Cultivo de Hortalizas

Las hortalizas son de gran importancia para la alimentación y son cultivadas con fines de
autoconsumo o comercialización en mercados internos y externos para obtener ingresos.

Las hortalizas se clasifican según su parte comestible, como se muestra en la Tabla #.

CLASIFICACIÓN Tipo de Hortaliza

Raíz comestible Nabo, zanahoria, rábano, betabel, jicama,
perejil, camote, etc.

Hoja comestible Apio, perejil, acelga, espinaca, repollo, lechuga,

hojas de cebolla, mostaza, berro, hoja de
amaranto, col de brucelas, etc.

Tallos y bulbos comestibles Cebolla, ajo, papa, colinabo, espárrago, cebolla

de bola, etc.
Flor Coliflor, brócoli, alcachofa
Frutos comestibles chile, chícharo, frijol lima, berenjena, frijol
ejotero, pepino, haba, chayote, jitomate, fresa,
tomate, sandía, zapallo, pimientón, etc.

Las temperaturas promedio de cada hortaliza se dividen en dos grupos: estación fría y estación
cálida. A continuación se muestran los rangos de cada grupo.

Grupo Rango de Temperatura Tipo de hortaliza

Cultivos de Estación Cálida

Para poder hacer un cultivo de alguna hortaliza, se deben conocer las temperaturas en las que
tiene que estar cada cultivo. A continuación se muestran los rangos de temperatura de las
hortalizas en los que se deben cultivar, divididos en 2 grupos, estación fría y estación cálida.
Riego de Hortalizas

Para lograr que las hortalizas crezcan de manera óptima, es necesario conocer cada cuando

se deben de regar y algunos aspectos que influyen en el cultivo. A continuación se muestran

algunos aspectos generales del riego del perejil, hierbabuena, zanahoria, espinaca y rábano.

Perejil

Este tipo de hortaliza crece mejor con climas templados o cálidos, ero es resistente al frío.

Pueden marchitarse en invierno y rebrotar en primavera. Se recomienda plantarla en tierra

que sea rica en materia orgánica.

Aunque es un cultivo muy rústico, agradece los suelos con cierto contenido en humedad. Es

por eso por lo que no solo se tiene que regar en abundancia, sin llegar a inundar la tierra en

ningún momento, sino que también se deben de humedecer las hojas de la planta si hace

mucho calor. Los riegos suelen realizarse a manta o por aspersión. En zonas cálidas se

deberán dar éstos cada ocho o diez días en invierno y cada dos o tres en verano.

Hierbabuena

Es una planta que requiere un sustrato húmedo así que el riego debe ser moderado y alto en

verano (de dos a tres veces por semana) para que la plata no sufra de estrés hídrico. El riego

irá un poco en función también de la exposición a la luz que decidamos para la hierbabuena.

Las temperaturas de desarrollo óptimo varia de 14 a 27 grados centígrados, la tolerancia a

diferentes temperaturas es muy alta.

Conviene que las parcelas estén bien niveladas, para lo que se prepararán en tablares de 2 m

de ancho. Se dará un riego inmediatamente después de la plantación; posteriormente, durante

la época de calor, se suele dar un riego cada cuatro días con poca agua. No debe faltar

tampoco un riego inmediatamente después de la corta de cada parcela.

Espinaca

La espinaca es una planta que prefiere estar en tierra húmeda pero hay que evitar el

encharcamiento del suelo pues ello pudre las raíces. El riego es importante a la hora de

cultivar espinaca, lo ideal es regar las espinacas cada vez que se esté por secar la tierra (cada

tercer día).

El riego por aspersión es el más conveniente y extendido, recomendándose los riegos cortos

y frecuentes, especialmente en las últimas fases del cultivo.

Zanahoria

La tierra donde estén creciendo tiene que estar siempre húmeda. Si se riega hay que

observar que el agua vaya muy profunda esto le hará muy bien a las zanahorias ya que un

riego superficial no sirve de mucho en esta planta comestible. El riego recomendado es de

dos o tres veces a la semana.

Menta.

La menta como se muestra en la imagen es una de las plantas aromáticas más comunes,

Se caracteriza por ser una planta herbácea de tallo alargado la cual tiene tendencia a crecer

mucho de forma lateral La menta necesita un riego regular y abundante, sobre todo en las

épocas de crecimiento de primavera y verano. Esto evitará una floración prematura de la

planta y que se reduzca la calidad del aroma de sus hojas. A la hora de regarla es

recomendable utilizar un fertilizante que le proporcione los nutrientes necesarios.