero hoy en día hay más
opciones financieras. Cientos de opciones de tarjetas de crédito, diferentes tipos de
hipotecas, diferentes tipos de IRA (cuentas de jubilación individuales) y una cantidad
de opciones de inversión en constante crecimiento complican aún más la toma de
decisiones financieras; también existen más opciones de compañías de servicios
financieros, Bancos, cooperativas de crédito, firmas de corretaje, compañías de
seguros, compañías de tarjetas de crédito, compañías hipotecarias, planificadores
financieros, entre otros.
Cada vez con mayor frecuencia, el peso de tomar decisiones financieras sensatas
recae sobre los hombros de los consumidores, por eso hoy en día es importante
tener conocimiento sobre las finanzas.
Pasemos a analizar en Colombia como esta nuestra educación en finanzas.
En Colombia, alrededor del 81% de sus ciudadanos no pueden calcular una tasa de
interés simple, 72% no ahorra nada, el 23% no puede determinar cuánto gastaron
la semana anterior, solo el 20% informa que puede enfrentar gastos inesperados, y
solo el 59% informa que tiene suficiente para cubrir los gastos después de la
jubilación.
Los estudiantes colombianos obtuvieron el peor puntaje en el componente de
alfabetización financiera de la prueba PISA (Pisa, 2012).
Como respuesta, el gobierno nacional está llevando a cabo una acción estratégica
para aumentar la educación financiera y los resultados financieros mediante la
inclusión de programas de educación financiera en los currículos de la mayoría de
las escuelas primarias y secundarias. Además, las instituciones financieras están
obligadas por ley a ofrecer FEP(Financial Education Program) a sus actuales
consumidores potenciales.
El Gobierno nacional considera de gran importancia impulsar una Estrategia
Nacional de Educación Económica y Financiera (ENEEF) orientada a mejorar la
manera como se ofrece la educación económica y financiera a la población del país
en las distintas etapas de la vida.
En las Bases del Plan Nacional de Desarrollo 2010-2014, que hace parte de la Ley
1450 del 2011, se atribuyó al Gobierno nacional la función de crear, con la
participación del sector privado, una Estrategia nacional para brindar EEF de calidad
a la población de todos los estratos socioeconómicos y niveles de acceso y uso de
servicios financieros. En desarrollo de la mencionada norma, el Gobierno expidió el
Decreto 457 del 2014 mediante el cual definió la EEF como: “el proceso a través del
cual los individuos desarrollan los valores, los conocimientos, las competencias y
los comportamientos necesarios para la toma de decisiones financieras
responsables, que requieren la aplicación de conceptos financieros básicos y el
entendimiento de los efectos que los cambios en los principales indicadores
macroeconómicos generan en su nivel de bienestar”.
Existe un consenso nacional e internacional sobre las ventajas de introducir la EEF
desde una edad temprana, preferiblemente de manera transversal (en diferentes
materias como matemáticas y ciencias sociales). Lo anterior contribuye al desarrollo
cognitivo de los estudiantes y a la formación de pensamiento crítico. La EEF también
es fundamental para los jóvenes en la educación básica secundaria, ya que
proporciona las bases para desarrollar el entendimiento de los conceptos
económicos y financieros básicos y su aplicación en temas financieros que los
estudiantes enfrentarán en su vida adulta.
Con este convencimiento, en el área de educación formal se formula las siguientes
líneas de acción específicas:
 generar un modelo pedagógico que promueva la EEF basada en la gestión
del riesgo y en el desarrollo de competencias básicas y ciudadanas.
 Mediciones de capacidades financieras en estudiantes de educación básica
y media: estas mediciones van a permitir identificar la adquisición y
apropiación de los conocimientos relacionados con EEF en la educación
básica y media.
 Materiales pedagógicos para el apoyo en los colegios: esta línea de acción
consiste en contribuir al desarrollo de material pedagógico sobre gestión del
riesgo en educación económica y financiera en la educación básica y media.
Igualmente se busca brindar orientaciones pedagógicas que posibiliten el
abordaje de la educación económica y financiera, a partir de las secuencias
didácticas desde el área de matemáticas, que se encuentren articuladas con
los Derechos Básicos de Aprendizaje y las Orientaciones Pedagógicas del
Ministerio de Educación Nacional, de acuerdo con el nivel educativo de los
estudiantes.
Como podemos ver el gobierno colombiano está encaminado a su población más
joven ya que estos son, serán en poco tiempo, usuarios de servicios financieros; un
rol que pueden asumir con mayor responsabilidad y confianza a través de la
adquisición de estos conocimientos ya que los consumidores financieros deben
hacer frente a un exigente entorno financiero que, desde temprana edad, les
demanda decisiones importantes. Cometer errores en esta etapa de la vida tales
como créditos estudiantiles con condiciones poco favorables o tarjetas de crédito
usadas más para los “antojos” que, para las urgencias, obstaculizan la capacidad
de los jóvenes para emprender proyectos o ahorrar, aplazando así la prosperidad
financiera.
Del mismo modo a las personas adultas con las distintas entidades públicas y
privadas que brindan conocimientos sobre EEF, como por ejemplo el banco BBVA
que, a través de su programa de Educación Financiera, que ya cumple 6 años de
operación en el país, aspira capacitar a más de 400.000 colombianos en el manejo
de sus finanzas. A la iniciativa que ya cuenta con cinco talleres de formación en
temas como ahorro, canales transaccionales y seguridad bancaria, salud crediticia,
manejo del crédito, crédito hipotecario, se sumarán temas como fondos de inversión
y seguros, además de la posibilidad de acceder a la formación vía online.
Es muy importante la educación económica y financiera en un país debido a que
tienen un efecto significativo en su crecimiento económico; Una mayor inclusión
financiera definida como “el acceso y uso de servicios financieros de calidad por
parte de todos los segmentos de la población” es crucial.
A nivel macro, existe evidencia que sugiere que un mayor grado de inclusión
financiera puede jugar un rol importante en la reducción de la pobreza, la
disminución de la desigualdad y en la formación de un crecimiento económico
inclusivo.
De tal manera que Colombia va en camino de una sociedad que tenga
conocimientos financieros adecuados para su vida y se espera que se mejore cada
día más, para así tener un país próspero y que sus ciudadanos tenga la capacidad
de responder con sus obligaciones financieras y no estar endeudados y así tener
un crecimiento económico para nuestro país.

Alejandro Andrés Petro Espinosa.


Universidad de Córdoba.
Gestión Financiera

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